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RESUMEN INTRODUCCIÓN

De acuerdo a una investigación realizada por Lazcano y Alpuche en el 2020, el virus del
COVID-19 ha constituido, a nivel mundial, un desafío para los sistemas de salud debido
a que deben enfrentar a un agente totalmente desconocido y nuevo que presenta una alta
tasa de contagio y un comportamiento clínico desconcertante, lo que obstaculiza la
elaboración de políticas sanitarias que permitan un acceso equitativo a la atención
médica y una asignación racional de los recursos disponibles.
Pero no es lo mismo hablar de un acceso equitativo a nivel de pacientes que hablar de
un acceso equitativo a nivel de investigadores, hacemos esta aclaración debido a que
nuestro tema está basado en el papel ético del investigador en la búsqueda del
tratamiento del Covid-19.
Tenemos por un lado, que muchos de estos dilemas éticos o morales surgen en el
manejo de estos pacientes: desde la decisión de a quién se debe tomar pruebas de
descarte, la aplicación de tratamientos experimentales o la elección de qué paciente
puede acceder a tratamiento especializado según un estudio de Kim y Grady en el
2020).
Por otro lado, en este contexto, se vuelve un imperativo ético la generación de
conocimientos. Hay muchos retos: el tiempo necesario para la generación de evidencias,
el financiamiento para investigaciones clínicas que busquen alternativas terapéuticas, la
disponibilidad del personal sanitario, quienes también se encuentran en un dilema al
decidir si participar o no de un estudio y, finalmente, el cumplimiento de las
consideraciones éticas en este especial entorno, buscando el balance entre la necesidad
de información y el respeto a los derechos de los pacientes afectados y sus familia.
De acuerdo a Logie y Turan (2020), se requiere una mayor protección de la
confidencialidad y privacidad de los datos personales debido al estigma social que se ha
originado por el diagnóstico de COVID-19.
¿Qué se busca? Lo que se requiere al fin y al cabo es la elaboración de políticas
sanitarias eficaces en la población. En estas condiciones, cobran mucha importancia las
investigaciones operativas que usan la información proveniente de bases de datos
nacionales, mayormente obtenidas al momento de realizar pruebas diagnósticas, las que
pueden ser solicitadas en el marco de leyes de transparencia.
Los esfuerzos aún son escasos ante la ausencia del marco legal necesario para la
conformación de una comisión nacional de bioética, que pueda brindar
recomendaciones y directivas en circunstancias como esta, lo que permitiría proteger los
derechos de los participantes en investigación y fortalecer las medidas de prevención y
promoción de la salud pública.

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DEFINICIONES

Ética: Según Vílchez (2012) la ética es una disciplina filosófica que constituye una
reflexión sobre los problemas morales, surgiendo de la interacción social que busca
establecer principios básicos de convivencia, que se expresan en valores y principios. 

Emergencia sanitaria: El MINSA (2014) lo define como el estado caracterizado por la


alteración o interrupción intensa y grave de las condiciones normales de
funcionamiento de una comunidad, y es causada por un evento, que requiere de una
reacción inmediata y que exige la atención y preocupación de las instituciones del
Estado, los medios de comunicación y de la comunidad en general. Como por ejemplo
lo que vivimos en marzo del año pasado personalmente fue la primera “emergencia
sanitaria” por la que viví, interrumpiendo mi vida cotidiana debido a la gravedad de la
situación generada por esta nueva enfermedad Covid-19

Covid-19: Hace mención a “Corona Virus Disease”  Es de la familia de los viejos virus
coronavirus, dos de cuyas cepas antiguas causan la gripe común, pero que habiendo
mutado una de estas se le denominó SARS-CoV-2.

Tratamiento: Según la Real Academia Española de la Lengua (RAE, 2014) conjunto


de medios que se emplean para curar o aliviar una enfermedad. En palabras simples,
el tratamiento viene a ser todos aquellos medios que tienen por objetivo el alivio de
síntomas y enfermedades. La búsqueda del  tratamiento del Covid-19, ha variado y
varía mucho desde sus inicios, mediante las investigaciones realizadas.

Investigador: García, Flores y Hernández (2008) refieren que un investigador es


aquel que estudia exhaustivamente un objeto y sobre todo ha encontrado el gran
placer que en tal labor se obtiene. Se sabe que por la coyuntura actual los
investigadores se están orientando por asociar diversas variables con el Covid-19.

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ÉTICA EN LAS INVESTIGACIONES

Actualmente vivimos en épocas de pandemia, donde existe una gran necesidad por
investigar el covid-19 y sus repercusiones, se espera que al investigar prevalezcan
valores como la dignidad, justicia, solidaridad, responsabilidad frente a incapacidades
e individualismos (Barreiro, 2020).  
El año pasado en Argentina se realizó un estudio por (Bianchin, Rivera, Luna, Alegre,
Pérez, Mastroleo) en donde se menciona que el coronavirus no tiene problemas éticos
debido a que es una problemática social, donde nos involucra a todos, sin embargo se
presenta un problema ético en el uso de tratamientos experimentales, se sabe que
toda investigación  va a requerir estándares éticos rigurosos para proteger a las
personas y mantener la confianza en el sistema de investigación científica el objetivo
aquí sería la obtención de los resultados cumpliendo las normas éticas y para ello se
debe al mismo tiempo atender la salud de la población y realizar investigaciones.
Cabe resaltar que para realizar investigaciones se debe tener en cuenta criterios
establecidos como  los comités de ética en investigación (CIEI) que se convierten en el
elemento regulador que asegura la calidad y la transparencia. La UNESCO (2020)
ante las investigaciones biomédicas por la pandemia Covid-19 reconoce que los
investigadores  tienen el deber ético de hacer investigación con el fin de mejorar la
prevención y la atención sanitaria y deben estar lo más rigurosas posibles tanto en su
diseño como metodología con valor social y científico evidente para garantizar un
nuevo conocimiento,  una investigación puede resultar compleja durante una situación
de pandemia se deberá cumplir  los principios de justicia, equidad y
solidaridad. Por otro lado se debe tomar las prevenciones para garantizar y asegurar el
acceso a los beneficios brindados por la investigación, no solo a la comunidad
participante sino, en particular, a las comunidades y países más vulnerables.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) igualmente ha publicado protocolos


operativos para la revisión y supervisión ética de las investigaciones concernientes al
COVID-19. En nuestro país, el Decreto Supremo N° 014-2020 SA estipula que todas
las investigaciones de la enfermedad de COVID-19 realizadas por instituciones o
personas naturales, a excepción de ensayos clínicos, deben registrarse en la
plataforma PRISA como una plataforma de difusión.

LEER LAS RECOMENDACIONES QUE ESTÁN EN LAS PPTS

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