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Cuarto trabajo de Ética y Filosofía Política

Ética de la empresa

Integrantes:
Casas Armas, Ricardo Nicolas
Arango Leon, Elian Francisco
Felix Tovar, Freddy Anderson
López Paredes, Rafael
De la Torre Yrrazabal, Juan Pablo Vicente
Changano Zenteno, Gianpierre Jesús

Especialidad: Ing. Mecánica

Profesor: Elvis Fernando Tacillo Yauli

2021 - II
Introducción

El presente informe tratará de definir la ética, basándose en el libro “Ética de la empresa”,

escrita por Adela Cortina.

Antecedente

En la Antigua Grecia, la ética era un saber que orientaba las acciones de los hombres,

racionalmente. De esta forma, se planteaba ordenar la vida, de una forma inteligente, para llegar

a las metas propuestas. En otras palabras, la ética es un saber que quiere enseñarnos a obrar bien.

Pero obrar bien y racionalmente son expresiones complejas, porque a lo largo del tiempo

tomaron distintos significados. Por lo que es necesario explicar el saber ético.

Análisis

De acuerdo con el libro “Ética de la empresa”, hay dos modos de orientar racionalmente a

la acción: tomar decisiones prudentes y tomar decisiones moralmente justas.

1. Tomar decisiones prudentes:

Según la ética, obrar racionalmente es saber elegir las decisiones correctas a lo largo de la

vida, lo que significa tener un buen carácter. Por eso, es necesario entender que es el buen

carácter y como se logra. Adoptar buenos hábitos es fundamental para forjar un buen

carácter. Las organizaciones y empresas no aspiran a alcanzar la felicidad, como las

personas. Ellas aspiran a producir bienes para la sociedad. Una empresa no debe

intervenir en las decisiones de la sociedad. El carácter de una empresa debe ser una que

respete los derechos humanos y produzca bienes que satisfagan la sociedad.

2. Tomar decisiones moralmente justas:


Las personas y organizaciones no solo deben tomar decisiones prudentes, sino también

justas. Guiarse de la ley o por la conciencia de una sociedad no siempre es justo, es por

eso por lo que debemos usar la moral critica para guiarnos los valores y derechos más

respetados.

La moral no es un invento, más bien, es un saber que estuvo desde el origen de la vida,

pero ha sido modificado a lo largo del tiempo. La ética es la que debe aclarar los rasgos y

fundamentar a la moral.

Los hombres, a diferencia de los animales, justifican sus elecciones. Los hombres

tendemos a la felicidad, por lo que la moral trata los medios para alcanzarla. Para alcanzar la

felicidad es también necesario tomar en cuenta la dignidad, ya que los hombres somos seres

autónomos, ya que podemos regirnos por nuestras propias leyes.

Después de fundamentar la moral, hay que ser capaces de aplicarlo. Es aquí donde

debemos averiguar cómo tomar las decisiones, por lo que la ética aplicada es la mejor opción

para ayudarnos.

Conclusión

Al distinguir la ética y la moral, se puede llegar a que la ética es la que define y

fundamenta a la moral. Debemos usar la ética aplicada para guiarnos al tomar decisiones. Una

ética aplicada a las organizaciones debe de tomar en cuenta la moral cívica, ya que no debe

intervenir en las decisiones de la sociedad.

Por lo tanto, la ética de la empresa es una parte de la ética aplicada, y a la vez, una parte

de la ética cívica.

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