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EL CAMINO EVOLUTIVO EL FIN DEL ESLABON PERDIDO

JHONATHAN ANDRES SANCHES SOTELO


05/10/2021

PROFESOR:
LEONARDO IVAN QUINTANA URREA

FACULTAD CIENCIAS DE LA SALUD


PROGRAMA: ENFERMERIA
Semestre 2 Año 2021
El Camino Evolutivo El Fin del Eslabón perdido

El bipedismo es el primer rasgo definitorio de nuestro árbol genealógico

Las proteínas de la carne son combustibles para la mente permite que el


cerebro evolucione y crezca, un cerebro grande una de las características que
define los humanos y la fabricación de herramientas es una de las fuerzas de
impulsión para el desarrollo del cerebro, Se había supuesto durante mucho
tiempo que, al ir retrocediendo en el tiempo en la cadena evolutiva de los
humanos, nuestros ancestros se irían pareciendo cada vez más a nuestros
parientes vivos más cercanos, los chimpancés. El Ardipithecus ramidus fue
encontrado en Etiopía en sedimentos de 4.4 millones de años de antigüedad,
Ardí tenía un millón de años más que el famoso esqueleto de Lucy. Ar.
ramidus no se parecía a Lucy, pero tampoco se parecía a un chimpancé.
Poseía, más bien, una extraña combinación de rasgos muy primitivos que sólo
se habían visto en simios extintos del Mioceno y otros que sólo se han visto en
nuestro propio linaje homínido.

Considérese el pie de Ardí. Todos los homínidos posteriores, incluida Lucy,


tienen un dedo gordo que se alinea con los otros dedos del pie, lo cual le
proporciona la fuerza de propulsión necesaria para caminar erguida, marca
distintiva de nuestro linaje. El dedo gordo de Ardi, sin embargo, se abría hacia
el lado, como el de los simios, para poder sostenerse de las ramas al trepar
árboles. Pero el pie de Ardi también tenía un pequeño hueso llamado os
peroneum, que se ha mantenido en el linaje homínido desde los simios
antiguos y monos pero que rara vez está presente en chimpancés y gorilas, el
cual mantiene la parte inferior del pie más rígida. Se cree que esta rigidez le
permitía al A. ramidus caminar erguido utilizando sus cuatro dedos alineados
para lograr la palanca necesaria que impulsa el andar de los bípedos.

La pelvis de Ardi también muestra un primate primitivo a medio camino de


convertirse en humano. La pelvis humana ha pasado por modificaciones
importantes para adaptarse a la caminata erguida, acto de malabarismo
locomotor que requiere que una extremidad o la otra esté suspendida en el aire
mientras la impulsa el cuerpo hacia adelante. “La morfología de los
homínidos, a menudo, se ha presumido como evolucionada de un ancestro
morfológico semejante a los simios africanos actuales. Ar. ramidus establece
ahora que este no fue el caso. El pie de los homínidos, más bien, fue derivado
de uno sustancialmente menos especializado. La trayectoria evolutiva del Ar.
ramidus indica que siguió un proceso diferente a los actuales simios africanos
desde el comienzo en el cual los clados se separaron. “Ar. ramidus estaba bien
adaptado a la bipedialidad, pero retuvo capacidades arbóreas.

¿Por qué, un animal adaptado completamente al movimiento cuadrúpedo en


los árboles elegiría caminar sobre dos patas en el suelo?

El sexo. Observamos que el origen del bipedalismo como la consecuencia de


un cambio de época en el comportamiento social. Una parte clave de su teoría
está no en algo que se ganó en nuestro linaje, sino en algo que se perdió: los
colmillos como dagas de los simios machos, esas armas tan efectivas contra
otros del mismo género que buscaban oportunidades de apareamiento. Los
machos de casi todos los demás simios vivos y extintos tienen caninos grandes
y puntiagudos que afilan al tallarlos con los dientes inferiores. En lugar de
ganar acceso a las hembras mediante el conflicto con otros machos, el A.
ramidus proporcionaba a la hembra elegida y a sus crías alimentos de alto
contenido de grasa y proteína, lo cual le garantizaba su lealtad sexual, una
estrategia reproductiva que aseguraba que los hijos que se gestaban eran de él.
Esto requeriría, sin embargo, que las manos del macho estuvieran libres de su
función en la locomoción cuadrúpeda para que pudieran transportar el
alimento a casa. La caminata bípeda quizá no era eficiente para trasladarse,
pero por medio de su contribución al contrato de "sexo por comida" sería una
forma excelente de garantizar más descendencia. Y en la evolución, queda
claro, la clave está en una mayor descendencia.

La Selección Natural: La selección natural es la base de todo el cambio


evolutivo. Es el proceso a través del cual, los organismos mejor adaptados
desplazan a los menos adaptados mediante la acumulación lenta de cambios
genéticos favorables en la población a lo largo de las generaciones. Cuando la
selección natural funciona sobre un número extremadamente grande de
generaciones, puede dar lugar a la formación de la nueva especie. El carácter
sobre el que actúa la selección natural es la eficacia biológica que se mide
como la contribución de un individuo a la siguiente generación de la
población. La eficacia biológica es un carácter cuantitativo que engloba a
muchos otros relacionados con: la supervivencia del más apto y la
reproducción diferencial de los distintos genotipos o alelos. Los individuos
más aptos tienen mayor probabilidad de sobrevivir hasta la edad reproductora
y, por tanto, de dejar descendientes a las siguientes generaciones; la
reproducción diferencial puede deberse a diferentes tasas de fertilidad o
fecundidad o a la selección sexual.
Selección Sexual: explica las ventajas que poseen unos individuos sobre otros
del mismo sexo y especie desde un enfoque propiamente reproductivo y que, a
diferencia de la selección natural, se establecen ya sea por competencia directa
entre los rivales o por ser características que son de elección para el sexo
opuesto. Por tal motivo la selección sexual está dada de acuerdo a las
características físicas observables en los individuos, básicamente los
caracteres sexuales secundarios donde el más apto es el que logra llevarse a
las hembras ya que les brinda seguridad, alimento y protección lo cual esto le
garantiza aparearse prolongando su descendencia. Posteriormente en esta
teoría establece que la inversión parental es un factor determinante en la
selección sexual y que cada sexo optará por una estrategia distinta de
reproducción en concordancia con el costo que ésta les genera.

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