Edward Newgate

Edward Newgate ( エ ドワ ード ・二 ュー ゲー ト Edowādo Nyūgēto?), más conocido como

Barbablanca ( 白ひげ Shirohige?), fue el capitán de los Piratas de Barbablanca y el histórico
rival de Gol D. Roger.[3][11] Tras la muerte de este, fue conocido como el Hombre más
cercano al One Piece (ワンピースに最も近い男 Wan Pīsu ni mottomo chikai otoko?), además
de ser reconocido como el Hombre más fuerte del Mundo ( 世 界 最 強 の 男 Sekai saikyō no
otoko?).

En el pasado, antes de formar su propia tripulación, fue miembro de los legendarios Piratas de
Rocks y más tarde en la vida se convirtió en uno de los Cuatro Emperadores que gobiernan el
Nuevo Mundo,[2] hasta su muerte en la Batalla de Marineford hace dos años.

Apariencia

Barbablanca tenía un tamaño anormalmente grande para un ser humano, alrededor de cinco
veces el tamaño de un adulto normal; y a pesar de llevar sobre los hombros una pesada
chaqueta de capitán blanca con el símbolo (jolly roger) de su tripulación, su torso sigue
estando lleno de cicatrices está al descubierto.

También tiene la cabeza cubierta por un pañuelo, hace apenas 20 años todavía lucía una
copiosa melena rubia (que quizá se fuera desluciendo hasta desaparecer del todo debido a los
efectos de la edad y agravado por su delicado estado de salud) cubierta por un típico tricornio
pirata con el mismo símbolo que porta su capa. Por aquel entonces su pecho parecía tener
menos cicatrices.

El rasgo que más destacaba de su apariencia era el gran bigote blanco con forma de media
luna, directamente responsable del epíteto Barbablanca.

En la Guerra de Marineford fue uno de los instigadores principales, posicionándose

directamente en contra del Gobierno Mundial y liderando el bando pirata. En dicha batalla, el
entonces almirante Akainu le vaporiza una porción del rostro de un sólo golpe magmático,
perdiendo además su ojo izquierdo y el extremo izquierdo de su bigote. Fue finalmente
asesinado por un último ataque en grupo perpetrado por todos los Piratas de Barbanegra
(salvo el capitán y Wolf) después de que éste se lo ordenara momentos después de irrumpir en
el escenario de la batalla presentándose como el precursor de la Nueva Era. Murió de pie, un
testimonio de su fuerza de voluntad.

Si bien no en la batalla, en sus otras apariciones más recientes Barbablanca permanecía unido
a numerosos tubos y catéteres conectados a máquinas y equipos médicos que contribuían a su
tratamiento, debido a los múltiples problemas de salud que acarreaba a consecuencia de los
duros enfrentamientos que había protagonizado con el paso del tiempo y a su avanzada edad.
En su barco también solía estar acompañado de una pareja de enfermeras que supervisaban su
estado de salud; aunque no parecía ser un buen paciente, pues su orgullo le empujaba a
revelarse contra la necesidad de ser perpetuamente atendido y cuidado, negándose a ofrecer
cualquier imagen de debilidad.