Cuando las organizaciones sufren con las tendencias al alza en la accidentabilidad,
normalmente tratan de buscar explicaciones para el deterioro del resultado. La respuesta normalmente no es tan simple y tampoco exclusiva, sino más bien se debe a una serie de factores o multiplicidad de causas. Lo importante es un análisis desagregado del problema para ir buscando en donde se encuentran el gran porcentaje que está incidiendo más fuerte en el resultado global. Algunas causas del deterioro de la gestión de seguridad clásicas son las siguientes: - Pérdida de foco: Problemas en la organización que están afectando el desempeño en seguridad y que ocupan las energías y los esfuerzos de ejecutivos, supervisores y trabajadores. - Falta de planificación o incumplimiento de ésta: Algunas presiones propias de la organización como el alcanzar resultados de producción, costos, etc., llevan a cambios frecuentes dentro de la planificación, dificultando un trabajo organizado y agregando una cuota de estrés importante a los actores. - Caída del liderazgo: La seguridad requiere un permanente liderazgo, y cuando éste se debilita, el desempeño cae. Signos de debilitamiento del liderazgo son la falta de monitoreo a los procesos de seguridad instaurados, falta de visibilidad para comunicar expectativas a los trabajadores, postergación de las actividades de seguridad, inconsistencia entre lo comunicación y realizado. - Cambios sin integrar la seguridad: Cuando la seguridad va atrás de los cambios y no es integrada dentro del cambio, se produce un deterioro importante en la organización. Los cambios pueden afectar a personas dentro de la organización, procesos, instalaciones, equipamiento, etc. Cuando se introducen los cambios sin una planificación que considera la seguridad, se produce normalmente el efecto “apagar incendios” que es posterior a la implementación del cambio. (similar a la falta de planificación) - Comunicaciones: La falta de comunicaciones o deterioro de las comunicaciones en los grupos de trabajo lleva normalmente a un deterioro importante del desempeño en seguridad, Los trabajadores requieren un input permanente en seguridad, comunicación franca y abierta para enfrentar los problemas diarios. La ausencia de comunicaciones para hablar de seguridad es el primer síntoma de debilitamiento. Las comunicaciones frontales, cara a cara, son una buena herramienta para indagar en la ocurrencia de conductas inseguras o subestándares. - Falta de seguimiento a los procesos: Cuando se deja de realizar seguimiento a los procesos de seguridad perdimos el foco sobre el rendimiento o efectividad de ellos. Permanente monitoreo de la “producción” en seguridad es clave para ir manejando y ajustando el sistema.