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EL FEMINICIDIO COMO PROBLEMA SOCIAL

El feminicidio es un acto inhumano producto de un continuo de violencias y una


manifestación del ejercicio del poder patriarcal sobre la vida, la libertad y la
autonomía de las mujeres que tiene como consumación la muerte todo esto con el fin
de ajusticiar aquellas que se han salido de los roles establecidos en la sociedad
dados en las relaciones como lo son; el noviazgo, el matrimonio, las exparejas o
aquellas dadas después de algún acto sexual como la violación.
El feminicidio ha sido una forma de poner control y poder, a las mujeres que se han
salido de lo supuestamente correcto, de los paradigmas, o los modelos a seguir; por
ejemplo; aquellas mujeres asesinadas por que no son vírgenes, las que deciden
divorciarse o las que comienzan una relación con otra persona incluso aquellas que
deciden denunciar actos de violencia.
Es importante el resaltar la diferencia entre femicidio y feminicidio ya que el primer
término implica el homicidio de una mujer y el segundo implica el mismo crimen con
una connotación de odio. Lo que lleva a un gran planteamiento que es el hecho de
introducir a la población LGBT en el caso específico de la población transexual y
transgénero, que sean hombres con identidad de género femenina, obstante a esto
aún no se ha dado una concreta jurisprudencia al respecto.
Existen grandes cifras en nuestro país de las mujeres muertas a causa del
feminicidio, según la agencia de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el
Empoderamiento de las Mujeres en México (2018) “el promedio de nuestro país se
encuentra en 7 mujeres cada 24 horas y la forma que mueren cada vez es más
agresiva”. Aseguró también que en México existe una gran falta de investigación
efectiva por un contexto de impunidad teniendo una gran falta de respeto a las
víctimas y a sus familias que cargan con este dolor.
Es indigno saber que los feminicidas después de asesinar de manera cruel e
inhumana no son castigados con la severidad de la ley además que en muchos
casos se les da la razón en la sociedad al desprestigiar a las mujeres por sus faltas o
por su situación sexuada, a pesar de existir muchos programas que prevean,
atiendan, y busquen su sanción a este delito considero no se erradicara si se sigue
con la misma ideología arcaica y no se le da el valor a la mujer de igualdad ante el
hombre.
Pero me surge una gran interrogante ¿Qué tal culpable es la mujer de esto? Creo
que no se puede generalizar los casos, pero es indispensable tocar el punto en el
cual la mujer se define como el sexo débil y genera un pensamiento de sumisión, es
decir mujeres machistas, ya que tienen grabado en el inconsciente el pensamiento
de la superioridad en el varón permitiendo humillaciones y golpes, además de seguir
inculcando esto a sus hijos: al varón enseñándole a trabajar y la mujer al cuidado de
la casa, siendo puntos de partida para una ideología machista, es indispensable que
la mujer al identificar signos de violencia doméstica, psicológica, física, sexual
etcétera ponga altos o denuncie.
La Organización Mundial de la Salud (2002) declara que “la violencia es un problema
de salud pública pues genera graves daños psíquicos, físicos, privaciones y
deficiencias en el desarrollo de las personas y es inconcebible saber que como
sociedad 7 de cada 10 mujeres han sido víctimas de violencia” todo esto siendo una
fuerte forma de discriminación y violación a los derechos humanos, teniendo al
feminicidio como resultado de la suma de todas las violencias, es decir, el resultado
de la violencia es el feminicidio.
Hace tiempo me cansé de la impunidad feminicida de la complicidad omisiva. Hace
tiempo me cansé de contar cada día una muerta más y así matar cada día mi
esperanza. Hace tiempo me cansé (Agatón Isabel 2015). Son las palabras de una
abogada donde muestra una sociedad donde las mujeres están aterrorizadas, donde
un día normal todos sus anhelos, sueños, ilusiones, metas y logros finalicen al cerrar
los ojos por un acto de inhumanidad.
Nuestra generación, es la generación del cambio, de la concienciación que delimitara
las futuras generaciones es importante una transición de una ideología, donde se
levante la consigna “Ni Una Menos” dejar de pensar que se trata de un problema
individual sabiendo que es un problema social que todo debemos asumir e
implementar medidas al respecto.

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