Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Historia
Artículo principal: Historia de Asia Central
Plaza del Registán de Samarcanda.
La historia de Asia Central ha estado condicionada principalmente por el clima
y la geografía de la zona. La aridez de la región dificulta la práctica de la
agricultura y su distancia al mar la aísla en gran medida del comercio. En
consecuencia solo se han formado unas pocas ciudades de gran tamaño, y el
área estuvo dominada durante milenios por los pueblos nómadas de la estepa.
Las relaciones entre los nómadas de la estepa y la población sedentaria de
Asia Central fueron durante mucho tiempo conflictivas. El estilo de vida nómada
se adaptaba muy bien a la práctica de la guerra y los jinetes de la estepa
fueron uno de los pueblos del mundo con mayor potencial militar, aunque
estaban limitados por la falta de unidad interna. En las ocasiones en las que
muchas tribus quedaron bajo el mando de grandes líderes crearon ejércitos
casi imparables, como en la invasión de Europa emprendida por los hunos, los
ataques Wu Hu a China y sobre todo la conquista de buena parte de Eurasia
por los mongoles.
El dominio de los nómadas terminó en el siglo XVI, cuando las armas de fuego
permitieron a los pueblos sedentarios controlar la región. Desde entonces
Rusia, China y otras potencias se expandieron por la región y llegaron a tomar
control de la mayor parte de Asia Central a finales del siglo XIX. Tras la
Revolución rusa, la mayoría de regiones de Asia Central fueron incorporadas a
la Unión Soviética (URSS); solo Mongolia permaneció independiente, aunque
en la práctica era un estado satélite. Las zonas soviéticas de Asia Central se
industrializaron y se construyó mucha infraestructura pero al mismo tiempo se
suprimieron las culturas locales, y se produjeron cientos de miles de muertes
en programas de colectivización fallidos.[cita requerida]
Tras el colapso de la URSS, cinco países de Asia Central obtuvieron la
independencia. En estos nuevos estados buena parte del poder está en manos
de antiguos oficiales soviéticos. Ninguna de estas repúblicas, exceptuando
Kirguistán, puede considerarse una democracia. El resto de regiones de Asia
Central forman parte de la República Popular China.