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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación

U. E. Colegio “El Carmelo”

Castellano

4to año “A”

Fabiana González nro. 9

La Cultura Popular
Venezolana
Rómulo Gallegos: ¿nacionalista?
Según el concepto trabajado de nacionalismo, se puede decir que Rómulo Gallegos sí era
un nacionalista. Esto se debe al gran amor con el que narra las características de su país
(Venezuela), observándose esto en el fragmento de “Canaima” una novela de ficción
histórica publicada por Gallegos en 1935. Si se observa el argumento de la novela, se puede
notar como esta en sí es una amarga queja contra el caudillismo, y se puede pensar que este
tópico no se relaciona directamente con el nacionalismo porque ¿qué tiene que ver este
fenómeno político-social con el amor y estima que se tiene hacia nuestro país? Lo que
ocurre, es que el nacionalismo de Gallegos no se deja ver en la novela a través del
argumento, sino de otros dos puntos importantes: la narración y la intención de la novela.
En cuanto a la narración se refiere, se puede notar la devoción, el detalle y el cariño con el
que se narra cada espacio, casi como si se narrase con la intención de impresionar, de hacer
sentir al lector la inmensidad y grandeza de su tierra. Finalmente, cuando hablamos de “La
intención”, nos referimos al hecho de que la crítica al caudillismo no fue realizada sin
motivo, sino con la intención de despertar la opinión en la población, de modo que se
buscara una mejoría en el país y por consecuente de sus ciudadanos. Esto debido a que el
amor no solo se profesa, sino que se actúa en busca del bienestar y felicidad de eso que se
ama, hablando del nacionalismo, el bienestar y felicidad del país.

Análisis crítico del nacionalismo del pueblo venezolano


“Venezuela es un país con una cultura extremadamente rica y variada”, esta es una
afirmación que como venezolanos hemos escuchado repetir y repetir desde que tenemos
memoria, quizás se nos ha repetido tanto que ni siquiera nos hemos tomado la molestia de
verificar esta información. También se nos ha dicho que nuestra cultura proviene de una
mezcla de las costumbres coloniales de muchos otros países, como todo país
latinoamericano, pero ¿realmente conocemos nuestras influencias culturales? Tras
internalizar lo resaltado anteriormente, podemos notar que no sabemos tanto sobre nuestro
país como pensamos. Sobre todo como la generación más joven, tampoco es un tema que
suela frecuentar en conversaciones entre adolescentes y niños, pero no tenemos tanto
conocimiento de la cultura popular como lo pudieron haber tenido generaciones anteriores a
nuestra edad. Siendo un conocimiento de la cultura uno de los factores que influyen en el
nacionalismo, se podría inferir que la generación joven actual (Generación Z o genZ) no es
tan nacionalista como lo puede ser una generación anterior, sin embargo, este no es el único
factor que influye en la falta de nacionalismo de la genZ, ni tampoco la única que no
conserva un amor profundo por su país. A continuación se ahondará en lo que se cree que
es el factor principal que afecta al nacionalismo de cada generación, ya que esta es la
manera más sencilla de dividir a la población por las experiencias y contexto histórico en el
que se desarrolla.
Empezando por la generación vigente más antigua, que sería la generación boomer, que
comprende a personas entre 74 y 56 años de edad, también conforman alrededor de un 22%
de la población total. Esta generación se ve muy influenciada por las olas de inmigrantes
presentadas en el siglo XX, tanto la que se dio por el auge petrolero, como la ola de
inmigrantes de la segunda guerra mundial. Esto nos lleva a pensar, que son una generación
que aunque sean venezolanos de nacimiento, se han visto directamente influenciados por
culturas del resto de América, Europa, Medio Oriente y países del Este Asiático, incluso
criados con base en esa cultura. Para ilustrar mejor su situación, la mayoría de esta
generación fue criada en territorio venezolano, probablemente se encontraron, por ejemplo,
criados en la Colonia Tovar, lugar donde se asentaron sus ancestros alrededor del siglo
XVI. O quizás criados en Caracas, pero con una madre y/o padre italianos, que tuvieron que
emigrar de su país debido a la segunda guerra mundial, y, como se niegan a dejar atrás sus
raíces, crían a sus hijos informados de una cultura italiana. Lo que se quiere decir con esto
es que una considerable parte de la generación boomer es descendiente directo de
inmigrantes, lo que hace que no se siente un cien por ciento conectado con Venezuela,
debido a que además fue criado con un amor profundo hacia otro país.

Continuando con la generación siguiente, la generación X, que actualmente debe tener


entre 55 y 41 años, se puede opinar que es la generación con más tendencia nacionalista, ya
que no creció con la llegada de la globalización, ni fue influenciada por una ola intensa de
inmigrantes, de modo que no se encuentra tan afectada por otras culturas, además pudo
disfrutar en su juventud de los años más prósperos del país. Para justificar quizás una parte
de la ignorancia de esta generación con el mismo argumento que de los boomers, pero
sucede que gracias a dicha generación, las culturas se han mezclado una vez más,
enriqueciendo una vez más la mezcolanza de culturas característica de Latinoamérica. Esta
generación vivió grandes cambios y mejoras en el país, que mientras mantenía una buena
economía, se crearon grandes autopistas, plazas, centros de recreación y demás, esta
generación incluso creció ya con televisión por cable, con eventos recreativos que en su
momento eran muy importantes como el “Miss Venezuela”. A Pesar de esto, también se
encontró bajo dictaduras como la de Marcos Pérez Jiménez, que aunque justamente bajo su
mandato es que se dieron avances como estos, constantemente se encontraba en riesgo la
integridad de la población. Se podría decir entonces que esta generación vivió durante su
juventud un poco de historia moderna, así como también fue espectadora y quizás creadora
de cultura y costumbres de los 80 y 90, que actualmente se recuerdan con mucha nostalgia
y cariño.

Pasando a una generación más joven se encuentran los Millenials o generación Y, la cual
comprende personas desde los 40 hasta los 21 años. Esta generación también se crió en
unos años relativamente prósperos del país, sin embargo, su juventud e infancia coincidió
con el desarrollo del fenómeno de globalización y la revolución informática. Ambos, son
procesos que van de la mano, ya que la globalización se aceleró debido a la revolución
informática. Ya que ambos derivan en una mezcla de culturas, esta generación se vió
expuesta a un mundo de información, y claro, para ellos, y para todos, las costumbres
extranjeras suenan bastante innovadoras e interesantes, lo que hizo que quizás se
interesaran más por la historia de otros países que de la propia.

Finalmente, tenemos la generación Z, que comprende edades desde los 20 hasta los más
jóvenes. Esta generación pasa por problemas similares a los de los millenials, se encuentran
rodeados de información de otras culturas que a primera vista son mucho más interesantes
que la propia. Pero lo que se considera el factor principal del desapego de esta generación
(incluso la anterior) para con su país sería la situación política y económica que se
desarrolla en la actualidad, incluso, como parte de esta generación podría argumentar ¿qué
apego emocional podría tenerle a un país que se ha llevado muchas de las experiencias que
debería estar viviendo como joven? Podríamos decir entonces que el desapego de esta
generación ha sido incluso debido a la decepción, ya que podríamos oír historias y
experiencias de generaciones anteriores que nosotros no seríamos capaces de vivir estando
en este país, ya sea por causas económicas o de inseguridad.

Podemos concluir que cada generación tiene sus razones para der algo desapegada a su
país de nacimiento, algunas quizás más válidas que otras, dependiendo de la perspectiva.
Lo que sí se puede afirmar, es que los venezolanos no son tan conocedores de su cultura
como otros países, tampoco se encuentran tan interesados en ella, lo que quizás sea una
lástima, ya que tanto la cultura moderna como la antigua son bastante interesantes, que
aunque no se practiquen porque puedan encontrarse obsoletas, no deberíamos dejar de
conocer.

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