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SODOMÍA Y
FRESAS CON NATA
Un breve apunte sobre ventas,persuasión y
manipulación

Inés Díaz
SODOMÍA Y FRESAS CON NATA

Propiedad de Inés Díaz.

En el poco probable caso que te interese este texto, puedes copiarlo y

utilizarlo a tu antojo siempre que no sea con fines económicos y lo hagas
citando su autora y su web www.inesdiazcopywriter.com.

Cassá de la Selva- Enero 2020

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AQUÍ TIENES TU REGALO

INMEDIATO

Lo inmediato convence a nuestras mentes comodonas. Esto funciona así,

aunque para todo lo demás seas más disciplinado que un samurai, una
parte de tu  cerebro acciona si intuye que podrá conseguir algo con el
mínimo esfuerzo.

Esto es verdad verdadera, pero hay mucha confusión con esto.

Es que por otro lado, si tú deseas algo con las tripas, eres capaz de hacer
esfuerzos sobrehumanos para conseguirlo. Esfuerzos irracionales.
¿Cierto?

Es curioso.

Me quedé pensando en esto el otro día después de chatear con José, uno
del Tinder.

Conversamos durante una hora entretenida, pero al final lo

bloqueé.

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¿QUÉ SI ESTOY LOCA? ESPERA QUE TE

EXPLICO
Me caía muy bien, tanto que le pasé el teléfono y comenzamos con los
audios.

No me arriesgaría a quedar con él y descubrir que habla como si tuviera

una pinza en la nariz.

Quizás sea verdad eso de que las mujeres somos muy de estímulos
auditivos. En mi caso la regla se cumple. Aunque también dicen que las
mujeres podemos hacer muchas cosas al mismo tiempo, y yo a duras
penas puedo hacer una bien. No me pidas más.

Lo que te estaba contando.

Que muy bien José. Tenía esas voces envolventes que te hacen sentir en
casa. Un tipo interesante y con sentido del humor. Eso además de guapo, y
sin obsesiones como las de andar en bicicleta o escalar.

Si me viera con alguien que tiene tanta pasión por el ciclismo como yo por
el copywriting, estaríamos destinados a morir de aburrimiento.

Mejor morir por otras cosas.

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No me quería demorar más, así que le dije de quedar a tomar un café, me

dijo que la semana que viene porque esta le tocaba cuidar de su hijo. Muy
bien.

Yo tenía que seguir con otra cosa, me despedí.

Pero él se puso raro.

EMPEZÓ A HACERME PREGUNTAS

Que si como carne, que si tengo celulitis, que si me gusta el sexo anal.

Me dijo que él era muy exigente. Que era muy sano, y que la última chica
con la que estuvo compartía sus mismas inclinaciones y que a ver si yo
también.

Ah!, también me preguntó si quería saber las medidas de su pene. O una

foto.

¿Qué te parece? Eso es ponerlo fácil. ¿No? Pim Pam.

Le faltó decirme sus posiciones favoritas, cáspita. No sé en qué estaría

pensando.

De repente, ya no tenía ganas de quedar con él.

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Pensarás que lo mismo no me gusta el sexo anal o que tengo celulitis.

No va por ahí la cosa. Aunque me costó darme cuenta de qué era lo que
me quitó las ganas.

Y es lo mismo que te quita las ganas de comprar:

La anticipación y la obviedad.

Todos tenemos gustos e inclinaciones, pero si miras un poco tu historial

puedes ver que has hecho excepciones.

Te puede encantar una hermosa sesión de sexo oral, pero has declinado
alguna que otra oferta, por diversos motivos.

Te puede pasar justo lo contrario.

Que no te gusta algo pero mira por dónde, con esa persona y justo en ese
momento, te encanta.

¿De qué depende?

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DE SEGÚN CÓMO SE PERSUADE TODO

DEPENDE
La persuasión es algo que puedes hacer sobre la marcha. No por
anticipado.

Es decir, que mientras le pasan cosas a la otra persona puedes

convencerla o animarla a que haga algo.

(Si ahora mismo esto te sabe a manipulación, espera, sigue leyendo un

poco más)

Eso hay que diferenciarlo de cuando firmas un contrato. Cuando estás

ante el notario y se hablan de todos los supuestos, de las consecuencias
de esos supuestos y de los compromisos. Eso que es tan práctico y
necesario no es persuasión.

Eso es anticipación.

ENTONCES ¿QUÉ ES LA PERSUASIÓN?

Por ejemplo cuando alguien tiene algo que te gusta mucho y ya tienes
ganas de que sea tuyo, si te dice: “Antes de que sea tuyo quiero que te
comas este plato de fresas con nata”.

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Tú piensas “No tenía en mente comer ahora, pero qué demonios, no

puede estar tan mal ese plato”.

Eso es persuasión.

Es persuasivo si cumple otro requisito.

LA POSIBILIDAD DE DECIR NO
Si te dicen: “Antes de que esto sea tuyo te puedes comer este plato de
fresas con nata, pero si no te gusta, prefiero que no lo hagas. Si no te
gustan las fresas, no pasa nada. Pero mira, mira que buena pinta tienen”.

También podría ser todavía más persuasivo:

-“Te voy a dar todo lo que quieras que sea tuyo cuantas veces quieras,
pero antes los dos vamos a saborear unas fresas frescas y jugosas que son
alimento para tu cuerpo y puro nutriente para esa belleza que tú tienes.
Lo haremos poco a poco para asegurarnos de que realmente te gustan y le
pondremos un toque de nata que sabe a pecado y a todas las cosas
prohibidas que muy en tu interior yo sé que estás deseando. Sé que te
gusta transgredir las dietas, salvaje pecadora.”

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Bueno, me he pasado. Por favor, permíteme exagerar un poco, que es

gratis.

Digamos que dependiendo de la persona que tenemos delante y

el caso en cuestión hay diferentes niveles de persuasión.

OTRA COSA BIEN DISTINTA ES

MANIPULAR
La línea entre manipulación y persuasión no es delgada. Es más grande
que la muralla china y no entiendo como tanta gente se confunde con eso.

Manipulación sería que te dijeran: “Voy a darte esto que te gusta mucho,
pero primero quiero que te comas este plato con fresas. Si no lo haces, no
voy a querer seguir jugando contigo”.

Eso es muy triste.

Si te fijas bien, detrás de una manipulación hay auténtico miedo.

Puedes notar la necesidad, la tensión que encierran estos
mensajes. Eso despierta tu espinazo, poniéndote en guardia.

Nadie en su sano juicio quiere ser manipulador, como el del último caso.

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Pero entonces, todos en internet se vuelven muy raros y venden sus

servicios y productos como José, que parecía que estaba ante el notario.

“José, el abajo firmante declara que es sano y exigente y que su intención

es dar de comer un plato de fresas con nata-que consta por una parte de
fresas y por otra de nata colocadas sobre un recipiente llamado plato-
José quiere que la interesada sepa que él ya la puso sobre aviso, para
ahorrarse disgustos. Con esta declaración se adjunta documento con
prueba gráfica de su miembro viril y medidas correspondientes.”

Yo paso.

No por si me gusta o no la comida, si no porque me da la sensación de que

comer con José no es nada divertido.

Y me habla de fresas con nata cuando todavía no sé si los entrantes me

convencen, la verdad.

Entiéndelo, ese plato de fresas puede resultar lo mejor de la noche.

Y ¿POR QUÉ TE LO CUENTO?

Porque sé que  llevas mucho tiempo aprendiendo y experimentando en tu
área.

Sería muy triste que prives a tu cliente potencial de tu maravilloso

servicio o producto por no entender la importancia de saber usar las
palabras.

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Tienta a tu lector, sedúcelo a comprar eso tan útil que tienes para él que
mejora su vida de alguna manera.

Persuade, sin miedo. Y observa qué reacción provocas. Despierta el

interés de tu lector. Sin pereza, sin anticipación.

Sin pedir permiso. Sin explicaciones.

Vende.

Bien. Hasta aquí mi regalo para ti. Quizás no te parezca gran cosa, o quizás
querías algo mágico y fabuloso para ganar dinero en dos días.

Me temo que el prejuicio y el miedo acerca de la venta son los mayores

enemigos del emprendedor online, y por eso me pareció útil dar un repaso
a las ideas de lo que significa persuadir vs. manipular.

Espero que te sirva para que tus textos no anticipen, ni que tú te

comuniques con tus clientes como si estuvieras ante notario. En
definitiva, que no aburras perdiendo oportunidades de venta por el
camino.

Inés

P.D: Ese día cerré el Tinder. Entre los gentiles caballeros que había
conocido, las conversaciones abiertas con pelmazos y todas las fotos de
pollas que tenía que borrar del móvil antes de que las vean mis hijos, ya
no podía con mi alma.

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