Aparecen para equiparar al trabajador en relación con el empleador y para que este respete ciertos mínimos, en algunos casos, preferida una interpretación o una norma y, en otros, actué respetando los derechos fundamentales. La importancia de estos principios radica en que informan el ordenamiento jurídico de un país, es decir justifican la existencia de normas. El pro operario se define como aquel principio que permite optar por la interpretación que más beneficios otorgue al trabajador. Opera cuando una norma es oscura y tiene varias interpretaciones, A la vez también se aplicará para interpretar actos y hechos normativos es decir tanto normas expedidas por el órgano correspondiente del estado, como las normas profesionales. Se encuentra previsto en el artículo 26º numeral 3 de la constitución y en la ley de procesal del trabajo en el artículo II del título preliminar. La norma más favorable al trabajo es cuando dos o más normas regulen en forma incompatible un mismo hecho se aplicará cuando haya un conflicto entendido como divergencia, es decir, cuando dos normas regular un mismo hecho de forma opuesta, en primer lugar, se debe la aplicación de este principio, en primer lugar, se debe recurrir a los criterios de jerarquía especialidad y temporalidad, establecidos para regular en caso de conflicto (entendido como contradicción) entre leyes En segundo lugar, se deberán considerar para su aplicación los limites previstos por el ordenamiento, de esta forma, no se aplicaran la costumbre o los principios los limites previstos por el ordenamiento, de esta forma, no se aplicaran la costumbre o los principios aunque sea más favorable. La invencibilidad de los derechos del trabajo consiste en que el trabajador por tener esta calidad tendrá derechos indisponibles que prevén mínimos que este no podrá disponer. El derecho laboral apunta a proteger al trabajador y por esta razón le otorga normas de carácter público que no admiten el juego de la autonomía privada es decir ni disposición individual ni colectiva. IGUALDAD ANTE LA LEY DE TRATO Y DE OPORTUNIDADES IGUALDAD ANTE LA LEY: El artículo 2.2 de la constitución política del Perú y se refiere a la igualdad que debe otorgar el estado mediante sus funciones: legislativas, administrativa y jurisdiccional.
IGUALDAD DE TRATO: Es decir que esta discriminación puede provenir tanto de un
contrato de trabajo como de un convenio colectivo.
IGUALDAD DE OPORTUNIDADES: Se trata de las acciones positivas en las que
otorga ciertos beneficios a los sectores que se encontraron en desigualdad. PRINCIPIO DE PRIMACÍA DE LA REALIDAD se fundamenta en otorgarle el privilegio a lo que sucede en la realidad a lo previsto en un contrato o en los mecanismos formales. Se aplicará en los casos en que se quiera vulnerar los derechos de los trabajadores, pretendiendo eludir los beneficios que le corresponden por tener tal condición, basándose en clausular contractuales y acuerdos que esconden verdaderas relaciones laborales.
FOMENTO POR EL ESTADO DE LA AUTONOMÍA COLECTIVA
Se define como aquella facultad que poseen tanto trabajadores como empleadores de negociar y regular de manera consensual los beneficios y derechos para los primeros dentro de un ámbito específico y de no ser el caso, hacer valer sus derechos mediante huelga. Por esta razón, este principio se refiere a que el estado debe incentivar o abstenerse, en su caso, actuar en el ámbito de lo acordado por las partes. La constitución de 1979 le imprimía el carácter de fuerza de ley; actualmente con la constitución vigente se cambió a fuerza vinculante, es decir las partes tendrán la facultad de decidir dentro de su ámbito y sociales que consideren convenientes dentro de los límites que establece a la ley, pues serán vinculantes y de carácter normativo para el ámbito ( empresa, rama de actividad o gremio) que hayan acordado (eficacia subjetiva) y también será obligatoria para los trabajadores que entren con posterioridad a lo establecido por el convenio colectivo ( eficacia temporal). FOMENTO DE LA FORMALIDAD QUE PERMITE AL ESTADO VERIFICAR EL CUMPLIMIENTO DEL LO PREVISTO PRO EL ORDENAMIENTO LABORAL. Busca incentivar la formalidad en las empresas mediante medidas tributarias, financieras, crediticias, etc. Que favorezcan a los empleadores para conseguir que estas cumplan con otorgar a sus trabajadores todos los derechos y beneficios que prevén las normas laborales de nuestro ordenamiento jurídico.
LOS DERECHOS LABORALES EN LA CONSTITUCIÓN DE 1993
En el Perú antes de 1970, con la vigencia de la Constitución de 1993 de corte liberal el despido de trabajadores era libre se podía rescindir el contrato laboral en el momento que el empleador lo creyera conveniente con la única condición de un preaviso de 90 días o la indemnización equivalente a las remuneraciones a obtener en dicho tiempo en el caso de trabajadores empleados y sin esos requisitos si se trataba de trabajadores obreros. La constitución actual en su artículo 24º reconoce el derecho a una remuneración equitativa y suficiente que procure un bienestar material y espiritual para el trabajador y su familia. Prescribe además que las remuneraciones mínimas se regularan por el estado con participación de las organizaciones representativas de los trabajadores y de los empleadores. Marcial Rubio Correa considera que en primer lugar se establece que el trabajador tiene derecho a una remuneración equitativa y esa equidad debe ser fijada en relación con algún parámetro. El pago de remuneraciones y beneficios de los trabajadores es prioritario sobre cualquier otra deuda que tenga el empleador significa que se protege los derechos elementales de los trabajadores.
La constitución en su artículo 25º establece la jornada máxima de 8 horas o 48 horas
semanales.
El trabajador puede laborar más de sus 8 horas diarias, pero en este caso se le deberá pagar más por cada hora de trabajo (trabajo sobre tiempo).
El artículo 29º reconoce el derecho de los trabajadores a participar en las utilidades
de la empresa y el deber del Estado de promover otras formas de participación.
El sentido de esta norma se fundamenta en la consideración que el trabajo es la fuente