Está en la página 1de 3

TALLER

PROCEDIMINETO ADMINISTRATIVO CHILENO Y COLOMBIANO

El procedimiento administrativo Chileno, se encuentra regulado en el artículo 18 de


la Ley de Bases de Procedimiento Administrativo (LBPA), que establece: “El
procedimiento administrativo es una sucesión de actos trámite vinculados entre sí,
emanados de la Administración y, en su caso, de particulares interesados, que tiene
por finalidad producir un acto administrativo terminal”.
De acuerdo a la definición que maneja el derecho chileno, se puede evidenciar que
el criterio que se adopta del procedimiento administrativo es meramente formal,
porque este se encarga de señalar cual es la ruta a seguir para lograr que la
administración emita un concepto de fondo a través de un acto administrativo
definitivo, pero para llegar a tal punto, se vale de los actos administrativos de trámite,
situación que se basa más en la estructura o forma, que en lo sustancial.
Por su parte, en el ordenamiento jurídico colombiano (Ley 1437 de 2011) entiende
el procedimiento administrativo, como aquel momento en el cual las autoridades
ejercen sus competencias y producen decisiones, y justamente para lograrlo deben
hacerlo en cumplimiento de reglas de procedimiento o de trámites que la ley
previamente ha contemplado para ello. Esas actuaciones administrativas
constituyen la etapa del procedimiento administrativo que antecede al acto
administrativo.
Tanto el ordenamiento Jurídico chileno como el colombiano, entienden el
procedimiento administrativo como una norma que se debe aplicar por principio
general, ya que la ley puede establecer normas de procedimientos especiales, como
sucede en nuestra legislación, con la expedición de actos por las asambleas y los
concejos, que está sometida a normas de procedimientos especiales.
Ese formalismo del procedimiento administrativo, lo que busca dar una garantía
jurídica a los ciudadanos, así como permitir una adecuada recolección de
información por parte de la administración para tomar una determinación que se
ajuste al interés general. Y es este punto importante recalcarlo, pues aunque
constituye una garantía para los administrados, finalmente no se está agotando la
función ultima que es la de asegurar la pronta y eficaz satisfacción del interés
general.
En Colombia, el inicio de las actuaciones administrativas se puede dar a través del
derecho de petición, el cumplimiento de una obligación o deber legal y las
actuaciones administrativas iniciadas de oficio. Aplicando lo señalado en el párrafo
inmediatamente anterior, es claro que nuestro ordenamiento jurídico en los artículos
23 y 74 de la Constitución ha reconocido el carácter de derecho fundamental a la
petición, entendido este no solo como la posibilidad de presentar peticiones a las
autoridades sino a obtener una pronta y efectiva resolución. Y es justamente aquí
donde pasamos de la parte puramente formal a la sustancial, pues como lo ha
manifestado en reiteradas oportunidades la Corte Constitucional, las respuestas a
las solicitudes realizadas por los administrados deben ser de fondo, claras,
pertinentes.
Siendo coherente con la Constitución, el CPACA regula la petición como un solo
derecho, pero con la posibilidad de que su ejercicio pueda tener diversos objetos,
para lo cual se han señalado reglas especiales de acuerdo con el contenido de la
petición. Es por esto que las peticiones pueden ser de interés general o particular,
bien sea para solicitar el reconocimiento de un derecho, la intervención de una
entidad o un funcionario a fin de que se resuelva una situación jurídica, que se preste
un servicio pedir información; consultar, examinar y requerir copias de documentos,
formular consultas, quejas y denuncias y reclamos e interponer recursos.
Las formalidades que imprime la ley 1755 de 2015, se basan en que estas
peticiones deben ser respetuosas y presentarse de manera verbal o escrita y por
cualquier medio idónea de comunicación. No obstante, las autoridades podrán pedir
que ciertas peticiones se presenten por escrito.
Además, una vez recibida la petición, las autoridades están en l obligación de
examinarla de manera integral y en ningún caso estimarla incompleta por falta de
requisitos o documentos que no se encuentren dentro del marco jurídico vigente,
momento en el cual, la administración da prevalencia a lo sustancial sobre lo formal.
La desatención de las peticiones, constituye una falta del servidor público que da
lugar a las sanciones disciplinarias, siendo aquí realmente importante, la
satisfacción del interés de los administrados.
Las autoridades deben tener en cuenta, que las normas de procedimiento tienen
como finalidad proteger y garantizar los derechos y libertades de las personas, la
primacía de los intereses generales, la sujeción de las autoridades a la constitución
y demás preceptos del ordenamiento jurídico.
Esos procedimientos administrativos pueden ser tramitados por escrito,
verbalmente o por medios electrónicos, pero cuando esta administración se inicie
de oficio, necesariamente debe realizarse de oficio y comunicarse al interesado para
que este pueda ejercer su derecho de defensa.
Tanto la regulación chilena como la colombiana, señala de manera expresa la
existencia de recursos que se pueden interponer en contra de las actuaciones del
Estado como lo son el recurso de reposición, el recurso de apelación y el de queja.
Los recursos podrán interponerse por medios electrónicos, sin requerir
presentaciones personales cuando el recurrente haya sido previamente reconocido
en las actuaciones administrativas que dieron origen al acto en cuestión.
El ordenamiento chileno señala la institución de la invalidación como un recurso,
situación que no sucede en el caso colombiano puesto que establece una variedad
de posibilidades que permiten que se declare la nulidad del acto administrativo, por
otro lado, la legislación Colombiana sobresale ya que permite que la revocatoria de
los actos administrativos sea realizada por la misma autoridad que lo dictado,
además la invalidación del acto administrativo puede ser de oficio o a solicitud de
parte bajo las causales que establece Inciso 2 del artículo 137 de la ley 1437 de
2011.
1. Cuando hayan sido expedidos con infracción de las normas en que debían
fundarse.
2. Falta de Competencia. (Vicios de incompetencia).
3. Expedición en forma irregular.
4. Violación del derecho de audiencia y defensa. (Debido proceso).
5. Falsa Motivación. (Falta de motivación).
6. Desviación de las atribuciones propias del funcionario que los profirió.

Fuentes Bibliográficas:

 Libro derecho administrativo general y colombiano de Libardo


Rodriguez,Tomo ll
 Ley 1437 de 2011
 Constitución política de Colombia
 Revista de derecho públicos file:///C:/Users/PERSONAL/Downloads/51248-
505-178215-1-10-20181114%20(1).pdf
 Texto significado del procedimiento administrativo de Martin Loo Gutierrez

EMELY KATHERYNE GUTIERREZ ORTIZ


LIZETH KARIME GONZALEZ AMAYA

También podría gustarte