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CONJUNTOS Y LÓGICA.
CAPÍTULO I. CONJUNTOS.
Profesor Gabriel Ocampo. 20-09-21.
Los conjuntos están caracterizados por sus elementos.
Notas:
(i) el uso de llaves es importante, pues denota los elementos que
integran al conjunto.
(ii) “|” o “:” se lee “tal que”.
(iii) “φ (x)” es la condición escrita en algún lenguaje.
(iv) Por lo general a los conjuntos se les denota por letras mayúsculas
y a los elementos con minúsculas.
Ejemplos.
(1) A = {a, e, i, o, u} es un conjunto descrito por extensión.
B = {x | x es una vocal del español} es un conjunto descrito por
comprensión.
Ambos conjuntos coinciden, pero están descritos de forma diferente.
(2) A = {x | x es un día de la semana} es un conjunto descrito por
compresión.
B = {lunes, martes, miércoles, jueves, viernes, sábado, domingo}.
Ambos conjuntos coinciden, pero están descritos de forma diferente.
(3) El conjunto de los números no se puede dar por extensión.
Ejemplo.
Sea A = {a, b, c, d}.
Es claro que b es un elemento de A (b ∈ A); c está en A (c ∈ A);
d pertenece a A (d ∈ A).
Se ve que e no es un elemento de A (e ∉ A); f no está en A
(f ∉ A); g no pertenece a A (g ∉ A).
Este ejemplo muestra cómo leer (∈, ∉).
Ejemplos.
(1) A = {a, b, c} y B = {a, b, c, d, e}. Es claro que A ⊆ B pero B ⊈ A, esto es
porque d ∈ B y d ∉ A. De este modo A ≠ B.
(2) A = {a, b}, B = {b, a}. Como A ⊆ B y B ⊆ A, A = B.
El orden de los elementos no importa.
(3) A = {a}, B = {a, a}. Se puede verificar que A ⊆ B y B ⊆ A, A = B.
No importan las repeticiones.
(4) A = {b}, B = {b, …, b}. Es claro que A ⊆B y B ⊆ A, A = B.
(5) En la práctica se puede distinguir esa manera de contener a otro
conjunto.
En (1), es claro que A ⊆ B pero A ≠ B. En este caso decimos que
“A es un subconjunto propio de B” y lo denotaremos por “A ⊂ B”.
Si C = {b, c, a}, C ⊂ A y C = A. En este caso diremos que “C es un
subconjunto impropio de A” y lo denotamos como “C ⊆ A”.
Ejemplos.
(1) {x | x es un caballo verde que vuela} = ∅.
(2) {x| x es un número verde} = ∅.
Ejemplo.
Sean A = {a, b, c, d}, B = {c, d, e, f, g}. Entonces:
A ∩ B = {c, d}, A – B = {a, b}, B- A = {e, f, g},
A ∪ B = {a, b, c, d, e, f, g}.
A y B no son ajenos, pues A ∩ B = {c, d} ≠ ∅.
(A-B) ∩ B = {a, b} ∩ {c, d, e, f, g} = ∅.
Por tanto:
A - B y B son conjuntos ajenos.
A – B ≠ B – A.
(A – B) ∩ (B – A) = ∅. Así, A – B y B – A son conjuntos ajenos.
Ejemplo.
Sean X = {a, b, c, d, e, f, g} y A = {a, b, c, d}. Entonces:
A c = {e, f, g} (¿qué le falta a A para ser el conjunto universo?).
A ∩ A c = {a, b, c, d} ∩ {e, f, g} = ∅.
Así, A y A c son conjuntos ajenos.
A ∪ A c = {a, b, c, d} ∪ {e, f, g} = X.
A ≠ A c.
TAREA #1.
BIBLIOGRAFÍA.