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Leonardo da Vinci, una Singularidad

Paul Yuseph Benavides Lamir

Leonardo da Vinci el genio


Nicolas Naranjo Boza

03/10/2021
Universidad de Antioquia
Introducción

Albert Einstein, Nikola Tesla, Steve Jobs, Leonhard Euler, Gauss, Arquímedes, Nicolas Maquiavelo,
Goethe, entre muchas otras figuras a través de la historia que dejaron una huella inigualable, algunos
adelantados a su tiempo como Einstein que predijo cien años antes la teoría de la relatividad, y predijo
el comportamiento de las ondas gravitacionales, confirmada en este siglo. Sin embargo, existe una
figura, un inigualable que marcó una época, y que si hoy en día tuviéramos todo lo que se estima que
alcanzó, estuviéramos quinientos años adelantados, no hablo nada más y nada menos que el pintor,
anatomista, arquitecto, paleontólogo, artista, botánico, científico, escritor, escultor, filosofo,
ingeniero, musico, poeta, estratega militar; nacido en la republica de Florencia en 1452 y que fallece
en 1519 en Amboise, un polímata italiano fuera de su época Leonardo di ser Piero da Vinci. [1]
Da Vinci debería estar vivo…
Carta a Ludovico y su Idoneidad técnica con la ingeniería militar

Leonardo da Vinci en 1483 le dirige una carta al duque Ludovico Sforza con el fin de obtener el
mecenazgo del “moro de Milán”.

Habiendo visto y estudiado a fondo los experimentos de todos aquellos que se dicen maestros
inventores de instrumentos de guerra, y que sus invenciones y obras de dichos instrumentos, en nada
difieren de lo habitual, me animo, sin restar mérito a nadie, a solicitar a Vuestra Excelencia que me
atienda para revelarle mis secretos y, brindándoselos para que los disfrute a su debido momento,
llevar a la práctica todo lo que anoto con brevedad a continuación (y muchas más cosas según venga
al caso). Leonardo da Vinci en la carta para Sforza. [2]
Enumero diez puntos de sus habilidades y conocimiento, de los cuales nueve mencionaban
explícitamente su idoneidad técnica en temas relacionas con la guerra, tales como: Puentes
ligerísimos, fuertes y fáciles de transportar{1}; Poder demoler cualquier castillo o fortaleza;
Maquinas que pueden servir para el ataque como para defensa y navíos capaces de resistir el fuego
del cañón más pesado{2}; La construcción de carros acorazados, seguros e invulnerables, para
penetrar entre las filas del enemigo{3}; Disposición de catapultas, almajaneques y fundíbulos de
admirable eficacia e insólitos{4}; Construcción de cañones de gran alcance y bombardas{5}.
En resumen, puede cubrir todas las necesidades con infinidad de medios de ataque y en defensa. Y
termina la carta con el ultimo punto el decimo el cual dicta lo siguiente:
“En tiempos de paz, creo poder satisfaceros tanto como cualquier otro en la arquitectura, en
la construcción de edificios públicos o privados, y en la conducción del agua de un sitio a otro.
También puedo esculpir en mármol, bronce y yeso, así como pintar, cualquier cosa tan bien como el
mejor, sea quien sea.” [2]

No le da herramientas a hombre para que pueda matar, sino para poder defenderse, aquel que no
valora la vida, no merece poseerla.
Durante su estadía en Milán, Leonardo trabajo en un sinfín de obras, un relato algo cómico, pero que
demuestra la “maldad” de Sforza; Leonardo creo una maquina para cortar berros y al momento de
probarla no solo cortó los berros, sino que también comenzaron a llover manos y piernas, debido a
que los jardineros aun seguían ahí; Entonces Ludovico pensó en llevar esta “segadora de hombres”
{6} a la guerra para matar franceses. [0]
Otros estudios de Leonardo de ingeniería militar son su estudio minucioso sobre mejorar las alabardas
{7}, mejorando todo diseño árabe o europeo de la época. Agregando lo necesario para lo requerido y
utilidad de cada uno. El estudio constaba de las aleaciones para hacer estas armas, el tiempo de forja,
el barniz necesario, el acido y todo aquello que abarque sobre estas. [0]
Pavía y su pasión por la anatomía

Todos los hombres somos iguales, nuestras extremidades miden lo mismo desde el ombligo a la punta
en todos los casos. Leonardo desmiente esto con una de sus obras más conocidas el Hombre de
Vitruvio {8} con el cual comprobó que las dimensiones y las proporciones van a ser diferentes, pero
ahí no acabaron sus estudios sobre anatomía estos se extendieron mucho mas allá, a tal punto que el
amor que le tenía al conocimiento era tan grande que podía estar al lado de un cadáver toda la noche.
[0]

Tuvo varios problemas con el papa León X debido a que este prohíbe rotundamente el estudio de
anatomía, este se molesto cuando leonardo le muestra el tratado de la voz humana. Leonardo usaba
los cadáveres que se dejaban en el campo de batalla, este los diseccionaba, los analizaba y eran parte
de su estudio macro y micro, este descubrió las seis capas de la piel. [3]

Leonardo hizo de medico en Pavía y le enseñaba sus grandes estudios tan precisos sobre anatomía a
los médicos de la época, estudió de Galeno e Hipócrates, pero con el tiempo los supero. La
característica que define los estudios anatómicos de da Vinci siempre va a hacer la precisión, aun en
la actualidad la precisión alcanzada por sus observaciones y calidad de retratos son usados por los
médicos. A leonardo no le importaba ensuciarse las manos para conseguir el conocimiento, le tocaba
estudiar en las noches, para no ser visto. Cortó penes, vaginas, trató con fetos (Estudió como el líquido
amniótico protege y cubre al feto), mujeres embarazadas, hombres, mujeres, viseras con todo aquello
que le diera el conocimiento sobre la anatomía del hombre. Un estudio demasiado importante es
acerca de la anatomía del corazón, de cómo tiene la capacidad de bombear por medio de estudios de
las diferentes válvulas presentes en este, además de las conexiones nerviosa. Podemos apreciar varios
de sus estudios anatómicos del hombre desde la figura {9} a {15}.[0][3]

Leonardo no estudio únicamente la anatomía del ser humano, este siempre iba un paso mas allá, el
estudio de la anatomía en animales, desde aves, murciélagos, insectos, gatos, leones, perros, y su
favorito el del caballo.
El león da Vinci {16}, fue un león que soltó flores a Lorenzo di Medici y al rey de Francia, Francis
I. Se sabe que en los manuscritos no hay referencias claras y directas de su diseño, pero si existe en
la literatura de la época, relatos de como sorprendió un león en el palacio de Francis I. Este autómata
seguía los estudios anatómicos acerca del león hechos por Leonardo, este previo cada movimiento
del autómata, su expresión agresiva (que en otros estudios dice que en el colmo de la agresividad el
hombre se parece a los animales), también se prevé que leonardo hizo este león con una melena y piel
real de un león. Además de un estudio sobre cómo son otros felinos, estudió acerca de cada postura
que puede tener un gato y de estos e hizo analogía con los leones {17}. Otras demostraciones de
leones en los manuscritos están en las figuras {18} a {20}.[4]

Entre mas conoces algo, mas llegas a amarlo. Así pensaba Leonardo, ese amor se transmitió hacia sus
caballos, tal era el amor que no dejaba que ningún otro los peinara ya que, solo el conocía la forma
correcta de hacerlo, y al hacerlo de tal forma hacia que el caballo estuviera tranquilo, feliz, y que
fuese saludable. Y como el amor se da conociendo más y más, Leonardo no duda y estudia los caballos
a nivel anatómico, aun teniendo que lidiar, cadáveres, viseras tal como lo hizo con los seres humanos
{21}{22}{23}. Y así pudo completar sus estudios del caballo y maquinó de las obras más importantes
hacia Ludovico Sforza {24}; Por encargo de Sforza prepara los primeros diseños de lo que había de
ser el caballo gigante de 26 pies de altura que habría de construir en bronce en honor de Francisco
Sforza, padre de Ludovico. Desgraciadamente, Leonardo no pudo fundir el caballo, lo que si hizo fue
el modelo de arcilla enorme. Según Vasari: “Todos los que vieron el gran modelo de barro aseguraron
que era la más excelente y magnífica obra que habían visto nunca”. [1]

Leonardo luego que le tocara huir de Milán por la llegada de las tropas francesas, el regresa a Milán
a ofrecer sus servicios a los franceses y el general de turno Gian Giacomo Trivulzio, destina a
Leonardo un monumento, el cual Leonardo retoma las ideas abandonadas para el monumento de
Sforza y lo sitúa sobre un podio de reminiscencia manierista, la idea de Leonardo para el
Jinete nuevamente desborda en dramatismo y como el monumento iba a ser a escala no había
problemas con los movimientos que tuvo que abandonar para el de Ludovico. {25}[5]

Actualmente perdida, pintada en un muro del Salón de los Quinientos del Palazzo Vecchio de
Florencia. Leonardo recibe el encargo de pintar una gran batalla, pero surgió de nuevo el mismo
problema que le hacia casi imposible pintar al fresco, y utilizó la técnica del encausto del texto antiguo
historia natural. Aun si no le funciono esta técnica debido a los fogoncitos en todo el salón para
calentar el muro, era una obra muy trascendental con la que soñaban los florentinos y de nuevo fue
un fracaso radical, sin embargo, existen una gran cantidad de bocetos, que determinan la culminación
de esta obra. La obra en cuestión la gran batalla de Anghiari {26}.[1][3]
El hombre que quiso volar

Leonardo soñó con volar, pero lamentablemente en su época no tenía la disposición ni los
materiales ni las técnicas que lo hicieran posible, sin embargo, Leonardo el inigualable no tardo en
diseñar artefactos y objetos de vuelo, dejo más de veinte instrumentos de vuelos, mas todos los
estudios anatómicos sobre las aves, mosquitos y murciélago, ya que para poder volar, tuvo que
estudiar como lo hacen estos animales, cómo poder replicar su vuelo, esa era la pregunta de
leonardo, que no tan alejado de la realidad sus bocetos nos dan a entender que lo pudo conseguir.
Leonardo cazó una lechuza con el ala rota, él la alimento y cuido e hizo un estudio con el tipo de
huesos del ave, necesito un modelo que fuera tan leve como el hueso que existe en el ala, luego de
un tiempo pudo crear ese remplazo para el ala de la lechuza {27}[0]. Los estudios anatómicos de
animales que pueden volar constaban desde el centro de masa que deben tener para efectuar el vuelo
{28}, cómo les toca girar para poder despegar, así como sus alas se curvan y estar superpuestas por
las condiciones del aire {29}, de cómo usan su cola para poder frenar.
Según Vasari, Leonardo iba a la plaza de Florencia y compraba aves enjauladas y las liberaba de
una vez.[1] La libertad que te ofrece el volar, eso es lo que siempre buscó leonardo, para ello
inventó varias máquinas, una de ellas tiene cumple con la base de las hélices chinas, y se usaron
cuatro hombres para poderla levantar del suelo {30}, el famoso paracaídas de leonardo usando la
geometría y todos sus estudios previos para poder reducir la velocidad del aire en esa pirámide
{31}, el ornitóptero{32}, el famoso planeador que uso en Milán para atravesar entre castillos a mas
de siete pisos de altura, usado con intereses militares por Ludovico{33}. [0]
Conclusiones

Leonardo en su lecho de muerte le pidió disculpas a Dios, debido a que no llegó a ser todo lo que
quería hacer, aun así, a pesar de tan solo haber vivido 67 años, marco una época sin precedentes, y
tal impacto pudo haber sido mayor si hubiese concretado la enciclopedia del conocimiento y si tan
solo la mayoría de esos códices no estuviesen perdidos a la fecha de hoy. Con una voluntad
inquebrantable y su paciencia, su mayor virtud, Leonardo fue escalando y mejorando a través de los
años, trabajó para las casas mas importantes de Italia, los Sforza, los Medici, los Borgia y para el rey
de Francia, sin embargo, esto no es un logro para él, ya que es un hombre sencillo en solo busca de
conocimientos, no de lujos. Sus estudios abarcan miles de cosas, por algo se estima que hizo mas de
300 manuscritos, sus estudios se complementan entre sí, usando a veces la anatomía para poder
recrear el vuelo y a su vez usar esta máquina para la guerra, esa polivalencia que tienen los
conocimientos de Leonardo, como se trata al principio nadie la ha tenido, debido a que Leonardo da
Vinci es UNICO.

Bibliografía
[0] Nicolas Naranjo. Durante las sesiones de Leonardo da Vinci.
[1]Vasari, G. (1568). Vida de los más excelentes pintores, escultores y arquitectos. In Fiorenza
appresso i Giunti.
[2] Walter Isaacson. Leonardo da Vinci. La biografía.
[3] Revista de Extensión Cultural n°65, Universidad nacional de Colombia.
[4] Richard J. Gatling, da Vinci’s Lion.
[5] Cianchi, Marco. Le machine di leonardo

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