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Las Dificultades Específicas de Aprendizaje

(DEA) dentro de las aulas


La Fundación Adana define los Trastornos del aprendizaje, denominadas
también Dificultades Específicas de Aprendizaje (DEA), como “una dificultad inesperada,
específica y persistente para la adquisición de un aprendizaje pese a una instrucción
convencional, nivel de inteligencia y oportunidades socioculturales adecuadas”. ¿Quieres
saber más sobre ellos? ¡Sigue leyendo!

Para comenzar, es importante aclarar que estas dificultades son intrínsecas al alumno y que
afectan a su proceso de aprendizaje, pero no tienen nada que ver con su nivel de
inteligencia. ¡Muchas personas con dificultades de aprendizaje han pasado a la Historia por
sus geniales aportaciones!
Lamentablemente, durante la formación del profesorado las Dificultades de Aprendizaje se
trabajan más bien poco, por lo que es más que recomendable que el propio centro
proporcione a sus docentes una formación continua que le permita tener unas nociones
básicas sobre los síntomas de las DEA más comunes en el aula.
La importancia de los tutores
Es imprescindible que conozcas a tus estudiantes e identifiques estas dificultades a una edad
temprana para poder intervenir lo antes posible, de manera que se puedan minimizar las
consecuencias en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Obviamente, los tutores son las personas que están más tiempo en contacto con los alumnos,
al igual que los familiares, por eso es necesario que haya un clima de confianza y un nivel
de comunicación muy fluido entre estos agentes educativos. Sin embargo, la función del tutor
o tutora no es la de diagnosticar, sino la de hacer un seguimiento que permita observar alguna
anomalía o problemática que perjudique el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumno.

¿Cuáles son las DEA más comunes en el aula?


Si nos centramos en las materias académicas:

 Lectura: Los problemas que se derivan de esta área se caracterizan por dificultades


en decodificar las palabras escritas, reconocer las palabras comunes a simple vista y
leer con fluidez. La dificultad más común es la dislexia, una alteración de la capacidad
de leer por la que se confunden o se altera el orden de letras, sílabas o palabras. Esta
dificultad pueden afectar a la escritura, la comprensión y la ortografía. Los signos que
pueden derivar de la dislexia varían según la edad a la que se observen, ya que no es
lo mismo diagnosticarla en la etapa de infantil, como en primaria, como en secundaria.
 Escritura: En esta área encontramos niños con deficiencias en las habilidades de la
escritura que provocan dificultades en la comprensión de la gramática y la puntuación,
la ortografía, la organización de párrafos o la composición de los textos. Además,
dichos niños no suelen tener buenas habilidades para escribir a mano. Una de las más
frecuentes en el aula es la disgrafía, una dificultad de coordinación de los músculos
de motricidad fina (mano, antebrazo) que impide a los niños afectados dominar y dirigir
el instrumento de escritura de la forma adecuada para escribir de forma legible y
ordenada. Los alumnos con disgrafía podrían tener dificultades con la ortografía, el
deletreo y la escritura a mano.
 Matemáticas: Dentro de esta área, las dificultades que aparecen están relacionadas
con la comprensión de los conceptos numéricos y con la capacidad de resolver
cálculos mentales o problemas de lógica. La DEA más habitual en el aula es
la discalculia, una dificultad para aprender los principios del cálculo originada por un
problema en el uso del sistema simbólico. ¡Pero, ten cuidado porque es muy
fácil confundirla con la dislexia, aún habiendo algunas diferencias!

Si hablamos del procesamiento cognitivo:

 Atención: Discernir la información relevante, prestar atención o mantenerse


concentrado en un misma tarea un tiempo determinado son algunas de las dificultades
que pueden detectarse en niños o niñas que tengan TDA o TDAH.
 Motoras: La dispraxia es una de las dificultades de aprendizaje más frecuentes y
menos diagnosticadas. Este trastorno se caracteriza por una baja organización del
movimiento y provoca que los niños o niñas que lo sufren tengan que esforzarse
mucho con las tareas vinculadas al movimiento, cuando deberían realizarse
automáticamente, sin prestar atención y con plena eficacia.
 Organización: La organización del espacio y la administración del tiempo también es
un aspecto que debe tenerse en cuenta, ya que pueden ser simplemente una
característica del alumno o puede ser un síntoma de una dificultad de aprendizaje. La
más común es la dificultad del funcionamiento ejecutivo, que consiste en
deficiencias en una serie de habilidades mentales como planificar, organizar, priorizar,
memorizar, etc. que pueden dificultar a los niños y niñas a desarrollar ciertas
actividades. Estas dificultades, por lo general, aparecen en niños que tienen TDAH o
dislexia.

Como hemos podido ver, ninguna de estas dificultades excluye a las otras, incluso a veces
suelen relacionarse entre ellas. ¡Cada estudiante es un mundo! Conocerles e identificar sus
dificultades te permitirá generar aprendizajes significativos… ¿te animas?

Potencie su autoestima. Use mensajes positivos; crea en sus habilidades y competencias


acorde a sus posibilidades; otorgue responsabilidades gradualmente. En la medida que el niño
sea estimulado, se sentirá capaz de conseguir las metas propuestas.

Baje las expectativas personales de los adultos y céntrese en el esfuerzo que el niño
imprime a cada acción, con independencia de las calificaciones. Todas las
personas tendemos a esforzarnos por lograr una meta cuando somos reforzados
positivamente.

Ayude a los niños a generar hábitos de estudio. Establezca horarios claros y estables.


Recuerde que no debe disminuir la exigencia, sino que adaptarla a las necesidades de cada
hijo.

Potencie en el niño distintas habilidades, más allá de lo cognitivo. Pueden ser de carácter
deportivo, social o afectivo. Lo importante es comprender que la dificultad para aprender es
sólo una parte de su existencia.
Desincentive los comportamientos inadecuados o violentos, evitando imponer el castigo
físico como medida disciplinaria, ya que esto potencia la aparición de la conducta que se trata
de extinguir.

De instrucciones claras, breves y precisas. Esto ayudará al niño a comprender mejor el


mensaje.

La rutina, el orden y la organización de los espacios y tiempos es primordial. Los hijos


deben tener claridad respecto de aquello que deben hacer, cuándo y dónde lo deben cumplir.

Fomente las habilidades sociales. En la medida que los niños juegan con otros, aprenden la
experiencia de la autorregulación a través de la socialización con los pares.

TDA-H

Pautas y medidas para el TDA-H (Desatención)

 Atendiendo e identificando el déficit de atención, la impulsividad e hiperactividad


podremos identificar sus principales problemas de conducta.
 Las dificultades atencionales suponen obstáculo para situaciones concretas, el problema
más importante son las explicaciones muy largas. Hay que ser breves y directos, hablar de
cerca mirándolos a la cara y no usar tono de enfado ni hacer reproches y/o críticas delante
de sus compañeros. Si sientes que los atacan se defenderán con una conducta de
oposición y desafío.

Pautas y medidas para el TDA-H (Impulsividad e hiperactividad)

 Por la impulsividad es común las interrupciones, hablar sin permiso o no parar de hablar.
 Usar las siguientes estrategias: Extinción, ignorar aquellas conductas que no son graves,
hará que vayan desapareciendo. Los gestos: acordar con el alumno gestos para identificar
y ayudar a parar la conducta que está realizando, por ejemplo, guiño de un ojo para de
hablar. Los límites: para aquellas conductas más disruptivas se deben establecer límites,
por ejemplo, si está molestando a compañero se le puede indicar que a los 2 avisos se
deberá levantar de su asiento y sentarse en la mesa del profesor. Darles espacio y tiempo
para los problemas de hiperactividad, como por ejemplo repartir material, borrar la
pizarra o salir al patio a correr.

Aplicación del refuerzo en el aula

 Los refuerzos positivos debe ser la línea de trabajo principal, todas aquellas conductas
positivas seguido de refuerzo positivo, hará no solo que se mantengan si no que
aumentarán.
 Los refuerzos más potentes: Verbales y afectuosos, cualquier palabra, gesto de aprobación
y felicitación.
 Para las conductas disruptivas: Es importante que las normas seas explícitas, se debe
comunicar a toda la clase, deben quedan claras, quedar por escrito y en un sitio visible.
 Cuando se produzca una situación conflictiva el profesor debe actuar como figura de
autoridad correcta. Una buena autoridad se muestra dialogante, empática y afectuosa.
Pero cuando se produzca una situación conflictiva sabe guardar la calma, controlar la
situación y aplicar consecuencias negativas justas.

Funcionamiento Limítrofe

La Asociación Americana de Discapacidad Intelectual considera otros aspectos además del


cociente intelectual, reconociendo que estas personas presentan déficit en la capacidad
adaptativa al menos en dos de las siguientes áreas antes de los 18 años: comunicación, cuidado
personal, vida doméstica, habilidades sociales/interpersonales, utilización de recursos
interpersonales, autocontrol, habilidades académicas, trabajo, ocio, salud y seguridad.
Sin embargo, las personas con inteligencia límite presentan capacidades suficientes para, con
apoyos, alcanzar buen grado de autonomía en las actividades de la vida diaria.

12-18 AÑOS

Cognitivos

- Desfase curricular de dos o tres años al principio de la segunda etapa de la ESO que se va
incrementando a lo largo de la etapa

- Fase del pensamiento abstracto incompleta, desarrollada hasta los primeros estadios - Dificultad
en la organización de la orientación espacio-temporal

- Dificultad en la comprensión lectora fundamentalmente en pasivas e inferenciales

- Mayor dificultad en las habilidades académicas instrumentales que en las manipulativas

Psicosocial

- Dificultad en la planificación y organización de tareas

- Dificultad de organización del ocio y tiempo libre

- Falta de estrategias adaptativas para resolver conflictos interpersonales

- Inhibición para la utilización de recursos comunitarios que requieran de una actividad grupal

- Vulnerabilidad social y emocional, sufriendo incluso acoso escolar.

- Mayor incidencia de trastornos de salud mental que se mantendrán a lo largo de su ciclo vital

Orientaciones Metodológicas

Teniendo presente la importancia del aprendizaje y las herramientas empleadas para apoyarlo y
con base en nuestra experiencia en el aula, exponemos algunas orientaciones metodológicas que
han ofrecido resultados probados como estrategias de aprendizaje para el alumnado con
inteligencia límite:

- Principio de individualización

- Ubicación física adecuada en el aula según las necesidades del alumnado para reforzar la
atención y concentración

- Introducir los contenidos del tema con palabras clave

- Acompañar el aprendizaje con enunciados claros, soportes visuales y experiencias directas

- Concretar los contenidos con esquemas y enunciados claros. Estructuras sintácticas simples y
vocabulario concreto (siempre que sea posible)
- Finalizar la sesión con dos o tres ideas claves

- Trabajo por proyectos o centros de interés

- Regular y marcar los tiempos de la tarea: inicio, mantenimiento y finalización

- Refuerzo positivo

- Coordinación entre profesionales

- Acción tutorial

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