La evolución de la Diplomacia es un proceso que va ligado con el desarrollo de las
Relaciones Internacionales. Por lo que, en mi opinión no puede existir una sin la otra, por eso es importante conocer la historia de ambas, puesto que esta nos lleva a que nuestro conocimiento este bien cimentado. No fue hasta después de la guerra de 1914-18 cuando el ciudadano comenzó a interesarse en los asuntos exteriores de su país, pues se cayo en la cuenta de que, por ejemplo, una decisión de guerra traería consecuencias a toda la población y no solo al presidente junto con su gabinete como se creía erradamente. En la antigüedad existía un tabú contra los extranjeros muy amplio que impedía las relaciones entre dos ciudades, ya que se tenía la falsa creencia de que eran impuros. Y es así cuando se asignan privilegios a quien haya sido enviado a otra ciudad con el fin de negociar, y es así como en Grecia comenzaron a elegir como embajadores a las personas que tuvieran mayor elocuencia, pues su principal función sería dar un discurso convincente en el que los oradores no rendían informe alguno de su visita. Posteriormente surge la necesidad de un informe, para saber las condiciones de la ciudad visitada, por lo que se necesito de la habilidad de la buena observación. Sin embargo, no es hasta 1815 con el Congreso de Viena cuando se establece el cauce actual de lo que hoy es la diplomacia, pues es ahí donde se definen por primera vez los cargos de los representantes: 1) embajadores y legados y nuncios papales; 2) enviados extraordinarios y ministros plenipotenciarios; 3) ministros residentes; y 4) encargados de negocios. Y así, los Servicios Diplomáticos de las naciones quedaron reconocidos como un servicio público de cada país. Después de este gran paso, tuvo que haber una transición de la llamada vieja diplomacia a la nueva diplomacia. Fueron tres factores los que favorecieron este desarrollo, primero: el sentido de la comunidad de naciones, en el que los tratos de las potencias con las naciones menos poderosas se comenzaron a regir por normas comunes de dignidad, humanidad y buena fe; la importancia de la opinión publica, puesto que antes no se tomaba en cuenta para las decisiones de los estados; el avance en las comunicaciones, pues la aparición de la máquina de vapor, el telégrafo, el aeroplano y el teléfono contribuyeron a modificar la práctica de lo que fue la vieja diplomacia, pues contribuyo a una mejor comunicación entre personas y estados. Es así como la diplomacia comienza a cobrar mayor importancia, en mi opinión cada nación debe tener un representante que sea un hombre o mujer de honor, la política exterior debe estar en manos de profesionales rectos que contribuyan al crecimiento y desarrollo de su nación, pues una mala negociación puede llegar a ser causa, en el peor caso, de la guerra.