Encontramos que cuando Dios ha enviado el último Y esta frase: aun una vez, indica la remoción de las Y así
s Y así mismo en este tiempo final, Dios conmoverá no
mensajero para una generación, o para una
dispensación, ahí está la misericordia de Dios
manifestada por última vez. La misericordia de Dios
en este tiempo final, en el fin del tiempo de los
gentiles, se manifiesta por última vez a través del
Ángel mensajero que Jesús ha prometido enviar en
este tiempo final.
Él dice: Yo Jesús he enviado mi Ángel para dar
testimonio de estas cosas en las iglesias. El viene
con un Mensaje para todas las iglesias, no, importa
que sean católicas evangélicas, pentecostales,
espiritistas, o de la clase que sean; y Su Mensaje
también es para todas las demás personas, aunque
no sean de ninguna de las religiones existentes en
esta Tierra. Es un Mensaje para todos los seres
humanos, en donde la misericordia de Dios es
manifestada por última vez para todo ser humano.
Luego de esta ocasión en que Dios manifiesta Su
amor y misericordia en el Mensaje, y por el mensajero
del tiempo final, el mensajero que Dios ha prometido
enviar para dar testimonio de estas cosas, después
de eso no hay otra oportunidad, ni otro mensaje. Ese
es el último profeta mensajero del Señor Jesucristo;
y por esa causa el Libro del Apocalipsis termina con
Amén.
Porque es la Obra de Dios que se lleva a cabo en este
tiempo final, con la cual Dios sella a todos los
escogidos, luego de llamar con el Mensaje de gran
voz de trompeta a todos los escogidos; y así la
misericordia de Dios es manifestada para toda
persona que escucha el Mensaje de gran voz de
trompeta que Dios prometió para este tiempo final.
Por eso el Señor Jesucristo dijo en San Mateo 24,
verso 31: “Y enviará Sus ángeles con gran voz de
trompeta, y juntarán a todos los escogidos.” Esto es
todos los elegidos, todos los hijos de Dios. Es la
manifestación de la misericordia de Dios por última
vez. Dice el apóstol San Pablo, en la Carta a los
Hebreos, capítulo 12:25-29: “Mirad que no desechéis
al que habla. Porque si no escaparon aquellos que
desecharon al que los amonestaba en la Tierra,
mucho menos nosotros, si desecháremos al que
amonesta desde los cielos.
La voz del cual conmovió entonces la Tierra, pero
ahora ha prometido diciendo: Aun una vez, y
conmoveré no solamente la Tierra, sino también el
cielo.
cosas movibles, como cosas hechas, para que
queden las inconmovibles.
Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible,
tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios,
agradándole con temor y reverencia; porque nuestro
Dios es fuego consumidor. ’’
Aquí tenemos la voz de Dios para el tiempo final, la
cual habla desde el cielo, habla desde la Edad de la
Piedra angular, la Edad celestial, la Edad eterna; y ha
prometido una vez más conmover no solamente la
Tierra, como lo hizo en el tiempo de Moisés allá en el
monte Sinaí, desde el cual la Tierra fue conmovida.
Una vez más, en el tiempo final, Dios ha prometido
conmover no solamente la Tierra, sino también el
cielo. Y ahí entran los terremotos, los temblores de
tierra, los volcanes y todas estas cosas que vendrán
durante la Gran Tribulación; por las cuales este
planeta Tierra será conmovido; y no solamente la
Tierra, sino también el cielo.
Los cielos serán conmovidos, porque la Luna será
convertida en sangre; el Sol no alumbrará (se
convertirá en tinieblas), y también en cierto tiempo
bajará y quemará a los hombres. Habrá una
conmoción de los cielos, y vendrán plagas también
sobre la Tierra. Ellos tendrán poder para cerrar los
cielos, para que no llueva sobre la Tierra; ellos
tendrán poder de convertir las aguas en sangre.
Ese es el ministerio apocalíptico del Ángel del Señor
Jesucristo para el fin del tiempo, para que la Tierra y
los cielos sean conmovidos con la Palabra de Dios en
la boca de Su último mensajero. Por eso le es dado
ese Librito abierto en el cielo, que es el Título de
Propiedad; y con ese Título de Propiedad, al tomar
ese Título y comérselo, le es dado poder, autoridad y
dominio para llevar a cabo la Obra de Dios prometida
para el fin del tiempo; con lo cual los cielos y la Tierra
serán conmovidos, porque es la Voz de Dios
hablando en este planeta Tierra; los Truenos
apocalípticos hablando en este planeta Tierra, para
realizar lo que Dios prometió para el fin deltiempo.
Todas las cosas Dios las creó hablando. Dios dijo:
“Sea la luz, y fue la luz.” Y así por el estilo
encontramos que Dios para llevar a cabo Su
Programa ha estado siempre hablando.
Lo encontramos a través de los profetas del Antiguo
Testamento en donde Dios hablaba, y ellos decían:
“Así dice Jehová; así dice el Señor,” y luego las cosas
acontecían.
solamente la Tierra, sino también los cielos.
Es el ministerio del fin del tiempo, el último ministerio
en donde el Señor Jesucristo se manifiesta antes de
derramar las plagas apocalípticas para la raza
humana. Primero manifiesta Su amor y misericordia
por última vez para todo ser humano.
Por eso dice: “Y el Espíritu (el Espíritu en el Ángel
mensajero) y la Esposa (la Esposa del Cordero, que
ha recibido al Señor en Su Ángel mensajero) dicen:
Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tenga sed,
venga; y el que quiera, tome del agua de la vida
gratuitamente.” Es la misericordia de Dios por última
vez extendida a la raza humana, dándole el Mensaje
de agua de vida eterna, dándole el Mensaje de gran
voz de trompeta, para así escapar de los juicios
divinos, de las plagas apocalípticas que han de venir.
Una persona no puede recibir las plagas, los juicios
divinos, si antes no recibe la advertencia, sin antes
recibir una oportunidad para escapar de las plagas
que Dios ha prometido enviar. Primero Dios extiende
Su amor y misericordia al ser humano; porque Dios
no envía juicio al hombre, sin antes hacer la
advertencia (y Dios la hace siempre a través de un
profeta mensajero).
Vean ustedes, cuando Dios envió el Diluvio, el juicio
divino para aquel tiempo, para destruir la raza
humana y la raza animal, encontramos que antes
había enviado al profeta Noé, dando a conocer a la
humanidad ese juicio divino que iba a venir; y
también le mostró Dios a Noé la forma de escapar de
ese juicio divino; le dijo que construyera un arca.
Noé construyó el arca, y le dijo a todos los seres
humanos que la única forma de escapar de esos
juicios como el que él estaba anunciando; porque
ellos no pudieron creer que vendría ese juicio
divino. Siempre las personas han pensado que
Dios es amor; y por lo tanto, no puede destruir a
los seres humanos; pero también dice el apóstol
San Pablo: “Porque nuestro Dios es fuego
consumidor.” Así que hay tiempo para derramar Su
misericordia y amor; pero también hay tiempo para
derramar Su juicio, porque Dios es fuego
consumidor.
Noé estaba anunciando que vendría un juicio y
destruiría al ser humano, porque así Dios se lo había
notificado; y Dios le dio a conocer a Noé la forma de
escapar de ese juicio; por lo tanto, Dios extendió Su
misericordia y amor en Noé y para Noé, y para todas

aquellas personas que escucharan y recibieran el
mensaje de Noé.
Fue la misericordia de Dios por última vez para
aquella generación. Jesús dice que en este tiempo
final será como fue en los días de Noé: que no
conocieron el Mensaje de Dios a través de Noé, y no
conocieron la misericordia de Dios, extendida a
través de Noé. No conocieron esas cosas, no
conocieron el Programa divino para aquel tiempo; y
vino el diluvio y se los llevó a todos, porque no habían
recibido la misericordia de Dios, extendida a través
de Noé, en el mensaje de Noé.
Y cuando la persona ha rechazado la misericordia de
Dios, entonces le queda el juicio divino; porque Dios
tiene para el ser humano: la misericordia, el amor
divino, la bendición, o el juicio divino: la maldición,
las plagas. Así es en este tiempo.
Dios está extendiendo Su amor y misericordia por
última vez para esta generación. Estamos al final, en
el fin del tiempo, en el fin del reino de los gentiles. El
reino de los gentiles será destruido para dar paso al
Reino del Señor Jesucristo, el cual tendrá, para
comenzar, mil años de paz. También se le llama el
«glorioso Milenio» del Señor Jesucristo con Sus
escogidos.
La misericordia de Dios está extendida en este pasaje
que dice: «El Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que
oye, diga: Ven. Y el que tenga sed, venga; y el que
quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.» Que
tome del agua de la vida, de las Palabras de vida
eterna, del Mensaje de vida eterna, para todo aquel
que tenga sed. Así Dios extiende Su misericordia por
última vez.
Luego que los seres humanos hayan escuchado el
último Mensaje, que es el Mensaje del Señor
Jesucristo por medio de Su Ángel mensajero... Los
que han recibido ese Mensaje, han recibido la
misericordia de Dios, y tendrán todas las bendiciones
de Dios; los escogidos serán transformados.
Le anteceden los muertos que han de resucitar para
tener un cuerpo eterno, y nosotros los que vivimos
recibiremos un cuerpo eterno; y después de eso
vendrán las plagas para el reino de los gentiles. Y los
escogidos del pueblo hebreo también recibirán la
misericordia de Dios al ser llamados con el Mensaje
de gran voz de trompeta.
Serán llamados, juntados y sellados en sus frentes,
como también los escogidos de entre los gentiles;
porque tanto ellos como nosotros recibimos la
misericordia de Dios por última vez.
Después de esta oportunidad de salvación que
Dios le da a las personas en medio de los gentiles,
y también a las personas en medio del pueblo
hebreo, ya no hay más oportunidades para el ser
humano. La última oportunidad que Dios le da, en
donde extiende Su amor y misericordia, es en el
Mensajero del tiempo actual, en el Ángel del Señor
Jesucristo enviado en este tiempo final.
Después de Apocalipsis 22:16, donde dice: «Yo
Jesús he enviado mi Ángel para dar testimonio de
estas cosas en las iglesias.» Usted no encuentra
que el Señor envíe a ningún otro ángel para dar
testimonio de estas cosas; porque ese es último
profeta mensajero que El envía en y a este planeta
Tierra para dar testimonio de estas cosas a todos
los seres humanos; para dar testimonio por última
vez de la misericordia de Dios, y así los seres
humanos tengan la oportunidad de recibir la
misericordia de Dios, antes que caiga el juicio de
Dios sobre la Tierra.
Este es un extracto de una de las conferencias
del Rvdo. William Soto Santiago Ph.D.
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La Misericordia
de Dios Por
Última Vez
Yo Jesús he enviado mi Ángel para daros
testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la
raíz y el linaje de David, la Estrella resplandeciente
de la mañana.
Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye,
diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera,
tome del agua de la vida gratuitamente.
Apocalipsis 22:16-17
Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el
Señor,el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado
su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben
suceder pronto.
Apocalipsis 22:6
LA MISERICORDIA DE DIOS POR ÚLTIMA VEZ
En el tiempo de Noé, Dios envió Su misericordia
por última vez a través del profeta Noé, el cual
estaba predicando a aquella generación de los
juicios de Dios que habrían de venir, los cuales
habrían de destruir aquella generación; pero Noé
también les mostró la forma de escapar de esos
juicios divinos que caerían sobre la raza humana;
porque en aquella ocasión, para aquella
generación, la misericordia de Dios estaba siendo
manifestada por última vez a través de Noé.
Porque siempre la misericordia de Dios se ha
manifestado en este planeta Tierra para los seres
humanos a través del mensajero de cada edad y
de cada dispensación, cuando el mensajero ha
dado a conocer el Mensaje de Dios
correspondiente para ese tiempo.