Está en la página 1de 5

NOTA CLÍNICA

Ingesta de esteroides anabolizantes e ictus isquémico.


Presentación de un caso clínico y revisión de la bibliografía
Carlos García-Esperón, José Vicente Hervás-García, Marta Jiménez-González, Natalia Pérez de la Ossa-Herrero,
Meritxell Gomis-Cortina, Laura Dorado-Bouix, Elena López-Cancio Martínez, Carlos H. Castaño-Duque,
Mónica Millán-Torné, Antonio Dávalos

Introducción. Los esteroides androgénicos anabólicos son sustancias sintéticas derivadas de la testosterona, utilizados, Servicio de Neurología. Hospital
Universitari Germans Trias i Pujol.
entre otros usos, por su efecto trófico sobre el tejido muscular. Su consumo puede producir una serie de efectos adversos Badalona, Barcelona, España.
sobre el organismo, entre los que destacan la supresión del eje hipotálamo-pituitario-gonadal, alteraciones hepáticas,
Correspondencia:
psiquiátricas y cardiovasculares, y los efectos más frecuentes al respecto son la alteración del perfil lipídico y de las cifras
Dr. Carlos García Esperón.
tensionales, la remodelación cardíaca, la producción de arritmias o el infarto de miocardio. Servicio de Neurología. Hospital
Universitari Germans Trias i Pujol.
Caso clínico. Varón joven, con antecedentes de abuso de esteroides androgénicos anabólicos, que consulta por focalidad Ctra. Canyet, s/n. E-08916
neurológica hemisférica derecha aguda en relación con un ictus isquémico. El estudio etiológico, incluyendo monitoriza- Badalona (Barcelona).
ción cardíaca, estudio ecocardiográfico, de imagen (resonancia magnética y arteriografía) y analítico (trombofilia, serolo- E-mail:
gías, autoinmunidad, marcadores tumorales), no mostró alteraciones. carlosgesperon@yahoo.es

Conclusiones. La asociación entre consumo de esteroides androgénicos anabólicos y patología cardiovascular es conoci- Aceptado tras revisión externa:
da, pero no se ha estudiado tanto su relación con la patología cerebrovascular. 03.01.13.

Palabras clave. Anabolizantes. Cardiovascular. Esteroides. Ictus. Joven. Revisión. Cómo citar este artículo:
García-Esperón C, Hervás-García JV,
Jiménez-González M, Pérez de la
Ossa-Herrero N, Gomis-Cortina M,
Dorado-Bouix L, et al. Ingesta de
esteroides anabolizantes e ictus
isquémico. Presentación de un caso
Introducción de consumo en la población española, ya que el uso clínico y revisión de la bibliografía.
clandestino de los EAA dificulta su cálculo real. Rev Neurol 2013; 56: 327-31.
Los esteroides son biomoléculas lipídicas formadas Los efectos adversos de los EAA sobre el sistema
© 2013 Revista de Neurología
por un núcleo de cuatro anillos saturados llamado cardiovascular se han descrito ampliamente [3-5] y
ciclopentanoperhidrofenantreno. Los tres grupos se pueden producir en distintos niveles. De una for-
más importantes de esteroides son los esteroles, los ma indirecta, el consumo de EAA se ha asociado a
ácidos biliares y las hormonas esteroideas, y de es- una mayor prevalencia de factores de riesgo vascu-
tas últimas existen seis clases en el ser humano: la lar, como la hipertensión arterial [6], la alteración
progesterona, el cortisol, la aldosterona, la testoste- del perfil lipídico (destaca la elevación de lipoproteí­
rona, el estradiol y el calcitriol [1]. Los esteroides nas de baja densidad y la reducción de lipoproteínas
andrógenicos anabólicos (EAA) son sustancias sin- de alta densidad [7,8]) o el aumento de la resisten-
téticas derivadas de la testosterona, desarrolladas cia insulínica. Estos factores pueden favorecer el de­
para disminuir químicamente los efectos androgé- sarrollo de ateroesclerosis y cardiopatía isquémica
nicos y virilizantes e incrementar las acciones ana- [9]. Los fenómenos isquémicos también se han des-
bólicas de los esteroides. Desde el punto de vista crito en relación con un aumento del hematocrito o
médico, los EAA se han usado, sobre todo, para la con alteraciones en la agregación plaquetaria y dis-
disfunción testicular y del eje hipotálamo-pituita- minución de la producción de prostaciclinas [5].
rio-gonadal; no obstante, también se han utilizado Además, en estos sujetos se ha descubierto una ele-
en el deporte de competición, con el objetivo de au- vación de la proteína C reactiva [10] y del amino­
mentar la masa muscular y la capacidad física [1], y ácido homocisteína [11], ambos relacionados con el
actualmente tienen la clasificación de sustancia do- daño sobre el endotelio. Por otro lado, se han ob-
pante en nuestro país. servado posibles efectos directos del consumo de
Se ha estimado que el 1% de la población estado- estos fármacos en el remodelado cardíaco [12], la
unidense usa andrógenos, y el 3,9% de sus adoles- hipertrofia ventricular, la aparición de trastornos del
centes ha tomado alguna vez esteroides sin pres- ritmo, sobre todo en forma de fibrilación auricular
cripción [2]. Actualmente, carecemos de datos reales [13], e incluso la muerte súbita [14].

www.neurologia.com  Rev Neurol 2013; 56 (6): 327-331 327


C. García-Esperón, et al

A su llegada al servicio de urgencias, el paciente


Figura 1. Arteriografía cerebral y trombectomía mecánica: a) Arteriografía cerebral desde la arteria caró- estaba normotenso y normoglucémico, y el electro-
tida interna derecha en proyección posteroanterior que muestra oclusión proximal de la arteria cerebral
cardiograma realizado objetivaba ritmo sinusal. La
media; b) Despliegue de stentriever Solitaire en la oclusión arterial; c) Arteriografía cerebral desde la
arteria carótida interna derecha en proyección posteroanterior que muestra repermeabilidad de todo el exploración neurológica inicial mostró un paciente
territorio vascular (TICI 3); d) Trombo de fibrina extraído con stentriever. vigil pero desorientado en el espacio, disartria leve
sin elementos afásicos, preferencia oculocefálica a
la derecha, hemianopsia homónima izquierda, pa-
a b resia facial central izquierda, plejía braquial izquier-
da, paresia crural izquierda (3/5), anestesia hemicor-
poral izquierda y asomatoagnosia, con una puntua-
ción de 16 en la National Institute of Health Stroke
Scale (NIHSS). El resto de exploración física fue
normal. La tomografía computarizada craneal ini-
cial no evidenció alteraciones ni signos incipientes
de isquemia aguda (ASPECTS 10).
Con la orientación diagnóstica de ictus isquémi-
co agudo del territorio de la arteria cerebral media
derecha de menos de 4,5 horas de evolución, y ante
c d
la ausencia de criterios de exclusión, se inició fibri-
nólisis sistémica con activador del plasminógeno
tisular endovenoso 1 hora y 50 minutos después del
inicio de los síntomas. Durante la infusión del acti-
vador del plasminógeno tisular se realizó un estu-
dio neurosonológico transcraneal y de troncos su-
praaórticos, que mostró oclusión proximal de la
arteria cerebral media derecha sin hallazgos rele-
vantes en la arteria carótida extracraneal ipsilateral.
Tras 20 minutos de infusión, y ante la persistencia
de la oclusión arterial sin cambios en la exploración
neurológica, se indicó un tratamiento endovascular
de rescate. La arteriografía cerebral confirmó la
persistencia de oclusión de la arteria cerebral media
La relación entre la ingesta de EAA e ictus isqué- proximal. Se realizó trombectomía mecánica con el
mico se ha comunicado menos. A continuación, stentriever Solitaire y se consiguió una recanaliza-
presentamos el caso clínico de un varón joven con ción completa 4 horas y 40 minutos después del ini-
un ictus isquémico en relación con el consumo de cio de los síntomas (Fig. 1). No se produjeron com-
EAA y realizamos una revisión de la bibliografía. plicaciones periprocedimiento.
La evolución neurológica fue favorable. A las 24
horas, el paciente presentó mejoría neurológica,
Caso clínico persistiendo disartria leve, hemianopsia homónima
izquierda, paresia facial central izquierda, hemipa-
Varón de 31 años que ingresó por un cuadro de ini- resia y hemihipoestesia izquierda de predominio
cio súbito de debilidad del hemicuerpo izquierdo y braquial, sin extinciones o agnosias (NIHSS: 9 pun-
dificultad de articulación del habla de una hora de tos). En la tomografía computarizada craneal de con-
evolución. Como antecedentes, únicamente desta- trol a las 24 horas, se observó un infarto hemorrá-
caba ser exconsumidor de tóxicos (cocaína, éxtasis gico de tipo 2 en los núcleos caudado y lenticular
y alcohol) desde hacía tres años, por lo que mante- derechos, con probable componente de extravasa-
nía tratamiento con naltrexona (25 mg/24 h), y con- ción de contraste asociado, leve efecto masa sobre
sumidor de diversos esteroides desde los 16 años, el ventrículo lateral derecho y mínimo desplaza-
como decanoato de nandrolona (50 mg/semana), miento de estructuras de la línea media (Fig. 2), sin
estanozolol (100 mg/semana), testosterona propio- asociarse a deterioro neurológico.
nato (250 mg/semana) y clembuterol (20-24 mg/24 h), El estudio etiológico incluyó las siguientes prue-
en relación con una intensa actividad de muscula- bas complementarias: monitorización cardíaca con-
ción en el gimnasio y kick-boxing. tinua durante seis días, que no evidenció alteracio-

328 www.neurologia.com  Rev Neurol 2013; 56 (6): 327-331


Ingesta de esteroides anabolizantes e ictus isquémico

nes del ritmo cardíaco; ecocardiogramas transeso-


fágico y transtorácico, que no objetivaron cardiopa- Figura 2. Tomografía computarizada craneal de control a las 24 horas que muestra infarto hemorrágico
de tipo 2 en los núcleos caudado y lenticular derechos, con leve efecto masa sobre los ventrículos y míni-
tía estructural embolígena, foramen oval permeable
mo desplazamiento de las estructuras de la línea media.
ni patología en el cayado aórtico; estudio neuroso-
nológico y angiorresonancia magnética, que no evi-
denciaron ateroesclerosis ni alteraciones de gran-
des vasos extra o intracraneales; arteriografía ce­
rebral, que no mostró signos de vasculitis; estudio
analítico completo, que únicamente mostró el perfil
lipídico alterado con colesterol total y lipoproteínas
de baja densidad elevadas (236 y 186 mg/dL, respec-
tivamente), con hemograma, bioquímica, estudio
de trombofilias (anticoagulante lúpico, factor V de
Leiden y gen de la protrombina G20210A), serolo-
gías, autoinmunidad, perfil tiroideo, proteinograma
y marcadores tumorales sin alteraciones. Dada la au-
sencia de hallazgos relevantes en las pruebas com-
plementarias realizadas, se orientó como ictus isqué-
mico en paciente joven de etiología criptogénica.
El paciente mejoró progresivamente durante el
ingreso hospitalario y presentaba al alta paresia fa-
cial central izquierda y paresia braquial izquierda
(3/5) como única focalidad (NIHSS: 3; Rankin: 4). antes. El tipo de sustancia utilizada y el tiempo de
Trasladado a un centro de rehabilitación, a los tres consumo previo muestran una gran heterogenei-
meses presentó una puntuación de 1 en la NIHSS a dad, y se han empleado múltiples sustancias en mono
expensas de una paresia facial central izquierda, con o politerapia, y distintos tiempos de consumo, des-
debilidad distal braquial y signo de Miller-Fi­sher iz- de meses hasta más de 15 años.
quierdo (Rankin: 2). Respecto a la localización de la lesión vascular,
destaca la preferencia por la oclusión proximal de
grandes vasos, siendo el pronóstico funcional pos-
Discusión terior similar al de otros ictus de misma topografía
con mismo tratamiento recibido.
El caso clínico descrito corresponde a un paciente Pocos pacientes muestran alteraciones en las ex-
joven consumidor de grandes dosis de EAA y que ploraciones complementarias, y la más frecuente es
presentó un infarto cerebral por oclusión de la arte- la alteración del perfil lipídico, al igual que en el
ria cerebral media de etiología desconocida. Se han caso presentado. A pesar de la asociación de los
descrito más de 100 causas de ictus en pacientes jó- EAA con la remodelación cardíaca y las alteracio-
venes, entre las que se incluye el consumo de deter- nes del ritmo cardíaco, únicamente en dos pacien-
minadas sustancias, como los EAA. tes se detectaron anomalías estructurales en el es-
Desde los primeros casos publicados por Mo- tudio ecocardiográfico (aneurisma septal con fora-
chizuki y Richter [15] en 1988, se han recogido en men oval permeable asociado y cardiomegalia con
la bibliografía 11 eventos cerebrovasculares en rela- región acinética asociada), y en ninguno se eviden-
ción con el consumo de EAA con fines deportivos, ciaron alteraciones del ritmo cardíaco. Por tanto,
de los cuales 10 son isquémicos (dos de ellos, trom- parece razonable pensar que los efectos sistémicos
bosis venosa cerebral) y uno hemorrágico. Estos ca- de estas sustancias (agregación plaquetaria, daño en-
sos clínicos se resumen en la tabla, incluyendo los dotelial, efecto protrombótico, alteración del perfil
principales hallazgos clínicos, radiológicos y en las lipídico y resistencia insulínica) también desempe-
pruebas complementarias realizadas [7,16-25]. ñan un importante papel en la aparición de un ictus
Es destacable que la totalidad de los pacientes isquémico.
son varones, con edades entre 17 y 34 años (media: Debido al carácter ilegal de este consumo, cree-
24,3 años), como el caso de nuestro paciente, sin mos que es importante la realización de una anam-
factores conocidos de riesgo vascular, aunque dos nesis dirigida hacia un posible consumo encubierto
pacientes habían presentado un infarto agudo de mio- de EAA ante un ictus de etiología indeterminada,
cardio y un evento isquémico cerebral unos meses sobre todo si se trata de un paciente joven con hábi-

www.neurologia.com  Rev Neurol 2013; 56 (6): 327-331 329


C. García-Esperón, et al

Tabla. Revisión de la bibliografía de pacientes con ictus isquémico asociado al consumo de esteroides androgénicos anabólicos.

Edad, sexo y Sustancia y Localización de Oclusión Resto de pruebas


Ecocardiograma
antecedentes tiempo de consumo la lesión (TC/RM) vascular complementarias

Mochizuki 32 años. Varón. Ictus Metandrostenolona, TC: hipodensidad No evaluada Transtorácico: Normal
et al [7] isquémico indeterminado oxandrolona, estanozolol, capsulolenticular cardiomegalia,
izquierdo cuatro meses decanoato de nandrolona, derecha acinesia de la pared
antes fenpropionato de nandrolona, anterior y el septo,
GCH, tamoxifeno. moderada-grave,
Tiempo: 16 años hipocinesia inferior

Frankle et al [16] 34 años. Varón Esteroides TC: hipodensidad No evaluada No realizado Aumento de
(sustancia no especificada). frontoparietal izquierda enzimas hepáticas;
Tiempo: 4 años HDL bajas

Laroche [17] 28 años. Varón. Estanozolol, oxandrolona, TC: infarto isquémico Trombo en la arteria No realizado Normal
Fumador decanoato de nandrolona, temporoparietal carótida interna y
acetato de trembolona, izquierdo émbolos distales
GCH, metiltestosterona. en la arteria cerebral
Tiempo: 3 años media izquierda

Kennedy 28 años. Varón. Esteroides TC: hematoma hemisférico No evaluado No realizado Normal
et al [18] IAM 10 meses antes (sustancia no especificada). derecho con drenaje
Tiempo: 6 años ventricular y componente
subaracnoideo

Lisiewicz et al [19] 31 años. Varón No disponible No disponible No disponible No disponible No disponible

Jaillard et al [20] 31 años. Varón. Testosterona, TC sin contraste: signo Senos lateral derecho, Sin enfermedad Normal
Fumador metolonona y trembolona. del triángulo denso en sagital superior, recto cardíaca (no
Tiempo: 5 años el seno sagital superior y transverso izquierdo especificada la técnica)
e hiperdensidad en el
seno recto y en el seno
transverso izquierdo

Akhter et al [21] 21 años. Varón. Etilestrenol. RM: lesión isquémica Arterias cerebral Transtorácico y Normal
Migraña, enolismo leve Tiempo: 6 semanas en los ganglios basales anterior y cerebral transesofágico: normal
y la cápsula derecha media derecha

Pálfi et al [22] 17 años. Varón. Metandienona. RM: lesión Arteria basilar Transtorácico y Normal
Enfermedad de Gilbert Tiempo: < 1 año isquémica pontina transesofágico: normal

Sahraian 22 años. Varón Decanoato de nandrolona. RM: trombosis del seno Seno sagital No realizado Normal
et al [23] Tiempo: 5 meses sagital y transverso y transverso

Santamarina 26 años. Varón Estanozolol. RM: lesión isquémica No Transtorácico y Aumento de HDL,
et al [24] Tiempo: 3 meses en el vermis, lóbulos transesofágico: normal colesterol total,
occipitales, tálamos, apolipoproteína B
pedúnculo izquierdo y proteína S
y mesencéfalo

Shimada 27 años. Varón Metasterona y prostanozol. RM: lesión isquémica No Transesofágico: Normal
et al [25] Tiempo: 6 meses en el cerebelo, lóbulo aneurisma septal
occipital derecho y atrial y foramen
tálamo izquierdo oval permeable

García-Esperón 31 años. Varón. Decanoato de nandrolona, TC: infarto hemorrágico Arteria cerebral Transtorácico y Elevación del
et al (2013) Exconsumidor de estanozolol, testosterona, (IH 2) en los núcleos media derecha transesofágico: normal colesterol total
cocaína, éxtasis clembuterol. caudado y lenticular y LDL
y alcohol Tiempo: 15 años derechos

GHC: gonadotropina coriónica humana; HDL: lipoproteínas de alta densidad; IAM: infarto agudo de miocardio; LDL: lipoproteínas de baja densidad; RM: resonancia magnética; TC: tomografía
computarizada.

330 www.neurologia.com  Rev Neurol 2013; 56 (6): 327-331


Ingesta de esteroides anabolizantes e ictus isquémico

to deportivo, y destacamos la importancia de reali- 12. Karila TA, Karjalainen JE, Matysaari MJ, Viitasalo MT,
zar un exhaustivo estudio cardíaco (monitorización Seppälä TA. Anabolic-androgenic steroids produce dose-
dependent increase in left ventricular mass in power athletes,
cardíaca, ecocardiograma), debido al mayor riesgo and this effect is potentiated by concomitant use of growth
de sufrir alteraciones de esas características en los hormone. Int J Sports Med 2003; 24: 337-43.
consumidores de estas sustancias. 13. Lau DH, Stiles MK, John B, Shashidhar, Young GD, Sanders P.
Atrial fibrillation and anabolic steroid abuse. Int J Cardiol
2007; 117: e86-7.
Bibliografía 14. Fineschi V, Riezzo I, Centini F, Silingardi E, Licata M,
Beduschi G, et al. Sudden cardiac death during anabolic
1. Snyder PJ. Use of androgens and other hormones to enhance steroid abuse: morphologic and toxicologic findings in two
athletic performance. http://www.uptodate.com/contents/ fatal cases of bodybuilders. Int J Legal Med 2007; 121: 48-53.
use-of-androgens-and-other-hormones-to-enhance-athletic- 15. Mochizuki RM, Richter KJ. Cardiomyopathy and
performance. [21.02.2012]. cerebrovascular accident associated with anabolic-androgenic
2. Sjöqvist F, Garle M, Rane A. Use of doping agents, particularly steroid use. Phys Sportsmed 1988; 16: 109-14.
anabolic steroids, in sports and society. Lancet 2008; 371: 1872. 16. Frankle MA, Eichber R, Zachariah SB. Anabolic androgenic
3. Hartgens F, Kuipers H. Effects of androgenic-anabolic steroids steroids and a stroke in a athlete: case report, Arch Phys Med
in athletes. Sports Med 2004; 34: 513-54. Rehabil 1988; 69: 632-3.
4. Vanberg P, Atar D. Androgenic anabolic steroids abuse and 17. Laroche GP. Steroid anabolic drugs and arterial complications
the cardiovascular system. Handb Exp Pharmacol 2010; 195: in an athlete –a case history. Angiology 1990; 41: 964-9.
411-57. 18. Kennedy MC, Corrigan AB, Pilbeam ST. Myocardial infarction
5. Achar S, Rostmian A, Narayan SM. Cardiac and metabolic and cerebral haemorrhage in a young bodybuilder taking
effects of anabolic-androgenic steroid abuse on lipids, blood anabolic steroids. Aust N Z J Med 1993; 23: 713.
pressure, left ventricular dimensions and rhythm. Am J Cardiol 19. Lisiewicz J, Fijałkowski P, Sankowski J. Ischemic cerebral stroke
2010; 106: 893-901. and anabolic steroids (case report). Neurol Neurochir Pol
6. Urhausen A, Albers T, Kindermann W. Are the cardiac effects 1999; 32 (Suppl 6): S137-9.
of anabolic steroid abuse in strength athletes reversible? 20. Jaillard AS, Hommel M, Mallaret M. Venous sinus thrombosis
Heart 2004; 90: 496-501. associated with androgens in a healthy young man. Stroke
7. Hartgens F, Rietjens G, Keizer HA, Kuipers H, Wolffenbuttel 1994; 25: 212-3.
BHR. Effects of androgenic-anabolic steroids on apolipoproteins 21. Akhter J, Hyder S, Ahmed M. Cerebrovascular accident
and lipoportein (a). Br J Sports Med 2004; 38: 253-9. associated with anabolic steroid use in a young man. Neurology
8. Alén M, Rahkila P, Marnimi J. Serum lipids in power athletes 1994; 44: 2405-6.
self-administering testosterone and anabolic steroids. Int J 22. Pálfi S, Ungureán A, Vécsei L. Basilar artery occlusion associated
Sports Med 1985; 6: 139-44. with anabolic steroid abuse in a 17-year-old bodybuilder.
9. Lierzkowska B, Stanczyk J, Kasprzak JD. Myocardial infarction Eur Neurol 1997; 37: 190-1.
in a 17-year-old body builder using clenbuterol. Circ J 2005; 23. Sahraian MA, Mottamedi M, Azimi AR, Moghimi B.
69: 1144-6. Androgen-induced cerebral venous sinus thrombosis in a
10. Grace FM, Davies B. Raised concentrations of C reactive young body builder: case report. BMC Neurol 2004; 4: 22.
protein in anabolic steroid using bodybuilders. Br J Sports 24. Santamarina RD, Besocke AG, Romano LM, Ioli PL,
Med 2004; 38: 97-8. Gonorazky SE. Ischemic stroke related to anabolic abuse.
11. Graham MR, Grace FM, Boobier W, Hullin D, Kicman A, Clin Neuropharmacol 2008; 31: 80-5.
Cowan D, et al. Homocysteine induced cardiovascular 25. Shimada Y, Yoritaka A, Tanaka Y, Miyamoto N, Ueno Y, Hattori
events: a consequence of long term anabolic-androgenic N, et al. Cerebral infarction in a young man using high-dose
steroid abuse. Br J Sports Med 2006; 40: 644-8. anabolic steroids. J Stroke Cerebrovasc Dis 2012; 21: 906. e9-11.

Ingestion of anabolic steroids and ischaemic stroke. A clinical case report and review of the literature

Introduction. Anabolic-androgenic steroids are synthetic substances derived from testosterone that are employed for their
trophic effect on muscle tissue, among other uses. Their consumption can give trigger a series of adverse side effects on the
body, including the suppression of the hypothalamus-pituitary-gonadal axis as well as liver, psychiatric and cardiovascular
disorders. The most common effects are altered fat profiles and blood pressure values, cardiac remodelling, arrhythmias
or myocardial infarcts.
Case report. We report the case of a young male, with a background of anabolic-androgenic steroids abuse, who visited
because of an acute neurological focus in the right hemisphere related with an ischaemic stroke. The aetiological study,
including cardiac monitoring, echocardiograph and imaging studies (magnetic resonance and arteriography) and lab
findings (thrombophilia, serology, autoimmunity, tumour markers) showed no alterations.
Conclusions. The association between consumption of anabolic-androgenic steroids and cardiovascular pathologies is
known, but its relation with cerebrovascular disease has not received so much attention from researchers.
Key words. Anabolics. Cardiovascular. Review. Steroids. Stroke. Young.

www.neurologia.com  Rev Neurol 2013; 56 (6): 327-331 331

También podría gustarte