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Devocional Diario – Cuatro Principios Poderosos 1

Mucha gente cristiana le echa la culpa al diablo de todo lo que le pasa en su vida, pero
debemos entender que el diablo está DERROTADO.

Hay gente que le echa la culpa al diablo de sus propios pecados, cometen una inmoralidad
sexual y piden que uno ore por ellos para sacar el espíritu de adulterio y eso en realidad se
llama “la carne”, usted no necesita al diablo para practicar esas cosas, es la carne.

También hay padres que llevan a su hijo con los pastores para que oren por la rebeldía que
hay en ellos y yo les digo: “¿Sabe cómo sale el espíritu de rebeldía? Con la vara, así se va
rápido”.

Que aquí no estemos hablando constantemente del diablo, no quiere decir que no exista, sí
existe y sí existe un mundo de las tinieblas y de la luz. Cada cosa que usted hace en lo
espiritual afecta en lo terrenal, todo lo que ate en el cielo será atado en la tierra, la oración
que hace en la tierra sube a los cielos, esa silla en la que está sentado aquí en la tierra es lo
que dice la Palabra que estamos sentados en lugares celestiales con Cristo Jesús.

Hay dos mundos en los cuales usted interactúa, usted nació en el mundo físico cuando su
madre lo dio a luz pero nació al mundo espiritual cuando recibió a Jesús en su corazón,
usted tiene dos vidas, una física y una espiritual.

Usted tiene dos vidas y en el mundo espiritual hay batallas de la fe y hay un enemigo, el
cual es el diablo, la buena noticia es que aunque sí tenemos un enemigo experto que tiene
años de tratar de perfeccionar sus tácticas un enemigo astuto, la buena noticia es que ese
enemigo fue derrotado en la Cruz del Calvario y está vencido, ese enemigo no tiene
potestad sobre usted.

Quiero darle algunos principios cristianos que lo hacen ser libre de todo lo que tiene que
ver con el diablo, estos principios lo harán más poderoso que estar reprendiendo a cada
rato, la Biblia no nos mandó a reprender, reprender significa “regañar”. El Señor Jesús lo
mandó a echar fuera demonios, no a reprender. Regañe a sus hijos, edúquelos, pero al
diablo sáquelo de su vida, échelo.

Principio Nº 1. Obediencia

Santiago 4:7-8.
Si usted se somete a Dios el diablo huye. El primer principio poderoso es la obediencia a
los mandatos de Dios, la Biblia no enseña la independencia del cristiano, enseña la
dependencia del cristiano a Dios, cuando usted se somete a la autoridad y se sujeta a él el
diablo huye, si a algo le teme el diablo es a los cristianos obedientes a los mandatos de
Dios.

Cuando usted empieza a poner por obra los mandatos de Dios el diablo huye y la
desobediencia es carnada para el diablo, la desobediencia lo atrae, la obediencia lo aleja,
porque cuando usted empieza caminar en obediencia a Dios entonces la autoridad de Dios
comienza a fluir en usted, cuando nosotros le hablamos al diablo en el nombre de Jesús, lo
que usted le dice al diablo es que usted está hablando en representación de Jesús, usted le
dice: “diablo me voy a poner en lugar de Jesús, en su nombre y te voy a decir esto”.

Si usted es una persona que camina en obediencia a Dios el diablo va a ver en usted la
autoridad de Cristo, es allí cuando él huye. Si usted no camina en obediencia a Dios el
diablo no va a temer a nada de lo que usted diga, por más que usted mencione el nombre de
Jesús en su oración. La obediencia le da poder en el mundo espiritual.

Principio Nº 2. El Perdón.

2º Corintios 2:10.
El perdón le abre las puertas a la gracia de Jesús, la falta de perdón se las cierra a la gracia y
las abre a las artimañas del diablo.

Ministrando a través de los años a gente que ha sido atormentada por un demonio, me he
dado cuenta que hay personas poseídas o atormentadas por un demonio, son dos cosas
distintas, las atormentadas están torturadas por un demonio, el demonio está
constantemente recordándole algo a cerca de su vida, estas personas son las que están
desesperadas y me he dado cuenta que ese tormento se origina en una semilla de amargura,
en algún momento de su vida no perdonaron, esos recuerdos empiezan a martillarte todos
los días, si hay algo que tu recuerdas todos los días y te causa dolor allí hay falta de perdón
y muchos de esos hechos el diablo te los recuerda a cada rato.

Una vez ministré a un líder en un encuentro y él empezó a gritar y le pregunté que qué le
había pasado y me contó que cuando era niño fue a un campamento y en la noche estaba
acostado y sentí como el líder de ese campamento estaba abusando de mí, toda la vida
pensé que no era hombre y para demostrar que sí era hombre empecé a involucrarme en las
artes marciales, tuvo novia sólo para demostrarse que sí era hombre, ese hecho lo estaba
atormentando, hasta que él decidió perdonar a esa persona. La falta de perdón no le hace
daño a quien te ofendió, te hace daño sólo a ti, porque la falta de perdón te quita el perdón
de Dios a ti y te añade el tormento del diablo.
La Biblia dice “airaos pero no pequéis, ni des lugar al diablo” cuando usted se enoja o está
molesto con alguien y permite que la molestia dure más de una noche el diablo se da cuenta
y aprovecha a llegar con usted a darle ideas de la otra persona. Por eso cuando está enojado
le cuesta dormir, es en la noche cuando los pensamientos empiezan a atacarlo. Pero cuando
usted perdona, Jesús viene a su corazón, la paz de Jesús se posa en su corazón, tiene paz en
su corazón y en su mente y el diablo huye, si va a tener una batalla con el diablo no le dé
una ventaja a él, así que perdone.

Principio Nº 3. No Culparte por el Pasado, Debes ver el Futuro

Apocalipsis 12:9-11.
Usted ha vencido al diablo por la sangre de Jesús y por su testimonio, el diablo acusa a los
cristianos de día y de noche, entonces el Señor que dio la vida por usted, espera que usted
llegue con él y le diga “si esos pecados son ciertos, lo que el diablo dice es verdad, pero
Jesús derramó su sangre en la cruz del calvario y por eso he sido limpiado de toda maldad.
Cuando comienza a hablar eso, derrota al diablo, el mismo diablo quiere acusarlo a cerca de
los pecados que usted ha cometido, la respuesta que debe darle es: “El Señor Jesús derramó
su sangre para el perdón de mis pecados, tomó mis pecados los echó al fondo del mar y ya
no se acuerda de ellos y yo tampoco”.

Principio Nº 4. Fe

1º Pedro 5:8-11.
Sí hay momentos en los que el diablo anda buscando a quien devorar, el diablo busca que
dejes de creer, pero si tu te plantas firme en la fe, el diablo huirá de ti, él quiere ver cómo te
derriba la fe y por eso te siembra la duda, pero cuando estás firme en medio de la prueba,
de los problemas, sufrimientos, adversidades, enfermedades, pero te paras firme y dices “el
Señor es mi sanador” el huye porque sabe que no te hará caer. Puedes ver a tu familia con
problemas pero le dices “Escúchame bien satanás la palabra dice que yo y mi casa seremos
salvos” cuando el diablo oye esto, huye. El diablo está derrotado.

Somos más que vencedores en Cristo Jesús.

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