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Criminal e INTERPOL
Observatorio del Delito
Director General Policía Nacional ELABORACIÓN Y REDACCIÓN
General OSCAR ADOLFO NARANJO TRUJILLO
Subteniente JUAN APARICIO BARRERA
Subdirector General Policía Nacional Magíster en Seguridad y Defensa Nacionales
Mayor General RAFAEL PARRA GARZÓN Analista Observatorio del Delito
Inspector General Subcomisario VÍCTOR LEONEL VELÁSQUEZ GUEVARA
Mayor General ORLANDO PÁEZ BARÓN Especialista en psicología jurídica y forense
Director de Seguridad Ciudadana Docente Escuela de Investigación Criminal
Brigadier General JOSÉ ROBERTO LEÓN RIAÑO ANA MARÍA GUERRERO FONSECA
Director de Investigación Criminal e INTERPOL Especialista en psicología jurídica y forense
Brigadier General CARLOS RAMIRO MENA BRAVO Asesora Policía Judicial para Adolescentes
dijin.arida-observatorio@policia.gov.co
Dirección postal:
Observatorio del Delito -DIJIN-, Policia Nacional.
Avenida Eldorado N° 75-25, barrio Modelia,
Bogotá, D. C., Colombia
CONTENIDO
PREÁMBULO 5
INTRODUCCIÓN 7
1. Teorías del crimen juvenil 8
2. Normas penales sobre niños, niñas y adolescentes 12
3. Niños, niñas y adolescentes como victimas, victimarios y autovictimarios 14
CONCLUSIONES 18
BIBLIOGRAFÍA 22
PREÁMBULO
General Oscar Adolfo Naranjo Trujillo
Director General Policía Nacional
La protección integral de los derechos de los niños, niñas y adolescentes es actividad prioritaria en el
Estado colombiano, que constitucionalmente está alineado con la normatividad internacional sobre
esta población etaria, como la Convención sobre los Derechos de los Niños.
Solo basta recordar, los esfuerzos y compromisos de cientos de policías y programas que han que-
dado en la memoria colectiva de los colombianos, y de programas banderas que han permitido el
acercamiento, educación y el trato especial a esta población.
Es así, que además de acciones prácticas dentro de su obligatoriedad, también la Policía Nacional
ha promovido diversos estudios sobre esta población, que permiten la elaboración de diagnósticos
y de contribuir en las políticas públicas dirigidas a esta franja etaria.
Para complementar estos estudios, en esta oportunidad, se hace un análisis teórico, jurídico y esta-
dístico de la participación como víctimas y victimarios de los niños, niñas y adolescentes en el país,
en diversos delitos entre los años 2003 y 2010; en especial, aquellos relacionados con los delitos
sexuales, la violencia intrafamiliar, el homicidio común y las lesiones personales. Estos datos son
examinados desde teorías de la criminología que intentan explicar conductas desviadas o trasgre-
siones al ordenamiento penal por parte de esta población etaria.
Dado el grado de desagregación que permiten las bases de datos institucionales, el fenómeno se
puede observar por concentraciones de los hechos, que en nuestro país corresponde a las grandes
ciudades, la participación por género, el nivel de participación de la población y otra información que
resulta relevante para la formulación e implementación de políticas públicas en el país.
Para los lectores y analistas de estos fenómenos, que deberían ser todos los colombianos, este tra-
bajo es fuente de insumo y de reflexión para la prevención de las diferentes violencias que afectan a
los niños, niñas y adolescentes, en especial, la violencia sexual y las violencias dentro de la familia.
INTRODUCCIÓN
En atención a las directrices del Gobierno Nacional de incrementar las labores preventivas, disua-
sivas y reactivas frente a la criminalidad que involucra a la población juvenil; de tomar las medidas
que favorezcan una mayor protección de niños, niñas y adolescentes, y garantizar los derechos
especiales de que goza esta población, el Centro de Investigaciones Criminológicas (CICRI) y el
Observatorio del Delito de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN) han realizado
una serie de análisis sobre el fenómeno delincuencial juvenil.
Del mismo modo, facilitar la extracción y suministro constante de información estadística para di-
versos usuarios que frecuentan el tema de los menores de edad, así como el análisis descriptivo
de los datos estadísticos de la comisión de las conductas punibles de alto impacto social donde la
participación de esta población es considerable.
En este análisis, a partir de los datos estadísticos extraídos del Sistema de Información Estadístico,
Delincuencial, Contravencional y Operativo de la Policía Nacional (SIEDCO) y del Observatorio del
Delito, se demuestra la participación de niños, niñas y adolescentes, como víctimas y victimarios, en
los diversos delitos ocurridos en el país durante los años 2003 a 2010. De igual manera, pretende
ser insumo para la elaboración de políticas públicas y la toma de medidas por parte de la Policía
Nacional frente a la delincuencia juvenil y la afectación de los delitos a los niños, niñas y adolescentes.
La primera parte del mismo realiza un breve resumen de teorías de la criminología que intentan ex-
plicar conductas desviadas en la población juvenil. La segunda parte indaga por la evolución de la
norma penal en Colombia en relación con el tratamiento del adolescente infractor. La tercera parte
es una descripción estadística de los datos suministrados por la Policía Nacional, que muestra la
participación de niños, niñas y adolescentes en delitos de alto impacto, como víctimas, victimarios y
autovictimarios.
Entre los desarrollos recientes de las teorías De acuerdo con los planteamientos teóricos de
criminológicas1 están aquellos que tratan de la psicología evolutiva y la teoría de Piaget3, se
explicar el fenómeno delincuencial en las dife- establece que los jóvenes entre 14 y 20 años
rencias de la criminalidad en los momentos del son adolescentes que pueden efectuar opera-
ciclo vital. Estas teorías se centran en la propen- ciones mentales abstractas, hacer hipótesis y
sión a la criminalidad y sus variaciones a lo largo deducir. Sin embargo, no cuentan con todos los
de la vida; se identifican como principales varia- contenidos de la edad adulta; por lo tanto, su
bles: la edad de inicio, las tasas de delincuencia estructura mental aún está en formación para
en periodos diferentes y la extensión de la carrera desenvolverse de forma adecuada con el medio
criminal. y las demás personas. Lo anterior se confirma
por los diferentes cambios biológicos que se dan
Una de estas es la teoría de las dos trayectorias, en esta etapa y que concluirán en la adultez.
donde se define que algunas personas tienen
patrones más o menos constantes de mala con- La adolescencia es, además, la etapa en la que
ducta a lo largo de la vida, mientras otras atra- se viven muchos conflictos y cambios compor-
viesan etapas limitadas en las que tienen altas tamentales, producto de moldeamientos y
posibilidades de delinquir, de manera especial modelamientos, donde el sujeto construye su
en los años de adolescencia. propia personalidad, asume retos, hace valer
sus opiniones y exige el respeto de sus opinio-
Otras teorías enfatizan que los patrones de las nes entre los adultos y pares. La interacción
carreras criminales son de manera fundamental social en el adolescente se afirma en la forma en
una consecuencia de la naturaleza y la calidad que es concebido por los demás, y que afecta
de los lazos sociales de un individuo. Así, en- también la manera en que se concibe a sí mis-
tre los factores que conllevan a que los menores mo4. El adolescente, en su afán de ser aceptado
cometan delitos o acciones criminales están2: 1. socialmente y en un grupo determinado, asume
Aquellas conductas que pueden ser reproduci- posturas determinadas de acuerdo con la pre-
das por el menor en la adultez, como el maltrato sión del grupo.
físico. 2. Venir de hogares en los que los padres
realizan conductas delictivas. 3. Imitar, por parte En esta explicación biológica del comportamien-
del menor, el comportamiento antisocial de indi- to de la población juvenil, Bornas y Servera5, en
viduos que influyen sobre ellos. 4. Estar expues- investigación sobre la especialización de cada
tos a conductas negativas para el menor, como hemisferio, explican que el hemisferio izquierdo
el consumo de alcohol, la mala supervisión, el maneja las funciones de lenguaje, capacidad
rechazo de los padres, la baja adhesión social, auditiva, procesos semánticos, sensoriales y
entre otros. 5. Aspectos biológico, social y cog- simbólicos, y el hemisferio derecho las capaci-
nitivo. A continuación se revisarán algunas de dades bioespaciales y procesos globales de la
estas teorías. información. De tal forma, los sujetos reflexivos
se apoyan más en el hemisferio izquierdo y los
impulsivos en el derecho. Estos autores han
considerado que la ausencia de una adecuada
reflexión es una de las causas de la conducta
1 Tittle, Charles (2006). ”Los desarrollos teóricos de la crimino-
logía”. En: Justicia penal siglo XXI. Una selección de Criminal Jus- 3 Piaget, J. (1968). Los estadios del desarrollo intelectual del
tice 2000. National Institute of Justice – US Department of Justice. niño y adolescente. La Habana: Ed. Revolucionaria.
España, pp. 1-54. 4 Bandura, A. (1982). Teoría social del aprendizaje: mecanismos
2 Factores determinantes del fenómeno de la delincuencia juve- de agresión. Madrid: Editorial Espasa.
nil en la ciudad de Bogotá (2008) (pp. 12-13). Dirección de Investi- 5 Bornas, X., Servera, M. (1996). La impulsividad infantil. Espa-
gación Criminal, Policía Nacional. Imprenta Nacional. ña: Siglo XXI Editores.
antisocial, delincuencial, del consumo de sus- involuntaria; el carácter compulsivo tiene una
tancias estupefacientes, lo que muestra falta de gran fuerza, impacta la totalidad de la personali-
reflexión acerca de las consecuencias poten- dad y la dirige a hacer daño, como la agresividad
ciales de dicho consumo. Otras problemáticas y violencia hacia los demás; el sujeto compulsi-
asociadas a la falta de control de impulsos en vo no puede ser responsable de cumplir las nor-
adolescentes son la paternidad prematura, la mas, ya que no es libre, es pasivo, víctima del
violencia en diferentes contextos (familiar, esco- impulso, que afecta su equilibrio mental8.
lar…) y el bajo rendimiento académico.
Los psicólogos evolucionistas han tratado de in-
Entre las causas biológicas están las lesiones y tegrar la influencia de la biología, el entorno y la
complicaciones asociadas al embarazo y el par- importancia evolutiva, y llegado a considerar que
to, con consecuencias neurológicas que podrían la agresividad se basa en la historia de la evolu-
conducir a la violencia; de igual forma, la mala ción del ser humano y está en función tanto de
nutrición en las etapas de desarrollo fetal, infan- la biología como de la adaptación al ambiente.
cia y adolescencia.
En un mundo en el que la violencia parece au-
Del mismo modo, progenitores con anteceden- mentar en todas sus formas, Erich Fromm trata
tes de enfermedad mental heredan a sus hijos esta inquietante cuestión, demuestra que existe
de forma genética tendencias similares a la en el hombre agresión de índole defensiva, des-
enfermedad que padecen, además que por mo- tinada a garantizar su sobrevivencia, condición
delamiento se pueden aprender dichas conductas que comparte con los animales. Por otra parte,
asociadas a la enfermedad mental. demuestra una agresión maligna, sin objetivo
biológico o social, que es particularmente huma-
Según Soria y Hernández, los estudios de na y forma parte de su carácter, como el amor, el
homocigotos y adoptados indican que “la heren- odio, la ambición, la codicia, entre otros.
cia es un factor importante en la génesis de la
delincuencia, pero no el único, y existen dudas Asimismo, E. Fromm analiza la destructividad de
en cuanto al grado de influencia, debido a los los sueños, evidenciándola en muchos pacien-
problemas metodológicos de estos estudios”6. tes y figuras históricas. Lo anterior, para explicar
la compulsión que se genera en ambientes hos-
También se ha encontrado relación entre el
tiles y violentos.
funcionamiento del sistema monoaminérgico ce-
rebral, la actividad de su neurorregulador como Investigaciones colombianas, como la del psi-
la monoaminoxidasa y las hormonas gónadas cólogo E. Bustamante9, profesor de neurología
con los rasgos de sociabilidad, búsqueda de en la Universidad de Antioquia, explican las fun-
sensaciones de dominancia, agresividad y con- ciones de las neuronas espejo, que se activan
ducta sexual7. cuando el sujeto realiza una determinada acción
u observa su ejecución; las acciones ejecutadas
Otras teorías apuntan al consumo de ciertas sus-
por otros se convierten en mensajes que son en-
tancias químicas que alteran el comportamiento
tendidos por el observador, lo que estimula de-
de los individuos, como el consumo de sustan-
terminada acción y causa acciones de imitación,
cias psicoactivas (SPA), que suele generar com-
como ocurre en los comportamientos delictivos
pulsión. Está la fuerza que se genera de forma
en adolescentes, que actúan presionados por el
grupo de pares.
6 Soria, V., Hernández, S. (1994). El agresor sexual y la víctima
(22 p.). Barcelona, España: Ed. Boixareu. 8 Fromm, E. (2004). Anatomía de la destructividad humana.
7 Aluja, A. (2002). Relaciones entre la estructura del 16pf-5 y el México: Siglo XXI Editores.
modelo de cinco grandes factores de personalidad. España. Dial- 9 Bustamante Zuleta, E. (2007). El sistema nervioso. Desde las
net. Boletín de psicología, ISSN 0212-8179, Nº. 75, 2002 , págs. neuronas hasta el cerebro humano. Medellín: Editorial Universidad
7-18. de Antioquia.
¿Dónde, cuándo y contra quién representar es- En algunos casos los adolescentes que con-
tos comportamientos? Wexle y Wellan12 explican sumen SPA, y de familias con baja capacidad
que el joven aprende a ser violento porque está económica, delinquen para conseguirlas15. Las
inmerso en conductas violentas en sus familias causas para que los NNA consuman sustancias
y comunidades. La investigación de los actos psicoactivas son muchas; entre ellas están: po-
violentos debe ser abordada de forma integral y bre motivación y bajo rendimiento escolar, des-
multidisciplinaria, por cuanto el ser humano está escolarización, mal manejo y poca supervisión
definido como un ser biopsicosocial,el cual se ve del tiempo libre, pares negativos, falta de metas
afectado por elementos intrínsecos y extrínsecos y proyectos de vida, alta permanencia en la ca-
que determinan su conducta. lle, baja autoestima y estimulación negativa, poco
control de impulsos, maltrato de cualquier tipo y
Como afirma Ressler: “Más del 40% de los ase- limitaciones físicas o mentales.
sinos afirmaron haber sufrido golpes y maltra-
to físico en la infancia, mientras que más del También, en ocasiones, están las causas educa-
70% dijeron haber sufrido o presenciado actos cionales, como conducta correctiva no adecua-
sexualmente estresantes (…)”13. Se asume que da en la etapa del desarrollo, pautas de crianza
la violencia es una de las formas de expresar equivocada, pocos conocimientos de los profe-
inconformismo a la imposición de normas, hora- sores y profesionales de la salud y adultos sobre
rios y figuras de autoridad. el proceso de adolescencia.
El consumo de SPA está asociado con la con- La conducta delictiva expone a los NNA a mode-
ducta delincuencial. Los mensajes transmitidos los o ejemplos de ella (en los medios) si se pre-
a través de diferentes medios fortalecen la pre- mia el crimen (en las subculturas o pandillas) o si
vención de la drogodependencia, pues apoyan se generan pseudovalores (como el ‘machismo’).
la sensibilización de la sociedad acerca del pro-
blema del consumo y promueven su participa- La teoría de la tensión emocional señala como
ción activa en tareas que permitan evitarlo por factores de riesgo para la conducta delictiva el
parte de menores de edad. El consumo presen- rechazo de los padres, la supervisión y disciplina
ta conductas asociadas, como el incumplimiento estricta, el haber recibido abuso por parte de otros,
de las pocas obligaciones que tienen los NNA, las experiencias negativas en la escuela, malas ca-
problemas de salud, afectación de la memoria y lificaciones, problemas con los maestros, el ver el
el aprendizaje, disminución de la motivación, bajo colegio como aburrido o inútil y el subempleo. El
rendimiento escolar, sin proyectos de vida, son hogar desintegrado, o la falta de hogar, el abuso
activos sexuales y tienen historial en la Policía14. de parte de compañeros o ‘amigos’, haber sido
víctima de un crimen, las experiencias de discri-
Los NNA que consumen SPA no tienen concien- minación por causas raciales, religiosas u otras16.
cia de sus actos, pierden el control de impulsos,
Se presenta una escala de conductas asociadas
y en estado de ansiedad (abstinencia) pueden
al consumo de SPA o adquiridas en los patro-
ser agresivos, muy sugestionables y depresivos;
nes de comportamientos sociales y familiares,
estos estados les llevan a cometer ilícitos.
en ocasiones delictivos, que pueden realizar los
NNA, como dañar paredes, robar dinero, ofen-
der a otra persona, causar lesiones, conducir
12 Wexler, D., Wellan, Ch. (2004). Sin golpes (p. 10). México:
W. W. Edit. Pax.
sin licencia, identificarse con documento falso y
13 Ressler, R. (2005). Asesinos en serie. España: Ed. Ariel.
14 Estimación de tendencias en la infracción y contravención 15 Melgosa, J. (2007). El arte de saber educar. Madrid: Editorial
entre los niños, niñas y adolescentes (NNA) y ponderación de la Safeliz. Padres Terciarios Capuchinos.
calidad de la respuesta institucional en Bogotá. Págs. 58, 68, 225. 16 Sartre (1981). Teoría de las emociones. Madrid, España: Edi-
UNICEF, 2001. Ed. Guadalupe. torial Alianza.
Autores como A. Bandura17 mencionan los me- Demuestran dificultad de internalizar las
canismos por los que una persona puede auto- normas, lo que causa desadaptación social.
justificar una conducta reprochable; entre ellos,
son importantes aquellos que hacen relación a la Muestran alto nivel de frustración y deses-
acción (restauración cognitiva de la acción, auto- peranza en el futuro.
justificación y atenuantes) y aquellos que hacen Presentan altos niveles de impulsividad,
mención a las consecuencias (el afecto no se que no les permiten pensar en las consecuen-
considera o minimiza o cosifica y se culpabiliza cias de sus actos.
de la acción). Crean pensamientos que interpre-
tan el suceso delictivo como una provocación y Suelen ser activos sexuales y, por lo tanto,
aparecen ideas que expresan ira o frustración. padres muy jóvenes, con lo que se hacen a
obligaciones a muy temprana edad, lo que
Las creencias sobre la aceptación delincuencial en altera de forma notoria el desarrollo normal de
el contexto, valores laxos sobre la honradez, por sus etapas de crecimiento.
ejemplo ‘no se debe robar’. Pero cuando los NNA
llegan al hogar con dinero no se les pregunta de Desde luego, estas teorías no son generalizado-
dónde provino este, por lo general se calla y se le ras ni pretenden estigmatizar segmentos de la
agradece por colaborar con los gastos del hogar. población por su edad, solo intentan explicar el
Entonces se crea déficit de valores prosociales en fenómeno de la delincuencia en algunos indivi-
la personalidad del sujeto que está en formación y duos en etapas tempranas del ciclo vital.
que muy difícilmente se adquirirán en la adultez.
También influyen en la actitud de rebeldía ante
Suele presentarse distorsión cognitiva en el jo- las figuras de autoridad, la represión social, la
ven infractor de la ley, por el consumo de SPA exclusión, la marginación y demás formas de in-
(impulsividad, nerviosismo, déficit de atención, equidad social18.
violencia, trastornos asociados al consumo, hi-
peractividad, violencia, entre otros) o deficientes
pautas de crianza, donde el joven internaliza el 2. NORMAS PENALES SOBRE NIÑOS, NIÑAS Y
delito como forma normal de vida. ADOLESCENTES
Es importante tener en cuenta que otros factores En Colombia, desde el siglo XIX, los adolescen-
afectan también la cognición del menor infractor, tes que infringían la ley penal no tenían trata-
como: miento jurídico y sancionatorio diferente que el
otorgado a los adultos. Situación que cambia a
partir de 1920, cuando se crea una jurisdicción
18 Yanguas, J. J., & Leturia, F. J. (1998). Unidades de convi-
vencia: una alternativa residencial para personas dependientes.
17 Bandura, A. Op. cit. Documentación social. Madrid: Cáritas española.
especializada para los adolescentes infractores servicios a la comunidad, libertad asistida, in-
de la norma penal19. Desde entonces, a los me- ternación en medio semicerrado y privación de
nores de edad se les consideró como inimputa- la libertad. Sobre la privación de la libertad en
bles, porque aún no eran ciudadanos plenamen- centro de atención especializada, solo se aplica
te conscientes de sus actos, es decir, fueron vis- a adolescentes que superen los 16 años y sean
tos como objetos de protección, no como sujetos menores de 18.
de derechos20.
Del mismo modo, la privación de la libertad se
Esta situación implicó, por muchos años, que aplica a los mayores de 16 y menores de 18
adultos inescrupulosos se valieran de los NNA que sean hallados responsables de la comisión
para involucrarlos en actos delictivos, dada la de delitos cuya pena mínima sea o exceda los
falta de sanción con medidas privativas de la li- 6 años de prisión. En estos casos la privación
bertad hacia esta población. de la libertad tendrá una duración de 1 hasta 5
años. Y en relación con delitos de especial gra-
A partir de 2006, con la promulgación del ‘Códi-
vedad, como el homicidio doloso, el secuestro y
go de Infancia y Adolescencia’ (Ley 1098 del 8
la extorsión, para adolescentes mayores de 14
de noviembre de 2006), se da un viraje en el tra-
y menores de 18 años, la privación tendrá una
tamiento penal a los NNA involucrados en con-
duración de 2 a 8 años.
ductas penales, ya que a los adolescentes se
les considera como sujetos de derecho, suscep- Los topes máximos, en especial en relación
tibles de realizar hechos punibles y, por tanto, con el segundo bloque de infracciones, solo se
objeto de reproche a través de sanción. Es decir, aplicarán en casos excepcionales, donde me-
son considerados como imputables con capaci- dien circunstancias negativas en su realización,
dad de culpabilidad, pero disminuida y con espe- máxime teniendo en cuenta que la finalidad de
cial tratamiento. estas sanciones es pedagógica, no punitiva, y
que la regla en este sistema es la brevedad de
Desde luego, la filosofía de la Ley 1098 tiene
la privación de la libertad. También se debe te-
como finalidad garantizar a los NNA su pleno
ner en cuenta que parte de la sanción puede ser
desarrollo para que crezcan en el seno de la fa-
sustituida por las otras medidas señaladas en el
milia y de la comunidad, en un ambiente sano
inciso tercero del artículo 187 de la mencionada
y comprensivo, así como el ejercicio de sus de-
ley, y que la pena es modificable en función de
rechos y libertades consagradas en los instru-
las circunstancias individuales del adolescente y
mentos internacionales de derechos humanos,
de sus necesidades especiales21.
en la Constitución Política y en las leyes. Es ne-
cesario aclarar que esta ley, en el artículo 3, Con independencia de las medidas establecidas
establece como niño o niña a las personas entre para los NNA en la ley, la delincuencia juvenil
los 0 y los 12 años, y como adolescente a las para todo Estado es un grave problema, pues re-
personas entre 12 y 17 años de edad. De igual presenta un relevante sector de la criminalidad.
forma, establece un régimen de responsabilidad Además, las respuestas deben ser cautelosas a
penal para adolescentes (entre 13 y 17 años) y la hora de reaccionar frente al hecho delictivo, ya
sanciones aplicables a quienes sean declarados que una contestación enérgica del poder puniti-
con responsabilidad penal, con: amonestación, vo puede fácilmente transformar la situación en
imposición de reglas de conducta, prestación de un nuevo problema, como etiquetar de por vida
19 Sobre la historia jurídica del adolescente infractor de la ley al sujeto infractor como delincuente, lo que con-
penal colombiana, ver: Holguín Galvis, Guiselle N. (junio de 2010). duce su destino a la carrera criminal, con lo que
“Construcción histórica del tratamiento jurídico del adolescente in-
fractor de la ley penal colombiana (1837-2010)”. Bogotá. Revista esto supone para él y para la sociedad.
Criminalidad, No. 51, 287-306.
20 Ibíd., p. 287.
21 Lineamientos ICBF, 2007.
Para el 2008 se presentaron 1.204 homicidios Del 2003 al 2010 han resultado lesionados por
de NNA, y en el 2009 fueron 1.112; esto mues- diferentes motivos un total de 40.895 NNA, pre-
tra una reducción del 8% y representa 92 casos sentándose en estos años una participación en-
menos; sin embargo, la participación del 2007 tre el 11 y 14% del total de lesiones comunes.
al 2010 sobre el total de los homicidios se man-
tiene en el 7% para los menores de edad. En el Para el 2009 las unidades más afectadas por le-
2010 se presentaron 15.459 homicidios, de los siones personales a menores fueron la Metropo-
cuales 1.009 víctimas fatales fueron NNA, que litana de Bogotá, con 1.296 casos, seguida de la
corresponde a una participación del 7%. Metropolitana de Cali, con 683 casos, y el depar-
tamento de Caldas con 390 casos. En estas tres
Para el 2009, las unidades más afectadas y con unidades se concentran el 41% de los menores
mayor concentración de homicidios de NNA fue- lesionados.
ron la Metropolitana del Valle de Aburrá, con 185
y una participación del 17%; la Metropolitana de Es de resaltar que para el 2010 el 60% de las
Cali, con 175 y una participación del 16% del to- víctimas de lesiones son del género masculino
tal nacional de menores asesinados, seguida de y el 40% son del femenino. Y el 87% de los le-
la Metropolitana de Bogotá, con 96 y una partici- sionados estaban en edades entre 13 y 17 años,
pación del 9%. Es decir, la concentración de los es decir, los adolescentes fueron los más afec-
homicidios a NNA se presenta en las tres princi- tados.
pales ciudades del país: Medellín, Cali y Bogotá,
siendo este fenómeno principalmente urbano.
3.1.3. Delitos sexuales
54.984
52.825
40.040
46.527 47.945
35.812
tolerancia hacia estas situaciones; pero también
32.534
30.412
se puede interpretar como un aumento de este
4.983 4.025 3.789 5.876 6.057 4.839 5.755 5.571
delito contra los NNA en todo el país.
23 Los números de los artículos de este título son: Acceso carnal
0
2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 violento (Art. 205), Acto sexual violento (Art. 206), Acceso carnal o
acto sexual en persona puesta en incapacidad de resistir (Art. 207),
Lesiones comunes a menores de edad Acceso carnal abusivo con menor de catorce años (Art. 208), Actos
Lesiones comunes sexuales con menor de catorce años (Art. 209), Acceso carnal o
acto sexual abusivo con incapaz de resistir (Art. 210), Inducción
a la prostitución (Art. 213), Constreñimiento a la prostitución (Art.
Gráfico 2. Lesiones personales, 2003-2010 214), Trata de personas (Art. 215), Estímulo a la prostitución de
Fuente: Centro de Investigaciones Criminológicas DIJIN. menores (Art. 217), Pornografía con menores (Art. 218) y Turismo
sexual (Art. 219).
4.146
4.889 5.156 4.684 5.092 4.663 nuncias dado el paulatino grado de conciencia
3.075 3.186 3.457
que ha tomado la población colombiana para de-
nunciar la violencia en el hogar.
0
15.000 30.000
24.791
Gráfico 3. Delitos sexuales, 2003-2010 20.155 21.147 23.075
20.356
Fuente: Centro de Investigaciones Criminológicas DIJIN.
13.571
11.070 11.863
Comparando 2008 y 2009, los delitos sexuales con- 657 1.153 2.062 2.021 1.935 2.034 1.665
769
tra menores presentaron un aumento del 9%, al pa-
0
2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010
sar de 4.684 menores afectados por estos delitos a
Violencia intrafamiliar contra menores de edad
5.092 casos. Sin embargo, entre el 2009 y 2010, se
Violencia intrafamiliar
presentó una reduccción del 8%.
Gráfico 4. Violencia intrafamiliar, 2003-2010
Para el 2009 las unidades más afectadas por este Fuente: Centro de Investigaciones Criminológicas DIJIN.
tipo de delitos a NNA son la Metropolitana de
Bogotá, con 648 casos, con una participación sobre
Al comparar 2008 y 2009, este delito ha aumen-
el total nacional del 13%, y destacándose la comi-
tado en un 5% en relación con los NNA víctimas.
sión del delito de actos sexuales con menor de 14
La participación de este es significativa, pues
años en 363 casos en 2009; sigue en frecuencia el
departamento del Meta, con 377 hechos y una par- para el 2008 la de los NNA sobre los totales de
ticipación del 7%, siendo el delito sexual que más denuncia de violencia intrafamiliar fue del 9%, y
afecta a esta unidad el de actos sexuales con me- para el 2009 del 8%.
nor de 14 años, en 218 casos, y la Metropolitana En 2009 las unidades más afectadas por violen-
de Cali, con 356 casos y una participación del 7%, cia intrafamiliar contra NNA fueron la Metropolita-
siendo el delito sexual con mayor incidencia el de
na de Bogotá, con 349 casos (17%), seguida de
actos sexuales con menor de 14 años, en 173
la Metropolitana de Cali, con 211 hechos (10%),
casos.
y el departamento del Meta con 159 (8%).
Para el 2010 el 85% de las víctimas de delitos
Para el 2010 el 62% de los NNA víctimas de
sexuales que son NNA corresponden al género
violencia intrafamiliar corresponden al género
femenino. Y el 74% de las víctimas de estos delitos
están en edades entre los 0 y 12 años. Esto indi- femenino. Y el 65% de estas están en edades
ca que las víctimas corresponden a la población entre 13 y 17 años.
más vulnerable por edad y género.
3.2. Las niñas, niños y adolescentes como
victimarios
3.1.4. Violencia intrafamiliar
Para dar una idea de la magnitud de la participa-
Este delito es quizás el que mayor repercusión
ción de NNA en delitos, la Policía Nacional, entre
y afectación tiene sobre los NNA, y aunque en
el 2003 y el 2010, aprehendió por la comisión de
ocasiones no se comete de manera directa
diversos delitos un total de 248.194 NNA.
contra ellos, genera graves secuelas en su de-
sarrollo psicológico, debido a la descomposición
que este conlleva sobre el núcleo familiar.
2010
DESCRIPCIÓN DEL DELITO NIÑAS-NIÑOS ADOLESCENTES
FEMENINO MASCULINO FEMENINO MASCULINO TOTAL
ARTÍCULO 376. TRÁFICO, FABRICACIÓN O PORTE DE ESTUPEFACIENTES 8 23 705 7.357 8.093
ARTÍCULO 239. HURTO PERSONAS 6 18 579 6.454 7.057
ARTÍCULO 365. FABRICACIÓN, TRÁFICO Y PORTE DE ARMAS DE FUEGO O MUNICIONES 1 3 137 2.104 2.245
ARTÍCULO 111. LESIONES PERSONALES 0 2 181 951 1.134
ARTÍCULO 239. HURTO ENTIDADES COMERCIALES 2 5 217 521 745
ARTÍCULO 265. DAÑO EN BIEN AJENO 0 7 37 485 529
ARTÍCULO 103. HOMICIDIO 0 0 17 319 336
Tabla 2. Delitos de mayor participación en aprehensión de niños,
niñas y adolescentes
Fuente: Centro de Investigaciones Criminológicas DIJIN.
1.753
de internamiento en ciudades como Bogotá, Cali 1.324 1.408 1.437 1.543 1.639
te estas ciudades las que mayor concentración 207 203 213 231 275 198
217 178
presentan de aprehensiones de NNA.
0
las sustancias psicoactivas. De igual forma, los Fuente: Centro de Investigaciones Criminológicas DIJIN.
CONCLUSIONES
Los niños, niñas y adolescentes gozan de especial protección en el ordenamiento constitucional co-
lombiano, y ante algún delito, bien sea como víctima o como victimario, es obligatorio el tratamiento
especial por parte de las autoridades públicas.
La situación anterior, es capitalizada por organizaciones delincuenciales para usar a dicha población
en la comisión de ilícitos o por los mismos adolescentes para evitar la severidad del proceso penal.
En tal sentido, se ventilan cambios en el ordenamiento legal colombiano (Código Penal y Código de
la Infancia y la Adolescencia) a fin de afectar a los delincuentes y proteger a las víctimas, mediante
el incremento la responsabilidad penal de los adolescentes y de endurecer las penas para las orga-
nizaciones e individuos que usen en ilícitos a las NNA.
Si bien, el fenómeno delincuencial en NNA se traduce en situaciones vulneradoras del orden social
y jurídico; es fruto de muy diversas circunstancias que interactúan entre sí, y no se puede atribuir a
una causa aislada.
Frente a esto, las teorías que intentan explicar las conductas sociales desviadas por parte de pobla-
ción etaria que aún no alcanza la mayoría de edad jurídica son amplias y atraviesan por explicacio-
nes biológicas, cognoscitivas y sociales.
De cara a la realidad del país, los NNA son tanto víctimas como victimarios en la comisión de ilícitos.
Y se destaca la afectación de esta población en delitos como homicidio, lesiones personales, abusos
sexuales y violencia intrafamiliar.
Sobre estos últimos, son los delitos de mayor afectación a la población de NNA, así los abusos
sexuales, tienen una participación que oscila entre el 70% y 76% en los últimos siete años, concen-
trándose en población infantil de 0 a 12 años. De igual forma, la violencia intrafamiliar se concentra
Desde luego, la violencia intrafamiliar y los abusos sexuales a los NNA repercuten en otros tipos de
abuso infantil como el maltrato psicológico/verbal y la explotación comercial. Además, la violencia
de pareja y el maltrato infantil tiene impacto en el capital social y humano, contribuyendo a las
cifras de niños en la calle. También, este tipo de violencia hace más proclives a los NNA al abuso del
alcohol, las drogas ilícitas, el unirse a pandillas o grupos al margen de la ley -como las guerrillas-, y
cometer delitos.
De tal forma, esta violencia madre (violencia intrafamiliar y abuso sexual) puede ser el derrotero de
conductas desviadas en el resto de la vida de un individuo o de la revictimización de la persona, prin-
cipalmente, en los primeros años de vida, frente a lo cual, la Policía Nacional y las instituciones que
atienden a esta población deben prestar mayor atención a la población del género femenino como
víctima, como indagar por el abuso infantil en casos de violencia intrafamiliar. La atención temprana
en los casos de violencia intrafamiliar puede prevenir situaciones delictivas como el abuso sexual, la
prostitución o la pornografía infantil o fenómenos que dejan expuestos a los NNA como el abandono
del hogar, del colegio o la mendicidad.
Contrario a la participación por género en los delitos sexuales y la violencia intrafamiliar, en delitos
como el homicidio y las lesiones personales, la mayoría de las víctimas corresponden al género
masculino. Para el 2010, la participación en homicidio fue del 85%, y en lesiones personales, del
60%. Aunque la participación de estos no es mayoritaria sobre el homicidio (aunque afecta amplia-
mente la percepción ciudadana de seguridad) el que exista participación de NNA en valores abso-
lutos entre los 2.000 y 1.000 casos de homicidio año a año en los últimos siete, son indicador de la
violencia del país. En el caso del homicidio y las lesiones son fenómenos urbanos, que tienen como
víctimas principales al género masculino, de estratos bajos, que está ligado a otros fenómenos como
la deserción escolar, la falta de capacitación, el empleo del tiempo libre, y situaciones sociales y eco-
nómicas de barrios marginados. Ahora bien, existe concentración de la comisión de delitos a NNA en
las grandes ciudades del país, como Bogotá, Medellín y Cali. De igual forma, los menores infractores
de la ley se aglutinan en las grandes ciudades. De tal suerte, que los programas y políticas públicas
diseñados en seguridad, convivencia y bienestar de esta población deben dirigirse a estas ciudades,
y dentro de ellas, las comunas y barrios más afectados, que a menudo corresponde a las localidades
urbanas de más bajos ingresos.
Del mismo modo, los NNA victimarios han sido aprehendidos principalmente por los delitos de tráfi-
co, fabricación o porte de estupefacientes, hurto a personas, y fabricación, tráfico y porte de armas
de fuego o municiones, que corresponden a los delitos de mayor incidencia en el país. Asimismo, el
91% de los NNA aprehendidos pertenecen al género masculino.
En este caso la población de NNA del género masculino son principalmente victimarios, sin embargo
como víctimas en delitos sexuales y violencia intrafamiliar el género más afectados es el femenino y
frente al homicidio y las lesiones personales el masculino.
De tal suerte, las políticas públicas para atención de víctimas (prevención y reacción) deben desple-
garse principalmente a los delitos sexuales y la violencia intrafamiliar contra niñas y adolescentes, y
las políticas públicas con relación a la protección de la vida en NNA debe dirigirse al género mascu-
lino en las ciudades capitales de departamento. Y las políticas públicas y programas de prevención
del delito en NNA deben dirigirse a la población masculina, en situaciones como deserción escolar,
empleo, capacitación, deporte, manejo del tiempo libre, y prevención de la drogadicción. Esto indica
prestar mayor atención al crimen juvenil, especialmente en varones.
En todo caso, este tipo de trabajos deben estimularse y continuar a fin de ahondar en los elementos
de estudio de esta población a fin de diseñar y ejecutar mejores políticas públicas en seguridad para
un fenómeno que afecta y atañe a la sociedad colombiana.
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