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1.

Resumen

Lorca manifiesta que siente desgracia por aquellos que no disfrutan de lo hermoso de la
vida. Si se encontrara tirado en la calle no pediría pan sino medio pan y un libro, porque los
libros evitan a los humanos el convertirse en máquinas del Estado. Siente más pena de
aquel que no posee conocimientos que de aquel que tiene hambre, pues está puede ser
saciada fácilmente. Los libros abren horizontes, calman la agonía de los que sufren. Y dijo
Menéndez Pidal que el lema de la República debía ser:​ “​Cultura”.

2. Tema

El texto trata la necesidad de poseer libros que nos aportan sabiduría, cultura, horizontes y
nos abren la mente.

3. Estructura

Nos encontramos ante un texto inductivo, en el que la idea principal queda clara al final del
texto: ‘’Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura
poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.’’ Para Lorca, las
necesidades físicas son rápidamente sanadas, pero la necesidad de la mente, sin
conocimiento, dura una eternidad.

La introducción comienza con las palabras de Lorca, primer párrafo, en las que expresa su
melancolía cuando es feliz y quiere que sus seres queridos lo sean como él.
El nudo del texto comienza en el segundo párrafo, hasta el penúltimo, donde el autor
argumenta el porqué de su necesidad de lectura y donde se encuentra la tesis.
Por último, la conclusión abarca el último párrafo; sólo por medio de la cultura el pueblo
dejará de ser ignorante y manipulable para tener opiniones y mentes abiertas.

4. Comentario crítico

La mayoría de veces, las prisas, las ocupaciones y la superficialidad de nuestras ideas


impiden que tengamos un hueco que dedicar a la lectura. A la reflexión y la tranquilidad, el
momento donde nuestras mentes se abren para investigar más allá de lo superficial y
común.

Me es difícil comprender a aquellos que no disfrutan leyendo. Y les digo: ¿por qué? Es
como tener varias vidas a la vez.
Leer no sólo te proporciona sabiduría, te da cientos de cosas que no percibes cuando lees,
y que salen a la luz cuando redactas trabajos, observas tu ortografía… Es un aprendizaje
que no notamos mientras lo hacemos, pero que está ahí más que ninguno. Por el simple
hecho de tener un libro entre tus manos, tu cabeza se deja de preocupaciones para
centrarse en explorar el mundo creado en el libro, en imaginar cómo serán los personajes,
qué pasará en las siguientes páginas…

Alguien dijo una vez: ​el conocimiento es sabiduría. No nos cerramos sólo a los libros, sino a
periódicos, noticias, anuncios… Todo contribuye a poner en marcha nuestra cabeza como
un motor y a desarrollar todas las funciones de la misma.
No es importante el que más lee con ansia sino el que más disfruta leyendo. Tal y como
Lorca manifiesta, las necesidades físicas de los humanos son fácilmente calmadas con
comida, mantas si tenemos frío, o aire si tenemos calor. Pero la agonía que nos produce el
sentirnos ignorantes está relacionada con lo emocional y no es simplemente disipada con
cualquier cosa, sino por la ansia de querer más y más conocimientos incluso cuando
tenemos suficientes, porque el saber no ocupa lugar.

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