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Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales de Chile

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Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales
Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales de Chile (1875).jpg
Portada de la primera edición oficial de la Ley de Organización y Atribuciones de
los Tribunales, de 1875
Tipo Código procesal
Idioma Español
Redactor(es) Francisco Vargas Fontecilla
Promulgación 15 de octubre de 1875
En vigor 1 de marzo de 1876
Derogación 9 de julio de 1943
(Código Orgánico de Tribunales)
[editar datos en Wikidata]
La Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales de 1875 fue el primer
cuerpo legal chileno que reguló, de forma ordenada y sistemática, la organización,
funcionamiento y atribuciones de los tribunales de justicia de Chile. Su
elaboración se basó en un proyecto redactado por Francisco Vargas Fontecilla, y
encomendado por el gobierno en 1863, y que fue revisado posteriormente por una
comisión designada especialmente al efecto, entre 1864 y 1874.1

Fue promulgada por el presidente Federico Errázuriz Zañartu el 15 de octubre de


1875, entrando en vigencia el 1 de marzo de 1876.1 La ley estaba compuesta de 408
artículos, distribuidos en 22 títulos, más un título final de artículo único.

Dentro los principales objetivos de esta ley, se encontraban: el establecimiento de


los principios y normas de actuación de los órganos jurisdiccionales chilenos, la
regulación de la estructura jerárquica del Poder Judicial, dotando a los tribunales
superiores de la facultad de revisión y modificación de las sentencias dictadas por
un tribunal de inferior grado,[cita requerida] y la pretensión de armonizar la
organización y atribuciones de los tribunales, asegurando la vigencia y aplicación
de los principios contenidos en la Constitución de 1833.2

Este cuerpo legal fue derogado en 1943,3 siendo sustituido por el Código Orgánico
de Tribunales, que aún se encuentra en vigencia.4

Índice
1 Antecedentes
2 Historia
2.1 Proyecto de ley
2.1.1 Primera etapa: elaboración del proyecto (1863-1864)
2.1.2 Segunda etapa: comisión revisora (1864-1874)
2.1.3 Tercera etapa: discusión y aprobación del proyecto de ley (1874-1875)
2.2 Resumen de la génesis de la ley
3 Estructura
4 Contenido
5 Reformas
5.1 Código Orgánico de Tribunales
6 Importancia
7 Véase también
8 Referencias
9 Bibliografía
10 Enlaces externos
Antecedentes
Con anterioridad a la Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales, no
existía en Chile una ley o código que rigiera de manera ordenada y estable la
organización de los tribunales judiciales chilenos, y menos que delimitara su
accionar y facultades. Solo se habían establecido las bases de un poder judicial en
general, con la creación de un tribunal supremo y una cámara de apelaciones, tanto
en la Constitución de 1818, de 1823, como en la Constitución de 1828.

Con respecto a esta norma legal, es importante mencionar, que existe un error de
nomenclatura al calificarla de ley y no como un código propiamente tal, ya que cabe
dentro de la categoría de "código", tanto por su técnica legislativa, como por su
inspiración al tener como objetivo el fijar el derecho de un modo claro, preciso,
carente de vacíos y que regulara de modo claro, armónico y exhaustivo, aunque de
forma general, las diversas materias.1

El proceso de codificación corresponde a un fenómeno histórico común para Europa


Continental e Hispanoamérica, que marca el cambio de un derecho de juristas, como
el Derecho Común, que logró su mayor expresión en la Edad Media e imperó por varios
siglos, al predominio de un derecho legislado, conformando de esta forma un derecho
nacional, que promulgan sus propios gobernantes. De este proceso Chile no se
mantuvo al margen y comenzó a configurar el derecho patrio, que permitió consolidar
la independencia de la Corona Española.1 Sin embargo dicho fenómeno llega
tardíamente a Chile debido a:

La tendencia a la Recopilación que imperó en Castilla y Portugal, hasta entrar el


siglo XIX.
Cambios políticos que se viven en América a lo largo del siglo XIX, conllevan al
surgimiento de las Repúblicas y a las políticas de Codificación.
En el artículo 105 de la Constitución Política de 1833, se dispuso que una ley
especial determinara la atribución de todos los tribunales y juzgados que fuesen
necesarios para la pronta y cumplida administración de justicia, en todo el
territorio de la República.
Artículo 114. Una lei especial determinará la organización i atribuciones de todos
los Tribunales i juzgados que fueren necesarios para la pronta i cumplida
administración de justicia en todo el territorio de la República
Capítulo VIII. De la Administración de Justicia, Constitución Política de la
República de Chile de 18285
El objetivo principal de la ley sería dar a la judicatura una estructura coherente
con la vida republicana y la correspondiente división de poderes del Estado.6

Las razones que impulsaron a la codificación en Chile y a la creación de una ley


destinada a organizar al poder judicial fueron expresadas de forma categórica por
Andrés Bello, en el comentario al Reglamento de Administración y Justicia que éste
hizo en "el Araucano" que fue publicado el 18 de noviembre de 1836:7
Leyes sabias hemos tenido, es cierto, desde la dominación española, aunque exijan
algunas reformas análogas a los adelantos del siglo y a nuestras actuales
instituciones. Pero estas mismas leyes, diseminadas en vastos volúmenes,
oscurecidas por el desorden, por las contradicciones y por las innumerables glosas
de los comentadores, no podían presentar una norma segura a los ciudadanos para
dirigir sus acciones, ni a los jueces para decidir con acierto las cuestiones
sometidas a su conocimiento. Era preciso salvar todos estos inconvenientes; era
preciso purgar nuestra legislación de toda especie de trabas que coartasen la
libertad civil, limpiarla de todas la contradicciones que ofuscasen los preceptos
de la ley, sacarla del tenebroso laberinto de los comentarios, presentarla en
cuerpos ordenados y reducidos que faciliten su conocimiento a toda clase de
individuos y que a una rápida ojeada ilustrasen a los jueces en el ejercicio de sus
importantes atribuciones. Todo esto es el objeto de la operación que el célebre
Bentam (sic) ha designado con el nombre de codificación; y esto es cabalmente lo
que el gobierno ha querido hacer al presentar a las cámaras un proyecto de
reglamento de la administración de justicia.
De lo dicho por el venezolano se comprende que uno de los principales problemas que
traía la legislación Indiana era lo dispersas y confusas que se encontraban las
fuentes del derecho en la época, debido a los vastos cuerpos legales, de distintas
épocas, colmados de glosas y comentarios, lo que producía una gran dificultad tanto
para aplicar las leyes por parte de la judicatura como para observarlas por parte
de las personas; con este problema pretendía terminar la codificación, pero al
significar un gran cambio en el ámbito jurídico fue necesario hacerlo
paulatinamente. Con respecto a la labor de los jueces, se hizo imperativa la
necesidad de adaptarlos a estas innovaciones, por lo que la codificación procesal
fue trascendente.[cita requerida]

Para el legislador era necesario un cambio de fuentes del Derecho, estas


modificaciones fueron aplicadas a la práctica, donde se adapta la judicatura en la
innovación. Para comenzar el cambio el proceso debía ser poco drástico, sin cambiar
el sistema jurídico indiano, se añade leyes y se confirma este Derecho, lo cual
aumento las fuentes del Derecho para lo cual los jueces interpretan las normas en
cada caso específico, esto era muy difícil para ellos, ya que, en muchas ocasiones
se debía acatar la decisión judicial sin poder aclarar las dudas. El primer
reglamento de Administración de Justicia fue obra de Mariano Egaña, la cual se
promulgó en junio de 1824, la obra no introdujo mayores novedades, corrigió
procedimientos y añadió fuentes al Derecho.8

Mariano Egaña fue quien, en 1835, generó el primer Proyecto de Código de


Procedimiento Civil, obra que no fue sancionada como ley, pero se promulgó en
varias partes. Pretendía mantener instituciones que intercedían con nuevos
principios del Derecho, como el reconocimiento de fueros especiales. Una de las
partes promulgadas en el proyecto fue la obligación de dar fundamentación a las
sentencias. El texto de esta ley fue publicado el 2 de febrero de 1837, la
disposición de la ley debió ser aclarada el 1 de marzo de 1837, por petición de La
Corte Suprema, en virtud de esta modificación se consigue que el juez tenga la
obligación de decidir lo justo con una previa exposición de sus fundamentos. La
segunda ley Mariana, consistió en aclarar la anterior.9

Una segunda tarea para el Derecho en la codificación, fue restringir las fuentes
imperantes del Derecho castellano e indiano hasta la formación del Código Civil,
donde se establecerá la supremacía de la ley. Este sistema de fuentes no limita al
juez en cuanto a la gama de fuentes.

Los textos legales debían ser consultados según un orden de prelación, al cual se
anteponían las leyes patrias:

Las pragmáticas, ordenanzas y demás normas del rey comunicados por el Consejo de
Indias desde el 18 de mayo de 1680. Entre ellas se puede señalar las Ordenanzas de
Minería de Nueva España; las Ordenanzas de Bilbao en materia comercial, de 1875; y
el Reglamento de Libre Comercio, de 1798.
La Recopilación de las Leyes de Indias, que reunían todas las disposiciones
anteriores aplicables a América, y que fue promulgada por el rey Carlos II el 18 de
mayo de 1680.
La Novísima Recopilación de las leyes de España, publicada en 1805, a la que se
añadió un suplemento en 1808.
Las Leyes de Estilo, a las que en Chile, inversamente a lo que sucedía en España,
se les daba preferencia por sobre el Fuero Real, por Decreto Supremo de 28 de abril
de 1838.
Fuero real, de 1255, compuesto por Alfonso X al mismo tiempo que Las Partidas.
El Fuero Juzgo, traducción del Liber Iudiciorum, cuerpo legal visigodo, ordenada
por Fernando III de Castilla, y que estuvo vigente hasta la promulgación del Código
Civil español de 1889.
Las Partidas, obra del rey Alfonso X, monumento jurídico y literario de primer
orden, que constituyen la fuente más importante de recepción del Derecho Común en
Castilla, configurando así el concepto de Derecho Civil a partir del Derecho
romano.
De acuerdo a lo establecido en la Ley Mariana de 1837, las fuentes utilizables eran
las anteriormente nombradas y otras fuentes, el problema de esta situación se ve
reflejado en que las leyes civiles, poseían incoherencias y estaban deterioradas
por la interpretación que se le dio a través del tiempo, de esta manera surgían
oposiciones con los principios existente en la sociedad a la cual regían. Para
solucionar este problema era necesario restringir el Sistema de Fuentes, de esta
manera el juez debía aplicar la ley. De esta manera surgen dos artículos que se
refieren a como decidiría el juez la sentencia, estos son los artículos 3 y 5, en
donde por fin se logra restringir las fuentes que han de ser citadas. Por último el
problema con las Fuentes y el fundamento de los fallos se regularían por los
Códigos de Procedimiento Civil y Penal.10

Historia
Proyecto de ley
Este cuerpo normativo es producto de años de trabajo de connotados juristas y, su
elaboración tomó más de una década. Este proceso comprende tres etapas: la
elaboración del proyecto inicial, la revisión detallada del proyecto, envío al
Congreso y discusión y aprobación del proyecto de ley respectivo.

Primera etapa: elaboración del proyecto (1863-1864)


El proyecto inicial fue redactado por el jurista Francisco Vargas Fontecilla, para
lo cual estudió la legislación de otras naciones. Esta tarea le fue encargada por
el gobierno en enero de 1863, la cual terminó en el mes de mayo del año siguiente.
Este proyecto estaba conformado por 398 artículos, reunidos en 20 títulos y estos,
subdivididos en párrafos. Dicho proyecto sería posteriormente prolijamente
estudiado por una comisión nombrada por el Presidente de la República.

Manuel Egidio Ballesteros decía que el proyecto seguía un claro orden lógico:
principia en determinar las reglas generales aplicables a todos los funcionarios,
para luego clarificarlos y atribuirles reglas específicas a cada uno de ellos, por
esto mismo la extensión del cuerpo normativo es menor que los códigos, a ejemplo el
Código Civil consta de 2.524 artículos, pero la Comisión Revisora opta por otro
camino, determinando desde el principio la clasificación y atribuciones específicas
de cada funcionario, y se presentó que varios funcionarios de diferentes categorías
y jerarquía poseían atribuciones comunes, esto aumento el número de referencias e
hizo oscuro el sentido y alcance de la ley.

Las fuentes utilizadas por Francisco Vargas Fontecilla, en el texto publicado en el


año 1864 fueron las siguientes obras:

Leyes concernientes a la organización y atribuciones de los tribunales dictadas por


los monarcas españoles y por las autoridades patrias.
Esprit, origine et progres des institutions judiciaires des principaux pays de
l’Europe, J. D. Meyer.
Tratado de las leyes de la organización judicial y de la competencia de las
jurisdicciones civiles, explicadas por los principios de la teoría, por las
doctrinas de los publicistas y por las decisiones de las cortes soberanas, G. L. J.
Carré.
Tratado de la acción pública y de la acción civil resultantes de los crímenes,
delitos y contravenciones, Faustín Hélie.
Diccionarios de Jurisprudencia, Ph. A. Merlín y D. Dalloz11

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