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Cuando hablamos de ligaduras del alma, nos referimos cuando dos almas está n atadas.
También nos referimos a dos almas que está n presas, aprisionadas, cautivas, encarceladas,
enganchadas.
Números 30:2 Cuando alguno hiciere voto a Jehová, o hiciere juramento ligando su alma con
obligación, no quebrantará su palabra; hará conforme a todo lo que salió de su boca.
En una relació n hemos sido ligados por Dios en amor, o es una ligadura del alma
demoniaca para subyugar a otro.
Esta es otra clase de ligadura que Dios ha establecido. Esta ligadura se da cuando dos o má s
personas guiados por el Espíritu Santo establecen una amistad, porque contribuirá n
mutuamente al cumplimiento de sus propó sitos.
Jacob tenía su alma ligada a la de su Hijo Benjamín, este es un claro ejemplo de la ligadura que
existe entre Padres e Hijos.
El apó stol estaba ligado en su espíritu con Dios y su obra, por má s dificultades que
atravesaba no podía dejar de servir a Dios, por má s oposició n que enfrentaba no podía dejar
de cumplir su llamado. Oremos y pidá mosle a Dios que ligue nuestro espíritu con È l y su obra.
El sexo fue creado por Dios para ser disfrutado solo dentro del matrimonio. El hombre
es espíritu, alma y cuerpo. Así mismo el acto sexual dentro del matrimonio Dios lo creo para
que uniera a los esposos espíritu, alma y cuerpo. Y esto trae una gran bendició n para sus
vidas.
Luego que el acto sexual tuvo lugar, los cuerpos se separan, pero las almas quedan
unidas. Un lazo del alma ahora ha sido establecido, algo del hombre se convierte en parte de la
mujer, y algo de la mujer en parte del hombre.
El acto sexual fuera del matrimonio, une al hombre y mujer espíritu, alma y cuerpo, y
esto trae como consecuencia:
a) Transferencia de espíritus. En una relació n sexual ilícita existen transferencias de todo tipo
de cosas, espíritus inmundos, maldiciones generacionales de brujería, enfermedades,
depresió n, suicidio, divorcios, rechazo, pobreza, etc.
b) Fragmentació n del alma: ocurre algo así como: “se llevó un pedazo de mi alma”, el alma de
la persona se fragmenta en tantas partes como amantes haya tenido. Una de las frases
comunes cuando una alma está ligada a otra es “no puedo dejarlo”.
c) Entra una maldició n generacional de fornicació n y adulterio sobre nuestra descendencia.
Los pecados sexuales que tú has cometido tus hijos lo cometerá n.
d) Contaminació n en el espíritu.
Malaquías 2:14 Más diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu
juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu pacto.
¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque buscaba una
descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales para con la
mujer de vuestra juventud.
Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su
vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales.
1 Corintios 6:16-17 ¿O no sabéis que el que se une con una ramera, es un cuerpo con ella?
Porque dice: Los dos serán una sola carne. Pero el que se une al Señor, un espíritu es con él.
Lo que la palabra está diciendo es que cuando ocurre fornicació n, mi espíritu se está
uniendo al espíritu de la otra persona. Esto se traduce en contaminació n en nuestro espíritu:
conciencia, comunió n e intuició n.
e) Problemas para tener intimidad con Dios, falta de revelació n, dificultad para oír la voz de
Dios, falta de sabiduría, entendimiento, estancamiento espiritual, etc.
Aun a través de las caricias fuera del matrimonio, pueden formarse ligaduras
demoniacas de alma.
Las ligaduras del alma no solamente se forman entre hombre y mujer, sino también
entre homosexuales y lesbianas. Cuando ha habido abuso o violació n también se ha formado
una ligadura del alma.
Cada vez que practicamos sexo ilícito quedamos atados con lazos demoniacos y
cautivos en cá rcel de oscuridad.
Hay gente que se ha atado a alguien o algo voluntariamente con sus palabras y su alma
ha quedado ligada a esa persona o cosa.
Muchas veces las personas en su Juventud ligan su alma con sus palabras “nunca me
olvidare de ti, tu siempre serás el único en mi corazón, jamás amare a otro como tú, etc.” Con
estos juramentos abrimos puertas a espíritus inmundos que atan nuestra alma a esa persona.
“Esto no lo voy a olvidar jamás, esto me lo va a pagar lo prometo, esta va a ser una herida
que jamás cerrara.” “Nunca más creeré en ti, Prometo que pagara lo que hizo, Jamás amare a
otro hombre que no fuera él, Nunca me olvidare de ti lo prometo, Nunca confiare en otra
persona, Jamás te lo perdonare.” Hemos atado nuestra alma pronunciando este tipo de
palabras.
Proverbios 6:2 Te has enlazado con las palabras de tu boca, y has quedado preso en los dichos
de tus labios.
Haciendo votos y juramentos quedamos así enlazados a ellos, y hasta el día de hoy
afecta nuestra relació n con Dios y relació n matrimonial.
Un luto prolongado indica que existe una ligadura del alma demoniaca que ha dado lugar a
un espíritu de luto, que trae consigo espíritus de pesadez, lamento, tristeza, pena, congoja,
lloro, soledad, depresió n, desespero, desaliento, etc.
Muchos hombres no logran cortar esa ligadura con su madre fallecida y quieren que su
esposa tome el lugar de su madre, no tratan a su esposa como su mujer sino como su madre.
Todos sabemos que existen personas que llegan a la iglesia, tienen un encuentro con
Dios, son sanos y restaurados, pero nunca pudieron alejarse de esas malas amistades, que
terminaron alejá ndolos de Dios. ¿Por qué sucede esto? Por una ligadura en el alma con ellos.
Muchos amigos para jurarse que jamá s se terminara esa amistad, han hecho pactos de sangre.
Todo tipo de pacto de sangre liga no solo nuestra alma sino nuestro espíritu.
Creyentes que Dios los llama a pastorear a otras ciudades pero no pueden dejar su
ciudad donde se criaron.
Gente ligada a un trabajo por añ os, gente trabajando 15 añ os en un lugar por un sueldo
mínimo, y no lo pueden dejar aun cuando han tenido mejores posibilidades.
Jesú s no tuvo ligaduras con nadie, ni con personas, ni lugares, cuando le dijeron tu
madre y tus hermanos te buscan, él dijo: mi madre y mis hermanos son los que hacen la
voluntad de Padre. Por eso pudo cumplir con el propó sito de Dios.
Para terminar, una ligadura del alma, le da al diablo derecho legal para que te controle.
Ligaduras del alma demoniacas causan:
a) Estancamiento en tu propó sito
b) Señ ales de depresió n.
c) Impide la transformació n
d) Estanca tu crecimiento espiritual.
DECLARACIÓN
Padre celestial vengo a ti como libertador, confieso que Jesú s es mi Señ or y Salvador, te
pido que me liberes y cortes toda ligadura demoniaca en mi alma, porque deseo servirte y
amarte para siempre.
Me arrepiento con todo mi corazó n por haber pecado en contra de ti Padre celestial y
te pido que me perdones. Renuncio y rompo toda ligadura en mi alma en el nombre de Jesú s
de Nazaret.
Todo espíritu inmundo que entro en mí de depresió n, suicidio, rechazo, brujería,
hechicería, magia negra, adivinació n, enfermedades, maldiciones generacionales, pobreza,
vicios. Fuera en el nombre de Jesú s.
Hoy tomo la decisió n de perdonar completamente a las personas que me hicieron dañ o.
Te pido Padre celestial restaures mi alma fragmentada y rompas toda ligadura en mi alma en
el nombre de Jesú s.
Ahora rompo toda ligadura en mi alma y echo fuera todo espíritu que entro en mí por
relaciones sexuales ilícitas, lujuria, masturbació n, fantasías, incesto, adulterio, fornicació n,
homosexualismo, violació n, abuso, malos pensamientos, Fuera en el nombre de Jesú s de
Nazaret.
En el nombre de Jesú s rompo toda ligadura en mi espíritu, echo fuera toda
contaminació n en el á rea de mi conciencia, comunió n e intuició n, todo espíritu que causa
problemas para tener intimidad con Dios, falta de revelació n, dificultad para oír la voz de Dios,
falta de sabiduría, entendimiento, estancamiento espiritual, iniquidad, rebelió n. Fuera en el
nombre de Jesú s de Nazaret.
Señ or Jesú s, reconozco que en mi ignorancia, fui enlazado con las palabras de mi boca,
al haber pactado con personas con las cuales tuve una relació n sentimental, yo rompo en el
nombre de Jesú s todo pacto que hice cuando pedí matrimonio, cuando jure nunca separarnos,
cuando jure nunca amar a alguien má s, cuando jure no olvidarla nunca. Rompo en el nombre
de Jesú s, todo pacto, y te pido que restaures mi alma, y mi corazó n, para amar a mi esposa con
pureza, integridad, santidad, fidelidad. Todo pacto antiguo es roto ahora mismo por el poder
de la sangre de Jesú s.
Ahora ato y echo fuera todo espíritu de luto, pesadez, lamento, tristeza, pena, congoja,
lloro, soledad, depresió n, desaliento. Fuera en el nombre de Jesú s de Nazaret.
Señ or Jesú s tu palabra me enseñ a que nadie puede tomar tu lugar en mi corazó n, que
nadie es digno del primer lugar en mi corazó n, así mismo yo quiero agradarte haciendo tu
voluntad. Ahora te pido rompas toda ligadura demoniaca que tuviera con mis padres o hijos,
echo fuera todo espíritu inmundo de manipulació n, control, posesió n, brujería, espíritu
jezabelico, fuera en el nombre de Jesú s.
Rompo toda ligadura que me lleva a hacer diferencia y preferencia, entre mis hijos, que
han provocado heridas en ellos. Fuera en el nombre de Jesú s.
Renuncio y rompo toda ligadura del alma que tuviera con amistades que me llevan a
alejarme de ti Señ or, amistades que han provocado y provocaran que vuelva atrá s. Rompo
todo pacto de sangre y echo fuera todo espíritu detrá s de estas ataduras en el nombre de
Jesú s.