Está en la página 1de 3

EL HOMBRE COMO VISIONARIO Y COMO LÍDER

Por Myles Munroe

Una vez, cuando yo me encontraba hablando en Pittsburgh, yo pude platicar con una mujer joven que era la vicepresidenta
de un banco, y sólo tenía veinticinco años de edad, y era soltera. Ella me dijo, "Yo sólo le pido a Dios que me bendiga,
dándome un hombre que sea como usted. Como usted sabe, yo tengo todo lo que yo necesito: tengo mi propio
apartamento, gano más de $50,000 dólares al año, y hasta me puedo dar el lujo de comprarme un auto marca Porsche.
Pero yo he decidido que no me voy a comprar un auto Porsche porque esto podría intimidar a los hombres. Estaría dando
una impresión equivocada. Yo compré un automóvil más barato, para que los hombres no se vayan a espantar". Yo le dije a
ella, "Tú tienes una idea equivocada. No deberías casarte con un hombre que se deje intimidar por el hecho de que estás
manejando un Porsche, porque esto significaría que él es muy inseguro. Esto también significaría que ese hombre mide su
posición de acuerdo a lo que él posee. Cuando la inseguridad se casa con inseguridad, vas a tener problemas por el resto de
tu vida". Si tú eres la presidenta de una compañía, no importa si tu secretaria maneja un automóvil Jaguar. Tú sigues siendo
la presidenta.

Como hombre, tú no puedes permitir que tu imagen de ti mismo dependa de lo que otra persona posee. Dios te hizo como
la cabeza, y si tú llegas a conocer a una mujer que maneja un Porsche, y que es la vicepresidenta de un banco y que es
dueña de su propia casa, todo esto no tiene nada de malo. ¿De qué tienes miedo? Tú necesitas entender que ese tipo de
mujer es toda una bendición. Y si tú le das tu liderazgo, ella va a ser muy feliz compartiendo lo que posee. Ella sólo quiere
saber que tú eres capaz de manejar bien todo lo que ella tiene. Déjenme poner algo muy claro: si tú eres un hombre, tú
naciste para ser un líder. Dios hizo primero al hombre porque Él quería que el hombre fuera responsable. Un hombre no
decide dirigir o no dirigir. El tiene su posición debido a la virtud o al don de su propósito. Un hombre es la cabeza del hogar
no porque él tenga que dirigir. El dirige porque él es la cabeza del hogar. Su posición es inherente. Ningún hombre se
puede sentar a debatir el hecho de que sí va a dirigir o no va a dirigir su hogar, o si acaso él va a tener que ir a trabajar para
sostener a su familia. Esto no es punto que se tenga que poner a discusión. El hombre fue diseñado para tener un liderazgo
responsable. El fue hecho para dirigir y para ser responsable de todo aquello que esté bajo su jurisdicción. (Dios también
puede usar mujeres para el liderazgo, pero esto es uno de los principales propósitos del hombre. Dios creó y diseñó al
hombre para que sea un líder. ¿Recuerdas el principio? Tú eres tal y como eres debido a tu razón de ser. Por lo tanto, el
hombre ya posee cualidades de liderazgo dentro de él. Sin embargo, él necesita redescubrir las características del liderazgo
para que él pueda dedicarse a desarrollar las cualidades que Dios le ha dado y que se pueda convertir en un líder efectivo.

CARACTERÍSTICAS DE UN LÍDER

1. FUERTE Y VALIENTE

El hombre ha sido diseñado para tomar riesgos y para enfrentar retos. Frecuentemente, Dios da a los hombres tareas que
parecen ser muy grandes para ellos -y lo son-. Sólo pueden ser realizadas con la ayuda de Dios. Pero las características del
valor, de la fuerza y de la osadía hacen posible que los hombres puedan dar los pasos necesarios de fe para traer la
intervención de Dios. El Señor le dijo a Josué, "Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que
juré a sus padres que les daría" (Josué 1:6). Es imposible ser el líder de la familia y de la sociedad si tú no eres
suficientemente fuerte y valiente. ¡Y Josué tenía una familia formada por tres millones de gentes! Dios le dio a este hombre
una tarea diseñada para todo un hombre.

2. OBEDIENTE A LOS MANDAMIENTOS DE DIOS

Dios le añadió algo al mandamiento que le dio a Josué. El dijo, "Ten mucho cuidado de obedecer todos los mandamientos".
(Ver versículo 7.) Un hombre fuerte tiene que estar sometido a la autoridad de Dios. Ningún hombre puede ser fuerte si no
le está rindiendo cuentas a alguien. Un verdadero hombre no ignora la autoridad. El se mantiene en el jardín de la presencia
de Dios, orando y leyendo la Palabra de Dios, para que él pueda entender y obedecer Sus mandamientos. Algunos hombres
toman su valor y su fuerza y los usan descuidadamente. Cuando un hombre se aleja de Dios, y toma su vida en sus propias
manos, y no combina el valor con el sentido común, él puede causarse a sí mismo y a su familia muchos problemas. El
verdadero valor y fuerza vienen solamente a través de la confianza en la fidelidad de Dios y en creer a Su Palabra.

3. UN PENSADOR LÓGICO

Para ser un líder, tú tienes que ser un pensador lógico y mantener la mente muy clara. Tú tienes que poder identificar cómo
son cada uno de los problemas específicos, analizarlos, calcular 10 que se necesita hacer para resolverlos, tomar una
decisión (a veces muy rápidamente) y actuar basado en ello. Tú no puedes ser afectado por el medio ambiente que te rodea
hasta el punto de que te inmovilices y dejes que tus sentimientos te gobiernen. Tú no puedes ser gobernado por tus
emociones. Ahora bien, aunque un hombre tiene emociones no es guiado por ellas de la misma manera en que una mujer
frecuentemente se deja llevar por ellas. La mujer fue hecha por Dios para integrar sus emociones a todo aquello que ella ve
y piensa. Esto no es algo negativo, sino que es un don que Dios puso dentro de la mujer, el cual la capacita para simpatizar
con otros y para poder compartir la compasión de Dios y la misericordia de Dios en muchas situaciones. Un líder muy
frecuentemente no puede ser gobernado por sus emociones o por sus sentimientos, especialmente cuando tiene que
tomar decisiones muy difíciles. Por esta razón es que Dios diseñó a los hombres diferentes de las mujeres. El hombre no es
emocional, aunque sí tiene emociones. El siente bastante, pero, debido a su propósito, sus sentimientos en general no son
su principal consideración. El es guiado por su pensamiento. Debido a esto, las mujeres pueden tener la impresión de que
los hombres son fríos. Ellos no son fríos; ellos sólo no están influenciados tanto en sus emociones. Piensen acerca de Moisés
y de los israelitas cuando se encontraban parados a las orillas del Mar Rojo, teniendo a Faraón y a su ejército casi encima de
sus espaldas para destruirlos. Yo puedo imaginar a la hermana de Moisés que se llamaba María, teniendo una reacción
emocional, y diciendo, "¡Ah, Dios! ¡Haz algo!" Pero Moisés tiene su cabeza completamente fría. La Biblia dice que Moisés se
levantó, y dijo, "El Señor peleará por vosotros mientras vosotros os quedáis callados" (Éxodo 14:14). El básicamente estaba
diciendo, "Tengan paz; les prometo que todo va a salir bien", mientras que al mismo tiempo Faraón se aproximaba con
miles de sus soldados. Los israelitas no tenían manera de escapar: el mar estaba enfrente de ellos; los egipcios estaban
detrás de ellos. Pero en medio de esta situación, podemos ver a este hombre frío, sereno y calmado. Su calma hizo que
todos los israelitas se calmaran también. Ellos sabían que Moisés nunca había mentido antes. Cuando él decía algo, eso
sucedía. Yo puedo ver a Moisés, después de que terminó de hablar, parado detrás de un arbusto, clamando a Dios, "¿Acaso
pudiste escuchar lo que yo les dije? Oh Dios, ayúdanos por favor". Dios le dijo a Moisés, "¿Por qué clamas a mí? Di a los
hijos de Israel que se pongan en marcha" (v. 15). Yo creo que lo que la Palabra de Dios nos está tratando de enseñar es que
un líder es alguien que nunca transmite su miedo a aquellos que están bajo su responsabilidad. Yo no dije que nunca tuviera
miedo-pero que él no permite que su miedo infecte a otros.

4. EL CORAZÓN DE UN SIERVO

Un verdadero hombre, un verdadero líder, es un siervo. No va a ser un dictador. El cuida a los demás antes de pensar en sí
mismo. Jesús dijo lo siguiente: Sabéis que los gobernantes de los gentiles se enseñorean de ellos, y que los grandes ejercen
autoridad sobre ellos. No ha de ser así entre vosotros, sino que el que quiera entre vosotros llegar a ser grande, será
vuestro servidor, y el que quiera entre vosotros ser el primero, será vuestro siervo; así como el Hijo del Hombre no vino
para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos. (Mateo 20:25-28) El apóstol Pablo hizo eco a
este tema cuando él escribió, esto se necesita. Algunos de los más grandes momentos en mi vida son ocasiones cuando mi
esposa me corrige, me da ideas o me da su punto de vista acerca de algo que yo no había podido hacer correctamente. Mi
esposa tiene tremendos recursos dentro de ella. Se requiere ser un verdadero hombre para poder someterse para recibir
ayuda. Solo los tontos evitan esto. Dios no está buscando gente controladora. Dios está buscando un líder que dé fruto de sí
mismo por medio de ser podado cada vez que sea necesario a fin de dar una cosecha más grande y más saludable. Los
hombres necesitan recordar que las mujeres están aquí para ayudarlos. Yo creo que una de las razones por qué Dios tomó a
la mujer del costado de Adán y de su costilla, es para enfatizar su naturaleza. La palabra costilla significa "apoyo" o
"soporte". Eso es exactamente lo que hace una costilla. Sostiene toda la parte superior del cuerpo humano junto con las
vértebras. Por lo tanto, una mujer debe de ser un sistema de apoyo. Si ella funciona en su propósito, ella va a ayudar al
hombre a funcionar en el suyo.

5. UN ESPÍRITU DISPUESTO A APRENDER

Un verdadero líder tiene humildad, de tal manera de que está dispuesto a aprender de otros y a ser corregido. Yo quiero
decir una palabra muy especial en este momento a todas las mujeres que están leyendo este artículo. Dios dijo que no era
bueno que el hombre estuviera solo, así que creó a la mujer. Tú eres buena para el hombre. Una de las maneras en que tú
puedes ser buena para él es mostrándole respeto como el líder del hogar que él es. Algunas veces el marido podrá decir,
"Yo pienso que deberíamos hacer esto", y de inmediato, su esposa le muestra que ella no confía en él. Ella contesta,
"¿Hacer qué? ¡Tú nunca has hecho nada hasta ahora!" Ella acaba de lastimar el ego del hombre. Lo que ella puede decir si
no está segura acerca de la idea de él es, "Bueno, vamos a intentarlo de esa manera entonces". Cuando ella dice, "intentar",
él escucha "confiar". "Vamos a intentarlo" significa que ella va a confiar en él en este proyecto. Entonces, si él se equivoca,
ella puede decir, "Nos equivocamos". Una mujer puede proteger el rostro de su marido, si ella se da cuenta que también
ella comete errores. Alimenta la necesidad que tu marido tiene de ser respetado en su liderazgo. No importa lo que él haga,
sólo mantente alimentando esto. Cuando tú lleves esto al punto donde llega a ser algo fuerte y efectivo, se va a convertir en
una gran bendición para ustedes dos. El va a aprender a dirigir porque él sabe que tú lo vas a apoyar.

También podría gustarte