Un líder es grande, no por su poder, sino por su habilidad de hacer surgir poder a

otros. El éxito sin que se pueda transmitir a otros es un fracaso. La lealtad a una líder
crece cuando el que le sigue ha crecido personalmente gracias a la ayuda del líder.
El verdadero líder consiste en ser la persona a quien otros seguirán gustosa y
confiadamente. Un verdadero líder conoce la diferencia entre ser un jefe y ser un líder.
Debe comenzar con el corazón y no con la cabeza, donde se pueda empezar una
relación significativa con las demás personas que van a influir en ellas tomando en
cuenta sus necesidades y deseos. Cuando una persona empieza a tomar todo eso en
cuenta puede empezar a dirigir e influir en los demás y se puede ver que los problemas
que se van teniendo se van a resolver más fácilmente.
Según Daniel Goleman un buen líder es una persona que tiene un alto grado de
inteligencia emocional. Para ser un buen líder se tienen que tener autoconciencia que
incluye la comprensión de los valores y los objetivos individuales, porque una persona
con autoconciencia sabe hacia donde se dirige y porque lo hace, sabe expresar sus
emociones y como estas van a influir en las personas que están a su alrededor.
Una persona con autoconciencia es segura de sí misma comprendiendo cuáles son sus
limitaciones y saben cuándo pedir ayuda, las personas que vean eso generalmente
admiran y respetan la franqueza y la honestidad de las personas.
La autorregulación es otro factor que va a influir en ser un buen líder ya que tenemos
que controlar nuestros impulsos biológicos ya que estos dirigen nuestras emociones y
si no lo podemos regular vamos a ser prisioneros de nuestros sentimientos. Una
persona que tiene el don de la autorregulación es capaz de crear un clima de confianza
y de justicia, ellas pueden aceptar los cambios que se dan en cualquier ambiente. La
reflexión y la integridad ayudan a no actuar impulsivamente que puede ser un
problema en las relaciones que podamos tener entre las personas con las que tenemos
relación.
La motivación es un rasgo que la mayoría de los lideres comparten, se sienten
impulsados de obtener los logros planteados que van más allá de las expectativas. Lo
que les impulsa a los lideres es el deseo interno de lograr el éxito por el simple hecho
de lograrlo, esto se puede ver cuando una persona tiene pasión en lo que hace, busca
desafíos creativos y se enorgullece de lo que le sale bien hecho. También muestran
una energía de hacer las cosas mejor, están ansiosas de explorar nuevas cosas en las
que se pueden dedicar.
Las personas con una motivación alta tienden a ser optimistas incluso cuando los
resultados son adversos. Cuando una persona se enfrenta a algún fracaso tiene que
superar la frustración y la depresión, se tiene que tener un impulso para superar las
metas y tener interés por mantenerse al tanto de los éxitos ya que con este
comportamiento se puede contagiar con las personas a nuestro alrededor. Los lideres
con estos rasgos suelen juntarse con personas con características similares que tengan
optimismo y compromiso en lo que hacen.
La empatía es una de las características más importante que un líder debe de tener,
empatía significa tener en consideración los sentimientos de las personas con las que
estamos, junto con otros factores, en el proceso de toma de decisiones inteligentes.
Hoy en día, la empatía es un ingrediente del liderazgo porque ayuda en el trabajo en
equipo y tomar decisiones importantes ya que va a saber percibir y comprender los
puntos de vista de todas las personas. Un líder con este rasgo sabe distinguir la sutileza
del lenguaje corporal que se esconden detrás de las palabras, además que
comprenden la importancia de la diferencia étnicas y culturales. Un buen líder cuando
utiliza la empatía puede formar y retener a las personas valiosas y mejorar los
proyectos en el que están trabajando.
Un líder tiene que tener la capacidad de mejorar las relaciones que tiene con los
demás y es una de las características que es la más difícil en poner en acción. Esta
característica nos ayuda en dirigir a las personas en la dirección deseada, una persona
así puede tener un amplio circulo de conocidos y un don para hallar puntos comunes
con personas de todo tipo. Las personas tienden a ser más eficientes cuando
entienden sus propios sentimientos y pueden tener empatía con los sentimientos de
los demás. Ningún líder es una isla necesita congeniar con las demás personas que se
encuentran a su lado porque el líder hace que para poder lograr un trabajo se necesita
trabajar con los demás.
Para Jhon Maxwell un buen líder nunca para de crecer, desde pequeño se va
aprendiendo según los acontecimientos de su vida, la elección es una de las primeras
cosas que nos va a motivar a crecer, el cambio nos ayuda a seguir creciendo y el clima
que nos permite disfrutar de nuestro crecimiento.
La primera elección para poder ser un líder es comenzar a creer en nosotros mismos y
ser líderes, la segunda es elegir poder crecer en un momento especifico donde se tiene
que cumplir dejando procrastinación ya que la decisión que tomemos hoy nos va a
asegura un mejor mañana.
Nuestro propio crecimiento es nuestra responsabilidad y debemos enfocarnos en
nosotros mismo, pero debemos saber que junto a nuestro crecimiento debemos hacer
crecer a las demás personas que están a nuestro alrededor.
Se tiene que tener un espíritu dispuesto a aprender porque si nos quedamos en lo que
ya sabemos no vamos a poder desarrollarnos y nos vamos a estancar en un solo lugar,
ya que para ser un buen líder se tiene que aprender del cambio, de las nuevas
experiencias y de la manera de solucionarlas de la mejor forma.
También debemos centrarnos en el propio desarrollo y no en la propia satisfacción
porque nuestro propio desarrollo significa hacer lo que uno está capacitado a hacer
que va a desembocar en la creación de responsabilidades que nos va a indicar de como
podemos ayudar a los demás.
No debemos estar conformes de lo que ya tenemos, se tiene que crecer y poder seguir
aumentando los logros personales y grupales en los que estén trabajando, porque
según los desafíos que se tienen para poder cumplir algún encargo va a influir en la
vida de una persona haciéndola crecer aún más.
Se tiene que ser un estudiante continuo y se debe planear nuestras acciones con
anticipación y siempre estar en un nivel de preparación y crecimiento. Además, se
tienen que canalizar nuestro aprendizaje a unos pocos temas principales ya que al
estar enfocados en un tema se va a entender de mejor manera comprendiéndolo
mejor, se tiene que saber organizar de manera estratégica nuestras acciones y lo que
vamos a hacer para ser personas que pueden controlar muchas situaciones sin ser
impulsivos.
Un líder puede ser una persona que nace ya que esta habilidad es innata, estas
personas normalmente presentan características muy particulares como un gran
carisma, confianza en sí mismos y una capacidad casi natural para aprehender y
manejar el contexto que los rodea. Difícilmente las personas que no se ocupen de
aprender a dominar sus capacidades puedan utilizarlas para conseguir el éxito , sin
embargo ser líder también se pude desarrollar y formar y según como va el tiempo
una persona puede convertirse en líder, además de las características anteriormente
mencionadas una persona tiene que tener en claro que de los errores se aprender que
al estar en el proceso de aprendizaje se tienen que tomar en cuenta el feedback de las
demás personas a nuestro alrededor y que se tiene que poner mucho esfuerzo de
asumir responsabilidades, de tomar decisiones y de solucionar problemas.
De la misma forma que el líder se hace, también se deshace. Si se pierde la conexión
con el equipo, si pierde su confianza, perderá su liderazgo. Por tanto, no sólo hay que
desarrollarlo, sino que también hay que saber cuidarlo.