A pesar que el Perú ha crecido económicamente, no nos acerca a

constituirnos como un país desarrollado, porque el país hay cerca de

10 000 000 de peruanas y peruanos que no tienen agua potable. El 61
% de la población del área rural no tiene acceso a instalaciones
sanitarias en sus hogares, mientras que en el área urbana existe un
25 % en la misma situación. Es por tanto la importancia de
garantizarlos servicios básicos de calidad como un derecho para llevar
una vida saludable y prevenir enfermedades.

En efecto, es importante acceder a servicios básicos para tener

una vida saludable, ya que constituyen las condiciones
básicas para que el individuo pueda desarrollar sus actividades
cotidianas y acceder a una buena calidad de vida.
La tarea de proporcionar los servicios urbanos básicos a una
comunidad, en principio corresponde al Estado, el cual debe
administrar los recursos públicos para garantizar la habitabilidad de
los espacios urbanos y rurales, con el fin de procurar el bienestar de
la población así como el desarrollo integral de la familia.
En algunos países, sin embargo, los servicios básicos (electricidad,
agua potable, gas doméstico, aseo urbano) son administrados
por empresas privadas encargadas de proveer con eficiencia y
celeridad, estos servicios a los ciudadanos.
Contar con los servicios básicos eleva el bienestar de las personas y
su calidad de vida. En una vivienda digna hay más higiene y mejores
condiciones físicas y sociales para llevar a cabo las diferentes
actividades y vivir con un estándar de calidad de vida adecuado en
nuestros hogares. Debemos tener en cuenta que el desarrollo de unos
servicios básicos de calidad a la población es uno de los principales
indicadores utilizados para evaluar el índice de desarrollo humano de
una comunidad.

Podemos destacar que para la construcción y constancia de

una vida sana debemos presentar actitudes y acciones que se
repitan, estas acciones son sanas y buscan establecer un equilibrio
en nuestra vida, para así desarrollar un estilo de vida saludable.
Sin embargo, estas acciones se ven influenciadas por los servicios
básicos a los que tenemos acceso, como el agua,
la electricidad, el gas, los servicios de basura, entre otros...
Ya que estos se encuentran relacionados con la forma en
que confrontamos u satisfacemos nuestras necesidades, las
cuales giraran entorno a un estilo de vida saludable.