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Parasitosis intestinales

9 A.F. Medina Claros, M.J. Mellado Peña*, M. García López


Hortelano*, R. Piñeiro Pérez**, P. Martín Fontelos*
UGC Pediatría. Hospital Axarquía, Vélez-Málaga. *Servicio de Pediatría.
Unidad de Enfermedades Infecciosas y Pediatría Tropical. Consejo al
Niño Viajero y Vacunación Internacional. Hospital Carlos III. Madrid.
**Servicio de Pediatría. Hospital Universitario Puerta de Hierro.
Majadahonda, Madrid

INTRODUCCIÓN co y terapéutica para el correcto manejo


Las infecciones parasitarias intestina- de estos niños.
les provocan un número no desprecia-
ble de niños infestados en nuestro país. DEFINICIÓN Y CLASIFICACIÓN
A la patología producida por este tipo de Las parasitosis intestinales son infec-
parásitos ya conocida en nuestro medio ciones intestinales que pueden producir-
(como giardiasis, oxiuriasis, ascariosis…), se por la ingestión de quistes de proto-
hay que añadir un incremento en el núme- zoos, huevos o larvas de gusanos o por la
ro de casos y nuevos tipos de parasitación penetración de larvas por vía transcutá-
por patógenos menos frecuentes hasta nea desde el suelo. Cada uno de ellos va
ahora, pero que se están incrementando a realizar un recorrido específico en el
paralelamente a la nueva situación socio- huésped y afectará a uno o varios órga-
demográfica de nuestro país: aumento de nos, con lo que las podemos clasificar
niños procedentes de áreas endémicas por según el tipo de parásito y la afectación
inmigración y por adopción internacio- que provoquen en los distintos órganos y
nal. Se estima que la población inmigran- sistemas (Tabla I). Sólo nos vamos a refe-
te en España en 2010 supera el 12% de rir a los que infestan niños con mayor fre-
la población total, lo que supone una cuencia y que tienen una repercusión
población pediátrica en este grupo que directa en el aparato digestivo, ya que
oscila entre 650.000 y 800.000 niños. otros parásitos con predominio tisular se
Estos datos representan un reto para el tratan en otros temas de esta monografía.
pediatra, que se enfrenta a una patolo-
gía casi excepcional en nuestro medio 1. Giardiasis (Giardia intestinalis:
hasta hace relativamente poco tiempo. Es, G. lamblia y G. duodenalis)
por tanto, necesario para los pediatras un
conocimiento epidemiológico, microbio- Etiopatogenia
lógico y clínico adaptado a esta situación Se trata de la parasitosis intestinal más
y disponer de las opciones de diagnósti- frecuente a nivel mundial, con distribu-
78 Protocolos diagnóstico-terapéuticos de la AEP: Infectología pediátrica

TABLA I. Clasificación de las principales parasitosis intestinales.

Protozoos
1. Afectación exclusivamente digestiva: Giardiasis: Giardia lamblia
2. Afectación digestiva y potencialmente en tejidos:
a. Amebiasis: Entamoeba histolytica/dispar
b. Criptosporidiasis: Cryptosporidium

Helmintos
1. Nemathelmintos o nematodos o gusanos cilíndricos:
a. Afectación exclusivamente digestiva:
– Oxiuriasis: Enterobius vermicularis
– Tricocefalosis: Trichuris trichiura
b. Afectación digestiva y pulmonar:
– Ascariosis: Ascaris lumbricoides
– Anquilostomiasis o uncinariasis:
- Ancylostoma duodenale
- Necator americanus
c. Afectación cutánea, digestiva y pulmonar:
– Estrongiloidiasis: Strongyloides stercoralis
2. Plathelmintos o cestodos o gusanos planos
a. Afectación exclusivamente digestiva:
– Himenolepiasis: Hymenolepis nana
– Teniasis: Taenia saginata y solium
b. Posibilidad de afectación digestiva y potencialmente en tejidos:
– Teniasis: Taenia solium: Cisticercosis

ción universal. Tras la ingesta de quistes zonas endémicas y adultos que viajan a
del protozoo, éstos dan lugar a trofozoí- este tipo de lugares.
tos en el intestino delgado (ID) que per-
manecen fijados a la mucosa hasta que se Clínica
produce su bipartición, en la que se for- La sintomatología puede ser muy
man quistes que caen a la luz intestinal variada: a) asintomático: más frecuente
y son eliminados con las heces. Los quis- en niños de áreas endémicas; b) giardia-
tes son muy infectantes y pueden perma- sis aguda: diarrea acuosa que puede cam-
necer viables por largos períodos de tiem- biar sus características a esteatorreicas,
po en suelos y aguas hasta que vuelven deposiciones muy fétidas, distensión abdo-
a ser ingeridos mediante alimentos con- minal con dolor y pérdida de peso; y c)
taminados. Muy frecuente en niños de giardiasis crónica: sintomatología subagu-
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da y asocia signos de malabsorción, des- cen ulceraciones responsables de parte de


nutrición y anemia. la sintomatología de la amebiasis, así
como la posibilidad de diseminación a dis-
Diagnóstico tancia y afectación de otros órganos dia-
Determinación de quistes en materia na (absceso hepático).
fecal o de trofozoítos en el cuadro agu-
do con deposiciones acuosas. Es impor- Clínica
tante recoger muestras seriadas en días Muy variada, desde formas asintomá-
alternos, pues la eliminación es irregular ticas hasta cuadros fulminantes:
y aumenta la rentabilidad diagnóstica. En a. Amebiasis asintomática: representa el
el caso de pacientes que presentan sinto- 90% del total.
matología persistente y estudio de heces b. Amebiasis intestinal invasora aguda o
negativo se recomienda realización de colitis amebiana disentérica: gran
ELISA en heces. número de deposiciones con conteni-
do mucoso y hemático, tenesmo fran-
Tratamiento y prevención co, con volumen de la deposición muy
(véase tabla II) abundante en un principio y casi
El porcentaje de resistencia de Giar- inexistente posteriormente, dolor abdo-
dia a metronidazol está aumentando, por minal importante, tipo cólico. En casos
lo que es necesario conocer alternativas de pacientes desnutridos o inmunode-
eficaces. Es importante extremar las medi- primidos pueden presentarse casos de
das que controlen la contaminación fecal colitis amebiana fulminante, perfo-
de aguas, así como la ingesta de alimen- ración y formación de amebomas con
tos y bebidas en condiciones dudosas en cuadros de obstrucción intestinal aso-
viajes a zonas endémicas. ciados.
c. Amebiasis intestinal invasora crónica
2. Amebiasis (Entamoeba o colitis amebiana no disentérica: dolor
histolytica/dispar) abdominal tipo cólico con cambio del
ritmo intestinal, intercalando periodos
Etiopatogenia de estreñimiento con deposiciones dia-
Tras la ingestión de quistes conteni- rreicas, tenesmo leve, sensación de
dos en alimentos y aguas contaminadas o plenitud posprandial, náuseas, disten-
por déficit de higiene en manos, los tro- sión abdominal, meteorismo y borbo-
fozoítos eclosionan en la luz intestinal y rigmos.
colónica, y pueden permanecer en ese
lugar o invadir la pared intestinal para for- Diagnóstico
mar nuevos quistes tras bipartición, que Mediante visualización de quistes en
son eliminados al exterior por la materia materia fecal o de trofozoítos en cuadro
fecal y volver a contaminar agua, tierra y agudo con deposiciones acuosas. Para
alimentos. En el proceso de invasión de diferenciar E. histolytica, ameba patóge-
la mucosa y submucosa intestinal, produ- na, de E. dispar, ameba no patógena que
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no precisa tratamiento, es necesario una rreicas acuosas con dolor abdominal, fie-
PCR-RT, prueba que solo puede realizar- bre, náuseas, vómitos y signos de deshi-
se en algunos en centros especializados. dratación y pérdida de peso, autolimi-
tado y frecuente en niños en epidemias
Tratamiento y prevención relacionadas con guarderías o piscinas.
(véase tabla II) Puede ser más prolongado en pacientes
El portador asintomático tiene un con inmunodepresión; c) forma extrain-
papel fundamental en la perpetuación de testinal: en inmunodeprimidos (SIDA)
la endemia; la amebiasis intestinal tiene, con afectación de sistema respiratorio,
además, tendencia familiar y predominio hepatitis, artritis reactivas y afectación
en grupos hacinados, por lo que resulta ocular.
fundamental extremar las medidas de
higiene personal y comunitarias. Diagnóstico
Mediante visualización de oocitos en
3. Criptosporidiasis materia fecal. También se utiliza frecuen-
(Cryptosporidium) temente técnicas de EIA en muestra fecal
con alta sensibilidad y especificidad.
Etiopatogenia
Son coccidios protozoarios con distri- Tratamiento y prevención
bución universal que pueden producir Medidas de soporte: reposición de
infección en animales y humanos. Se pro- líquidos y electrolitos y, en casos graves,
duce por ingesta de oocitos procedentes fluidoterapia intravenosa y/o terapias
de alimentos y aguas contaminados (pis- nutricionales. En pacientes inmunodepri-
cinas comunitarias, parques acuáticos, midos se asocia tratamiento antibiótico
aguas de lagos y pantanos…) o por vía (véase tabla II). En pacientes con SIDA,
fecal-oral (frecuente en guarderías). Tras la terapia antirretroviral consigue mejo-
la ingesta de oocitos en alimentos o aguas ría en el estatus inmune y acortar la sin-
contaminados, se liberan esporozoítos con tomatología. Es fundamental incrementar
capacidad de unirse a los bordes en cepi- las medidas de higiene para evitar la trans-
llo de las células epiteliales intestinales, misión fecal-oral y limitar el uso de pis-
en donde pueden reproducirse asexual o cinas en pacientes con diarrea.
sexualmente (esta última mediante forma-
ción de micro y macro-gametos, su unión 4. Oxiuriasis (Enterobius
y la formación de nuevos oocitos) para ser vermicularis)
eliminados posteriormente junto a la mate-
ria fecal y perpetuar la posibilidad de Etiopatogenia
infección. La hembra del parásito se desplaza
hasta zona perianal, principalmente con
Clínica horario nocturno, donde deposita sus hue-
Muy variada. a) Asintomática; b) for- vos, muy infectantes, que quedan adheri-
ma intestinal: cuadro de deposiciones dia- dos a la piel o en la ropa. Con el rascado
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TABLA II. Tratamiento de los parásitos intestinales más frecuentes.


Patógeno Fármaco Dosis Intervalo Vía Duración
Giardia Metronidazol 15 mg/kg/día 8h VO 7 días
lamblia Tinidazol1 50-60 mg/kg/día 24 h VO 1 día
Paromomicina 25-35 mg/kg/día 8h VO 7-10 días
Mepacrina2 7 mg/kg/día 8h VO 5-7 días
(máx.: 300 mg)

Entamoeba Paromomicina 25-35 mg/kg/día 8h VO 7-10 días


histolytica Iodoquinol2 30-40 mg/kg/día 8h VO 20 días
(portador
asintomático)

Entamoeba Metronidazol 30-50 mg/kg/día 8h VO 10 días


histolytica (o tinidazol1) 50-60 mg/kg/día 24 h VO 3 días
(colitis +
amebiana)3 Paromomicina 25-35 mg/kg/día 8h VO 10 días
(o Iodoquinol2) 30-40 mg/kg/día 8h VO 20 días

Entamoeba Metronidazol 30-50 mg/kg/día 8h VO 10 días


histolytica (o Tinidazol1) 25-30 mg/kg/día 8h IV 10 días
(absceso 50-60 mg/kg/día 24 h VO 5 días
hepático)3 +
Paromomicina 25-35 mg/kg/día 8h VO 10 días
(o Iodoquinol2) 30-40 mg/kg/día 8h VO 20 días

Cryptosporidium Paromomicina 25-35 mg/kg/día 8h VO 10 días


(inmuno- +/-
deprimido) Claritromicina 15 mg/kg/día 12 h VO 10 días

Enterobius Pamoato de 11 mg/kg/día 24 h VO 1 día (repetir


vermicularis pyrantel (máx.: 1 g) dosis en
2 semanas)
Mebendazol4 100 mg/dosis 24 h VO 1 día (repetir
dosis en
2 semanas)

Trichuris Mebendazol4 100 mg/dosis o 12 h VO 3 días


trichiura 500 mg/dosis 24 h VO 1 día
Albendazol5 400 mg/dosis 24 h VO 1 día
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TABLA II. Tratamiento de los parásitos intestinales más frecuentes (continuación).

Patógeno Fármaco Dosis Intervalo Vía Duración


Ascaris Mebendazol4 100 mg/dosis o 12 h VO 3 días
lumbricoides 500 mg/dosis 24 h VO 1 día
Pamoato de 11 mg/kg/día 24 h VO 1-3 días
pyrantel (máx.: 1 g)

Ancylostoma Mebendazol4 100 mg/dosis o 12 h VO 3 días


duodenale y 500 mg/dosis 24 h VO 1 día
Necator Albendazol5 400 mg/dosis 24 h VO 3-5 días
americanus

Strongyloides Ivermectina2,6 0,2 mg/kg/día 24 h VO 2 días


stercoralis Albendazol5 200 mg/dosis 12 h VO 3-5 días.
7 días si
hiperinfestación

Hymenolepis Prazicuantel2 25 mg/kg/día 24 h VO 1 día y repetir


nana (en > 3 años) a la semana
Niclosamida2 40 mg/kg/día la 24h VO 7 días y
(en < 3 años) 1ª dosis y repetir ciclo
20 mg/kg/día a la semana
las siguientes

Taenia solium y Prazicuantel2 5-10 mg/kg/día 24 h VO 1 día


Taenia saginata Niclosamida2 50 mg/kg/día 24 h VO 1 día

Taenia solium Albendazol5 15 mg/kg/día 12 h VO 14-28 días


(cisticercosis)7 (máx.: 800 mg)
Prazicuantel2 50 mg/kg/día 8h VO 15 días
1Tinidazol: antiprotozoario oral aprobado por la FDA para tratamiento de giardiasis,
amebiasis intestinal y abceso hepático amebiano en niños > 3 años (máx.: 2 g/día).
2Es necesaria su obtención por Medicamentos Extranjeros. 3Siempre se tienen que

tratar con dos fármacos. Paromomicina o Iodoquinol se administran posteriomente a


Metronidazol o Tinidazol. Contraindicado el uso de corticoides. 4Mebendazol: la
monodosis de 100 mg/12 h está aprobada en > 2 años. 5Albendazol: la monodosis de
éste fármaco a 400 mg está aprobada en niños > 4 años, pero es ampliamente usada
para helmintiasis intestinales a cualquier edad. Cuando se necesita un efecto tisular
Albendazol debe administrarse en dos dosis diarias, si la acción requerida es solo
luminar se administra en una sola dosis. 6Ivermectina: la monodosis de este fármaco
está aprobada para > 2-4 años. 7Añadir corticoides en cisticercosis si encefalitis,
HTC o convulsiones.
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de la zona, se establecen bajo las uñas y 5. Tricocefalosis (Trichuris trichiura)


se perpetúa la autoinfección por transmi-
sión fecal-oral. Etiopatogenia
Geohelmintiasis producida por la
Clínica ingesta de huevos embrionados proceden-
Mucho más habitual en niños que en te de alimentos, tierra (típico en niños) o
adultos, frecuentemente asintomática. Sín- aguas contaminadas. Las larvas maduran
tomas por acción mecánica (prurito o sen- en ciego y colon ascendente, donde per-
sación de cuerpo extraño), invasión geni- manecen enclavados a la mucosa, produ-
tal (vulvovaginitis), despertares noctur- ciendo lesión mecánica y traumática con
nos, sobreinfección secundaria a excoria- inflamación local, y desde donde vuelvan
ciones por rascado, dolor abdominal que a producir nuevos huevos fértiles que son
en ocasiones puede ser recurrente, locali- eliminados por materia fecal.
zarse en FID y simular apendicitis aguda.
No está demostrada su relación con sín- Clínica
tomas que tradicionalmente se relacionan Depende del grado de parasitación:
con oxiuriasis como bruxismo, enuresis desde asintomática, pasando por dolor cóli-
nocturna o prurito nasal. co y deposiciones diarreicas ocasionales,
hasta cuadros disenteriformes con depo-
Diagnóstico siciones muco-sanguinolentas (en pacien-
• Test de Graham: uso de cinta adhesi- tes inmunodeprimidos) y prolapso rectal.
va transparente por la mañana antes
de defecación o lavado. Visualiza los Diagnóstico
huevos depositados por la hembra en Identificación de huevos en materia
zona perianal. fecal. En casos graves, plantear el diag-
• Visualización directa del gusano nóstico diferencial con amebiasis, disen-
adulto en la exploración anal o vagi- tería bacilar y colitis ulcerosa.
nal.
Tratamiento y prevención (véase tabla II)
Tratamiento y prevención Extremar medidas de higiene personal,
(véase tabla II) adecuada eliminación de excretas, utiliza-
Los huevos son muy resistentes si per- ción de agua potable y correcto lavado de
siste adecuado nivel de humedad, por lo alimentos. Vigilancia de los juegos con
que puede permanecer largo tiempo en la arena de niños en parques, lavar manos.
ropa. Es necesario extremar las medidas
de higiene de inodoros, manos y uñas y 6. Ascariosis (Ascaris lumbricoides)
lavar con agua caliente y lejía la ropa de
cama, pijamas y toallas. Es necesario el Etiopatogenia
tratamiento de todos los miembros de la Es la helmintiasis más frecuente y con
familia ante la posibilidad de perpetua- mayor distribución a nivel mundial. Tras
ción de la infección. ingestión de material contaminado, las lar-
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vas eclosionan en ID, atraviesan la pared en un terreno favorecedor dando lugar a


intestinal, se incorporan al sistema portal un tipo de larva que precisa una nueva
y llegan nivel pulmonar, donde penetran modificación para obtener capacidad
en los alveolos y ascienden hasta vías res- infectante mediante penetración por la piel
piratorias altas que por la tos y deglución, (en A. duodenale también puede provocar
llegan de nuevo a ID, donde se transfor- infección por ingestión vía oral). Una vez
man en adultos, producen nuevos huevos, atravesada la piel, se dirigen al sistema
que se eliminan por material fecal. venoso o linfático para llegar a sistema
cardiaco derecho y circulación pulmonar,
Clínica penetrar en los alveolos, madurar allí y
• Digestiva: dolor abdominal difuso (por ascender por vías respiratorias altas para
irritación mecánica) y menos frecuen- ser deglutidas y alcanzar duodeno y yeyu-
temente meteorismo, vómitos y diarrea. no, donde se fijan y comienzan a produ-
• Respiratorio: desde sintomatología cir nuevos huevos fecundados. Al fijarse
inespecífica hasta síndrome de Löef- en ID, los gusanos adultos causan una
fler (cuadro respiratorio agudo con fie- lesión mecánica que provoca pérdida san-
bre de varios días, tos y expectoración guínea progresiva y crónica.
abundantes y signos de condensación
pulmonar transitoria, consecuencia del Clínica
paso pulmonar de las larvas y una res- • Piel: “síndrome de Larva Migrans
puesta de hipersensibilidad asociada). Cutánea”: dermatitis pruriginosa, tran-
• Otras: anorexia, malnutrición, obstruc- sitoria y recurrente en pies y zonas
ción intestinal, absceso hepático. interdigitales, donde penetran y se des-
plazan hasta alcanzar el sistema cir-
Diagnóstico culatorio.
Hallazgo del parásito o sus huevos en • Respiratoria: desde síntomas inespe-
materia fecal o de las larvas en esputo o cíficos a síndrome de Löeffler (ver
material gástrico si coincide con fase pul- ascariosis).
monar. • Digestiva: dolor epigástrico, náuseas,
pirosis y diarrea ocasionalmente.
Tratamiento y prevención (ver tabla II) • Síndrome anémico.
Mismas medidas que para tricocefa-
losis. Diagnóstico
Hallazgo de huevos del parásito en
7. Anquilostomiasis o uncinariasis materia fecal. Clínico: área endémica +
(Ancylostoma duodenale y Necator síntomas cutáneos y pulmonares + ane-
americanus) mia + contacto con tierra.

Etiopatogenia Tratamiento y prevención (véase tabla II)


Los huevos de estos dos helmintos se Al tratamiento etiológico hay que aña-
eliminan por materia fecal y eclosionan dir el de la anemia, que puede llegar a ser
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muy severa. A las medidas de tipo preven- Clínica


tivo habituales (uso de letrinas y zapatos, En general depende del estado inmu-
saneamiento ambiental y educación pobla- nitario del paciente.
cional) se unen actualmente tratamiento • Piel: “síndrome de Larva Currens”:
comunitario en zonas de alta endemia. dermatitis pruriginosa por el paso tans-
cutáneo de la larva y el recorrido rea-
8. Estrongiloidiasis (Strongyloides lizado hasta llegar a circulación sisté-
stercoralis) mica.
• Respiratorio: suele provocar sintoma-
Etiopatogenia tología menor como tos y expectora-
Esta geohelmintiasis presenta un ciclo ción, pero también se han descrito
vital con distintas posibilidades: casos de neumonitis y síndrome de
a. Ciclo directo: la larva, que se encuen- Löeffler.
tra en el suelo, se modifica para poder • Digestiva: la intensidad de la sintoma-
penetrar a través de la piel al sistema tología está en relación con el grado
circulatorio, donde llega a sistema car- de parasitosis: dolor epigástrico, vómi-
diaco derecho y circulación pulmonar, tos, anorexia, períodos de diarrea que
asciende por las vías respiratorias has- se alternan con estreñimiento.
ta ser deglutida y dirigirse a la muco- • Síndrome de hiperinfestación: casi
sa del ID. Allí se transforma en hem- exclusivo del paciente inmunocom-
bra infectante, produce nuevos hue- prometido. Los síntomas anteriormen-
vos que eclosionan y se dirigen a la te señalados se expresan con mayor
luz intestinal, desde donde son elimi- severidad.
nados al exterior.
b. Ciclo indirecto: incluye una o varias Diagnóstico
generaciones de larvas en vida libre Eosinofilia importante, más evidente
(sin afectación humana), hasta que se si la extracción coincide con el paso pul-
produce la modificación que hace a la monar del parásito. La visualización del
larva infectante para el hombre. parásito en material fecal es diagnóstica
c. Ciclo de autoinfección: la modifica- pero difícil por la irregularidad en la eli-
ción larvaria se produce en la luz intes- minación, al encontrarse a nivel de muco-
tinal en lugar del exterior y posterior- sa-submucosa intestinal. Necesita micro-
mente penetra en el sistema circulato- biólogo experto. Serología mediante EIA,
rio y realiza un recorrido similar al del sensibilidad > 90% pero reactividad cru-
ciclo directo. Es lo que se denomina zada con filarias y otros nematodos.
síndrome de hiperinfección por S. ster-
coralis, y explica que pueda existir una Tratamiento y prevención
parasitosis persistente sin necesidad (véase tabla II)
de reinfecciones externas, así como la Debe ser siempre tratada ante la posi-
afectación de otros órganos: hígado, bilidad de autoinfección y la curación debe
pulmón, SNC, sistema ganglionar… ser comprobada parasitológicamente. Son
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importantes las medidas preventivas de tratamiento debe ser repetido entre 7-10
tipo individual y general: uso de letrinas días.
y zapatos, saneamiento ambiental, educa-
ción poblacional… 10. Teniasis (Taenia saginata y solium)

9. Himenolepiasis (Hymenolepis nana) Etiopatogenia


El ser humano puede actuar con este
Etiopatogenia parásito como huésped intermediario o
El hombre puede ser tanto huésped definitivo. El paciente parasitado elimi-
intermedio como definitivo para la para- na proglótides y huevos en la materia fecal,
sitación por este cestodo de pequeño tama- que son ingeridos por animales (cerdo en
ño. Los huevos son ya infectantes al salir T. solium y ganado vacuno en T. sagina-
por la materia fecal y son ingeridos ta), en los que se forman cisticercos en
mediante prácticas de escasa higiene. Los músculo estriado que son posteriormente
huevos alcanzan el duodeno, donde se ingeridos por el hombre mediante carnes
adhieren a la mucosa intestinal y penetran poco o mal cocinadas. Una vez en el ID,
en la mucosa, obteniendo la forma de cis- el parásito se adhiere a la pared, crece y
ticercoide. Posteriormente podrá pasar de comienza a producir de nuevo proglótides
nuevo a la luz intestinal y formar el pará- y huevos. La mayoría son infecciones úni-
sito adulto con capacidad productora de cas, producidas por una tenia solamente.
huevos.
Clínica
Clínica Es escasa, principalmente de tipo irri-
Síntomas digestivos, generalmente tativa mecánica, e inespecífica: meteoris-
leves, como dolor abdominal, meteoris- mo, náuseas, dolor abdominal, etc. Pue-
mo, diarrea y bajo peso si la infección se de ocurrir la salida de proglótides a nivel
cronifica. anal con molestia y prurito perineal, así
como la observación del deslizamiento de
Diagnóstico las mismas por los MMII dejando un líqui-
Eosinofilia si está circulante, lo habi- do lechoso muy pruriginoso y muy rico
tual es que curse sin eosinofilia. Visuali- en huevos.
zación de huevos en materia fecal. El
número de ellos encontrado está directa- Diagnóstico
mente relacionado con el grado de para- Mediante la observación por parte del
sitación. paciente de salida de proglótides en
heces. Visualización de proglótides en
Tratamiento y prevención materia fecal. Determinación de copro-
(véase tabla II) antígenos por EIA (aunque presenta reac-
En general es una tenia más resisten- tividad cruzada con otros cestodos), útil
te por la presencia de cisticercoides, en la para la comprobación de la efectividad
mucosa intestinal, por lo que el ciclo de del tratamiento.
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Tratamiento y prevención • Nódulos subcutáneos y musculares


(véase tabla II) blandos y no dolorosos, generalmen-
La prevención debe ser realizada te asociados a la neurocisticercosis.
mediante un adecuado control de seguri- • Afectación oftálmica: generalmente
dad de las carnes en los mataderos, así única y unilateral. Si la larva muere,
como con una adecuada cocción o conge- puede producir importante reacción
lación prolongada de las carnes. La ade- inflamatoria y provocar importante
cuada eliminación de las excretas resul- reacción uveal, desprendimiento de
ta también fundamental. Criterios de cura- retina y ceguera.
ción: hallazgo del escólex en materia fecal
tras tratamiento; examen de heces nega- Diagnóstico
tivo durante 3 meses siguientes a trata- Imagen: TC cerebral o RNM en
miento o negativización de coproantíge- paciente procedente de área endémica con
nos. inicio de sintomatología neurológica des-
crita. Inmunodiagnóstico con Inmunoblot
11. Cisticercosis (Taenia solium) posee mayor sensibilidad y especificidad
que el diagnóstico por EIA.
Etiopatogenia
Es la afectación tisular de la larva de Tratamiento y prevención
la T. solium. El hombre ingiere huevos de (véase tabla II)
este subtipo de tenia y al llegar a ID, Puede ser necesario añadir al trata-
penetran la pared hasta alcanzar el sis- miento, corticoides, antiepilépticos e inclu-
tema circulatorio, el pulmón y posterior- so cirugía si aparecen signos de HTIC. Es
mente el corazón izquierdo desde don- necesario realizar control de imagen 3-6
de son distribuidos por la circulación arte- meses después de concluir el tratamien-
rial a distintos lugares del organismo (más to. Para la prevención es fundamental rea-
frecuentemente SNC, tejido celular sub- lizar una correcta cocción de la carne de
cutáneo, músculo y ojo), en los que for- cerdo así como extremar las medidas de
ma los denominados quistes o cisticer- higiene en la cría de éstos.
cos, que pueden permanecer durante años
y que, al morir, producen una importan- BIBLIOGRAFÍA
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