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Actividad 1 - Análisis de noticias relacionadas con el comportamiento anormal

Psicopatología

DOCENTE
María Gaitan

ESTUDIANTES
Derly Rodriguez Amado –100075651
Jessica Paola Guerrero –100082681
Nathalia Carolina Ortiz - 100070128
Ivon Arias Torres - 100072506
Paola Vargas Ortiz - 100044727
Ceyi Valencia Casquete - 100071469

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA IBEROAMERICANA FACULTAD


DE EDUCACIÓN CIENCIAS HUMANAS Y SOCIALES PROGRAMA
DE PSICOLOGÍA

2021
«Hijos de Caín», historia de los monstruos psicópatas desde el principio
de los tiempos, por Adelaida Del Campo.
«Ted Bundy, que asesinó por lo menos a 36 jóvenes estudiantes universitarias en seis estados,
emergió de aquella época como el prototipo de asesino en serie posmoderno. Pero en las películas,
en la realidad y en la literatura de ficción, en los medios de comunicación, en la cultura popular e
incluso en la psiquiatría forense, no existía un término consensuado para definir a Ted Bundy.

12 de junio de 2021

En una reciente publicación del medio español Confilegal se da a conocer el


artículo«Hijos de Caín», historia de los monstruos psicópatas desde el principio de los
tiempos, por Adelaida Del Campo, periodista, licenciada en Ciencias de la Información.

Recuerda que «Hijos de Caín» es una historia real de monstruos. Monstruos humanos.
El historiador Peter Vronsky ha investigado actos horrendos, violación, tortura,
mutilación, canibalismo o necrofilia y ha examinado el fenómeno de los asesinos en
serie a partir de sus dimensiones evolutivas antropológicas.

Desde la prehistoria, desde el año 15.000 antes de nuestra era, hasta nuestros días.

Porque siempre han existido en la historia de la Humanidad.

Mucho antes de que se acuñara el término asesinos en serie –en 1981– solo había
monstruos, criminales atroces y sádicos que eran vistos como hombres lobo, vampiros,
demonios y brujas, o, más tarde, en el pasado siglo, psicópatas.

Precisamente en el siglo XX aparecieron diversas aproximaciones a este fenómeno


social, que ya existía previamente.

Tratando de entender cómo encaja el asesinato serial en el arco de la historia humana,


y profundizando tanto en la psique de los perpetradores como en los parámetros
históricos, míticos y culturales que determinan la naturaleza del homicidio, Vronsky ha
escrito una obra que relata sus comienzos como investigador de los «serial killers» o
asesinos en serie.

«Hijos de Caín», título que tiene como referencia el primer crimen de la humanidad
cuando Caín mata a su hermano Abel, viene a cubrir el vacío entre los áridos estudios
académicos y el sensacionalismo del verdadero crimen.

“Cuando en 1979 me topé con mi primer asesino en serie, yo no sabía que existiera tal
cosa. El término asesino en serie no se conocía salvo en el mundo cerrado de los
conductistas e investigadores de homicidios del FBI, que en la década de 1970 se
enfrentaban, en diferentes jurisdicciones, a un repentino aumento de asesinatos sin
resolver que parecían estar ligados a responsables únicos y desconocidos», explica
Vronsky.
Ted Bundy asesinó a 36 mujeres. Fue ejecutado el 24 de enero de 1989 en una prisión
de Florida. Foto: Wikipedia.

«Ted Bundy, que asesinó por lo menos a 36 jóvenes estudiantes universitarias en seis
estados, emergió de aquella época como el prototipo de asesino en serie posmoderno.
Pero en las películas, en la realidad y en la literatura de ficción, en los medios de
comunicación, en la cultura popular e incluso en la psiquiatría forense, no existía un
término consensuado para definir a Ted Bundy, ni para aquello con lo que yo me
encontré, tal como lo tenemos ahora: el nombre asesino en serie”, añade.

UN ENCUENTRO INQUIETANTE Vronsky, historiador, investigador y productor de


documentales –«Serial Killers: The Method and Madness of Monsters (Asesinos en
serie: El método y la locura de los monstruos) y su secuela «Female Serial Killers: How
and Why Women Become Monsters» (Asesinas en serie: Cómo y por qué las mujeres
se convierten en monstruos)–, tuvo de joven un encuentro fortuito al cruzarse en el
ascensor “con un monstruo que había atado, ahogado, violado, torturado y asesinado
brutalmente a dos prostitutas de la calle en su habitación del hotel. Les había cortado la
cabeza y había metido las partes cercenadas en una bolsa».

«Mientras yo me acercaba al vestíbulo del hotel, él dejaba los torsos descabezados


sobre charcos de sangre que ya se estaba coagulando sobre el colchón, los empapaba
en combustible para encenderlos y les pegaba fuego. Luego salió con su bolsa llena y
con total calma cogió el ascensor para bajar mientras yo esperaba impaciente y
rabiando en el vestíbulo de abajo”.

Seis meses después, en mayo de 1980 Richard Cottingham fue arrestado y se justificó
ante la policía diciendo que “tenía problemas con las mujeres”.
Si bien Cottingham nunca alcanzó la fama a la que llegaron otros asesinos en serie,
fascinó a muchas personas que están inmersas en el campo del homicidio en serie.
Mató a 6, a lo largo de 20 años; 4 víctimas pudieron sobrevivir.

Richard Cottingham, arriba, a la derecha, en una imagen de cuando fue detenido; la de


la izquierda es de la actualidad. Debajo, tres de sus víctimas: Nancy Vogel, asesinada
en 1967, Maryann Carr, en 1977, and Deedeh Goodarzi, en 1979.

El célebre perfilador y doctor Robert Keppel, que trató con asesinos en serie muy
famosos como Ted Bundy y Gary Ridgway, el asesino de Green River, considera a
Cottingham el Monte Everest de los asesinos sádicos.

El libro ofrece una macrohistoria nueva y actualizada del asesinato sexual en serie y su
investigación, ampliando así la historia moderna que autor describió en «Serial Killers:
The Method and Madness of Monsters», que comenzaba aproximadamente con Jack el
Destripador en la década de 1880.

Aquí Vronsky comienza desde el principio, desde la Edad de Piedra.

Y afirma no ser perfilador ni psiquiatra forense ni clínico, sino un historiador e


investigador cuyo objetivo es “tratar de entender el asesinato en serie desde la
perspectiva narrativa-lineal del historiador, y tratar de enmarcarlo en un contexto
histórico, social y antropológico a largo plazo”.
PSICÓPATAS ASESINOS

Hay tantas teorías sobre cómo se origina la psicopatología de un asesino en serie en la


primera infancia, que la deducción lógica es que “sabemos muy poco —casi nada—
sobre por qué existen asesinos en serie. Aunque sí hay dos certezas: se origina en la
niñez y la mayoría sabe perfectamente lo que están haciendo».

De hecho, dice el autor, “se puede diagnosticar a muchos asesinos en serie (no a todos)
como psicópatas según la prueba estándar de «Psychopathy Checklist Revised»,
PCL-R (Lista Revisada de Comprobación de Psicopatías), desarrollada por el psicólogo
canadiense Bob Hare, pero definitivamente no se puede explicar su conducta porque
tampoco hemos llegado a descubrir qué es la psicopatía, ni por qué algunos psicópatas
se convierten en asesinos en serie mientras otros llegan a ser exitosos presidentes de
corporaciones o incluso diputados”.

Afortunadamente para todos, lo cierto es que solo una ínfima proporción de psicópatas
se convierte en asesinos en serie.

Pese a todo, los asesinos en serie reconocibles son escasos en los registros hasta
llegar a mediados del siglo XV, durante el Renacimiento, cuando comenzaron a
aparecer en las actas judiciales, “con un índice de detención anual casi comparable al
índice per cápita de los asesinos en serie en Estados Unidos actualmente”, dice
Vronsky.

El historiador Peter Vronsky, autor del libro «Hijos de Caín, una historia de los asesinos
en serie».

HOMBRES LOBO

En el siglo XV se produjo una la epidemia de hombres lobo – que persigue, domina,


mata, viola y se come a la presa humana– se produjo otra más grande aún de brujas,
“que desencadenó una larga campaña muy bien organizada de torturas, violaciones y
asesinatos de mujeres. No es exageración caracterizar este asesinato de mujeres,
sistémico y patológico, como una forma de asesinato en serie patrocinado por la Iglesia
y el Estado”.

En 1484 el Papa hizo un llamamiento a las autoridades eclesiásticas y civiles de todas


partes para que colaborase con los inquisidores y los demonólogos de la Iglesia en su
guerra contra las brujas, los hombres lobo, los monstruos y los herejes.

A partir del siglo XV apareció la figura del «hombre lobo» y que llegó hasta el XIX.

EL PANADERO CARNICERO

Algunos de los casos que trata el libro son estremecedores.

El asesino en serie Robert Christian Hansen, el panadero carnicero, que mató entre 17
y 21 mujeres de entre 16 y 19 años en Alaska entre 1972 y 1983.

“Solía llevar a sus víctimas femeninas en su avioneta hasta una remota cabaña en
calidad de ‘invitadas’, para luego obligarlas a correr desnudas por los bosques mientras
él las perseguía y las cazaba de forma sádica. Era mayor el placer de la caza que el de
la matanza”.

El método del asesino en serie Martin Dumollard, conocido como «el asesino de
criadas» era casi siempre el mismo: cogía el tren desde su aldea hasta Lyon, Francia, y
se mezclaba con la multitud de viandantes, buscando a sus víctimas ideales en las
calles más concurridas.

Robert Christian Hansen, hijo de un inmigrante danés, encontraba placer en «cazar» a


sus víctimas, mujeres a las que dejaba desnudas, en los bosques de Alaska.
Siempre eran mujeres jóvenes que buscaban empleo con desesperación. Las llevaba a
una zona boscosa y alejada y las perseguía y atacaba.

Cuando llevaba a cabo los crímenes estaba casado con Marianne Martinet, quien fue
cómplice activa de sus fechorías durante casi 10 años. En 1860 una de sus víctimas
Marie Pichon, consiguió escapar y relató todo lo ocurrido a la gendarmería de Montluel.

Gracias a la descripción de Marie, Dumollard fue detenido el 3 de junio de ese año. El


juicio se celebró en enero de 1862. Dumollard enfrentó con gran frialdad y calma,
negándolo todo hasta el final y tratando de inculpar de los asesinatos a dos presuntos
cómplices, reconociendo únicamente su responsabilidad en la captación de las víctimas.

«A pesar de que lo hizo varias veces, las autoridades no vieron o no quisieron ver la
conexión entre casos, “en un ejemplo clásico de ‘ceguera a la conexión’, que hasta el
día de hoy sigue siendo uno de los desafíos más importantes en la investigación de
asesinatos en serie: la incapacidad de una oficina policial para reconocer características
de muchos casos que apuntan a un único perpetrador”, dice.

Un listado rápido, selectivo y conciso de algunos de los más célebres asesinos en serie
estadounidenses de la “edad de oro» revela que hay una abundancia de asesinos en
serie que crecieron bien durante la Segunda Guerra Mundial o en los primeros 15 años
del baby boom que la sucedieron.

La lista está densamente poblada por nombres de infames asesinos nacidos y criados
en los años de la posguerra y que, cada vez más, comenzaron a matar por primera vez
entre las décadas de 1970 y 1990.

UN FENÓMENO INFRECUENTE

La buena noticia es que los asesinos en serie han sido siempre —y siguen siéndolo
hoy— un fenómeno infrecuente.

“Los asesinos en serie fueron, son y serán lo que nosotros decidamos que sean según
los dictados de la historia, la política, la sociedad, la psicología, la criminología, el
comercio, el orden público, el poder y la evolución natural», según Vronsky.
ANÁLISIS

El presente análisis tiene como objetivo identificar las conductas anormales y describir el
concepto de trastorno mental de acuerdo a los diferentes momentos históricos, pues desde
hace millones de años las conductas anormales o patológicas se han presentado sin embargo
la interpretación en cada época ha sido diferente. La concepción de comportamiento anormal
se define de acuerdo al contexto y la época en la cual se presente. En el artículo analizado se
pueden identificar conductas anormales en los sujetos mencionados por el historiador como el
placer que le genera a un hombre cazar mujeres desnudas en el bosque, y luego asesinarlas y
el hecho de asumir las consecuencias con frialdad y calma negando los hechos y así mismo
se puede evidenciar que este sujeto le genera placer el sufrimiento de sus víctimas y no
siente culpabilidad por los asesinatos cometidos. Estas conductas anormales generan
deterioro funcional, alteraciones en el funcionamiento cognoscitivo, emocional y conductual
y en algunos casos impedimento en la realización de objetivos personales y profesionales.

Las conductas anormales en el periodo clásico eran consideradas como eventos externos al
individuo y se explicaban por medio de eventos de la naturaleza, demonios, maleficios y
hechicerías de igual forma la enfermedad mental fue considerada como castigo divino y las
culturas más complejas atribuyeron la locura a los dioses, las culturas primitivas lo
explicaban por medio de demonios o fuerzas naturales todas estas explicaciones derivan de
un pensamiento muy antiguo el cual dio origen a las trepanaciones craneales practicadas
desde hace más de 5000 años que fueron evidenciadas alrededor del mundo y que tenían
como objetivo dejar salir los demonios que causaban los trastornos mentales (Salaverry,
2012,p.144).

Según la teoría de los humores de Hipócrates los trastornos psicológicos pueden tratarse al
igual que otras enfermedades y las causas podrían ser por patología, traumatismo cerebral o
herencia. Esta teoría explicaba la conducta anormal con base a los cuatro humores pues
planteaba que el funcionamiento normal del cerebro y las características de la personalidad se
relacionaban con estos 4 humores y por ende la enfermedad era el resultado de tener una
cantidad desproporcionada de dichos humores. Este fue el primer acercamiento de trastorno
asociado al desequilibrio químico que causaba estas enfermedades y se ubicaba en el cerebro.
Por otra parte en la edad media las conductas anormales fueron consideradas como designios
divinos y la conducta anormal de los sujetos fue considerada como obra del demonio o las
brujas y los tratamientos para su cura fueron exorcismo, rasurar la cabeza del paciente en
forma de cruz, reclusion, tortura, sumerguirlos en agua helada, unguentos, posicones entro
otros que se empleaban para tratar las enfermededades mentales.

En el siglo XIX, fue descubierta la naturaleza y la causa de la Sífilis y se identificó el agente


bacteriano también descubrieron que cuando la enfermedad estaba en una etapa avanzada se
producían síntomas psicóticos como delirio de persecución y otras conductas extrañas.
Además Philippe Pinel ofreció un trato humano a las personas con trastornos mentales y se
inclinó por el aspecto psicológico y se enfocó en los emocionales en la terapia, se inició
entonces el establecimiento de los asilos en los cuales las diversas observaciones permiten
identificar y conocer mejor diversas enfermedades mentales. Por otra parte John P. Gray
(1.854), director del Hospital de Nueva York consideraba que la demencia es generada por
causas físicas y el tratamiento fue descanso, dieta, temperatura y ambientación adecuada.
años más tarde Emil Kraepelin (1.856-1.926), fundador de la psiquiatría moderna y su aporte
más significativo fue el diagnóstico y la clasificación, y en 1. 913 hizo aportes importantes al
campo de la Psiquiatría (Villa, 2007,p.02).

Así mismo las aportaciones de diversos científicos han contribuido significativamente en la


evolución de la psicología, en el siglo XIX las principales aportaciones fueron realizadas por
Wilhelm Wundt (1832–1920) Fisiólogo quien fundó el primer laboratorio de Psicología
experimental en la Universidad de Leipzig, este acontecimiento marcó el surgimiento de la
Psicología como ciencia, en los laboratorios se utilizaba la metodología experimental que se
basaba en modelos de las ciencias naturales y por metodos de observacion realizaron
experimentos con los cuales dieron origen las primeras teorías. (Revista Latinoamericana de
Psicología,1979, p.2). Por otra parte, de acuerdo a la investigación realizada se puede afirmar
que las enfermedades mentales han existido desde épocas antiguas bajo diferentes conceptos
y que en cada una de estas épocas se han empleado diferentes tratamientos propios de cada
cultura para intentar solucionar dichas patologías sin embargo las formas de solución carecían
de validez científica y por tanto se basaron en influencias de cada época para dar una
explicación a las enfermedades mentales.
Sin embargo los últimos dos siglos con el surgimiento de la Psiquiatría y posteriormente la
psicología como ciencia se ha logrado diagnosticar las enfermedades mentales bajo un
modelo científico, confiable que ha permitido tratamientos funcionales a nivel Psicológico
como farmacológico para el efectivo tratamiento de las mismas.

Momentos históricos
Período clásico

De acuerdo a la gran influencia de la iglesia en este momento histórico los individuos que
tenían alguna conducta anormal era interpretados como personas poseídas por demonios o
con alguna brujería. También se dice que los monarcas tenían el poder constituido para dictar
las normas e implementarlas a los esclavos ya que por su poder se sentían dueños de ellos y
así ejecutar las diferentes torturas o cremación para así liberarlos.

Edad media:

Considerada como la época del miedo ya que habían sucesos de histeria, y las personas se
comportan como lobos. La iglesia aprobaba la cacería de brujas y hechiceros.
la religión tiene poder y rechaza todo lo que no va a favor de ellos enfermedad es castigo por
los pecados. A medida que interviene el poder público, la venganza privada acaba siendo
sustituida por pena de muerte, las autoridades civiles quemaron a personas consideradas
herejes bajo la inquisición medieval.

Siglo XIX

En este siglo se ven muchos avances progresivos donde se ve reflejado el avance de la


psicobiología y la psicofarmacología, además buscan las causas de los comportamientos
anormales de índole psicológico y psicosocial. Durante este siglo el comportamiento anormal
de monstruos humanos (psicópatas), estos hechos se vuelven más frecuentes tanto dentro de
la familia como fuera de ella.
Referencias

Villa, Gallego. O. M. (2017). Documento explicativo unidad I. Corporación Universitaria


Iberoamericana. Recuperado de Villa, Gallego. O. M. (2017). Documento explicativo unidad
I. Corporación Universitaria Iberoamericana

Wilhelm Wundt (1832-1920) Revista Latinoamericana de Psicología, vol. 11, núm. 1, 1979,
pp. 170-172 Fundación Universitaria Konrad Lorenz Bogotá, Colombia. Recuperado de
https://www.redalyc.org/pdf/805/80501114.pdf

Salaverry, Revista Peru Med Exp Salud Publica. 2012;29(1):143-48. Recuperado de


http://www.scielo.org.pe/pdf/rins/v29n1/a22v29n1.pdf

Diario Constitucional (2021), «Hijos de Caín», historia de los monstruos psicópatas desde el
principio de los tiempos, por Adelaida Del Campo. Recuperado de
https://www.diarioconstitucional.cl/2021/06/12/hijos-de-cain-historia-de-los-monstruos-psico
patas-desde-el-principio-de-los-tiempos/

http://www.diputados.gob.mx/museo/s_rai5.htm

http://www.informacionespsiquiatricas.com/anteriores/info_2009/03_198_01.htm

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