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Universidad Nacional Autónoma de México

Facultad de Estudios Superiores Acatlán


División de Ciencias Socioeconómicas

El Político y el Científico
Max Weber

Carlos Gabriel González López

Grupo 1102 Martes 19 de Noviembre del 2013


La Política como vocación.

El Político y el Científico es una obra basada en dos conferencias dadas por Max
Weber en Alemania en 1919.

En la primer parte de esta obra, llamada: “La Política como vocación”, inicia dando
su definición de política como “Dirección o influencia sobre la dirección de una
asociación política”. Menciona que todo Estado está fundamentado en la violencia,
que este es su medio específico, marca al Estado como una relación de
dominación de hombres sobre hombres, donde los dominados deben acatar la
autoridad del Estado, es decir, lo deben reconocer para que este pueda gobernar
legítimamente sobre ellos, aquí Weber va a marcar tres tipos de dominación
legítima, principalmente esta la legitimidad tradicional, que va a ser aquella donde
los gobernados se someten a una autoridad, gracias a la creencia de tradiciones
regidas desde lejanos tiempos. Aquí podría caber la autoridad de figuras
religiosas. Por otra parte existe la legitimidad carismática, que es donde la
autoridad es entregada por el heroísmo o ejemplaridad de una persona, dentro de
esta se encuentran los caudillos. Por último se encuentra la legitimidad legal,
donde la ley es un instrumento de la razón que permite a las autoridades regir la
conducta de los individuos, este es el tipo de legitimidad que para Weber
prevalecía en Occidente.
Weber define al Estado moderno como una asociación de dominación con
carácter institucional que ha de monopolizar dentro de un territorio la violencia
física legítima como medio de dominación y que ha reunido todos los medios
materiales en manos de su dirigente y ha expropiado a todos los funcionarios
estamentales que antes disponían de ellos por derecho propio, sustituyéndolos
con sus propias jerarquías supremas.
En el Estado moderno se realiza, pues, al máximo la separación entre el cuadro
administrativo que son los empleados, obreros administrativos y los medios
materiales de la administración.
Weber ve a la política como una empresa la cual necesita de una administración
racional, donde se encontrarán los funcionarios políticos y los funcionarios
profesionales, los primeros son aquellos que pueden ser transferidos o removidos
de su cargo en cualquier momento, los segundos es de los cuales forma parte el
burócrata, que es aquel que no se adentra en asuntos de política, que se limita a
su labor de administración, según las tareas que le son asignadas.
Weber menciona que hay dos tipos de hacer política una profesión, se vive de la
política o se vive para la política, quien vive para la política, lo hace
apasionadamente, guiado por su sus valores e idolología, se entregan a su
actividad, estos por lo general tienen ingresos económicos externos a la política,
es decir pueden satisfacer sus necesidades en el ámbito económico. Los que
viven de la política, van a ser aquellos que buscan cubrir sus necesidades
económicas, ellos siempre buscaran ascender en su carrera política. El político
que vive para la política debe tener tres factores importantes: la pasión,
responsabilidad y el criterio. En la pasión el político debe tener dedicación por lo
que hace, en la responsabilidad sus acciones deben estar siempre orientadas en
servicio de una cusa y finalmente el criterio, donde se tiene la capacidad de poder
guardar distancia con los hombres y cosas. Asimismo estas tres cualidades de un
político se pueden ver amenazadas por la vanidad, esta debe ser combatida
mediante ellos mismos, ya que si no se hace, esta lo puede conducir a que sólo el
político busque su satisfacción y lo haga un funcionario irresponsable, y en
consecuencia no pueda justificar su dominación sobre los hombres. En su
momento Weber habló sobre los dos tipos de ética, que son las de la
responsabilidad y la de la convicción, en esta última actuaría un político que se
vea persuadido por la vanidad.

Un Político nunca debe olvidarse que su función tiene por objeto los asuntos
públicos, por lo tanto un político por vocación debe actuar por una ética de la
responsabilidad, donde él sabe las consecuencias de sus actos.

Desde la aparición del Estado constitucional y más completamente desde la


instauración de la democracia, el demagogo es la figura típica del jefe político en
Occidente. El publicista político y el periodista, eran los representantes de la figura
del demagogo en para Weber en la actualidad. Sólo el periodista es político
profesional y sólo la empresa periodística es una empresa política permanente.

Para Weber es importante la evolución del funcionario moderno, que se va


convirtiendo en un conjunto de trabajadores intelectuales altamente especializados
mediante una larga preparación. La política consiste en una dura y prolongada
penetración en las diferentes resistencias, para lo que se requiere pasión,
responsabilidad y criterio.

La Ciencia como vocación

Weber principalmente hablará sobre la carrera de los jóvenes en la profesión


científica, donde se inicia como profesor sin salario, a esta situación se debe
adaptar un joven recién egresado y debe ser capaz de sustentarse por unos años
por sus propios medios, pensando que en un futuro podrá vivir de la ciencia.
Durante este tiempo se puede ser destituido y sólo puede tener las esperanzas de
que lo mantenga en su puesto aquel que lo impuso. Weber dice que la educación
alemana se está americanizando, ya que esta se está convirtiendo en empresas
del capitalismo, donde incide la separación del trabajador de sus medios de
producción. La cuestión acerca de si un profesor o asistente podrá algún día
ocupar un puesto de director o superior al suyo es dependiente del azar. Muchos
sin importar su capacidad, no llegan a ocupar puestos que merecen por sus obras
en este sistema de selección, son sólo los mediocres arribistas los que tienen
posibilidades de ser nombrados cuando en los nombramientos intervienen motivos
políticos. La cuestión de saber si un profesor es bueno o malo va a ser respondida
por los estudiantes, ya que ellos son los que honrarán su labor.
Para que un científico tenga verdaderamente vocación, este tiene que tener
pasión, sin esta no se tiene vocación, pero esta debe ser auténtica, ay que no es
posible tener buenos resultados con una pasión forzada.

De igual manera para producir algo verdaderamente valioso, a un científico se le


debe ocurrir algo, y en esta tarea se paga caro cuando se utilizan medio
mecánicos. Todo logro científico implica nuevas cuestiones, es decir siempre van
a ser superados y envejecer, entonces ser superado es el destino de toda tarea en
común, sin embargo el científico debe plantearse que contribuye al progreso .En el
campo de la ciencia sólo tiene personalidad quien está pura y simplemente al
servicio de la causa. El científico debe tomar una ética de la responsabilidad, que
permita al investigador ser honesto consigo mismo y con sus interlocutores, esta
misma ética debe ser tomada por los profesores, ya que el profesor al impartir
cátedra no debe persuadir a sus alumnos para que este asuma sus preferencias
políticas. El científico influye también sobre un público que está sujeto a su
autoridad.

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