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Justicia

Discrepancias
Quien del derecho ajeno se apropia da lugar a la desavenencia.
El proverbio de la Biblia advierte: No contiendas con nadie sin motivo, si no te ha hecho
agravio.
Sabido es que aumenta el patrimonio cuando hay armonía y adhesión, pero cuando hay
disentimiento lo destroza y deshace.
Administrar justicia significa, la voluntad firme y constante del juez de dar lo que pertenece
al litigante.
No creo que haya juez tan difícil y tan peligroso, que sea capaz de mantener la injusticia
en sus sentencias.
Conveniencias
Nada cuanto concierne a cierta justicia puede conseguirse sin billetes precisamente,
porque es del dinero la mejor acotación.
En el cosmos insondable de la justicia si no lo primero, lo segundo es el dinero que vale
por cien abogados. Quevedo decía con comprensible realidad: Poderoso caballero es Don
Dinero. Dar pasos hacia el dinero es andar en buenos pasos.
Hay veces cada vez más frecuentes, en que la falta de un poco de dinero hace que la
justicia agonice. Entonces, Balzac no está equivocado cuando dijo, que se puede ser muy
feliz con muy poco dinero.
Evitemos todos a cualquier coste, que el billete sea el intermediario de la justicia.
La justicia exige que sus jueces tengan las manos pulcras y no hartas de dinero.
Conviene que exista la justicia y porque conviene, creemos que prevalece sobre todas las
cosas.
La sensatez en el respeto a la justicia, es la justicia misma respetada sin medida alguna.
La justicia se la comprende mejor conociendo el derecho.
¿Si hay justicia de dónde provienen los perjuicios, las ofensas y la ruina?
si no existe, ¿de dónde los bienes, el derecho, la equidad?
Nadie como la justicia quiere que se respete la ley, ella misma hace su debido realce y
ordena a todos que la acaten.
Más importa no habituarse en reflexionar sobre la justicia, que hacerse indigno de ella.
Hay que temer a la justicia y no tener otro desasosiego bastante.
Si la justicia no existiera sería imperioso porfiarla y entonces todo degeneraría en manos
del más audaz.
Es ineludible hallarse persuadido de la vigencia de una justicia terrenal, sin esperar que
llegue por conflicto judicial alguno.
Preferible es creer en la justicia que cuestionarla sin fundamento bastante.
Hay un sentimiento en la gente quizás, al verse precisada a reconocer una justicia, sea la
que fuere.
He visto infinidad de sentencias pero contadas veces las he entendido tal vez, porque mis
ojos no pueden apreciarlas sino por medio de las lágrimas de sus litigantes.
Qué justa sería la justicia, si no fuera tan socorrido el procedimiento para alcanzarla.
Como la sentencia reanima el juicio, la apelación mantiene la esperanza de la justicia.
Creo en el derecho como creo en la justicia porque siento la presencia de la seguridad
jurídica, único destino de toda sociedad civilizada.
Todos los días, las semanas y los años son herencia del pasado y guardan semejanza en
la Función judicial. A la misma hora llega el Juez, a la misma hora el café y a la misma
hora se marcha. Y así pasan de Enero a Diciembre mientras las sentencias poco aparecen
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y los juicios mucho crecen.


Simulando a Cervantes: Es preferible la tiranía del gato a la equidad de la rata.
En la célebre profesión de abogado en la que tanto pueden aprender los propios
abogados, funcionarios, profesores y estudiantes, políticos, como los ciudadanos, que es
preciso respetar el derecho ajeno cualesquiera que fueren las circunstancias, para vivir en
paz.
En la justicia casi nunca un ratón es igual a un elefante, porque los jueces ven que tienen
múltiples cualidades y su criterio encuentra variadas inclinaciones. Nada de lo que
sentencian es tan simple ni elemental, natural y desnudo, limpio o estricto.
Cuando la sentencia proviene del derecho nada procede hacer. Sin embargo, lo que haya
de suceder con la extraordinaria casación, estará en manos de los supremos jueces que
definitivamente decidirán, quien ha tenido la razón.
Debemos aceptar con entereza la suerte que nos espera de la sentencia y no tratar
inútilmente de escarnecerla puesto que es imposible eludirla.
Esquilo, nos conduce a pensar que solo son sabios los que veneran y temen el destino.
Inesperadas muchas veces, son las sentencias, porque las que se aguardan no llegan y
en ocasiones desatan lo que parecía incomprensible.
Lo que no ha sucedido en la sentencia, puede suceder por la casación.
Nada es inasequible a la justicia sobre todo, cuando ensaya arruinarse a sí misma.
Nunca las pérdidas en el juicio perecen pues mientras exista justicia, el derecho
permanecerá.
Si la justicia se trastornara, la Nación se vendría abajo porque con la justicia la sociedad
se integra.
Permitir la justicia del poder absoluto es merecer la ruina del derecho.
Como el oro tengo que ser con el favor del cielo, que mientras más se acrisola queda con
más pureza y más limpio: Cervantes.
Evidente es que el legítimo respeto al derecho es la fuente de la justicia y por tanto de la
tranquilidad común.
Habitualmente, el anhelo del derecho conduce a su desconocimiento por las indebidas
pruebas, tal es el designio de la justicia.
La justicia desea que respetes lo que el derecho te asigna para que busques su
protección; que no desees nada de él en tu familia ni fuera de ella.
Libre es quien no ambiciona sino solo cuanto le pertenece en derecho y, sometido el
codicioso que suspira por el de los demás.
Quién mucho demanda poco alcanza.
Joubert, profiere: ¡Justicia sin fuerza! ¡Fuerza sin justicia! Desgracia horrible.
La justicia, la gran alentadora de la esperanza, pocas veces deja de ser la expresión de la
miseria humana.
No es la apreciación de los hechos y aplicación del derecho que mayor utilidad trae a la
sentencia, sino el más decoroso esmero por la justicia.
Bien sabido es que todo juicio obliga a mantenerse en confianza de la justicia pero nunca,
en la certidumbre de ella.
La persistencia en el juicio, las pruebas, la sentencia, la sabiduría de la defensa, el éxito o
la sorpresa... todo está determinado desde la misma demanda.
Las provocaciones y revanchas de procedencia política son indignas perturbaciones en la
justicia. El odio político es una mezcla de soberbia y vanidad, de endiosamiento y humos,
de euforia e ínfulas, en definitiva, de bajeza humana.
Aún el desaliento por la sentencia ha ganado muchos juicios.
¡Qué descansada vida la del que huye del mundanal ruido...! Es un bello verso de Fray
Luis de León. Agrego: la del abogado que escapa de los juicios y busca tranzar.
Quizá el reposo del Juez sea creador de la meditación debida para el acierto en la
sentencia.
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La justicia requiere que el Juez esté vigente en el derecho, vivaz en todo instante y sin
Justicia
descansar de ningún modo.
Todo lo que está debajo de la ley, no quedará oculto por mucho tiempo en que salga a luz.
La justicia para Ecuador no ha sido descubierta sino apenas desde la República de Simón
Bolívar y desde entonces, los litigios se ventilan con leyes y jueces preestablecidos y se
proclama que el juez es libre e independiente.
Primero encontrar la solución jurídica del caso para luego, buscar que el Juez te dé la
razón.
El verdadero desarrollo de Ecuador no consiste en construir carreteras, hidroeléctricas,
conceder bonos de la pobreza, obsequiar sillas de ruedas, etc. sino en elevar la
credibilidad en la justicia que debe estar hacia arriba y no rebajar día a día con los
consejeros por medio.
No rehuyamos el deber de luchar contra la corrupción judicial y tratemos de preservar la
dignidad de la justicia, como deber esencial particularmente del abogado.
Abogados y doctores en derecho, considerad todo cuanto se puede representar mientras
seamos profesionales honestos y veréis que no todo lo de la justicia tiene frustración.

Hoy los derechos en buena parte, están en manos de j jueces mediocres y para algunos,
la justicia sobre la triste conveniencia de mezquinos intereses pues por razón oculta, sale
libre el confeso reo.
Padecemos un fracaso por un sistema judicial deforme que no repara en los continuos
errores de sus fallos y en la deserción del derecho.
Pero, aún contamos con la sana fe en la justicia que nos ha mantenido durante los últimos
años en las mismas condiciones abjuradas que nos han hecho sufrir, y que bien pueden
darnos mañana la severidad imparcial pertinente y oportuna del derecho.
Autocracia la de la justicia que el derecho te concibió para que escapando de la sin razón,
se haya de ir hacia una aventura.
Prerrogativa
La fuerza de la justicia es un sentimiento de vida contra el cual sería infructuoso resistirse.
La democracia y la justicia son los pilares de nuestra convivencia, pues por ellas
permanecemos, vivimos y nos afanamos.
Pio Baraja decía, que la democracia no ha sido más que un camino abierto a todas las
ambiciones pequeñas, a todos los deseos mezquinos y malsanos. Ha hecho que el
hombre busque su progreso social más que su perfeccionamiento moral; ha
producido en todos la ambición de representar más que la de ser.
Y para Alexis Carrel: Todos sienten el deseo de vivir según su fantasía, pero en las
naciones democráticas este deseo se exacerba extrañamente, hasta adquirir una
intensidad morbosa.
No es posible hacer “revolución ciudadana” para instalar la justicia, puesto que preciso es
tenerla establecida para hacer una verdadera y duradera, señor Rafael Correa.
La censura constructiva sobre las decisiones judiciales, es una de las manifestaciones de
la libertad de expresión., en la convivencia democrática.La tragedia de la justicia
ecuatoriana es que en ella, aún no se halla la forma de realizar la democracia.
En cualquier circunstancia política, el verdadero juez es la vindicta pública.
Las sentencias deberían pesarse y no contarse, como dijera Schiller al referirse a los votos
de la democracia.
No sabemos cómo expirará la justicia, pero si esperamos que sea de achacosa y vejeta.
La justicia debe hacerse en nombre del pueblo, a condición que el Juez sea justo.
Balzac dijo, que la igualdad podrá ser un derecho, pero ningún poder humano podrá
convertirla en un hecho.
Considerar que la justicia es hostil al derecho es un grave error, pues siempre habrá en
ello cuestiones de trascendencia en nada contrarias a su esencia.
En toda Nación, la corrupción conduce siempre a la mortal agonía de la justicia.
Que Ecuador renazca a la verdadera justicia y no llegue a desaparecer de todos los
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tribunales, es la infinita confianza del Foro.


Debemos salvar la justicia para vivir en democracia.
Justicia quiere decir simplemente, respetar el derecho ajeno.
La justicia solo sirve en esencia, para justificar que administrar el Estado, no es de la
mayor trascendencia.
Quizás, la verdadera pena que sufra el culpable sea la eterna contrición de su conciencia.
Se puede jugar con lo que sea, menos con la justicia.
La justicia por su naturaleza estaría imperturbable, si los abogados no la revolvieran
creando el desorden.
¿Qué hacer para que una injusticia no se vuelva a repetir?
Seres judiciales clandestinos parecen.
Aristóteles dijo: La democracia tuvo su origen en la creencia de que, siendo los hombres
iguales en ciertos aspectos, lo son en todo.
Si los jueces impartieran justicia carentes de intereses económicos y políticos, sería más
tranquila y menos sediciosa.
Preferible es para el Juez errar en la justicia de la sentencia antes que plagiarla.
La justicia debe ser administrada por los jueces y las leyes dadas por los políticos.
Si Ecuador fuera una Nación de jueces probos, no estaría la justicia al alcance de los
políticos.
Cuando sentimos desilusión completa de la justicia, debemos temer por nosotros mismos
porque posiblemente, se están enmoheciendo nuestros conceptos sobre el derecho.
Todo deterioro es repugnante y en la justicia suele ser además, insufrible.
Justicia es la determinación que toma el Juez con firmeza de carácter, en una cuestión
dudosa.
En tiempos de paz, nada hay mejor para un hombre que la tranquilidad. Pero cuando
escuchéis el estallido de la tempestad de la guerra, imitad al tigre: Shakespeare.
Providencias judiciales hay que ameritan ser aceptadas cuando dicen NO que las que
dicen SI.
No hemos meditado lo suficiente en que hay cuestiones trascendentes en el derecho en lo
que significa su vigencia, el respeto de los demás.
Reincidencias
Confucio al referirse al delito, nos habla que hay cinco tipos imperdonables:
Cuando se medita en secreto y practica bajo la capa de la virtud;
Incorregibilidad probada contra la sociedad;
Calumnia revestida con el manto de la verdad para engañar;
Venganza, después de mucho tiempo de tener el odio oculto con apariencia de verdad; y,
Formular el pro y el contra sobre un mismo asunto, cediendo al interés.
Un juez rico; un abogado holgazán; y, un litigante pordiosero, es el cuadro que con
frecuencia, representa la justicia.
No hay justicia en el corazón de los abogados, sino intereses.
Soportar las malas sentencias son señales de decadencia.
Oxford. Considerado como un buen conferencista y ensayista en español, en francés y en
inglés, contribuyendo a la verdadera valoración que se tenía de España en el extranjero.
Notable poeta y novelista. Entre sus obras literarias publicadas constan Romances de
ciego, La fuente serena, Guía del lector de El Quijote, El enemigo de Dios, España, El
Cuadro histórico de las Indias, Vida de Bolívar, Hernán Cortes, etc.
Casi siempre el socialismo merma el prestigio de la justicia.
La decadencia de la justicia es el más oscuro de todos los males de una Nación.
Después de Vicente Rocafuerte, García Moreno, Eloy Alfaro, Velasco Ibarra y Camilo
Ponce, que representan el derecho en su plenitud y unidad, la decadencia ha invadido el
desorden en la justicia.
Ocultemos
4 los duros agravios de la justicia para no desalentar a los jóvenes abogados,
ansiosos de reputación y voluntad constante de superarse.
Justicia
La decadencia de la justicia que es declinación, debilidad, ruina, ha empezado más atrás,
desde el momento en que el social cristiano Heinz Moeller, desde el Congreso proclamó
vitalicios a los jueces de la Corte Suprema, en 1998.
Casi todos^ los que comentan como / un hecho ineludible la declinación de la justicia o son
políticos necios, abogados desocupados o escritores que ignoran el derecho.
Virgilio dijo: Cuando el peligro es extremo, es un deber sagrado el que todos
indistintamente, tomen parte en él.
La justicia exige que cada juez cumpla con la línea recta del deber constitucional.
Casos hay en que cumplir con el deber de jueces, es una injusticia por el obscuro imperio
de la ley.
La justicia es lo más veleidosa si el juez no la concibe como algo grandioso, ilimitado y
continuo deber.
¿Será acaso verdad que hayan circunstancias en que una mentira como dice Renán, sea
el más santo de los deberes? ¿Puede el juez mentir en sus sentencias sin transgredir el
derecho?
Los deberes del juez son los derechos del litigante.
Los políticos, siempre con el interés de por medio, consideran y aprueban las sentencias
más torcidas y peores que al Foro hacen gemir, aunque más le aflige ver la aceptación dé
ilustrados juristas que hace tanto daño por tan poca cosa.
¿Qué autoridad puede tener un juez cargado de corrupción que sin contrarios está
muerto?
Joubert, definía a la justicia como el derecho del más débil, no obstante, Alfredo de Vigny
tenía pena de nosotros... ¡tan débiles!
Las peores debilidades y bajezas de la justicia, se cometen por el desprecio del derecho
que se proclama defenderlo.
El principal patrimonio de la justicia es el derecho mismo. Para cuidar la paz lo primero es
vigilar la justicia.
La justicia no se logrará vigorosa y firme, sino en la equitativa solución de los inevitables
daños y mal inclinados desvíos.
Corregir las injusticias de la justicia impone una reforma estructural profunda que deje en
ridículo a toda forma de corrupción. Lo que viene haciendo el Presidente Rafael Correa es
volver a lo mismo y desempeñar igual papel de siempre, que no es otra cosa que la
comedia paralela a los intereses del Poder Político. He aquí por qué no se ha de cumplir la
anhelada y difundida revolución de la justicia.
La transformación de la justicia propugnada no solamente ahora, sino de siempre, no
depende de los relevos de jueces, ni de los cambios de leyes, sino de la instrucción seria
en el derecho y la mística en el servicio que los jueces deben llevarla dentro de sí mismos
y que no es concesión de nadie.
El mayor mérito de la cultura del Derecho es que humaniza la justicia y vive con sentido
común.
J. Fouché dijo que los tres entes más curiosos son la justicia, la política y la policía.
No siempre el provecho de uno es en perjuicio de otro.
Lo mismo que los ríos devuelven el agua al mar, lo que un hombre da ha de tomar a él,
nos ilustra un antiguo aforismo chino que bien vale para los jueces.
Vivo indicio de responsabilidad es guardar sigilo acogiéndose al silencio.
Concepción Arenal nos argumenta: Cuando la culpa es de todos, la culpa no es de nadie.
Cuanto ocurre en ciertas judicaturas son realidades que superan a la ficción.
La sentencia que es justa puede mejorarse por medio de la ampliación o la apelación y
aún es posible de perfeccionarse por la casación.
El modo más inequívoco de depurar una sentencia y sujetarla a la firmeza de la justicia, es
conocer bien el verdadero sentido del Derecho.
Hay ciertos casos que para discernirlos bien no basta haberse ilustrado en el derecho.
Por la puerta de la experiencia se ingresa a la justicia y son las canas señal de años que
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dan agudeza a la comprensión del derecho.


Hay en todo proceso, luces que pretenden enceguecer al Juez y cobrar ventaja en la
contienda.
La justicia es una especie de derecho humano y no lo es a plenitud porque sin prueba, por
más derecho que concurra, aqueja no existe.
En la justicia se vive como se litiga.
¿Por qué se ha de menospreciar tu justicia, honrado juez, si tus decisiones son . el
santuario sorprendente de un derecho escondido y obra de arte de tu particular sabiduría?
Se dice con inusitada iniquidad, que el Juez no está identificado con la justicia y que es un
intruso en quien nunca podemos confiar.
Hay sentencias puras y jueces puros. Pero, ¿por qué no hay cumplimientos correctos?
La presencia de principios morales es el mejor medio para una correcta administración de
justicia.
Ovidio decía, que ligero se hace el peso que bien se lleva. Sabio paradigma para el Juez
que despacha las causas con la prontitud debida.
Leve se hace la carga de una sentencia adversa, que bien se sufre.
¿Qué dispuso con diligente celo la sentencia, en beneficio del derecho?
Tertuliano dijo: Avergonzad al culpable, pero no derraméis su sangre.
Muchas veces hubieron de llorar los hijos por la culpa del padre.- Dante.
Llevar la deshonra obligado es quizás la mayor desventura.
El descargo antes de sentencia es admitir la razón de la demanda.
La culpabilidad siempre tendrá por fiel compañero al temor de una pena.
Salvador de Madariaga, nos entrega una sabia lección: El sentido común es la única regla
de crítica verdaderamente segura.
La crueldad de la condena es la fuerza
de los cobardes jueces que no trae provecho alguno.
No te goces de mi condena, que cuando la mía sea vieja la tuya será nueva.
Cicerón^ decía que considerar que una cosa cruel pueda ser útil, es de por sí inmoral.
Condenas injustas las hay, que por su crueldad son la gloria de quienes las padecieron.
Todo juez cruel es persona retraída y
atrabiliaria porque nunca la valentía de condenar puede tener su origen en la inclemente
ferocidad.
La crueldad en el juez jamás puede ser ejercicio de jurisdicción pues, su indiferencia al
sufrimiento del procesado es una de las formas más corrientes de brutalidad.
Algo que por la gente no es creíble, se hace casi siempre muy difícil probarlo.
Creer en la justicia es casi merecerla y ya tenerla a su favor.
Papini exhorta: No hay más que dos caminos: creer todo o negar todo. Yo creo en todo,
pero jamás pienso en nada; conviene dejar en el misterio lo que en el misterio se
encuentra.
‘ El abogado en el fondo, es creyente de la justicia o lo que es igual,
respetuoso insondable del derecho.
El trabajo decrece y los jueces de la Corte Nacional son la imagen de la plétora, esto es
acumular más la esperada casación penal y permitir que el bandidaje profesional tenga su
propio mundo.
Esquilo aleccionaba: A cada nuevo crimen afila el destino en la piedra de otro crimen ; el
hierro de la justicia. Y Sófocles: Detesto al que, sorprendido en un crimen, quiere luego
adornarlo con especiosos razonamientos. Pero, es la Biblia- Proverbios- que inspira: Un
hombre cuyas manos están manchadas por la sangre de otro, huye hacia su tumba. No le
detengáis.
Virgilio, nos conduce: Aunque tuviera cien bocas y cien lenguas, y mi voz fuese de hierro,
no podría enumerar todas las formas del crimen.
Juvenal,6 nos instruye, ¿A quién has visto que se contente con un solo crimen?
Shakespeare con su grande influencia, nos dice que desembarazarnos de una persona
Justicia
dándole muerte es hacerla revivir entre las que la sucedan.
La justicia puede confiar más del abogado que trabaja, que de un novel entusiasta que
atrona.
El corazón de un Juez justo es un caudal que no se vende ni se compra pero si está al
servicio de la justicia.
La falta de conocimiento del Derecho no estorba al Juez tener un corazón de justicia, pese
a crueles desventuras.
La sabiduría de la justicia no se aprende, está en la vocación del Juez que la encuentra en
cada sentencia.
Plutarco decía que la cordura con respecto a los bienes de fortuna se explica de cuatro
modos: En adquirirlos, en conservarlos, en aumentarlos y en usar de ellos
convenientemente.
De ningún modo demandes que las cosas se hagan como quieres, sino como ellas son y
así el Juez te dará como deseas.
Las mejores sentencias tienen lesivos efectos cuando no se ejecutan con prontitud y
sensatez.
Ninguna sentenciare! Juez aborrece / ni desea y así, la una no le repara ni tampoco la otra
le angustia.
La justicia la hacemos entre todos.
El bien y el mal de una sentencia no existen sino en la opinión de los abogados
interesados, por esto su verdadero valor no tiene más razón que el mérito procesal y en el
derecho aplicado.
La justicia honesta enseña a muchos el buen camino.
Expiación
La justicia penal tiene su corona en el corazón de los jueces y no en su conocimiento,
pues no la adornan doctrinas ni sabidurías, sino la equidad, la misericordia, la razón.
El culpable no conoce la paz y la justicia será el refugio de su permanente intranquilidad
que le devora.
Es la razón noble de los jueces la que hace la justicia^penal en la que el enjuiciado puede
poseer confianza.
La mayor fortuna de los jueces penales se halla en su magnánimo corazón para con los
culpables.
Rousseau, decía: Si la razón hace al hombre, el sentimiento le conduce.
Goethe, decía también: Cuando el corazón es bueno, todo puede corregirse. Y Florián: La
casualidad gana batallas, pero el corazón solo se gana con la virtud.
En la justicia de las mujeres se corre el riesgo que entren en juego sus sentimientos,
porque en ellas todo es corazón, hasta la mente.
Los jueces penales a quienes guía la cordura atinan mejor en hacer justicia,que los que se
dejan llevar solo por la ley.
Invocad jueces ecuatorianos, que nuestra justicia nació del corazón del libertador Simón
Bolívar.
Tal vez el ímpetu del juez penal tiene razones que las pruebas no explican.
La justicia busca al culpable, pero es la conjetura del Juez quien lo encuentra.
No se puede pedir firmeza a la justicia, se contradice y bien es incoherente.
La justicia vive de gratas paradojas como es el Juez que la ha expedido. ¿Qué es el Juez
sino una sinrazón normal? ¿Y qué sería de la justicia sin esta contradicción?
¿Por qué encerrarnos de tanta oscuridad, acaso la justicia es una adivinanza o una
lotería?
¿Por qué tantos enigmas y tantas divagaciones en la justicia? ¿Y las sospechas y este
juego rudo? ¿Por ende, qué tantos héroes diferentes a través de la política que pretenden
remediar las fallas judiciales?
Nuestra tradición de la justicia es discrepante: demanda o acusación y derecho a la
defensa; sistematización y vanas quimeras; eficacia y grandes errores en las sentencias,
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etc.
La acción y efecto de contradecir es el fundamento del proceso judicial. Afirmary negares
laoposición del uno contra el otro que recíprocamente, ocasionan quebranto.
De contratos mal hechos, largas disputas.
Quien tiene trato no tenga contrato.
Tolerancia y a la vez sufrimiento en la adversidad de una sentencia.
Nada hay en el alegato que valga la pena de ser considerado, pues el conocimiento del
derecho será siempre un acertado rédito de su ejercicio.
Uno de los principales padecimientos de lajusticiaescuando el improvisado Juez, no
alcanza a comprender el verdadero sentido de la norma legal y la aplica impropiamente.
Conocer la norma legal y el litigio, no es lo mismo, porque el conocimiento nos explica
Kant, supone dos elementos: en primer lugar, el concepto por el cual en general, un objeto
es pesado, y en segundo, la intuición, mediante la cual el objeto nos es dado.
Todo el misterio del derecho puede resolverse en la sentencia, pero nada es firme ni
bueno cuando el juez no lo conoce.
La justicia está dada para la alegría de quien sabe y conoce que le asiste el derecho.
En nuestra justicia hay dos desdichas: Una, no alcanzar la sentencia que se esperaba y
otra, alcanzarla.
Lo que ,|a justicia tiene de experiencia es que sirve para confortarnos de su debilidad.
De la misma ley que lo prohíbe, nace el cohecho.
Es la justicia permanente caricatura de sí misma, que en repetidos casos es una bufonada
y se contradice de lo que procura hacer.
Confesión forzada de nada vale.
Nadie está obligado a ir contra sí mismo, a confesar en su perjuicio Aforismo jurídico.
Confesad...y la sentencia será en tu contra porque confesión de parte, relevo de prueba,
que en materia civil tiene plena eficacia.
Confesar el delito no significa declararse autor, sino revelar al Tribunal la forma de su
ejecución y quiénes son sus cooperadores.
Seguridad
Confianza y desconfianza son del mismo modo,, el infortunio de la t justicia.
En cuestiones de justicia, la desconfianza suele venir demasiado flemática e indolente.
Publio Siró decía, que el que pierde la confianza nada tiene que perder, porque la
desconfianza lo mismo que la ira, nunca vuelve al sitio de donde escapó.
Séneca afirma en cambio, que tan grave eiyor es confiarse a todos como desconfiar de
todos, porque la confianza también puede producir la lealtad.
Pena injusta de la justicia, la que ocurre a muchos por confiar en la probidad de los jueces.
Honda nostalgia en la sentencia adversa, la que sucede por confiar en el Abogado.
Poned vuestra confianza en la justicia ecuatorianos y guardad su nombre en defensa de la
seguridad pública.
Nadie comprende mejor que los jueces, los dolores y alegrías de los litigantes.
Hacer conocer de nuestras propias desventuras a los jueces, es ya un alivio, un
confortamiento y descanso.
Hay sentencias que miran hacia una opinión anticipada de los demás.
Cuando el Juez tiene conflicto entre los méritos procesales y su conciencia, es cuando
debe poner énfasis en la razón.
La garantía de que se escuchen las providencias, consiste en decir mucho en pocas
palabras.
Sentencia es el instrumento jurídico autorizado por el secretario, en el cual se contiene lo
tratado y resuelto por la justiciajudicial o administrativa.
Más vale buen arreglo que próspero juicio.
Entre marido y mujer, Dios es el único juez, reza un conocido aforismo ruso.
Verdad8 que no hay culto sin prédica, ni juicio sin discordia.
Más vale un trozo de pan en paz que una despensa llena de comida con discordia.
Justicia
Proverbios.
¿Dónde está el acuerdo de las partes? En el arreglo armonioso del empeño perseverante.
La justicia es letra de cambio girada sobre el parecer público, su importe se funda en el
prestigio del Juez.
Justicia Penal
El Juez penal es superior a las bestias, no porque las puede hacer sufrir, sino porque es
capaz de compadecerlas. Aplico al Juez lo que Schopenhauer dijo del hombre.
Poco me habéis averiguado y poco os comprendí señores jueces del Tribunal. Solo
cuando volvamos a cruzar en la vida, nos entenderemos al momento.
Es contrario al noble sentimiento de justicia, ver a un desventurado reincidente que no ha
aprovechado la experiencia del arrepentimiento ni las lecciones de la prisión.
La aflicción que los jueces del Tribunal soportan más fatigosamente, es conmoverse por el
procesado.
La compasión de los jueces ha sido y será siempre, tener amor por el prójimo puesto que
sin amor no hay compasión.
Infames verdugos son los jueces que teniendo buen corazón y bajo el pretexto de la ley,
condenan a la máxima pena, cuando con el tercio es suficiente.
La casación es preciso que analice la procedencia de la compasión y la canalice
adecuadamente, de ser el caso.
La misericordia es la medida de la justicia penal. Es el sentimiento y lástima de quien ha
caído en desgracia por el delito cometido.
Cuando tengas al procesado debajo de la ley usa de templanza.
Puesto que compadeces a los ciegos y a los cojos, ¿por qué no compadeces también a
los malvados? ¿No comprendes que lo son a pesar suyo, como los cojos y los ciegos?
Expresaba Epicteto. No obstante, Publio Siró dijo: Mala causa es la que tiene necesidad
de compasión.

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Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
La misericordia está sobre el poder y tiene su puesto en la justicia penal. Es el emblema y
virtud de los jueces que saben atenuar las penas.
Cervantes decía: Es alivio al que cuenta sus desvelos, ver u oír que hay quien se duela de
ellos.
¿Habrá un fiscal o juez que no comparta de los males que sufre el infractor,
particularmente cuando soporta prisión preventiva?
Repetidamente, observamos que los fiscales aperciben al infractor para ahorrarse el
trabajo de investigar el delito y sus circunstancias.
Confinamiento
Con la música selecta por un momento, los prisioneros se sintieron libres.
La esperanza es peligrosa en prisión porque puedes enloquecer.
30 años de prisión, ¿a dónde fueron?
Los prisioneros van a trabajar con supervisión, fuera de prisión.
La palabra y las acciones sucias corren a raudales en las prisiones.
Fuera fui un hombre honrado, vine a prisión y me hice ladrón.
¿Por qué estás en prisión? Por mi abogado.
En la prisión el tiempo no corre^ entonces, mantén la mente ocupadá.
Otro mató y yo acabo aquí, en prisión.
Creo que no sobreviviría fuera de prisión, no sabría por dónde empezar.
No hay alternativa en prisión, dedicarse a vivir o dedicarse a morir.
El tiempo se arrastra aplastándote duramente en tu sufrimiento.
En los tiempos actuales hay más compradores de sentencias, que conocedores del
derecho.
Hegel, decía que entre lo infinito del ideal y lo concreto del hecho media un abismo.
Aquí en prisión, todos son inocentes, el único culpable es el presidio.
¿Serviría de algo decir en prisión que no soy homosexual?
Todo aquí en prisión, con más riesgo es más caro.
Tiene una forma de hablar y andar nada común, un banquero sentenciado por el feriado
bancario.
Hay algo que debes saber en prisión: el juego de las lágrimas.
La prisión no es cuento de hadas, es una mazmorra.
De cuando en vez aparecía con moretones, le perseguían para el sexo.
Increíble la suerte de algunos. Maldita tu suerte. Puñado de bastardos.
El peor canalla, jefe de guardias, hasta parecía generoso.
Vuelvan a las celdas para el pase de lista. Atención, inspección de celdas. Todos los días.
Da la vuelta y mira al alcaide.
Justicia
El juicio vendrá y vendrá pronto.
En prisión solo se emplean los fondos en más muros, más guardias, más seguridad.
Los muros de la prisión, primero los odias y terminas acostumbrándote.
Eres libre, eres libre, no puedo cuidarte más. Es increíble como fuera se mueve más.
La Junta de Rehabilitación me consiguió una habitación y un trabajo pero aún ando con
miedo de volver a prisión. No resistió y se colgó.
Justicieros
Shakespearey dijo, que el poder terreno más parecido al divino es el que modera la
justicia con la clemencia.
La clemencia es una parte de la justicia dijo el pensador Joubert.
Vayas donde vayas, encuentras limitados ramplones y vulgares judiciales, sin memoria de
su pasado ¡ pero con la misma misión: Cobrar el precio de la corrupción.
En algunos melodramas de la justicia, los jueces tienen la costumbre de presentar en sus
sentencias escenas trágicas y las cómicas alternadas.
. El arte de administrar justicia es mucho más complicado de cuanto se piensa. No es
completamente trágico ni cómico, pero si es el espejo dramático de una inacabable ,
¡ comedia en tres actos:?’'.
.•primera y segunaa instancia y luego, la infinita casación.
¿Queréis que el drama se limite a una
comedia? Haced que el abogado desafíe no al derecho, sino a la integridad de los jueces.
Toda una vida arruinada en un instante. Con miedo a la oscuridad.
El juez no cita a otros más que a las partes y a peritos, para mejor proveer en la causa.
El mismo Consejo de la Judicatura citará a los jueces, si viene bien a sus propósitos
prescriptivos.
Cita jurídica es la nota de ley, de doctrina, o cualquiera otro instrumento que se alega para
fundar el alegato de lo que se dice en juicio.
Donde las palabras de la ley no son ambiguas no ha lugar la interpretación. Es un principio
romano que vale aún.
Mundo loco el de la justicia, ¡mundo loco...! Unos jueces tanto y otros tan poco. Desde el
tiempo de Justiniano, unos calientan el horno y otros comen el pan. Refranes Castellanos.
Hoy por hoy, es un mal momento para desplegar la bandera de la justicia, Señor
Presidente Rafael Correa.
Clemencia es el tributo que mitiga la dureza de la justicia.
Al culpado que cayese debajo de tu jurisdicción considérale hombre miserable sujeto a las
condiciones de la depravada naturaleza nuestra, y en todo cuanto fuese de tu parte, sin
hacer agravio a la contraria, muéstrate piadoso y clemente porque aunque los atributos de
Dios todos son iguales, más resplandece y campea el de la misericordia que el,) de la
justiciar Cervantes.

595
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
Las leyes rigen el destino de la libertad y los bienes de la gente, pero la justicia gobierna a
las leyes.
La proclamada nueva justicia que como el cielo que todos vemos ni es cielo ni es azul;
lástima grande que no sea verdad tanta belleza de la revolución ciudadana.
Lo inaccesible junto a lo impenetrable, unido a lo inexplicable, bien explican el melodrama
de la justicia en Ecuador de hoy.
Cuán lejos estás justicia ecuatoriana, donde todo lo que se espera del debido proceso, es
indigno de ser respetado.
La sentencia que se aparta de la justicia, más que fallo debe llamarse ardid, zorrería,
trampa o engaño.
Es algo que hay que vivir para creer cuanto ocurre en un Juzgado, donde todo puede
suceder.
En la audiencia de juzgamiento no hay que buscar táñto las citas de ley, como las razones
más pertinentes.
Para que la justicia exista, preciso es que sea necesario el derecho.
Todo es mentira en la Corte, todo es verdad en los campos.- Tirso de Molina. ¿Amáis la
libertad? En el ^ campo habita.'Andrés Bello.
Nada es más peligroso para la justicia que un vertiginoso cambalache de sus instituciones
como viene
ocurriendo/ en que se vale de digitadores para alterar el sistema judicial. Maquiavelo dijo:
Un cambio prepara otro. “Señores reformadores”.
Cuanto más cambios en la justicia, más será la misma.
Plantear una acción judicial es vivir con miedo, sin saber hasta cuándo.
Existen infinidad de juicios que sólo son cuentos, vana palabrería, estimaciones parciales
y efímeras; embrollos, pretensiones absurdas disimuladas con bellas frases, y bajo la capa
de la pasión por el derecho vulnerado; en definitiva, una irritación malsana de trastornar a
la parte contraria y también al propio patrocinado.
Cada juez interpreta a su manera el derecho en las leyes que rigen el destino de la gente y
que la justicia se encarga que todo lo tape.
Angosto y lleno de abrojos, no por las leyes sino por los encargados de aplicarlas, es el
camino por donde pretendemos llegar a una justa sentencia.
Solo a punta de múltiples gestiones de todo color, la sentencia se alcanza.
Rafael Correa ha cometido uno de los errores más grandes y graves, al intervenir en la
justicia, que lo pagará muy caro.
Antes que litigar, siéntate a la orilla de un río y llora recordando tus derechos.
Todo litigante tiene el derecho de vencer a su contrario, aún cuando en honrosa sujeción
al Derecho.
¿Quién dudará que es mil veces preferible transar que remediarlo mediante un juicio?
596
\
Del vil cautiverio en un juicio, nuestro último asilo es el olvido.
No rindiera n>-ínimo lastimado por la dura eSajjíivtdad de un juicio si no fuera por lo
estropeado y descompuesto.
Es tan clara la sentencia, incluso para un ignorante del derecho.
¿Por qué los juicios no concluyen? Por no acatar los términos de ley.
Siempre el confesante tiene algo que reservarse.
El destino de un juicio es una sátira que hay que considerarla como una invectiva revisable
por el superior Juez.
La renuncia permanente a los afectos
o intereses en servicio de la justicia, se llama abnegación para el bien de los demás.
Topla sentencia que nos parece apegada a derecho es legítima.
No condeno en absoluto a la injusticia, la considero un error judicial contra toda sospecha,
que el Juez haya obrado con independencia de esta vida inquieta o perdida y sin
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
dependencia o restricción alguna.
¿Quién te autoriza hablar de sentencia injusta si tú no puedes comparar con ninguna otra
por tu atraso en el derecho? ¿Acaso existe incoherencia absoluta en la justicia?
La política puede jugar con cualesquier cosa, menos con la justicia porque se cometerán
errores groseros y las fábulas más absurdas, nacidas del interés combinado con la
ignorancia.
Ce ¿kr¿¡¿focr
Se ha visto resolver mal las causas más razonables y bien, las más insensatas.
No hay sentencia disparatada que no haya sido auxiliada por algún político.
El aburrimiento es la gran enfermedad del entendimiento de que adolece la administración
de justicia.
La abulia es la suprema manifestación de la indiferencia judicial.
Más pertinente es para la justicia lo que el Juez ha resuelto, que la oposición de la
contraria, pues no le es fácil después de tomada, conciliar lo escrito con los hechos
alegados.
Acción judicial
La acción no es otra cosa que el derecho de perseguir en juicio lo que a uno se le debe.
Reza el Digesto.
La acción judicial es el beneficio propio de la pericia en el derecho.
No rememora el Foro tanto mil sentencias, como una sola colusión del Juez.
Hay acciones que definitivamente, son exigencias ineludibles.
Gran número de causas requieren menos entendimiento del derecho para procesarlas,
que para alcanzar sentencia favorable.
No interrogues a quien solo puede contestarte con palabras. Son los hechos los que
deben guardar armonía con la certeza.
Perversión
Transitar en el mundo de la justicia es ingresar en la creación de los condicionamientos.
En todo juicio la prueba que abunda no daña.
La posesión se pierde por el abandono.
No hay que esperar nada mejor de un juicio pues, mientras el trámite esté en el abandono
en que está, en vez de ser el espejo de la justicia y el templo del derecho, será el
santuario de las extravagancias.
Los litigantes pagan caro la corrupción judicial.
Todo mal de la justicia proviene de la ociosidad del Juez y el aburrimiento del abogado.
Hay desvíos propicios en que se derrumba el mal de la justicia, la corrupción.
Ganar un proceso es adquirir una gallina y perder una vaca, predica un proverbio chino-
francés Giner, 1967.
Es inconcebible toda interpretación de la ley que conduzca al Juez a la obscuridad.
La judicatura está lejos, el Juez no conoce al litigante ni a su abogado pero si los hechos
con las circunstancias que les rodean, de lo que depende el acierto en la sentencia.
El acierto de la sentencia depende de la prueba de cada hecho y del uso que haya dado el
abogado de cada uno de ellos.
Una sentencia mediocre pero oportuna, vale muchas veces más que una sentencia
magistral después de años.
¿Será verdad que en la justicia hay de todo y de todo se negocia, incluso del acierto en la
sentencia?
La constante y diaria actividad judicial es imprescindible al bien de lajusticia. Para
alcanzarla, el amanuense debe dejar de pensar demasiado para tomarse la molestia de
moverse; y, el Juez tener presente que es tan cruel dejar de despachar, como su desorden
mental en hacerlo.
Salir del caos moral en que se encuentra la justicia es un clamor hoy más que nunca. Es
menester, ante todo, restablecer el orden en el Juez porque la razón sin inteligencia, no
permite poner en claro el derecho a reconocer. No basta su buena voluntad pues es un
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
orden el que tiene que conocer y observar, para tomar decisiones apropiadas y justas.
El juzgado es de gente que trabaja, no para los ociosos y perezosos que se permiten el
lujo de gastar el poco tiempo que tienen para el despacho de las causas.
A la espera de una sentencia, se puede vivir una vida en uno como en ocho años, a
condición de que el amanuense los haya aprovechado bien.
Cincuenta judicaturas sin jueces honestos, jamás formarán una justicia.
Los secretos de la corrupción son por lo que se ve, por lo que se oye, o por lo que puede
haberse oído decir.
¿Hasta cuando el servicio de la justicia no puede ser causa de honor permanente?
La adversidad de la justicia pone al honesto litigante, en situación desgraciada.
Qué bochornosa y qué afrenta para el Foro, una sentencia fruto del cohecho.
A pequeño obsequio, pequeña sentencia basta como expresión de reconocimiento
suficiente.
La justicia tiene un solo lenguaje y una misma palabra.
¿Qué es la justicia, sino lo más excelso de las ciencias y el arte de aplicar el derecho?
La justicia es la manifestación verdadera de la prosperidad de un pueblo.
...Y todo lo demás, no son sino discrepancias...
Es la justicia una de las nobles tareas en que se ejercita la labor humana.
En otros tiempos, la justicia era un arte del derecho y el ejercicio de la profesión, un
venerable oficio. Hoy en día, las expresiones se hallan contrapuestas.
Si la vida judicial es un caos, la justicia está dada por una imponente lógica. Es esta
imaginación de los jueces la que precipita la desconfianza en la persecución y sanción del
delito.
A pesar que la lógica es humana en la decisión de los jueces, en la práctica no les sirve
para nada.
La lógica debe necesariamente, ocupar al Juez en la redacción
' 'de una sentencia porque del solo silogismo, no podrá concluir en nada verdadero.
¡Oh)( justicia, tú eres lo selecto de la sociedad!
La justicia ha sido siempre para mí el lugar predestinado de la adversidad. Desconozco
que sea debido al acierto de sus fallos, a sus nobles antecesores, o a la imagen sañuda
de alguno de sus jueces, pero desde mis estudios universitarios me he inclinado siempre
hacia la imagen trágica.
Cuando la densa niebla de la parcialidad cubre la mente del Juez, es cuando el abogado
honesto ve mejor la justicia impenetrable y misteriosa que no obstante, representa la
verdad del derecho.
La controversia es causa y efecto de la sentencia, es creadora de la verdad y el derecho y
hace ricos a unos y pobres a otros.
Los términos del proceso están fijados. Para todos el tiempo es breve e irrecuperable,
pero prolongarlos con picardía es una arbitrariedad, una vergüenza, un abuso...
En los considerandos de la sentencia no han de haber razones ociosas ni sobradas
porque atentan contra el bien público.
El talento hace entender mucho con pocas palabras.
Los tontos tienen el don de hablar mucho y no decir nada-: La t': Rochefoucauld.
Todo proceso de mérito es demasiado largo y no puede resolverse en un día.
Algunas judicaturas son como los
cementerios, y bien se les puede poner una lápida que diga: Aquí yacen más de mil
juicios.
¡Oh mundo desventurado el de la justicia, nadie debe en ti fiarse!
La justicia debe trabajar en impedir los delitos para no necesitar imponer penas, como bien
aconseja Confucio.
Si es que el miserable a quien matan ha de quedar convertido en polvo y nada más, y los
asesinos no pagan con el debido castigo, la vergüenza y la piedad deben desaparecer
entre los hombres: Sófocles.
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
Pero ciertamente, atenienses, hay una diferencia grande entre la acusación y la invectiva.
La una presenta crímenes cuyo castigo está en las leyes, y la otra, palabras ultrajantes
que los adversarios se lanzan a pedida de su furor-Aristóteles.
Se debe tener más cuidado que el castigo no exceda al delito, como también que los
inocentes no sufran por las culpas que otros cometan impunemente.*Cicerón.
El primer castigo del culpable es que su conciencia le juzga y no le .1 absuelve
nunca.'Juvenal.
Cuando Rafael Correa que posee el poder deje de invocar la justicia, sus buenas
intenciones pueden tener derivaciones desastrosas y las buenas acciones facturar su
caída. No podrá esconderse para siempre.
En la justicia siempre hay más que hacer.
La autobiografía de una sentencia se hace de noche.
Como los preceptos de la ley son por igual para todos, su aplicación no puede ser
discriminatoria.
Los mandatos del derecho son generales, pero sus aplicaciones pueden ser privativas.
La sentencia despachada a prisa, a prisa se la revoca.
La justicia no será acaso, ¿la conveniente proporción y correspondencia de los méritos
procesales en derecho?
La armonía de la justicia, en medio del mundo de las discordancias, nada busca fuera de
sí, expresa el orden y la ley de la verdad procesal.
No es menester de Abogado donde basta la naturaleza, que es virtualidad, principio y
existencia.
El fin último del derecho es la justicia, en cambio el de la corrupción es el placer.
Proteger la justicia está bien mientras no sea necesario favorecer a los malos jueces.
Exalta la justicia, pues de todos los engaños es la menos mentirosa.
Si la justicia no tiene condiciones, los jueces si poseen una, la honestidad.
La verdadera escuela de la justicia es la justicia misma y no la ley.
El derecho penal es siempre contemporáneo y positivo, ninguna vez fue de otro modo y
jamás podrá serlo.
La condición esencial de una sentencia
Justicia

justa estriba en un sistema procesal cuyas pruebas se armonicen unas con otras.
La justicia es una de las condiciones de la vida humana que establece el medio de
correspondencia entre las personas.
Si la justicia no tiene fronteras, los jueces si poseen una, la honestidad.
En la sentencia lo copioso, la fantasía, el desbordamiento cansa, evapora y pasa.
La justicia es un compendio de la naturaleza formado por el derecho y el buen criterio
del Juez.
La judicatura es una cámara fotográfica, sonría señor Juez, pues la acritud es contra
suya.
¡Justicia/o nada! El relato de todos nosotros.
La corrupción es el estiércol de la justicia. Es como un torrente que no mira hacia
atrás.
La judicatura para el realmente abogado.
La mayor catástrofe de la historia judicial de Ecuador no hubiera tenido lugar, si los
jueces no hubieren sido de inteligencia mediocre.
Fue grave extravío pretender corregir los males de la justicia, mediante tres
digitadores, pero ha sido peor revestirlos de jueces supra supremos
En la justicia de hoy, mandan muchos por lo que ninguno obedece en despachar las
causas y todo fenece.
Si^ma
i? i ‘jft-
La Corte Suprema ha tenido que resignarse durante cerca de 200 años a la más
rutilante disyuntiva de desgobiernos y dictaduras, de esperanza y desagrado, pero
jamás ha renunciado a la imparcialidad ni a la libertad que son las estipulaciones de su
distinción y del honor imperecedero de la justicia.
¿Será acaso la justicia actual, la del siglo XXI, una anarquía que ocasiona más
anarquía?
Los más de los procedimientos viejos de la justicia son mejores que los nuevos. La
antigüedad tiene Señoría.
Quien mira los procedimientos antiguos alaba el tiempo pasado y aborrece del
presente.
La justicia cuando no se la hace con moral es contra los litigantes.
Quien tiene puesta su esperanza en la justicia vive en paz.
La justicia se rompe por la vagancia y la corrupción del Juez.
No solo es bueno para el litigante sino para el propio Juez, una sentencia justa que ha
desvalorizado dramáticamente, las barreras de la ^ corrupción.
Es por el mérito procesal, no por las apariencias, por donde hay que juzgar. Simulando
a Esopo.
Se habla con frecuencia contra las sentencias, se las considera fuente de todo mal y
se olvida que también lo son de todo placer mundano.
En la sentencia puede ocurrir lo inadmisible, y también lo que es
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

incoherente y contrario a derecho o a la razón.


¡Oh, Justicia! ¿Por qué has permitido que jueces ineptos, codiciosos del dinero y el
placer mundano, te profanen y te abusen?
En los tiempos actuales, tiempos de confusión judicial y ensañamiento.
Lo que el poder llama politización de la justicia, es el estado actual de rusticidad y falta
de cultura jurídica.
El verdadero orden judicial se funda en la honestidad de la sentencia, lo restante no es
más que desorden camuflado.
La justicia no está sedienta de condenas, sino del acierto con que los jueces
sentencien.
Si matáis a un hómbre seréis un asesino; si matáis millares' de hombres, seréis un
héroe. Sentencia inglesa.
Cuando la Nación goce de una real administración de justicia, incluso las sentencias
justas resultaran funestas.
¿Es acaso nuestra herencia y fatalidad la mala administración de justicia?
La justicia vale más que una caja de whisky o una bella mujer a la que todo se le
soporta.
Una sentencia pierde demasiado si se le da publicidad.
Mucho os alienta el castigo; como
bestias sois mejores.- Lope de Vega.
Ley de las leyes, acopio de la vida de los ecuatorianos y su seguridad, esto es la
Constitución del Estado.
La más agradable existencia consiste en no saber nada de juicios.
Donde mejor estamos es lejos de los juzgados y tribunales de justicia.
Come con alegría tu pan y bebe con gozo tu vino, mientras no tengas litigios judiciales.
La bolsa purifica todos los errores del proceso.
Cuando la bolsa precede, se abren todas las puertas, expresa Shakespeare. Y, la
bolsa pesada hace ligero el corazón) Ben Johnson. /
Toda buena sentencia contiene un lenguaje expresivo, como depurativo.
La justicia es incapaz de soportar el peso de nuestra vida. Cuando lo intenta, fracasa,
perdiendo su gracia esencial. Imitando a Ortega Y>> / Gasset.
Toda la justicia estriba en aproximar la realidad al derecho.
Albedrío
La sentencia es una obra de arte jurídico, es concebida y creada para , que siga
permaneciendo. *
La sustancia de una sentencia es indispensable de su fondo en que sea una sola
cosa, la verdad y el derecho.
La más dolorosa de las traiciones es la del Juez que se pasa al bando de los
corruptos, con el fácil halago.
No se conoce de proceso alguno que haya tenido un final feliz.
El éxito en el juicio, con frecuencia es descendiente de la audacia porque la fortuna y
la osadia van casi siempre juntas. Representación de Metastasio.
Pocas cosas causan más abatimiento J rpás que una sentencia injusta pronunciada,
en nombre de la República y por autoridad de la ley.
Los defectos de la justicia son mayores a medida que avanza en las Cortes.
A\ menudo, lo que el derecho nos niega, la justicia nos concede por la puja del billete.
Nada sucede en la justicia como se espera, ni como se desea, porque sus aciertos o
desaciertos no dependen del derecho.
Controversia
El litigio es causa y efecto de la justicia que es creadora de la verdad y el derecho y
nace ricos a unos y pobres a otros.
Luchar602 contra el poder, nada se puede esperar de la justicia.
¡Oh justicia! Cuántas veces traté de buscarte en el juicio y todo fue inútil.
Para el Juez honesto, el derecho es la luz, el camino y la meta de la justicia.
¿A quiénes confió
\ la Constitución la justicia? Confirió y confiere a los jueces y—
noJusticia
debe
concluir con ellos como tampoco debe concluir el derecho. Por medio de los jueces
debe aplicarse el derecho a las personas de todos los tiempos.
El derecho se irradia por el orden jurídico instituido por la Constitución, como en la
antigüedad se propagaba por la costumbre.
El orden constitucional por el cual se confiere a los jueces la potestad de administrar la
justicia, les concede además, deberes especiales para ejercerla digna y válidamente.
El carácter sensible de la justicia trae consigo la potestad de administrar justicia y
señala la distinción que hay entre los jueces adornados con la virtud de la honestidad y
el resto, inmersos en la corrupción vergonzante.
Te exhorto corrupto Juez a que avives el juramento de tu graduación profesional que
reside en ti y dejes de ser arrogante y malvado.
Si llamamos a los abogados los sacerdotes de la justicia no quiere decir que todos son
verdaderos sacerdotes, lo que se quiere insinuar es que a todos incumbe el deber de
observar el derecho y tener un comportamiento ejemplar para los demás.
La potestad del Juez consiste en interpretar la ley y administrar justicia. Lo primero, se
endereza a sustituir al legislador y lo segundo, en el gobierno y decisión a dar a cada
quien lo que le pertenece.
Solo puede ser Juez el abogado que sea llamado por su vocación y por una recia
formación moral. El juez debe ser instruido y honrar su juramento, hacer justicia ha de
ser el único móvil de todas sus acciones.
El padre que por interés obliga a su hijo abrazar la abogacía o que sin razón suficiente,
le impida abrazarla, se hace culpable de grave error y es responsable de las
consecuencias.
Profesa a los jueces honestos y de conocimiento como dispensadores de justicia, la
debida consideración y obediencia, porque son los representantes de la ley.
El riesgo favorece a los abogados cultores del derecho y buenos de corazón.
Proceso judicial es el conjunto de actuaciones ¡que legitima los procedimientos y
confiere al Juez la potestad de decidir el derecho de las partes, en justicia.
Se dice la potestad de decidir en justicia, para indicar que el Juez ha de estar libre de
todo vínculo que le haga incapaz de ejercerla.
El proceso lo ha instituido la ley para que la gente viviera siempre en mutua y fiel paz y
en el mayor entendimiento.
¿Permanece el proceso siempre tal como la ley lo ha instituido? No, después que los
jueces se apartaron de la ley por la corrupción, ya no consideramos como legítimo el
proceso, hasta que se los castigue severamente y se restablezca su dignidad.
MATEO ALEMAN, escritor sevillano, nacido en 1547, estudió medicina en la
Universidad Alcalá de Henares. Fue funcionario de la Real Hacienda. Publicó Odas de
Horacio, Guzmán de Alfaracha, que es una antología de la vida humana. Sufrió cárcel
por deudas. También editó La vida de San Antonio de Padua. En 1607 partió para
Méjico en donde publicó su famosa Ortografía Castellana de amplísima difusión.

¿Qué se ha hecho para restablecer el proceso a su dignidad? A pesar de la dureza de


la corrupción se repudia a ciertos jueces corruptos y se los declara fuera de la Función
Judicial pero no con enjuiciamiento.
¿Puede disolverse alguna vez el proceso? Si, menos en el penal de acción pública,60
porque nadie tiene derecho a renunciar lo que es de interés de los demás. 3
¿Qué hizo la ley para consagrar al proceso? Lo elevó a la dignidad del debido proceso
\
Máximas,siReparos
porque y Alternaciones
no fuera más quedeununaexpediente,
Justicia Perdidano lo hubiera llamado un debido proceso.
Pero como tal es verdaderamente grande porque representa de una manera
misteriosa la unión de los intereses particulares con el derecho.
Llámense sentencias clandestinas las elaboradas fuera de la judicatura por personas
que no son el Juez, o que éste recibe el disco contentivo del proyecto.;'El corrupto con
su 'J insensatez acarrea la perdición de su respeto y va acumulando para sí oprobios e
ignominias y jamás se borrará su infamia]] Desde los v primeros años de la República
el cohecho a jueces '
ha sido castigado con graves penas públicas, que hoy se omite.
Si en la justicia ya no quedan más remedios de pulcritud y eficiencia, persiste el
milagro esperado de Rafael Correa como prueba de ser su legítimo transformador.
La justicia no exige demasiados milagros, pues el conocimiento* y la experiencia
aconsejan 3 cosas:
Selección verdadera de jueces.

60
4
\

Justicia
Eliminación de tantos recursos y audiencias.
Severas sanciones contra la corrupción.
En la justicia lo deslumbrante no existe, pues cuanto juzgamos de j admirable^ no es
más que una forma de expresar nuestro agradecimiento por la atención favorable del
juez.
La justicia rjo es más que un sueño.
¿Te imaginas joven abogado, una administración de justicia sin mentiras?
Todo el sistema judicial del socialismo siglo XXI responde a un solo proceso político
trasnochado.
Los problemas de la justicia nacen imparables, lenta y silenciosamente, / no por las
leyes^sino, por los de abajo, sus administradores.
En la justicia cada día tiene su relato.
El mundo triste de la justicia, al que está vestido lo desnuda y al que está desnudo lo
viste por la magnificencia miserable del juez.
j '^Si quieres hallar pronto la justicia^del Derecho'^ J2)eberás desprenderte.
Á
¿Renovación?
Hay políticos modernistas que quieren cambios en la administración de justicia, con
menosprecio de las buenas prácticas anteriores.
Al santo que está de moda acude la devoción toda, sentencia un aforismo castellano,
que lo traemos a propósito de lo que viene ocurriendo en Ecuador.
Que la justicia no ha funcionado es opinión corriente entre los modernistas de Alianza
país.
Tres son los elementos de los modernistas verdes que tienen bastante en exceso:
descarriada informática, pervertida movilidad de jueces y secretarios; y, la corrupción /
que campep^ por todo lado, como consecuencia de aquello.
Se interviene en la justicia por un tonto juego político, usando disfraces mentirosos.
Si, la justicia está cambiando porque la tarifa del cohecho ha subido de precio.
La justicia moldea nuestra historia.
¿Cómo debes llamar a la justicia? Llámala como quieras.
Albedrío
Si cumpliera cada quién con lo suyo, estaría la justicia en Ecuador.
¡Qué satisfacción no hacer sino lo que es justo!
La demostratio fue en Roma la parte en que se hacia la exposición de los hechos que
habían motivado el litigo; La inintentio contenía la pretensión del accionante; La
condenatio investía al juez para que condene o absuelva; La^djudicatio por la que el
magistrado concedía al juez la facultad de adjudicar el derecho demandado y, La
intentio, el propósito de delinquir.
En la justicia que vivimos existen más preguntas que respuestas.
¡La justicia necesita un tratamiento de desechos!
La ruta de la corrupción no está cortada, cercenada ni atajada.
La justicia es como abrir la puerta de un cuarto obscuro, nunca se sabe qué esconde.
Mi villano favorito ¡Alianza País!
El movimiento oscuro que agita la justicia no se conoce sino litigando.
¡Oh, inhumana justicia, cómo engaña quien tiene tu arbitrio! \
Todo cambio, pero nada puede expirar en la justicia.
La sentencia en derecho hace comprender el valor de la justicia.
Salvemos la obra maestra de pocos jueces, en un mundo obscuro en que ha caído la
justicia.
Todos debemos marchar por el / angosto corredor de la justicia.
La justicia del siglo XXI, es un mercado, donde unos compran y otros son comprados.
De banda a banda mala la justicia anda, pero hay un consuelo que nunca anduvo
bueno y hay otro mejor que aún andará peor.
Puedes permanecer insensible sobre los problemas políticos, pero no sobre los de la
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
justicia.
La existencia de la justicia es un incesante pasar de una forma de sentenciar a otra y
el derecho nada dura en el mismo estado. Toda jurisprudencia se disuelve en el
tiempo como cualquier cosa que hemos de pasar los mortales.
El Consejo cree que antes de su llegada, todo faltaba en la justicia y que después de
su marcha nada le ha de faltar. ¿Acaso encierra mucha malicia y poca sabiduría?
Cumplida vanidad y aflicción de espíritu. El dolor muy dolorido es peor que antes.
El mundo de la justicia es un inusitado zapateo, al que cada cual acude provisto de su
disfraz.
En esta justicia que quizás la tenemos merecida, no se encuentra la paz si no se
busca a Dios.
Sin exagerar, la justicia ha llegado a ser gran mentirosa para los que suben y otros
bajan.
¡Ciegos políticos! Es la justicia el corazón del buen vivir.
El mundo sabiamente ordenado tiene una causa que obra según un fin: la justicia.
La justicia es un circulo, quien no tiene imaginaria se va al fondo, ante la indiferente
mirada de un juez malvado en cuyas manos están los caprichos de una sentencia.
Los elementos de la justicia como los de los sueños están tan extraviados, al extremo,
que valen bien poco.
¿Qué es lo que llamáis la revolución de la justicia?
Decenas de litigantes en una judicatura, entre los cuales tú eres algo y que para los
que restan es como si no existieran.
Aún la justicia de hoy tan esperada y necesaria, es el reflejo pálido y deforme de otros
tiempos que fueron.
Justicia
La justicia se parece a las mujeres, pues poco o nada se obtiene con palabras que no
son sino amarras tensas empleadas por tontos, a pesar de su inteligencia.
El ridículo ya no existe en el ejercicio de la profesión, pues ya ha conquistado a la
justicia. \
Evitemos todos que la justicia sea una liga de odiosos contra el derecho y la ruina de
la seguridad de la gente.
La justicia es lo que a cada juez le parece y el acierto estriba en dar con el que tenga
una realidad apegada al derecho.
¿Qué es la justicia? Tristeza y terrenal residuo, desvergüenza y sordidez, floja y
torcedura, disociación y siniestro.
Mi apreciación es que se trata de un alegre y extraño cosmos no tan malo, no tal cual
lo hizo la política, casi todos los achaques que se le atribuyen vienen de la ignorancia
y la maldad de aquella.
¿Sabe Ud. cuál es el secreto de la justicia? Está en que solo la vemos por detrás y por
esto nos parece extraña, que es una mentira.
En el desorden actual, el primer deber de todo ciudadano es reanudar cada día, la
idea de civilización, vivir en justicia, respetando el derecho de los demás que les
pertenece.
Para los pueblos no hay justicia duradera, como no sea por la costumbre.
Vacuas ¿on las inconsistencias que no da a entender la justicia.
El futuro de la justicia pertenece a Dios.
¿Qué es un juez honesto? ¡Alguien que no quebranta la justicia!
En esta batalla de sufrimientos y espera es donde Dios llora, al ver el festín de la
desvergüenza, una conspiración permanente contra la justicia.
La necesidad es la razón de estado de todas las violaciones de la libertad.
En la justicia el litigante necesita muy poco y por poco tiempo.
Sumisos somos ante los fenómenos naturales, tanto como nos irrita lo que los jueces
nos imponen.
El futuro aún no ha llegado a la justicia pero no por esto, es menos necesario el
pasado de la jurisprudencia.
Lo que llamamos el mundo sensible del derecho no es sino, el mal mundo de la
necesidad de justicia.
Los mercaderes de la justicia no deben ser admitidos en el juzgado porque son
personas abyectas y adversas a la justicia.
No existe una justicia histórica.
Arriba la abyección y abajo la justicia.
Y
La justicia debe ser el faro que ilumine la paz y el orden de los ecuatorianos. Mas, nos
sigue preocupando sobre todo, el desconcierto moral de jueces y judiciales que impide
se inserten gente honrada y de virtudes.
La justicia retorcida arrójala al atascadero de la política y evita la desconfianza en la
justicia.

60
7
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
La justicia del siglo XXI en Ecuador, está organizada sobre la base de la toma y daca y
si tienes algo más que ofrecer, los jueces y testaferros están dispuestos a recibirlo.
La justicia es humana cuando los juicios marchan conforme a derecho.
La justicia no puede ser neutral en ninguna contienda, porque todo juicio es su
problema.
La ingenuidad de la justicia viene de su naturaleza humana.
El que no ha sido azotado por la corrupción judicial, no conoce la lamentable baratería
de la justicia.
La justicia es el noble legado del Derecho natural.
El Estado sólo se mantiene por el valor de la justicia.
Los presidenciables y los grandes comerciantes no entienden la palabra justicia, que
es revelada a los humildes.
La justicia aumenta el esmero por la vida pero aminora la evocación de la muerte.
La justicia es el amanecer del día.
Mediante el temor y el respeto es como haz de obtener el poder de la justicia.
Juez que salva a un inocente, salva la justicia.
Acusan a la justicia de haber sido comprada por el narcotráfico mas, precisa reconocer
que hay jueces honestos y malos jueces.
También se dice que la justicia no es abierta al pueblo, que es un rudo bloque de
concreto inaccesible y guardias desleídos.
El cartel de la justicia, reino de injusticias, solo los rateros están en prisión.
¡Cuidado!, que cada día aparecen nuevos colores de la justicia.
¡Oh justicia! Cuánto nos cuesta hacerla.
Tres jueces perfecto número es, porque menos de tres, poco es en la justicia.
La justicia denominada del socialismo siglo XXI, se fija en la apariencia y no en la
razón de los hechos.
I
Este cosmos de la justicia en que vivimos, no es más que una obra cómica del
socialismo siglo XXI.
El Consejo de judicatura coetáneo a la llamada revolución ciudadana, ha acelerado la
crisis judicial convertida en favor político.
Qué gallarda es la justicia, qué bien parecida es la probidad de los jueces y qué
despejada la razón de las sentencias.
La justicia tiene el poder de controlar la vida de la gente.
Analicemos la justicia para conocer mejor la historia de Ecuador.
La justicia es la animación de la vida democrática y sencilla.
Somos ciudadanos porque así nos ha instituido el Derecho.
Justicia
La justicia es un ordenamiento inmaterial oculto.
La historia nos cuenta que la justicia necesitó de siglos para ser libre e independiente.
No es sorpresa que la justicia fue el origen de la civilización.
¿Será el fin de la justicia transformar la pobreza en riqueza?
Pero, modernizar la administración de justicia no es suficiente si no se la hace también
del resto de funciones del Estado.
La justicia fue la fuente para la existencia del Estado y tiene el albedrio de
transformarlo.
La perseverante firmeza de la justicia controla el poder del Estado.
La justicia es el ingenio invisible que nos vigila a todos.
La justicia tiene una química excepcional, que toda sociedad necesita para funcionar y
progresar con éxito.
Si aceptáramos la justicia y desecháramos las injusticias, nuestro promedio de vida
crecería en un respetable porcentaje.
La historia de la justicia es verdaderamente un rompecabezas capaz de crear cosas
necesarias para el buen vivir.
Definitivamente, evitemos que la justicia tenga su precio que revele la descomposición
moral del Estado.
La justicia es todo lo que ves en los juzgados y tribunales.
La justicia y la política están ligadas en el largo viaje hacia el poder, que los vivarachos
se apresuran en aprovechar.
La buena justicia alguna vez fue y alguna vez será.
La justicia, igual que las olas, está siempre en constante movimiento.
Qué bien parecida es la probidad de jueces que despeja la razón de la sentencia. Qué
gallarda es la justicia en sus manos.
Donde la molicie se haya apoderado de la justicia, no quedará vestigio alguno de
probidad.
La baja erudición jamás se enmienda con la ociosidad.
La justicia ya es vieja y se espera su cambio. Para esto es imprescindible que los
jueces y administradores sean de profunda formación moral y tengan suficientes
conocimientos de lo que hacen. Nacerá entonces espontáneamente, la justa justicia,
donde el soborno y la improvisación queden olvidados.
La‘”¡u§tíCilT’no puede ser de una equidad mentirosa.
No terminamos de comprender la naturaleza casual de la justicia, tan valiosa como el
oro. Y
Dinero ¡legal en la justicia, sálvense / quien pueda.
Somos nuevos en la justicia, podemos ver hacia arriba aún.
¿Cómo no volver al derecho, al derecho natural que sacuda al mundo para el bien o el
mal?
La justicia hay que practicarla en el ámbito de la razón natural, un escaño con nuevas
ideas.
Viaja a los secretos más profundos de la justicia humana, donde la realidad es
diferente a la extravagancia.
Siempre se han pagado los impuestos al Estado a cambio de los servicios de la
justicia sin embargo, no sabemos qué pasa después.
Llevaremos a la justicia el por qué de los juicios.
La fuga ha sido casi perfecta.
¿Qué está sucediendo en la justicia? ¿Extraños sucesos, que poco conocemos?
El concierto limpio de jueces y abogados pondría a la justicia al filo de la seguridad.
¿Por qué no rechazar los nuevos códigos con normas mal redactadas e incoherentes
que llevan a los jueces a resoluciones erróneas y contradictorias y a los usuarios al
desconcierto y a la indefensión? Antonio Rodríguez Vicens en entendida respuesta 60 al
Consejo de Judicatura, del 2015. 9
Los problemas de la justicia son el resultado del caos que ha sido creado y que
Máximas , Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
seguirá agravándose por una equivocada concepción de la administración de justicia,
asevera el ilustrado jurista ecuatoriano Antonio Rodríguez Vicens.
El problema de la justicia consiste en ajustar las normas del Derecho a los cambios
sociales que necesita y exige Ecuador.
Misión de todos los gobiernos ha sido procurar que los movimientos sociales sigan el
precepto legal que compagine con las cada vez nuevas exigencias de los conjuntos
humanos naturales.
La lucha entre el bien y el mal tiene en la justicia una vieja contienda por el alto precio
que conlleva.
Lo peligroso de la justicia lenta está en la comodidad del rico y la angustiosa espera
del pobre por la incertidumbre del fallo.
El pobre no tiene el poder del dinero para litigar con éxito.
En la justicia, hay un grave problema entre otros, el problema de la inexperiencia de
los jueces. No hay justicia valedera si no hay conocimiento nacido del ejercicio
profesional. Esta es la realidad que coloca la Justicia en la pendiente del desacierto.
La justicia es neutralidad viva que está en continuo movimiento, es una coyuntura en
que antagonismos se ponen frente a frente.
La justicia es un gran medio de educar al pueblo.
V
Una labor del Poder: librar a la justicia de las cadenas de la injerencia y de la
corrupción.
El principio de la justicia está en conocer la causa del conflicto y en tomar una decisión
que el Derecho protege.
Una del Derecho y otra de la razón y la sentencia será de justicia.
Todo extremo es desviación de la sentencia pues entre lo más y lo menos está la
equidad de la justicia. Pascal ya anunciaba que las cosas extremas son como si no
coexistieren.
Para la justicia, la verdad procesal es un tesoro.
Si el tiempo es el más preciado de los bienes de la justicia, su inservible pérdida es la
mayor de las maldades.
Los dos mayores opresores de la justicia son el sucio Juez y el abandonado tiempo.
La conveniencia de la espera de jurisprudencia se convierte en una conminación.
Permanente ha sido y es la monomanía en la tardanza de la justicia, por causa de la
insana desconfianza en el fallo a dictarse.
Verdad indudable es que el pueblo que vive bajo una justicia dudosa, no es libre,
manumiso ni inmune.
La justicia en el presente siglo no podrá subsistir, sino por mutuas concesiones
políticas.
Aunque toda sociedad está basada en la intolerancia, todo proceso estriba en la
tolerancia, aduce Bernard Shaw.
Si fuere necesario admitir todas las demandas, la justicia no sería sufrible.
Aunque toda justicia esté fundada en la severidad, todo Derecho se apoya en el
consentimiento.
Solo los pueblos que honran las
decisiones de los jueces, merecen que las suyas sean honradas.
Estilo
Hay doctrinas, ritos y costumbres que al correr del tiempo, tienen más fuerza que las
leyes.
Sigue siempre a tu padre aunque sea muy viejo.
La justicia ecuatoriana no se levantará de su postración, maldiciendo los días lejanos y
notables
610 de su pasado.
Siempre será la tradición un avance de la justicia, que de no respetarla, jamás será un
logro social.
Stefan Zweig, subraya: La tradición es una muralla de piedra hecha del pasado que
Justicia
ciñe al presente. -
La edad media es un ejemplo del desarrollo tradicional, en donde no fue necesaria
tanta prisa.
Los que se empeñan encontrar arraigadas y perturbadoras fallas de la justicia pasada,
están haciendo la vida imposible a la juventud.
La úlcera de la justicia tiene una causa general que impide se rehaga pulcramente
según la razón y el Derecho; y este mal es parálisis moral de la que adolecen jueces^y
gobernantes de la justicia.
La falsa justicia se apodera de los litigantes como puede, pero siempre se apodera de
ellos.
Se me dirá ex-magistrado pesimista, pero los que me conocen saben que busco ante
todo, la santa redención de la justicia con la alegría de litigar, y que definitivamente,
terminen las insanas sospechas de corrupción.
Las sentencias siempre se cumplían pero esto era en otros tiempos.
Una justicia sin espíritu de equidad semeja un río sin agua, compara un adagio árabe.
Donde la justicia no es un santuario los jueces carecen de jurisdicción.
¿Será que la justicia está compuesta por muchos más desaciertos que aciertos?
La marcha progresista de la Nación está en asegurar la libertad a través de una
honrada justicia.
La justicia es un poder dentro de otro. ¿Acaso, una desviación de nuestra época?
Toda potestad jurisdiccional es frágil sí no se mantiene unida al Derecho.
¿El desahogo de la justicia estará tal vez, en la mayor confianza que los Abogados
tengan sobre ella?
¡Justicia ineficaz y aberrante la del socialismo del siglo XXI, que propone mucho y
entrega poco!
La justicia para todo y para todos es eterna, porque permanece junto a la naturaleza
humana de este universo mundo que marcha sin cesar, hacia un orden de cosas.
PAPINI GIOVANNI, literario italiano, nació en Florencia en 1881. Inició su carrera
literaria fundando la revista denominada Leonardo que solamente duró escasos cuatro
años. Luego se dedicó a escribir profusamente así, publica El trágico quotidiano, II
pilota cieco, Parole e sangue, Un uomo finito, La paga del sabato, Pagine di poesía,
Storia di Cristo, editada después de su conversión al catolicismo, San agustino, Dante
vivo, Gog, Ritrati italiani, Passato Remoto.

El fin más práctico e importante de la justicia es su ostensibilidad con el Derecho y la


razón.
El verdadero misterio de la justicia está dado por lo no perceptible de sus sentencias.
Nada hay en la justicia que sea ciertamente absorto, a no ser el perseverante
prevaricato de los jueces.
La razón para que la justicia sea eterna es que no vive para sí misma, sino para los
demás.
La justicia que para todos es la misma, no es creación de los políticos sino del pueblo.
El componente más útil y substancial de una persona es su concepto de la justicia.
El misterio de la justicia no está en lo observable, sino en lo encubierto.
Nada hay que sea ciertamente justo, como no sea más que lo necesario.
Hay en la justicia dos principios, el Derecho y la razón, que el Juez debe tenerlos61
permanentemente en cuenta, por su posición diversa uno de otro. Cuando ha lugar 1 la
razón preciso es que el Derecho retroceda, porque la razón no puede replegarse.
Máximas , Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
La justicia no ha sido formada por solo el agrupamiento fortuito de mandatos y
prohibiciones, pues su origen inmutable estriba en leyes y
fuerzas naturales inevitables.
La justicia se ha convertido en la representación del gobernante.
Tengo la impresión que nos hallamos ante un espejismo y la visión de la justicia no
pasa de ser el drama de una verdadera tortura.
La justicia no es suficiente para las dos partes en litigio.
Quiero estar apartado para meditar en el Derecho exigido y en los hechos probados,
para lo que emplearé toda la firmeza de mi saber. Quiero ser un reducto de la vitalidad
y poder de la justicia.
Cuando examino el silogismo de la justicia, me sobreviene una grande intriga de lo
engañosa y precaria que
es.
La historia de la justicia marcha de siniestro en siniestro, sin que podamos entenderlo.
La justicia y el Juez son una sola esencia; la justicia la forma dilatada y traviesa, de la
cual el Juez es insensible comediante.
Patrocinio de la justicia es que las sentencias honradas sean útiles no solo para el
favorecido, sino para la sociedad entera.
Si la justicia no fuese siempre honesta, la Nación tendría mejor disposición para su
prosperidad.
Lo que es inútil para la justicia, lo es también para la Nación, no vale nada porque es
un desecho.
No ser honesta la justicia, es como valer nada.
En un Estado Social de Derecho, es más útil el Juez que mide la aplicación del
Derecho por el bien común.
La sociedad no puede carecer de la buena justicia, aún cuando algunas veces
eficaces y muchas vacías.
Sin valer es ineficaz la sabiduría de la justicia.
El efecto informático en la justicia:
Crea una nueva forma de hacer justicia;
Aumenta la corrupción que a todos afecta;
Exagera un fallo obscuro y peligroso;
Provoca inestabilidad para todos;
Al final quedará la mediocridad;
Ponernos a buen recaudo será nuestra mejor esperanza;
Quizás los únicos que perdurarán sean los jueces que han tomado precauciones en la
investigación jurídica;
Sin embargo, confiamos que volverán las Cortes con sus propios nombres y con lo
mejor del Foro.
Un Ecuador con una Corte Suprema y tjfía justicia más justa y humana.
¡Sabemos cómo el dinero gobierna la justicia! Se comenta.
Cuantas veces el discurso esconde la verdad de lo que sucede en la justicia. ¿Que
todos mienten?
¿Cómo construir la justicia? ¿La corrupción es acaso inevitable?
A medida que la tecnología avanza, la corrupción sigue atrás.
El poder absoluto siempre ha corrompido la justicia.
¿Será talvez que en la justicia de hoy, la única regla es no tener regla de
comportamiento?
Pero, es que la eterna lucha por el conocimiento del Derecho y la sabia experiencia de
los jueces, han calado en la justicia.
Los
612 personajes de la justicia, jueces jóvenes y viejos, no la toman en serio porque los
unos, no la conocen todavía y los otros, la conocen demasiado.
La ley y la justicia son la paz y el orden de la Nación.
El Derecho y la justicia están íntimamente unidos por tener el mismo origen, la paz.
Justicia
El temor es uno solo, puesto que nadie tiene garantía de una buena sentencia.
En 300 años de la Colonia y más 192 de la República, no ha habido “Revolución
Ciudadana” alguna, que se haya preocupado responsablemente, del dilema de la
justicia.
Fundamentalistas de la “Revolución Ciudadana” creen ser hijos de la luz que deben
derrotar a los hijos de la obscuridad.
Tengamos bien presente que en la justicia no hay nada secreto que no pueda
conocerse.
Una judicatura honesta es el peor lugar para los delincuentes.
La justicia de hoy no marcha pero zapatea.
No hay por qué culpar a la justicia de los defectos de malos jueces.
La rapidez informática que estropea los procedimientos es en realidad, el nuevo vicio
del fuero de la “Revolución Ciudadana”.
¿Qué es la oportunidad en la administración de justicia? No será una loca velocidad
sino, una serena y constante meditación en el Derecho que asiste a uno de los
litigantes.
Si la justicia parece venganza, ¿Cómo ha de impedirse que los hombres crean alguna
vez, que la venganza puede ser justicia?, aduce Benavente.
Exactitud
La verdad procesal es la esencia y fuerza de la justicia.
Es por la necesidad de la verdad que se creó la justicia.
A la justicia le pertenecen la verdad y la libertad, todo cuanto hace el Juez por ellas o
contra ellas, no es por casualidad ni al azar, sino por verse apremiado a rendirse.
La verdad procesal es la realidad de los hechos que el Juez la reconoce para evitar
incurrir en errores.

61
3
de los hechos con la verdad de su ocurrencia, que no debe explicarla.
La verdad es preferible omitirla antes que falsearla, mentirla o venderla.
El mejor consejero de la verdad es el tiempo; su más implacable adversario la Justicia
conveniencia; y su visible sostén, la imparcialidad.
j/ No hay nada que sea tan eficaz, como la conformidad de los hechos con el
Derecho y con frecuencia, no hay nada más insólito.
La verdad no siempre deja de ser rara en la justicia, cada vez más inexplicable^ una
entelequia, una mentira.
Toda componenda con el Juez es a expensas de la verdad.
El Juez prefiere que se digan falacias sobre él, a que se divulgue su sentencia que
está por notificarse.
La verdad es el principio de toda sentencia docta y la seguridad con el Derecho, no
pueden fuera de ella permanecer.
Goethe, profiere: Prefiero una verdad nociva a un error inútil. La verdad cura siempre
el mal que ella misma ha provocado.
Aplicar la verdad procesal es la perfección más decorosa de un Juez ajustado a
Derecho.
La verdad es lo más meritorio que posee la justicia.
Nietzsche, sentencia: Todas las ^ verdades que se callan se hacen venenosas. Toda
verdad es sencilla,
¿No es esto una doble mentira?
Oscar Wilde, subraya: Dad una careta a un hombre y os dirá la verdad.
El Juez obligado está a decidir el juicio diciendo la vécJad, aunque por ; excepción
tenga suficiente destreza para mentir.
¿Será posible la verdad antes que la equidad?
Sobre todo hoy, vivimos presenciando en la justicia mentira tras mentira, todos están
en una red de mojigangas
o de payasadas y, la verdad acaba por parecer una aberración.
Hay jueces que cometen grave error de reemplazar el conocimiento por la afirmación,
que es legítimo lo que ellos resuelven.
Pero hay otros, que cierran sus ojos a la verdad por no lastimar su compromiso, que
consideran irrenunciable.
Aunque haya verdades eternas en la justicia, siempre parecerán despojadas de
pendencia y sin arrastrar compromisos tampoco.
La pregunta: ¿Qué proporción de la verdad puede mantener un Juez sometido a la
obediencia?
No se merece nuestro pueblo jueces profetas, que escuchan la verdad y resuelven lo
contrario.
Para saber qué es la verdad, es imperioso advertir el conocimiento y la libertad del
juzgador.
La verdad es un permanente secreto mantenido por el Juez, hasta antes de hacer
saber la sentencia.
¿Por qué razón, el lenguaje del pueblo
pone a la justicia en diminutivo?
La justicia sólo premia al litigante que ha realizado la proeza de probar su derecho y
olvida a quienes, si bien posibilitaron el debido proceso, no justificaron tener razón.
Nada hay en los tiempos que corren, que nos garantice ganar un juicio.
Cuando entra la dependencia en la justicia hay vicios y hay virtudes de coincidencia.
Inmaculada es toda virtud, hasta el momento de la prueba, nos asevera Schiller.
La justicia ha de medirse por el mal que el Juez se abstiene de hacer y por el bien
que cumple.
En la justicia siguen viviendo los ilustres juristas que han marchado con honor y

614
aptitud.
Fuera de la justicia no hay paz ni armonía. Justicia
Si la justicia no fuera cierta ¿Cómo podríamos seguir el precepto del Derecho?
La verdadera justicia es una, igual J y oportuna porque no subsiste dividida, porque
su fin es dar lo que corresponde a cada quien y porque quien la otorga, pronto la
sigue v dando.
Toda justicia regida queda destruida porque el Derecho regentado a todos perjudica.
)\
¿Por qué la justicia es una?
Porque en todo tiempo y lugar es la misma;
Porque asimismo, uno es el
Derecho;
Porque la diversidad de criterios no le perjudica y menos, la destruye;
Porque en todos los tiempos han habido en ella grandes jueces, los hay y habrán
siempre.
Llamamos a la justicia nuestra madre porque ella nos alecciona en el Derecho; ella
nos asiste con razones para someternos a la ley y a sus sentencias; porque no es
posible tener como guía segura al Derecho, sin contar con ella.
Si tu hermano desconociere el derecho contra tí, acude a la justicia, pero si ni a ella
oyere, ténlo por ingrato y perdónalo.
Quiero encontrarte en toda sentencia, en tu decisión incomprensible.
La justicia es un tormento de esperar con ansiedad la sentencia.
Imagino tu perfil más que en ninguna otra vez y me consuelo esperarte.
Quiero justicia, hallarte en la razón inconfundible durante estos tiempos en los que el
derecho se olvida en todo y queda en silencio ante ti.
Quiero coincidir en tus procedimientos, en la realidad de la ley y en el honor
escondido de tus jueces.
Vuelvo día tras día con la paciencia de saber esperar y la ilusión del despacho súbito
del juicio.
Quiero dar con la actitud del Juez aofev te-eompañía del amanuense judicial, •' que
son semejantes, en el indicio de J que iguales.
Descartes aduce que la racionalidad y la razón precisan, que nos
diferenciamos de las especies animales.
Anhelo encontrarte ¡oh justicia! Cara a cara en el abrazo mutuo que da sentido a la
vida, con la certeza de comunicar a otros tú presencia.
El mundo de la justicia resulta aciago para muchos que litigan sin derecho y sin
cumplida razón.
Sólo la esperanza en la justicia puede dispersar la melancolía del juicio y hacer que
brille sobre la descomposición judicial.
Todos deseamos la justicia que es la fortaleza de quienes te seguimos como testigos
de tu poder.
Si el alma de la justicia es la razón, la demanda a través de la prueba y el debate en
la audiencia; la mente del Juez debe estar fría y en conocimiento del caso, para
tomar una decisión.
Toda época anterior de la justicia ha sido siempre la mejor y, si hubo alguna
ciertamente peor, en ella vimos el respeto a las grandes cosas del Derecho.
Cada día la justicia va estropeándose más y más entonces, va descubriéndose más
la razón del Derecho.
La justicia invariablemente, es para todos por derecho fundamental.
A veces, encontramos la justicia en el camino que deseamos evitar.
La justicia con el Consejo de
Que no prevalezca justicia más acabada que la honradez.
Judicatura, no hace ningún adelanto.
61
5
Máximas,
El respetoReparos y Alternaciones
a la justicia para de una Justicia
algunos no Perdida
es sino, por el miedo de sufrir desafueros.
La justicia es a veces, el guarismo que vale según donde el Juez lo ponga.
En la justicia, es la peor de las decisiones por la declaración testimonial.
Nada hay en el bajo mundo de la justicia más insoportable, que tomar asiento frente
al Juez y someterse a su habitual respuesta: Espere y ya conocerá la sentencia. Es
todo un precepto.
Ni escritorio sin juicios, ni sentencias sin juez.
Es poco seso del Juez que canturree en el escritorio a la sombra de la espera.
Si el agua es el origen de la vida, el juez honesto es el de la justicia justa.
Somos los abogados parte de una conflictiva justicia.
Elemento constitutivo fundamental de la justicia es la moralidad.
La pregunta: ¿qué hacer para que la justicia sea siempre honesta? No tiene
respuesta.
La justicia sin cesar ha sido, es y será la contienda de intereses.
Ahora, la historia de la justicia pretende ser discreta.
La justicia fue más justa antes de la revolución electrónica, a pesar de que todas han
tenido sus mitos, por

61
6
Máximas,elReparos
valor yde
Alternaciones
ser más. de una Justicia Perdida
El pueblo confía en la justicia de unos a otros.
¿Hasta cuándo pronunciáis sentencia injusta dando razón al culpable? ¿Estáis
acaso, comprometido con las sombras mientras balanceas los soportes de la
prueba?
La justicia es como una viuda rica, todos la pretenden poseerla.
Nuestra justicia jamás será la misma.
La corrupción intenta detener la justicia.
IjHay decisiones judiciales que ponen en peligro la justicia.
La justicia se está convirtiendo en una batalla de desusadas pretensiones.
¿Existe acaso, explicación natural para los engendros de justicia?
Los jueces tratan de mostrar los secretos de la justicia en base a sus experiencias y
cuestiones lógicas de cada juicio.
El poder público anterior al actual, siempre se ha esforzado por la pulcritud de la
justicia.
No obstante, el abuso rampante tras nueva imagen de cambio, continúa y el mal no
ha cerrado sus puertas.
La ruina judicial que vivimos, simboliza la decadencia moral de la Nación. Sin
embargo, el Foro permanece firme en su fé sobre la justicia como los judíos en su
Jerusalén: si me olvidare de tí, oh JeríÜalén, pierda mi diestra su destreza.
Se extravían de la justicia los granujas que no escuchan su expresión por ser
intrusos en la sociedad y en aquella todavía más.
La vida sin justicia no tiene sentido y es el juez quien debe protegerla de los
torbellinos del mal, dando pronta sentencia y seguridad del debido proceso.
Tú, señor juez, eres la verdadera justicia firme y permanente. Por ti volveré a
pronunciar la palabra justicia y recobrar su noble significado.
¿Hasta cuándo nos afrentará la corrupción judicial? Actúe Consejo de Judicatura,
actúe a través de los honestos jueces que despierten a los demás y nos hagan ver
las calamidades que soportamos y la manera de remediarlas.
La justicia en Ecuador ya no es justicia, la enseñanza del Derecho ya no es
aprendizaje, los procedimientos se han retorcido y la autoridad se ha desvanecido del
Derecho natural al que juró servirle.
En nombre de los injustamente condenados, pido justicia a los jueces con suficiente
sabiduría y valor, para que restablezcan la confianza en la gente, que ha perdido el
sentido de la honestidad.
Yo no digo que la justicia en Ecuador ha perdido su cualidad de verdadera, pero sí
que está en peligro de perderla ¿Quieres ver justicia? La encontrarás en las
sentencias de los probos jueces. ¿Quieres ver sucias sentencias? Las encontrarás
en las pronunciadas por jueces corruptos. ¿Quieres ver la expulsión del corrupto
juez? ¿Dónde crees que
la puedas encontrar? Es una triste ironía, el corrupto está allí mismo.
Me siento fracasado, pero es que de veras me oprime y me abruma la frustración de
la justicia. Si, tu fiasco en la anhelada justicia es una
decepción, tu justicia^eres quien la hiciste y tuya es la responsabilidad si no cumples
para lo que existes.
Mientras solo se trataba de un arreglo equitativo, yo me refugié en la justicia sin
importarme el sufrimiento del juicio, con tal que tu autoridad estuviera a salvo. Pero
veo que tu honor está ligado a la desdicha de los, procedimientos y a los malos
juéces y quedas empeñado, porque no se trata del debido proceso.
¿Que más he de hacer para conseguir tu gracia y cambiar los procedimientos
judiciales? Siempre las mismaji falacias, los mismos defectos y genios judiciales, las
mismas pasiones de jueces. No espero milagros pero si el respeto comprometido con
Justicia
el debido proceso.
Que la justicia honre al litigante, que la teman los forajidos, para que los que la
conozcan venga su mano protectora. No es que cada cual tenga una justicia distinta
y que cada uno espere que sea superior a la de los demás.
Quienes destruyen la justicia son los jueces de poco conocimiento, y la corrupción
que ha endurecido su conciencia.^
No podrás hallar la justicia si no descubres antes, los obstáculos que te impiden
llegar a ella.
La justicia no es una cuestión de
ritualidad o de buenas acciones. Justicia es arrancar las impurezas sostenidas en el
litigio y encontrando la verdad, conocer lo que pertenece a cada quien. De otra
manera, será vivir de falsas imágenes judiciales.
La justicia es buena para todos pero en manos de jueces corruptos o dormidos
puede hacer mucho daño, en nombre del pueblo soberano y por autoridad de la
Constitución y leyes.
Si el juez no sabe emplear el Derecho en libertad, sin fanatismos legales ni sobornos,
puede hacer mucho pero en menoscabo de la justicia.
Si hay tanta liviandad en juzgados y tribunales es porque falta suficiente interés para
proteger la justicia.
Talvez cueste tanto ver la luz del Derecho, porque la justicia se ha identificado con el
poder político endureciéndose, en lugar de sensibilizarse con la verdad procesal, que
siendo una no es propiedad de nadie.
La justicia puede ser de gran ayuda mientras no se la haga más importante que el
Derecho.
La justicia es algo impersonal puesto que excluye preferencias.
Cuando desaparezcan los prejuicios y las visiones interesadas, entonces sabremos
de la justicia que fluye de donde está.
La justicia y el Derecho no son dos mundos paralelos, sino la armonía que se junta y
actúa en pro de la paz y ritmo de la vida.
La justicia no es una concomitancia, es un estado de la naturaleza, porque
619
Máximas,
antes queReparos y Alternaciones
existiera el hombre,de una
la Justicia
justiciaPerdida
ya existía.
La realidad de la justicia es aquella que traspasa todo concepto, los jueces honestos
la describen en su profundidad y matices que no obstante de entenderla, los políticos
aseguran que es imposible compartirla.
Hasta hoy no existe fórmula mágica para acabar con la corrupción judicial y que es
indispensable hacerlo con conocimiento. Subsisten en ella tantas formas que no
pueden ser cambiadas de la noche a la mañana, como pretenden los digitadores del
Consejo, que solo fueron aceptables para iniciar la informática judicial y nada más.
En esta desleal lucha contra la corrupción, nada servirá si no se llega al fondo mismo
del conflicto judicial pues caso contrario, se viene haciendo mucho más daño que
bien porque el acontecimiento es cuestión de vocación y moralidad del Juez.
Hay que tener en cuenta que la administración de justicia se ha convertido en un
perfecto enredo que también los reformadores lo son, escondidos tras el despelleje
de judicatura.
Es la perpetua y constante voluntad de dar a cada uno su derecho, nos enseña el
Digesto de Justiniano.
Justicia sin prudencia puede mucho, pero prudencia sin justicia no vale nada,
aconsejaba Cicerón.
Pídeme lo justo y te lo daré, 4jce el juez probo.
La mayoría de políticos son
analfabetos del Derecho y de las cosas que ocurren en la justicia. Las soluciones que
promueven a la crisis son demasiado rústicas y pedestres.
El ámbito de la justicia está dentro del Derecho, no lo rebusques ni pongas etiquetas
fuera de él.
Los ecuatorianos necesitamos conocer la pereza y la ignorancia de jueces, en donde
se refugia la injusticia.
La justicia debe ser ahora y no mañana.
Cuanto más conozcan nuestros hijos de la justicia y sus miserias, sabrán cuidarse de
tan grave lección de su vida.
Hacer el bien es la esencia de la justicia, su naturaleza y objeto.
¿Por qué no debemos proferir la pronta administración de justicia?
La justiciaron frecuencia, las partes la (/ convierten en un submundo oscuro e
incierto, del que fatigosamente no pueden escapar.
La justicia va siempre unida a la verdad procesal y a la libertad del juez, que la hacen
sea acertada.
La duda permite resolver por lo más favorable. En la duda, prevale la equidad.
La razón de justicia si bien es conexa a la ley, es deseable ante el riguroso Derecho.
El cónyuge no debe ser curador del otro.
La equidad inspira justicia cuando falta el suficiente Derecho.
La justicia es el destino normal del Derecho.
Justo precio es la media comercial.
Lo no previsto en la ley, la justicia confía en la discreción del juez. El juez es la
expresión equitativa de la ley.
Cum laude, con alabanza.
En causas oscuras hay que atenerse a los indicios menos confusos.
Los actos y contratos contrarios a las buenas costumbres se reputan inexistentes en
Derecho.
Una condición imposible se juzga inexistente.
Comprometerse en condiciones imposibles es muestra de no querer obligarse.
La confesión del acusado es relativa, porque nadie está obligado a declarar contra si
mismo.
El convenio entre particulares, no puede estar contra el Derecho Público.

62
0
La debilidad del poderoso reside en que no requiere del Derecho. Justicia
Qué fácil es perdonarse a sí mismo.
El amparo de pobreza -eobija al litigante indigente, aún cuando tenga lo suficiente
para vivir pero carece de lo necesario para litigar.
La procuración judicial requiere de cláusula especial para transigir, para lo cual debe
estar especialmente autorizada.
Quien puede lo más, puede lo menos.
Se interpreta la palabra ambigua.
La palabra dicha no vuelve.
Quien anhela vivir en paz, que se niegue para algún juicio.
Inclusive para hacer la paz, se necesita de un adversario.
Por razón natural, nos defendemos del riesgo del conflicto, del peligro.
Del mal, el menos. Mínima dei malis.
Imposible absolver al culpable, que condenar a un inocente.
En derecho está permitido todo lo no prohibido.
Saber del Derecho es poder administrar la justicia.
Poseo porque poseo no obstante, la posesión de buena fe es la autorizada por el
Derecho.
El pasado sin causa, no es válido, ni legitimo, útil, efectivo.
Quien percibe el provecho ha de sufrir el perjuicio.
Es sana precaución de justicia admitir lo superfluo, que omitir lo necesario.
Las muchas palabras no alteran la esencia de los hechos.
Estado de necesidad
¿Acaso el estado de necesidad justifica que lo ilícito sea licito? ¿No será que la
necesidad convierte en

62
1
Máximas,licitó
Reparos y Alternaciones
lo que de una prohibido?
por ley está Justicia Perdida
El estado de necesidad es su propia ley, obligatoriamente.
La necesidad suele ser con frecuencia, más poderosa que la amistad, lo impensado.
¿Podrá la necesidad establecer lo que por la ley no lo es?
Todo lo que guarda armonía con la naturaleza es como una ley tácita especialmente,
para el ius sanguinis.
Sin causa no hay obligación. Sin causa nulla obligatio.
Contexturas
Laí libertad de locomoción es un derecho fundamental, en consideración a la
autonomía inherente a la condición humana, para transitar o desplazarse de un lugar
a otro, dentro del territorio del propio País.
El concepto de espacio público comprende mucho más que el de bienes de uso
público.
Nula es la asociación para fines deshonestos.
Primero la sucesión recta, que a la transversal.
En la sociedad es justo que quien participa en las ganancias lo haga también en las
pérdidas.
El tiempo compensa en las cosas que se hacen sin paciencia.
El trabajo semeja al capital en una sociedad mercantil en que uno aporta el acervo y
otro, el quehacer.
Por el transcurso del tiempo eres 622
preferido en el derecho, porque en el tiempo rige el derecho.
Los tiempos cambian pero no las leyes de la naturaleza.
Nadie puede transferir a otro lo que no tiene.
El tránsfuga escapa del derecho al honor.
El testamento, expresión de nuestra última voluntad, debe contener el activo como el
pasivo.
No existe testador sin heredero, como no existe empleador sin trabajador.
Precario en el uso, tanto lo consienta quien lo concedió.
Todo acto o contrato administrativo, por su naturaleza, es perfectamente demandable
ante la jurisdicción contencioso administrativa ya por razones de inconstitucionalidad
o por motivos de ilegalidad.
Hay cuatro cosas que no se puede soportar:
El corrupto que llega a la corte constitucional;
El irresponsable juez que despacha sin conocer lo que hace;
La abogada deseada que encuentra marido; y,
El litigante que suplanta a su abogado.
Hay cuatro seres minúsculos en la administración de justicia que dicen superar a los
demás en el conocimiento del Derecho:
El amanuense judicial;
El tramitador de juicios;
Justicia
El digitador; y, por último,
El “lagarto”, que lo encuentras metido en el despacho del juez.
Hay tres cosas que tienen íntegra rectitud:
El virtuoso Juez, el más sabio de todos, que no retrocede ante nadie
El amanuense que se yergue orgulloso de atender a todos; y además,
El abogado, al frente del litigante.
Quien calla consiente.
Contrarío sensu: en sentido contrario.
Una cosa es ocultar y otra callar, sobre todo en lo penal.
Casos de conciencia: Casus conscientiae.
El caso fortuito a nadie es imputable.
Cesada la causa, cesa el efecto.
La Física y el Derecho se complementan en materia de causa y efecto, puesto que la
primera es material y lo otro voluntario.
En los actos y contratos se ha de estar a lo escrito.
El círculo vicioso hace de la argumentación que sea falsa.
En Roma:
Condicio iuris: condición de derecho.
El consenso crea la ley entre las partes.
El asentimiento hace la ley.
El complot hace el fraude.
Buena parte de las malas costumbres son antiguas prácticas.
El contrato es voluntario en su celebración pero luego es de necesidad.
Contubernio en Roma, era el amancebamiento.
Las contrarias se saneaban mediante contrarias.
¿Será imposible llegar a un equilibrio del Derecho con solo los méritos procesales,
sino también con la verdadera independencia del Juez sentenciador?
Sólo al juez la ley ha entregado las llaves que dan entrada a la justicia, con el secreto
de la perfección en el acierto jurídico.
Los juristas mayores aunque no todos en virtudes, son los más asiduos en implorar
rectificaciones de la justicia.
Hoy como siempre, la justicia ha sido y es fruto del Derecho y la honradez de los
jueces.
¡Oh misterio de la justicia, desconocido de los corruptos y poco conocido de los
honestos!
Los abogados sanos están tranquilos mientras viven en el seno del Derecho, donde
crecen y echan raíces con la viva esperanza de alcanzar justicia.
El juez corrupto cree que la justicia es su propiedad en donde ha fijado su V morada.
Dentro del juez integro está el reinado del Derecho, del mismo modo como
está en su espíritu la justicia.
La justicia es la libertad oculta y escondida en el Derecho, con el anhelo firme y
constante del buen vivir.
Los propios gestores de la justicia no la conocen y la gente les pregunta con
frecuencia, ¿Qué es la justicia? Los jueces hablan de ella muy poco porque si lo
hicieran y algo manifestaran de ella, seria infinitamente más de lo que en realidad es.
Se ha dicho que la justicia es la obra maestra de la libertad.
En la justicia sólo puede entrar la
f libertad; es el tabernáculo donde mora el Derecho y la equidad más que en ningún
otro lugar.
El apego a la justicia es mucho más imperioso para alcanzar paz entre los pueblos.
Ser seguidor de la justicia significa tener un instrumento de protección, que el
623
Derecho ofrece a quienes creen en ella.
Bueno sería escribir una crónica como la del presidiario que cumplida la condena por
asesinato, encuentra a la persona cuya muerte violenta la justicia lo consideró
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
victimario. Entonces ¿Qué hizo el desgraciado lleno de confusión, ante desoladora
situación? Matarlo y volver a presidio.
Si honrar al Derecho es indispensable para alcanzar la paz, lo es mucho más
| para los llamados a adminístralo.
Entre las malas acciones
La ira no es circunstancia eximente del delito.
La ira es circunstancia atenuante cuando
es por dolor moral intenso.
La ira también puede ser circunstancia agravante del delito, cuando es con crueldad
excesiva.
Nadie está obligado hacer lo imposible, utópico, ficticio, difícil...
Es injusto aprovecharse de la ignorancia ajena.
Se interpretan las palabras ambiguas, imprecisas, oscuras...
La ignorancia es atrevida, audaz...
El médico como cualquier otro profesional, responde por impericia.
Lo no constante del proceso es como si jamás hubiera existido.
A nadie puede obligarse permanecer en la indivisión.
La toga no hace al juez.
La intuición diferencia la culpa del dolor.
In rerum natura: en la naturaleza de las cosas.
El más ingrato de todos es quien olvida el beneficio recibido.
La mejor querella contra la injuria es el olvido: Séneca.
Justicia es orden. Injusto es el juez que perjudica, discrimina o debilita el orden. Fué
Platón quien moralizó su concepto al considerarla un bien superior y una virtud.
Los juristas romanos entendieron que lo justo es lo que se acomoda al Derecho y a la
voluntad de acatarlo. Así, Ulpiano, predicaba que la justicia
es la constante y perpetua voluntad de dar a cada quien lo suyo.
Este postulado junto con otros dos: vivir honestamente y no dañar a los demás, es el
fin fundamental del Derecho que nos legaron los romanos y que en definitiva, lo
vincularon a la justicia al dar a cada uno lo suyo, que ha prevalecido a través de los
siglos.
El cristianismo llega a definir la justicia como la fidelidad de la persona a su santidad,
desde el punto de vista teológico como filosófico y jurídico, aunque pone la caridad
sobre la justicia.
/
Santo Tomás y San Agustín han cimentado una doctrina filosófico- jurídica de la
justicia y establecen sus partes esenciales:
Es la norma moral de dar a cada cual lo suyo;
Recogen la clasificación aristotélica de la justicia general y de la particular que la
dividen en distributiva y conmutativa;
Evidencian la relación entre comunidad, ley, bien común y justicia; y
Finalmente, definen la concomitancia entre justicia, ley natural y ley divina.
Hugo Grocio, ilustrado jurisconsulto holandés del siglo XVII, considerado y padre del
Derecho-^ternacional Público, enseñó que la justicia es un imperativo derivado de la
ley natural a la que debe acomodarse la ley positiva.
El poder absoluto de los monarcas
relegó a la justicia y al derecho natural a favor de la norma positiva procedente de la
voluntad del monarca.
El positivismo jurídico actual declara y reconoce que lo justo es simplemente, lo legal.
La justicia originalmente, se la representó bajo la figura de una matrona con ojos

624
Justicia
vivos y penetrantes, para manifestar que los jueces deben examinar con toda
exactitud la controversia sometida a su competencia, antes de pronunciar sentencia.
Hoy, se la representa con una venda en los ojos, la balanza en una mano y la espada
en la otra, para denotar que el juez obra sin mirar a quien y que tiene fuerza para
llevar a efecto sus decisiones y hacer reinar el orden. Así es como nos enseña el
ilustre jurista español Joaquín Escriche.
El tiempo del Abogado, en no teniendo qué hacer, se disipa a sí mismo con la
habladuría de los enredos profesionales.
En el bajo mundo de las injusticias, el Juez no posee la verdad más que para el
presente. No tiene el equilibrio que subsista por su probidad, pues cuando ésta cesa,
la ponderación se hunde.
Triste y despreciable realidad, cuando más se combate la corrupción judicial, peor se
vuelve, por lo que debemos enfrentarla sin combatirla, v porque cuanto más la
persigas, más la fortaleces.
El abogado honesto sufre y perturba por la ansiedad que le ocasiona la corrupción
judicial, porque si sale de una, vienen diez más.

625
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
Se dice que la corrupción judicial es una cuestión de lenguaje puesto que hay
procedimientos que son sus estímulos y que a nada conducen por estériles.
El judicial corrupto busca incesantemente algo más, que es lo que es y nada más.
Hay tres tipos de corrupción judicial:
La dependencia de fuera;
El deseo de la dadiva; y,
El servicio al político para mantenerse y ascender.
Así se lycra fraudulentamente, con la prestación del sistema judicial, que trae alivio y
bienestar al corrompido juez, mas no la paz en su conciencia.
Bien mirada la injusticia no existe, pues si no concebimos ni practicamos el Derecho,
tampoco podemos negarlo. No se niega lo que se conoce pues lo que se niega son los
conceptos.
Quizás, la principal ventaja del nuevo Código Penal, sea la buena fe que hace inútil la
fuerza.
El Código espera que te hagan a ti lo que tú has hecho a otro. Qué pequeña inocencia
es ser bueno según el nuevo Código.
Hay que saber lo que sienten los desgraciados condenados para verter sobre ellos
clemencia y mostrar a la sociedad más justicia.
En el nuevo Código parece que la justicia no está muy lejos, estando cerca la
falsedad.
La experiencia nos muestra cómo la justicia y la injusticia se convierten en una sola
cosa.
La experiencia me ha enseñado que se sientan como jueces quienes no han podido
ser abogados.
Condenas a la persona y después haces la pesquisa.
Buena justicia destierra malicia.
Mucha tinta y mucho papel pero justicia, Dios te dé.
La justicia apresurada es como la madrastra del infortunio.
Nunca fue nadie ahorcado teniendo dinero en el bolsillo, se ha dicho con sobrada
razón.
Aciago Ecuador cuyos jueces justifican que se les condene.
Expresiones doctas
Sófocles predicaba a los griegos, que ocasiones hay en que la justicia misma produce
entuertos.
Aristóteles, la más excelente de todas las virtudes es la justicia.
Cicerón a los romanos: hacer depender la justicia de las convenciones humanas es
destruir toda moral.
Leonardo de Vinci, la justicia requiere poder, inteligencia y voluntad que se asemeja al
águila.
Cervantes aconsejaba: No te precipites pensando castigar él ajeno delito, te eches
sobre ti la pena de la culpa propia, si acaso doblares la vara de la justicia, no sea con
el peso de la dádiva, sino con el de la misericordia.
Quevedo: la horca que dices más se usa en los desdichados que en los
ladrones y en el mundo el ladrón grande condena al chico.
Emilio Zolá: la justicia debe mostrarse indiferente hacia las consecuencias,
elevándose por encima de los intereses transitorios.

626
Justicia

Ramón y Cajal: Felicísimo país el nuestro, en donde la casaca ministerial, la toga y el


blasón no delinquen jamás.
Unamuno: la última y definitiva justicia es el perdón.
Gustavo Le Bon: cuando se posee la fuerza, se deja de invocar a la justicia.
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NOTA PRELIMINAR
La ilegalidad e ilicitud de las decisiones judiciales, su improcedencia y desafuero, su
parcialidad e indignidad, la sinrazón y favoritismo, la componenda e inmoralidad de
jueces y asistentes judiciales, el atropello y despotismo de éstos, lo absurdo en los
procedimientos y las diseminadas judicaturas son prácticas que con frecuencia y
arbitrariamente vienen ocurriendo como nunca antes, en la actual administración de
justicia, lejos de la armonía y libertad que deben prevalecer en el sendero del debido
proceso, tutelado por una Constitución desde los primeros tiempos conocidos.
627
Justicia
En la Colonia se admitía como injusticia notoria a la opresión o sinrazón que padecía
el litigante enjuicio, particularmente cuando por lo que resultaba de este sin
necesidad/de nuevas pruebas, se veía claramente que la decisión judicial no podía
sostenerse:
Por falta de citación con la demanda o querella;
Por falta de poder en el procurador; y,
Por. no estar conforme al sentido y espíritu de la ley, de la jurisprudencia, al derecho
natural, a las buenas costumbres, a lo deducido y probado.
El Reglamento de Procedimientos disponía en aquel entonces, que los recursos de
injusticia notoria y segunda suplicación para los casos de fallos ejecutoriados cuyo
juicio se haya seguido ante juez inferior o cuando el tribunal superior haya conocido en
primer grado, en virtud del privilegio de caso de Corte; se requería estar advertido
antes que se pronuncie sentencia y que la reclamación no hubiese. surtido efecto.
Prohibido estuvo el recurso de nulidad en las causas criminales, en los pleitos
posesorios y ejecutivos.
El recurso debía interponerse ante el tribunal superior, dentro de diez días siguientes
al de la notificación de la sentencia, por escrito firmado de letrado que determine la ley
y doctrina infringidas. El recurrente debía además, depositar 10.000 reales o “rendir
fianza por el doble.
Esta acción que le quedaba al condenado en juicio de acudir a otro juez
o tribunal para que se enmiende el agravio que creía habérsele irrogado, era
conocida como el recurso de injusticia notoria aparte de la apelación, de la suplica,
segunda suplicación y el recurso de fuerza.
M recurso de injusticia notoria tenía lugar generalmente, cuando se había violado la
ley de modo manifiesto en el proceso, sus formas sustanciales en la última instancia y
por ser el fallo dado contra ley expresa. Desde luego, su interposición no impedía que
se lleve a efecto la ejecutoria, salvo fianzaa-juiek) deíHHaismo-tribmal c[ue asegure
los resultados del recurso, pro cedía-- pop-parte ddUque4e-mterponfa^'deposito de
10.000 reales y en su lugar, la fianza por el doble. Al litigante pobre le bastaba
obligarse en escritura pública o en los autos a responder de dicha suma. Los fiscales
de su Majestad no estaban obligados al mentado depósito ni a la fianza.
La comisión dé un delito originaba, como hoy, además de la responsabilidad penal
una responsabilidad civil como consecuencia de los daños y perjuicios que el delito
causó a la víctima. Se conceptuaban también los destrozos que el juez producía en
sus injustas decisiones. Los daños morales eran considerados por los perjuicios de
tipo psíquico. En todo caso, los daños se proyectaban siempre sobre las cosas, no
sobre las personas, las que agredidas, eran objeto de lesiones. Los perjuicios fueron
los que no podían repararse de forma propia y podían ser tanto materiales por lo que
se dejó de ganar como consecuencia del delito, como morales por la muerte de un
familiar a consecuencia del delito. Perjudicada por el delito fue la persona que había
sufrido los daños civiles susceptibles de reparación económica, que tenía derecho a
ser indemnizada.
ir
\
Injustificable
Benavente, ha dicho: Una cosa es continuar la historia y otra, repetirla.
La justicia requiere mejor honra sin revolución alguna, pero si cambios en los
procedimientos, con honor.

628
Justicia
El honor no es más que una expresión que sirve para que los jueces juren lealtad a la
Constitución y leyes de la Nación.
Tan mal está dar prisa en el despacho como retenerlo, pues si hay que atender al que
está pendiente se debe facilitar su expedición.
La ignorancia es la madre de las injusticias y de todos los demás vicios
deKimprovisado Juez, aunque Vélez de Guevara diga, que es la inventora y amiga de
cosas buenas.
No es posible imaginar las injusticias porque carecen de semejanza con el derecho.
No pueden admitirse porque son la negación de la verdad.
Las injusticias y el Derecho son contrarios y jamás podrán ayuntar como entre la
mentira y la verdad, que no caben en la humana justicia.
Las injusticias son una genuina ironía de la democracia.
Una gran anormalidad de la justicia ecuatoriana es su inseguridad en las decisiones,
cuando no en sus, sorprendentes re iluciones.
Las injusticias de J§s jueces no dan recta razón del Derecho.
La injusticia no existe en ocasiones y lo que tú así llamas es el Derecho que no
aprecias.
En la ley de las -injusticias, cuando alguien encuentra la ocasión de convertirse en
demandante, jamás las disipa.
Si las injusticias nacieron deberían morir y no continuar en persistente conversión.
Torvo desafuero donde los jueces no tienen moral y sé guían por la codicia.
Ves tu derecho hecho cenizas y tus pretensiones reducidas a nada.
¿Será que el vicio dé la corrupción hace más estragos que las injusticias?
El excesivo derecho aumenta las injusticias.
n tiatriir*** v
La injusticia se origina simplemente, en la fuerza, la confabulación y en la excesiva
severidad del juez.
Desamparos
No hay cosa tan respetable como el derecho ajeno, que la injusticia se encarga de
desconocerlo.
Pitágoras, dijo: Si sufres injusticias, consuélate, porque la verdadera desgracia es
cometerlas.
Al Juez honrado le es difícil callar lo que debe decir en sentencia.
El derecho y el beneficio del Juez se mezclan en la injusticia de la sentencia.
La maldad de la gente es tanta y la usan de tantas maneras, que la justicia y el
derecho no les estorba. Mas, gente buena no puede vivir en paz sin alcanzar el
derecho.

629
La injusticia, cuando procede de un Juez honrado, nos causa un sufrimiento más
severo que la de un Juez corrupto.
El mundo judicial abandonado a sí mismo, se hace cada día más cruel y rudo que
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
ninguna autarquía opresora.
Cuando uno es secuela de injusticias conoce lo que vale la justicia.
La fuerza del Poder absoluto siempre será el tirano de la justicia, que hace justas sus
pretensiones injustas.
A la injusticia se le puede algo negar cuanto se demanda, porque el abusivo será
^siempre arbitrario aunque la justicia lo deniegue.
Amado Ñervo, dijo: Sé fuerte para tener el derecho de ser pacífico. Y Stefan Zweig, la
medida más segura de toda fuerza es la resistencia que vence.
Entre jueces que hacen el mal y el foro que lo soporta, hay cierta adhesión tímida y
ultrajante.
En regímenes absolutistas no se fallan los litigios por el derecho ni pruebas, sino por la
perversa dependencia al t gran señor del poder.
Maquiavelo, nos apercibe: El hombre olvida más fácilmente la muerte de su padre que
la pérdida de su patrimonio.
Injusticia corrupta, ^cínica y desvergonzada, traficada por el más poderoso mancebo a
sueldo de la mafia, enemigo del honor profesional, perverso y fingido.
cuando asegura la libertad de todos no obstante, exige demasiado para su plena
vigencia.
Han transcurrido 175 años para formar la Excma. Corte Suprema y escasamente unas
horas, para reducirla a cenizas considerándola inútil y por ende, peligrosa.
Lord Byron dijo: Apenas si basta un siglo para formar un Estado, y una hora puede
reducirlo a polvo.
Entonces, no basta con aprender a defraudar, también hace falta aprender a ser
tramposo.
El ladrón, cuando no tiene ocasión de robar, cree ser un hombre honrado. Talmud.
Que tiene dificultades en su reconocimiento propio y soberano, por supuesto que sí,
como la intervención que ejerce un llamado Consejo de la Judicatura, convertido en un
órgano más de Carondelet.
Las dificultades señaladas son en general, consecuencia de la tradicional desconfianza
política y de la cada vez más disminución de su Poder, que en el texto constitucional se
la haya disminuido.
Nadie en la historia, ‘ ha podido mantener largo tiempo el poder fundado en la justicia
arrebatada.
El reconocimiento constitucional de la Función Judicial se explica por la relación
profunda entre la historia y la doctrina jurídica.
Es indudablemente, la consecuencia de la división de Poderes del Estado y de la
proscripción del absolutismo.

El Estado cumple con sus fines


Vanidad
¿Responde a la realización del Derecho,-en el empleo de la norma y a la agudeza del
régimen de garantías? Injusticias
¿Establece el mandato de salvaguardia al constituirse en un procedimiento legítimo
para aplicar imparcialmente, el precepto jurídico?
¿Protege el Derecho con el debido proceso, con sus decisiones solemnes y recursos
que dan real significación del Derecho Constitucional?
¿Pone en claro el Derecho cuando su aplicación suscita dudas para que no sea violado
y si lo hubiese sido, sea recuperado?
¿Consagra una necesidad estructural de Estado, la organización constitucional de
Cortes de Justicia
y Juzgados,/ que implica que sea un verdadero Poder del mandato popular?
Alianza País de Rafael Correa, considera que el Ejecutivo es el Estado mismo y que
requiere en función de su autoridad de cierto absolutismo, que resulta incompatible con
la administración de justicia que en actos como el indulto la acción de la justicia
sometida a la jurisdicción \ administrativa de Carondelet o la autorización previa para
procesar a legisladores.
Política irrenunciable de la Función Judicial ha de sgr^ mantenerse alejada de toda
injerencia foránea y conservar la necesaria independencia de jueces y tribunales.
La independencia, el conocimiento y la probidad, son las condiciones
honorables de la justicia que honran la seguridad jurídica en la Nación.
Sagrado deber fue siempre de la Excma. Corte Suprema y hoy debe serlo de la efímera
Corte Nacional, declarar que cualquiera tentativa de otras Funciones públicas y
particularmente, del llamado Consejo de la Judicatura, que pretendan llevar a cabo su
intrusión oficiosa sobre la actividad judicial, sea considerada grave atentado contra la
seguridad del Estado.
La corrupción en la justicia forma parte del mangoneo descarado sobre ella y hace
juego con la folletinesca politiquería del siglo XXI.
La Función Judicial que hasta ayer seguía su noble tarea y que desde hoy está coja y
desfigurada, tan triste y destemplada que vuelve el Foro las espaldas, a esta creación
repugnante.
El Consejo de la Judicatura ha construido un palacio entre Veintimilla y Juan León Mera
de Quito, y ya vendrá el perverso demonio a vengar su fragilidad.
Soportada la innovación informática, se requiere de una reforma estructural de fondo,
comenzando por exigir jueces con altísimo sentimiento moral y vocacional luego,
reducir a lo estrictamente necesario los procedimientos y finalmente respetar la
decisión judicial, suprimiendo recursos de recursos.
La memorable Función Judicial atacada siempre con insolencia ciega pretendiendo
humillarla no obstante, se le atribuye el don de la justicia.
¿Responde acaso a la misma ley
fundamental que el Legislativo y Ejecutivo, con propio espacio independiente y
supremo, por tener sostén en las exigencias de Estado?
Su especialización funcional, distinta de la Legislativa y Ejecutiva, descubre que es de
soberanía única y que su accionar es señal de vitalidad moral y política del resto de
Funciones que solo dependen de la Ley.
La inamovilidad de jueces y funcionarios judiciales, es el camino que asegura la
independencia y autonomía del orden judicial.
Las declaraciones constitucionales sobre el debido proceso son ilusorias y meramente
ideales.
Hay que reconocer que la Función Judicial es de técnica que descansa y se halla
sometida a la ley constitutiva del Estado, por lo que es menester revisar la dependencia
a un Consejo de Judicatura, que estorba su autonomía.
La Función Judicial no es solamente la administradora de justicia en nombre del
pueblo, sino la exclusiva y soberana aplicadora de la ley.
En Ecuador, como en Francia, los magistrados fueron nombrados por \ decreto del 637
Presidente a propuesta del Consejo de Estado.
La soberanía entonces fue un atributo de la comunidad al constituirse en Poder-que
residía sobre todo, en la designación de magistrados de la Corte Suprema, que se
juzgaban esenciales en la justicia, y
Máximas, Reparos
Interpretada hoyy la
Alternaciones de una Justicia
independencia Perdida de la Función Judicial
insuperable
como supuesto fundamental del Orden Social, no pueden tener otro origen los
magistrados del máximo Tribunal que de la misma comunidad representada por los
legisladores.
Intrevenir la justicia no es una maldad sino alborotarla, estropeando el Derecho.
Sin razón
Hace ya más de cinco años que en Ecuador se viene hablando de una especie de
justicia existencialista, pero a sus defensores se les pide una explicación y dicen solo
vulgaridades ineptas y confusas. ¿Instrumentalismo político, apero del populismo,
burdo ensayo?
La perversidad populista más refinada rechaza todo interés por una existencia de la
justicia y prescinde del respeto al Derecho. Quien mata a la justicia, mata a la Nación y
su gente.
La justicia existe, lo único que se forja es la arbitrariedad.
Cervantes, nos sermonea: ¡Oh, qué hermosa apariencia tiene la falsedad! No digamos
mentiras, mentir no conviene más que a los comerciantes.
Las calamidades morales, que afectan a la justicia, son fiel reflejo de cuanto viene
ocurriendo en la sociedad actual.
Estamos ante un fenómeno moral que obliga a participar a la justicia pero /
íx>\é hace retroceder, de donde resulta paradójico el rechazo de su propia creadora.
No hay injusticia más vergonzante que la de un juez honrado.
Se debe saber que precisamente, las apelaciones han sido dadas para evitar que nadie
resulte perjudicado por las injusticias del Juez inferior.
De la justicia de los social cristianos de Febres Cordero, hemos pasado a la justicia de
la revolución ciudadana de Correa. ¡Fundemos la justicia de la libertad y de los
merecimientos!
quien habla mal de la justicia es el Abogado que no conoce otro servicio público, donde
el derecho tenga tan mal sabor.
En el reino de las injusticias no hay buena esperanza que esperar, pues todo'és infinita
inclemencia.
Existe analogía entre la justicia que vaga en el viento y el misterioso derecho que
emerge en las sombras de lo imposible.
Por grande que Rafael Correa sea, es como nosotros y por tanto, puede equivocarse,
porque el errar no es nunca más útil que la verdad pero con frecuencia, si lo es la
incertidumbre, subraya Kant.
¿Por qué el juicio tan apegado a derecho, puesto a prueba en la sentencia, resulta tan
agresivo y descortés con la justicia?
Justicia traicionera naces en el derecho y beneficias al transgresor.
La bancarrota de la justicia es algo imponente y sombrío, es el abismo sin fondo donde
se sumerge y desaparece la llamada igualdad ante la ley. H
La contemplación del conflicto judicial es incuestionablemente, señal de la grave
enfermedad moral que afecta particularmente, al Foro ecuatoriano.
Las dolencias del Sistema Judicial vienen galopando día a día con la nueva demanda
que ingresa, con la nueva diligencia ordenada y no practicada...es la enfermedad del
silencio que semeja crisis de limpieza.
El sistema obliga al litigante a su natural defensa legal. Yo llamo enfermedades que en
realidad no son sino de terapia intensiva por falta de curación. Todas son una misma y
su causa una misma en todas ellas aunque se manifiestan por medio de diferentes
síntomas, de acuerdo con la condición del caso y la prestancia del litigante.
En los frecuentes infortunios judiciales se restablecen afectos y comparten tragedias,
que significan saber soportar el litigio.
638 el abogado honesto no hay tristeza mayor que confiar en el peligro que representa
Para
una sentencia injusta.
La Rochefoucauld, decía que nunca se es tan desgraciado o tan feliz como uno se
imagina; y La Fontaine, la mayor desgracia es merecer la desgracia, que ser
desgraciado equivale a ser inocente.
No son los malos abogados los que afligen la justicia, sino la desidia del Juez.
Horacio, decía que para el desidioso todos los días son festivos. Injusticias
Ecuador, que ha formado ciudadanos que huyen al exterior por no acceder a las
injusticias, es más notable por los que parten, que por los que permaneces avenidos.
No deja de ocurrir que la contienda acabe por cansancio, que es lo mismo que
prescripción de la acción, y no porque la verdad conste de una sentencia.
Fundar el derecho y persuadir al Tribunal qué difícil, laborioso y dilatado, pero
fascinarlo qué sencillo y cómodo es.
Antes, los jueces filosofaban postulando la existencia del derecho. Hoy comienzan con
sus interpretaciones negativas de acomodo al compromiso adquirido, que les conduce
al favoritismo y no a la justicia.
La justicia no ha encontrado aún otro modo de elegir a jueces justos, a no ser el de
maldecirlos por ineptos.
Uno de los males de la fortuna es melgar la cizaña entre los adversarlos.
Hernán Núñez nos enseña: La discordia desbarata en un punto las buenas órdenes,
amenaza las leyes, desprecia a magistrados, fuerza los juicios y llena todo de furor, de
rabia y crueldad.
Artificio es el que emplea el Juez para desfigurar el derecho con el fin que no sea
conocido.
De salvaje, con el mismo traje, dice un refrán castellano.
El apartamiento de la ley, es la consagración del desligamiento de la justicia.
La sentencia es, en el mejor de los casos, un fracaso porque nos interesa más la
justicia que acatar sus defectos.
El cosmos de la justicia es un desfiladero de pruebas y más pruebas, de quien solo
comparece para sufrir y templar su voluntad ante la inseguridad de una sentencia. El
dolor es la substancia de la vida, dijo Unamuno.
¡Luchemos todos contra la corrupción judicial! Porque jamás debe imponerse y
enseñorearse en la justicia de Ecuador, ni en cualquier otro lugar del mundo.
Si en Ecuador hubo alguna vez un despotismo dominante y sin reservas, es en la
administración de justicia en donde sus jueces son cada vez menos preparados en el
derecho y más comprometidos en las sentencias.
Muchas veces hacen los jueces lo que la justicia no espera y lo que el litigante aguarda
no suceda.
El dinero socialista del siglo XXI, es la aristocracia más renacuaja que se haya
conocido pero, cuantiosamente más esmirriada de cuantas se hayan alternado en
Ecuador.
Desde que se ha establecido que el dinero es el fundamento de la sentencia y desde
que el litigante paga honorarios por la negligencia del Abogado, no hay reputación ni
integridad que no pueda atarse a tarifa.
La corrupción ha enaltecido el dinero para instalarlo en el abuso judicial más apurado,
feudalista y abusivo de todos.
Bien sabemos que el derecho no se

639
Injusticias
mezcla con las injusticias de modo alguno, y cuando aquello ocurre es menester acudir
al Juez para pedirle que restablezca la armonía y termine con la confusión.
Decía Ud. mi apreciado amigo, que la justicia se ha inaugurado. Indudable que se ha
promovido pero uniéndose a los desvíos que se pierden en el encubrimiento.
Necesario para todos es que perdure la jdsticia, y no el desprendimiento del derecho.
La justicia se la logra mediante:
El respeto del derecho ajeno;
Soportar con tranquilidad las diarias decepciones; y,
Observar reposada modestia.
No son las grandes desventuras las que debemos temer del Juez, sino sus limitadas
razones del honor maltrecho.
Inexcusables
, Concepción Arenal, decía que la desigualdad de antes estaba escrita en un
pergamino, y se llamaba ejecutoria, y la de ahora está escrita en un papel, y se llama
billete de banco.
\¡ Y Rousseau^, asegura^ que la desigualdad se extiende'sin trabajo entre las almas
ambiciosas y viles.
Toda sentencia acarrea una convexidad. ^
La corrupción, las prácticas de la inquisición y la incompatibilidad de jueces y
abogados, son las insolentes competidoras de la justiciando ¡ifcv.
Son muchas las demandas que
tienden a deleitar al accionante y no a reclamar un derecho, pero que llenan los
archivos de las judicaturas estorbando a las que proceden.
El arte del engaño mantiene a los clientes en estado de alerta.
En el padecido mundo de las injusticias donde impera la malicia y la temeridad, donde
se afirma y después vuelve a negarse el derecho sin saber cómo ni por qué no se
aprecia sino, a favorecidos y a desfavorecidos.
Más que verlas podrás vivirlas.
Este libro no será suficiente.
Un refrán castellano nos muestra una realidad, ¡Dios nos guarde de traidores, delitos y
sus semejas, y sobre todo de putas viejas!
Es que la corrupción judicial es invariablemente persistente,
e indomable, ¿por qué se ha convertido en laboratorio del delito?
Que haya una injusticia más ¿que interesa a los demás?
Entre todas las desdichas de un litigio judicial, la más infamante es una sentencia con
apariencia favorable.
¿Qué es la injusticia? ¿Será la actitud del Juez que ha perdido su dignidad y resulta
noble y justo el sordo fragor de su increíble contraposición?
Peculiar responsabilidad de un ex Presidente de la Excma. Corte Suprema, la de
escribir para aquellos que propician y practican injusticias. Amarga ironía de la
profesión de abogado, mientras es la certeza la única manera que queda de rescatar el
derecho.
641
Un corazón angustiado por el afán de ayudar a uno de los litigantes corre el riesgo de
no admitir una prueba como cierta, ni una mala como dudosa.
El corazón endurecido del Juez es peor que una mano taimada, la justicia la aplica de
manera bendita
o perversa.
Con frecuencia resulta que la razón del poder, vale más que el derecho del
menesteroso.
El funesto represamiento de procesos se debe a la incuria de quienes se consideran
burócratas y no jueces.
Ninguna cosa es más fácil para el abogado gris que censurar al Juez, condenando lo
que no entiende.
Muchas veces acaece, que el emplazado por hacer engaño, vende
o enajena maliciosamente el bien sobre el que lo emplazan y contesta ■ } la
demanda diciendo que no es llamado a responder, porque no es tenedor de aquellas

I
Injusticias
cosas que le demandan.
t Mis, en orden a deshacer este engaño, se dispone que toda persona después que
fuese emplazada si j enaj§h$Se la cosa, no vale y que sea devuelta a su anterior dueño
quien no podrá ejercer derecho alguno sobre ella.
Además, el que compró, si sabía dgl engaño perdía el valor que dió, por su mala fe.
Dada la fragilidad de la justicia las enmiendas son siempre, más indolentes que el
menoscabo.
Séneca aseveraba: No es grande
mal, si es el último. ¿Será acaso justificable esta máxima para el Juez que conoce el
derecho?
Juvenal, notable poeta latino dijo: Ningún malo es feliz y menos que nadie, el que
corrompe a otros.
El mayor de los males que la sociedad sobrelleva, viene del deterioro en la
administración de justicia.
Las injusticias se enmiendan con un juicio justo, o no tienen corrección.
Debe haber algo público contra la violencia judicial.
Se respeta el turno, pero en cambio se acaba con el día.
En Argentina aún funciona, aunque con dificultad, un estado de Derecho y existe una
justicia que falla con independencia. Aquello en Ecuador ya no existe: Jueces, fiscales,
organismos de control son completamente obsecuentes al poder.
En Ecuador hay perseguidos políticos.
Se criminaliza la protesta social. César Montúfar. El Comercio.
Solo en Ecuador existe la sanción en nombre del error inexcusable y ,, el certificado de
aptitud profesional r en la carrera de abogado, como requisito para la obtención del
título profesional.
La acción judicial que fue una esperanza, pronto se convirtió en engaño como si fuera
natural ajustarla al Poder.
Juristas pensadores
La justicia hace rato se puso al servicio del poder político. Esto no significa
que no existan jueces que cumplan con su trabajo de forma profesional y busquen
hacer justicia. Farith Simón. El Comercio.
Es un problema de carácter estructural que supera a los individuos. Farith Simón.
Las sanciones desproporcionadas ponen en evidencia a jueces y fiscales dispuestos a
ejercer de verdugos. Este es el verdadero rostro oculto de la justicia.
Injusticia es todo lo que se hace contra Derecho.
El Derecho extremado puede extremar la injusticia.
El Derecho Romano señalaba que las injusticias tienen triple fuente: la mera imposición
del juez, la maquinación maliciosa con apariencia legal y el rigor innecesario de la ley.
Es injusta la sociedad por la que una persona espera solamente pérdidas.
Un juez penal ignorante, manejando indicios, es un peligro social expresa, el ilustre
jurista colombiano Gómez Duque.
¿Cómo callar ante la consolidación de un proyecto político autoritario, destructor de las
instituciones y concentrador del Poder, descalificado y excluyente, alienante y
maniqueo, abusivo y atropellader? Antonio Rodríguez Vicéns.
¿Cómo callar ante una administración de justicia manipulada, temerosa y sometida?
¿Cómo callar ante un control constitucional espurio, servil y dirigido? Antonio Rodríguez
Vicéns. El Comercio.
NOTA PRELIMINAR
La historia nos refiere que las leyes españolas siempre consideraron a la corrupción
como el crimen del que se hacían culpables quienes estaban revestidos de alguna
autoridad pública y sucumbían a la seducción; como igualmente, el crimen que
cometían quienes trataban de corromperlos. Entonces, el actual delito de concusión, se
conocía como la infracción que cometía el juez que no hacia justicia sino por precio. Se
distinguía la baratería que fue al admitir dádivas o regalos, no para cometer una
injusticia sino para no hacer lo que debía hacer, jdel cohecho que fue admitir regalos o
dádivas para hacer lo que no podía hacerse con ellos o sin ellos, por dar un fallo
injusto, por atribuir a uno la cosa que pertenecía a otro.

I
Injusticias
En definitiva, la baratería de antes y la concusión de hoy, fue y es la venta de la justicia
y por el soborno la injusticia. Por la baratería compraba el litigante la declaración de un
derecho que no le pertenecía y por el cohecho, compraba su
adjudicación, la absolución del culpable a la condena de un inocente.
cr
Los transgresores incurrían en penas de privación de oficio, inhabilitación perpetua de
obtener otro cargo y la devolución del cuádruplo de lo recibido. El juez que por interés
obraba contra derecho fue castigado con más severidad que el que también por interés
obraba con arreglo a él y asimismo, el litigante que daba algo al juez para que juzgue
según derecho, no incurría en las penas de quien le sobornaba para que juzgue mal a
favor suyo.
En consecuencia, el juez que en lo civil sentenció injustamente por cohecho
o soborno, además de la pena en que incurría, debía pagar a la parte
perjudicada lo que le hizo perder, con los daños y perjuicios y costas procesales y,
también quedaba infamado perpetuamente como violador del juramento de la posesión
del cargo. En lo criminal, la injusta sentencia dada por precio, cuyo daño era
irreparable, fue condenado a destierro perpetuo y confiscación de todos sus bienes. El
acusador que hacia al juez alguna dádiva o promesa para que condene injustamente,
perdía su acción e incurría en las mismas penas que se imponían al juez cohechado,
debiendo decusado ser absuelto. El acusado que hiciere para que se le absuelva, tenía
la misma pena que si confesare o le fuere probado el delito.
Tanto las Siete Partidas como la Novísima Recopilación, consideraron la corrupción
activa de parte de los corruptores y la pasiva de parte de los
corrompidos, tomacto en cuenta la mala costumbre o el abuso contra ley o el Derecho.
Que para que el uso produzca la costumbre, fue necesario:
Que sea útil y no perjudicial al bien común ni contrario al derecho natural;
Que se establezca públicamente y no por actos clandestinos;
Que sea consentido y no contradicho;
Que se haya observado constantemente por la ciudadanía o la mayor parte;
Que se hayan dado con arreglo a la ley dos sentencias uniformes o se hayan
desechado en juicio las demandas presentadas contra su observancia.
La costumbre que resultaba de este uso era legítima y tenía fuerza de ley y por
consiguiente, producía sus efectos, no solo cuando no había ley en contrario, sino
también para derogar la anterior que le fuere opuesta y para interpretar la dudosa que
debía observarse según el sentido que le dio la costumbre.
La corrupción, antes y hoy en día, es la prevaricación o culpa del juez, que causa algún
perjuicio o/el daño que puede provenir de un hecho u omisión del juez, sea por malicia
o dolo, por imprudencia, impericia o negligencia. Si se trataba de una baratería, podía
ser fraudulenta cuando provenía de malicia o dolo y simple como efecto de descuido,
impericia o imprudencia.
Al juez corrupto se lo consideraba fraudulento o engañoso, por cobrar el barato de los
juicios. De esta forma era realmente como un baratillero, un prendero o ropavejero que
tenia por oficio, comprar y vender ropas y vestidos viejos del proceso a su cargo.
La corrupción judicial es un delito contra la honestidad cuya gravedad se ha
estimado en todos los tiempos y en toda Nación.
■ V\
Modernamente, se hafy agregado a las penas determinadas por la ley, medidas de
carácter administrativo por las que se pretende aminorar ya que su extinción como los
demás delitos, resulta muy difícil, dado que la tolerancia política la ha hecho desarrollar
alarmantemente. La gravedad de este delito es mayor cuando se utiliza la autoridad
sobre los jueces.
Hay corruptela en la mala costumbre o abuso en el cumplimiento del debido proceso
por parte del corruptible, por acción u omisión.
Corrupto es el que corrompe o tiene aptitud para corromper y corrompido el servidor
judicial dañado, perverso, torcido; corruptores son generalmente, el abogado, el
litigante o la autoridad que se deja corromper.
Desintegración

I
Injusticias
Quién litiga en derecho nunca sin razón, deberá imponerse la corrupción a la pluma.
Lo que ocurre en los juzgados por la corrupción es imposible de prever.
¿La corrupción judicial es un negocio redondo?
■r•■ \
La corrupción judicial es tan poderosa
como el narcolavado, en que se hace cualquier cosa para conseguir
adinero.
La forma de descubrir la corrupción que cada vez tiene un círculo más amplio y que
constantemente cambia, sería relativamente fácil, reduciendo los procedimientos y
volviendo a la carrera judicial.
Recuerda Juez corrupto, que mientras permanezcas infiel a tus principios, los
abogados y la gente se burlarán de ti y no te alabarán. Pero si te dejas llevar por la
moral y el derecho, harás dos veces justicia y todos te elogiaran.
El atajo que nos lleva a la corrupción judicial no es difícil de seguir.
JUAN PABliO MARAT, político francés nacido en 1743 y fallecido a la edad de 50 años.
Se doctoró en Medicina y fue un profesional de vasta cultura. Abrazó con mucho fervor
las ideas de la Revolución. Fundó y dirigió el periódico L’Ami du Peuple en que aparece
su violento lenguaje que instigó a las matanzas de septiembre y a las más crueles
medidas represivas, pero consiguió el derrocamiento de los girondinos. Fue asesinado
por su amante Carlota Corday, en la tina de baño, en donde solía hacer sus escritos.

Existe dependencia en todas partes donde hay jueces que no trabajan, no porque
existan otros que si cumplen, sino porque no haciendo nada, impide que el litigante
deje de"ser libre del yugo judicial que le atormenta.
í4 ¿fe
¡Oh jtíez prevaricador! Caminas de juicio en juicio la justicia predicando. La justicia para
ti que tan soló vive en la sentencia que has proferido como si el engaño fuera tu
religión, ¡qué más,aciaga y triste es la injusticia!
¿Para qué te llamamos Juez si no puedes dar un paso sin sentir en tu mente la atadura
del pugnante intruso que te encierra y domina?
El cambio en la administración de justicia requiere de una movilización de la sociedad
entera, del poder público, de jueces y abogados y de los propios litigantes. No es
cuestión meramente informática.
El desarrollo de la Nación depende de un alto sentimiento moral en la Administración
de justicia.
. -M''
La corrupción incita a la violencia, porque el dinero vence y el Derecho no convence.
Quién practica la corrupción, por su descomposición perecerá.
La corrupción judicial es una asnada atroz ingeniada por abogados perdidos y
bandidos, bandoleros y rufianes, malandrines y vagos, granujas y bribones. Vale
concluir, por quienes no son realmente Abogados.
La corrupción decae el ánimo de litigar honorablemente, aún cuando el refrán aconseja,
no te abatas
por pobrezas, ni te ensalces por riquezas, porque el único que ha perdido toda
esperanza es Satanás.
Cuando la obsesión se junta con la maldad, hasta la justicia puede silenciarse.
La política. mal entendida es una especie de corrupción por el escándalo que provoca
su injerencia en la justicia, cuya única excusa es que se practica entre jueces venales.
Bueno sería conformar una hermandad ^en que se alisten Abogados y Jueces a
combatir rigurosa y persistentemente, la corrupción judicial.
Fermentación
Solo el calificativo de tardón es deshonroso para el Juez que siendo erudito, vale
I
Injusticias
menos que un honesto.
Igual que en la mafia, la violencia de la corrupción sobrevivirá a la misma corrupción en
la justicia, porque la codicia y el sentimiento moral más que contrarios son humanos.
Í DANTE ALIGHIERI, poeta italiano, considerado uno de los más brillantes de todos los
tiempos, nació en Florencia en 1265 y falleció a los 56 años. La historia reconoce que
el mérito de su juventud fue su pasión por Beatriz Portinari quien años después,
contrajo matrimonio con Simone Bardi. Dedicado a la Filosofía. Entre las varias obras
escritas por el poeta, La Divina Comedia es quizás su obra cumbre que fuera admirada
por Miguel Ángel y sigue vigente en la variedad de interpretaciones particularmente,
contra la corrupción judicial.
¿Por qué se recae tan fácilmente en la corrupción? ¿Por qué la mayor parte de los
jueces, en vez de adelantar de prestigio en prestigio y adquirir nuevos méritos, pierde
las pocas virtudes que posee? Creo que esta desgracia proviene porque está el Juez
tan comprometido y ser tan débil e inconstante, que confía en sí mismo, se apoya en
sus propias^
fuerzas y no se considera capaz de guardar sus virtudes y méritos.
Todos los días la corrupción se empeña en conquistarnos, dependerá de nuestra
libertad para acogerla o no.
Encontramos a jueces que tienen puesta su mirada en los bienes materiales, como si
fuera lo único verdadero y en el placer que lo toman como su nuevo estilo de vida.
Integridad
Llegará el día en que Abogados valientes de uno y otro sexo, combatirán la corrupción
en estos tiempos como nunca, peligrosos.
La justicia hay que honrarla, estimarla y venerarla más que a cualquier otra cosa por
ser ella la obra maestra del Derecho. Meditar en sus virtudes, privilegios y acciones.
Contemplar sus grandezas. Invocarla de corazón. Unirse a ella.
Estando tan comprometida la profesión si nos apoyamos en nuestros propios
esfuerzos, habilidad y preparación para llegar a la justicia, ciertamente nuestras
acciones pesarán bastante delante del derecho y seremos escuchados.
Dada la pequeñez y fragilidad del Juez corrupto, es muy difícil conservar la seguridad
jurídica porque se trata de un judicial con alma débil e inconstante, que a poco se turba
y abate.
Juez justo, huye de la corrupción en cualquiera de sus formas, para que la fe de la
gente permanezca en ti.
Invoca la virtud en tus decisiones para que te ilumine, fortalezca y guíe. Sigue fielmente
sus sabias disposiciones y evita contristar el Derecho.
Extravíos
Los corruptores son ladrones de la justicia, quieren sorprendernos de improviso para
robarnos y desvalijarnos del derecho. Espían día a día el momento favorable para sus
fechorías.-Rodean incesantemente al Juez para devorarlo y arrebatarnos en un
momento, todos los méritos del proceso de muchos años. Su malicia, su pericia, su
astucia nos hacen temer infinitamente esta desgracia, ya que litigantes más llenos de
derecho, más ricos en la razón, más experimentados y elevados moralmente, han sido
sorprendidos, robados y saqueados. ¡Ah! Cuántos debidos procesos entrampados
cayeron miserablemente y se perdieron en poco tiempo.
RUBÉN DARÍO, poeta nicaragüense, nacido en 1867 y fallecido a la edad de 49 años,
representa el modernismo literario de la lengua castellana. Se crió al amparo de una tía
suya por las desavenencias con sus padres. Recibió la influencia de los poetas
españoles Bécquer, Zorrilla y Campoamor. Su obra primaria Abrojos fue una réplica a

Es difícil preservarse a causa de la increíble corrupción de la justicia. La corrupción


mancha a muchos y se hace prácticamente imposible combatirla, hasta el punto que es
I
Injusticias
una especie de milagro que un litigante se conserve en medio del torrente impetuoso,
sin ser arrastrado por los corsarios judiciales.
Por la corrupción el Juez depende de otro enteramente, tal vez por toda la vida, y debe
servir al amo en espera de la recompensa.
El juez corrupto no tiene libertad de abandonar a su propietario cuando quiera, pues lo
está para siempre.
Nada hay entre los jueces que les haga pertenecer más a otro, que la corrupción.
Dignos
El Juez honesto se honra de llamarse servidor de la justicia.
Estos grandes jueces llenos de conocimientos y celo, fueron escogidos para oponerse
a la corrupción, que con una mano la combaten y con la otra edifican la justicia, para
que se sepa que el Derecho existe en Ecuador.
El rescate de la justicia comienza por medio de los buenos jueces y debe alcanzar su
plenitud para que los abogados, poco instruidos, no se alejaren de la verdad,
aficionándose demasiado e imperfectamente del dinero y apegándose solo
parcialmente al Derecho.
Respetemos a los buenos jueces porque ellos son el camino de la justicia y deben
resplandecer más que nunca en misericordia de los pobres litigantes y también a los
extraviados que endurecidos demandan por demandar. Y

I
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
finalmente, para animar y sostener a los valientes jueces y fieles servidores de la
justicia, que luchan por los intereses del Derecho.
El juez honesto debe ser temido por la corrupción y sus secuaces sobre todo, en
estos últimos tiempos cuando saben que les queda poco espacio. Redoblará cada
día sus esfuerzos sin importarle persecuciones y tramposas asechanzas.
Eljuezjusto no dejaque por negligencia suya, se pierda el derecho que se le ha
confiado y antes bien, queda obligado a guardarlo.
Loables los sanos de corrupción. Su esperanza es grande por su constancia, no
os desalentéis por ello.
El Juez honesto tiene tanta sagacidad para descubrir la malicia del corrupto y tanta
fuerza para vencerlo, que lo temen no solo más que a todos, sino en cierto modo,
más que a sí mismos.
La persecución de la corrupción, aumentará de día en día hasta que llegue la
condena moral, sobre todo.
Saetas de Leopoldo Cano. La crítica lo califica como el poeta naturalmente
musical y sonoro, que no es solamente un lirico de excepción, sino también un
poeta épico de singular envergadura. Entre sus obras figuran Prosas Profanas,
Cantos de Vida y Esperanza, El Canto Errante, España Contemporánea. Llevó
una vida miserable en ocasiones y en falta del verdadero amor. En realidad se
llamó Félix Rubén García Sarmiento.
El corrupto abogado, tan orgulloso, sufre más al verse vencido y castigado por una
sencilla respuesta que lo humilla más que el poder del dinero. Lo que perdió por el
dinero ganó el Juez con su probidad.
Juez probo descubrirás siempre la malicia del corrupto abogado, manifestarás sus
traumas y desvanecerás sus planes y defenderás hasta el fin la justicia, de
aquellas zarpas mal olientes.
Esmerados
Entonces se sabrá que el buen Juez es el medio más seguro, corto y oportuno
para llegar a la justicia y nos consagraremos a ella sin reserva alguna, sin
apegarnos a nada, ni asustarnos, dormiremos sin preocupaciones,
descansaremos imperturbables y acrecentará nuestra devoción por la justicia.
¿Por qué no hablar de la falta de independencia de la Función Judicial y del
sometimiento obediente de los jueces? Antonio Rodríguez Vicéns, en referencia a
declaraciones del Presidente del Consejo de Judicatura. El Comercio
¿Por qué no decir que es inconstitucional la intromisión del Consejo de Judicatura
mediante instructivos para el trámite de los juicios?
Los embates tempestuosos de este mundo corrupto que anegan a tantas personas
e instituciones, no podrán sumergir ni harán perder el tesoro de la virtud, al juez
probo.
Si somos infieles con el Derecho, el juez justo permanece fiel porque no puede
negarse a sí mismo y
Corrupción Judicial
responde con la ley a quienes le divergen.
Advertido queda el juez corrupto que guarda el oro y la plata en cofres, que ya
están envejecidos por la mafia que los saqueó y dejó todo sucios e infectados por
el soborno.
Lo confieso, los corruptos parecen haber sido extraídos de la misma junta
contaminada de los dedicados al cohecho.
No guarden su oro en cofres que ya fueron perturbados por el espíritu maligno de
la corrupción que los afrenta.
No tengas pena por el Juez que hizo de su potestad, una burla y que se va y no
volverá. Esto es lo que ha decidido la vida por el que morirá en j el lugar ajtíonde le
llevó la corrupción y jamás su nombre será recordado con honor, sino como el
pobre Juez que edificó su casa con abusos y la levantó sobre injusticias. Pobre
Juez que se aprovechó de su prójimo y lo hizo litigar sin darle el derecho que
merecía.
PEDRO FRANCISCO LAFONTAINE, ilustre francés fallecido en 1853, a los 90
años. Fue el arquitecto del Emperador y construyó el Arco del Triunfo en Paris.
Escribió varias obras literarias.

¿Acaso hace falta el dinero para que seas Juez? ¿Te hace falta comida o bebida?
Sin embargo, te preocupas de la justicia y todo te sale mal. No juzgas la causa del
desamparado y del pobre que nada te ofrece a cafribio. La justicia que conoces no
actúa en esta forma, manteniendo la opresión y la violencia. Nadie
dirá sollozando por él ¡Ay, señor, Ay Juez, su potestad! Y será enterrado como uno
cualquiera, lo colmarán de tierra y arrojará su nombre al eterno olvido. Esta es la
suerte que corre un Juez corrupto aún en medio del corruptor que permanece
intacto.
Hircismo
Este tal Juez ¿Es acaso un trasto viejo e inservible que ya nadie le cree? ¿Por qué
ha sido expulsado de la credibilidad y echado de ella? Inscriba en la lápida de su
tumba: Juez injusto, un fracaso más de la justicia.
Hay otros jueces que dispersan la justicia y la echan con todo el mal que cometen,
en vez de preocuparse de ella. Pero, también hay jueces que esmeradamente
cuidan de la justicia y no temen la gente que les asuste y se portan como jueces
justos y prudentes, dando la razón que corresponde según la justicia y el Derecho
y así permanece la paz.
Contra los falsos jueces aunque se nos parta el corazón:
La justicia se está llenando de jueces aprendices que corren para hacer el mal y
se empeñan en actuar injustamente;
Poco hace falta para que todos nos pongamos de duelo;
El camino se les hace resbaloso al fallar y caen en el desacierto para desgracia de
la justicia;

655
Máximas,
NoReparos y Alternaciones
se encuentran másdeque
una Justicia Perdida y extravíos a nombre del pueblo soberano
estupideces
y por autoridad de la Constitución y la ley;
Apego al adulterio y a la mentira de lo que ninguno se arrepiente;
Apoyan a los Abogados perversos por compartir;
A partir de los jueces, la corrupción ha cundido por toda la Nación;
A los litigantes hay que aconsejarles siempre, no escuchen a estos falsos jueces
porque los engañarán asegurando que ninguna desgracia les va a suceder;
¿Acaso reflexionan en volverse de su mal camino y de sus actuaciones
perversas?;
CESAR BONESANA BECARIA, marqués, jurisconsulto y economista italiano,
nacido en Milán en 1738 y fallecido a la corta edad de 56 años. Notable cultor del
derecho fundamental de la persona que en el enjuiciamiento penal, combatió la
arbitrariedad en su memorable obra Dei delitti e delle pene que ha sido el punto de
partida en

¿Que la justicia es sólo de cerca, y no también de lejos? ¿Y puede el culpable


ocultarse en su escondite que la justicia no lo vea? Escucho a los jueces que
dictan sentencia en nombre de la justicia, falsamente y sus fallos no han tenido en
cuenta la prueba, ni tenido presente la ley;
¿Y que consideran lo que han inventado? Pretenden hacer olvidar la justicia y no
trasmiten la verdad. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? ¿No es la justicia
como el relámpago que alumbra a la herramienta que rompe la piedra?;
Jueces hay que se roban la justicia unos a otros, que no tienen más que
pronunciar sentencias parcializadas y mentirosas, que desorientan con sus
embustes y extravagancias y que no sirven para nada;
Estos jueces tendrán encima vergüenza eterna y mancha que nunca se borrará.
La corrupción será siempre el lado obscuro de la justicia.
La corrupción arruina la justicia y se propaga como el temeroso cáncer, sobre la
comunidad.
Amigo al recibir, enemigo al cumplir.
Moho
El Juez corrupto cuanto más se enriquece, su prestigio empobrece.
El único bien del Juez corrupto es su renuncia.
Necesidad es del _ Juez corrupto, gastar sin cautela o que el dominio de bienes
esté para otros titulares.
Raro es que el Juez corrupto acabe la vida sin lágrimas ni sentimientos.
La Fontaine, subraya: Pregunto a los que tienen la pasión de acumular ¿qué de
ventaja gozan, que los demás no tengan?
El más rico Juez es el que ahorra y el más pobre ef corrupto, pese a los tesoros
que guarda.
Aumento mi patrimonio en poco tiempo más por seguridad que por perversión,
dado mi eventual desempeño.

656
Corrupción Judicial
¿Por qué ha de ser una perversión el extravío de la justicia y no ha de ser el
escándalo de la noticia?
Hay ciertamente, jueces que juguetean con el Derecho que lo utilizan en cuanto
les pueda servir en agitada sentencia.
¿Cuándo hubo mayor corrupción judicial? Si quienes tienen el mismo vicio se
soportan solidariamente.
Verdaderamente, en vez de extirpar nuestros vicios, lo que hacemos es
cambiarlos por otros, a mi juicio siempre peores, advierte Montaigne.
Si el Consejo de la Judicatura arranca cada año un vicio, pronto tendríamos más y
¿mejor juncia?
7
La moral se hereda, la corrupción se apega,apoca y deshace.
La virtud misma conviértese en vicio, mal aplicada, y en ocasiones el vicio se
dignifica por la acción, asevera Shakespeare.
Mientras haya litigantes habrá corrupción.
El vicio lleva en si su propio castigo y a veces, su propio remedio, comenta Fuller.
Juez de buen juicio, Juez sin defecto moral en sus decisiones.
Tabaco, licor, drogas y mujeres echan al juez a perder.
Juez que ha contraído el hábito de la descomposición, no teme quebrantar la ley.
Jueces con demasiados vicios tienen quizás, demasiados propietarios.
Habrán injusticias mientras hayan extravíos.
Dependencia
Se ha perseguido la corrupción judicial pero nunca siquiera ha disminuido.
La insignificancia de los jueces ha causado más males que vicios, como la
ociosidad.
En el Juez se ve más el vicio que la virtud, porque el vicio es jactancioso y la virtud
pudorosa.
Los placeres mundanos corrompen la
inteligencia y perturban la razón del Juez alfeñique.
El permanente problema del Juez es la estrechez de su libertad.
Lo nuevo en Derecho es lo perceptible del jurista en materia tan vieja, como la
humanidad.
Abogadog^yjueces a combatir rigurosa y ,-"persistente la corrupción judicial.
¿Por qué se recae tan fácilmente en la corrupción? Porque parte de los jueces en
vez de adelantar de prestigio en prestigio y adquirir nuevos méritos, pierde las
pocas virtudes que posee. Estimo que esta desgracia proviene por ser el juez tan
débil e inconstante que no confía en sí mismo, ni se apoya en sus propias fuerzas,
ni se considera capaz de guardar sus virtudes y méritos. Son sus dos caras.
i,
Wi totvún.Oí j?.Vl (U_ -

, .,„ esC^iTUV.Cic/^ í-4»


NOTA PRELIMINAR
Escribanía se denominaba en la Colonia y durante bien avanzada la República al
oficio que ejercían los escribanos públicos, o al aposento donde el escribano tenía
su despacho o donde estaban los protocolos y demás documentos pertenecientes

657
Máximas,aReparos y Alternaciones
su oficio. El antecesorde unadel
Justicia Perdida de juzgado o tribunal de justicia fue el
Secretario
escribano, destinado a redactar y autorizar con su firma los autos y diligencias de
los procedimientos judiciales, como asimismo, las escrituras de los actos y
contratos que se celebran éntre las partes. V Estas atribuciones y deberes se
encontraban establecidos en la ley Uno, Titulo 19 de la Partida Tres.
Con sobrada y oportuna razón se ha dicho que el oficio de escribano fue siempre
por su naturaleza, tan delicado como honorífico y respetable, puesto que en él
estuvo y está depositada la fe pública y que es sabedora de escribir. Se los /
conocía como oficiales de pluma.
Los griegos solamente admitían a personas distinguidas por su lealtad, su rectitud
y su ciencia. Los romanos como cargas públicas que debían desempeñar
gratuitamente por tumo, los ciudadanos. Las leyes españolas para las Colonias,
como el Fuero Real, las Siete Partidas, la Novísima Recopilación disponían que se
confiera a personas libres y de buena reputación. Quien nombraba escribanos era
el Rey, precediendo de su examen y aprobación por el Consejo Real, según
disposición y regulación del Fuero Real, más tarde, correspondió a la Audiencia
examinar a los que pretendían ser escribanos. Sin embargo, a poco tiempo la
Corona procedió a enajenar las escribanías convirtiéndolas en propiedad
particular, ya por títulos graciosos, ya por causas onerosas, resultaba claro que el
propietario podía servirlas por si o nombrar su reemplazo.
Para obtener el título de escribano se requería según las leyes de la Partida Dos y
la Nóvísima Recopilación:
quien pretendía recibirse de escribano, debía presentar:
Su fe de bautismo legalizada;
La constancia de su práctica;
Información del pueblo de su domicilio sobre su legitimidad, limpieza, edad y
asistencia en el oficio de escribano; e,
Información de su honradez, buena fama y arregladas costumbres, hecha ante el
Corregidor^o,Alcalde Mayor o el Juez.
Definida fue la utilidad de esta institución de los Escribanos que se la comparaba
con la importancia y necesidad de que se fije y conserve todo cuanto pasaba en
los juicios y se estipulaba en las convenciones. Así fue cómo en los pueblos de
Hispanoamérica se crearon escribanías a pesar que su intervención no daba
carácter alguno de autenticidad legal a los contratos, los cuales recibían toda su
fuerza del sello de las partes y de los testigos. Los instrumentos que extendían no
se consideraron sino/como escritos privados que para que sean auténticos, tenían
que presentarse al magistrado encargado de poner el sello público.
Antiguamente, en España1 se celebraban los contratos ante un s^perdote con

1 Ser hombre libre y no esclavo;


• Ser lego y no eclesiástico;
• Haber cumplido 25 años de edad;
• Haber adquirido la instrucción suficiente;
• Haber practicado cuatro años con escribano;
• Gozar de buena reputación; y,
• Poseer bienes a fin de responder de los excesos y culpas que cometiere en su
ejercicio.

658
Corrupción Judicial
asistencia de testigos, El sacerdote redactaba la escritura y la firmaban los
testigos, estampaba el sello de sus armas o blasones. Esta costumbre permaneció
hasta Alfonso el Sabio, quien con acuerdo de los tres estados del Reino, creó las
escribanías públicas y dispuso que en cada pueblo, cabeza de jurisdicción, se
estableciese cierto número de ellos para autorizar las escrituras o instrumentos
con asistencia de dos o tres testigos, señalándose los derechos por su trabajo. Se
los llamaba en aquel tiempo:
Cursores, por la celebridad en las diligencias;
Cartularios, de la palabra carta;
Actuarios, ante quien pasaban los autos; y,
Secretarios por razón del secreto que debían guardar.
La denominación de notarios estuvo y está en uso por las notas o minutos que
toman de cuanto las partes tratan a su presencia, a fin de ordenar luego y
extender con la solemnidad y cláusulas de estilo los instrumentos. La profesión de
notario fue y es por su naturaleza tan delicada como honorífica y respetable,
puesto que en ellos está depositada la fe pública. Nuestras leyes llamaron y
llaman honrado al oficio de notario y anhelan que se confiera a abogados libres, de
buena reputación y suficiente conocimiento del Derecho.
Curiales
El mal que hacen los malos es bueno
para el Notario.
No hay profesión tap minúscula que no requiera del título.
Devolved escrupulosamente- el testamento cerrado que se te ha confiado.
Que es defecto de los notarios, no ser constantes en^su buen trato. Shakespeare
dijo qufe más te valiera no haber nacido que no saber agradecer.
Vicio del consentimiento es el causado por equivocación de buena fe, que anula el
acto jurídico si afecta lo esencial del mismo o de su objeto, nos explica Giner 1967.
No dejan de haber notarios que practiquen el hechizo, se valgan de artificios y
fingimientos, arrebaten y embelezcan la fe pública, pero que no perdonan el logro
de sus honorarios.
Para ejercer el cargo de Notario, todas las horas son hábiles.
Entre ciertos notarios, que mercantilizan la fe pública en los actos y contratos que
autorizan, constituye una dignidad y no una vergüenza.
LEONARDO DE VINCI, grande artista y personaje de ciencia, fallecido en 1519, a
los 67 años, hijo ilegítimo de un Notario de Vinci. Se lo reconoce a través de los
siglos como el grande pintor, escultor, arquitecto, músico, físico, matemático y
filósofo del Renacimiento. Es autor de Los Magos, Adán y Eva, de la estatua
ecuestre en bronce

Tres son las conclusiones que el Notario debe proponerse:


Certeza en lo que hace,
Confianza en lo que no debe hacer y,

659
Máximas,Tranquilidad
Reparos y Alternaciones de una Justicia
con quienes acuden Perdida
a sus servicios.
Evite señor Notario, ser corto de vista y largo de manos.
Nosotros, los Abogados, no somos tan miserables con los Notarios que la fe
pública la tienen competida entre arbitrario número.
La cicatería proporciona al Notario unos inexplicables compañeros de trabajo.
Actúan cuando nadie tiene nada.
Exigencias
El Notario debe/ personalmente observar, determinar y examinar atentamente,
para cumplir con lo ordenado por la ley.
Todos ven, pero hay Notarios que no saben ver.
La prudencia del Notario le hace observar a los otorgantes del contrato para que
no oculten, lo que realmente quieren hacer.
La naturaleza de la fe pública previene al Notario que encuentre algo que aprender
en cada nuevo acto o contrato.

Desprecia la gente al Notario viendo que solo está para cobrar el importe y no para
dar fe del acto o contrato, en evidente corrupción.
El mucho trabajo les hace soberbios y pedantes, antes que razonables y útiles.
Bien sabes Notario, que la mejor ley es la más bien observada en la escritura
pública del contrato celebrado.
Fe pública
Siempre nuestro guardador de documentos buena distinción ha merecido por ser
fiefj observador de la confianza y seguridad.
El sentido de la fe pública está en su propia aplicación.
A buena parte de Notarios les es imposible dar fe del otorgamiento de
instrumentos públicos que rubrican con su firma sencillamente, porque no los
presencian, entre otras anomalías.
¡Oh dignidad, dadme fuerza y valor para contemplar cuanto ocurre en conocidas
Notarías, con la confianza en el resguardo de la fe pública!
Quien otro sabe lo que hace no obstante, el Notario que da fe sabe más aún.
La escrupulosa observancia de la ley, es propiedad de todo Notario.
de Francisco Sforza en Milán, la Virgen de las rocas; de retratos de las mujeres de
la nobleza Sforza, la Última Cena. César Borgia le encargó la pintura de la Batalla
de Anghiari, el retrato de Mona Lisa, La Giaconda, la Virgen y el niño, San
Gerónimo... En el campo de la anatomía, de la geometría, mecánica y estática, la
hidráulica, maquinas voladoras, etc. consagran su presencia en el arte y la ciencia.
Advertimos que existen cinco clases de Notarios: los seductores, los
codiciosos, los cumplidores de sus deberes, los cabeza de turco y, los imbéciles
que son los más dichosos.
Mayor experiencia tiene del servicio notarial, el que ha observado más la ley, que
quien ha vivido de él.
Quiero acordarme de un Notario amigo y siempre me encuentro con algo polémico
que establece lo que Bachelard dice, la jerarquía de las apariencias.
¿Por qué será que el Notario está siempre ausente en otorgar y en el ,

660
Corrupción Judicial
sigilo?—-—
Hay Notarios que tropezando y cayendo, van viviendo.
El yerro es cosa común a todos los Notarios, pero la obstinación les engendra
graves males.
La pertinacia del Notario depende de la falta de conocimiento del Derecho.
>
Las notarías fueron creadas para los Abogados ociosos, que creen es lo mejor de
todos sus hallazgos.
Los notarios no deben ser necesariamente abogados, porque no son litigantes
sino personas de buena fe, que dan seguridad porque la tienen.
Pero es que no solo deben tener buena fe sino además, conocer a las partes y
saber del Derecho para legitimar los actos y contratos que autorizan.
Avenencias
En el avenimiento negocian la sabiduría, disimulan injurias y sufren agravios, que
poco importan al Notario.,
1
El avenimiento llega de negociaciones como de concesiones, existe no menos por
el apego a la paz entre las partes, que por el interés de seguir litigando.
No hay reconocimiento más firme que aquél que se relaciona por la transacción,
pues no hay nada más estimable que inspire confianza que la conformidad de
intereses.
La vida no puede ser más bella que la locura de la transacción con el feroz
adversario.
provecho del tráfico clandestino de ia fe pública.
Pluma de Notario del negro hace blanco y a la vuelta de un pelo, de blanco hace
negro. Reza un refrán.
Lord Byron, dijo: ¡La pluma! Ese poderoso instrumento de los hombres
insignificantes.
Dichoso el mortal que busca el aura de avenimiento, antes que la espera de una
vana ilusión que se empeña en no ver claro.
Calamitosos
Hemos visto notarios pobres de pronto, por haber lucrado demasiado de prisa.
Los anillos de oro del Notario son más fuertes que el servicio de la fe pública.
Cuando el Notario es oportuno siempre valen sus derechos.
Para ganaf' los derechos más que el saber, vale el saber atender a la gente por
igual.
No es afortunado lo que distingue al Notario, sino llegar a ser de buena fe en los
actos y contratos que autoriza.
Al Notario no debe deslumbrar su enriquecimiento, cuando es
NOTA PRELIMINAR
Durante la Colonia, a la Audiencia le correspondía recibir de los jueces subalterno
avisos puntuales de 1$& casas que se formaban por delitos y / listas de las causas
civiles y criminales pendientes, con expresión del estado de unas y otras, a fin de
promover la más pronta administración de justicia.

661
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

A su vez, la Audiencia remití! cada año al Supremo Tribunal de Justicia de Madrid


listas exactas de las causas civiles y cada seis meses de las criminales, así
fenecidas como pendientes, con expresión del estado que estas tengan, t
incluyendo las que hayan recibido de los juzgados inferiores.
Los fiscales y promotores fiscales, considerados defensores de la causa pública y
de la real jurisdicción ordinaria y además, encargados de promover la persecución
y castigo de los delitos que perjudiquen a la sociedad debían apurar todos los
esfuerzos de su celo para cumplir bien con tan importantes obligaciones. No se
mezclaban en las causas civiles que solo interesen a persona; particulares, ni
tampoco en las causas sobre delitos meramente privados en que la ley no daba
acción sino a la parte agraviada.
El Reglamento de Procedimientos Judiciales disponía que los fiscales sigan hasta
el fin con celo y diligencia los pleitos y causas de su atribución y abstenerse de
ayudar a los reos y acusados en causas criminales como igualmente en las
causas civiles contra el Rey o contra el Fisco, bajo la pena de pérdida del oficio y
de la mitad de sus bienes y además, la prohibición del ejercicio de la abogacía, ni
dar su patrimonio en causa alguna ni aun ante otros tribunales, so pena de perder
también el ofieio.
Los fiscales y promotores fiscales podían ser apremiados a instancia de las partes
y las respuestas o exposiciones de los mismos, así en causas criminales como en
las civiles, no debían reservarse en ningún caso para que los interesados dejen de
verlas.
Los fiscales del Tribunal Supremo estaban particularmente obligados, bajo su más
estricta responsabilidad:
A denunciar al Tribunal las irregularidades, abusos y dilataciones en la
administración de justicia;
A proponer formal acusación cuando la gravedad del caso lo requiera;
- • Acusar los demás delitos cuyo conocimiento tácaba al tribunal;
Pedir y exigir a los fiscales de la Audiencia, a los promotores fiscales de los
juzgados inferiores y a cualesquiera otros funcionarios públicos, los informes y
noticias que necesitaban' para el mejor desempeño de sus atribuciones. Articulo
104, del Reglamento.
Bajo igual responsabilidad estuvieron obligados los fiscales de la Audiencia a
denunciar y en el caso, acusar formalmente las faltas que contra la administración
de justicia advertían en los juzgados inferiores, conforme el artículo 105 del
Reglamento.
Los fiscales y promotores fiscales debían siempre tener muy presente que su
ministerio, aunque muy severo, debía ser tan justo e imparcial como la l^y en cuyo
nombre la ejercían; y que si bien les tocaba promover con la mayor eficacia la
persecución y castigo de los delitos y los demás intereses de la causa pública,

662
Corrupción Judicial
tenia igual obligación de defender o prestar su apoyo a la inocencia, de respetar y
procurar que se respeten los legítimos derechos de personas procesadas,
demandadas o de cualquier otro modo interesadas; y de no tratar nunca a éstas
sino como sea conforme a la verdad y a la justicia. Así rezaba el artículo 107, del
Reglamento.
Cuanta enseñanza y ejemplo nos presentan estos procedimientos y practicas
judiciales en ejercicio de la justicia durante la Colonia y que bien pueden ser
sabias lecciones para los señores de la Junta de Judicatura.
El Consejo de Judicatura o Junta de la Judicatura que es su precisa
denominación, es un Organismo colegiado de la administración de justicia
constituida por nueve vocales y regido fundamentalmente por el Art. 179 y
siguientes, de la Constitución.
Tiene atribuidas las facultades de gestión tendientes a mejorar el sistema judicial,
aprobar su presupuesto, seleccionar y promover a jueces y servidores
judiciales y velar por la transparencia y eficacia del sistema judicial.
Así es como nombra a su Presidente y regula su propio funcionamiento. Su
renovación se realiza cada seis años y sus miembros son designados por otro
Consejo, el llamado de Participación Ciudadana y Control Social, conforme al Art.
208(12) constitucional, y previo aducido concurso público de oposición y méritos.
Los acuerdos y decisiones se toman con el voto conforme de cinco de sus
V. .
miembros, salvo la suspensión y destitución que requieren del voto favorable de
siete de sus integrantes.
N Cabe señalar que “velar por la transparencia de un procedimiento o sentencia”
se deja abierta una indeseable puerta que atenta a la función jurisdiccional y no
permite hablar de una justicia independiente, exigencia de todo proceso,
consistente en que el Juez ante el cual se ha de sustanciar y sentenciar tenga
naturaleza jurisdiccional y no administrativa. Por lo que, cuando menos, el Consejo
debe inhibirse de ejercer el control de las decisiones judiciales, asignado en el Art.
427 constitucional, frente a las normas de la Función Judicial y ajustándose a la
Constitución en su integridad y por la duda, en el sentido que más favorezca la
plena vigencia de la autonomía jurisdiccional de jueces y tribunales.
Tampoco a los abogados les gusta estar guiados por una Junta de Judicatura.
<1
é simagen
Si -la Jauta de Judicatura declarara la muerte cívica del Juez corrupto, quedará en
el Foro el consuelo más grande.
Como no es así ni en el tiempo debido, jj/te Jii^óbfá pesadamente pues por su
culpa, el endeble Juez continuará delinquiendo.
La enfermedad crónica de la corrupción puede ser sanada una vez, y luego,
repetirse, cuando después de haber desaparecido el peligro, éste aparecerá
nuevamente como el cáncer.
Cuando Ia-Üunía*' cietecta al juez o funcionario con grave presunción de
corrupción, no dilaten señores digitadores la decisión final de expulsión, que la
sociedad y el Foro agradecerán por la seguridad judicial garantizada.
' Cuantas veces precisa la seguridad judicial no ocultar o no actuar que es a modo
de participar del corrupto, como con frecuencia ocurre por el mal entendido

663
Máximas,derecho
Reparos yde
Alternaciones
defensa.de una Justicia Perdida
¡#';'
Se reconoce '&l¿ tíí-“ JiMá por la esperanza que ponen quienes quieren ingresar al
servicio judicial y el temor que inspira a los jueces honestos no por su severidad,
sjrio porque el fallo de muchos no es un bien.
FRANCISCO K DE CHATEAUBRIAND, escritor francés nacido en Saint-Malo en /
1768 y fallecido a los 80 años, pertenecía a una familia antigua y noble. A finales
del siglo XVIII partió para América del Norte, se alista en la revolución del lado de
los emigrantes de Coblenza. Herido y afectado por grave enfermedad contagiosa
se refugia en Inglaterra. Se recobra y tras larga convalecencia trabaja para
editores y libreros.

ta-Junta de Judicatura no evoca la ley


■k-.r
porque no advierte el celo y nobleza de la justicia.
Tres cosas tienen los de?l¿^jtmta: Seis mil dóláres mensuales y chofer con carro
en la puerta, la desgracia de interferir en la justicia y, el imperio sin la necesaria
prudencia.
Buena virtud de estos señores seria compartir con los que observan la previsión y
autoridad que naturalmente, deben tener quienes mandan.y
Gúiin tiene el Poder manda y quien - obedece se hace su fedatario. j
Tito Livio, decía que el imperio mejor asegurado es aquel donde es grata la
obediencia.
¿El Juez tiene superiores a quienes debe también respetar y obedecer?
No. Es absolutamente independiente y autónomo en sus decisiones judiciales. No
obstante, en ej, ámbito administrativo debe cumplir con determinadas exigencias
disciplinarias de obediencia a-la Jtmta. ^ (,,
9Í¿ fcmjtaid
Si 4a-Junta abusa de su autoridad que la ley le ha conferido, ¿tendrá un Juez
constitucional al que dara estricta cuenta de la irregularidad cometida?
¿Cómo los jueces y auxiliares están inconformes con -te—Jttftfaá &>>a; de
Judicatura? Talvez, por desobediencia, terquedad o
capricho; por pereza y descuido en el servicio judicial, con hurtos y raterías; con
chismes y enredos; y muy especial, si seducen a las litigantes para ayudarlas en el
proceso.
Rasgos
Las autoridades judiciales como las administrativas, tienen su poder en la
Constitución del Estado, a quien representan en las cuestiones litigiosas. No hay
potestad que no provenga de la ley.
En la selección de jueces hay que tener en cuenta ante todo, el temor de la ley, la
prudencia, rectitud, y firmeza de carácter, para no dejarse alucinar jamás por los
enemigos del orden legal que hablan de libertad, cuando ellos mismos son

664
Corrupción Judicial
esclavos de la corrupción.
El Juez está prohibido de causar daño al litigante, amargándole
o abreviándole la vida con fallos ilegítimos.
Permanece en Londres hasta 1800 y de regreso en París, publica Atala que es la
descripción de locos amores de dos jóvenes salvajes que posee un original
encanto. El éxito fue extraordinario y entonces, el desconocido Chateaubriand se
hizo célebre en toda Europa. Estimulado, publica Le génie du cristianisme, que
constituye un acontecimiento mundial junto a Atala y René, obra que recoge las
impresiones y los sueños malsanos de la juventud de su autor. Algunas obras
literarias fueron del escritor francés, político y embajador durante la Restauración.
Es preciso ahora más que nunca, hacer una buena elección de jueces con
verdadera vocación a la justicia. Habrán falsos postulantes que fácilmente pueden
tomarse por verdaderos. Por esto es importantísimo conocer a éstos para evitarlos
y a los verdaderos para admitirlos, con la esperanza que se mantengan en
probidad y en la erudición del Derecho.
Los falsos jueces pueden ser los doctos orgullosos, engreídos, que no se
acomodan en la judicatura y ponen en duda la ley. Se irritan al recibir al abogado
defensor y más aún al litigante sencillo y humilde que arrodillado pide el despacho
de su causa. Estos jueces hacen tanto e incalculable daño a la justicia, alejando
de ella su credibilidad y confianza.
Los leales jueces pueden ser abogados que temen deshonrar la justicia al dar a
uryb la razón y al otro no. No toleran que se dude de su sentencia. No quieren que
se hable con frecuencia sobre sus decisiones porque lo que resuelven es verdad.
Mas, no encuentran el camino que los lleve a una sentencia justa.
También habrán jueces que hablen atropelladamente. Que oyen a la gente pero
sin atención. Que se inscriben en todos los concursos públicos de oposición y
méritos pero sin enmendar su vida, sin vencer sus pasiones ni imitar virtudes.
Orden y contraorden es un desorden. Un refrán que no observa siempre la. Junta.
*
Que mande en la justicia quien sepa mandar y lo que manda.
¿Qué ha hecho l£..'Jjaía’^con su ^ sobrado poder político y económico para
solucionar los atestados centros de detención y de condenas?
La autoridad judicial no es un sibaritismo, sino una ardua misión de servicio como
virtud propia de quien con prudencia advierte y previene.
Arrogación
Cuando muchos mandan en la justicia pocos son los que aciertan y de este modo
se extravían.
Conferir a-ia Junta p'ocJer sobre la justicia, es para no ser juzgados quienes tienen
que responder.
Quienes suelen hacer lo que se les manda es porque por si solos, no hacen nada.
Vjo
La Jtirrta ha sido creada para fiscalizar a los jueces, pero para saber hacerlo hace
falta además, el entendimiento.
Los jueces soportan ser mandados pero prefieren una exhortación.
Stefan Zweig, asegura: Una voluntad única es la que ha de resolver y disponer en
la hora definitiva.
El mundo de la justicia ecuatoriana se ha desintegrado con la inexperiencia que ha

665
Máximas,invadido
Reparos y la
Alternaciones
acción y de la una Justicia Perdida
aplicación del Derecho.
¿Azar, la cultura laicista He-WVlfintff- pretende artificialmente solucionar todos los
apuros judiciales sin recurrir a la razón, ha visto sus límites y luego su fracaso que
vivimos?
La administración de justicia ha dejado de ser un derecho fundamental del
ciudadano ecuatoriano y se ha convertido en la imposición permanente de nuevas
dificultades, previene el docto jurista Antonio Rodríguez Vicens.
o Invocación
Sube a-la Jurta la plegaria y de allí baja la bendición.
qJ x?
El pedido corto a-la-Jtmía va derecho.
Hace falta una inflexible energía-deia ^ 4«fita para poner orden en nuestra huidiza
justicia.
Es en el desgobierno ele la -Junta por donde han comenzado buena parte, los
actuales males de la justicia.
Recuerda, queyfror ser el gobierno de la administración de justicia, que debéis
guardar a los jueces honrados y abandonar a los corruptos.
Asombra ver a donfle puede llega^una ^ ~ Junta estimulada por el menor éxito.
cUi rs»*
Ese es el mal de la Jtmta: Soñar en una justicia ideal. Pero es que ésta falla, en
todas partes por la corrupción o por la incapacidad de sus jueces.
.*■> ÜH
¿Upa Junta vengadora acaso, va siempre detrás de los corruptos?
¡Señores | del conocimiento
y la experiencia viene el acierto! No despreséis la carrera judicial por atraer el
aplauso de los reemplazos.
No obstante, ha buscado más encontrarse con éstos que la sabiduría de la sana
experiencia.
En otras partes, se demanda Abogados de reconocida maestría para jueces, aquí
se los sustituye apenas, por necesidad del cargo.
Por engañar al pueblo tenemos el Castigo de Dios y nada somos sin la seguridad
jurídica.

666
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
Nadie de la Judicatura ha dicho:
He aquí lo que resulta de bien, la diàspora de juzgados y tribunales; He aquí el nuevo orden
de despacho de causas;
He aquí cómo debéis someterte para hablar con los jueces,
He aquí las medidas para reducir la corrupción judicial;
He aquí cómo volveráse a litigar en Derecho.
Esto y mucho más, deben evidenciar dado el inmenso poder del que se halla revestida,
inadecuadamente.
La mayoría de quejas es una simple diferencia de opinión, difícil de definir y aún más, de
investigar.
La subjetividad de la reforma judicial calificada de positiva, deja interrogantes que no han
podido explicarse.
La carta de la reforma judicial sigue sobre la mesa, mientras los procedimientos no
continúan como antes. Las seudo y repentinas innovaciones introducidas, no han podido
evitar la corrupción que aflora cada día.
La Nación anhela con vehemencia, un verdadero portal por la transparencia judicial, un
espacio de denuncias ciudadanas a través de las cuales se pueda conocer y sancionar
sobre casos de corrupción y prevaricato.
ANATOLE FRANCE, escritor francés fallecido en 1924 a la edad de 80 años. Premio Nobel
de Literatura 1992. Poeta en un inicio, luego dedicó su tiempo a la prosa y publicó la novela
El Crimen de Bonnar, entre otras. Miembro de la Academia en 1896. A raíz del suceso
Dreyfus, deja la literatura de ficción y fantasía y se orienta a cuestiones político-sociales y
escribe Historia Contemporánea, en sus novelas

Justicia transparente debe ser la meta


¿i fiwnSflja
firme, debidamente programada por la-Junta inclusive, para garantizar la integridad del
denunciante y del personal encargado de procesar la denuncia.
Soltura
No se trata de un portal tramitador de escándalos, sino de verificar la denuncia y la buena
fe del denunciante y que cuando se tenga seguridad, trate el caso fundadamente y suba a
la web con
la motivación correspondiente.
/
y
La justicia no es siempre la que nos cuenta la Judicatura, pues hay que esperar lo
inesperado.
La única diferencia entre lo que se ha dado en llamar “revolución judicial” entre tantas otras,
y las Cortes conservadoras, es el alto costo de los sueldos de jueces y vocales del Consejo
y su baja producción.
Se ve un entusiasmo por causas tontas como destruir el anterior palacio de justicia, para un
parque de ociosos.
La inexperiencia está engendrando el desatino, que debe terminar.
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
¿Qué es eso de la revolución en la justicia? Es el loco afán de meterse en todo y sostener
que lo hecho está bien, cuando todo sigue peor que anteas.
Esos que se anticipan en proclamar
Consejo de Judicatura
que todo ha cambiado en la justicia, dicen fantochada y media, ¿Pero es que tienen que
decir que todo está mejor, aunque el Derecho se hunda?
Hegel, asevera: Lo que es razonable es una realidad y lo que es una realidad es razonable.
' -fes optimista Jtmta cree que es buen aliento dispersar las judicaturas y los servicios
judiciales, pero el pesimismo es del Abogado y de quienes mantienen un juicio.
La perversa política ha hecho de -la Junta una monarquía absoluta, ni siquiera moderada
por la angustia pública del litigante.
De todos los vaticinios lúgubres del siglo XXI, el más grave es el siniestro de la justicia.
Verdad es que el ilusorio entusiasmo
de la-Junta puede ser peligroso para quienes poseídos de esperanza en el juicio, padecen
por la inútil seguridad.
Frescura
El humor de ls~J«fita revela con suficiente y evidente frecuencia, insensibilidad, una
especia de atrofiado abandono del compromiso en una tareá de especialización como es la
administración de justicia.
muestra una acentuada crítica a la falta de moral de funcionarios y jueces en la isla de
pingüinos, Los dioses tienen sed, La rebelión de los ángeles. En 1922 publica su última
obra La vida en flor. La crítica literaria expresa: el escepticismo es la nota predominante,
pero su sensibilidad le hacía matizar de compasión y ternura con su implacable ironía, por
su elegancia clásica de su estilo hace aún más patente elifiodeio de Voltaire. Buena lectura
para los consejeros de la Judicatura.
Saber elegir buenos jueces es mucho saber, pero sin exameo justo no puede ser porque
conocimiento, honradez y vocación pesan mucho.
La función judicial es por siempre, cenicienta que agoniza en donde vencer no es una
opción.
¿4.a,Junta tiene que aprender hacer '/ algo de calcomanía de lo que ocurre con la justicia
en Colombia?
Para empezar, todos los jueces carecen de estabilidad, muchos no tienen nada.
¿Para que te arrojen de la función, basta con ser jyez imparcial?
Hay que cuidarse de jueces que quieren que veamos lo que otros no quieren ver.
Cuando la corrupción trabaja y procura, todo es locura y basura, quizás perturbada por
estimar a la justicia poco.
La serie de aventuras que los Abogados atribuyen a la justicia, daría lugar a una comedia
artificiosa y de engaño.
Los enredos de ciertos jueces son el espejo del socialismo del siglo XXI, a lo largo de una
pechugona fase de leyendas.
La- Junla que domina el furor de ¡J jueces y juicios, sabe también de quienes hacen la
aviesa urdimbre.
Sin embargo...
L-asttJRta elige por buenos a los jueces ¡¡/ por el número de votos y no por

681
\
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
el peso de sus conocimientos y menos, por su moralidad.
^ Lamentablemente es que en ciertas judicaturas, las travesuras de los amanuenses sean
el mejor artificio del Derecho.
No hay para el litigante tan grave momento, como cuando se llena de irritación por la
espera inútil.
¿La judicatura es una Babilonia renovada del siglo XXI?
Una judicatura no es otra cosa que un pequeño manicomio donde los atenuados
amanuenses hacen ostentación sin quererlo, de su ignorancia en el Derecho, de sus
conocidos defectos, pereza y permanentes mentiras.
La judicatura es poco o algo muy grave. Si es poco o nada, no vale la pena de tomarla en
serio y si es algo grave, nos asusta entenderla como todo 'lo que de verdad es serio en la
vida.
Las judicaturas penales se han modernizado en su confort sin embargo, siguen siendo
gratas a las injusticias.
Los sabios de la revolución ciudadana no han conseguido explicar hasta hoy - año 2016 - la
postración de la justicia por su alegre corrupción.
Averigua en la Judicatura cómo ganar un juicio y sabrás lo que hay que hacer.
/
Dispersar las judicaturas por toda la ciudad, mantener en permanente inestabilidad a
juecesy secretarios... el entusiasmo sin experiencia está devorando a la administración de
justicia.
La administración de justicia tal como ha sido creada por la “revolución ciudadana”, está
integrada por jueces improvisados y carentes de conocimiento.
Las virtudes predicadas por Is-Junte V tienen pocos mártires pero muchos malvados.
Los remedios por cambiar el mal servicio de la justicia están resjiltando peores que la
enfermedad, porque la lucha es contra una costumbre a la que hay que entenderla, para
que los defectos caigan por si solos, una vez que se discierna su debilidad.
Y por ser inútiles aquellos es por autodestructivos.
La corrupción judicial es una enfermedad de la sociedad actual que no merece castigo sino
cura.
El juez pobre no hace las cosas malas por maldad, sino porque no sale de los
convencionalismos que le estorban.
Pero también hay mucha maldad a nuestro alrededor para juzgar a los
' jueces, porque hay tanta ignorancia detrás de lo que llamamos jueces vendidos.
Mucho cuidado en juzgar a los jueces porque no debemos hacerlo a nadie, ni siquiera a
nosotros mismos.
Algunos jueces son víctima del establecimiento y en vez de culparlos sin motivación
debemos comprenderlos, porque son el producto de una sociedad envilecida por el dinero y
el sexo.
V
Dignas de alabanza son las decisiones
judiciales de jueces probos y eruditos, porque son consideradas con utilidad para la justicia
y sirven de guía para la cátedra universitaria.
Enseñanzas
Buscaremos la filosofía de justicia, en el espíritu y práctica de los magistrados de la Excma.
Corte Suprema, del Siglo XX.
El Consejo de Judicatura no tiene facultades para interferir en las actividades de los jueces
ni para, mediante resoluciones e “instructivos” ordenar cómo deberán proceder en la
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
tramitación de los procesos, Antonio Rodríguez Vicens.

J Et-CoraeFGk).
Me sería fácil, muy fácil, si tuviera el espacio necesario, demostrar, basándome en
documentos irrefutables, el grave daño causado por la injerencia inconstitucional,
' arbitraria y abusiva del Consejo de Judicatura y el nivel de sometimiento del actual sistema
judicial: jueces sin independencia, sin formación y experiencia, obligados a copiar modelos
de autos y providencia^ o a recibir cualquier escrito que se les presente, sin estudiar con
responsabilidad el proceso; despacho apresurado de las causas, desechándolas para
disminuir su número y en una tácita denegación de justicia; indefensión y violación
constante e impune de la Constitución y las leyes,
5 sin posibilidad de rectificación...
Rodríguez Vicens.4iJ Comercio.
El mal radica en la incapacidad, por soberbia y prepotencia, para aceptar, reconocer y
rectificar. Para abrirse al dialogo. Una de las tareas prioritarias que deberá enfrentar un
próximo gobierno, con responsabilidad y
sensatez, será la reorientación de la administración de justicia, uncida a un proyecto
político, caotizada y burocratizada, dándole jerarquía y garantizándole una autentica
independencia. Los viejos vicios se han agravado, los ecuatorianos deberán conocer
quiénes son los culpables -los que imponen y los que se someten- y exigir rectificaciones
ineludibles e impostergables; agrega el notable jurista, Rodríguez Vicens. B Cormrcio.
NOTA PRELIMINAR
En 1798, el Rey de España nombra a Francisco Héctor Barón de Carondelet, Gobernador,
Capitán General y Presidente de la Audiencia de Quito. Es de este personaje en cuyo
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
nombre existe el palacio en que reside el Presidente de la República y se identifica como el
núcleo central del poder en Ecuador.

Pero, ¿Quién es el Barón de Carondelet? Nada menos, nacido en Francia que en el año de
1748, emigra a España en auge por sus grandes territorios extra continentales en cuyos
dominios en verdad, el sol no se ocultaba. Ingresa a la milicia y pronto es nombrado
Intendente-Corregidor de la provincia de San Salvador, cuando apenas cumplía 41 años de
edad. Cuatro años después, en 1783, es nombrado Gobernador de Luisiana, cargo que lo
desempeña hasta 1798 en que pasa a Gobernadof, Capitán General y Presidente de la
Audiencia de Quito durante nueve años hasta su fallecimiento en 1807, cuando cumplía
apenas 59 años de edad.
*
Entre sus sucesores, destacan durante los años de nuestra independencia política, los
cinco grandes Presidentes de la República: Vicente Rocafuerte, el organizador del nuevo
Estado; Gabriel García Moreno, el arquitecto de la Nación; Eloy Alfaro, el cultor de las
libertades; Velasco Ibarra, el procer del sufragio popular; yCamilo Ponce, el célebre
maestro de la obra pública.
Clásica es la denominación de Presidente de la República como el representante que
desempeña fundamentalmente, la ejecución de las leyes y el gobierno del Estado. Fue
Montesquieu, en su ob^a El Espíritu de la leyes, publicada en 1748, el inspirador de la
teoría política de la división de poderes, en base a las propuestas formuladas por Locke en
su Ensayo del Gobierno Civil, editado en 1690, quien preconiza para afianzar la libertad, la
necesidad que cada función del Estado, legislativa, ejecutiva y judicial se organice de
manera distinta e independiente y así evitar la concentración del Poder público.
Autocràtico
Lutero y sus seguidores, han tratado de persuadirnos que el pueblo tiene derecho para
insurreccionarse contra su soberano.
Pero estas proposiciones han encontrado duros opositores por el mal que pudiera
sobrevenir a la Nación.
Así, el Concilio de Constanza calificó de herético, que cualquiera pueda y deba levantarse
contra el tirano y causar su muerte.
Que la libertad no debe fundarse en el derecho al asesinato, pues la defensa de la sociedad
no se ha de encomendar al puñal de un frenético, advierte José Vicente Caravantes.
Si se hubiese concedido a un particular el derecho de matar al soberano, los presidentes
más sabios, más justos y bondadosos pudieran ser victimas propicias, agrega el ilustrado
jurista español.
/
/
MAXIMILIANO FRANCISCO ISIDORO DE ROBESPIERRE, político francés nació en 1758
y falleció a la temprana edad de 36 años. Se consagró al ejercicio de la abogacía, publicó
“Adresse a la nation artesienme” que le dió gran notoriedad. Fue legislador 'Constituyente,
defendió los principios democráticos y se adhirió a Duport por la abolición de la pena de
muerte.
y
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

Si bien Santo Tomás de Aquino, muestra una aversión profunda a la^ tiranía, pero no anima
al pueblo a la^ sedición y anuncia que los medios defensivos contra la tiranía del poder, se
redticen a la deposición del príncipe hecha en forma regular, bien por el pueblo mismo, bien
por un juicio político y sentencia. Concluye aconsejando que si todas las vías humanas
están cerradas queda la oración, que sea el último recurso
del oprimido contra el opresor, porque no es tan corto el brazo de Dios que no pueda librar
a un pueblo abrumado de tan duro yugo.
No obstante, Santo Tomás cree que el pueblo tiene derecho, cuando el tirano ha excedido
todos los límites, de sacudir sus yerros porque entonces, el verdadero sedicioso y rebelde
es el opresor por haber expuesto al Estado a los horrores de la revuelta civil.
Mas, no permite el tiranicidio, antes por contrario lo rechaza en nombre del evangelio
invocando el ejemplo de los mártires que no se arman contra sus perseguidores y que
soportan la muerte.
Si bien ésta ha sido la doctrina seguida generalmente por siglos en los regímenes
monárquicos, con cuanta mayor razón no será aplicable en los regímenes representativos,
en que además de declararse en la Constitución del Estado que el Presidente tiene un
periodo inviolable y que solo sus ministros son responsables del quehacer público.
es tanto más difícil descubrir las verdaderas intenciones del Poder, por la variedad
introducida en el orden judicial, que nos convence de la ninguna necesidad que había para
mudar el sistema, pues así como por la Constitución de Montecristi, se revocaron y
anularon denominaciones e instituciones históricamente vigentes, también pudo corregir
algunas otras que no se tocaron, como agilitar los procedimientos y eliminar las apelaciones
en juicios ejecutivos y verbal sumarios.
Montecristi ignoró la tradición del ordenamiento jurídico, que ha reconocido siempre la
existencia de una Corte Suprema y Cortes Superiores, desde Vicente Rocafuerte y José
Joaquín Olmedo en 1835, o tal vez no se hizo el aprecio y uso que correspondía.
La principal causa de tan desafortunada ocasión, fue la confianza con que se aseguró que
cambiando los nombres de las instituciones judiciales, tendremos una más ágil y acertada
justicia, que sin más examen se dió crédito a una ilusión perversa.
El mal que haces al pueblo más temprano que tarde, recaerá sobre tus hijos.
Aventurado es confiar al Poder los intereses de la justicia, porque difícil es que una sola
persona sea el divino juez en la Tierra.
Rafael Correa que manda sabe trabajar, aún cuando no tiene término medio
entre el bien y el mal.
\>
El pueblo concede la Soberanía a quien elige, que mandando mal la autoridad pierde.
Fue llamado por Marat, el incorruptible, por su honestidad y entereza. Miembro de la
Convención, también del Comité de Defensa Nacional y del de Salud Publica. Introdujo el
culto de la razón y persiguió a los hebertistas y dantonistas, después de lo cuaMirigió la
política de Francia e impuso a la Convención una ley que sometía a los miembros de la
misma al procedimiento judicial común que le produjo no pocas desavenencias.
La conformidad que se debe a Carondelet es obligatoriamente la que una mujer debe a su
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
marido; que cuando se alborota por resistirse a sus mandatos, aparece como indigna del
consorte.
Trapisonda
Todo gobierno que incursione en la justicia será abatido y no subsistirá. La historia lo dice.
Con frecuencia, cuando hay trapicheo de poder, la justicia solo cambia para los pelados, en
nombre del imperioso.
Entregar la administración de justicia a un digitador por mayoría de votos, semeja el imperio
de los más ignorantes.
Deber primario del Jefe de Estado es promover la justicia, con firmeza e independencia
absoluta.
Hay dictadores de modesta estirpe, que crecen hasta humillar bajo su autoridad a la
majestad de la justicia.
En el ecuatoriano desocupado se apagan los valores cívicos y busca lo ajeno.
ál desempleado pasa por delante de Carondelet pero no se atreve a entrar porque teme ser
acusado de intruso.
Antes de dar ^ Ecuador bonos de la pobreza, así pomo inexpertos profesores universitarios
y jueces, es necesario y oportuno que nadie pase hambre.
Con el nombre de Presidente no vivirá el dictador agitado, pues la gloria es mundana y
vana, hoy florece y acabará mañana.
Muere la vida y la buena fama siempre vivirá en el pueblo grato.
El presidente ha llegado joven al poder y ha llegado dos veces.
Presidente, escuche a Lao-Tsé: Cuando se han realizado cosas grandes y se ha
conseguido la gloria es conveniente retirarse.
Sócrates, dijo: Morir es el destino común de los hombres. Morir con gloria es el privilegio del
hombre »/ virtuoso. Mas, como el presidente es amado por los dioses, morirá pronto y su
carrera política será breve.
Si no es útil la obra del Presidente, su gloria será una quimera vana.
Montaigne amonesta, cuando pregunta; ¿Quién impide a mi palafrenero llamarse Pompeyo
el Grande? Y Cervantes, advierte: El deseo de alcanzar fama es activo en gran manera.
El “reformista” Rafael Correa no existiera si no fuera por Abdalá. Desviad de su corta
carrera política el arte de la tarima y habrías abolido el paraíso de su poder.
Cuando se disponía a firmar en el Ayuntamiento de París un llamamiento a las armas, fue
herido gravemente, y ya moribundo fue conducido a la guillotina. La crítica señala a su
muerte como el fin del terror, que fue figura política muy discutida sin embargo, es
indudable que impuso la disciplina en el desorden y que gracias a ello el ejército francés
pudo iniciar con éxito el camino a la victoria. Meritorio ejemplo para los socialistas del siglo
XXI.
¿Quién olvidará de los tiempos difíciles que vivimos con la revolución ciudadana y de
cuando el dinero fue escaso?
La nación vive con el socorro de la justicia y la persona con el amparo del Derecho.
Señoreaje
Justicia y verdad son los mejores vínculos sociales, aducía Juan Locke, filósofo inglés del
siglo XVII.
No desates tu irritación reprimida a pretexto de liberar la justicia de su descomposición.
Carondelet toma la contaminada justicia como válvula de escape de insolubles problemas
de Estado.
No hablemos contra el Presidente Correa por haber creado el tijeretazo en la administración
de justicia pues, acaso ¿debemos agradecerle por no 1 haberla convertido en agencia del
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
gobierno?
Venturoso el pueblo que sabe respetar el Derecho y la razón de la justicia, como el camino
cierto del buen vivir.
r Hastío
Revolución ciudadana todos los días, ¿a quién no agotaría?
Harto estoy de la promoción Correa, como del mal plan de educación.
La Rochefoucauld, dijo: El hastío ha causado m᧠víctimas que la voluptuosidad, más
borrachos que la sed y más suicidas que la desesperación.
El ecuatoriano comienza el día cansándose de las privaciones que sufre y luego también,
de los “beneficios recibidos”.
En algunos casos, el poder político no es otra cosa, que una diversidad de engañar.
/
Muchos presidentes vivieron en Carondelet, pero todos fallecieron sin encontrar un coplero
que cante sus proezas, porque la historia se hizo para narrar y no para festejar y^nenos
cautivar.
Gran Rafael Correa, dejad algo en que podamos vencer.

La Revolución Ciudadana no se ha conducido con honor en la justicia, porque siendo todo
lo que hay que hacer, solo ha dejado más confusión e incertidumbre.'
¡OIU sí fa~ señora Revolución Ciudadana tuviese bulimia y polifagia, ¿dónde, quedaría el
último pudor de la justicia?
La notoriedad actual es como la de la luciérnaga que brilla a cierto alcance mas, observada
de cerca se ve escondida y sin luz.
¿Cambiaríais la figura del difunto Rodrigo Borja por la de Rafael Correa, que igualmente
intercedió y por un cambio con justicia, acumulados los poderes?
JUAN DE MARIANA, historiador jesuíta español, del siglo XVI, describe al tirano como un
ser manchado de todo género de arbitrariedades que provoca la destrucción de las
tradicionales instituciones de la Nación, que debe el poder a las dádivas y a la fuerza de las
armas que las ejerce tomando por medida sus desmanes, no la utilidad pública sinovia suya
propia, sus placeres y sus vicios. Se arroja como una fiera indómita contra todos. No
pretende sino injuriar y derribar a todos, asegura.

El que gobierna al pueblo no ha hallado medio más fácil para captar


su apoyo, que ofrecerle sana y austera justicia.
El Gobierno de Rafael Correa, no es de régimen parlamentario tradicional, pero tampoco
constitucional parlamentario, sino de sus parches.
/
El Poder Político que pretenda también administrar la justicia, más temprano que tarde se
destruirá asimismo, porque las injusticias que crea provocan resentimientos y odios en
quienes l$"s sufren y corrompen a jueces timoratos que no saben desnudar al dominio que
los avasalla.
Hercúleo
Rafael Correa excede mucho a la generalidad de los ecuatorianos, porque se ha montado
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
en la joroba de la democracia y no ve lo que le sostiene.
Camoens, observa y apercibe: Y vimos elevarse por el aire un fantasma de un tamaño
extraordinario. La deformidad de su rostro se correspondía con la inmensidad de su talle. El
famoso coloso de Rodas,
r que fue una de las siete maravillas del mundo, no igualaría en altura este espectáculo
formidable.
Ortega y Gasset, corrige: Velásquez es un gigante ateo, un colosal impío. Armado de su
pincél> caza dioses como disparando con la escopeta. En su bacanal no hay un Baco, sino
un sinvergüenza llamado Baco.
Fatalidad
A ti Rafael Correa, te digo, fuera ya de aquí los asesores socialistas. Sea la ley nuestro
Juez, porque lo que es está escrito.
Llevas tu destino suspenso, la justicia no es justicia y el vino no es vino, porque se
interpone el fantasma de la revolución ciudadana que no tiene a donde ir.
Ven a este mundo de la justicia y entrarás al de la fatalidad, en donde la única moneda de
curso legal que circula en las Cortes arrinconadas, es la desventura. Tú y yo creo que sí
entendemos lo que está pasando porque siempre será lo que ha de ser la justicia, la misma
cosa.
Señor: Para el Socialismo, la justicia es para divertirse y no para que demuestre su fuerza.
La Nación no está obligada a ello.
Otros necios y deficientes que se las dan de revolucionarios, creen que la justicia tiene su
propio destino y hemos visto destruir todo aquello que nos esforzamos en custodiar.
r
Presidente, no luches contra nuestro destino porque todo lo grande
o pequeño que haces, sucede imperiosamente. s
El aplauso es el estimulóle los ánimos nobles y la meta de los débiles, dijo un pensador
notable.
LAO-TSÉ, filósofo chino, nació a principios del siglo VI antes de Jesucristo. Historiador y
archivero en la Corte Chou. Fundador del libro Del Tao y del Te.
¿Dónde ubica reducido lector, al presidente Correa?
El Presidente debe también entregarse a los ejercicios del cuerpo, no solamente para
aumentar su fuerza, sino para mantener su salud, como bien aconseja Isócrates.
Gitanadas
Parecerse a los gitanos que no tienen residencia fija y creen ser descendientes de los
egipcios, es admitir que no hay ecuatoriano necio ni ecuatoriana lerda.
La vida del gitano consiste en ser astuto y embustero, despabila el ingenio y no deja que
crie moho de ninguna manera, nos predica Cervantes.
Las mujeres alegres, los vagabundos y los gitanos son los últimos restos del mundo donde
el desprecio a la ley fue cuestión de costumbre.
Mira si no soy buen gitano, en seis meses he acabado con la corrupción judicial a través de
un digitador que dejó atrás 175 años de “iniquidad y podredumbre”.
Indómita corrupción del mundo civilizado, los jueces no salen del estado en que ejercen
jurisdicción. El tiempo pasa sin cambiar su rostro incierto, sin saber que no es más de una
jornada con cuyo final no quieren encontrarse.
¿Qué fuerza es la que^sostiene a esta misteriosa justicia, como perseguida por un honesto
destino? ¿Hay algo más profundo que la informática? ¿Acaso el espíritu gitano? ¡Así nació
la nueva justicia y así habrá de cumplirse!
Ganivet comenta que todos los actos instintivos fatales, aparecen encubiertos bajo ciertos
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
disfraces con los que voluntariamente nos engañamos para hacer como que obramos
libremente, o por un estimulo libremente aceptado, cuando lo cierto es que somos
maniquíes.
Si numerosos abogados fracasaron en la defensa de Abdala Bucaram, quizá fue porque
ignoraban en absoluto, el derecho constitucional.
Toda revolución es nacida para tener siniestra fatalidad y se contornea en el desatino
nacido de espinas.
Epílogo
El actual señor del Ecuador, de cuanto poder adquirió en vida, no se llevará a la tumba más
que su mortaja.
Quiero que el epitafio de mi administración lleve mi nombre, mi constancia en el trabajo, la
duración de mi gobierno, las rectificaciones que he tributado y la protección a la quietud del
pueblo.
Shakespeare dijo: más vale, después de la muerte, un epitafio mísero que una mala fama
durante su vida.
La última de las vanidades de un político es el epitafio donde reposan sus cenizas, donde
nada yace de quien fue victorioso emprendedor.
GUILLERMO SHAKESPEARE, poeta y dramaturgo inglés, nació en 1564 y falleció a los 52
años de edad. Se considera como el escritor más grande de Inglaterra y uno de" los más
prestigiosos de la literatura universal. En 1592 ya fue conocido en Londres como
dramaturgo. La crítica le atribuye como poeta en Venus Y Adonis, El rapto de Lucrecia y
sobre todo sus Sonetos, que han sido los más leídos junto a Comedia de equivocaciones,
La fiereéilla domada, El mercader de Venecia, etc.

Bien vale recordar la inscripción de una tumba en Madrid. Dejó el poder por no
firmar una sentencia de muerte.
Mentiras son las inscripciones que constan en las lápidas, y no hay quien tenga el valor de
escribir traidor sobre la tumba de tanto falso político.
Impresionable
Cuando sus asesores le aconsejan aumentar los sueldos de los jueces para evitar el
cohecho, el Presidente les respondió que el deber de un buen juez es tener al día el
despacho conforme los tiempos del procedimiento, pero no mal o nunca como ocurre.
Abolido fue por real decreto del 9 de Marzo de 1820, §l Tribunal de la Inquisición, a cuyo
restablecimiento se resistió Fernando VII.
Se dice que Correa ha hecho cualquier cosa para mantenerse en el poder, entonces se ha
convertido ¿en un peligro para el buen vivir?
El presidente Correa usa tácticas similares que cualquier otro para controlar al pueblo,
gracias a la tecnología de la información masiva.
A la Asamblea solo le falta la ley de la clonación humana para curar enfermedades
incurables.
¿Cuál es el momento más notable que nos deja Rafael Correa, cuya presidencia forma el
poder más dominante en una Nación colmada de turbulencias domesticas?
.i— Experimentaba Ecuador décadas atrás, las desgracias que traen consigo los partidos
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida
políticos, los bandos económicos y parcialidades indígenas, mal ocasionados por la
ambición de poder.
Apenas tomó Rafael Correa las riendas del Gobierno, manifestó talento para gobernar,
conoció los males de que adolecía el Estado e intentó aplicar el remedio apropiado.
Pero, en nueve años de poder único no ha podido limpiar la Nación de forajidos y
malhechores, restablecer la tranquilidad pública, contener a los banqueros dentro de los
límites de la debida moderación.
Si bien vindicó los derechos de la Soberanía no ha dado fuerza ni valimiento a la
uniformidad de las leyes, que tanto desearon y nunca consiguieron sus antecesores.
En fin, activo, laborioso, liberal, severo con medida, ha realizado grandes obras de
electrificación hidráulica y modernización de carreteras pero, lejos queda haber conjurado la
miseria del pueblo.
Pudo ser mejor si hubiese aumentado y guardado el esplendor de la justicia participativa.
FOUCHÉ JOSÉ, político francés nació en 1759, profesor de colegios que al estallar la
Revolución abandonó. Perteneció a la Convención Nacional por el Partido de la Montana,
Ministro de Policía con el Directorio y a poco supo hacerse indispensable ante Napoleón
quien lo hizo duque y lo convirtió en el segundo personaje del Imperio.

Los jueces en este tiempo todavía imitan unos a otros y aunque Rafael Correa dispuso que
el Consejo de la judicatura asumiera atribuciones por
sobre la Corte Nacional de Justicia, con el fin de hacer un sistema general de justicia para
todos, es evidente que el llamado Consejo no ha conservado su fuerza y observancia y
antes, experimenta en el Foro la más obstinada resistencia. Continúan vigentes los
privilegios despreciables.
El primer proceder para ejecutar su propósito de mantenerse en el poder, fue extender la
autoridad a aquellos sectores marginados que exigían la atención del Gobierno.
En toda nación que tenga el culto por el Derecho, alguien ha de hacer el oficio de bufón, j
En una nación socialista no hay libertad de los jueces, sino obediencia. No tienen voluntad
propia.
Toda revolución se agota en el espanto y no en la adhesión.
Vieja práctica del tirano es usar una parte del pueblo para tener sometida a la otra parte,
dijo Tomas Jefferson presidente de los Estados Unidos.
Rey serás si hicieres derecho y si no hicieres derecho no serás rey, reza el Fuero Juzgo, en
el Código de los Jueces.
José Renán, historiador y filósofo francés, del siglo XIX, aduce que los verdaderos hombres
progresistas son los que parten de un profundo respecto del pasado.
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

Rafael Correa sabe cómo vencer y sabe aprovechar bien su laurel.


¿Con Carondelet buscas debate? Estás loco de remate.
¿Qué importa que Rafael Correa haya ganado el juicio, si antes lo está repartiendo?
Revelación
El primer desafío de alianza país, será explicar la cambiante narrativa sobre lo que
ocurre con su proyecto de reforma judicial.
Antes de la consulta de mayo 2008, el pronóstico oficial de la justicia era
notablemente más pesimista que el de la realidad.
Durante años los gobiernos han subestimado la justicia, atribuyéndole:
Mala aplicación del Derecho
Pertinaz lentitud; y,
Pública corrupción.
Alianza país espera que su poderosa dinámica de gobierno se traslade a la
turbulenta Función Judicial, no tanto para arrastrarle a su obediencia, pero si lo
suficiente como para que perdure la impunidad.
Conviene consultar el parecer de todos: se ha de amonestar antes al príncipe y
llamarle a la razón y al derecho. Si no condescendiese
Más tarde traiciono' al Emperador después de los Cien Días, bajo la Restauración
desempeñó de nuevo el Ministerio de la Policía y al verse obligado a abandonar el
cargo se hizo súbdito austriaco y se retiró a Trieste, donde murió en 1820. Su vida
pública fue un inaudito caso de dobles, de maestría en la intriga y de ausencia de
conyicción política. Nada difícil es encontrar políticos ecuatorianos comóFouché.
v
y rechácese todo género de observaciones, y no deja lugar a la
esperanza, debe empezarse por declarar públicamente que no se reconoce por rey,
y debiendo nacer de aquí una guerra con todas sus calamidades y desastres, sino
fútese posible de otro modo salvar la patria, solo entonces se puede proceder contra
el tirano como a enemigo público por el derecho de propia defensa. Es decir, que en
estos extremos viene a sentar Mariana la doctrina de Belarmino y Suarez, sobre que
cuando el monarca obra abiertamente contra las leyes más sagradas, la no
resistencia no es un dogma.
esta ha sido la doctrina más generalmente seguida en tan importante y difícil materia,
por espacio de muchos siglos con aplicación a los gobiernos monárquicos puros o
absolutos. “¡Con cuanta mayor razón no será aplicable respecto de los gobiernos
representativos, en que además de haberse declarado en las Constituciones que la
persona del gobernante es sagrada e inviolable, doctrina que recuerda, acaso sin
pensarlo, la consagración y la protección de la iglesia a los monarcas, se consigna
en ellas asimismo, que el rey no gobierna y que son responsables los ministros!”
“¿Con que derecho pues, se armará el brazo de un fanático o de un loco para herir a
su gobernante por actos de que es irresponsable e inocente?”. Mariana
Carondelet

Unid y ved el resultado de la experiencia, la oportunidad de estar presente con lá


destreza debida en el Poder judicial.
El reto de ser un juez justo se ve en las sentencias cuando razona en plenitud la
profundidad de las pretensiones de los contendientes. Entonces habría que conocer
las decisiones de los jóvenes jueces, que son la única realidad que merece verse de
la revolución judicial aducida.
La política del poderoso polvoriento nos ha sumido en la Informalidad judicial y en el
engaño que pesa sobre el ejercicio profesional y echa encima todos los pesares de la
Nación.
El derecho proclama las virtudes del poder y/su fidelidad con el pueblo. Entonces,
quien sobre la equidad se compara con el Derecho, juega con la libertad de los
pueblos.
¿Acaso será la desgracia del pueblo que hace la virtud del poderoso de hoy?
Carondelet llama revolución ciudadana a una miserable servidumbre.
En tan grande inestabilidad política nada más seguro que la ley.
Las teorías y principios jurídicos de luis Felipe Borja, Juan Isaac Lovato, Alfredo
Pérez Guerrero, Monseñor Juan Larrea Holguín, son hoy en día más luminosos que
nunca, porque están despojados del favor político que les autorice.
Juan de Mariana, Jesuíta e historiador del siglo XVI, quien justificó el tiranicidio
diciendo “que tirano es
un ser manchado en todo género de vicios: provoca por un camino contrario la
destrucción de la república; debe el poder a las v intrigas y a la fuerza de las armas;
lo ejerce violentamente, tomando por medida de sus desmanes, no la utilidad
pública, sino la suya propia, sus placeres y vicios: no pudiendo disimular su natural
crueldad, se arroja como una fiera indómita contra las clases del Estado,
cuyariquezas / saquea, movido de su liviandad, de su avaricia, su crueldad y su
infamia.
No pretende sino injuriar y derribar a todos, principalmente a los ricos y a los buenos,
para el mil veces más sospechoso que los malos, pues teme menos sus propios
vicios que la virtud ajena, procura la satisfacción de sus deseos, apelando a la fuerza
y con muy malas mañas, con amenazas y calumnias... Siembra la discordia entre los
ciudadanos; enlaza unas con otras las guerras; trastorna toda la Rrepública, v
disponiendo de todo sin respeto a las leyes; despoja a todos de sus posesiones
patrimoniales, para dominar solo y señor en las fortunas de todos... Menosprecia las
leyes y la religión del reino; tiene por virtud la soberbia, la audacia, la impiedad, la
conculcación sistemática de todo lo más santo”. » Así, continúa Mariana describiendo
al tirano, terminando con estas extremas y enérgicas frases: « “Añádase a esto que
el tirano es una bestia fiera y cruel, que a donde quiera que vaya lo devasta, lo
saquea, lo incendia todo, haciendo terribles estragos en todas partes, con uñas, con
los dientes, con las puntas de sus ^ astas”. » Por último, lo compara a los Geriones
de España, al Anteo dp Libia, a la Quimera de la Licia;
« monstruos todos dice, “para cuya muerte apenas bastó la industria y

699
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

valor de grandes héroes”. »


Tal es el monstruo cuyo destronamiento cree lícito el P. Mariana. Más aún éste no
debe realizarse desde luego a mano armada, sino valiéndose de los medios
siguientes: Llegado este caso, dice, veamos la manera como puede destronársele, a
fin de que no se agraven los males, ni se venguen una maldad con otra. Si están aún
permitidas las reuniones públicas, una vivencia vertiginosa y móvil, asevera
Shakespeare.
Emigrante
No aspiro riquezas ni al mejor vivir, sino volver a mi añorada patria.
Velasco Ibáñez, aducía: donde un hombre hace fortuna y constituye su familia, allí
está su verdadera patria. No obstante, Pérez de Ayala cree que el amor a la patria
chica, es el amor sagrado a la nativa tierra.
El templado emigrante abandona la patria, que amagada y aherrojada la defiende y
muere por ella.
La paz suspirada
Cicerón, predicó: Si deseamos la paz, hemos de mantenernos bien armados. Si
deponemos las armas, nunca gozaremos la paz.
Séneca sostiene que nadie ha podido conservar durante largo tiempo un poder
fundado en la-Violencia. Y tiempos antes, Tácito, aseveró: Para quienes desean
mandar no existe un término medio entre la cúspide y el abismo.
Es de tanto poderío la majestad de Carondelet que ella sola, borró de la Constitución
a la Excma. Corte Suprema honroso calificativo dado por la Asamblea de 1869.
No he podido concebir cómo un demócrata puede considerarse revolucionario de la
justicia por el solo hecho de raspar de la Constitución, a la Excma. Corte Suprema.
Conviene al poderoso restablecer la Corte Suprema porque tal vez se pueda ver
necesitado de su auxilio en su soledad.
Forner, aduce: Porque puedes hacer el mal, necio, te acata la gente de dónde eres.
Tan peligroso es dejar permanecer largamente en un mismo ciudadano el poder que
el pueblo se acostumbra a obedecer y él a mandarlo, de donde se originan la
usurpación y la tiranía, aseveró Simón Bolívar.
Maurois, corrobora: El poder absoluto desencadena en el hombre sus peores
instintos.
Carondelet terminará perdiendo por el abuso de los jueces.
Mil veces creer en los pescadores de Galilea que en los filósofos de Carondelet.
El pueblo apenas tiene espíritu, los poderosos apenas tienen alma. No titubeo: quiero
ser pueblo, subraya La Bruyere.
Todos los pueblos defienden mejor sus costumbres que sus leyes, recalca
Montesquieu.
Los pueblos se salvan de todos los reveces, excepto de aquel que consiente su -
oprobio, opinaba Napolepn.
Las multitudes -y en ello estriba
Carondelet

su belleza- son sensibles, profundamente sensibles al ideal, alegaba Víctor Hugo.


Ese mismo pueblo que hoy ves a tus pies, mañana a una señal se lanzará a atizar el
fuego de tu hoguera, anuncia Dostoievski.
El pueblo hace la guerra y la paz, la política y la historia, y también hace la poesía,
sostiene Pérez Galdós.
En Europa los pueblos con menos revoluciones, son los más progresivos y
adelantados, arguye Pió Baraja.
Carlos V, subrayaba que la razón de Estado no se ha de oponer al estado de la
razón.
Cuando se revuelven los poderes públicos, media nación se trastorna, quien en la
justicia y quien a ninguna.
De gobierno a gobierno vuelve la reforma judicial con su entramado errante.
¿Quieres saber lo que fue la probidad judicial? Pues mira lo que fue la 'Corte
Suprema.
Todos van al encuentro con el atroz líder pero, no le agradecen haberles desalentado
con la enredada justicia de hoy.
Este es el Ecuador de la revolución ciudadana, una expresión demasiado inepta para
la justicia.
La democracia es la forma de gobierno que menos ha desintegrado a los
ecuatorianos.
Oscar Wilde y André Gide, coinciden en afirmar que la popularidad es
obra de la mediocridad.
El hacer obra pública es saber del buen vivir del pueblo y no solo mantenerse en
Carondelet con el cambio de guardia.
Horacio, predicaba: El pueblo me silba, pero yo aplaudo a mí mismo. A su vez
Voltaire, advierte: el público es exagerado por naturaleza. Mas, Pió Baraja sentencia:
el público cree con la mayor facilidad, las más grandes necedades.
El presupuesto nacional es el dinero de Carondelet que casi siempre, reparte
equivocadamente.
J Pueblo
A toda ley más vale la grey que su rey, anuncia el refrán castellano.
Marcha en medio de la muchedumbre, pero nunca a la cabeza, aconsejaba
Pitágoras.
Puede obligarse a un pueblo a seguir los principios de la justicia y de la razón, pero
no puede obligarse a que los comprenda, sostenía Confucio.
Jamás el pueblo llegará a ser filósofo, observaba Platón, tal vez porque la multitud
tiene la naturaleza de servir humildemente y dominar con soberbia, porque no sabe
despreciar ni poseer la justa libertad, sostenía Tito Livio.
Los pueblos, aunque ignorantes, son capaces de comprender la verdad y fácilmente
ceden cuando la demuestra un hombre digno de fe, exponía Maquiavelo. ^
jConviene que el pueblo ignore muchas cosas verdaderas y que crea muchas cosas
falsas, aseguraba Montaigne.

701
\

Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida


Sin embargo, el que labra en el corazón de la plebe edifica una vivencia vertiginosa y
móvil, asevera Shakespeare.
Correa ha sido poco sensible ante el valor de los abogados provectos.
En este mundo cambiante, Carondelet teme por su segundad.
En todo gobierno, siempre han habido malos pilono han descubierto el modo de
sobreviví•
¿De qué sirve el poder si no hay justicia?
Patria
Patria, santa palabra, si no fuera tan profanada, reza un antiguo refrán.
Esa es mi Patria donde todo me sobra y nada me falta, otro refrán.
Platón dijo, que no hemos nacido para nosotros, sino para nuestra patria. Y
Maquiavelo, subraya: ningún hombre de honor censurará a quien procura defender
su patria, de cualquier manera que la defienda.
HORACIO QUINTO. Tribuno de Bruto, ilustrado poeta. Escribió Odas, en cuatro
tomos, Sátiras y Epístolas. Falleció a la edad de 57 años después de azarosa
existencia en Atenas Y Roma. Su nacimiento se refiere en el año 65 antes de
Jesucristo.
y

No es que yo exalte a Eloy Alfaro más que a la patria. Hubiese preferido verlo vivir
para ser todos seguidores, que verle morir para lamentarnos todos. Eloy Alfaro fue
valiente y le honro por ello. Eue un buen ^ presidente y celebro sus éxitos. Pero fue
conspirador y el pueblo lo
ha matado. Simulo a Shakespeare, cuando habla sobre Bruto.
¡Qué amada es la patria para todo corazón bien nacido!, sostenía Voltaire.
Sobra de bienes
En Carondelet hay sobre abundancia para todo y para banquete diario con cualquier
cantidad de invitados, una cama dorada que alivia al sufrido Presidente y, la buena
fortuna que le convierte en sabio siendo necio y cuanto más poderoso mas roñoso. '
No te sobre pod^r que te quiten, ni te falte que no mandes.
El pueblo mira a tus manos para ver si no están llenas.
Tres cosas tiene el Presidente: la desgracia mora^ de la nación, el mando disperso y
la opulencia de Carondelet, que se apega al encargo.
Los proverbios de la Biblia nos anuncian que el que se da prisa por enriquecerse, no
será inocente.
La gente pregunta ¿El Presidente se ha enriquecido? Pero nadie contesta porque lo
ven justo, conveniente y necesario.
Administra la Nación como lo harías con tus bienes si tuvieses que morir, previene
como si tuvieses que vivir cien años y mide razonablemente el gasto público.
Recuerda Presidente que naciste con las manos vacías y nos abandonaras
igualmente.
Las ineptitudes del omnipotente son arbitrios que le acrecientan y encierran en el

702
Carondelet

poder.
Pasar de la pobreza a la opulencia no es más que cambiar de miserias, expresa
Oxenstierne.
No hay pocas fortunas libres de culpa, que no valen su precio.
O’Neill, dijo que el orgullo precede a la caída.
¿Hasta cuando el poder abusará de nuestra tolerancia? Pacientes nos ha hecho la
sensatez y el conformismo ha sido el mejor remedio para la espera
Por la revolución ciudadana, ¿Acaso estarán protegidos el pobre de su penuria, el
pudiente de su riqueza, el ¡nocente de su libertad, la justicia de su imparcialidad...?
Robespierrre, aseguraba: que en las revoluciones hay días en que es un crimen vivir,
y, a su vez, La Fayatte, argüía quería insurrección es el más santo de los deberes.
NICOLÁS MAQUIAVELO, escritor y político nacido en Florencia en 1469. Opositor de
los Medici, escribió El Príncipe, Discursos de Tito Libio, Historia de Florencia y la
comedia La Mandràgora. Quizás se lo recuerde con cierta frecuencia en los actuales
tiempos por El Príncipe en que recomienda entre muchas otras cosas, a no rehusar
cuando fuese inevitable y necesario el engaño y la astucia. Su fallecimiento ocurrió a
los 58 años de edad.

Pero, no muy lejos, Napoleón reiteraba que en toda revolución háy dos clases de
personajes: los que la hacen y los que se aprovechan de ella.
Advertidos quedamos por Lamartine, quien reiteraba que en la revolución nunca está
demás desconfiar de los serviles, ellos solos son los peligrosos.
No obstante, Víctor Hugo aseguraba que el derecho del sufragio suprime el derecho
de insurrección y que las brutalidades del progreso se llaman revoluciones, pero
cuando concluyen se reconoce que el pueblo ha sido maltratado y sin embargo, ha
marchado.
~Aca5ár cóñ~ la oposición ¿Acaso mejoraría la revolución ciudadana?
Revolución ciudadana seria bizarra si su líder tuviera miedo, pues una persona de
bien no pudo haber tomado parte en ella sin saber lo que era.
Tolstoi, exponía: Cada revolución por la fuerza solo trae más violentos medios de
esclavitud, a la mano de quienes adquieren el poder.
Pero, se ha dicho, con sobrada razón, que los principios que sirven para hacer una
revolución, no pueden servir para hacer un gobierno.
Se puede llamar la década de las revoluciones ciudadanas por haberse ocupado de
expedir leyes de leyes, que nada garantizan el buen vivir.
¿En Ecuador del siglo XXI, existe democracia o autocracia por ser un pueblo
ingobernable?
Miguel Bakunin, escritor y revolucionario ruso del siglo XIX, anunció: La más
imperfecta república vale mil veces más que la mejor monarquía. Porque en la
república, aunque se halle explotado el pueblo, no está oprimido, y en la monarquía
lo está siempre. Además, agrega, el régimen democrático eleva poco a poco al
pueblo a la vida pública y la institución monárquica no consiente que así suceda.

703
Máximas , Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

La democracia lleva sobre la autocracia el atributo de lo justo sobre lo incoherente y


necio.
Jorge Benjamín Clemenceau, médico y escritor francés, fallecido en 1929,
negociador del Tratado de Versalles, observa que hay dos cosas inútiles en el
mundo: la próstata y el presidente de una República.
Reyóíubiófi Ciudadana
Se define revolución como la acción y efecto de revolver o revolverse. También,
como el cambio violento en las instituciones políticas de una nación y, por extensión,
la inquietud, el alboroto, la sedición.
no se hacen por menudencias, pero nacen de ellas; y los franceses, que las aguas
revueltas traen la ganancia del pescador. '
Maquiavelo advierte, que nadie debe esperar al promover la revolución, detenerla
donde le convenga o dirigirla a su gusto. De donde, el medio más seguro de impedir
las revoluciones es el de evitar sus causas como asevera Bacón.
Unamuno, concluía: no hay más revolución que la del tiempo. Y Benavente, el caso
de tantos amargados que se creen revolucionarios, al confundir el hambre con los
más ideales anhelos de justicia.
Pió Baraja, premio nobel, sentencia:
La revolución es una época para histriones. Todos los gritos sirven, todas las
necedades tienen valor' todos los pedantes alcanzan un pedestal.
Trotsky, confirma: la revolución es una gran devoradora de personas de carácter,
lleva a su exterminio a los más valerosos y destroza a los más resistentes.
d
Finalmente, Stefan Zweíg, observa: Una revolución nunca pertenece al primero, al
que la inicia, sino al último, al que culmina asiéndose a ella como a una presa.
Monarca en el poder
El autócrata entra con la Constitución y gobierna como quiere.
Dos entes valen más que el autarca: el pueblo y la Constitución.
Si por ser autarca afanaste, tu empleo ganaste.
Los persas expresaban que la sonrisa del rey descubre que tiene dientes de león. Y
los rusos que el zar es primo de Dios, pero no un hermano.
Los judíos recalcaban que la palabra de un rey es cortante como una espada. Y los
chinos que los reyes / como las mujeres bellas, cuanto menos hablan más dicen.
Rafael Correa, debe tener presente tres cosas: Que gobierna a semejantes, que
debe hacerlo según los preceptos legales y morales; y,
que no gobernará eternamente.
¡Señor salvad a Correa de las tinieblas que el mismo ha creado!
Goethe, asegura que es más fácil tejer una corona que encontrar una cabeza digna
de llevarla.
Los pueblos son ricos cuando viven como pobres y cuando nadie se preocupa de lo
que les falta, sino de lo que tienen necesidad.
¿Alguien parará alguna vez, al ciclópeo Correa en su marcha hacia el poder absoluto
y vitalicio?
El presidente Correa solo tiene dos rivales que le son peligrosos: la cada vez mayor
desocupación y el afán natural por la libertad en la justicia.
Carondelet puede gobernar sin pueblo pero, no sin la justicia. Desgraciado será
quien intente.

704
Carondelet

J V W &.
Carondelet tiene hoy en día una roñosa audacia y grasiento orgullo, ha caído víctima
de un seudo socialismo cristiano y de un progresismo petardista y fullero.
Muchos hablan de una revolución ciudadana, pero nadie sabe cómo salir de la rutina.
Hace años'que ávidos de la usanza política, miran con espanto toda primicia de
alianza país.
Esquilo, aseguraba que los lazos de la sangre son muy fuertes cuando se refuerzan
con la amistad.
<
Murió un presumido de poder pórque al desangrarlo, vió que no era azul su sangre.
¿Qué forma de gobierno puede ser donde el presidente no ve en sus gobernados
sino contrarios opositores?
En Francia suele decirse que el pueblo no es dado a amar lo verdadero ni lo sencillo,
sino la novela y la charlatanería.
En Carondelet del siglo XXI, es deslealtad tener sentido común.
Debemos admitir que ninguno de los responsables políticos esperaba que hubiese
tanta manigua judicial, de lo contrario algo hubiesen hecho para iniciar una verdadera
reforma con juristas de experiencia.
La reforma judicial espera respuestas donde solamente hay preguntas.
'SoiTeTdíábJo y vengo hacer en la justicia, la obra del demonio.
Séneca, aducía: No hay servidumbre más vergonzosa que la voluntaria, como
realmente está ocurriendo en Ecuador hoy en día.
Las penurias del Poder, adiestran en la disciplina del silencio.
El silencio es el más alto saber del político gobernante, porque lo que calla
impresiona más que lo que dice.
Saavedra Fajardo, escritor y político español del siglo XVI, aseveraba que el largo
mandar crea soberbia y la soberbia el odio de los súbditos.
Socialismo siglo XXI
Honorato de Balzac ya en los primeros años del siglo XIX, anunció a los franceses:
El socialismo que presume de juventud, es un viejo parricida. Él es quien ha matado

705
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

siempre a su madre, la república y la libertad, su hermana.


El socialismo ha de significar la mayor desdicha que la humanidad haya tenido hasta
el presente. No habrá ningún hombre que pueda hacer lo que quiera, sino que cada
cual hará lo que se le diga, advertía Edmundo Spencer a sus compatriotas irlandeses
en los años 1500, con “La reina de las hadas”, considerada su obra cumbre.
En Ecuador no ha existido ni existe una auténtica disputa social.
Hoy en día 2016, ¿es que todos somos socialistas en Ecuador?
La democracia que yo quiero es la que da a todos ¡guales ocasiones de triunfar,
según la capacidad de cada uno. La que yo rehusó es la que pretende remitir al
número la autoridad que pertenece al mérito, aseguraba Henry Ford, al pueblo
norteamericano.
Rafael Correa nunca presenta mejor semblante que cuando calla. Su trabajo en-
carreteras y en hidroeléctricas es peculiar, más que su oratoria en las sabatinas que
es su peligro.
Credulidad
En Carondeletse atribuye al Presidente la mayor perfección, como obra de un ser
único, perdurablemente magistral.
Sus leales tienen la propensión a juzgar las cosas del Presidente, en la forma más
singular porque están llenos de seguridad y entusiasmo.
Toman las cosas por su lado bueno, 7 que al lado contrario, lo hace el
necio opositor.
Nada hay como vivir con un Presidente optimista, lleno de ilusiones, que el llanto de
los demás no le hace llorar pero su risa si les hace reír.
Branch Cabel, dijo: El optimismo proclama que habitamos el mejor de los mundos,
que el pesimismo lo teme.
A su vez, García Lorca anunció: El optimismo es propio de las almas que tienen una
sola dimensión, de las que no ven el torrente de lágrimas que nos rodea, producido
por cosas que tienen remedio.
Manumitidos
El pueblo concede la soberanía a quien elige, que mandando mal la autoridad pierde.
En Carondelet, los extremos siempre se han tocado, un adagio muy cierto, por los
que el Presidente fácilmente cae y no se levanta.
Hechos, no palabras, facta no verba.
La opinión del pueblo es engañosa, por lo que Correa debe pensar para después
hablar.
Engañar a un engañador no es engaño. Lo que mal empieza mal acaba, es pura
paja.
Fuente de vida es la sabiduría para la oposición, la doctrina de los necios es fatuidad.
/
Es más fácil encontrar el poder que retenerlo.
Delinque doblemente quien no se avergüenza de su transgresión. ’ Pues, el precio de
la propia
conciencia es oneroso.
Durísima tiranía es la de la costumbre en el Poder.
¡f En Carondelet, gobernarse a sí mismo es el gobierno más embarazoso, agotador,
duro, enojoso, pero posible de lo imposible.
Monomaniaco
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

La impericia de Correa se considera culpa, particularmente siendo un deber e


inclusive, puede llegar a ser un dolor por no saber lo que debe saber.
Los tributos son los nervios del Poder, dijo Cicerón.
El Estado es siempre acaudalado y millonario, magnate y ricachón.
Los organismos de Estado no deben ser de obligación, multiplicarse
innecesariamente. Maquiavelo dijo, en ocasiones es mejor dividir que multiplicar.
El^rror común hace la ley.
J Séneca, nadie es desgraciado sino, j por comparación^ entonces dijo: el-egoísmo,
los celos, el rencor, el menosprecio para la oposición.
Hay ocasiones erKque el Presidente no debe decir nada, otras en que debe decir
algo, pero en ninguna ocasión debe decir todo.
Sé breve y agradarás, Presidente, porque después de una gran disputa, la
reconciliación es mucho más agradable.
También, el Presidente no debe levantar olas en un vaso, que exagere y peor hacer
escándalo.
Eximia virtud es saber callar a tiempo, f señor Presidente. Retén la legua, mide tus
palabras. M
Exequátur, cúmplase, que se ejecute. Acción del Presidente de mucha
responsabilidad.
Conviene a la causa pública que nadie use mal de sus recursos.
Correa está a las puertas de irse y no necesita llamarse Aníbal.
No todos piensan, dice Descartes cuando llaman hombre pensante, hombre que
piensa.
El que se encoleriza es una persona fuera de sí mismo, porque la cólera es un
principio de esquizofrenia.
La imposibilidad tributaria exime del cumplimiento de la ley y nadie está obligado a lo
imposible.
Los criticones opositores nunca se ven en el espejo o ven a otro. La paja en ojo
ajeno y la viga en el suyo es lo que no ven.
Los políticos ecuatorianos muchas veces escriben en el agua sus promesas, Simón
Bolívar dijo, he arado en el agua pues, la única que le dió las gracias fue Manuelita
Sáenz.
En la duda abstente de hablar Rafael Correa, que es el principio de todo buen
razonamiento.
/
Por las Instituías comparo a los necios opositores;
Por el Digesto, no valéis nada; \ Del Código de leyes, sabéis poco;
Por las Novelas sois mas ciego que los cachorrillos; -> v
sin embargo, se os hace diputados,
oh tiempos ||ct^íales:
En la paz un león, en el combate político, un ciervo.
En un cambio de gobierno, la mayoría de veces, lo único que cambia para los pobres
es la espera.
Actúa por la naturaleza que te rodea.
Respeta la naturaleza de las cosas. Cambiarlas o intentar cambiarlas, siempre será
un atropello dispendioso.
En tu risa se conoce lo fatuo que eres. Unos ríen, otros se ríen y otros sueltan
Máximas, Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

carcajadas. Algo va de payaso a payaso... Luis Fernando Gómez Duque.


Séneca exclamó: en tan grande inestabilidad, nada hay seguro para nadie excepto la
muerte.
No sabes Presidente en qué lugar y cuando te espera la muerte, por /tanto, espérala
en todo lugar.
Imperecedero es el tiempo que se hace más perceptible para los de Carondelet, que
miran hacia atrás.
Sabia prevención, es temer al opositor por pequeño que sea.
Al buen entendedor pocas palábras en consideración al Presidente.
El encolerizado, cuando vuelve en sí se irrita consigo mismo. Freud llama complejo
de culpa a este arrepentimiento.
El poder Público que río se modera se destruye a sí mismo. No es nada fácil la
moderación en Carondelet.
El autor intelectual es quien causa el daño. ¿Será que ni le ensoberbecen los
triunfos, ni le abaten las adversidades?
Ser Presidente es conocer las cosas humanas y el arte de lo justo y de lo injusto.
Si la fuerza de las armas hace el Derecho, el terror ahoga las leyes.
El Derecho Público no puede alterarse por la conveniencia política de mantenerse en
el Poder.
Suprema justicia para los que protestan, pero lo pedido se ha convertido en suprema
injusticia. Pedir cosas justas de los injustos es insensato.
Justicia es la perpetua y constante voluntad de dar a cada uno su Derecho. Justicia
sin prudencia puede valer mucho, pero prudencia sin justicia no vale nada.
Habiendo caído una vez no hay disculpas para dos veces.
Presidente, sé parco en hablar, pero más parco en censurar.
Los presidentes largos para prometer pero cortos para cumplir» son frecuentes.
Los Estados más corrompidos son los que más leyes expiden.
Procura ser lo que dicen que eres.
De dos males el menor.
Nuestros pensamientos son libres predicaba Marco Ti^lio Cicerón,(autor de Las
Filípicas, a los romanos.
Carondelet
Aunque persigas a muchps, no podrás acabar con tus empecinados opositores.
El recorrido de preceptos es largo, pero es breve y cómodo con el ejemplo. Importa
más parecer que ser.
Ecuador pobre en medio de tantas riquezas. Incomprensible.
El pueblo presta mayor atención al que no lo entiende.
Señor Presidente, un mar de palabras en las sabatinas y una gota de cuestiones de
importancia.
Más vale poco con justicia, que mucho con injusticias.
Acuérdate de los pobres en el tiempo de la abundancia fiscal.
Al mentiroso le es forzoso tener buena memoria. Al mentiroso ni cuando
/dice verdades se le cree.
Cree el necio que ser .temido es un honor. Pero es que el miedo sujeta a los
malvados y no a los buenos.
Por el miedo la gente se inclina a ver las cosas más graves de lo que son.
La represión presidencial será siempre el placer de una alma pequeña; débil y
mezquina.
Peligrosa casualidad del presidente que carece de opositores. Mala suerte tiene quien
carece de adversarios.
Alianza País llama falsamente paz a una miserable sujeción, es que tiene espíritu
geométrico, a la manera de Sócrates.
La muerte es cierta pero su hora, incierta. La muerte extingue toda responsabilidad.
Para poder vivir alegremente abandona el temor a la muerte.
En política, muchas cosas falsas parecen más probables que las verdaderas.
En Carondelet hay algunos locos que no están rapados.
Es mucho más importante lo que el Presidente estima de sí mismo, que lo que opina
él de los demás.
El vencerse a sí mismo es mucho más difícil, que vencer al adversario.
/f
Gobernaras al pueblo, si la razónate >
gobierna a ti. Séneca.
Cambia presidente, lo que es necesario cambiar, lo demás sopórtalo tal como es,
porque hacer lo contrario es naufragar en el puerto.
No mientas en las sabatinas, por lo de la soga en casa del ahorcado.
No tangamos envidia del que está en el Poder, porque lo que nos parece altura es
despeñadero. Séneca.
En los nueve años del Poder no has aprendido a entender ni a tolerar.
La necesidad carece de ley;
La necesidad convierte en justo lo que es ilícito; *—^
La necesidad tiene más fuerza que el Poder; .—=►
Cambiar la necesidad en virtud es tener virtud; ,—> ,
Las invenciones de la necesidad son más antiguas que las del placer; 5» La
necesidad hace valerosos incluso
Máximas , Reparos y Alternaciones de una Justicia Perdida

a los apocados.
A ningún presidente le está permitido ignorar la ley.
Nadie da lo que no tiene.
No dos veces por lo mismo.
No puedes Rafael Correa, mandarte ni prohibirte a ti mismo.
No se puede hacer donaciones si no estás libre de obligaciones.
Nadie, a no ser Rafael Correa, ha cambiado el alboroto de los inconformes con la paz
ciudadana.
El intuitivo Correa ha sido bien acogido en su Patria. Pocos saben donde le roza el
calzado sino el que lo lleva.
Rafael Correa no está obligado hacer cosas imposibles.
Ni leyes sin armas, ni armas sin leyes.
Ignorar algunos problemas nacionales es una gran parte de la sabiduría presidencial.
Los políticos de profesión nada hacen, por lo que aprenden pronto a obrar mal. Nada
duda el que nada sabe.
Nada es más inconstante que el pueblo, nada más impenetrable que su voluntad y
nada más falaz que la respuesta de los comicios.
A caballo regalado no mires los dientes, dijo San Jerónimo.
No es la condena, sino la causa de la condena lo vergonzante para el Tribunal.
Si los políticos preguntan al Presidente
con mala intención, no merecen oír la verdad.
No muchos periodistas, sino muchas veces los mismos periodistas.
No se vence al presidente Correa más que obedeciéndole.
No importa cuántos libros tengas publicados, sino cuan buenos sean.
Los problemas de la Nación no son siempre los que parecen a la oposición.
No porque sea malo el Presidente ha de ser malo el provenir de la Nación.
Nunca es tarde para aprender a gobernar.
No hay placer como las sabatinas, que por la frecuencia no produzca hastío porque ya
nada se dice que no se haya dicho antes.
No hay ningún genio en Carondelet sin mezcla de exaltación.
Los votos se cuentan, no se pesan. Su número cerrado es cantidad limitada.
, Nunca se vence en política un peligro sin riesgo.
El Presidente que está en todas partes no está en ninguna. Que me odien con tal que
me teman.
Piensa Presidente Correa, que cada día que pasa es para tí el último en el Poder.
Ser amigo de todos es cansador, me basta no tener enemigos.
Todo iguala la muerte.
Toda comparación con Rafael Correa falla, entonces lo bueno puede durar poco
porque los mejores perecen pronto.
Ten paciencia Presidente, como un tesoro oculto de tu alma.
El temor a la revuelta es peor que la revuelta misma.
Por la excesiva risa puede conocerse al necio presidente.
Analiza en silencio lo que la oposición diga, porque es el cobarde quien ve peligros
donde no hay.
La peor clase de enemigos son los aduladores de palacio.
Lee la filosofía porque es el conocimiento de lo humano y divino y el deseo de una
vida honesta.

710
Carondelet
La filosofía tiene como fin enseñar la virtud, el deber y el vivir rectamente, dice
Cicerón.
Presidente Correa, no emprendas en muchas obras porque alguna no podrías llevarla
a buen término.
Después de tu muerte no habrá nada porque la muerte misma no es nada.
Tú eres el mandatario más poderoso de la Nación porque eres dueño de ti mismo.
Seneca.-L
Dar consejos a Rafael Correa es superfluo, darlos a la aposición sirve de poco.
El principal bien de la naturaleza es la muerte.
No sabe mandar quien no sabe obedecer. Debemos admitir como
el mejor al presidente que no es demasiado malo.
Todo lo que ha nacido, tiene que perecer.
Los pecados de la juventud, los pagamos en la vejez.
El sueño es la imagen de la fría muerte.
¿De qué le vale al necio tener riquezas, si con ellas no puede comprar sabiduría?
Lo que la naturaleza dió a Rafael Correa nadie puede quitarle.
-a Presidente Correa, ¿hasta cuándo? leamos Las Catilinarias de Cicerón y veremos
que dicen basta ya, evitemos temores y zozobras.
Incluso el necio, si calla pasará por sabio. Los infortunios de la vida enseñan callar.
Tan ladrón es el que roba como el que recibe lo robado.
La década de Correa en el ejercicio directo del poder llegará a su fin en este 2017.
Farith Simón.
Estas elecciones son históricas, termina el mandato presidencial más largo ocupado
de forma continua por la misma persona. Farith Simón.
Nadie ha tenido tanto tiempo, recursos y poder a su disposición, que Correa.
Electo en las urnas ha excluido a las minorías en la toma de decisiones, sin
posibilidad de que sus puntos de vista, críticas y perspectivas sean tomadas en
cuenta o reflejadas en
"N
las decisiones políticas. Ibídem.
Con una mayoría absoluta y amplío margen de acción en la Asamblea Nacional, se
anuló cualquiera posibilidad de un debate plural, sustantivo; sin fiscalización política;
con una Corte Constitucional obsecuente dispuesta a darle la razón en los grandes
temas; con jueces ordinarios atemorizados por un control administrativo que puede
revisar sus actuaciones jurisdiccionales; con una fiscalización administrativa, que
realiza sus trabajos en clave política; con una Función de Transparencia y Control
Social organizada según la necesidades del partido; con un Consejo de Participación
y Control Social, innovación constitucional inútil, que ha servido para asegurar que en
los procesos de selección favorezcan siempre a los cercanos o a los que1 forman
parte del proyecto político oficialista. Expresa en El Comercio el ilustrado catedrático
Farith Simón.
• ¿Hastá cuándo t?ábrá entre los jueces, unos de mentira que sentencian
falsamente?
la humanización del procedimiento y penalidad del Derecho que ocasionó la
admiración y acogida de los enciclopedistas franceses. Catalina de Rusia subvencionó
una cátedra de Economía Politica en Milán para que el ilustre abogado de ciencia
pudiera exponer sus nuevas doctrinas. Un preciso ejemplo para la justicia humanitaria

711
Carondelet
y científica que deben aplicar los tribunales penales de Ecuador.
***

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