Por otro lado, es trascendental señalar que el naturalismo es una cosmovisión

incompleta y ciega, puesto que no presenta ningún propósito para el ser humano o la
creación. A diferencia de la óptica bíblica (que plantea la idea de que el propósito de
una cosa es otorgado por un ente Superior), el pensamiento naturalista sostiene y enseña
que no existe una potestad superior, por lo cual, concluye que los seres humanos y toda
la creación carecen de algún propósito en esta vida. Por todo esto, se está en lo correcto
cuando se afirma que el naturalismo es fragmentado e invidente.
Así mismo, el naturalismo al señalar que todo lo que existe en el universo es materia
física, está planteando la idea de que no hay un creador espiritual. Además, enuncia
también que no existen experiencias tales como el dolor, el amor, el placer, y muchas
otras cosas abstractas.
Por último, aunque este movimiento intentó ser una cosmovisión más apegada a la
realidad, lo único que logro fue ser una mirada fantasiosa de la vida y una perspectiva
carente de todo sentido para la creación.
(Publicado por Romer Alí)