Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
FRANCISCO VARO
ScrdeM 37
FRANCISCO VARO
38 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
1. R. Horsley hace una interpretación del Magnificat en la que sitúa a María en las tradiciones
de Débora y Judit para decir que ese hermoso himno de María refleja una ideología de
revolución. Cfr. R. HORSLEY, The Liberation of Christmas: The Infancy Narratives in Social
Context, Crossroad, New York 1989, pp. 107-114.
ScrdeM 39
FRANCISCO VARO
El libro de Judit
2. Hay una buena edición crítica que es la de R. Hanhart, Iudith. Septuaginta. Vetus
Testamentum graecum auctoritate Academiae Scientiarum Gottingensis editum, VIII/4,
Vandenhoeck & Ruprecht, Göttingen 1979.
3. En el prólogo de su traducción escribe: “Apud Hebraeos liber Judith inter apocrypha
legitur: cujus auctoritas ad roboranda illa quae in contentionem veniunt, minus idonea
judicatur. Chaldaeo tamen sermone conscriptus, inter historias computatur. Sed quia hunc
librum Synodus Nicaena in numero sanctarum Scripturarum legitur computasse, acquievi
postulationi vestrae, immo exactioni: et sepositis occupationibus, quibus vehementer
arctabar, huic unam lucubratiunculam dedi, magis sensum e sensu, quam ex verbo verbum
transferens. Multorum codicum varietatem vitiosissimam amputavi: sola ea, quae
intelligentia integra in verbis Chaldaeis invenire potui, Latinis expressi. Accipite Judith
viduam, castitatis exemplum, et triumphali laude, perpetuis eam praeconiis declarate.
Hanc enim non solum feminis, sed et viris imitabilem dedit, qui castitatis ejus
remunerator, virtutem ei talem tribuit, ut invictum omnibus hominibus vinceret, et
insuperabilem superare”. Praefatio Hieronymi in librum Judith, PL 29, col. 37.
40 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
4. Así estructuran su contenido la mayor parte de los comentarios. Cfr. C. A. MOORE, Judith.
The Anchor Bible, 40, Doubleday, Garden City 1985, pp. 56-58 y J. VÍLCHEZ LÍNDEZ, Tobías
y Judit, Verbo divino, Estella 2000, pp. 238-239, entre otros.
ScrdeM 41
FRANCISCO VARO
5. Cfr. H. CAZELLES, “Le personnage d’ Achior dans le Livre de Judith”, Recherches de Science
Religieuse 39 (1951), pp. 125-137.
42 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 43
FRANCISCO VARO
44 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
7. Cfr. B. E. WILSON, “Pugnacious Precursors and the Bearer of Peace: Jael, Judith and Mary
in Luke 1:42”, Catholic Biblical Quartely 68 (2006), pp. 436-456.
8. Una amplia discusión acerca del género literario de Judit puede consultarse en G. PRIERO,
Giuditta, Marietti, Torino-Roma 1959, pp. 10-20 y en J. NUNES CARREIRA, “O género
literario de Judite e os Macabeus”, Didaskalia (Lisboa) 3 (1973), pp. 215-229.
ScrdeM 45
FRANCISCO VARO
9. Cfr. A. COLUNGA, “El género literario de Judit”, Ciencia Tomista 74 (1948), p. 125; C. A.
MOORE, Judith..., o. c. en nota 4, p. 53; J. VÍLCHEZ LÍNDEZ, Tobías y Judit, o. c. en nota 4,
pp. 242-243.
46 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 47
FRANCISCO VARO
48 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 49
FRANCISCO VARO
50 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
Judit también lo hace Tertuliano, desde una perspectiva distinta, pero que
a partir de entonces suscitará un interés generalizado: atendiendo a su
condición de viuda joven y honesta, que encuentra en la oración y el ayuno
el auxilio divino para derrotar a los enemigos.
Con su peculiar carácter vehemente, y partidario de un ascetismo
riguroso, busca en la escritura ejemplos de fortaleza en la lucha interior. En
su tratado De monogamia, escrito en su época de evolución al montanismo,
hacia el año 210, mantiene con acritud la ilicitud de unas segundas nupcias
tras la muerte del cónyuge19. En la apasionada defensa de tal inconveniencia
afirma que ejemplos de monogamia no sólo los encontramos entre los
grandes personajes bíblicos, sino también que también entre los paganos
hay muchos que dan lecciones en este asunto:
“¡Se atreverán a presentar ante Cristo la continua debilidad de
la carne como un buen motivo de privilegio! Pero por esto no
los juzgarán ya nuestro padre Isaac, ni Juan, eunuco de Cristo,
ni Judit hija de Merari, ni tantos otros santos que han dado
tales ejemplos, sino que serán los paganos los que sean
llamados a ser jueces. Se levantará la reina de Cartago a
pronunciar la sentencia contra las mujeres cristianas, ella que,
prófuga y en tierra extranjera, y que como fundamento de una
ciudad tan importante habría debido por propia iniciativa
buscar unas nupcias reales, y si embargo para no contraer un
segundo matrimonio prefirió antes abrasarse que casarse” (De
monogamia XVII, 1-2)20.
19. Cfr. R. UGLIONE, “L’Antico Testamento negli scritti tertullianei sulle seconde nozze”,
Agustinianum 22 (1982), pp. 165-178.
20. PL 2, col. 952: “Habebunt plane Christo quod allegent, speciosum privilegium, carnis
usquequaque imbecillitatem. Sed hanc judicabunt jam non Isaac monogamus pater noster,
nec Joannes aliqui Christi spado, nec Judith filia Merari, nec tot alia exempla sanctorum.
Solent ethnici judices destinari. Exsurget regina Carthaginis, et decernet in christianas,
quae profuga, et in alieno solo, et tantae civitatis cum maxime formatrix, cum regis
nuptias ultro optasse debuisset; ne tamen secundas eas experiretur, maluit e contrario uri
quam nubere”. Cfr. Q. S. F. TERTULLIANI, De monogamia. Editionem criticam cum
prolegomenis, italica interpretatione, notis et indicibus curauit Renatus UGLIONE, Società
Editrice Internazionale, Torino 1993, p. 114.
ScrdeM 51
FRANCISCO VARO
Poco tiempo después, aún en la primera mitad del siglo iii, Orígenes
repara en la figura de Judit, esta vez como modelo de oración, gracias a la
cual obtiene la ayuda de Dios. En su tratado De oratione (Peri Euchés),
compuesto hacia el año 233 ó 234 a instancias de su amigo y mecenas
Ambrosio y de su mujer Taciana, la menciona en varias ocasiones:
“También Judit, habiendo dirigido una santa oración, con la
ayuda de Dios venció a Holofernes, y una sola mujer hebrea
señaló con un marco de infamia la casa de Nabucodonosor” (De
oratione XIII, 2)21.
“Aquél que ha confiado en la alabanza a Dios –de hecho Judit
quiere decir alabanza– vence frecuentemente la cabeza de los
enemigos simbolizada en la palabra engañosa y persuasiva que
siembra el terror incluso sobre aquellos que se creía que tenían
fe” (De oratione XIII, 3)22.
“Debemos, pues, tener cuidado de que nuestra alma no se
vuelva estéril e infecunda, si escuchamos la ley espiritual con
oídos espirituales, para dejar de ser estériles e infecundos y
para ser escuchados como lo fueron Ana y Ezequías, y para que
seamos liberados como Mardoqueo, Ester y Judit de la malicia
de los enemigos espirituales que tienden insidias” (De oratione
XIII, 4)23.
En la segunda parte del mismo tratado es particularmente significativa
la cita que hace de unas palabras del libro de Judit comentando la sexta
petición del Padrenuestro:
“¿Qué significa, pues, el mandamiento del Señor de rezar el
que no nos induzca en tentación, cuando es Dios mismo el que
parece que nos tienta? Dice de hecho Judit, dirigiéndose no
sólo a los ancianos de su pueblo, sino a todos aquellos que
hayan leído estas palabras: “Acordaos de todo lo que le hizo a
52 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 53
FRANCISCO VARO
26. ORIGÈNE, Homélies sur Jérémie. Traduction par Pierre Husson, Pierre Nautin; édition,
introduction et notes par Pierre Nautin (Sources Chrétiennes, 238), Cerf, Paris 1977,
pp. 282-284.
54 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
27. PL 16, col. 213: “Tolerabilius est mentem virginem quam carnem habere. Utrumque
bonum, si liceat: si non liceat, saltem non homini castae, sed Deo simus. Et Rahab meretrix
fuit, sed postquam Deo credidit, salutem invenit. Et Judith se, ut adultero placeret,
ornavit; quae tamen quia hoc religione, non amore faciebat, nemo eam adulteram judicavit.
Bene successit exemplum. Nam si illa quae se commisit religioni, et pudorem servavit et
patriam; fortassis et nos servando religionem, servabimus etiam castitatem. Quod si Judith
pudicitiam religioni praeferre voluisset, perdita patria, etiam pudicitiam perdidisset”.
AMBROSIO DE MILÁN, Sobre las vírgenes y sobre las viudas. Introducción, traducción y notas de
Domingo RAMOS-LISSÓN, Ciudad Nueva, Madrid 1999, pp. 138-141.
28. “La infirmitas sexus era una opinión compartida en el mundo greco-romano y de ahí que el
Derecho romano sometiera a tutela perpetua a las mujeres (cfr. P. ZANNINI, Studia sulla
tutela mulierum, 1, Torino 1976, pp. 43 ss.; J. IGLESIAS, Derecho Romano, Barcelona 1993, pp.
516-517). De todas formas, ya en la época clásica se plantea la irracionalidad de la tutela
mulierum y su progresiva desvalorización (cfr. F. SCHULZ, Derecho romano clásico, Barcelona
1960, pp. 171 ss.; A. GUZMÁN, Sobre la responsabilidad del “tutor mulieris”, AHDE 46
[1976], 146)” (D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, p. 239, nota 144).
ScrdeM 55
FRANCISCO VARO
29. PL 16, col. 245: “Sed nec fortitudo bonae viduae deesse consuevit. Haec enim vera est
fortitudo, quae naturae usum, sexus infirmitatem, mentis devotione transgreditur: qualis
in illa fuit, cui nomen Judith, quae viros obsidione fractos, perculsos metu, tabidos fame,
sola potuit a colluvione revocare, ab hoste defendere. Ea enim, ut legimus, cum
Holophernes successu multorum terribilis praeliorum, intra muros innumera virorum
millia coegisset, armatis paventibus, et de extrema jam sorte tractantibus, extra murum
processit: et illo praestantior exercitu, quem liberavit; et eo fortior, quem fugavit”.
D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, pp. 236-239.
30. “Es patente la lectura acomodaticia que hace Ambrosio del pasaje de Jdt 8, 6, pues en el
texto bíblico no se menciona más que el sábado y sus vísperas, pero no el domingo. Como
simple hipótesis se puede sugerir que el ayunar todos los días excepto el sábado y el
domingo era una costumbre de la cuaresma milanesa, como afirma nuestro Obispo en Hel.,
10,34 (cfr. F. GORI, Sant’ Ambrogio. Opere morali II/I. Verginità e vedovanza (Biblioteca
Ambrosiana, XIV/1) (Milano-Roma 1989) p. 279, nota 91)” (D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las
vírgenes…, o. c. en nota 27, p. 239, nota 149).
56 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
aflicciones y por los ayunos diarios, que no busca los placeres del
mundo, indiferente ante el peligro, es más fuerte que el
desprecio de la muerte, para tramar el engaño con astucia, se
puso el vestido de fiesta que solía llevar cuando vivía su marido
(cfr. Jdt 10, 2-3), como si quisiera agradar al esposo, como si
hubiese liberado la patria. Pero ella veía otro marido a quien
deseaba agradar: Aquél ciertamente de quien está escrito: detrás
de mí viene un varón que me ha precedido” (De uiduis, 38)31.
En esta larga meditación sobre la hazaña de Judit aún son muchas las
otras virtudes que Ambrosio ayuda a descubrir en ella:
“¿Para qué proseguir narrando el resto, es decir, que
permaneció casta entre miles de enemigos? ¿Qué alabaremos
de su sabiduría cuando puso a punto un plan, de tal manera
que, habiendo elegido un hombre poderoso, lo rechazara como
inferior por su intemperancia, preparase la ocasión para la
victoria y conservase el mérito de la abstinencia y la gracia del
pudor? En efecto, no se manchó –como leemos– ni por la
comida (cfr. Jdt 12, 2), ni por el adúltero (cfr. Jdt 13, 20); no
constituyó un triunfo menor sobre sus enemigos el haber
guardado la castidad que el haber liberado a la patria” (De
uiduis, 39)32.
31. PL 16, col. 246: “Sed ut discas maturae viduitatis affectum, seriem ipsam persequere
Scripturarum. A diebus enim viri sui quibus ille defunctus est, vestem jucunditatis deposuit,
moeroris assumpsit: per omnes dies intenta jejunio, sabbato tantum, et dominica
sacratarumque temporibus feriarum, non refectioni indulgens, sed religioni deferens. Hoc est
enim, sive manducatis, sive bibitis, in nomine Jesu Christi agenda esse omnia; ut etiam ipsa
refectio corporalis sacrae religionis cultui deferatur. Diuturnis igitur moeroribus, et quotidianis
roborata jejuniis sancta Judith quae saeculi oblectamenta non quaerit, periculi negligens,
mortisque contemptu fortior; ut commenta strueret doli, vestem illam jucunditatis, qua,
vivente viro, vestiri solebat, se induit: quasi placitura viro, si patriam liberaret. Sed virum
alium videbat, cui placere quaerebat; illum utique, de quo dictum est: Post me venit vir, qui
ante me factus est”. D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes…, o. c. en nota 27, pp. 238-241.
32. PL 16, col. 246: “Quid caetera persequamur, quod inter millia hostium casta permansit?
Quid ejus sapientiam praedicemus, quod hujuscemodi est commentata consilium?
Potentem elegit, ut intemperantiam a se inferioris arceret, occasionem pararet victoriae.
Abstinentiae meritum, pudicitiae gratiam reservavit. Nec cibo enim, ut legimus,
maculata, nec adulterio, non minorem servatae castitatis ex hostibus revexit triumphum”.
D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, pp. 240-241.
ScrdeM 57
FRANCISCO VARO
33. PL 16, col. 246-247: “Quid sobrietatem loquar? Temperantia enim virtus est feminarum.
Inebriatis vino viris et somno sepultis abstulit vidua gladium, exeruit manum, bellatoris
abscidit caput, per medias hostium acies intemerata processit. Advertitis igitur quantum
nocere mulieribus possit ebrietas, quando viros vina sic solvunt, ut vincantur a feminis?
Esto igitur, vidua, temperans: casta primum a vino, ut possis casta esse ab adulterio.
Nequaquam te ille tentabit, si vina non tentent. Nam si Judith bibisset, dormisset cum
adultero. Sed quia non bibit; haud difficile ebrios exercitus, unius sobrietas et vincere
potuit, et eludere”. D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, pp. 240-243.
34. PL 16, col. 247: “Nec dexterae tantum hoc opus, sed multo major trophaea sapientiae.
Nam cum manu solum Holophernem vicisset, consilio omnem hostium vicit exercitum.
Suspenso enim Holophernis capite, quod virorum non potuit excogitari consilio, suorum
erexit animos, hostium fregit: suos pudore excitans, hostes quoque terrore percellens;
eoque caesi sunt et fugati. Ita unius viduae temperantia atque sobrietas non solum
naturam suam vicit, sed quod est amplius, fecit viros etiam fortiores”. D. RAMOS-LISSÓN,
Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, pp. 242-243.
58 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
35. PL 16, col. 247: “Nec his tamen elata successibus, cui utique gaudere et exsultare licebat
jure victoriae, viduitatis reliquit officium: sed contemptis omnibus qui ejus nuptias
ambiebant, vestem jucunditatis deposuit, viduitatis resumpsit: nec triumphorum suorum
amavit ornatus, illos existimans esse meliores quibus vitia corporis, quam quibus hostium
arma vincuntur”. D. RAMOS-LISSÓN, Sobre las vírgenes..., o. c. en nota 27, pp. 242-243.
ScrdeM 59
FRANCISCO VARO
60 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
Avanzada la segunda mitad del siglo iv, también san Jerónimo recurre a la
figura de Judit al hablar de las excelencias de la virginidad. Concretamente,
en la Carta que dirige a Eustoquia, escrita en el año 384, con una
argumentación que resulta ahora un tanto sorprendente, dice lo siguiente:
37. PL 16, 169: “Ecce tibi Judith se offert mirabilis, quae formidatum populis virum Holophernem
adit, Assyriorum triumphali septum caterva. Quem primo formae gratia et vultus decore
perculit, deinde sermonis circumscripsit elegantia. Primus triumphus ejus fuit, quod integrum
pudorem de tabernaculo hostis revexit: secundus, quod femina de viro reportavit victoriam,
fugavit populos consilio suo. – Horruerunt Persae audaciam ejus. Utique quod in illis
Pythagoraeis duobus mirantur, non expavit mortis periculum, sed nec pudoris, quod est gravius
bonis feminis: non unius ictum carnificis, sed nec totius exercitus tela trepidavit. Stetit inter
cuneos bellatorum femina, inter victricia arma, secura mortis. Quantum ad molem spectat
periculi, moritura processit: quantum ad fidem, dimicatura. – Honestatem igitur secuta est
Judith, et dum eam sequitur, utilitatem invenit. Honestatis enim fuit prohibere ne populus Dei
se profanis dederet, ne ritus patrios et sacramenta proderet; ne sacras virgines, viduas graves,
pudicas matronas barbaricae subjiceret impuritati; ne obsidionem deditione solveret: honestatis
fuit se malle pro omnibus periclitari, ut omnes eximeret periculo. – Quanta honestatis
auctoritas, ut consilium de summis rebus femina sibi vindicaret, nec principibus populi
committeret! Quanta honestatis auctoritas, ut Deum adjutorem praesumeret: quanta gratia, ut
inveniret!”. Cfr. SANT’ AMBROGIO, Opere morali I. I doveri. Introduzione, traduzione e note di
Gabriele BANTERLE, Bibliotheca Ambrosiana, Milano – Città Nuova, Roma 1977, p. 324.
ScrdeM 61
FRANCISCO VARO
38. En los pasajes anteriores ha señalado que en el Antiguo Testamento se consideraba maldita
a la estéril, y también se habían señalado algunos personajes célibes: Elías, Eliseo y muchos
profetas como Jeremías (cfr. Epistola XXII, 21).
39. PL 22, col. 407: “Inveniebatur ergo, ut diximus, in viris tantum hoc continentiae bonum,
et in doloribus jugiter Eva parturiebat. Postquam vero Virgo concepit in utero, et peperit
nobis puerum, cujus principatus in humeros ejus, Deum, fortem, patrem futuri saeculi,
soluta maledictio est. Mors per Evam: vita per Mariam. Ideoque et ditius virginitatis donum
fluxit in feminas, quia coepit a femina. Statim ut filius Dei ingressus est super terram,
novam sibi familiam instituit, ut qui ab angelis adorabatur in coelo, haberet Angelos et in
terris. Tunc Holofernis caput, Judith continens amputavit. Tunc Aman, qui interpretatur
iniquitas, suo combustus est igni. Tunc Jacobus et Joannes relicto patre, rete, navicula, secuti
sunt Salvatorem; affectum sanguinis et vincula saeculi, et curam domus pariter
relinquentes”. Cfr. Cartas de San Jerónimo, Edición Bilingüe, I, Introducción, versión y notas
por Daniel RUIZ BUENO, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 1962, p. 179.
62 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
Este pasaje de san Jerónimo, aunque sea uno más de los que hablan de
Judit en el contexto de la castidad, tiene importancia en sí mismo en la
historia de la recepción del libro de Judit en la Iglesia, ya que es el primero
en el que Judit y María aparecen mencionadas en el mismo texto. No se
establece, sin embargo, una relación entre ellas, como sí sucede con Eva y
María, de larga tradición ya entonces. Simplemente sus figuras se van
acercando, aunque sea de un modo marginal.
Pero, junto a esta mención, en la obra de Jerónimo, y en paralelo a la
observación de Judit como modelo de virtudes, se puede apreciar un nuevo
modo de interpretar su historia, en la línea de la exégesis tipológica. El
primer texto de estas características fue escrito en torno al 400, cuando se
dirigía a Salvina exhortándola a que llevase una vida sobria adecuada a su
viudez. Al terminar su exhortación le dice:
“Esto es, hija mía carísima en Cristo, lo que te inculco y una y
otra vez te repito, a fin de que, olvidada de lo de atrás, te lances
hacia adelante, pues tienes a quienes seguir en tu orden: a
Judit, de la historia hebrea, a Ana, hija de Fanuel, de la
claridad evangélica, que pasaban días y noches en el templo y
con oraciones y ayunos conservaban el tesoro de su castidad.
De ahí que la una, en figura de la Iglesia, cortó la cabeza al
diablo, y la otra, sabedora de los misterios por venir, recibió la
primera al Salvador del mundo” (Epistola LXXIX, 11)40.
A la idea, entonces ya habitual, de Judit como ejemplo de viudedad
virtuosa y dedicada a las prácticas de piedad, se suma ahora una afirmación
que es totalmente novedosa: que Judit constituye un tipo o figura de la
Iglesia. No se trata de una afirmación fortuita y dicha como de paso, pues
en la obra de Jerónimo vuelve a mencionarse explícitamente al inicio del
prólogo de su comentario a Sofonías:
40. Cfr. PL 22, col 732: “Haec, filia in Christo carissima, inculco, et crebrius repeto, ut
posteriorum oblita, in priora te extendas: habens tui ordinis quas sequaris, Judith de
Hebraea historia, et Annam filiam Phanuelis de Evangelii claritate, quae diebus et
noctibus versabantur in Templo, et orationibus atque jejuniis thesaurum pudicitiae
conservabant. Unde et altera in typo Ecclesiae, diabolum capite truncavit; altera
Salvatorem mundi prima suscepit, sacramentorum conscia futurorum”. Cfr. D. RUIZ
BUENO, Cartas de San Jerónimo, o. c. en nota 39, pp. 796-797.
ScrdeM 63
FRANCISCO VARO
41. PL 25, col. 1337: “Antequam Sophoniam aggrediar, qui nonus est in ordine duodecim
prophetarum, respondendum videtur his qui me irridendum aestimant, quod omissis
viris, ad vos scribam potissimum, o Paula et Eustochium. Qui si scirent Oldam, viris
tacentibus, prophetasse, et Debboram judicem pariter et propheten, hostes Israel, Barac
timente, superasse: et Judith et Esther, in typo Ecclesiae, et occidisse adversarios, et
periturum Israel de periculo liberasse numquam post tergum meum manum curvarent in
ciconiam. Taceo de Anna et Elisabeth, et caeteris sanctis mulieribus, quarum velut
siderum igniculos, clarum Mariae lumen abscondit”. SAN JERÓNIMO, Obras Completas IIIb.
Comentarios a los profetas menores, Introducción, traducción y notas de Avelino Domínguez
García, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 2003, pp. 260-261.
64 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 65
FRANCISCO VARO
42. PL 65, col. 319-320: “Habes et in Veteri et in Novo Testamento sanctarum viduarum
quibus aedificeris exempla. In Veteri Testamento, Judith; Anna consideretur in Novo:
quarum si, Domino adjuvante, imitatrix fueris, et delicias carnis, et jactantiam saecularem
vera cordis humilitate calcabis, ut illius in te sponsi semper vivat affectus, qui semper est
vivus. (...) Hunc sanctae viduae cordis contritione et corporis castigatione quaesierunt, huic
cordis et corporis plena continentia devotissime servierunt. – De Judith enim scriptum est:
Et erat Judith in domo sua vidua annis tribus et mensibus quatuor; et fecit sibi
tabernaculum super solarium domus suae, et imposuit super lumbos suos cilicium, et erant
super eam vestimenta viduitatis suae, et jejunabat Judith omnibus diebus viduitatis suae.
Ac, ne quis illam sanctam viduam non devotione cordis, sed necessitate paupertatis
existimet jejunasse, audi quid de ea in subsequentibus dicitur: Et erat Judith bona aspectu,
et formosa facie valde, et prudens corde, et bona intellectu, et erat honesta valde. Quia
reliquerat ei Manasses vir ejus, filius Achitob, filii Melchis, filii Heliab, filii Nathahel, filii
Surisoda, filii Simeon, filii Israel, aurum et argentum, servos et ancillas, et pecora et praedia.
Ecce vidua praeclara natalibus, facultatibus dives, aetate juvenis, specie mirabilis, divitias
contempsit, delicias respuit, carnis incentiva calcavit, et induta virtute ex alto, non quaesivit
secundo famulari connubio. Propterea testimonio tam praeclari operis apparuit, quantum
Deo dilecta sit continentia vidualis. – Denique cum Holofernes innumero Bethuliam
obsedisset exercitu, et omnis Israelitarum virtus perturbata languesceret, egreditur castitas
oppugnatura lasciviam, et ad interitum superbiae humilitas sancta procedit. Ille pugnabat
armis, ista jejuniis; ille ebrietate, ista oratione. Igitur quod omnis Israelitarum populus
facere non potuit, sancta vidua castitatis virtute perfecit. Obtruncavit una mulier tanti
agminis ducem, et insperatam Dei populo reddidit libertatem”. Cfr. F. DI RUSPE, Le Lettere.
Introduzione, traduzione e note a cura di A. ISOLA, Città Nuova, Roma 1999, pp. 72-73.
43. PL 65, col 320: “Istae duae viduae, licet tempore fuerint diverso, unius tamen fidei
servierunt ambae mysterio; quia Christum, quem Anna cognovit in carne natum, ipsum
Judith noverat nasciturum”. Cfr. F. DI RUSPE, Le Lettere, o. c. en nota 42, p. 73.
66 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
44. PL 83, col. 116: “Judith et Esther typum Ecclesiae gestant, hostes fidei puniunt, ac
populum Dei ab interitu eruunt”.
45. PL 109, col 540: “De caetero, quia vos comperi laudabili excellere ingenio, et sanctarum
mulierum quas sacra Scriptura commemorat, virtutes ac studium in bono opere imitari,
non frustra arbitratus sum quarumdam illarum historiam, allegorico sensu ad sanctae
Ecclesiae mysterium a nobis translatam (...) Accipite ergo Judith homonymam vestram,
castitatis exemplar, et triumphali laude perpetuis eam praeconiis declarate: ipsumque
super omnia benedicite, qui ei virtutem talem tribuit, ut invictum omnibus hominibus
vinceret, insuperabilem superaret”.
ScrdeM 67
FRANCISCO VARO
46. PL 109, col 575: ““Illa autem ascendens in eminentiorem locum, jussit fieri silentium:
Cumque omnes tacuissent, dixit Judith: Laudate Dominum Deum nostrum, qui non
deseruit sperantes in se, et in me ancilla sua adimplevit misericordiam suam, quam
promisit domui Israel, et interfecit in manu mea hostem populi sui in hac nocte”. Quid
est Judith in eminentiorem locum ascendere, nisi sanctam Ecclesiam ad superna et
coelestia dogmata sermonem convertere, ut illuc nostros animos sustollat, et ad
laudandum Deum pro universis beneficiis suis, quae misericorditer vero impendit Israel,
torpentes provocet, cujus virtus hostem antiquum interfecit in manu illius feminae, de
qua ad callidum serpentem Dominus in primordio ait: “Ipsa conteret caput ejus”. Et cum
ipsa Veritas in Evangelio ait: “Ecce ego dabo vobis potestatem calcandi super serpentes et
scorpiones, et super omnem virtutem inimici””.
68 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
47. PL 113, 736: ““Et dixit illis Judith” Judith, id est Ecclesia, commendat praesbyteris
portam, id est castrorum Dei sollicitam custodiam, ut pervigili et solerti cura contra
hostium insidias semper parati assistant et orationibus muniti”.
48. AELREDUS RIEUALENSIS, Sermo 45, lin. 221, Cetedoc Library of Christian Latin Texts (soporte
electrónico): “Ibi illa mirabilis uidua Iudith, quae in figura Ecclesiae destruxit diabolum
quando abscidit caput Holofernis”.
ScrdeM 69
FRANCISCO VARO
49. PL 194,1863: “Sicut namque caput ac membra, unus filius, et plures filii, sic Maria et
Ecclesia una mater, et plures; una virgo, et plures. Utraque mater, utraque virgo; utraque
de eodem Spiritu sine libidine concipit; utraque Deo Patri sine peccato prolem fundit. Illa
absque omni peccato corpori caput peperit; ista in omnium peccatorum remissione capiti
corpus edidit. Utraque Christi mater, sed neutra sine altera totum parit. Unde in
Scripturis divinitus inspiratis, quod de virgine matre Ecclesia universaliter, hoc de virgine
Maria singulariter; et quod de virgine matre Maria specialiter, id de Virgine matre
Ecclesia generaliter jure intelligitur, et cum de alterutra sermo texitur, fere permistim et
indifferenter de utraque sententia intelligitur”.
70 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
ScrdeM 71
FRANCISCO VARO
glosando sobre todo las palabras de Jdt 14, 18, a las que comenta una por una:
“Una sola mujer de los hebreos ha llenado de vergüenza la casa del rey
Nabucodonosor. Mirad, Holofernes yace en tierra y su cabeza no está”53.
En los años siguientes, la conexión entre Judit y María se fue
consolidando hasta llegar a ser ampliamente aceptada. Hacia la mitad del
siglo XIII san Buenaventura presenta en sus Collationes de Septem Donis
Spiritu Sancti la victoria de Judit sobre Holofernes como una señal de que la
Virgen triunfaría sobre el demonio:
“La bienaventurada Virgen posee este precio porque es fuerte y
valerosa triunfando noblemente, lo que se significa en el libro de
Judit, donde se dice: “Una mujer hebrea ha cubierto de afrenta
la casa del rey Nabucodonosor” (Jdt 14, 18). Judit cortó la cabeza
de Holofernes y todos los suyos huyeron. Se escribe en el
Evangelio: “Lo que será para ti misma una espada que traspasará
el alma” (Lc 2, 35), y Judit mató a Holofernes con la espada de
éste. – ¿Cómo significa, pues, Judit a la Virgen gloriosa? Atiende
al Antiguo y al Nuevo Testamento. El santo Simeón dice: “Lo
que será para ti misma una espada que traspasará el alma” (Lc 2,
35), es decir, un dolor vivo. ¿De dónde este dolor? Ciertamente
de la pasión de Cristo. ¿Quiénes fueron los autores de la pasión
de Cristo? Los judíos, los paganos, Pilatos. Éstos fueron los
instrumentos, pero ¿quién los movía a ello? Ciertamente el
diablo preparaba la espada con que fue atravesada el alma de la
Virgen; y ésta quedó curada y el diablo vencido. (...) No
permitamos, pues, a su ejemplo, que seamos vencidos”54.
72 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
La Virgen y el Niño con san José y san Juan Bautista. Pontormo (Jacopo Carucci).
Museo del Ermitage. (AA.VV., La pintura en los grandes museos, vol. 8, ed. Planeta,
Barcelona 1981, p. 24).
ScrdeM 73
FRANCISCO VARO
En el siglo XIII son cada vez más frecuentes las aplicaciones a María
de palabras que en su origen estaban dirigidas a Judit. Especialmente
aquellas con las que los habitantes de Betulia le dan la bienvenida tras
su hazaña: “tú eres la gloria de Jerusalén, tú la alegría de Israel, tú el
orgullo de nuestro pueblo” (Jdt 15, 9). Un buen ejemplo se puede
encontrar en un sermón del dominico Aldobrando de Cavalcanti sobre la
Virgen María:
“Es bendita entre las mujeres porque las libras de los
enemigos, las excusas ante el varón, las honras ante Dios. Pues
las mujeres estaban sometidas al diablo por el pecado, estaban
dejadas de Dios, pero la bienaventurada Virgen María las libró
de los enemigos porque su hijo Cristo destruyó al diablo: “de
modo que por su muerte destruyera a aquel que tenía el
imperio de la muerte, esto es, al diablo” (Hb 2). Las excusas
ante el varón: si dice el varón “por ti soy condenado”, la mujer
puede responder “por mi eres salvado”. Igualmente las honró
ante Dios, porque el mismo es hijo de Dios e hijo de la mujer:
“Dios envió a su hijo nacido de mujer” (Ga 3). Por estas tres
cosas se dice de ella: “tú eres la gloria de Jerusalén, tú la alegría
de Israel, tú el orgullo de nuestro pueblo” (Jdt 15,9)55.
Un último impulso a la popularidad de la interpretación alegórica de
Judit como prefiguración de María lo proporcionaría el Speculum Humanae
Salvationis, una obra anónima del siglo xiv, que tuvo una amplia difusión y
en la que se desarrollan diversas series de tipologías organizadas en torno a
la vida de la Santísima Virgen María56.
55. ALDOBRANDINI DE CAVALCANTIBUS Sermones festivi (Textum Parmae 1864 editum; Corpus
Thomisticum [88680]), pars 2 n. 33: “Est benedicta a mulieribus, quia eas ab inimicis
liberas, quo ad virum excusas, quo ad Deum honoras. Mulieres enim per peccatum a
Diabolo tenebantur, a Deo aspernabantur; sed beata virgo ab inimicis liberavit, quia
Christus filius ejus Diabolum destruxit. Heb. 2: ut per mortem destrueret eum qui mortis
habebat imperium, idest Diabolum. Quo ad virum excusat. Si dicit vir, propter te
damnor; mulier potest respondere. Per me salvaris. Item honoravit quo ad Deum, quia
idem est filius Dei et filius mulieris. Galat. 3: misit Deus filium suum natum ex muliere.
Propter haec tria dicitur de ea, Judith 15: tu gloria Jerusalem, tu laetitia Israel, tu
honorificentia populi”.
56. Cfr. H. DE LUBAC, Exégèse médiévale, Paris 1959, p. 339.
74 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
Las palabras con las que los ancianos de Betulia reciben a Judit tras su
gesta han servido a los cristianos desde hace mucho tiempo para exultar de
alegría ante el Señor al contemplar los ejemplos ilustres de su acción
salvadora por medio de personas escogidas que encontramos en la Sagrada
Escritura y en la vida de los santos: tu gloria Hierusalem tu laetitia Israhel tu
honorificentia populi nostri (Jdt 15,9 [Vg 15, 10]).
Sirva como ejemplo el uso que hace de esta frase de la Escritura el
Antifonario Visigótico Mozárabe de la catedral de León, escrito a mediados
del siglo x, en tiempo del abad Ikila (917-970), donde en la Misa de Santa
Eulalia se proclama la siguiente antífona:
“Alleluia magna facta es et preclara filia Syon in universa terra
alleluia. / Alleluia benedicta tu a Deo tuo in omni tabernacula
/ Iacob. Tu gloria Iherusalem tu letitia Israhel / tu
honorificentia populi nostri. In universa”57.
Pero en el mismo antifonario, se recurre también a esas palabras en las
Vísperas del oficio para el día de Santa María, en el Adviento, que comienza así:
57. “Has sido hecha grande, y preclara hija de Sión en toda la tierra, Aleluya. / Aleluya,
bendita eres de tu Dios en todos los tabernáculos / de Jacob. Tú eres la gloria de Jerusalén,
tú la alegría de Israel / tú el orgullo de nuestro pueblo. En toda”. Antifonario visigótico
mozárabe de la Catedral de León. Edición del texto, notas e índices por D. L. BROU y
Dr. J. VIVES, CSIC, Barcelona – Madrid 1959, p. 58. En el códice está en el f. 51 v, 4 s.
ScrdeM 75
FRANCISCO VARO
58. “Virgen de Israel adorna tus panderos y sal / en el coro de aclamaciones. / Bienaventurada
eres, reina que brillas como la luz. Sal / Sal como aurora brillantísima. En el coro / Aquí
está la reina con vestidos dorados. En el coro / Bendita tú eres del Señor tu Dios. En el coro
/ Bendita tú eres entre todas las mujeres que hay sobre la tierra. En el coro / Tú eres la
gloria de Jerusalén, tú la alegría de Israel. Sal / (...)”. Ibidem, f.56v, 9. (Antifonario..., o. c.
en nota 57, p. 67).
59. Se puede comprobar repasando los índices bíblicos de los leccionarios litúrgicos tanto
anteriores como posteriores al Misal de Pablo VI, así como de la Liturgia de las Horas. Sin
embargo, el análisis completo y sistemático de este uso y de sus antecedentes históricos
merecería un estudio aparte.
60. J. ALONSO, “Sentido mariológico del libro de Judit”, Cultura bíblica 16 (1959), 95.
76 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
61. C. POZO, María, nueva Eva, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 2005, 127.
62. Cfr. H. G. GADAMER, Verdad y método: Fundamentos de una hermenéutica filosófica, Sígueme,
Salamanca 1977, p. 366.
63. Gregorio MAGNO, Mor. 20,1 (PL 76, 135 B-D). Véase el comentario a este texto de
P. C. BORI, L’interpretazione infinita. L’ermeneutica cristiana antica e le sue trasformazioni,
Il Mulino, Bologna 1987, pp. 27-41.
64. La importancia de la lectura primera en relación con las posteriores interpretaciones de los
textos ha sido expuesta por la estética de la recepción, especialmente por H. R. JAUSS,
“El lector como instancia de una nueva historia de la literatura”, en J. A. MAYORAL (ed.),
Estética de la recepción, Arco Libros, Madrid 1987, pp. 59-85.
ScrdeM 77
FRANCISCO VARO
65. Cfr. V. BALAGUER, “El sentido literal y el sentido espiritual de la Sagrada Escritura”,
Scripta Theologica 36 (2004/2), pp. 553-555.
66. Cfr. L. SCHEFFCZYK, “La Sagrada Escritura: Palabra de Dios y de la Iglesia”, Communio (ed.
española) 23 (2001/2), 154-166.
67. Cfr. V. BALAGUER, “La economía de la Palabra de Dios. A los 40 años de la Constitución
Dogmática Dei Verbum”, Scripta Theologica 37 (2005/2), 439.
78 ScrdeM
DE JUDIT A MARÍA. La recepción del libro de Judit en la Iglesia
68. Para la clarificación de los conceptos de referencia, signo y sentido y sus relaciones, tal y como
han venido definidas desde Frege, cfr. V. BALAGUER, “El sentido literal...”, o. c. en nota 65,
pp. 552- 553.
69. H. G. GADAMER, Verdad y método..., o. c. en nota 62, p. 347 ss. Cfr. también L. ALONSO-
SCHÖKEL - J. M. BRAVO, Apuntes de hermenéutica, Trotta, Madrid 1994, p. 46.
70. Por ejemplo, si le preguntamos qué nos puede decir acerca del contexto en el que se
escribió, nos proporcionará alguna respuesta, pues habrá en él ciertos detalles que ofrezcan
indicios acerca de cómo se compuso –por ejemplo, ensamblando textos anteriores–, o de
la época en la que se escribió –por el lenguaje o la situación social que refleja–.
ScrdeM 79