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INTRODUCCIÓN

El sector cultural en el Perú también se ha visto perjudicado por la pandemia. Las


medidas de confinamiento cancelaron todas las actividades culturales, como
conciertos, funciones de teatro, cine, fiestas costumbristas, entre otros. Después
de casi siete meses, las bibliotecas y museos han abierto sus puertas al público
bajo estrictos protocolos sanitarios. Estas medidas, aunque necesarias, han
afectado el empleo cultural, han puesto en riesgo el patrimonio arqueológico y han
afectado las industrias creativas y culturales alrededor del mundo. El BID reunió a
varios expertos del sector cultural y creativo de América Latina, quienes realizan
un análisis del impacto y las consecuencias de la pandemia e identifican
soluciones y medidas que pueden ser incorporadas en las estrategias de los
gobiernos en respuesta a la crisis. Otro tema muy preocupante son los efectos
negativos sobre el patrimonio arqueológico nacional. Diversos sitios arqueológicos
han sufrido atentados conocidos como ‘huaqueos’ y, además, la imposibilidad de
recursos para protegerlos.
IMPACTO DE LA PANDEMIA EN LAS COSTUMBRES

Las costumbres, es el modo en que la gente vive, trabaja, se relaciona, ama y


sueña, esto conforme pasan los años, son reconocidos en el mundo entero como
pilares del desarrollo humano. Para poder trazar una línea de progreso o sostener
una idea de civilización se debe valorar los aportes de los pueblos, es decir valorar
sus costumbre, tradiciones, saberes y memorias complejas. En plena era de la
pandemia, las diferencias culturales se muestran desabastecidas en todo su
potencial, enriqueciendo nuestras sociedades, sus intercambios y los proyectos de
futuro que estas albergan.

El Perú ha tenido una convivencia muy tensa con la covid 19, generando
situaciones de exclusión que nos cuesta superar. Sin embargo, en los últimos
meses unos conjuntos de medidas importantes buscan superar estas debilidades.
Se protege los derechos colectivos, se visibiliza lo que antes fue poco valorado. El
Ministerio de Cultura se ubica, desde hace pocos años de su reciente creación,
como un actor con responsabilidades claras y promotor de una gestión pública a la
altura de estos desafíos.

La pandemia del coronavirus está cambiando la manera en la que vivimos y nos


organizamos. Para hacer frente al avance del virus, la economía global ha tenido
que hacer una parada súbita de magnitudes inéditas.

IMPACTO EN EL TURISMO

El Turismo apareció y se dio a notar como un fenómeno social a partir de la


segunda mitad del siglo XVIII, época considerada como una primera etapa en la
historia de esta importante actividad y en la cual se han registrado sus primeros
antecedentes como una simple curiosidad, recuerdos de historias de novelistas y
escritores, o el deseo de indagar sobre culturas y costumbres. Esto último se fue
afianzando y transformando principalmente por los adelantos tecnológicos en los
campos del transporte y de las comunicaciones, aspecto que influyó en gran
medida en este fenómeno como una parte preponderante de la dinámica
sociocultural y económica hasta nuestros días.  

Entre los años 1967 y 1991 aparecieron un gran número de autores y


asociaciones de expertos quienes señalaban que el turiso se asemejaba a un
mercado íntimamente ligado a la oferta y a la demanda, a tal punto que era
denominada como “industria sin chimeneas” y “producto de exportación invisible”.
A inicios de 1995, en la Conferencia de Ottawa, promovida por la Organización
Mundial del Turismo (OMT) y el Gobierno de Canadá, se establecieron una serie
de recomendaciones sobre el análisis y la presentación de las estadísticas del
turismo. 

Desde entonces, se ha tratado al turismo desde el punto de vista sistémico por su


carácter multidisciplinario y multisectorial, el turismo tiene una gran importancia
desde el punto de vista social, ya que el aspecto económico, no menos
importante, es un desencadenante para llegar a ese punto. Para entenderlo mejor
y darnos cuenta de su real dimensión, vale resaltar que la base del turismo es la
libertad de desplazamiento, principio consignado en la Carta Magna de los
Derechos Humanos (1948), un fundamento que muchos países incluyen en sus
constituciones como un derecho inalienable de la persona humana, derecho que
fue perdido en esta pandemia.  

Cuando una sociedad está en peligro, los Estados tienen el derecho de imponer la
prohibición del libre tránsito, especialmente ante guerras, epidemias, tensiones
entre países y catástrofes naturales. Sin embargo, se trata de una medida que
afecta al turismo. Centrándonos en el COVID-19, es fácil inferir que el mundo no
será igual, por todas las precauciones que se deberán aplicar para disfrutar de la
ansiada libertad de desplazamiento. En este caso, lo importante es tener garantías
en el cuidado de la salud individual. 
Esta pandemia ha originado un impacto social que ha afectado al turismo
crudamente debido a que no son posibles los desplazamientos, de tal manera que
la actividad se ha paralizado al punto de que será necesario reflexionar sobre las
irreparables pérdidas e iniciar una reconversión para procurar un nuevo equilibrio
al volver a la nueva normalidad, con dificultad, pero nunca imposible de lograr. Al
respecto, podemos puntualizar lo siguiente: 

 Libertad de desplazamiento. Actualmente se encuentra suspendida, pero


se trata de una medida necesaria debido al riesgo que implica circular
libremente.

 Operatividad. Las empresas que permiten el funcionamiento del entorno


turístico se encuentran paralizadas, lo que afecta a aquellas personas que
cumplen labores en los puntos de origen, conexión y destino.  

 Punto de destino. En este periodo de aislamiento social obligatorio, los


centros de hospedaje, transporte local, restauración y de actividades se
encuentran a la espera de los visitantes que colman sus instalaciones. 

Es así que el turismo se ve seriamente afectado ante los cambios económicos y


culturales que se han vivido en los últimos meses, mermando su accionar y
recortando cada una de las actividades que se tenían programadas. Las
repercusiones de sus procesos como sistema involucran en gran parte la vida de
una población debido a su carácter multisectorial y multidisciplinario. Ante la crisis
que vive el planeta en estos momentos, el rubro debe asumir un rol de apoyo y
solidaridad, poniendo en práctica la hospitalidad, la vocación de servicio y la
proactividad. El profesional de este sector debe encontrarse listo y atento para
brindar lo mejor de sí.  Al reconocer al turismo como un hecho social que afecta la
vida cotidiana de un país, la población debe comprender que esta pandemia debe
convertirse en una oportunidad para impulsar la visita a espacios monumentales
locales bajo nuevas reglas de juego que eviten las aglomeraciones, dando
oportunidades de resurgir a nuestros empresarios, profesionales  y servicios
nacionales, que, con su trabajo y conocimiento encontrarán el equilibrio perdido,
difícil, pero no imposible de volver a lograr.   

TELETRABAJO Y EDUCACIÓN ONLINE

En esta crisis, es indudable que las nuevas tecnologías impulsan de manera


inesperada el teletrabajo y la educación online, así como la actitud de las personas
a estas actividades. En los próximos años, el uso intensivo de la tecnología para el
trabajo y la educación se convertirá en una característica común entre las
personas de las nuevas generaciones. 

Si alguna vez necesitábamos recordar que vivimos en un mundo interconectado,


el nuevo coronavirus lo hizo evidente. Ningún país puede abordar esto solo y
ninguna parte de nuestras sociedades puede ser ignorada si queremos enfrentar
de manera efectiva este desafío global. 

Hoy más que nunca, la humanidad está aprendiendo que necesita volver a los
orígenes y rescatar el valor de la solidaridad y del trabajo conjunto. La conciencia
de que la humanidad está primero y de que solo la colaboración permitirá superar
desafíos globales formará parte de muchas culturas después de esta pandemia. 

Siempre es necesario, no sólo por la crisis actual, que contemplemos diversas


formas de trabajar que pasan, por un lado, por renovar la educación
presencial/industrial como por adoptar formas de trabajo que han sido
desarrolladas para la educación a distancia desde hace más de un siglo. La
educación a distancia tiene la inmensa virtud de darle a cada persona que se
educa la posibilidad de aprender a su propio ritmo y en su propio espacio, y por
eso llega donde la educación que tiene calendarios, horarios y espacios fijos, no
puede llegar.

Debemos considerar también, que hay actividades de aprendizaje que requieren


elementos físicos que no se pueden trasladar a un formato a distancia: trabajo en
laboratorios (aunque existen simuladores, pero no todo se encuentra hoy cubierto
de esa forma y algunos son muy costosos), labores físicas en equipos y algunas
individuales, desarrollo temprano (con infantes) de sensibilidad sensorial y motora,
etc. Y algo muy importante de resaltar además, es que el 93% de hogares del
área rural y 57% del área urbana no contaban con una laptop o computadora.

IMPACTO EN LAS COSTUMBRES RELIGIOSAS

Esta pandemia ha impactado en la religión de varias maneras, incluida la


cancelación de las celebraciones de diversas religiones, el cierre de las escuelas
dominicales, así como la cancelación de peregrinaciones en torno a celebraciones
y festivales. Muchas iglesias, sinagogas, mezquitas y templos están ofreciendo
culto a través de transmisiones en vivo durante de la pandemia.

Las organizaciones religiosas han colaborado a paliar los efectos de la pandemia


realizando donaciones económicas, de material sanitario o de alimentos. Se han
enviado suministros de desinfección, respiradores purificadores de aire,
protectores faciales, guantes, reactivos de detección de ácido nucleico de
coronavirus, ventiladores, monitores de pacientes, bombas de jeringa, bombas de
infusión y alimentos a las áreas afectadas,  e incluso han ofrecido pruebas
gratuitas de COVID-19 al público. Surgieron iniciativas para ofrecer escucha
psicológica o acompañamiento a personas que se encontraban solas durante la
cuarentena. También se pusieron a disposición de las autoridades civiles edificios
religiosos para su uso como albergues u hospitales improvisados.

IMPACTO EN LOS RITUALES MORTUORIOS

En un país acostumbrado a colocar a sus muertos bajo la tierra desde la época


prehispánica, incluso durante cualquier epidemia previa, la aparición de urnas en
las casas es un acontecimiento nuevo para nuestro país. Para las familias que se
han quedado con las cenizas de sus seres queridos, los rituales mortuorios han
cambiado y la sala o alguno de los cuartos de las viviendas son el nuevo
camposanto para recordar a sus muertos, para platicarles.

Con la irrupción del virus en marzo, y a petición de las autoridades que buscaban
evitar algún posible contagio e impedir que los cementerios quedaran copados, los
cadáveres comenzaron a incinerarse por decenas, cientos, miles.

Los entierros en Perú datan de épocas previas a los Incas. Tras la conquista
española los muertos se inhumaron dentro o cerca de iglesias y hospitales, y
desde el siglo XIX en cementerios. No hay evidencias sobre quemar cadáveres
durante epidemias en Perú. Enterrar fue la tendencia incluso cuando una epidemia
de cólera en 1991 mató a casi 3.000.

Sin embargo, al inicio de la pandemia en Perú, en marzo, las autoridades


impusieron la norma más dura de la región sobre el destino de los cuerpos
infectados por el virus: ordenó quemarlos debido al “peligro de la diseminación del
agente infeccioso y el riesgo a la salud pública”. Otros países golpeados por la
pandemia (Brasil, México, Colombia, Chile y Ecuador) permitieron que los
familiares también puedan enterrar a sus seres queridos.

A fines de abril, Perú permitió los entierros con hasta cinco acompañantes. En la
práctica, pese a la norma más flexible, muchos familiares se quejaron de que no
pudieron despedir a sus seres queridos impedidos por la burocracia de los
hospitales y porque hubo autoridades que les decían que la única opción era la
cremación.

IMPACTO EN LAS FESTIVIDADES COSTUMBRISTAS, POPULARES Y


RELIGIOSAS.

La pandemia ha originado que las distintas festividades costumbristas que se


celebran en el país quedaran suspendidas a fin de evitar más contagios de
coronavirus. Siendo un país rico en costumbres y tradiciones, la mayoría de ellas
religiosas, difícilmente haya un rincón del Perú que no se haya visto afectado con
la no realización de estas actividades.

La festividad es un momento para crear un espíritu de cuerpo, en que las


sociedades que tiene grandes diferencias socioeconómicas, de raza, de clase, de
etnia, se encuentran un momento y comparten una identidad común. El impacto
social debido a la suspensión de las festividades es grande, ya que las personas
necesitan de ese calor humano para afianzar su identidad religiosa o sentido de
pertenencia.

Además de la identidad religiosa, las celebraciones otorgan la posibilidad de salir


del marco rutinario; demás, unifican, unen al rico con el pobre, hasta cierto punto,
porque celebras en la calle y genera ese espíritu de hermandad, el cual acaba
cuando concluye la festividad. El verse impedido de participar de estas
festividades podría tener efectos psicológicos, en algunas casos. Según muchos
psicólogos, las personas pueden desarrollar algún tipo de depresión por su
suspensión.

Por otro lado, la suspensión de las festividades han ocasionado importantes


pérdidas económicas, ya que afecta principalmente el turismo. Un caso
significativo puede ser el del Inti Raymi, fiesta que recibe normalmente gran
cantidad de turistas extranjeros.

Acontinuación se menciona algunas de las principales actividades costumbristas


de nuestro país que se vieron afectadas:
- Procesión del Señor de los Milagros: son 332 años en los que
ininterrumpidamente el anda del Señor de los Milagros ha recorrido las
calles de Lima en procesión. Sin embargo, debido a la pandemia del
coronavirus (COVID-19), el director espiritual de la Hermandad del Señor
de Los Milagros, Humberto Giusti, junto con el arzobispo de Lima,
monseñor Carlos Castillo, anunciaron que esta tradicional actividad
religiosa no se realizaría este año. La procesión del Cristo Morado no ha
sido la única festividad que ha sido suspendida desde que inició el estado
de emergencia, la cuarentena y posteriormente la nueva normalidad. 
- Inti Raymi: La Ciudad Imperial del Cuzco celebra cada 24 de junio la
tradicional fiesta del Inti Raymi. Esta actividad, que tradicionalmente
acapara el interés de turistas nacionales y extranjeros, que llegan de forma
masiva durante esta fecha al Cusco, se desarrolló este año sin público. Con
igual emotividad y solemnidad de rituales de años anteriores, los actos se
transmitieron de manera virtual, vía las redes sociales y otras plataformas.
Esta ceremonia siempre se ha desarrollado de forma ininterrumpida, a
excepción de dos ocasiones a consecuencia de fenómenos naturales.
- Vendimia de Ica: La tradicional Fiesta de la Vendimia, que rinde tributo a
la cosecha de uvas y que todos los años atrae turistas nacionales y
extranjeros, fue suspendida por las autoridades de la región Ica luego de
conocerse el primer caso de coronavirus en el Perú. Esta decisión buscó
salvaguardar la salud de la población y visitantes que acuden masivamente
año tras año. Esta fiesta se lleva a cabo en Ica y Pisco durante las
primeras semanas de marzo desde 1958 en honor a la alta calidad de los
vinos y piscos que producen.
- Señor Cautivo de Ayabaca: La peregrinación hacia el Señor Cautivo de
Ayabaca es una costumbre religiosa realizada desde hace más de 200
años en la región Piura, que reúne cientos de turistas entre los meses de
setiembre y octubre, y donde se respira un ambiente lleno de fervor y
devoción. Durante el recorrido, los peregrinos deben llevar una gigantesca
cruz, y para atenuar el trajín, la cofradía a cargo hace pequeñas paradas
para bailar y adorar al compás de cánticos religiosos, se suspendió esta
actividad mediante comunicado de la Diócesis de Chulucanas.

IMPACTO EN LA CELEBRACIÓN DE FIESTAS DE FIN DE AÑO

El gobierno peruano viene estudiando diferentes medidas ante el temor de que las
fiestas de Navidad y Año Nuevo se conviertan en focos de propagación del
COVID-19, grave afección que en las últimas 24 horas ha originado más de 9746
muertes en todo el planeta.  

El Dr. Ernesto Gozzer, médico especialista en Salud Pública y profesor asociado


de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, ha brindado una serie de
recomendaciones para las personas que piensan reunirse con sus familiares
durante los últimos días del 2020.   El doctor manifiesta que las celebraciones de
fin de año originarán que las personas dejen de lado las medidas de protección y
establezcan contacto físico con sus parientes. “Los peruanos somos muy
cariñosos y saludaremos a nuestros hermanos con un abrazo o un beso en la
mejilla”, comentó. 

Más adelante, brindó una serie de recomendaciones para los ciudadanos que
asistan a celebraciones familiares. “Al momento de trasladarse, es importante que
lleven alcohol en gel y empleen vehículos adecuadamente ventilados. Una vez
que lleguen a la casa en la que se llevará a cabo la reunión, no dejen de lavarse
las manos y no se quiten las mascarillas. Si es posible, guarden la distancia social
obligatoria al momento de ingerir los alimentos”. 

Finalmente, recalcó que no se han encontrado ensayos clínicos que demuestren la


efectividad del pediluvio como sistema para mitigar la evolución de la pandemia.
“Gran parte de los hogares limeños emplea lejía para desinfectar sus calzados,
pero se ha registrado un gran número de accidentes por la mala ubicación de
dichos trapos húmedos”, detalló. 
ROL DE LAS RONDAS CAMPESINAS

Perú es uno de los países de América Latina a los que más ha golpeado el
coronavirus, pero hay regiones que lograron retrasar los daños. Cajamarca es una
de ellas, a diferencia de lo que ha ocurrido en Lima, Piura, Loreto y Lambayeque,
por ejemplo. Hay varios factores que inciden en los resultados del quinto
departamento más poblado del Perú.
Primero, su baja densidad de población en relación con la capital, Lima, que
concentra tres cuartas parte de los habitantes del país. Su ubicación geográfica
dentro de la zona andina es otro, así como los determinantes sociales, que hacen
de Cajamarca un lugar con más orden que otras partes del país. Y, en ese
sentido, las rondas campesinas son clave, así como lo fueron durante la
epidemia del cólera.

En sus inicios, Cajamarca tuvo una intervención bastante efectiva con el apoyo de
las rondas campesinas dentro de las poblaciones pequeñas, al crear cercos
estrictos. Eso explica la postergación del inicio de la transmisión de nuevos casos.
Sin esperar el apoyo gobierno central, buscaron garantizar algunos recursos para
dotar mejor a sus dos hospitales y aplicaron un cerco epidemiológico en sus
cincos principales accesos. Es ahí donde entraron en juego las rondas
campesinas para mantener a raya el virus con el golpe de sus pencas.

El problema vino después, cuando el gobierno permitió el regreso a las regiones


de quienes hacen vida en Lima. La falta de trabajo en la capital movilizó el retorno
de más de 30.000 cajamarquinos que entraron por los puntos de control. Pero se
calcula que otros 10.000 ingresaron de forma irregular por los cerros, esto hizo
que los casos de coronavirus se multipliquen a pesar de los esfuerzos de los
ronderos y pobladores.
BIBLIOGRAFÍA

 Adrianzén, E. (2020, 2 de mayo). [Publicación de Facebook]. Recuperado


de https://www.facebook.com/eduardo.adrianzen/posts/3458362094191148 
[ Links 

 Briceño, F. (2020). El coronavirus cambia los rituales mortuorios en Perú.


Recuperado de :
https://apnews.com/article/766caf499606e8b9ae949716a78f553f

 Ferreyros, C. (2020, 16 de mayo). Entrevista por correo electrónico .


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 El comercio. La procesión va por dentro. Recuperado de:


https://elcomercio.pe/peru/celebraciones-en-silencio-la-suspension-de-
festividades-por-la-pandemia-y-sus-efectos-en-la-poblacion-covid-19-
noticia/?ref=ecr

 Morales, M. Especial para BBC News Mundo, Lima. Coronavirus en Perú:


la región que contuvo con éxito la pandemia (y qué papel jugó la "violencia
simbólica" de las rondas campesinas)

 Morales, O. Valores culturales: cambios globales a raíz de la crisis causada


por el coronavirus. Recuperado de:
https://www.esan.edu.pe/conexion/bloggers/intercultural-
management/2020/03/valores-culturales-cambios-globales-a-raiz-de-la-
crisis-causada-por-el-coronavirus/

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