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El Discípulo
“Por tanto Id y haced discípulos a todas las naciones. . .enseñándoles que guarden "
Introducción
El Señor Jesucristo dio a Sus discípulos el mandamiento de ir a todas las naciones y hacer
discípulos. Se preocupaba por las personas, no quería que solamente oyeran hablar de Él y le
recibieran en su corazón, sino que fueran discipulados. Que se les enseñara Todo lo que Él les
había enseñado. Dando a entender que, Solamente uno que ha sido, primeramente "Discípulo",
puede entonces discipular a otra persona.
Uno que ya ha aprendido de Jesús, enseña a otros lo que aprendió. Pues nadie puede dar lo que
no tiene. Quizá secularmente, encontremos a maestros enseñando materias que para ellos mismos
sean nuevas y difíciles, pero solo tienen que cumplir con un programa y en realidad no les afecta si
el alumno aprendió o no. Y quizá el alumno nunca tendrá que aplicar esas enseñanzas. Sin
embargo, Jesucristo enseñaba Principios para la Vida. Cosas prácticas, que sabía que tarde o
temprano sus discípulos tendrían que enfrentar y por eso deseaba discipularlos. Enseñarles a Vivir y
a vivir con Excelencia.
Definición de Discípulo: Aprendiz; uno que sigue la enseñanza de un maestro; un partidario, uno
que lo observa y lo imita; uno que aprende al lado del maestro; uno que está siendo enseñado en
una disciplina.
Un discípulo cristiano es uno que esta siguiendo al Maestro, que es Jesucristo; uno que esta
aprendiendo a su lado; que lo imita y además acepta la disciplina que amerita, pagando el precio
de ser discípulo.
Jesús llamó a:
3. Y si El no tiene preferencia por uno u otro ¿Crees que el Señor también te puede llamar a
ti?_______________________________________________________________
2
Mateo 10:38______________________________________________
Lucas 9:23________________________________________________
Mateo 16:24_______________________________________________
Marcos 10:21_____________________________________________
En la Palabra aprendemos que si Jesús, siendo el Hijo de Dios, fue ofendido, perseguido,
rechazado, traicionado, abandonado por sus amigos y aun le mataron... ¿Podríamos sus discípulos
esperar menos que eso?
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Cualquier persona se puede llamar a sí mismo "cristiano". Pero hay ciertas cosas que caracterizan a
un verdadero discípulo del Señor.
• A Dios
• A Su Prójimo
• A Sí Mismo
• Y Además Llevar Fruto (Juan 15:8) abundante y que permanezca
¡No todos los que nos decimos "cristianos" estamos dispuestos a pagar el precio! A someternos a
un discipulado, a dar nuestro tiempo y esfuerzo, para prepararnos y estar capacitados para la obra
del ministerio. ¡Realmente es un Reto! Y no solo porque demanda de nuestro tiempo, sino también
porque implica la disposición del corazón para permitir al Señor transformarnos.
Quitando lo que estorba, limpiando y reforzando aquello que necesita el Ministerio del Espíritu
Santo para ser instrumentos útiles en Sus maravillosas manos.
3
El Señor hace el llamado a todos aquellos que desean escuchar, y muchos responden al llamado,
pero escoge solo a aquellos que tienen un corazón sensible a Él; a aquellos que sientan su misma
carga. A los que están dispuestos a obedecer en todo momento sin hacer preguntas. Y lo mejor es
que no depende de nuestra capacidad de inteligencia, de dones o talentos, sino de un corazón
contrito, que se deriva de un carácter que ya ha sido tratado, forjado, probado... y ¡Ha salido
victorioso!
8. ¿Te gustaría ser uno de esos discípulos que no tan solo han sido llamados sino también
escogidos por el Señor para colaborar con Él en su obra?
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Enseguida estudiaremos algunas cualidades que sobresalen en conocidos discípulos del Señor, que
son una bendición para los que les rodean. No solo porque sirven al Señor con todo su corazón,
sino porque su servicio es con excelencia y con fruto abundante y que permanece.
Al estudiarlos, empezarás a darte cuenta que tu no tienes todas esas cualidades, quizá más de las
que te hubiera gustado. Pero ¡No hay problema! Para eso estamos estudiando y buscando
aprender. No para condenarnos, ni hacernos ver nuestros defectos o debilidades, sino para que, al
darnos cuenta, nos animemos a cambiar, a empezar a desarrollar lo que nos falta, a dejar lo que
estorba y sobre todo saber que ¡No estamos solos! El Señor está con nosotros todo el tiempo.
• Es sensible al llamado
• Tiene capacidad de discernir por donde va el Señor y le sigue.
• Define bien sus prioridades.
10. Tiene una actitud positiva. Ejemplo de los espías enviados por Moisés (Números 13)