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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores Justicia y Paz

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria Ciencia y Tecnología

Universidad Nacional Experimental de la Seguridad

Academia CEFO-UNES-LARA

Sistema óseo y Sistema Muscular.

Alumnos: Hernández Linares José Miguel CI: 26141878

Pérez Martinez José Rodolfo CI: 26644705

Delgado Escalona Jorge Luis CI: 27388565

Escalona Pérez Roselianny Andreina CI: 27212085

Carrero Mendoza José David CI: 27388565

Moscan Bracamonte Carlos Luis CI: 27868673

Herrera Bracamonte Wilkerman Jesús CI: 28.019.291

Ambiente número: 2

Barquisimeto, 15 de febrero de 2021


Índice.
 Introducción.
 Desarrollo.
 Sistema óseo.
- ¿Qué es?
- Funciones del sistema.
- Estructura.
- Histología del tejido óseo.
- Cartílago.
- Formación y crecimiento de los huesos.
- Clasificación.
- División.
- Diferencia entre el esqueleto femenino y masculino.
- Enfermedades.
 Sistema muscular.
- ¿Qué es el sistema muscular?
- Tipos principales de músculos.
- Partes del sistema muscular.
- Funciones del sistema muscular.
- Enfermedades del sistema muscular.
 Anexos.
Introducción.
Por medio de este trabajos estaremos estudiando de manera inmersa sobre
el sistema oseo, sus partes, funciones, clasificaciones, estructuras, divisiónes,
diferencias entre el sistema óseo de las mujeres y los hombres. De igual
manera estaremos aprendiendo sobre el sistema muscular respectivamente,
que es, los principales músculos del cuerpo, las partes, sus funciones y las
enfermedades que puede padecer dicho sistema muscular. Además al final
del estudio teórico se muestran distintas imágenes donde se muestran y
clasifican lo que es el sistema óseo y muscular.
Sistema óseo.
¿Qué es el sistema óseo? : El esqueleto es una estructura dinámica,
constituida por huesos. Cada hueso es un órgano ya que está formado por
diversos tejidos: óseo, cartilaginoso, conectivo denso, epitelial, otros que
generan sangre, adiposo y nervioso. El sistema óseo es una complicada y
perfecta estructura que está formada básicamente por 206 huesos. Junto al
sistema articular y el sistema muscular forma el aparato locomotor. Los
huesos y otras estructuras rígidas están conectadas por ligamentos y unidas
al sistema muscular a través de tendones. Otro componente del sistema ose
son los cartílagos, que complementan su estructura. En los seres humanos,
por ejemplo, la nariz y orejas están sustentadas por cartílago. Algunos
organismos tienen un esqueleto interno compuesto enteramente de
cartílago, sin huesos calcificados, como en el caso de los tiburones

Funciones del sistema óseo:

- Sostén: los huesos son el soporte de los tejidos blandos, y el punto de


apoyo de la mayoría de los músculos esqueléticos.
- Protección: los huesos protegen a los órganos internos, por ejemplo el
cráneo protege al encéfalo, la caja torácica al corazón y pulmones.
- Movimientos: en conjunto con los músculos.
- homeostasis de minerales: el tejido óseo almacena calcio y fósforo
para dar resistencia a los huesos, y también los libera a la sangre para
mantener en equilibrio su concentración.
- Producción de células sanguíneas: en la médula ósea roja (tejido
conectivo especializado) se produce la hemopoyesis para producir
glóbulos rojos, blancos y plaquetas.
- Almacenamiento de triglicéridos: la médula ósea roja es reemplazada
paulatinamente en los adultos por médula ósea amarilla, que contiene
adipocitos.
Estructura:

Los huesos se clasifican en diversos tipos según su forma. Un hueso largo


(como el fémur o el húmero) consta de las siguientes partes:

- Diáfisis: es el cuerpo o porción cilíndrica principal del hueso.


- Epífisis: son los extremos proximal y distal del hueso.
- Metáfisis: es el sitio de unión de la diáfisis con la epífisis; su espesor va
disminuyendo con la edad.
- Cartílago articular: es una capa delgada de cartílago hialino que cubre
la parte de la epífisis de un hueso que se articula con otro hueso.
- Periostio: es una capa resistente de tejido conectivo denso que rodea
la superficie ósea que no tiene cartílago articular. Protege al hueso,
participa en la reparación de fracturas, colabora en la nutrición del
hueso, y sirve como punto de inserción de tendones y ligamentos.
- Cavidad medular: es el espacio interno de la diáfisis que contiene a la
médula ósea amarilla grasa.
- Endostio: es la capa que recubre la cavidad medular, y contiene células
formadoras de hueso.

Histología del tejido óseo:

Tiene una matriz abundante, y células muy separadas entre sí. La matriz está
formada por:

- 25% de agua
- 25% de fibras proteínicas
- 50% de sales minerales cristalizadas.
Las células son:

- Células osteógenas: son células madre, no especializadas, con


capacidad de división; sus células hijas son los osteoblastos; se
localizan en la porción interna del periostio y del endostio.
- Osteoblastos: son las células que construyen los huesos; sintetizan los
componentes de la matriz del tejido óseo e inician en proceso de
calcificación. (sufijo blasto indica células que secretan matriz)
- Osteocitos: son las células maduras principales del tejido óseo; derivan
de los osteoblastos que quedan atrapados en la matriz; intercambian
nutrientes con la sangre. (sufijo cito indica células constituyentes de
los tejidos)
- Osteoclastos: son células muy grandes, formadas por la fusión de 50
monocitos, ubicadas en el endostio; producen destrucción del hueso
por medio de enzimas lisosómicas para permitir el desarrollo,
crecimiento, mantenimiento y reparación normales del hueso. (sufijo
clasto indica destrucción) La dureza del hueso depende de las sales
minerales orgánicas cristalizadas que contiene, y su flexibilidad
depende de las fibras colágenas. Los huesos no son completamente
sólidos, ya que tienen muchos espacios. Según el tamaño y distribución
de estos espacios, las regiones de un hueso se clasifican en compactas
y esponjosas. En general el hueso compacto constituye el 80% del
esqueleto, y el esponjoso el 20% restante

Cartílago: Es de tipo semirrígido y elástico. Posee más sustancia intercelular que células.
No tiene irrigación capilar propia, por eso sus células (los condrocitos) reciben el oxígeno y
los nutrientes por difusión desde el pericondrio (revestimiento fibroso).
Formación y crecimiento de los huesos: El embrión no contiene huesos sino
estructuras de cartílago hialino. De manera gradual se produce la osificación
y osteogénesis, a partir de centros de osificación constituidos por cúmulos de
células especiales formadoras de hueso denominadas osteoblastos. El
aparato de Golgi de los osteoblastos se especializa en la síntesis y secreción
de mucopolisacáridos, y su retículo endoplasmático elabora y secreta una
proteína denominada colágeno. Los mucopolisacáridos se acumulan
alrededor de cada osteoblasto y los haces de fibras colágenas de embeben de
esa sustancia. Todo esto junto constituye la matriz ósea; las fibras colágenas
le dan resistencia. A medida que se forma la matriz ósea, empiezan a
depositarse en ellas compuestos inorgánicos como sales de calcio, que le dan
al hueso su dureza característica. O sea que la osificación consta de dos
procesos:

1- la síntesis de matriz ósea orgánica por los osteoblastos

2- la calcificación de la matriz. La osificación comienza en la diáfisis y avanza


hacia las epífisis. Y luego aparecen centros de osificación secundaria son las
epífisis. Mientras no ha terminado el crecimiento longitudinal del hueso,
queda una capa de cartílago denominada cartílago epifisario entre cada
epífisis y la diáfisis. La proliferación de las células del cartílago epifisario
provoca el crecimiento longitudinal del hueso; cuando los huesos han
alcanzado su longitud máxima, ese cartílago desaparece. Los huesos
aumentan de diámetro por la acción combinada de dos clases de células: los
osteoclastos y los osteoblastos. Los osteoclastos aumentan el diámetro de la
cavidad medular al digerir el hueso de las paredes; los osteoblastos del
periostio producen nuevo hueso en el exterior. Por este doble fenómeno, se
produce un hueso con diámetro mayor y con cavidad medular más extensa.
La formación de tejido óseo prosigue después que los huesos han terminado
de crecer. Durante toda la vida se producen de manera simultánea formación
ósea (osteogénesis) y destrucción ósea (resorción). Durante la infancia y
adolescencia, la osteogénesis tiene un ritmo mayor que la resorción, y los
huesos se vuelven más grandes. A partir de los 35 a 40 años la pérdida de
hueso excede el aumento del mismo.

Clasificación de los huesos: Según su forma, los huesos se clasifican en:

- huesos largos, que son tubulares, constan de diáfisis y epífisis. Tiene


hueso compacto en la diáfisis y hueso esponjoso en el interior de las
epífisis. Por ejemplo: el húmero del brazo.
- Huesos cortos, que son cuboidales, tiene tejido esponjoso salvo en su
superficie. Por ejemplo: huesos del tarso y del carpo.
- Huesos planos, son delgados compuestos por dos placas casi paralelas
de tejido óseo compacto que envuelven a otra de hueso esponjoso.
Brindan protección. Por ejemplo: huesos del cráneo, esternón,
omóplatos.
- Huesos irregulares, que tiene forma compleja. Por ejemplo: vértebras y
algunos huesos de la cara.
- Huesos sesamoideos, están en algunos tendones, a los que protegen
del uso y desgarro excesivos. Por ejemplo: la rótula.

División: El esqueleto humano consta de 206 huesos. Se agrupan en:

- esqueleto axial: formado por 80 huesos. De la cabeza, cuello y tronco.


- esqueleto apendicular formado por 126 huesos. De los miembros,
incluidas las cinturas escapular y pelviana.
Diferencia entre el esqueleto femenino y masculino: Hay diferencias
generales y específicas. La diferencia general es de tamaño y peso, el del
varón es más pesado y grande. Las diferencias específicas se refieren a la
forma de los huesos pélvicos y a la cavidad pelviana. La pelvis masculina es
profunda e infundibuliforme, con arco púbico angosto (menor a 90º). La
pelvis femenina es ancha y poco profunda y extendida hacia los lados, con
ángulo púbico amplio (mayor a 90º).

Enfermedades: Las enfermedades más conocidas que aquejan al sistema


óseo son las siguientes:

Cáncer. Producido en la médula ósea por la multiplicación anormal de ciertas


células (mieloma) o a veces entre las células endurecidas de su parte más
rígida (sarcoma). Conduce al debilitamiento de la estructura y a dolorosos
entumecimientos locales.

Osteoporosis. Se trata de una pérdida crónica del calcio que endurece los
huesos, muy asociada a la edad y a otros procesos propios del cuerpo
humano, ocasionan el adelgazamiento de los huesos y el incremento de su
fragilidad, lo cual requiere de un tratamiento combinado con suplementos de
calcio y ejercicio físico.

Enfermedad de Paget. Se trata de una dolencia congénita que ocasiona el


mal funcionamiento de las células que dan origen al hueso, lo cual conduce al
engrosamiento y ensanchamiento anormal de la estructura del esqueleto.

Raquitismo. Debido a una deficiencia en la ingesta de vitamina D o algún


problema endógeno que impide su absorción, los pacientes con esta
enfermedad presentan un debilitamiento progresivo de los huesos, que los
torna dolorosamente frágiles.
Sistema muscular.

¿Qué es el sistema muscular? El sistema muscular es el conjunto de más de


600 músculos que existen en el cuerpo humano, la función de la mayoría de
los músculos es producir movimientos de las partes del cuerpo. El sistema
muscular crea un equilibrio al estabilizar la posición del cuerpo, producir
movimiento, regular el volumen de los órganos, movilizar sustancias dentro
del cuerpo y producir calor. El sistema muscular del ser humano es vasto y
complejo, constituyendo el 40% del peso de un adulto, generando además la
mayor parte de su calor corporal. Junto con el sistema óseo (huesos) y el
articular (articulaciones), constituye el llamado sistema locomotor,
encargado de los movimientos y desplazamientos del cuerpo. Los músculos
que componen este sistema están compuestos a su vez por células con alto
nivel de especificidad, lo cual les confiere propiedades puntuales como la
elasticidad. Estas células, llamadas miocitos, pueden someterse a
estiramientos y compresiones intensas sin poner en riesgo (hasta cierto
punto) su constitución. Por ello las fibras musculares son tan resistentes y
elásticas.

Tipos principales de músculos: Existen tres tipos esenciales de músculos:

- Músculos esqueléticos o estriados. Se llaman así porque bajo el


microscopio presentan estrías, así como una forma larga característica.
Además, son los que conectan con los huesos del organismo y
permiten el desplazamiento o el movimiento de las extremidades.
- Músculos cardíacos. Como su nombre lo indica, son los músculos de la
pared del corazón (miocardio), y son músculos estriados con
características precisas, ya que requieren estar interconectadas para
poder contraerse y expandirse de manera totalmente sincronizada.
- Músculos lisos. Se les conoce también como viscerales o involuntarios,
ya que no están comprometidos con el movimiento voluntario del
cuerpo, sino con sus funciones internas (sistema nervioso vegetativo
autónomo). Por ejemplo, el movimiento de los intestinos o del tubo
digestivo, o de apertura o cierre del iris en el ojo. Se reconocen
fácilmente pues carecen de estrías como los tipos anteriores.

Partes del sistema muscular: El sistema muscular se compone de una


variedad enorme de músculos, entre los cuales encontramos:

- Músculos fusiformes. Aquellos con forma de huso, gruesos en la parte


central y delgada en los extremos, como los presentes en los miembros
superiores e inferiores. Músculos planos y anchos. Presentes sobre
todo en la pared abdominal, movilizan y protegen a los órganos
internos inferiores.
- Músculos abanicoides. Como su nombre lo indica tienen forma de
abanico, y dos ejemplos importantes son los pectorales (en el pecho) y
los temporales (en la mandíbula).
- Músculos circulares. Presentan forma de anillo, por lo que sirven para
cerrar (al contraerse) o abrir (al relajarse) diversos conductos, como el
orificio anal por el que defecamos.
- Músculos orbiculares. Semejantes a los fusiformes, pero tienen un
orificio en el centro, por lo que permiten abrir y cerrar otras
estructuras. Un ejemplo es el músculo orbicular que hay en nuestros
párpados.
Funciones del sistema muscular:
- El sistema muscular es vital para el organismo, ya que se ocupa de
mantener las cosas en movimiento. Por ejemplo, el corazón es un
órgano que no puede cesar de bombear sangre, pues nos ocasionaría
la muerte.
- Por ende, sus músculos deben ser fuertes y estar diseñados para el
ejercicio continuo. Del mismo modo, los movimientos digestivos,
desde la tráquea a los intestinos, son responsabilidad muscular, o los
respiratorios.
- En segundo lugar, la musculatura permite el movimiento voluntario,
que es la mejor forma de lidiar con el entorno para los seres vivientes:
nos permite movilizar el esqueleto y desplazarnos para cambiar de
lugar, o usar de un modo específico nuestras extremidades y construir
alimentos, acariciar a nuestros seres queridos o defendernos de un
atacante.
- Incluso gestos tan simples como mover nuestros ojos o sonreír, se
deben a la acción puntual de algún conjunto de músculos del cuerpo
Enfermedades del sistema muscular: Los músculos pueden ser aquejados
por dolencias de distinto tipo, tales como:

- Desgarros. Rupturas parciales del tejido muscular que, si bien pueden


repararse solas con el tiempo, por lo general disminuyen la capacidad
motriz y resultan sumamente dolorosas.
- Calambres. Contracciones dolorosas e involuntarias de un músculo
puntual, debido a fatiga extrema o a desbalances en la química
muscular.
- Atrofia. Debido a falta de uso prolongado, a enfermedades o a
traumatismos importantes, los músculos pueden cesar de funcionar y
volverse atrofiados, es decir, perder el volumen de su tejido.
- Poliomielitis. Producida por un virus, esta enfermedad realmente
aqueja al sistema nervioso, pero al paralizar los impulsos eléctricos
ocasiona una atrofia artificial sobre la musculatura.
Anexos.
Sistema óseo:
Sistema muscular:

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