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Muchas son las corrientes y estudios que afirman la importancia de la música en los

primeros años de vida. Ya en el siglo XIX y principios del XX, la Escuela Nueva considera
que la música debe abarcar al hombre en su totalidad. Asimismo, pedagogos de Educación
Infantil como Montessori, Decroly, las hermanas Agazzi, etc. también inciden en la
importancia de la música en esta etapa. Y, del mismo modo, propuestas pedagógicas del
siglo XX como las deKodály, Orff, Willems, Dalcroze, fueron otorgando y destacando el
valor que tenía la educación musical en la escuela. (Díaz, 2005; Pascual, 2011). Es por ello
que, desde hace varios siglos, se viene estudiando y destacando la música como un
elemento fundamental para el desarrollo del niño/a. Los niños/as están en contacto incluso
antes de nacer con la música, con los sonidos del ambiente que le rodea, de la madre, el
padre, el bebé se desarrolla en un entorno sonoro diverso y complejo, por lo que la
educación musical puede comenzar desde incluso antes de nacer el bebé, y puede iniciarse
en el seno materno si la madre canta o escucha música.
Además Bernal y Calvo (2000) afirman que cuando un niño ha recibido una temprana
educación musical éste tiene un alto nivel académico, ya que se fomenta en él el
pensamiento lógico y la capacidad de razonamiento, así como un buen aprendizaje de la
lecto-escritura. Esta opinión también la comparte Sarget (2003) quien aporta una serie de
beneficios que hace que la música fomente el desarrollo integral del alumnado. Desde
nuestro punto de vista estos beneficios también se comparten con el canto y las canciones.
Desde el ámbito cognitivo la música y el canto favorecen el desarrollo de la atención, la
discriminación auditiva y la memoria auditiva, táctil y visual. Consideramos que esto es
cierto porque el niño cuando escucha distintos sonidos o ritmos debe quedarse con ellos
para poder reproducirlos correctamente, al igual que cuando toca un instrumento debe tener
esa memoria táctil para recordar más tarde como se tocaba y las partes que lo conforman.
Además, el niño debe tener cierta discriminación auditiva para poder diferenciar entre
distintos sonidos musicales.

bibliografía

Sarget, M.A. (2003). La música en la Educación Infantil: estrategias cognitivomusicales. Revista de


la facultad de Educación de Albacete, 18, 197-209.

Bernal, J. y Calvo, M.L. (2000). Didáctica de la música. La expresión musical en la educación infantil.
Málaga: Aljibe.

Díaz, M. (2004). La educación musical en la etapa 0-6 años. Revista Electrónica de leeme, 14, 1-6.
Recuperado de http://musica.rediris.es/leeme/revista/diazinf.pdf

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