Está en la página 1de 7

http://bvs.minsa.gob.pe/local/MINSA/1077_DGSP265.

pdf

Descripción, resultados y análisis de la medición del desempeño de la ASN del Perú, de las
tres (3) primeras FESP.

FESP 1: Monitoreo y análisis de la situación de salud de la población


La FESP 1 alcanzó un 73% de desempeño, considerado como nivel medio superior, sus
cinco indicadores se encuentran por encima del 50%, mostrando con ello un desarrollo
importante en monitoreo y evaluación del estado de salud, que incluyen recursos, procesos
e infraestructura tecnológica y de asesoría y apoyo técnico. Estas cifras muestran el
esfuerzo que viene desplegando la Autoridad Sanitaria Nacional para el análisis de la
información en salud, esto aunado a la transferencia de capacidades a los niveles
subnacionales, y la generación de mayor número de recursos humanos capacitados para el
monitoreo, evaluación y análisis de la situación de salud (ASIS), el mismo que se refleja en
la producción periódica de información sobre la situación de salud desde los diferentes
niveles; local, subnacional y nacional. Es preciso reconocer las debilidades todavía
presentes; como la limitada utilización del ASIS para la planificación estratégica y monitoreo
de la gestión, desarrollo heterogéneo del proceso ASIS en los otros subsectores, la
insuficiente cobertura y calidad de los sistemas de información en salud. Por lo expuesto se
hace necesario plantear alternativas que nos permitan impulsar metodologías que permitan
el enlace o vinculación del ASIS con la planificación estratégica y el monitoreo de la gestión,
así como adecuar la información para su difusión a los niveles comunitarios.
FESP 2: Vigilancia de salud pública, investigación y control de riesgos y daños en salud
pública

La FESP 2 alcanzó un 86% de desempeño, considerado como nivel óptimo; todos sus
indicadores superan el estándar del 50%, los indicadores 1, 2, 3 y 5 muestran un
desempeño óptimo, en tanto que el indicador 4 alcanzó un desempeño medio superior
(75%). Los resultados obtenidos en esta FESP denotan el liderazgo asumido por la
Autoridad Sanitaria Nacional en relación al sistema de vigilancia en salud pública,
demostrando su capacidad y experticia, la misma que realiza en forma oportuna y efectiva
el control de problemas de salud pública, la respuesta de sus laboratorios, con un gran
esfuerzo en brindar asesoría y apoyo técnico a los niveles regionales, así también su
participación para la intervención en el ámbito internacional. Queda pendiente trabajar sobre
la débil articulación de los subsistemas de vigilancia, definir el rol de la comunidad en el
sistema de vigilancia, la inclusión de la información del Instituto de Medicina Legal en el
sistema de vigilancia, impulsar el uso del Sistema de Información Geográfica, la inclusión de
indicadores que nos permitan evidenciar el uso de la información generada, incorporar
información de los estilos de vida y de los determinantes de riesgo
FESP 3: Promoción de la salud

La FESP 3 ha alcanzado un desempeño de 67%, considerado como un nivel de desempeño


medio superior, en tanto que sus indicadores 1, 2, 3 y 5 han alcanzado un valor superior al
estándar, lo cual evidencia una preocupación por el desarrollo de alianzas intersectoriales y
programas educativos para la promoción de la salud. El indicador 4, ha alcanzado un valor
inferior al estándar. Estos resultados muestran que la ASN cuenta con un marco normativo,
permitiendo desarrollar una mayor coordinación intra e intersectorial, mejorando las redes
de comunicación. Sin embargo, aún es necesario ampliar la asesoría y apoyo técnico a los
niveles subnacionales y cambiar la cultura asistencialista. Adicionalmente no se cuenta aún
con un adecuado registro de actividades de comunicación. Se debe incorporar el enfoque
de determinantes de la salud, fortalecer los mecanismos de asistencia, asesoría y apoyo
técnico a los niveles subnacionales, definir los perfiles de los equipos de comunicación y los
registros de las actividades de comunicación, incluir en los acuerdos de gestión indicadores
de promoción de la salud.
Descripción, resultados y análisis de la medición del desempeño de las 4-7 (4) FESP de la
Autoridad Sanitaria Nacional de Perú.

La FESP 4 ha alcanzado un desempeño de 65%, considerado como un nivel de desempeño


medio superior, en tanto que sus indicadores 1 y 3 han alcanzado un valor superior al
estándar, lo cual evidencia el avance de la participación ciudadana en la toma de decisiones
en salud pública con la asesoría y apoyo técnico que el MINSA brinda a los niveles
subnacionales. Si bien es cierto se alcanzó un valor por debajo del estándar en el indicador
2, se refleja un avance en la participación social en salud. Los resultados alcanzados
revelan que la ASN cuenta con fortalezas en aspectos relacionados a la existencia de
políticas que fomentan la participación ciudadana, el reconocimiento y apoyo a las
iniciativas de participación ciudadana a nivel subnacional, la creación de la Oficina General
de Transparencia y Defensoría de la Salud, los mecanismos desarrollados e implementados
para involucrar a la sociedad civil en acciones de salud. Es necesario implementar las
defensorías a nivel regional y local, expansión de la experiencia INFOSALUD a nivel
subnacional, promover mecanismos de respuesta a la opinión ciudadana, promover e
incentivar la participación ciudadana en los diagnósticos y planes participativos locales.
La FESP 5 alcanzó un desempeño de 37%, considerado como desempeño medio inferior.
Todos los indicadores muestran desempeños por debajo del estándar, siendo el indicador 5
el que tiene el desempeño más bajo. Los primeros cuatro indicadores de esta FESP
alcanzaron un desempeño medio inferior, con crecimientos simétricos y que dado el
contexto aún esta función debe desarrollarse y consolidarse. La definición de objetivos en
salud pública a nivel de la Autoridad Sanitaria Nacional se encuentra en un período de inicio
en relación al involucramiento y participación de los diversos actores del sector. En los
niveles subnacionales esta FESP se encuentra todavía en una etapa inicial a partir de
experiencias de consulta cuidadana y cabildos abiertos para la definición de prioridades
sanitarias y objetivos en salud pública. El monitoreo y evaluación de las políticas de salud
pública tiene un desarrollo parcial, habiendo la ASN promovido en los últimos años el
desarrollo de competencias de los funcionarios del sector. La capacidad institucional de
gestión de salud pública esta en proceso evolutivo, en donde se identifican debilidades que
requieren de liderazgo, fortalecimiento de la organización y gestión de recursos que incluye
el desarrollo de competencias; en los últimos años se ha evidenciado desarrollos
intermedios en el planeamiento estratégico y la toma de decisiones basadas en evidencias.
Así mismo, es necesario redefinir un sistema que permita detectar en forma rápida y precisa
las necesidades de mejoramiento de gestión de los niveles subnacionales que oriente hacia
una asesoría y apoyo técnico oportunos y que permita un proceso de retroalimentación
permanente. En relación a la gestión de la cooperación internacional se identifica que
existen recursos limitados para desarrollar esta función. Se requiere fortalecer la asesoría y
apoyo técnico a los niveles regionales y locales para el desarrollo de políticas, planificación
y gestión de las mismas. Asimismo es necesario establecer mecanismos de participación
social efectiva, fortaleciendo el rol del Consejo Nacional de Salud, los Consejos Regionales
y Provinciales de Salud, lo que permitiría consolidar la elaboración de un Plan Nacional de
Salud Concertado, en el que se incluyen las políticas prioritarias de salud.
La FESP 6 alcanzó un desempeño de 30%, considerado como desempeño medio inferior.
Los indicadores 1, 2 y 4 logran desempeños por debajo del estándar de 50% y el indicador
3 tiene un desempeño igual al estándar. Los resultados muestran que en los últimos años
se han mejorado las competencias para la elaboración y actualización de normas y
documentos técnicos a nivel de todas las direcciones de la ASN, evidenciado en la
producción de normatividad. En el Ministerio de Salud, la Dirección General de Salud de las
Personas, cuya función es fundamentalmente normativa, logró entre los años 2004 y 2006
el 86% de la producción de normas de los últimos cinco años (ver Capítulo IV). Así mismo
se ha fortalecido la capacidad de convocatoria por parte del Ministerio de Salud, para
cumplir con la función normativa, logrando la participación de los diversos actores
involucrados como funcionarios de establecimientos de salud de diversa complejidad,
direcciones de línea del Ministerio de Salud, otros subsectores (EsSalud, Fuerzas Armadas
y Policiales, ONGs, privados, sociedad civil, entre otros). Se han generado nuevos espacios
de participación ciudadana para la formulación de normas, con la finalidad de garantizar la
objetividad, que tenga el alcance sectorial y de beneficio a la población, que considere a
todos los actores como parte del desarrollo alcanzado y con ello dar sostenibilidad al
proceso de implementación en razón del sentido de propiedad a nivel del sector. Es
necesario fortalecer la capacidad fiscalizadora por la ASN y el desarrollo de instrumentos y
el marco legal para cumplir con esta responsabilidad. Considerando que es una función que
adquiere mayor relevancia en el proceso de descentralización sectorial y en el ejercicio de
rectoría de la ASN, resulta necesario fortalecer los procesos relacionados a la
implementación de las normas y su cumplimiento, significando ello una mayor asesoría y
apoyo técnico a los niveles subnacionales, y ver como una oportunidad a las instancias del
Sistema Nacional Coordinado y Descentralizado de Salud para fortalecer el liderazgo de la
ASN y afianzar más su rol rector normativo y regulador. Cabe mencionar, que el Ministerio
de Salud, en uno de los esfuerzos más importantes desarrollados especialmente para
garantizar el proceso de protección y recuperación de la salud, elaboró la Norma Técnica de
Supervisión Integral, la cual se implementó a nivel nacional (ver Capítulo IV) y que ha
permitido evaluar aspectos de gestión, de atención por etapas de vida y la gestión de las
Estrategias Sanitarias Nacionales a nivel de las Direcciones Regionales de Salud y
Direcciones de Salud, que en el marco de descentralización les permite contar con un
instrumento que les brinda información clave para la toma de decisiones.
La FESP 7, en el 2006, alcanzó un desempeño de 81.5%, considerado como óptimo, los
indicadores 1, 2 y 4 alcanzaron un desempeño óptimo, mientras que el indicador 3 alcanzó
un desempeño medio superior. Los resultados en el 2006, muestran el avance importante
logrado en el monitoreo y evaluación del acceso a los servicios de atención individual y de
salud colectiva y el desarrollo en su implementación; se han fortalecido las estrategias para
acercar los servicios de salud a la población, para brindar información acerca de sus
derechos en salud, se ha fomentado la adopción de leyes y regulaciones para aumentar el
acceso a los servicios de los más necesitados. En el indicador 4 se ha logrado un
desempeño del 100% correspondiente a la asesoría y apoyo técnico a los niveles
subnacionales de salud pública. El contar con el Seguro Integral de Salud y el desarrollo de
trabajo de la estrategia de Atención Integral de Salud a Poblaciones Excluidas y Dispersas
(AISPED) han contribuido a mejorar el acceso a los servicios de salud, priorizando a la
población más vulnerable, pobre y dispersa del país cumpliendo con los lineamientos de
política del sector salud. Es necesario fortalecer las estrategias de coordinación, evaluación
y monitoreo con participación de los niveles nacional, regional y local; coordinar con los
demás subsectores considerando el marco de descentralización sectorial a fin de asegurar
los servicios de salud en las poblaciones de difícil acceso, así como identificar
permanentemente las barreras de acceso a lo servicios de salud y las poblaciones de riesgo
para una adecuada evaluación local y regional. Se hace necesaria la retroalimentación
periódica a los actores principales para la toma de decisiones, implementar políticas de
distribución de profesionales de la salud a fin de disminuir la brecha de acceso a los
servicios de salud y desarrollar un plan de incentivos para lograr la permanencia del
personal de salud en las zonas de menor desarrollo y fronterizas. En este contexto resulta
importante la formación de alianzas innovadoras, el involucramiento y participación de los
diversos actores involucrados en salud tanto a nivel nacional como regional, la coordinación
con proveedores y programas complementarios, con el fin de fortalecer y promover el
acceso a los servicios de salud.

También podría gustarte