Tema: La justicia de Dios

Titulo: ¿Cómo se produce la verdadera justicia?

Texto Mateo 5:17-20

Introducción

Dios le entrego a Israel su ley y mandamientos, como preparación para un nuevo

pacto a través de Jesús si Hijo.

La actitud de Jesús hacia la ley y sus tres posibles relaciones

I Abolir la ley

a. Jesús parecía desafiar la ley sanando en días de reposo y no observando las

tradiciones de los fariseos.
b. Jesús era amigo de los publicamos y los pecadores
c. Los que intentaban cumplir la ley en realidad la estaban destruyendo con sus
acciones hipócritas (Mateo 23:3)
d. Hicieron la ley carente de vida, no estaba en su corazón (Isaias 29:13)
e. La religión era muerta, artificial, los hacía arrogantes
f. Jesús nos lleva a amar la ley, aprenderla y ponerla en práctica.

II Cumplimiento de la ley

a. Jesús cumplió la ley al nacer y vivir conforme a ella, siendo aceptado por el
Padre.
b. Jesús cumplió la ley con sus enseñanzas (Mateo 5:20,28,32,34-37,44)
c. Dio cumplimiento a la ley con su muerte y resurrección al hacer justicia de
Dios (Gálatas 3:13)
d. Ahora nuestra relación con Dios no es por medio de la ley (hechos 7:48,
hebreos 10:19)
e. Ahora cumplimos la ley al vivir en el Espíritu (Romanos 8:1-3; gálatas 5:25;
2:20)
f. Obtenemos justicia de Dios no por la ley sino por la fe en Jesús el Hijo de
Dios (Gálatas 3:11)
g. La única manera en que podemos experimentar la justicia Dios es mediante
el poder de Cristo

III Práctica y enseñanza de la ley

a. La ley fue dada por causa del pecado y el pecador ( 1 Timoteo 1:9-11)
b. Donde no hay ley no se inculpa de pecado (Romanos 5:13)
 c. La ley de Dios sigue vigente en el nuevo pacto (Nehemias 9:14)
d. El quiere que la conozcamos, la Obedezcamos y la enseñemos (Mateo 28:19-
20)
e. Es la ley del Espíritu sellada en el interior, en el corazón del que ha sido
justificado
f. Es la ley del amor, en la que el Espíritu Santo nos enseña la Palabra de Dios
y nos capacita para obedecerla
g. El pecado sigue siendo pecado y trae consecuencias y castigo

Conclusión

El Señor Jesús fue acusado de destruir la ley, pero El con su vida en obediencia al
Padre dio cumplimiento a la ley satisfizo la justicia de Dios y ahora nos comisiona a
conocerla, ponerla en practica y enseñarla a otros