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Índice

Introducción
Contaminación del Suelo
La contaminació n del suelo consiste en la introducció n en el mismo de sustancias contaminantes, ya
sea el suelo, debido al uso de pesticidas para la agricultura; por riego con agua contaminada; por el
polvo de zonas urbanas y las carreteras; o por los relaves mineros y desechos industriales
derramados en su superficie, depositados en estanques o enterrados.

La contaminació n del suelo se define como la acumulació n en éste de compuestos tó xicos


persistentes, productos químicos, sales, materiales radiactivos o agentes pató genos, que tienen
efectos adversos en el desarrollo de las plantas y la salud de los animales. La creciente cantidad de
fertilizantes y otros productos químicos agrícolas que fueron aplicados a los suelos después de la II
Guerra Mundial, sumada a las prá cticas de vertido de residuos industriales y domésticos, llevó a
una progresiva preocupació n por la contaminació n de los suelos a mediados de la década de 1960.
Aunque el empleo de fertilizantes que contienen nutrientes primarios, nitró geno, fó sforo y potasio,
no ha producido contaminació n de los suelos, la aplicació n de elementos traza sí lo ha hecho. El
riego de suelos á ridos lleva frecuentemente a la contaminació n por sales. El azufre procedente de
los residuos industriales ha contaminado los suelos en el pasado, al igual que la acumulació n de
compuestos de arsénico tras añ os de fumigació n de las cosechas con arseniato de plomo. La
utilizació n de pesticidas ha llevado también a la contaminació n a corto plazo del suelo.

La efectividad de un pesticida, así como los riesgos que representan sus residuos dañ inos,
dependen en gran medida del tiempo que éste perdura en el suelo. Por ejemplo, el DDT, un
hidrocarburo clorado, tiene una vida media de tres añ os en suelos cultivados, mientras que los
insecticidas organofosforados só lo permanecen durante días o meses. Los hidrocarburos clorados
persisten má s tiempo en suelos con un alto contenido en materia orgá nica, ademá s es necesario
emplear má s cantidad del producto para aniquilar a las plagas (véase Control de plagas). Los
insecticidas se mantienen má s tiempo si se introducen en el suelo en vez de dejarlos en la
superficie. Los herbicidas aplicados a los suelos pueden no permanecer en absoluto o hacerlo
durante dos añ os o má s, dependiendo del compuesto. La simi-asina es uno de los herbicidas má s
persistentes, aunque todos acaban desapareciendo por evaporació n, lixiviació n, absorció n por las
plantas, descomposició n química y microbiana, así como por foto-descomposició n.

Ajuste y Acidez del Suelo

El mantenimiento de una acidez específica es importante en el acondicionamiento del suelo con el


fin de controlar la adaptació n de los diversos cultivos y de la vegetació n nativa a diferentes suelos.
Por ejemplo, los ará ndanos só lo se pueden cultivar con éxito en suelos de acidez moderada a
extrema, mientras que la alfalfa y otras leguminosas só lo se desarrollan bien en suelos levemente
á cidos o ligeramente alcalinos. El procedimiento habitual para corregir el exceso de acidez de un
suelo es la aplicació n de cal en forma de caliza, caliza dolomítica, o cal muerta. Cuando se añ ade cal,
el hidró geno del complejo coloide del suelo es sustituido por el calcio de la cal. Los suelos á cidos se
encuentran fundamentalmente en regiones de pluviosidad elevada; en las regiones á ridas, los
suelos son normalmente alcalinos.

Control Mecá nico de la Erosió n

La pérdida mecá nica de la capa fértil del suelo es uno de los problemas má s graves de la agricultura.
Esta pérdida se debe casi siempre a la erosió n producida por la acció n del agua y el viento sobre la
superficie. Para má s informació n sobre los diversos métodos empleados para combatir la erosió n.

Formas de Contaminación

La mayoría de los procesos de pérdida y degradació n del suelo son originados por la falta de
planificació n y el descuido de los seres humanos. Las causas má s comunes de dichos procesos son:

 Erosión

La erosió n corresponde al arrastre de las partículas y las formas de vida que conforman el suelo por
medio del agua (erosió n hídrica) y el aire (erosió n eó lica). Generalmente esto se produce por la
intervenció n humana debido a las malas técnicas de riego (inundació n, riego en pendiente) y la
extracció n descuidada y a destajo de la cubierta vegetal (sobrepastoreo, tala indiscriminada y
quema de la vegetació n).

 Contaminación

La contaminació n de los suelos se produce por el depó sito de sustancias químicas y basuras. Las
primeras pueden ser de tipo industrial o domésticas, ya sea a través de residuos líquidos, como las
aguas servidas de las viviendas, o por contaminació n atmosférica, debido al material articulado que
luego cae sobre el suelo.

 Compactación

La compactació n es generada por el paso de animales, personas o vehículos, lo que hace


desaparecer las pequeñ as cavernas o poros donde existe abundante micro-fauna y micro-flora.

 Expansión urbana

El crecimiento horizontal de las ciudades es uno de los factores má s importantes en la pérdida de


suelos. La construcció n en altura es una de las alternativas para reducir el dañ o.
Contaminantes biológicos
En general: todos los agentes representados por organismos vivos (la mayoría suelen que ser
microorganismos como bacterias, virus, hongos etcétera).

Se puede imaginar por ejemplo la existencia de un microclima dentro de una mina subterrá nea que
favorece el crecimiento de hongos.
Falta de higiene alrededor de una mina / plata puede favorecer la presencia de pará sitos o otros
portadores de enfermedades como ratas - seguramente un problema mas frecuente en la minería
artesanal que en la gran minería).

Contaminantes químicos
Los agentes químicos representan seguramente el grupo de contaminantes má s importante -
debido a su gran nú mero y a la omnipresencia en todos los campos laborales y en el medio
ambiente.

Como contaminantes químicos se puede entender toda sustancia orgá nica e inorgá nica, natural o
sintética que tiene probabilidades de lesionar la salud de las personas en alguna forma o causar
otro efecto negativo en el medio ambiente.
Los agentes químicos pueden aparecer en todos los estados físicos.

Contaminantes Gaseosos
Gases propiamente dichos, vapores (sustancias de estado normal liquido o só lido - vapor de
mercurio por ejemplo) y humos (resultado de la combustió n de sustancia orgá nica - también puede
ser clasificado como só lido

Fuentes de contaminantes gaseosos pueden ser por ejemplo:

 Emisiones continuas como: La descarga de chimeneas, quema de mercurio a aire libre,


emisiones de maquinas, vehículos y del trá nsito en general, des aireació n de tanques y
emanaciones volá tiles de la superficie de lagunas de residuos

 Emisiones instantá neas / momentá neas como todo tipo de emisió n accidental (por ejemplo
incendios)

Los contaminantes gaseosos son importantes para la geología ambiental cuando las sustancias
precipitan con el peligro de contaminar suelo o agua.

En cambio, contaminantes só lidos y líquidos pueden ser liberados directamente al sistema suelo /
agua subterrá nea con los efectos ambientales correspondientes.

Sólido
El grupo de sustancias só lidas incluye sustancias como minerales de asbestos, sustancias
contaminantes adsorbidas a partículas só lidas, só lidos en suspensió n y también los polvos (los
ú ltimos dos con cará cter transitorio entre só lido y gaseoso).

Contaminantes sólidos también pueden ser distintos tipos de basura como por ejemplo:

 Suelo / roca excavado o residuos de la construcció n (en general no tó xico, pero con la
problema de almacenarlo en alguna parte)

 Basura domestico / industrial en general

Otras sustancias que hay que considerar como residuos especiales o tó xicos

Contaminantes Sólidos
El grupo de sustancias só lidas incluye sustancias como minerales de asbestos, sustancias
contaminantes adsorbidas a partículas só lidas, só lidos en suspensió n y también los polvos (los
ú ltimos dos con cará cter transitorio entre só lido y gaseoso).

Contaminantes sólidos también pueden ser distintos tipos de basura como por ejemplo:

 Suelo / roca excavado o residuos de la construcció n (en general no tó xico, pero con la
problema de almacenarlo en alguna parte)

 Basura domestico / industrial en general

Otras sustancias que hay que considerar como residuos especiales o tó xicos

Agentes
Cuando en el suelo depositamos de forma voluntaria o accidental diversos productos como papel,
vidrio, plá stico, materia orgá nica, materia fecal, solventes, plaguicidas, residuos peligrosos o
sustancias radioactivas, etc., afectamos de manera directa las características físicas, químicas y
de este, desencadenando con ello innumerables efectos sobre seres vivos.

 Plaguicidas

La població n mundial ha crecido en forma


abismante en estos ú ltimos 40 a 50 añ os. Este
aumento demográ fico exige al hombre un gran
desafío en relació n con los recursos alimenticios, lo
cual implica una utilizació n má s intensiva de los
suelos, con el fin de obtener un mayor rendimiento
agrícola.
En agricultura, la gran amenaza son las plagas, y en el intento por controlarlas se han utilizado
distintos productos químicos.

Son los llamados plaguicidas y que representan también el principal contaminante en este á mbito,
ya que no só lo afecta a los suelos sino también, ademá s de afectar a la plaga, incide sobre otras
especies. Esto se traduce en un desequilibrio, y en contaminació n de los alimentos y de los
animales.

Tipos de plaguicidas

Existen distintos tipos de plaguicidas y se clasifican de acuerdo a su acció n.

 Insecticidas

Se usan para exterminar plagas de insectos. Actú an sobre larvas, huevos o insectos adultos. Uno de
los insecticidas má s usado es el DDT, que se caracteriza por ser muy rá pido. Trabaja por contacto y
es absorbido por la cutícula de los insectos, provocá ndoles la muerte. Este insecticida puede
mantenerse por 10 añ os o má s en los suelos y no se descompone.

Se ha demostrado que los insecticidas ó rgano clorados, como es el caso del DDT, se introducen en
las cadenas alimenticias y se concentran en el tejido graso de los animales. Cuanto má s alto se
encuentre en la cadena -es decir, má s lejos de los vegetales- má s concentrados estará el insecticida.
Por ejemplo si se tiene:

En todos los eslabones de la cadena, existirá n dosis de insecticida en sus tejidos. Sin embargo, en el
carnívoro de 2do. orden, el insecticida estará mucho má s concentrado.

Hay otros insecticidas que son usados en las actividades hortofrutícolas; son biodegradables y no se
concentran, pero su acció n tó xica está asociada al mecanismo de transmisió n del impulso nervioso,
provocando en los organismos contaminados una descoordinació n del sistema nervioso.

 Herbicidas

Son un tipo de compuesto químico que destruye la vegetació n, ya que impiden el crecimiento de los
vegetales en su etapa juvenil o bien ejercen una acció n sobre el metabolismo de los vegetales
adultos.

 Fungicidas

Son plaguicidas que se usan para combatir el desarrollo de los hongos (fitopará sitos). Contienen
azufre y cobre.

 Actividad minera

La actividad minera también contamina los suelos, a través de las aguas de relave. De este modo,
llegan hasta ellos ciertos elementos químicos como mercurio (Hg), cadmio (Cd), cobre (Cu),
arsénico (As), plomo (Pb), etcétera. Por ejemplo: el mercurio que se origina en las industrias de
cemento, industria del papel, plantas de cloro y soda, actividad volcá nica, etcétera.
Algunos de sus efectos tó xicos son: alteració n en el sistema nervioso y renal. En los niñ os, provoca
disminució n del coeficiente intelectual; en los adultos, altera su carácter, poniéndolos má s
agresivos.

Otro caso es el arsénico que se origina en la industria minera. Su existencia es natural en la II


Regió n. Este mineral produce efectos tó xicos a nivel de la piel, pulmones, corazó n y sistema
nervioso.

 Basura

La destrucció n y el deterioro del suelo son muy frecuentes en las ciudades y sus alrededores, pero
se presentan en cualquier parte donde se arroje basura o sustancias contaminantes al suelo mismo,
al agua o al aire.

Cuando amontonamos la basura al aire libre, ésta permanece en un mismo lugar durante mucho
tiempo, parte de la basura orgá nica (residuos de alimentos como cá scaras de fruta, pedazos de
tortilla, etc.) se fermenta, ademá s de dar origen a mal olor y gases tó xicos, al filtrarse a través del
suelo en especial cuando éste es permeable, (deja pasar los líquidos) contamina con hongos,
bacteria, y otros microorganismos pató genos (productores de enfermedades), no só lo ese suelo,
sino también las aguas superficiales y las subterrá neas que está n en contacto con él,
interrumpiendo los ciclos biogeoquímicos y contaminado las cadenas alimenticias.

Consecuencias
Dada la facilidad de transmisió n de contaminantes del suelo a otros medios como el agua o la
atmó sfera, será n estos factores los que generan efectos nocivos, aun siendo el suelo el responsable
indirecto del dañ o.

La presencia de contaminantes en un suelo supone la existencia de potenciales efectos nocivos para


el hombre, la fauna en general y la vegetació n. Estos efectos tó xicos dependerá n de las
características toxicoló gicas de cada contaminante y de la concentració n del mismo. La enorme
variedad de sustancias contaminantes existentes implica un amplio espectro de afecciones
toxicoló gicas cuya descripció n no es objeto de este trabajo.

De forma general, la presencia de contaminantes en el suelo se refleja de forma directa sobre la


vegetació n induciendo su degradació n, la reducció n del nú mero de especies presentes en ese suelo,
y má s frecuentemente la acumulació n de contaminantes en las plantas, sin generar dañ os notables
en estas. En el hombre, los efectos se restringen a la ingestió n y contacto dérmico, que en algunos
casos a desembocado en intoxicaciones por metales pesados y má s fácilmente por compuestos
orgá nicos volá tiles o semi-volá tiles.

Indirectamente, a través de la cadena tró fica, la incidencia de un suelo contaminado puede ser má s
relevante. Absorbidos y acumulados por la vegetació n, los contaminantes del suelo pasan a la fauna
en dosis muy superiores a las que podrían hacerlo por ingestió n de tierra.

Cuando estas sustancias son Bio-acumulables el riesgo se amplifica al incrementarse las


concentraciones de contaminantes a medida que ascendemos en la cadena tró fica, en cuya cima se
encuentra el hombre.
Las precipitaciones ácidas sobre determinados suelos originan, gracias a la capacidad
intercambiadora del medio edá fico, la liberació n del ion aluminio, desplazá ndose hasta ser
absorbido en exceso por las raíces de las plantas, afectando a su normal desarrollo.

En otros casos, se produce una disminució n de la presencia de las sustancias químicas en el estado
favorables para la asimilació n por las plantas. Así pues, al modificarse el pH del suelo, pasando de
bá sico a á cido, el ion manganeso que está disuelto en el medio acuoso del suelo se oxida,
volviéndose insoluble e inmovilizá ndose.

A este hecho hay que añ adir que cuando el pH es bajo las partículas coloidales como los ó xidos de
hierro, titanio, cinc, etc.… que pueden estar presentes en el medio hídrico, favorecen la oxidació n
del ion manganeso.

Esta oxidació n se favorece aun má s en suelos acidificados bajo la incidencias de la luz solar en las
capas superficiales de los mismos, produciéndose una actividad fotoquímica de las partículas
coloidales anteriormente citadas, ya que tienen propiedades semiconductoras.

Otro proceso es el de la bio-metilizació n, que es un proceso por el cual reaccionan los iones
metá licos y determinadas sustancias orgá nicas naturales, cambiando radicalmente las propiedades
físico-químicas del metal. Es el principal mecanismo de movilizació n natural de los cationes de
metales pesados.

Los metales que ofrecen má s afinidad para este proceso son: mercurio, plomo, arsénico y cromo.

Los compuestos argo-metá licos así formados suelen ser muy liposolubles y salvo casos muy
puntuales, las consecuencias de la Bio-metilizació n natural son irrelevantes, cuando los mentales
son añ adidos externamente en forma de vertidos incontrolados, convirtiéndose realmente en un
problema.

Aparte de los anteriores efectos comentados de forma general, hay otros efectos inducidos por un
suelo contaminado:

 Degradació n paisajística: la presencia de vertidos y acumulació n de residuos en lugares no


acondicionados, generan una pérdida de calidad del paisaje, a la que se añ adiría en los casos
má s graves el deterioro de la vegetació n, el abandono de la actividad agropecuaria y la
desaparició n de la fauna.

 Pérdida de valor del suelo: econó micamente, y sin considerar los costes de la recuperació n
de un suelo, la presencia de contaminantes en un á rea supone la desvalorizació n de la
misma, derivada de las restricciones de usos que se impongan a este suelo, y por tanto, una
perdida econó mica para sus propietarios.

CONTROL

Se puede definir el tratamiento y recuperació n de suelos contaminados como un conjunto de


operaciones que se deben realizar con el objetivo de controlar, disminuir o eliminar los
contaminantes y sus efectos.
Una de las posibles divisiones de los sistemas de tratamiento se establece en funció n de tres
categorías de actuació n:

No recuperación

Cuando se opta por la medida de no recuperació n del espacio, se debe tener en cuenta que se parte
de un espacio contaminado, aunque el estudio de viabilidad determine esa opció n. Así pues, se tiene
que registrar la localizació n real del espacio.

Esta sencilla solució n evita una gama de problemas importantes generados a posterior, por un uso
del suelo para el que ya no es adecuado (agricultura, residencial, espacios de ocio,…).

Contención o aislamiento

Consiste en establecer medidas correctas de seguridad que puedan controlar la situació n presente,
impidiendo la progresió n de la contaminació n en el medio y mitigando riesgos relacionados con
esta dispersió n de contaminantes.

 Aislamiento: Consiste en aislar el foco emisor de la contaminació n, limitando el potencial


de migració n y difusió n de los contaminantes mediante la construcció n de barreras
superficiales y/o subterrá neas, de forma que se impida la movilizació n horizontal de los
contaminantes. Esta tecnología suele usarse como medida temporal para evitar la
generació n de lixiviados, la entrada de los contaminantes en los cursos de agua o la
infiltració n en las aguas subterrá neas.
 Reducción de las volatilizaciones: Pretende suprimir las corrientes de aire, para evitar la
volatilizació n de compuestos orgá nicos. Los métodos incluyen la reducció n del volumen de
poros del suelo, mediante la adició n de agua, o por compactació n o el sellado de la capa
superficial del suelo mediante coberturas (con membranas sintéticas, arcillas, asfalto,
cemento,…).
 Control de lixiviados: El objeto es impedir la dispersió n de contaminantes a través de las
aguas recogiendo los lixiviados procedentes del suelo contaminado en aquellas situaciones
en que ello sea posible, como en vertederos controlados de residuos só lidos urbanos. Otro
sistema de control consiste en el bombeo de las aguas subterrá neas afectadas por la
lixiviació n de los contaminantes.

Recuperación

La elaboració n de un plan de saneamiento precisa una cierta delimitació n del resultado mínimo a
alcanzar.

Se dividen en dos tipos de tratamiento y/o recuperació n de suelos en dos grandes grupos:

 Tratamiento IN SITU, que implican la eliminació n de los contaminantes sobre el propio


terreno, sin remoció n del mismo.
 Tratamiento EX SITU, en los que se produce la movilizació n y traslado del suelo a
instalaciones de tratamiento o confinació n.
Conclusiones
Recomendaciones
Bibliografía

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