Está en la página 1de 5

DIPLOMADO EN EDUCACIÓN Y MEDIOS DE COMUNICACIÓN

LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACIÓN EN LOS PROCESOS EDUCATIVOS.

Por Mg. Carlo Julián Espinel Criado

Los medios masivos de comunicación han logrado permear durante años en la sociedad.
Actualmente con el uso de las Tecnologías de la información y la comunicación en especial el
Internet se ha posicionado en todas las esferas dejando de lado a la radio y la prensa cumplir con
su función cultural, pero rescatando la labor que hace la televisión de seguir divulgando el
contenido que tratan de transmitir a sus televidentes.

Es allí que desde el terrero educativo debemos conservar el valor que tienen los medios masivos
tradicionales para el proceso de enseñanza y aprendizaje de los estudiantes. En el contexto
nacional realizaron un estudio en la Universidad de Manizales sobre el “CONSUMO DE MEDIOS
MASIVOS DE COMUNICACIÓN”, por los investigadores María del Carmen Vergara Quintero, María
del Pilar Cerezo Correa, Olga Lucía Cifuentes Aguirre, Eugenia Nieto Murillo, José Hernán Parra
Sánchez cuyo objetivo fue caracterizar el consumo de los medios en estudiantes universitarios de
la ciudad de Manizales en el año 2008, con el fin de generar programas de promoción y
prevención que permitan mejorar los estilos de vida de los jóvenes. Como metodología fue un
estudio descriptivo, población de 13247 estudiantes con un muestreo probabilístico, con nivel de
confianza del 95% y margen de error del 5%. La muestra, 307 estudiantes. Entre los resultados
obtenidos tenemos que el 53,4% lee revistas, el 58,3% diarios y periódicos, el 93% ve televisión, el
89,5% se conecta a internet y el 67,4% escucha radio. Los temas que más han visto, leído o
escuchado son violencia, entretenimiento y política. Los temas relacionados con salud que vieron,
leyeron y escucharon recientemente son: maltrato infantil 68%, comer frutas 62% y uso del
condón 58,9%.

Las fuentes que generan mayor confianza para consultar sobre salud general: médicos, familiares
e internet; y acerca de la salud sexual: médicos, e internet. Los amigos son la fuente de la que
reciben más información sobre salud sexual, consumo de tabaco, psicoactivos, alcohol y
alimentación; sobre salud oran es la familia. El 34,6% recuerda algún mensaje relacionado con la
salud y el 39,8% considera que no tienen efecto sobre su estilo de vida.

Como conclusiones tenemos que: los estudiantes de salud y comunicación representan un grupo
que más se expone a televisión, internet, radio y prensa. Usa la información de los medios para
entretenerse y acceder a temas de actualidad. La información relacionada con salud que más
recuerdan tiene que ver con violencia, salud sexual, y dieta saludable; esta es usada en alguna
medida para la modificación de estilos de vida.

Internet y el teléfono móvil son los medios de comunicación que más se adecuan a los intereses y
necesidades de los universitarios, por encima de la prensa, la radio y la televisión, según un
estudio realizado por la Universidad Complutense (UCM). El estudio, elaborado por la Escuela de
Estadística de esta universidad a partir de 1.443 encuestas, se centra en los hábitos de consumo de
estos dos medios de comunicación entre los jóvenes universitarios de Madrid.
La mayoría de los encuestados (59,6%) navegan por la Red a diario y el 44,2 por ciento afirma que
dedica menos de una hora de su tiempo a ello, el 42,2 por ciento entre una y tres horas y el 3,8
por ciento más de cinco horas al día. El lugar de conexión habitual, según los datos del estudio, es
el hogar (50 8%), seguido de la universidad (35,9%) y el trabajo (6,1%) y el portal más habitual de
inicio de sus sesiones en Internet es el buscador "Google" seguido del servidor de correo
"Hotmail".

Los usos mayoritarios de los universitarios en la Red son la búsqueda de información (28,6%), el
correo electrónico (24%) y el uso de mensajería instantánea (18,9%), muy por encima de la
descarga de archivos, juegos en línea y chat.

El informe, segunda entrega del "Barómetro Universitario 2005", también destaca que sólo un
27,72 por ciento realiza compras por Internet y un 32,1% conoce la normativa sobre piratería. El
uso del teléfono móvil está generalizado y cuatro de cada diez padres pagan la factura del teléfono
móvil de sus hijos universitarios, que suelen consumir entre 10 y 40 euros al mes en llamadas y
mensajes.

Casi la totalidad de los consultados tiene teléfono móvil (95,8%) y lo usan a diario (85,1%) tanto
para mandar mensajes (88,1%) como para hacer llamadas (84%). Los estudiantes, según los datos
de este estudio, en el que también ha participado el periódico universitario "Menos 25", prefieren
el contrato a la tarjeta prepago.

El gasto mensual en teléfono móvil es superior a los 40 euros para un 11,2 por ciento de los
estudiantes, mientras que el 69,5 por ciento gasta entre 10 y 40 euros y sólo el 19,2 por ciento no
llega a los 10 euros.

En un artículo publicado por Evaristo González en noviembre del 2016 “Medios de comunicación y
educación en la sociedad digital: dos mundos paralelos” afirma que “El mundo de los medios de
comunicación y el de la educación caminan hoy de forma paralela: comparten informaciones, a
veces se atraen, otras se ignoran, pero es evidente que se necesitan, dados los contenidos con los
que trabajan y al público al que se dirigen. Educación y comunicación podrían recurrir más a
menudo a la simbiosis para conseguir objetivos comunes. La educación tiene una de sus bases en
la comunicación, mientras que una de las finalidades de los medios es (o debería ser) transmitir
informaciones que generen cambios y determinadas actitudes con ciertas finalidades educativas.
Dos mundos con gran responsabilidad social que han de contribuir a un planeta mejor. El trabajo
en los centros educativos se tendría que acompañar y completar con aquellas visiones de la
actualidad que transmiten los medios, a través de las cuales se contribuye a formar mejor a todas
las capas sociales y a reafirmar valores imprescindibles para la convivencia democrática y para la
reafirmación de un espíritu crítico ante la realidad”

González afirma que la educación y la comunicación viven inmersas en medio de cambios


decisivos, motivados por la presencia de las tecnologías de la información y de la comunicación,
por la evolución de la sociedad y por la necesidad de adaptarse a entornos “líquidos” y en
constante evolución. El paso del diario en papel a la digital se puede comparar con la paulatina
entrada en las aulas de los materiales, contenidos y propuestas didácticas en formatos digitales.
Si la adaptación de las empresas editoras (de periódicos y libros de texto: ambos en papel) a la
situación actual es difícil, también lo es el cometido del profesional de la comunicación y el de la
educación.

Ambos observan cómo los nuevos formatos, la actualización constante, las exigencias del público y
la competencia les obligan a estar al día, a replantearse su forma de trabajar y a estar en una
continua fase de aprendizaje. El papel de los lectores y el de los alumnos cambia y a menudo se
solapa, igual que el de periodistas y profesorado, si de lo que se trata es de enseñar, mostrar,
influir y favorecer cambios en la sociedad. La rapidez, no obstante, también necesita de la lentitud
que dé lugar al análisis del impacto, a la reflexión sobre metodologías y a la evaluación de los
efectos de la vorágine en la que estamos inmersos.

Por otra parte, el autor menciona que “las metodologías de trabajo evolucionan y los modelos
definitivos resultan difíciles de precisar en una sociedad tan cambiante como la digital. Mientras
que la profesión periodística observa fenómenos informativos como el periodismo ciudadano, la
capacidad de difusión (y de intoxicación) de las redes sociales o la multitud de interactuaciones vía
comentarios, notas de voz o mensajes, que le hace reflexionar sobre el papel de un trabajo que
creemos que imprescindible, la profesión docente se replantea el papel de la escuela hasta ahora y
poco a poco se abre a la innovación, al cambio, a otras formas de enseñar que, a menudo, no son
más que actualizaciones de anteriores movimientos de renovación pedagógica, o el fruto de
proyectos anónimos que se llevan aplicando en muchos centros educativos desde hace años.
Además, le surgen competidores como los cursos MOOC, videotutoriales educativos y webs para
toda clase de contenidos, modelos tipo Khan Academy, enseñanza colaborativa entre iguales,
trabajos y contenidos online gratuitos, experiencias como las de Sugata Mitra o el movimiento de
familias que renuncian a los centros educativos y educan a sus hijos en casa. En este caso, también
reafirmamos la necesidad del papel docente, adaptado a una sociedad que le exige abrirse a otras
metodologías, a tener en cuenta las inteligencias múltiples, las competencias, la educación
emocional, la neurociencia, la resilencia, etc.”

“Un diario digital o en papel es un libro abierto a la actualidad con multitud de propuestas para
aprender. Introducir la actualidad en las aulas renueva los aprendizajes y los hace más
competenciales, conectados con el mundo en que viven tanto alumnado como profesorado.
Renunciar a la realidad significa desconectar el aula de la vida tal como fluye. Crear la necesidad y
consolidar el hábito de estar informado es la mejor forma de construirse como persona.”

Del mismo modo, los centros educativos han de tener presente la Literacidad: el conjunto de
competencias necesarias para preparar a una persona para recibir y analizar información en un
contexto concreto y ser capaz de transformarla en conocimiento. Hoy más que nunca se precisa de
enseñar pautas para convivir con la “infoxicación” producida por excesos informativos y saber
discernirla de forma crítica, quién está detrás de los medios, cómo elaborar contenidos para las
redes sociales y la responsabilidad que conllevan, e incluso hasta conocer la precariedad laboral de
la profesión. No se trata de sentar al alumnado delante del ordenador y pedirle que busque
información, sin más. Detrás de las pantallas hay un mundo que nos condiciona la mirada.
“El papel de profesorado como guía en la competencia de aprender a aprender es fundamental. La
variedad de opiniones, los titulares sensacionalistas, el contraste de noticias, los contenidos
multimedia, los nuevos formatos, los diversos enfoques de los medios sobre las noticias también
sirven para aprender y se han de convertir en una apuesta para trasladar a la práctica: generar
informaciones, practicar idiomas, conocer la actualidad de otros países, elaborar programas,
interactuar, consolidar una visión amplia y flexible de la realidad, que a menudo es mucho más
compleja de lo que a simple vista nos parece.” Por último, periodistas y educadores, dos
profesiones con grandes semblanzas y responsabilidades, dos mundos paralelos que convergen en
objetivos que se cruzan.

En la Universidad de Pamplona, donde actualmente laboro se hace evidente el uso de los medios
de comunicación como parte del currículo del programa de Licenciatura en Lengua Castellana en el
cual los estudiantes en ciertos semestres deben cursar televisión, radio y prensa a su vez contar
con los conocimientos de fotografía como complemento a su formación como docentes
desarrollando en cada uno de estos proyectos de aula o de investigación que posibiliten un
aprendizaje significativo.

Particularmente he orientado un curso denominado “Semiótica y lenguajes mediados” en este se


pudo abordar temáticas relacionado con los “Mass Media” como parte de los contenidos
programáticos entre los que se destacan Comunicación de Masas y cultura de masas. Como
estrategias pedagógicas utilizadas iniciamos con la aplicación de un diagnóstico a partir de una
encuesta sobre el conocimiento y uso de los medios de comunicación la cual consistió en 15 ítems
de selección múltiple con única respuesta y preguntas abiertas. Seguido a ello se recurrió al
estudio de documentos, visualización de videos, presentación de talleres y debates, utilización de
plataformas digitales tales como classroom y otros medios tecnológicos.

Para ejemplificar el caso anterior los estudiantes por equipos de trabajo hicieron lectura
compartida del documento “Sociedad de masas, cultura de masas y comunicación de masas”.
Luego desarrollaron un taller con preguntas de análisis crítico el cual fue presentado mediante la
plataforma Classroom donde se determinó una fecha y hora establecida. Cada grupo recibió un
mensaje de retroalimentación enunciando los aspectos que debían mejorar.

Como evaluación realizaron un proyecto donde analizaron semióticamente los personajes de los
dibujos animados favoritos de los niños y niñas de instituciones educativas de la ciudad a partir de
la aplicación de instrumentos de recolección de información. Luego diligenciaron fichas de análisis
y por último presentaron los resultados de manera cuantitativa por medio de gráficas y su
correspondiente estadística a su vez cualitativo enunciando los factores que desencadenan dichos
resultados.

Para terminar, traigo a colación el curso de Lengua Castellana y Didáctica Virtual que se
encuentra ubicado en el noveno semestre allí prevalecen los medios digitales tales como la
visualización de videos educativos a través de YouTube, documentos en pdf sobre temáticas de
acuerdo a los contenidos programáticos y aplicación de ambientes virtuales de aprendizaje, OVAS,
el uso de blogs, presentaciones en Prezi entre otras. Durante mi experiencia en dicho curso he
podido varias las estrategias pedagógicas que posibiliten en los docentes en formación un
aprendizaje significativo.

Recientemente vinculé como una de las temáticas centrales el Desarrollo de las Competencias TIC
para la profesionalización del docente del siglo XXI, tomando como referente un documento del
Ministerio de Educación Nacional del año 2014. Allí se recurrió hacer en primera instancia una
lectura por equipos de trabajo donde se escogía un representante por cada uno de estos. Luego
sintetizaron la información haciendo uso de mapas conceptuales y cuadros sinópticos.
Presentaron la socialización de los mismo, además se realizó un quiz por medio de un ensayo
donde debían analizar desde sus prácticas pedagógicas si estas competencias se estaban aplicando
en los escenarios educativos. (tecnológica, pedagógica, comunicativa, investigativa, gestión). Como
evaluación final presentaron una propuesta por equipos de trabajo dirigida a los docentes de las
instituciones educativas en el área de lengua castellana para cumplir con la competencia
investigativa a su vez integrando las demás y cuáles eran los parámetros establecidos para realizar
dicho trabajo.

REFERENCIAS.

http://www.es.catholic.net/op/articulos/21144/cat/156/universitarios-prefieren-internet-y-el-
movil-como-medios-de-comunicacion.html#modal

http://www.aikaeducacion.com/opinion/medios-comunicacion-educacion-la-sociedad-digital-dos-
mundo-paralelos/

También podría gustarte