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CIUDADANO

JUEZ DE PROTECCION AL NIÑO Y AL ADOLESCENTE DE LA


CIRCUNSCRIPCION JUDICIAL DEL ESTADO APURE .
SU DESPACHO.

Yo, CARMEN MIREYA DIAZ LEMO, venezolana, mayor de edad,


soltera, titular de la Cédula de Identidad Nº.-´9.871.445 y de este domicilio,
asistida en este acto por el Abogado en ejercicio MARCOS ANTONIO
CASTILLO, inscrito en el Inpreabogado bajo el Nº.-36.101, y de este domicilio,
ante su competente autoridad ocurro para exponer y solicitar:
Habida cuenta de que por ante este Tribunal cursa solicitud de fijación
de Régimen de Visita para determinar la forma y la circunstancia en que el
ciudadano CUAUHTEMOC C. LAPREA V, pueda visitar y tener contacto con
nuestra menor hija ANDREA GABRIELA LAPREA DIAZ, de dos años de edad,
cuya solicitud se encuentra distinguida con el Nº.- 7.408, y en el entendido de
que el artículo 387 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del
Adolescente establece el procedimiento cuando el Tribunal actúa
sumariamente, estableciendo así las bases y los supuestos, que el Tribunal
deberá tomar en cuenta para producir su decisión; así, como en el presente
caso, es obvio que en atención a todos los recaudos y soportes agregados al
expediente respectivo no puede lograrse un mutuo acuerdo y por tal razón el
Juez en Primera Instancia debe ordenar la practica de un conjunto de informes
técnicos que considere conveniente, como por ejemplo un examen sicólogo
tanto al padre como a la madre y a la niña, aunque debo recalcar que en mi
caso como consecuencia de todo los maltratos físicos, morales y síquicos, que
me hiciera el padre de nuestra hija en su presencia, se me ha practicado en
dos oportunidades, tambien debe ser ordenado un examen tóxicologico y el
correspondiente informe social, aunque considero que con todas pruebas que
existen en autos debe establecerse un régimen muy estricto de visita a dicho
ciudadano, padre de mi menor hija en aras del bienestar y la seguridad de la
niña. En segundo lugar debe ser oída la opinión de quien ejerza la Guarda y
Custodia de la niña, que en este caso es mi persona y que de antemano opino
por las razones antes dichas, por los antecedentes del caso demostrados
plenamente en autos y por la vil y última canallada que ha hecho en mi contra
al injuriarme y difamarme públicamente en el expediente al tildarme como una
mujer sin dignidad, poco honesta, como una mujer de vida alegre y al querer
inferir y hacer creer que soy una mujer infectada no solo, con una enfermedad
de transmisión sexual que me provocara el mismo, como hombre promiscuo y
que tambien afirma, sino al decirme que soy portadora del Síndrome de Inmuno
Deficiencia Adquirida, que no guarda relación con lo que esta en discusión, por
estas razones resumidas considero y opino que debe negársele el régimen de
visita, aunado a esto existe el hecho cierto que desde nuestra separación
nunca ha cumplido con su obligación alimentaria y por imperio del artículo 389
Ejusdem debe negársele la concesión de un régimen de visitas.
Ahora bien, en el dado caso que este Tribunal, previo análisis de todas
las circunstancias fácticas, de los antecedentes ocurridos, y de los informes
técnicos practicados, considere prudente otorgar un régimen de visita
restringido al padre de nuestra menor hija, propongo que este sea de la
siguiente manera:
Que el padre pueda visitar a la niña en la casa de la abuela materna es
decir, mi madre, ubicado en la Calle Plaza Nº.-20-A, de esta ciudad de San
Fernando de Apure, Estado Apure, los días sábados de cada semana en un
horario comprendido entre las 2:00 de la tarde y las 8:00 de la noche, en
presencia de mi madre abuela de la niña CARMEN DE DIAZ, ya que dicho
ciudadano se le tiene prohibido acercarse a mi casa y a mi persona por haber
cometido en mi contra uno de los delitos previsto en la Ley sobre la Violencia
contra la Mujer y la Familia, y que no se le permita más libertades de visitas
que esa por cuanto en reiteradas oportunidades me ha amenazado de llevarse
a la niña consigo fuera del Estado Apure, e incluso fuera de Venezuela.
Finalmente pido que en atención a todas estas circunstancias, lo aquí
pedido, sea acogido con beneplácito en beneficio y en aras de la seguridad de
la menor.
Es justicia en San Fernando de Apure a la fecha de su presentación.-

LA SOLICITANTE

EL ABOGADO ASISTENTE

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