DISCIPULADOS MIEZ
TRES ASPECTOS DE LA FE
Romanos 1:17 | “Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y
para fe; como está escrito: MAS EL JUSTO POR LA FE VIVIRA”.
INTRODUCCIÓN
El título de esta lección es “Tres aspectos de la fe” y esto no significa que solo
existen tres aspectos que evidencian la fe, de hecho hay muchos, pero en esta
lección presentamos los tres aspectos más básicos. Si profesamos tener fe, no
debe faltar ninguno de ellos en nuestra vida, si falta al menos uno, debemos
cuestionar y corregir nuestras actitudes.
Para poder vencer y conquistar, para recibir nuestra promesa y nuestra sanidad,
para conquistar la bendición para nuestra familia y para nuestra iglesia,
debemos ser una generación que le cree a Dios. Fe es creerle a Dios, la vida
espiritual es una vida de fe, todo funciona por medio de la fe. La fe es el método
de Dios para sensibilizar nuestro espíritu, que es nuestra verdadera
personalidad. La fe nos desarraiga del materialismo y nos pone en contacto con
Dios. La fe aunque es intangible en el mundo físico es la sustancia solida sobre
la cual se edifica en el mundo espiritual. Sin querer ser irrespetuosos, podemos
decir que la fe es la moneda con la cual se comercia en el mundo espiritual. La
Biblia dice que sin fe es imposible agradar a Dios.
LA FE ES PRÁCTICA (Santiago 2:26)
La fe es práctica. No debemos complicarnos con conceptos difíciles acerca de la
fe, que lo único que logran es frenar las intenciones. Fe es creer de corazón y
actuar creyendo. En el Evangelio de Marcos 2:3-5 encontramos una historia que
ejemplifica este concepto. Cuatro hombres tenían una amigo paralítico, y
decidieron hacer algo al respecto, ellos tomaron a su amigo y actuaron, lo
trajeron a donde estaba Jesús enseñando. Al llegar a la casa donde se
encontraba Jesús se dieron cuenta que el lugar se encontraba lleno de gente y
que no había espacio por donde entrar, asique subiendo al techo de la casa,
abrieron un hueco y con unas cuerdas bajaron por ahí a su amigo paralítico
justo a los pies de Jesús. Dice este pasaje bíblico “Al ver Jesús la fe de ellos…”
¿Cómo es eso?… ¿la fe se puede ver? Pues sí, la fe se puede ver a través de las
acciones de quienes la profesan. Nadie puede profesar fe en Dios sin
respaldarlo con su conducta, con su compromiso y con sus acciones, a eso se
refiere el Apóstol Santiago (Stg. 2:17-18) “Así también la fe por sí sola, si no
tiene obras, está muerta. 18b…Pues bien, muéstrame tu fe sin las obras, y yo te
mostraré la fe por mis obras.”
De este pasaje aprendemos primero, que la fe es acción, los cuatro amigos del
paralítico no se conformaron con desearle su mejoría, ellos actuaron. Segundo
que la fe es atrevida, ellos no se preocuparon por las apariencias ni los costos,
ellos continuaron hasta lograr su objetivo. Tercero, La fe es ilógica, ellos no se
pusieron a considerar en la forma cómo sucedería el milagro, ni lo ridículo que
lucían haciendo algo ilógico, ellos solo creyeron y actuaron. Como podemos ver
la fe no es complicada, la fe es una acción práctica basada en creer en el poder
de Dios.
FE ES AGRADAR A DIOS (Hebreos 11:4-5)
Como ya tratamos en el párrafo anterior la fe tiene evidencias visibles, una de
las evidencias más importantes es que el objetivo principal de la fe es agradar a
Dios. En un pasaje de Hebreos 11 encontramos a dos personajes, Abel y Enoc,
ellos evidenciaron su fe agradando a Dios. Fe es agradar a Dios, muchos
profesan tener fe en Dios porque han aprendido a pedirle favores y milagros,
esas personas dicen: yo tengo fe en Dios porque siempre le pido y el me
responde. Debemos entender que Dios es bueno, Él conoce y responde a las
necesidades, pero eso no necesariamente es fe, ¿quién no pide a Dios cuando
tiene necesidad? Hasta las personas más endurecidas lo hacen. En la Biblia
encontramos la historia de diez leprosos que pidieron su sanidad y Jesús los
sanó, sin embargo solo uno regresó a agradecerle, diez pidieron y recibieron su
sanidad, pero solo uno agradó con fe a Dios porque regresó a agradecer y
adorar a Jesús. En otra ocasión Jesús multiplicó cinco panes y dos peces y
alimentó a cinco mil, luego ellos le buscaban para hacerle Rey, y Jesús les dice:
“ustedes me buscan, no porque han visto señales sino porque comieron pan
hasta llenarse”. Ellos le buscaban porque lo veían como una buena posibilidad
para tener siempre alimento, pero no lo buscaban porque tenían fe. Fe es más
que saber cómo pedir, fe es aprender a agradar el corazón de Dios. En la Biblia
podemos aprender que todo lo que Dios hace tiene el propósito de
engrandecer su nombre y nuestra fe debe seguir ese parámetro.
1. Las conquistas son para engrandecer su nombre (Salmo 91:12-14).
2. El perdón del pecado es por amor a su nombre (Isaías 48:9 y 11).
3. Los milagros son para gloria de su nombre (Jeremías 16:21).
4. La liberación del pueblo de Dios es para alabanza y honra de su nombre
(Ezequiel 20:14).
FE ES OBEDIENCIA (Hebreos 11:7-8)
Hasta aquí hemos estudiado que la fe es una acción práctica, que el objetivo de
la fe es la gloria de Dios y no del hombre, que la evidencia más importante de la
fe esta en agradar a Dios y que Dios nos ha llamado para ser una generación
que le cree a Él. El tercer concepto es tan importante como los anteriores y
aunque es ampliamente aceptado y hasta se confiesa, demasiados cristianos
tienen dificultad para cumplirlo, y es que FE ES OBEDIENCIA. Fe no es conocer
la palabra de Dios, fe es obedecer la palabra de Dios, fe es vivir nuestra vida
gobernada sin excusas por los parámetros en la palabra de Dios.

LA FE DE NOÉ
Leer la historia de Noé suena muy bonita, este fue un hombre que escuchó la
voz de Dios y actuó; pero podemos asegurar que no fue tan fácil para él en el
mismo momento en que sucedió. La fe de Noé fue un acto de total renuncia y
obediencia. Pensemos en las implicaciones por unos minutos:
A. Noé se expuso al ridículo de todo el que le miraba ¿quién edifica un
barco en medio del desierto?
B. Noé predicó un juicio por diluvio en un lugar en donde los historiadores
dicen que ni siquiera llovía.
C. Noé uso todos sus recursos físicos y económicos en un proyecto que
lucía absurdo e irracional.

En otras palabras por la fe Noé estuvo dispuesto a hacer el ridículo, a quedar

como un loco y a gastar su dinero, todo por su obediencia a Dios. Lo que nos
lleva a otro punto: El propósito de la fe no es proteger nuestra dignidad ni
librarnos del ridículo, Dios no va a salir corriendo a defender nuestra imagen.
Dios prueba nuestra fe examinando nuestra obediencia y compromiso, y si
somos capaces de obedecer, Dios será capaz de obrar milagros, glorificar su
nombre y darnos la conquista.

CONCLUSIÓN
A diferencia de la llamada fe materialista que es aquella que dice yo quiero ver
para creer, quiero tener para dar, quiero sentir para actuar, quiero comprender
para confesar, quiero primero recibir para compartir, Dios nos llama a una fe de
obediencia.
El catalizador que enciende los milagros es la fe, la sustancia que materializa la
provisión es la fe, la medicina que produce la sanidad es la fe. Fe es creer para
ver y la obediencia materializa la fe. La fe es práctica, es acción no un
pensamiento; fe es agradar a Dios en todo lo que hacemos; y Fe es obediencia y
la obediencia evidencia la fe.

Santiago 2:17-18 | “Así también la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta.
Sin embargo, alguien dirá: "Tú tienes fe, y yo tengo obras." Pues bien,
muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré la fe por mis obras.”