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Torres González Andrea Monserrat

25/Marzo/2020
Economía Mexicana
LA REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA
Manuel Aguilera nos hace un breve recuento del proceso de transformación y
transición en que nos vemos envueltos, mejor conocida como la 4R, “La gran
Transición” o la Vida Post Humana, es preciso enfatizar que este proceso evolutivo
extiende su alcance transformando no solo los sistemas de producción y la oferta
de una amplia gama de bienes y servicios si no también las formas de organización
de las economías, el empleo y la sociedad en general al introducir los procesos de
robotización, inteligencia artificial, sistemas de información y digitalización,
nanotecnología, etc.
De esta forma el autor profundiza el alcance e impacto que presenta la
robotización partiendo del actual uso intensivo que presentan los robots en las
industrias de aquellas naciones económicamente más desarrolladas, encabezando
la lista se encuentra Corea del Sur, Japón, Alemania, Francia y Estados Unidos. No
debemos pasar desapercibida la idea de que la “robotización manufacturera” se
encuentra en una fase temprana, donde es empleada para realizar procesos que sí
bien son reiterativos y que no contemplan una autonomía de decisión si se enfocan
en realizar operaciones complejas y múltiples que exigen precisión en su
aplicación, de forma que el avance científico apunta a incorporar en mayor escala
robots que cuenten con inteligencia artificial.
Entonces el autor busca enfatizarnos las ventajas que presenta la robotización en
las industrias, concretamente en empresas de menor escala de manera que con el
desarrollo de sistemas inteligentes de gestión y digitalización productiva sean los
catalizadores que impulsen el desarrollo regional a través de industrias de pequeño
y mediano alcance, las cuales destacaran por su elevada productividad al mismo
tiempo que su competitividad.
Posteriormente Aguilera nos resalta como cada industria y sector de la esfera
económico productiva ha ido adaptando sus procesos al incorporar la robotización,
digitalización e inteligencia artificial, desde la industria textilera, sector servicios,
sector salubridad, sector educativo y de transportes; si bien el proceso se ha
desenvuelto en un abrir y cerrar de ojos, donde la comodidad lo ha vuelto casi
imperceptible para nuestra generación, no es posible ignorar el aire de
incertidumbre y miedo que se respira, de manera que nos vemos obligados a ver
con mayor detenimiento el camino en el que nos encontramos y al que nos
dirigimos.
Entonces por un lado, se presenta la maravillosa utopía de productividad, eficiencia
y perfección que serán capaces de agilizar todo proceso y técnica; la ciencia ficción
aterriza a nuestra realidad, convirtiendo a la tecnología en nuestra herramienta
mágica que facilita nuestras labores. Y por otro lado la distopia comienza a
Torres González Andrea Monserrat
25/Marzo/2020
Economía Mexicana
asomarse si vemos el desplazamiento de empleados por maquinas, el miedo del
alcance que puede lograr la inteligencia artificial a tal grado que sea capaz de
igualar o suplir nuestras capacidades.
Por lo tanto, podemos afirmar que la tecnología por si misma no es una solución y
su desarrollo no carece de fines ideológicos implícitos, cada tema conlleva su
propio debate y complejidades que no deberían ser reducidas al tabú o a la
idealización pues ya son parte de nuestro día a día pero es preciso comenzar a
medir la magnitud del impacto histórico-económico que pueden tener.
La invasión de la 4R en cada área que nos describe Aguilera involucran
consecuencias ye están inmersas en mundo multicromático pero principalmente
humano, por hoy seguiremos entre la utopía y la distopia, expectantes y
preparados para usarlos a nuestro favor, he aquí una pequeña pieza del enorme
acertijo en el que nos encontramos.

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