Está en la página 1de 2

Profesora Andrea Bravo

Lectura Fluida Semana Del 11 de Agosto al 17 de Agosto

El ratón navegante

Un ratón muy soñador quiso ir de expedición.

Pensó en cruzar los mares en un barquito de lunares.

Cuando contó lo que ansiaba, eso que tanto deseaba,

nadie la idea aprobó, y cosas feas escuchó:

¡Un ratón de navegante, vaya que es extravagante!,

Dijo su abuela Teresa, tomándose la cabeza.

¡Esto es un desatino, me temo estás confundido!

dijo su abuelo Ramón, tomándose el corazón.

El ratoncito escuchaba, mas de opinión no cambiaba:

mi sueño yo cumpliré, los mares navegaré.

La familia temerosa no pensaba en otra cosa

que convencer al pequeño de que abandone su sueño.

Mientras tanto el ratoncito fabricaba su barquito:

Una zapatilla rota a la que agregó una ojota.

Encontró un gran botón y lo cosió de timón;

un mástil improvisó usando un lápiz color bordó.

Y una noche de gran luna zarpó hacia la aventura.

¡Su sueño era realidad, navegaba de verdad!

La familia preocupada con esmero buscaba

y mirando hacia la orilla, vieron su bella barquilla.

Le pidieron que volviera para que no se perdiera,

Y el ratón obedeció y muy pronto retornó.

Su familia lo retó, pues sin permiso salió.


Profesora Andrea Bravo
¡Sin permiso has salido, el reto es bien merecido!

El ratoncito entendió y la razón él les dio.

Y sobre lo sucedido, charlaron largo y tendido.

Y llegaron a un acuerdo que al ratón puso contento.

Agrandaron la zapatilla y salieron en familia.

Juntos todos navegaron y grandes mares surcaron.

El ratoncito sentía una gran felicidad, compartía en familia el amor por alta mar.

Liana Castello

También podría gustarte