Durante muchos años me pregunte ¿Cuál es la razón de los problemas, los conflictos, los revés

de la vida.

Parece que en algunas cosas no terminamos nunca de entenderlas, ¿Por qué a mí? O ¿siempre
me pasa lo mismo? O tantas otras preguntas de esta índole que se me presentaron en la vida.
Pero un día, cuando menos lo pensé, llego la respuesta y me encanto entenderla. No tiene
nada especial, es solo que el universo me eligió para que yo lo resolviera.

El Saber que entre todos los seres del universo, entre todas las cosas que hay por ahí dando
vuelta. Me haya elegido me dio la fuerza para seguir y seguir.

Sé que hay muchos que se han alineado para hacerme sentir que era un desastre, un
complicado, un autoritario, un etcétera, etcétera, etcétera.

Hoy sé que se han equivocado, algunos en criticarme y otros se han perdido la oportunidad de
disfrutarme y compartirme. Por eso hijo querido.

No le des de comer a los cuervos, deja que cada uno busque en donde hincar su pico, ten la
inteligencia, la paciencia, y la sabiduría de los que sienten pasión por vivir la vida a cada
instante.

Resulta que equivocarse es hermoso, pues es ahí donde uno descubre cuanto sabe, solo
puede saber cuál es el problema el que sabe encontrar la dificultad.

Mi Papá me recitaba siempre una frase del general San Martin que la incorpore con el tiempo
“No se debe hacer promesa que no se pueda o no se deba cumplir.”

Esto quiere decir que solo los que tienen la fuerza y la convicción para seguir pueden tener la
capacidad para resolver.

Y eso es lo que yo sé que vos podes hacer, resolver.

Psicoterapeuta. Pablo Jorge Valle Daubenberger