Aplicando la palabra de Dios

¿Qué debo hacer?

I. El proceso de aplicación.

Una aplicación correcta comienza con una consideración lógica y sistemáticas de

las áreas básicas de nuestra vida y ministerio que se deben afectar por el principio
bíblico que hemos descubierto en el texto. Es útil considerar cada tópico y luego
hacernos preguntas penetrantes acerca de lo que debemos hacer en respuesta al
mensaje. Como siempre, este proceso debe estar sumergido de oración y
acompañada por una disposición de aprender y crecer en el señor.

a) Tópicos de aplicación.

La meta final de la aplicación es un desarrollo del carácter personal y una

mayor efectividad en el ministerio. Hay varios tópicos o áreas que debemos
considerar cuando tratamos de aplicar el mensaje de un pasaje en forma
personal. Estos tópicos incluyen ambos nuestra vida personal y el ministerio.

Algunos ejemplos pueden ser estos:

La fe: ¿Qué puedo aprender de la fe personal?

Las actitudes: ¿Cuáles actitudes son buenas o malas? ¿Cuáles son

sus resultados? ¿Cómo puedo cambiar las actitudes
negativas?

Las acciones: ¿Qué debo comenzar hacer? ¿Qué debo dejar de

hacer?

Los pecados: ¿Cuál(es) pecado(s) me han sido señalado(s)? ¿Cómo

puedo poner las cosas bien con Dios o con otros?

Los retos: ¿Cuáles retos son claros para mi vida personal? ¿en
mi relación con otros? ¿En mi ministerio?
 El carácter: ¿Cuáles son las cualidades de un carácter piadoso que
yo necesito desarrollar en mi vida y ministerio?
¿Cuáles son las cualidades de un carácter impío que
necesito evitar en mi vida y ministerio?
Las promesas: ¿cuales promesas puedo apropiarme para mí?

b) Preguntas generales.

El Doctor Howard Hendricks nos da algunas preguntas útiles de aplicación que

se pueden hacer a cualquier pasaje bíblico.

Son:

 ¿hay un ejemplo que se debe seguir?

 ¿Hay un pecado que se debe evitar?
 ¿hay un pecado del cual debo arrepentirme?
 ¿hay una promesa de la que me puedo apropiar?
 ¿hay una oración que puedo repetir?
 ¿hay un mandato que se debe obedecer?
 ¿hay una condición que se debe alcanzar?
 ¿hay un versículo que se debe memorizar?
 ¿hay un reto que se debe enfrentar?

c) Preguntas aplicativas.

Usando 2 de Timoteo 3: 16 podemos formular 4 preguntas aplicativas. Este

versículo dice: “toda escritura es inspirada por Dios y es útil para enseñar, para
redargüir, para corregir, para instruir en justicia.

1. Es útil para enseñar.

La palabra “didaskalon” tiene el sentido de enseñanza o doctrina. Asi que
puedo preguntar:

¿Qué me enseña este pasaje de Dios y su camino?

 2. Es útil para redargüir.
La palabra “elegmon” tiene el sentido de convencer a una persona
totalmente de algo. Así que puedo preguntar:

¿Qué me enseña este pasaje de mi mismo y mi tendencia pecaminosa?

3. Es útil para corregir.

La palabra “epanorteosin” tiene el sentido de “restaurar a un estado
correcto”. Quiere decir que la biblia no solo nos muestra el pecado, sion
que nos dice como regresar al camino correcto. Así que puedo preguntar:

¿Qué me enseña este pasaje de como cambiar a sser lo que Dios quiere
que sea?

4. Es útil para instruir en justicia.

Las palabras “paideian ten en dikaiosune” tienen el sentido de una
educación entera. Una vez que la biblia nos corrige, ejerce una función
disciplinaria. Así que puedo preguntar:

¿Qué me enseña este pasaje de como mantener una vida santa y

agradable a Dios?

II. En resumen.

La aplicación que yo veo para mi vida y ministerio es: