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CABA, 6 de mayo de 2021

Propuesta Nivel Medio para cursada bimodal mayo 2021


ENS N°11

Atendiendo a las disposiciones del Ministerio de Educación que propugnan un sistema de cursada
bimodal para el nivel medio, elevamos la siguiente propuesta.

Diagnóstico de la situación actual


Habiendo transitado aproximadamente dos meses con el formato de cursada alternando
burbujas semanalmente, podemos establecer algunas conclusiones, aunque aún provisorias.

El formato de alternancia de burbujas, si bien funcionó, tuvo algunos inconvenientes en su


desarrollo que expondremos a continuación y que creemos que ameritan considerarse para
procurar una mejora en la continuidad de la cursada de los estudiantes.

La cursada referida fue afectada por al menos dos factores. El primer factor que alteró su
desarrollo fue la aparición de casos sospechosos o positivos de COVID-19 que obligaron al
aislamiento de burbujas con la consecuente pérdida de clases por parte de los estudiantes. Es
relevante destacar que en general, el aislamiento no afecta a una sola burbuja, por cuanto los
docentes rotan por diferentes cursos, lo cual afectó la continuidad escolar de otros cursos. Un
segundo factor que influyó en la escolaridad de los estudiantes fue la intermitencia semanal según
la cual, la semana que no asistían a clases debían realizar trabajos autónomos en sus hogares sin
contar con el apoyo de sus docentes, dado que estos dictaron clases presenciales todas las
semanas aunque fuera a diferentes burbujas. Un tercer factor fue la ausencia de muchos
estudiantes a las clases presenciales, sobre todo en los últimos tiempos, tal vez debido al temor de
sus familias por el posible contagio del virus circulante.

Por otra parte, los espacios de clases virtuales que se dieron en algunos casos por razones
particulares, como los aislamientos preventivos, resultaron de una muy buena aceptación de
alumnos y docentes debido a que les permitía interactuar con el grupo completo sin tener que
esperar el turno semanal de cada burbuja. Cabe destacar en este punto que, a partir de la
experiencia ganada en 2020, en los forzados tiempos virtuales que se dieron durante este año, se
garantizó al menos un encuentro sincrónico (ej. Meet) semanal en cada materia. Sin embargo, esta
virtualidad mejorada en cuanto al manejo de los recursos que se logró en base a experiencias
pasadas, tampoco logró su mejor efectividad, porque cuando una burbuja estaba aislada, el
profesor podría darles clase, estaba ocupado con otro curso en la escuela o estaba en la escuela,
pero sin disponibilidad física para dictar una clase por videoconferencia.

Nuestra propuesta:
A partir de lo explicado hasta aquí y teniendo en cuenta la actual propuesta denominada
bimodalidad, elaboramos una propuesta que creemos que puede mejorar la cursada, no sólo de
hasta el 21 de mayo, sino más allá de esa fecha y mientras dure la emergencia sanitaria.

El formato básico que proponemos consiste en una alternancia semanal entre presencialidad y
virtualidad. Vamos a proponer un ejemplo para que se comprenda mejor y luego pasaremos a
explicar el por qué la consideramos una mejora frente al proyecto original presentado en febrero
pasado. Tomando como ejemplo un curso con dos burbujas (A y B) en un período de cuatro
semanas tendríamos el siguiente resultado:

Semana 1 (del 3 al 6 de mayo): reconfiguración de burbujas (tienen clases virtuales ambas


burbujas y presenciales quienes necesiten los recursos tecnológicos de la escuela.)

Semana 2 (del 10 al 14 de mayo): clases presenciales para todas las divisiones de cada turno.
Asiste la burbuja A. La B (y C de 2do) trabaja en forma autónoma en su casa.

Semana 3 (del 17 al 21 de mayo): clases virtuales (ambas burbujas).

Semana 4 (del 26 al 28 de mayo): clases presenciales para todas las divisiones de la burbuja
correspondiente.

La escuela, tanto en el trabajo virtual como presencial, ofrecerá a los estudiantes la posibilidad de
acceder a los resortes tecnológicos para seguir las clases.

Como puede observarse, en un lapso de cuatro semanas, ambas burbujas tendrían tres semanas
de cursada con docente a cargo y sólo una de trabajo autónomo en su casa. Creemos que esto es
claramente una mejora frente al sistema anterior en el cual sólo dos semanas tenían clase con
docente a cargo. Si además tomamos en cuenta que como realidad nuestra escuela tiene tres
burbujas en los segundos años y cuatro burbujas en un quinto año, el sistema anterior los dejaba
sin apoyo docente durante dos y tres semanas respectivamente. El resultado de esto es que los
segundos años en un lapso de seis semanas (que es el número que cierra el círculo para hacer un
comparativo) tendrían, cada burbuja, clases sólo dos semanas con el sistema anterior, mientras
que con el sistema bimodal que proponemos tendrían cuatro semanas de clase de cada seis; una
presencial y tres virtuales. Para el caso de la división de quinto año con cuatro burbujas, en 8
semanas tendrían dos de clases con el sistema anterior, mientras que con la nueva organización
tendrían cinco semanas de clases, una presencial y cuatro virtuales.

No dudamos de que la presencialidad aporta, a la relación pedagógica y a la relación entre pares,


elementos que tal vez sean difíciles de lograr en la virtualidad, pero estamos seguros de que la
frecuencia de los encuentros, al menos en el nivel secundario, es un factor clave en el aprendizaje
de los estudiantes porque, además de permitirle acceder a más contenidos, les facilita la
organización del tiempo y del trabajo en una edad en que es fundamental acompañarlos en la
construcción de criterios de organización necesarios para la vida.

Creemos, finalmente, que la bimodalidad, del modo que la proponemos, contribuye no sólo a
minimizar la circulación de personas por las razones epidemiológicas de público conocimiento,
sino que significa, como ya dijimos, una mejora para sostener la trayectoria escolar de nuestros
estudiantes mientras dure el tiempo de pandemia. Consideramos que no es un “para siempre”,
sino un “mientras tanto” superador de nuestra propuesta del mes de febrero que
eventualmente podrá intercalarse con períodos de presencialidad en la medida en que la
situación epidemiológica lo permita.

EQUIPO DE CONDUCCIÓN NIVEL MEDIO-ASESORÍA PEDAGÓGICA ENSN°11

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