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EL MUNDO DE CHAPLIN
La Revolución Industrial se fue difundiendo desde Gran Bretaña hacia algunos países de
Europa. A partir de la segunda mitad del siglo XIX se observa en los procesos de innovación
tecnológica, que se identifican con el período denominado “revolución de los
transportes”. Este proceso tuvo características particulares, vio nacer a la empresa
moderna y a las nuevas formas de organización del trabajo. De este modo, llevo al avance
de la industrialización para la economía moderna, tomando el caso de los transportes, la
empresa moderna y la organización taylorista y fordista.
La segunda mitad del Siglo XIX, también vio nacer a la empresa moderna, en la cual,
produjeron una ruptura con lo que hasta entonces fue la empresa tradicional. La empresa
tradicional, se especializaba en un tipo de función (producción o distribución); las formas
tradicionales de administración, centralizadas y personalizadas, cedían terreno a sistemas
de gestión más complejos, dando origen al management científico, en el cual se desarrolla
un proceso de separación entre la propiedad y gestión de la empresa.
El concepto de “mano visible” es utilizado por Chandler (1987), para afirmar que la
empresa moderna reemplaza los mecanismos de mercado en la coordinación de las
actividades de la economía.
A diferencia del mercado, la empresa establece entre los agentes relaciones jerárquicas y
desiguales, imperativas y personalizadas; El mercado, por el contrario, establece entre los
agentes relaciones no jerárquicas, simétricas, tanto más impersonales cuanto más
perfecto es el mercado, funcionando a través de la “mano invisible”
El crecimiento de la población y el aumento de la renta por habitante, son las dos variables
que determinan la demanda global. Por ello, los fabricantes norteamericanos dependieron
mucho menos del comercio exterior que los británicos y alemanes. La existencia del
mercado libre, homogéneo y en rápido crecimiento, permitió la difusión y adopción de
nuevas tecnologías y la producción en masa.
CAPITALISMO GERENCIAL:
Uno de los factores que contribuyó al desarrollo de la gran empresa fue la ampliación y
homogeneidad de los mercados. Así el tamaño de las empresas se fue modificando por la
integración horizontal y vertical que adoptaron, por la adquisición y fusión de otras firmas
y por la expansión geográfica desarrollada.
La creación de la gran empresa moderna supuso una auténtica “ruptura industrial”.
A principios del Siglo XX, las empresas de Estados Unidos producían bienes de consumo y
bienes industriales; en Gran Bretaña las empresas se dedicaron solo a producir bienes de
consumo y las mayores empresas industriales en Alemania se concentraron en los bienes
de producción.
b) La clase obrera poseía una “estructura” singular: por un lado, un número reducido
de obreros de oficio y artesanos que pudieron y por otro, una gran masa de
“pobres diablos”, expropiados de sus campos, sin especialización, ni conocimiento
del trabajo industrial.
c) La escasez de obreros de oficio construyó la organización obrera, un conjunto más
o menos estructurado y homogéneo de “uniones” profesionales. los unskilled
(obreros no especializados) fueron generalmente excluidos de esa asociación.
d) Asociación sindical desde fines del Siglo XVIII hasta mediados del XIX pasó por
diversas etapas:
. Creación de Sindicatos locales por oficio (1792-1830)
. Organización de uniones a nivel de las ciudades (1830)
. Organización nacional representante de un solo gremio u oficio.
. Federación nacional de sindicatos (intento arduo y duro)
f) En 1936, tras la creación del Comité for Industrial Organization las industrias de
producción en gran escala comenzaron a contar con un alto número de
trabajadores sindicalizados.
Desde la década de 1870, se fueron elaborando nuevos métodos de gestión, que recibirán
más tarde el nombre de management científico. Este sistema implicaba un control muy
preciso sobre la organización de la producción y de la gestión. La propuesta de Taylor se
presenta como la “organización científica del trabajo” al crear un tipo de proceso laboral
que permitiría el despegue de la producción en masa. El propósito principal fue “acabar
con el “oficio” para acabar con el control obrero”, de esta manera, Taylor hizo posible la
entrada masiva de los trabajadores no especializados en la producción.
De este modo, se logró la racionalización del trabajo y en el cronometraje de las tareas. Al
introducir la norma y el cronómetro en la fábrica, lo que se pretendía era la reducción al
máximo de los tiempos muertos. La “organización científica del trabajo” estuvo orientada
a lograr una mayor economía de tiempo, con el objeto de incrementar la producción y
reducir los costos y los precios de los productos.
Entre 1880 y 1890, en Estados Unidos Taylor logró con éxito los primeros intentos de
racionalización de la labor fabril y el cronometraje de las tareas.
a) Se pone atención en los tiempos y los movimientos de las tareas para identificar
aquellos que se presentan como inútiles y seleccionar los más rápidos e
imprescindibles.
c) Se le asigna a cada trabajador un número limitado de tareas para que las realicen
de manera regular y permanente, respetando el tiempo prescripto
En el momento que interviene Taylor, los EEUU sufre una mutación industrial acelerada.
análisis de los tiempos y de los movimientos se presenta como la salida que el capital
demandó para limitar y reducir la resistencia opuesta por el obrero de oficio. De este
modo, se aseguró la entrada masiva de trabajadores no especializados en la producción.
Desde las primeras décadas del siglo XX, otra forma específica de management científico y
de organización del trabajo se implementó en las empresas manufactureras de bienes de
consumo durables, orientadas a un mercado en pleno crecimiento, esta forma recibió el
nombre de fordismo.
El fordismo consistió en la producción en serie de mercancías estandarizadas. Esto
implicaba un flujo continuo de producción y el permanente movimiento de las piezas y los
subconjuntos, evitando el desplazamiento de los trabajadores.
La “mecanización que elimina los tiempos muertos” produjo la división social y técnica del
trabajo, concretando un aumento espectacular en la escala de producción.
Henry Ford diseñó las características que debí asumir el nuevo automóvil para el consumo
de las masas, cuya demanda planteaba exigencias en función de los costos.
Implicó también otros cambios importantes en materia de normas del consumo y de vida
de los trabajadores. Estos pasaron a ser considerados consumidores potenciales, para lo
cual era importante aumentar su poder de compra y reducir los costos de producción