Dispensación Ley, Gracia y Milenio

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JESUCRISTO, FIN DE LA LEY PRINCIPIO DE LA

GRACIA Y REY EN EL MILENIO

OBJETIVO:
Mostrar al niño con argumentos bíblicos e información doctrinal, el fin de la ley
y el principio de la dispensación de la gracia, y reconocerá a Cristo con su
muerte en la Cruz del Calvario y nos dio salvación para todos y la esperanza
que el vendrá y reinará por toda la eternidad.

VERSÍCULO:
Pues la ley de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio
de Jesucristo. Juan 1:17.

BASES BÍBLICAS:
Éxodo 12: 19-20, Números 10:14, Dt 34, Josué 1:2, Josué 24:29, Jueces 1, 1
Samuel 1: 8-9, 2 Samuel 3: 1-4, 1 Reyes 2:11, Hch 1: 2-3, Gálatas 4:4-6, Mateo
1: 3-13, 4:8.

ORIENTACIÓN AL MAESTRO:
 No pierda de visto la clase
 Tenga en cuenta el aspecto cognitivo del niño para el proceso de
enseñanza – aprendizaje se desarrolle efectivamente.
 Estudie cuidadosamente las bases bíblicas.
 Teniendo en cuenta la estructura bíblica narrativa de estas
dispensaciones, maneje el tema llevando la siguiente secuencia:

1. Nacimiento de Moisés, Éxodo 2.


2. El llamado de Moisés, Éxodo 7:10.
3. La ley dada en el Sinaí, Éxodo 19:20.
4. En Cades Barnea, Números 10:14.
5. La muerte de Moisés, Dt 34.
6. Llamado de Josué y muerte, Josué 1:11-29.
7. El pueblo pide gobernante, Jueces 1.
8. Llamado de Samuel, 1 Samuel 3:9.
9. Samuel unge al Rey Saúl, 1 Samuel 9:16.
10. Samuel unge al Rey David, 2 Samuel 1.
11. Muerte de David, 1 Reyes 2:10.
12. Los días que Reino David, 1 Reyes 2:11.
13. El nacimiento de Jesús, Mateo 1, Lc 2.
14. El Bautismo de Jesús, Mateo 3:13-17.
15. Ministerio general de Cristo, Lc 4:16-21, Mt 4:8.
16. Cristo se ofrece públicamente como Rey, Mt 21:1-11.
17. Traición y arresto, Mt 27:57-60.
18. La resurrección, Mt 28.
19. El ascendió al cielo, Hch 1:1-11.
20. Prometió regresar a la Tierra, Zacarías 14:4.
21. Establecerse como Rey, Daniel 2:44, Mt 19:28,
Lc 1:32-33, Zacarías 14:9.

MOTIVACIÓN:
 En la parte interna del salón de clase organice el palacio del Rey y su
trono, con la esperanza que el vendrá y se sentará a reinar por la
eternidad.

 Coloque los números del 1 al 10 representando los mandamientos de la


ley, cada número tendrá un dulce lo cual el niño toma y el maestro grita
el mandamiento que le corresponde a cada número.

 En un rincón del palacio elabore un están de regalos, para cada niño


tome el que le corresponde como regalo de la Gracia de Jesucristo
nuestro Salvador

DESARROLLO:
La ley fue dada por medio de Moisés, escribe Juan, la gracia y la verdad nos
han llegado por medio de Jesucristo Juan 1:17. Juan vio un contraste entre la
ley y la gracia, entre lo que nosotros hacemos y lo que se nos da.

Aunque Jesús nunca usó la palabra gracia, su vida entera fue un ejemplo de la
gracia y sus parábolas ilustraron la gracia. Él algunas veces usó la palabra
misericordia para describir lo que Dios nos da. “Bienaventurados los
misericordiosos dijo Jesús, porque ellos alcanzarán misericordia Mateo 5:7 60.
Aquí Él implicó que todos necesitamos misericordia y que debemos ser como
Dios en este aspecto. Si valoramos la gracia, daremos gracia a otros.

Más tarde, cuando le preguntaron a Jesús por qué se asociaba con pecadores
notorios, contestó: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios
Mateo 9:13, citando Oseas 6:6. En otras palabras, Dios quiere que mostremos
misericordia más que ser perfeccionistas en guardar la ley.

En la ley no había gracia ni misericordia. El que menospreciare la ley de


Moisés... muere sin ninguna misericordia. Hebreos 10:28. Maldito el que no
confirmase las palabras de esta ley para cumplirlas. Deut. 27:26.
La Ley fue dada en el monte Sinaí. Jehová se manifiesta allí rodeado de una
majestad terrible, en medio de tempestad, truenos, relámpagos y fuego,
advierte al pueblo que no se acerque, que se mantenga lejos, porque
cualquiera que tocare el monte de seguro morirá. El lenguaje de la gracia no es
en el monte Sinaí donde se debe buscar. Aquellas circunstancias no son las
que acompañan una dispensación de gracia y de misericordia. En cambio,
encajaban perfectamente en una dispensación de verdad y de justicia. La ley
no era otra cosa. En la ley Dios declara lo que el hombre debe hacer y lo
maldice si no lo hace. La verdad es, como Pablo nos enseña, que la ley entró
para que el pecado creciese. 1 Romanos 5:20. La ley era, en cierto sentido,
como un espejo perfecto, enviado del cielo a la tierra para revelar al hombre
cuanto se había desfigurado moralmente.

Cuando Dios proclamó la ley, el pacto de las obras desde lo alto de aquel
Sinaí, envuelto en fuego, lo hizo en un idioma y dirigiéndose exclusivamente a
un pueblo, el pueblo de Israel. Pero cuando Cristo resucitó de entre los
muertos, envió sus mensajeros de salvación y les dijo: Id por todo el mundo;
predicad el evangelio a toda criatura". Es decir se extendió a todos los idiomas
y toda nación mucho más allá de la nación de Israel (Judea, Samaria,
Jerusalén y hasta lo último de la tierra).

Cuando Dios le dio la ley a Moisés, y éste bajó del monte con las tablas, aquel
día tres mil israelitas fueron muertos. Que cuadro tan fiel de lo que era el
ministerio de la ley tenemos en Éxodo 32, cuando Moisés desciende y arroja
las tablas al suelo, ante la realidad del pecado del hombre, y las tablas se
hacen pedazos, simbolizando la fragilidad de aquel pacto que el hombre no
podría cumplir, y seguidamente la muerte de los tres mil como bautismo de
sangre de aquel ministerio de muerte y de condenación! En cambio, cuando
descendió el Espíritu Santo en los días de Pentecostés, tres mil muertos en
delitos y pecados fueron salvados.

La palabra milenio viene del latín y quiere decir “mil años”. Es la era en la cual
Cristo reinará sobre la Tierra después de Su retorno en gloria. Su reinado será
de justicia y paz

De la misma manera que creemos en el cumplimiento literal de las profecías


que tratan de los sufrimientos del Señor, no hay razón objetiva alguna para
rechazar las promesas concernientes a Israel, los grandes juicios del fin y el
triunfo visible de Jesucristo sobre la tierra.

En efecto, el reino de Cristo ha de llenar “toda la tierra”, es decir, el mismo


espacio ocupado por los imperios y las naciones (Da. 2:35, 38 y 39; 7:27; Sl.
72:8-11). A Jesucristo le ha sido prometido “el trono de David su padre”, el cual
nunca ha estado situado en el cielo (Lc. 1:32, comparar con Hch. 1:6). Los
elegidos reinarán al principio con Él “sobre la tierra” (Ap. 5:10; 20:4, 6), antes
de ser transportados a los cielos nuevos y la tierra nueva

CARÁCTERISTICAS DEL MILENIO:


1) Satanás estará atado e impedido para seducir a las naciones (Ap. 20:1-3).

2) Un juicio determinará quiénes han de ser los súbditos del reino (Comparar
Ap. 20:4 con  Mt. 25:31-34).

3) Los que han tenido parte en la primera resurrección reinarán con el Señor
(Ap. 20:4,6; 2:26-27; Dn. 7; 27; 1 Co. 6:2-3).

4) Este reino durará mil años, cálculo establecido sobre las bases de la cifra
repetida seis veces en Apocalipsis 20:2-7.

5) Por fin se establece la paz en esta Tierra (Is. 2:2-4; 9:5-6) junto con la
justicia y la igualdad (11:1-9).

6) La presencia del Señor es manifiesta de una manera gloriosa (vv. 10; 24:21-
23).

7) Los súbditos del reino conocerán una gran longevidad y una


inmensa prosperidad (Is. 65:18-25).

8) Con todo, el Señor rige “con vara de hierro”. El mal no es pasado por alto,
aunque el Señor actúa con paciencia. Los que pecan abiertamente mueren
alcanzados por la maldición (Is. 11:4; 65:20).

9) Los judíos convertidos se constituirán en los misioneros a toda la tierra


(66:18-20).

10) El final del Milenio es frustrante. ¿A qué se debe que Satanás será soltado?
(Ap. 20:3,7-9). Es para que los súbditos de este reino de bendición, pero
autoritario,  puedan decidirse libremente por o en contra de Dios, de la misma
manera que todas las criaturas, humanas y celestiales han sido tentadas antes
que ellos.

La lamentable elección de ellos al final, muestra que el malvado corazón


del  hombre caído no se mejora con mil años de bendición, de prosperidad y de
paz  física y material. Después de esta exhibición de rebelión y castigo divino,
los cielos y la tierra actuales serán destruidos para dar lugar al estado eterno,
en los cielos nuevos y la tierra nueva.
EVALUACIÓN:
Haga las siguientes preguntas:

1) ¿Cómo se llama el hombre al cuál Dios le entrego las


tablas de la ley?
2) ¿Quién murió por nosotros en la Cruz?
3) ¿Quién prometió volver por su iglesia?
4) ¿Quién reinara por toda la eternidad?
5) ¿Cuál es el versículo a memorizar?

AYUDAS DIDÁCTICAS:
Chocolate o cualquier otro detalle envuelto en papel de regalo, es decir,
pequeño paquetes de regalos, suficientes para todos los niños (as).

ACTIVIDAD CREATIVA:
En materiales diversos (según su disponibilidad y recursividad) cada niño
elabore una maqueta con el nombre de las dispensaciones. Usando la técnica
que desee y decorada a su gusto. En una parte de la maqueta incluir el
versículo de memoria.

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