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q-

Pierre Bourdieu
Es Director del Collégede
France, de Actes de la
Bdürdiou
Recherche en Scienees
Socialesy del Centre de
SociologieEuropéene.
Sus'trabajos en la sociología
de la cultura lo han
convertido en uno de los más
destacados intelectuales de
lntelectuales,
nueEtro tiempo, ta¡lo por la
lucidez de sus análisis en el
política
y poder
campo. académico como por
su inelaudicable compromiso
político y social.

eudeba
Indice

@
Eudeba
Unive¡sidadde BuenosAires

l'ediciónr diciembrede i999 PRóLoco: l.A TA¡EAyELcoMlRoMlso DhLlNvhsrrc DoR soctAr.

E l e l e m e n t o o n t o l ó g i co :l o so ci a l e xi sr e d e d o b l e m a n e ¡ a ..........................................g
Los condicionam ienrossocialesde los producrores
d e c o n o c i m i e n t oso ci a l..........................,. .......................,......1 2
C ó m o y p a r a q u é..... ......,...........,.,.,......- 1 7

Carrllonrrlootn, clvpo lNT€LEcruAly t-tABrrus


DEcl-AsE-.........,,.........,.,,................23

UNa rNt¡n¡n¡t¡c¡óN DEtA TEoRIADELA RELlcróNsEcúNMAX'IIEBER .........................43

s o g n ¡ ¡ L P o o e t s l M ¡ ó l l co ................- ....... ...,..,,.............,.........,..6 5


l. Los "sistemassi¡nbólicos" (arte,religión, lengpa)
@ 1999 comoestrnctirrasestructutá¡tes.................
Ai¡es
deBuenos .,,,,,.............-,-......66
EditorialUnivé¡sita¡ia
2. Los "sistemassimbólicos" como est¡ucturascs!¡ucturadas
Sociedadde EconomíaMixca
Av. Rivadavia1571/73(1033) (susceptibles
de un análisisesrructr.rral) ..........,..............,........67
-fel.: 4383 -8A75 Faxt 4383'7742 J.l-asproduccionessimbólicascomoinsrrumentosdedominación........................6g
www.eudeba.com.a¡
EL cAMpocrEN.rtFrco ..................................7
5
Disenode coleccróny rapa:RicardoI udueñ'r la luchapor el monopolio de la comperenciacientlfica............
...,..,.......................7
6
ComposicióngeneraLEudeba L a a c u m u i a c i ó nd e l ce p i ta lci e n tl fi cc......... ............._ ............- .Bl
Traducción,Alicia Gutiérrcz C a p i t a lc i e n t í f i c oyp r o p e n si ó na i n ve r tr r .. ............................8 7
E l o r d e n ( c i e n t í f i coe) sta b l cci d o................ ...........................- 9 0
D e l a r e v o l u c i ó n i n a u g u r a l a l a r e vo l u ci ó n p e ¡ m a n e n r e ..........................................9 5
isBN 950-23-1043-8
lmDreso en la Argentina L a c i e n c i a y l o s d o xó so fo s........................ ....................,.........9 g
Hec ho c l r i e p ó s i t oq u e e s t ab le cela le v Il' ? 2 3
Lr c¡us,r o¡ r-q cigNcl& CóMo L{ HIsroRh socl,\L DEr¡s ctEtñcl\s soctÁLEJ
de c're lrbro'nr ru ¿lm¡cenrm
o p¿rcral enrocn Ln \istemr PUEDE SER\4R PROGRESO DEEST^SCTENCLAS
)iú.c oermirela trproducciun "tal
.............,...............
lll
o currquier mcJro ere"ronrcor' c¿nrco' ^L
;J.;J;;;. ., ,L*.u'¿^ en cuarquarrormr ¡or la situaciónambiguade la cienciasocial ...,............,...........
", permisoprevio del cditor' 112
i;;;:;;i"; ; otros sin
métotlos, el
Prólogo
l,o sd ospr inc ipios dejer ar quiz ac ión. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..............1l5
Conserrsopolíticoyconflictocicntífico ..................116
L oseFect os am biguos delaint er r ' , c ionaliz a.c. i. ó. .n. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .1. 2 0
Po¡ una "Realoolitik" científica .......... 125
La tareay el compromisodel investigadorsocial.
los oox és op o s.................. ...................
i 29
NotassobrePierre Bourdieu
..........
MÉronccrn¡flrrcoylEMReutAsocrAlDELosoBJETos ...........147

..............
DELoLTNM.RJAL
Dostvp¡zu¡l-lsMos 153
.............. AliciaB. Gutiérrez
l¡scoNo¡c¡oNLssoCIAt.EsDELAcIRCUtACIÓNDEt,AsIDEAs...'...'..'..

LosrureurruAlEsylospoDEREs ............171

furxcovrn¡nl.nTR-ADicróNuBERTARIADEtAIZeuIERDA ....................
173

'Nol¡¡voe¡tlocn¡ChEFECTIVAstN!'ERDADERocoNTM-poDERCpJTICo"...............".....
179

PoRUN¡IvI¡nNAcToNALDELosINTET-ECTU,ALES .......,...... 187


Unfllsop robiem a: c om pr om is oor et ir ada .............:......................188 ".:.paradójicarnente,la sociobgia libera al liberar d¿ la ilusión de la libertad,
tjna au ton om f aam enaz ada, . . . . . . . . . . . . . . . . . .: . . . . . . . . . . . . . . . .1. 9 2
o, mds exactamente, d¿ la creencia mai ubicada en las libertades ilusorias. l¿
l¿ecnocraciade lacomunicación.....-........ .............193
libertad no es a/g dado, sino urca conquistu,I colectiua..."l

A pnopóslToDEMICHELFoucALiLT.....Í.......... l,9Z
"¿Qur rs uacrR H,.BI¡RAL;N.{urc¡n?".
Probablemente,a Pierre Bourdieu se lo reconoceespecialmentepor sus
I-rcto resy auc t or es . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .1" 9 8
teorizacionese investigacionesempíricas, donde plantea la necesidadde su-
Radicalismointelecruaiyradicalismopolítico................ ................199
"Rumor inrelectual" y lectura canónica perar diferentes tipos de falsasdicotomías, a su juicio surgidas desde el ori-
"Unadenegaciónde comprensiónl'
........... ...............202 gen mismo de las ciencias sociales.2
No es mi intención, en estaslíneas, retomar todas estasproblemáticas ni,
Prmnr BounorEu y LoIc'SfACeuANT.Sonne r¡s Rsrucr¡s DEIA RAZóNIMpERIAusrn... 20i ¡:¡ucho menos, hacer una presentacióngeneral de su trabajo.3Pierre Bourdieu

UNrn rvo luclóNc oNSERVADoRAENTáEDr c r ó N ............223


.............
Con ocimient oy des c onoc im ient o . . . . . . . . . . . . .2. 2 4
' l¡ esrructr¡radel crmpo edirorial 1. Pierre Bourdieu, "Fieldrvork in philosophy'', en: P Bourdier¡, Cosasdichat, Buencs Aires,
tacon stru c c ióndelas c ar ac t er í s t ies penin e n.t.e. .s. . . . . . . . . . . . . . . : . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2 3 2 Gedi sa, 198 9, p. 27.
Posicio ne s y t om as depos r c r ón. . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..............24L 2. En .eietidas oponunidades, el autor ha insistid<¡en que para una "ciencia social total" o "una
l¿ dinámicadel campoy lasnuevastcndenciasde la produccióneditorial............248 anrropología total" -designaciones que ha utilizado indistintamente en sus obras-, que pretende
De lasfuncionesantagonistas
de la traducción ............. .................256 comprender y expiicar las pricticas sociales,es imprcscindible la ruprura con falsasdicotomfas:

La mora ldelahis t or ia ...262 tcorla vs. empiria, individuo vs. sociedad,objetivismo vs. subje¡ivismo, reproduccién vs. camlrio,
io económico vs. lo no económico, métodos cuantitativos vs. métodos cualitetivos, etc,
3. En otro trabajo he realizado una aproximación conceptual a la sociologla de Pierre Bourdicu.
A¡¡n<o
.......... 265
"...................
Allí puede verse un¿ explicitación de las principales líneas de construcción de la teorl¡ del autor
y un análisis detrllado de los conceptos clave que esrructuran su pcnsamiento, y de cómo sc
Posip¡cro ....269
ar¡iculan entre sí en su lógica de funcionamiento (A. Gutiérrez, Pierre Bourdieu: ta prittius
teórica, por la
es un aurof que, por la riqueza y solidez de su consirucción si n embargo'y r et om ando al pr opio aur or , cr eo necesar ioexpr icit arqr r e
fecur¡cliclacl que presenrapara abordar empíricamente la realidad social, y por esosmomenros, que esasmayores posibilidades,se fundan en una ontología:
s u s p <l l é m ic os plant eo s , c o n s ri ru y e e n n u c s tro p aís un referente cl ave lo social existede doble manera, en las cosasy en los cuerpos.ty es precisa-
temá-
-para utilizar su perspecrivao para criticarla- dentro de la amplia gama menre una suerre de complicidad onto/ógica,enrre un habitus y un campo, lo
rica y de la.sposibilidadesde abordaje de las cienciassocialesv humanas- que consriruyeel fundamento de toda prácricasocial.Esra relación de com_
Aquí me interesadest¿cat especialmente,una de esasfalsasdicotomías: la plan- plicidad onroiógica, dice Bourdieu:
readae¡rrre el obicdvismo y el subjedvismo. No tanto pala explicitarias,sino más
bicn como recrlrsometodológico,que me permireexponerasPectos que considero ".'.se institwye entre dos 'realidades',el habirus
y e/ campo, que ,on dos modos
irnponantes como aPoiles al conocimiento de las cienciassocialesen general,a los d¿ existenciad.ela historia, o de k saciedad,la hhtoria /rerha'rora, institución
productoresde eseconocimiento, y a sus respectivosProcesosde producción. objetiuada,y la historia lteclta cuerpo, institz¿ciónincorporada.,,6
En primer lugar, tomaré esafalsadicotomía como Punto de partida y funda-
mento de ciertascuestionescentralesque hacen a ia construcción teórica de En su consrrucciónteórica,fundadaen una epistemologíabachelardiana
(,.e1
Bourdieu. En segundo lugar, y fundamenalmenre, la retomaré Pafa exPoner hecho cienríficose conquisra,corsrruye, comprueba")7yponiendo en marcha
algunasde las ideasdel autor que permiten ¡eflexionaracercade ciertos proble- una forma de pensamientorelacionale histórico,Bourdieu señalaque su filoso_
mas que son de especialimportancia en el procesode investigación'Por último, fía de la acción es disposicional,queroma en cuenra,
intentaré demostrar que este planteo no queda reducido al ámbito de la ciencia
cien-
--o más precisamenteai de las condicionesde posibilidad del conocimiento "...las potencia/idades'inscritasen los cuerpotde losagentes
1t en /a estn¿cturade
rífico--,sino que implica, alavez, una Postura éticay política en relacióncon los las situacionesdond¿ actúan, o más exActa.mente en su relación."s
productoresde co¡rocimientosocial y los demás agentessociales.
Mi i nsi srenci ae n t om ar est os elem enr os onr ológicos, en la t eor í a de
Pierre Bourdieu, es porque creo que ello constituye el hilo conducror de
su
El elemento ontológico: lo social existe de doble manera

El hacer referenciaai "objetivismo" y al "subjetivismo",y la necesidadde 5. H abl ar de "l o soci al "en B ourdi eu i mpl i c a, s i muk áneamenre,habl ar dc "l o hi s tóri c o".
Lo que
ro ma i l o m ejor de am b a s p e rs p e c ri v a se, n l a m a y oría de l os i rabaj os de el espaciosocial, los campos ylos babins, las insriruciones y los cuerpos, son
ho¡ son ei resu¡ado
Bourdieu, se perciben e interprean sólo como dos momentos anaiíticos:un de lo que han venido siendo.

primcr momento obietivista,en el cuai el investigadorreconstruyela estruc- 6' P Bourdieu, R¿islnr?rtlti(lues.sur la théorie& I'action,pa,rís,Ed. du Seuil,
1994, p.9.lRamnes
pnicticas, sobreLz teoría de l¿ acción, Barcelona, Anagrama,7997f .
¡ura rie relacionesque son independientesde la concienciay de ia voluntad
7 - cF. P. Bourdieu, J. c. chamboredon v J. c. passeron,El ofcio de sociólogo,
d c l o s a gc nt es y, un s e g u n d orn c me n to , d o n d e s e i n tenta caP tarreP resenta- xxt, 1975.
Buenos Aires, siglo

ciones, percepcionesy vivenciasde los protagonistasde las prácticas. 8'P B ourdi eu, R ai sonsprati ques ,op.c i t,p.g(des rac adomío).E s tos c omenrari os rec uerdan,deal guna
En consecuencia, se toman como dos pasoslógicosdel an¿ílisis sociológico,que manera! a Anrhony Giddens. Muy bre'emenre, puede decirseque, cn dicho
autor, las propiedades
permitirían mayores posibiiidadesde explicar y comprender la realidad social'o estructurales-de reglasy reclrrsos- constituyen un orden r.inua.l de relacionrs
transforrnadoras. Con
ello, lo estrucrural no existe como espacio-ternporal, sino cuando se acrualizan
en l," prácti""s que
consrituyen los sistemasy bajo la forma de huellas mnémicas, gracias a
las cuales los acroressociales
co-
;ocia/es,Buenos Ai¡es, centro Editor de Amé¡ica L¿únq 1994 v segunda edición revisada, orientan sus conductas. En otras pa.labras,existen comopatencia/idzdz:
quese acrualiz-a¡medianre las
de l a U ni ve¡si dad
e dic ión de I a E d i r o r i a l U n i v e r sir a r iad e M isio n e sy la l) ir e cció n d e P uL'l i caci ones prácticas de los agentes,de manera reproductora o ¡ransformadora,
según laspotencia/iúzrks d,elos
N ac ional d e C ó r d o b a , C ó r d o b a , 1 9 9 5 ) . agentes(cf' A' Giddens, I-as nueuasregln de/ métodosotiohglco,
Buenos Aires, Amorrorru, l9g7 y I-a
referenci aa
4 . Es peci a l m e n r ea, u n q u e t am b ié n e stá e xp licita d o e n o tr o s tr a baj os,el au¡or hace co¡tstincióndt la socied¿d,Buenos Li¡es,Amorronu, i 99>. También I. C-ohen,"'Iéoría de la csrrucruración
op. ci t., pp- 127-142.
es t r c ues r i ó n e n " E s p a c i o s o cia ly p o d e r sim b ó iico ", e n : P Bo u r d i eu, y Praxis sc:ciaJ",en: A. Giddens et al., I¿ teoríasocia/boy,Alianza, Madrid, l99l).
AliciaB. Gut' :z Prólogo

c ons t r uc c ió n te ó ri c a : ¿ C ó mo p e n s a r e n r oncesel rema del P oder?¿C ómo posible o no posible), h pensabley b no pensable,b que espara nosotrosy lo que
explicar \a razonabitidadáe las prácricassociales?¿Cómo enrender la rela- no esPLtr4,nosatros...iy que son principios evaluativosde las posibilidadesy
ción sujeto-objeto de conocimiento? En definitiva, ¿cómo explicar y com- iimitaciones objetivas, incorporadasai agente por esasmismas condiciones
prender las prácticas socialesdesde esta perspectivaanalítica? objetivas,productosde un sentidopráctico,que funcionanen la prácricay que
Brevemente, puede decirse ;::e el Poder es consrirr.rriiiode Ia sociedad ¡ tienden a pensarel mundo "tal cua! es", como "yendo de suyo", a aceptarlomás
ontológicamente,existeen las cosasy en los cuerpos,en los camposy en los que a intentar modificarlo...'o;enronces,no podríamoscomprenderpor qué
babitus,en las institucionesy en1"',scerebros(como diría Marx). Por lo ranro, Bourdieu plantea una racionalidaolirnitada de la prácticasocial.
el poder exisre físicamente,objetivamente,pero también simbólicamente. Aho¡a bien, na la concibe a la manera de Simon -porque el individuo
Y aquí es necesariorecordar que, si de la ob¡a de lr4arx Bourdieu ha toma- nunca conoce toralmenre su conjunto de oportunidadesy porque el espíritu
do que la realidad social es un conjunto de relacionesáe fuerzas enrre clases, humano es limi¡acio-, sino rambién, y especialmenre,porque el agente so,
históricamente en luchas unas con otras, de la obra Ce rüleber ha romado que cial está socialmenrelimiado. Por elio, en rodo caso, prefiere hablar de priic-
la realidad social es también un conjunro de re/acionesde sentido,y que toda ticas rtzzonables,cornprensiblesy explicablespor su sentido objerivo y su
dominación social (la de un individuo, de un grupo, de una clase,de una sentido vivido, enrendidos dialécricamente.
nación, erc.) a menos de recurrir pura y continuamenre -lo que seríaprác- "Sentido objetivo" y "sentido vividc¡" nos lleva nuevarnenreal planteo de
ticamente imposibie* a la violencia armada, debe ser reconocida-reconoci- la superaciónde la visión objerivistay de la visión subjerivistade cualquier
da en cuanto se desconocenlos rpecanismosque hacen rgconocerla-,acep- problemárica social, 1.,con ello, nos recuerdael elemenro ontológico Ce la
tada como legítima, es decir, romar un sentido, preferentementeposirivo, doble existenciade lo social.
de manera que los dominados adhieran al principio de su propia domina- ParaBourdieu, ambas manerasde abordar la realidadsocial son igualmenre
ción y se sientan solidariosde los dominanres en un mismo consensosobre parciales:el modo,¡te pensamientoobjetivisrarescaralas relacionesobjetivas
el or den es ra b l e c i d o . que condiciorran las prácricas(el sentidoobjetiuo),pero no puede dar cuena del
Legitimar una dominación es dar toda la, fuerza de ia razón a ia razón (el sentido vivido de las mismas, ni de la dialécticaque se esrableceentre lo obje-
interés,el capital) del más fuerte. Esto supone la puesraen prácricade una tivo y lo subjetivo. El modo de pensamientosubjetivisratoma en cuenra el
uiolencíasimbólica, violencia eufemizada ¡ por lo mismo, socialmente acep- sentido uiuido de las prácticas, las percepcionesv r€presenracionesde los agen-
table, gue consisteen imponer significaciones,"de hacer creery de hacerver" tes, lo que ellos piensan y lo que sienren,sin considerarlas condiclonessociales
para movilizar. La vioiencia simbólica, enronces, está relacionadacon el po- y económicasque constiruyen el fi¡ndamento de sus experiencias.rl
der simbél¡co, y con ias luchas por el ooder simbólico.e A nal i zar dialéct icam ent e am bos senr idos es indispensablepar a el in-
Sin tener en cuenra rodos esros elemenros-poder físico y poder simbóli- vesri gado rque quier e explicar y com pr ender pr áct icassociales.Par a ello,
co, violencia objetiva y violencia simbólica, condiciones objetivas y condicio- debe aprehender el sent ido'pr áct ico, iapr ar el sent ido del juego social,
nes sirnbólicas-, ¿cómo entender la razonabi/idad d,e las prácticas sociales aquel que per m it e vivir com o "evident e", com o "nar ur all', el senr ido
que piantea Bourdieu? obj eti vado en las insr it uciones.
Si na tenemos en cuenra que los /tabitus son esquemasde percepción, de
apreciacióny de acción inreriorizados,sislemasde disposicionesa acruar, a
pensar,a percibir, a s€nrir más de cierra manera que de otra, ligadosa definicio- i 0. Es siempre necesario¡ecordar que hablar de babins implica tener en cuenta Ia historicidad del

nes de úpo lo posible,y lo no posible (porq,re objerivamenre ha venido siendo agcnteydel os s i s temas derel ac i c nes :el habi ns s eoponetan¡c al as ex pl i c ac i onc s mc c ani c i s tas ' ¿

Í: a las que conciben las prácticas como cjecución dc un modelo, cuanro a aquellasquc suponen las
* accionescomo el producto de una ac¡ividad racional que realizacálculos explfcitos en rérminos dc
ü
s costos-benefi c i os .
9. P Bourdieuy L Vacquant, Rl1owti,Parfs,
Ed.du Seuil,1992. Porunaanttropología
fRespuestas. I l. Cf. P Bourdieu, Le senspratiqu¿, París, Ed. de lt1;nui¡, 1980 [El sentidoprtictico, Ñ4rdrid,
rcflcxi
t'e,México,Griialbo,I 9951. 'l aurus,199l l .

f,
Sin estare¡ desacuerdocon eseplanreo,sugieroque la reflexividadepistémica
En consecuencia,dado que las estructurassociaiesexisten dos veces,que
supone pl antea r una det er m inada m aner a de m ir ar y analizar los
lo socialesráconformado por relacionesobjetivas,Pero que también los indi-
condicionarnientossocialesque afectan al proceso de investigación,tomando,
viduos tienen un conocimiento prácrico de esasrelaciones-una manera de
como punto especialde la mirada, al propio investigadory sus relaciones.
percibirlas, de evaluarlas,de sentirlas,de vivirias-, e invierten ese conoci-
A mi juicio, objetivar a! suieto objetivante consisre,fundamentalmenre,
miento práctico en sus actividadesordinarias, se impone ai cien¡ista social
"subjetiva" a Ia vez, en ubicar al investigado¡ en una posición dererminada y analtzar las relacio-
una doble lcctura de su objero de esrudio: "ob,fetiva'y
nes que mantiene, por un lado, con la ¡ealidad que analizay con los agenres
pero concebidasen una construcciónteórica que suPone una relación dialé-.
cuyas prácticas investiga, y, por otro, las que a la vez io unen y lo enfrentan
ctica entre ambas.
con sus paresi/ las institucionescomprome¡idasen el juego cien¡ífico.
Se trataría, pues, de un dobie sisterna de relaciones.
Sin¡éticamente,podría decirseque el primer tipo de relacionesalude a 1o
Los condicionamientos sociales deJos produqtores
que Bourclieullama "el sentido de las práctias", y apunta a reflexionarsobre
de conocirniento social
las posibilidades-e iinposibilidades- de aprehenderla lógica que ponen en
marcha los agentessocialesque produceh su práctica, que acrúan en un riempo
Ahora bien, si rolnamos todos estos elementosque he rnencionado y nos
y en un contexto determinado. Esta lógica es diferente a ia "lógica científica',
ponemos *como investigadores- en el lugar de un agente social como cual-
la iógica que el investigadorimplica en su inrenro de comprender y expiicar
quier orro, con condicionamienros objetivos, actuaies e históricos, y con
ia problemática que le preocupa, y sr¡pone,poí supuesro,caprar el sentido
condicionamientos incorporados a lo largo de una trayectoria individuai' que
de las práccicasque el investigador analiza.
sólo es una variante estructural de una trayectoria de clase, ;cómo explicar y
El segundo tipo de relacionesalude, en cambio, a la probiemárica funda.
comprender -nosorros mismos- las problemáticassocialesque ncls preocupan?
mental que se plant ea en sociologí a del conocim ienr o: la de los
Inv"srig"r prácticas socialesdeten¡inadas y' Por lo t"tfto, comprenderlas
condicionamientossocialesque afectan la producción del investigador.Des-
y explicarlas,desde la construcción teórica de Bourdieu implica, también,
de la mirada de Bourdieu, esoscondicionamienrostienen cie¡tascaracterísti-
poner en cuestión la propia práctica del investigador'
cas, y afectanla tarea del p.r6dn.,o¡ de conocimiento, en la medida en que
Y, con ello, entramos de lieno a la cuestién de la reflexividad y de ia
ésteforma parte de un espacio.dejuego: el campo cienrífico.
objetivación del sujeto objetivante.
Ti ataréJe cxp licit arun poco m ás est asideasqr r eson, a m i iuicio, apor ues
Para \X/acquant,si hay una característicaque distingue especiaLnentea
de la teoríasocialcontemporánea,es s'r Preocupación fundamentaies de la teoría de Bourdieu al campo de las ciencias socialesen
Bourdieu en "el paisa.ie
constante por la reflexividad".l2 generaly de la antropologíay/o sociologíacn parricular.

Recuerdaque Bourdieu sugieretres tiPos de sesgoscaPacesde oscurecer Ce¡ relación al primer aspectoseñalado-separable de! segundo sólo ana-
líticamente-, diré en primer lugar que, para Bourdieu: ranto el objetivismo
la miraciasocioiógica:el primero (que ha sido recordadopor otros autores)se
personalesdel investigador:clase,sexo, ecnia;el como ei subjetivismoconstituyen "modos de conocimiento teórico" (sauatzr),
origina en las características
es decir, modos de conocimienro de sujetos de conocimiento que ana.Tizan
segundo,esráiigado a la posición que el analisraocupa, no en la sociedaden
una problemáticasocialdeterminada,igualmenteopuestosai "modo de conoci-
senrido amplio sino en el microcosmo del campo académico;y el tercero,el
miento práctico", que es aquel que tienen ios individuos "analizados"-los
más profundo y peligroso, es el sesgointelectualista,aquel que lleva a conce-
a ser interpretadoy no como conjunto de agentessocialesque producensu prácrica-y que constituyeel origen de la expe-
bir el mundo como un esPectáculo
rienciasobreei mundo social.
problemas concretosque reclamansolucionesPrácticas'
Su propuestaconsisteen reconocerque hay una especialrelación que el
investigadormantiene con su objeto (el grupo de agentesque estudia) y que
12.L. \Wacqua¡t,
"lntroduction", op cit',p' 34'
y L"$facquant,
en:P.Bourdicu esa relacióntiene que ver concrjtamenre con las prácticasque se pretenden

12 [')
+$

Alicia B. Gutiérrez
Prólogo
*
*
explicar,y específicamentecon las diferenciasque exisrenentre.la posición del * (pone entre paréntesissus usos prácticos)y está dotado de instrumentusde
e
in"errigador (como sujeto de conocimiento) y la de los agentesque analiza. g eterftización,acumulados a lo largo de su trayectoria como investigador, y a
É
En .esesenrido, la relación práctica que el investigadormantiene con su É costa de tiemp<1,esfuerzos,etc. (teorías,métodos, técnicasde registro, de
*qlre E
objero es la del esráexcluido" del juego ¡eal de las prácticasque esrá # análisis,etc.).
a'"lizando, de lo que allí se juega, de ia illusio, de las apuesras;no riene allí €
a
É En consecuencia:
5
B
stt lugar, ni t.ienepor qué hacerseallí un lugar: no comparre ias experiencias sÉ
" ..la consm¿ccióncientifca no puede asir losprincipios d.ela lógica práctica
l;
vivir{asde ese espacio,ni las urgenciasni los fines inminenres de ias accio- i
a
nes pr ác r ic a s .l s sino haciéndolessufir un cambio de naturaleza: la explicitac;ón reflecnnte
' :]
conuierte una sucesiónpráctica en trna sucesión rePresentudt, una acción
E
No se rrata aquí de una "distanciacuiturai".(esdeci¡ compartir valores ü
1,
¡radicionesdiferentes)sino, más bien, de una "distanciadiferenterespecro
a
c.: oriennda en relación con un espacioobjetiuamente constitui¿o como ettruc-
+
la necesidad",de una separaciónde dos reiacionesdiferentes con el mundo, 4
tura de exigencias(las cosas'por hacer') en operación reuersible,efectuada en
una de elias reórica y la otra práctica: un espacio continuo y homagéneo.Estd trantformación ineuitable est¿iins-
c,3 crita en el hecho dz que los agentet no Pued¿n dominar adecuadamente el
s
"El in¡electualismoestá inscrito en el hechode F
modus operandi que lespermite engendrar prácticas ritudles.correctamente
int:roducir, en el obieto, la rela- F
en situación, I por refe-
ción intelectual con el objeto, de sustituir ra relación práctica co) h práctica e
fonnadas, sino haciéndolo funcionar prácticamente,
por la rekción que e/ obseruadormantiene con su ob¡ei,,}a rencia a funciones prácticas. "lt
_

"Relacién teórica con la práctica'ry "relación práctica


con la práctica',no Ahora bien, recordemosque ese doble sistemade relaciones,en el que
deben, pues, confundirse, si se pretenden explicar y comprender prácticas está inserto el investigador, sélo es separableanalíticarnente:el investigador
'.s oc iales .
\i desarrolla su invÉstigación también en un tiempo determinado (la lógica
l-a práctica se desarrollaen el tiempo, y riene, por ello, una seriede carac- práctica del investigador con su investigación), con un ritmo, con un temPo,
rerís¡icas;es irreversible.Tiene ademásuna estructura temporal -un
ritmo, con sus propias urgencias. Támbién iuega cn el riempo y juega estratégicd'
vn tempo-, y una orientación. Tiene un senrido: se juega ez el tiempo,
v se nente con el tiempo: tiene informes, plazosy formatos; Porque, parafraseando
juega estatégicamentecon el tiernpo. El que está inmerso
en el juego se ajusta a Bourdieu, los invesdgadoresno esrán fuera del juego''6
a lo que puede prever' a lo que anticipa, tiene urgenci"., y .o,n"
decisiones Como agenre social que juegácl juego de la ciencia, está objerivamente
"en un abrir y cerrar de ojos, en el calor de la acción,l. condicionado por el esado det juego, por la historia del juego, y por lo que ha
E n r elac ió n c o n e l ti e mp o d e l a p rá cti ca, er ti ei mpo de ra ci enci a
es incorporaCo a lo largo de una trayeccoria social general y especlfica del juego.
'iintemporal". Para el analistael Pero existen herramientas que permiten liberarlo, al menos en Pafte' de esos
tiempo se descruye:puede sincronizar,pue-
de tot¿lizar, puede .iugar con el riempo (volver a ver lo filmado, volver
a condicionamienros, proporcionadaspor la "sociologíade la sociologfa":
.escucharlo grabado). El analista puede darsey puede dar una visión sinóprica
de la totalidad y?e la unidad de las relaciones,puede sincroniza¡ incluso, "Iz socioíogtad¿ la cbncia d¿scawasobreelpostulzdo dt que la uerdad &l produc'
lo
que no lo está en "esradoprácrico". to *te tratalía dz eseprodacto ma! Particilkr que et la uerdadcienr{f*-, reside en
Ei invesrigador tiene, en definitiva, según las palabrasde Bourciieu,"el una especieparticalar de condicion¿; socialesde producción; es decir, más
.¡,r
privilegio de la toralizacién":neurralizaprácricamentelas funciones ii
r¡rácticas 'i;
lr

15.Ibi¿.,p. I52 (destacadodelautor).


1 3 . C f . P B o u r d i c u, L c:e n r
llr a tiq u ? ,o p . ( i,. t i6. P Bourdieu, esránfueradeljuego?",
'¿l-osinrelectuales 7 cubura,
sociohgla
en:P Bourdieu,
t4. Ibid., p. 62. México,Crijalbo,199A,pp' 95-100.
{
{
I
pre{tseincnt¿, rn un ettado dercrmina¿/ode /a estructura7 del funcionan¿iento ello, el condicionamienL-,social de las produccionesligadasa la ciencia so-
d,'! campo cienttfco. El uníuerso puro'de k ciencia más pura'es un camPo ci al -' no const;ru yen,a juicio de Bour dieu, un obsr áculo epist em ológico
sacial como eualquier otlo, con sus re/acionesde fuerza ! sus monopolios, sus i nsuperabl e.
lachas y sus estrategias, sut ínteresesy sus benefcios, pero donde todos estos sugiere que, en la medida en que la sociologíadel conocimienro propor-
invarianres reuistenformas específicas. "t7 ciona instrumenros adecuadospara analizarel condicionamienro social de
las produccionescientíficas,poniendo en evidencialos mecanismosde com-
En ot r as palabr as,Bo u rd i e u c o n c i b c a l c a m p o de l as ci enci ascomo un petencia, las relaciones de fuerza y las esrrategiasutilizadas por l<-rsagenres
'campo semejantea los orros campos sociaies.Es decir, como lugar de relacio- socialesque ias producen, esraríarambién en condiciones de señalar condi-
-aes -de
fuerza, como campo de luchas donde hay interesesen juego (a pesar ciones socialesde un conrrol episremológicoque contribuy'n a un mayor
de que las prácticas de los agentes pudieran parecer desinteresadas),donde fortalecirnientode la comunidad científica, sus instituciones, y sus propias
los diversos agentes e instituciones ocupan posiciones diferentes según el leyes de funcionamiento.
para defender
epital específico qu€ poseen, y elabóran distintas estrategiasrs Ello estaríaen relación, también, con el grado de auronomía relativa que
su. capial -el que pudieron acumular en el curso de luchas anteriores-, capi- lograre tener el campo cienrífico en general y el de las ciencias sociales en
ral simbólico, de reconocimientoy consagración,de legitimidao y de autori- particular: mienrras logren obrener mayor peso sus propias leyes de funcio-
dad para hablar de la ciencia y en nombre-.de la ciencia. namiento y las insrancias de consagracióny legitimación específicas,mayor
Pero, además, el campo de las ciencias sociales-y sus sub-campos- está en será su auronomía frente a la incidencia que pudieran rener orros campos (el
una situación muy diferente con relación al universo general del campo de las polícicoy el económico,por ejemplo) sobre el espaciode juego de la ciencia
ciencias,y esa diGrencia deriva dei hecho de rener por objeto al mundo social social, y más Fácilmentese podrá jugar el juego de las cienciassocialescon las
y de que todos los que participan en él pretenden producir una represenración propias armas de la cienciay no con otras.
cienrífica del mismo. Entonces, quienesjuegan el juego del'campo de las cien- De esramanera,la hisroria social de las cienciassocialesse consriruyeen
cias sociales,no sólo entran en concurrenciaentre sí (los especialisas,los cien- el instrumento privilegiado de la reflexividad crítica, al proporcionar los prin-
tíficos), sino que también luchan con otros profesionalesde la producción cipios de una Realpolitib científica, destinada a asegurar ei progreso de ia
simbólica (escritores,poiíticos, periodistas)y, en un sentido más amplio, con razón cienúfica.
todos los agentessociales,quienes,con capitaleso poderesmuy diferenres,con
mayor o menor éxito, trabajan también para imponer su visión sobre el mundo
social. Y &ta es una de las razonespor las cualesel cientista social no puede C ómoyparaqué
obtener an fiícilrnente,como ios otros sabios,el reconocimiento del monopo-
lio,del discurso legítimo sobre su objeto.ie "contra ia vieja distinción dihheyana, es necesarioplantear que compren-
Ahora bien, todos estoscondicionamientos-objetivos y simbólicos- aso- dzr y explicar tln una. misma cost."2o
ciados a la inserción social de los productores de conocimiento sociai *y, cor, ¿cómo comprender y expiicar las prácticasde los agenressocialesque nos
preocupan?En primer lugar, recordando que ellas son el producro de una
complicidadonrológicaenrre un habirusy un campo, o, dicho de otro modo,
17. PBour d i e u , " e c h a r n p s cicn r ifiq u e ",e n :Acte sd e kr e ch e r ch eensci encessoci abs,N .2-3,1976, son ei resuiradode la relación dialécticaenrre los dos estadosde lo social-
p p, 88-10 4 [ i n c l u i d o e n e s tevo lu m e n ].
histórico: ia historia hecha cosasy la historia hecha cuerpo.
I 8. Rec o r d e m o s b r e v e m e nteq u e la n o ció n d e e sr r a te g iae, n Bo urdi eu, se conci be como l íneas
objetivas orientadoras de las prácticas y no supone necesariamenteuna explicitación conscienre
de los mecanismos por parte dcl agente social.
19. P Bourdieu, "La cause de la science",en: Actes de la reche¡cheen sciencessociales,N" 106- 20.P Bourdieu,"comprendre",
en:P Bourcli
euera!.,La misiredu monde,pa¡ís,
Ed.du Seuir,
107, 1995 , p p . 3 - 1 0 [ i n c l u id o e n e stevo lu m e n ] 1993,p.9 10(destacado
delautor)lLamiseria
drl mundo,Madrid, FCEdeArgentina
s.A.,19991.

t6 17
H - AIkiaB. Guriérrez Prólogo
E t,.

i-ieémó cmprender y explicar nuestraspropias pnícticas, como in'/esrigado- Y mása ún:


É r,:,.r# RÉcü'rdan¿ürarnb¡¿nque eUasson el producto de la misma historia que esrá

F
F
d" o*Éos y que está incorporada como una suene de segundanaturaleza.
¿Cdmo combinar ambas preguntas -y responderias?
Desde la perspecti'a de Bourdieu, la socioloeía misma -la sociología de la
"...a pesar de las apariencias, b qtte e/ ntundo social ha hechopuedz, armado
de esesaber,deshacerlo.Lo que essegurc,en todo ctso, es que nada es tnenos
t inocenteqtte ellaissez-faire(...) todapolítica que no saquePlentnlentePtlrti'
sociología- podría proporcionarnos herramienrasque nos ayuden, si no a
F
F eliminar por completo nriestroscondicionamientos,al menos a controlarlos
do de lasposibilidades *por reducidasque ellasfueran- que son ofecidas a la
F acción,y que la cienciapttede aywdar a descubrir putde ser consideradacomo

r
y hacerlos conrrolables pára nuestros pares.
cu/pabiede no-asistenciaa persona en peligro."23
Reflexividad epistémica,objetivación del sujero objetivante, aparbcencomo
los únicos caminos de iibertad posibles.
Si tuviera que resumir brevemente,en una fórmula, por ejemplo, io que
En primer lugar, como una cuesrión individual y a rravésde un proceso
iI de autbsocioanálisis; esto es, de auroexpliciración d.e los disrinros
meca¡ris-
he intentado expresaren estaspáginas,diría que Bourdieu nos propone io
si gui ente :
mos y condicionamientos que me separan(por la función que cumplo)
i de los
agentescuyas prácricas inrento expiicar y comprender. En segundo
Conocimientod¿ los mecanistttos I de los sentidos+ autosocioanálisisasistida +
ruga¡ propio (objetiuacióndel sujetoobjetiuante) = posibilidad dz actuar
ttutosocioa¡uilisis
analizando mi posición como invesrigado¡ ligado a o..o, inr,.rtigad.ores
que
ocupan orras posicionesF que me unen y me enfrenran en el t, obligación de hacer/o...
: iuego cienrífico.
Pero la verdadera conquista ei coiectiva...Y para ello ei .,...."iio explicirar
los disdntos mecanismos del juego, desenrrañar-hasra donde elio
i sea posi-
ble- las reglas que regulan el juego de este modo, crear condiciones
-l

¡ ¡ socia-
les de posibilidad para el co¡rocimiento cienrífico. \-
t
{ ¿Y los agenrescuyas prácticas socialesinvestigo?con ellos, en un proceso de
't
J
entrwisra, por ejemplo; puéde ponerseen práctica un procesode',aurosocioanálisis
I asisddo"; esro es, lograr que el enrrevistadoasociesus problemas, sus
¡ malesrares,
sus miserias, no a cuestionespersonalessino sociales,producto
I no de un Desti-
f no, sino de condiciones socialesdeterminadas,con Ia guía del entrevisador
I que,
¡ por supuesro, debe objetivarse como sujeto objetivante.zr
Uno podría pregunraraquí...
¿paraqué?...y Bourdieu ya da, a mi juicio,
.una respuesta taxativa en "post-scriptum":

"Lbaaral niuel dz la conciencia mecanismos


que hacen k uid¿ dohrosa, inuiuible,
no esneutr¿lizarlos; actualiur la.scontradiccioner, no esresoluerlas(...)
pero ano
'no puede tener como nu/¿ el efectoque puedz ejercer sobre aquelbs
que suJien,
d¿scubrir k posibitidad d.eimputar su ,u¡i-irrro a causassocialesy de sentirse
así disculpadns."zz

21. Ibi¿.
'Post-scriprum",
22.P Bourdieu, en:La mi¡tredu mondc,
op. cit.,p.944.
23.Ibid.
Ís
X3 Pierue
ffi#ffifl#r#ffi
Campodel poderecampointelectual
v habitusde.-lase*

i la historia de la iiteratura, en su forma tradicional, queda encerradaen


Q
u) el estudio ideo.gráfco de casos paniculares capacesde resistir ai descifra-
ririento mientras só'n apreh"ndidos como "demandan" serlo, es decir, en sí
mismos y por ellos mismos; y si ella ignora casi completamente el esfuerzo
por reinsertar la obra o el autor singular que toma por objeto en el sistema de
relaciones constitutivas de la cl¿se de los hechos (reales o posibles) dei que
forma pane socio-lógicamente,esporque el obstáculo epistemológico con el
que se choca toda aprehensión estructural -a saber, el individuo direcamente
perceptible, ens redlissimuln qve exige con insistencia ser pensado en su existen-
cia separaday que requiere por ello una aprehensión sustancialista- reyiste
aquf la forma de una individualidad "creadorJ', cuya originalidad deliberada-
mente cult ivada est á const it uida par a suscit ar el ser it im ient o de la
irreducdbilidad y de la a¡ención reverencial.rDejándose imponer este.objeto

' "Champ du pouvoi¡ champ intellectuelet habitus de classe",Scolics,Cahietsde recherchesde.


I'Ecolenormalesupéricure,l, 1971,pp.7-26.
l. R \trflelleky A. Warren abren así el capítulo que consagrana la biografla en su Thcoryóf
Liter¿tarc(New York, Harcourt, Braceand Ca.'), 1956, p. 63, [Tioría d¿ l¿ litaatun, M¿drid'
Gredos, 1968): "1-ecausamás evidentede una obra de a¡te es su creador,cl autor; nmbién la
y la vida del escriroresuno de los métodosmásantiguosy mejor
explicaciónpor la personalidad
establecidos
de la historia literaria".
Si bien el interés por ia persóna del escriror y del artisra prog¡esaparalela,
preconsrruidpque cs el artisraindividual o, lo c¡ucviene a ser lo mismo, bajo
mente a la autonomizactón ciel campo inrelectual y arrísrico y a la elevación
otras apariencias,la obra singular, la t¡adición positivistaconcede rodavíalo
correlativa del status (y del origen social) de los productoresde bienes simbó-
esenciala !a ideologíárománcicadel genio creadorcomo individualidad úni-
licos,3es sélo en la época románrica que la vida del escritor, rransfo¡madaella
ca e irr€emplazable,y los biógrafos que, Para darse las aparienciasde la cien-
misma en una sue¡te de obra de arre (basrapensar en Byron por ejemplo),
cia, exhiben infiniarnente los documentos Pacientementeexhumacloss€ con-
entra, en cuanto tal, en la literatura: en efecro,viviendo, como bajo los ojos de
denan al desrino de esosgeógrafos,cuya preocupaciónde fidelidad a lo "real"
la posteridad, una vida cuyos meno¡esdetallesson dignos de la recolección
los condena, según la parábola de Boiges, a Producir un maPa ran grande
autobiográfica e int€grando, con el género de las "rnemorias", todos los mo-
como el País.
mentos de su existerlciaen la unidad reconstruidade un proyecto estético;en
La ruptura con las prenociones,que es la condición de la construccióndel
resurnen,haciendode su vida una obra de arre y I" .n",.ri" de la obra .ie arte,
objeto científico, no puede ser cumplida -en sociologíadel arre y de la lite-
s i no en y por l a ci enci a del los escritoresapelan a una lectura biográficade su obra e inviran a concebir la
ra ru ra m ás que en c u a l q u i e r o rro
-d o m i n i o -, , ¡elación entre la obra y el público como una comunión personalenrre la "per-
objeto que es inseparablementela ciencia de ias prenociones,contra las cua-
que se sona" del "creador" y la "persona"del lector. Pero, más profundamenre, el culro
les la ciencia construye su objeto. En efecto, las teorías esPontáneas
tiempo que las no¡mas de romántico de la biograÍ1aes parre integrantede un sisremaideológico donde se
imponen a ia invesrigacióntradicional,¿l mismo
i nscri ben, por ejem pio, la concepción de la "cr eación" com o expr esión
convenienciasocialque rigen la relación'<listinguida"con la obra de af¡e,2son
irreductible de la "persona"del anista, o la uropía, grara ranro a Flaubert como
el producto de las condiciones socialesde las que el sociólogo debe hacer la
a Renán o a Baudelaire,de un "mandarinaro intelectual", que riene por princi-
ciencia, de manera que los obstáculosa la construcciónadecuadadel objeto
pios un aristocratismode la inteligenciay una representacióncarismáticade la
forman parte del objeco de la ciencia adecuada.Así, la teoría de la biografía
producción y de la recepción de las obras simbólicas.aNo habría dificukad
como integración retrospectivade toda la historia personal dei artisraen un
proyec¡o puramente estético,o la representaciónde ia'rtreación" como ex-
presión de la persona del anisra en su singularidad, pueden comprenderse 3. fuí, desde el R enac i mi enro,a medi da que s e des arrol l aIa produc c i ón l i bre para un merc ado
completamente sóio si se las reinserta en ei campo ideoiógico del cual forman y que el artista conquista su independencia con relación a las corporaciones,el inrerés se desplaza
parte / que expresa,bajo una forma más o menos transfigurada,la posición <iela obra a la persona del a¡tista y a su poder creador,que se manifies¡a de modo más brillante en

de una categoríaparricular de escritoresen la estructuradel camPo intelec- esbozos o fragmentos que en la obra acabada (cl A. Hauser, Soda/ History of Art, London,
Routledge and Kcgan Pa:ul, 1962,Yo1.2, pp.46-74) lHistoria socialde k liftratuftiJ! ei arte,Madrid,
tuai, él rnismo incluido en Lrn tipo específicode campo político, ciue asigna
Guadarrama, Z^. Ed., 1969). Una historia social de ia biografía, de las conclicionessocialesde su
una posición dererminada a la fracción inteiectualy artística'
aparición, de los modelos y de las normas a las cualesha obedecido en las diferentes épocas,de las
teorías espontáneasde la producción literaria o artística que ella ha puesro en práctica -implícita
o expl íci tamente-,y de l as func i onesque ha podi do c umpl i ¡ c ons ti rui ríauna c onrri buc i ón muy
imponante a la sociologíadel conocimiento y también a la teoría del conocimiento científico del
2. Sería lácil mostrar todo lo que la manera tradicional de aproximarse y de tratar a los escritores
arte y de l a Ii rcratura.
y susobras debe a las no¡mas sccialesque rigen la postura del aficionado ilustrado y del conocedor
4. En efecto, bajo la aparienciade romper con la tradición románrica que establecía,entre la obra
distinguido, y que excluyen, como faltas a las reglas del buen rono y del buen gusto, todas las
y la vida, una relación de simbolización recíproca, la escueladel arte por el ane no hace sino
renrativas de ¡elacionar ios escri¡oresy sus obras a sus condiciones socialesde producción, y que
"r¡cionalízar", si se puede decir, el proccso Je esretización de toda la exisrencia qur era y¿
condcnan como reducroras y groseras(en el doble sentido del término) todas las tentativas de
manifiesta en el dandysmo, sometiendo cada vez más rotalmenre la vida a las exigenciasCe [a ol¡r:r
objerivación cienrífica. La "crírica creadora"y la lcctura estructural no recibirían hoy una acogida
y convi rti endo si stemáti c amentel as av entu¡aspers onal esen "ex pc ri enc i as "es ré¡i c as(' ho ha¡
ran calurosasi no esruvieranmenos lib¡es de lo que podría hacerlo creer una cientificidad pomposa
posi bi l i dades-de éxi to- s i no c ul ti v ando s u rc mperamenroy ex agerándol o"dec íaFl aub.n), por c l
de las normas rnundanas, que im¡ronen tratar las obras v los autores como ellos pide n ser tratados
recurso a técnicas de concentración y de ascesiso por la ¿centuaciónde tendencies petoltlgicesy
(al menos desde la época romántica), es decit como "hi.jcs de sus obras" (bastapensarpor e.iemplo
por l a expl otaci ón de l as s i tuac i ones -l ími te,apropi adaspara rev ei ar as pc c rósori gi nal es ti e i a
en el debate, devenido un lugar común de las disertaciones,sobre las relacionesentre la biografía
personalidad o para procurar sen¡imientos insólitos.
ideal, que se enrrega sólo en la obra, v las peripecias anecdóticasde la existencia real).

z4
F
F
E
PierreBourdieu Cantpo del pocler,cenzpo intelectual y habitus de clase

F
F¿fá'rnosrrarque es a partir de los mismos principios como se engendratodavía campo inteiectualen su conjunto, como, por ejemplo,la elevaciónglobal del
ts
F
hoy la representaciónque los intelectualesse hacen del mundo social y de su nivelde fo¡rnaciónuniversitariade los escritoresduranteel SegundoLnperio o
F
F:
r
E ñ¡ncién €n esremundo, y no hay por qué asomb¡arsede que la casi totalidad el crecimientode la porción de los escritoresprovenientesde lasclasesmediasy
E: de las investigacionesen mate¡ia de historia del a¡re y de la literarura manrie-
F' queocupanposicionesuniversitarias durantelaTerceraRepúbiica.En resumen,
t
nen con el "creador" y su 'treación" la relación en.an¡ada que, desdela época seríaen vano esperar,aquí como en otra parte,que la estadística
produzcapor sí
L

i
románrica, la mayor parte de ios "creadores"han mantenido con su .,creación,,. rnis¡nalos principios de su construcción,y sólo un análisisestructu¡alde los
a Así, es rodavía el rechaz. de métodos sospechososde disolve¡ ..la originalidad sisremasde relacionesque definen un estado dado d''l campo intelectual
creadora",reduciéndolaa sus condicionessociaresde producción, el puededar toda su eficaciay toda su ve¡dad al análisisestadístico,proporcio-
i que inspi-
¡a el desdénque se dene hily por ias investigacionesbiográficaso el nándole los principios de un recorte de los hechosque tome en cuenta sus
entusiasmo
por los métodos de análisis inrerno de ras ob¡as: una investigación propiedadesrnás pertinentes,es decir sus propiedadesde posición.
realmente
inspirada por la preocupaciónde romper con la ideología carismática Además, por hecho de que el anáiisisestadísticono puede fundarse, al
de la
"creaciónl' y de Ia lectura "creadora" se cuid.aría
de dejrrr. imponet en la defi, rnenosen un primer momento, sino sobre las inforrnacionesmás directamente
nición de su objero, los límires que son ros de ra biografta y --es decir sobre la información recogidaen ias biografíaso las auto-
accesibles
que implica la
elecciónde tomar por unidad una obra individual o la obra de brografías,en función de criterios de selecciónpoco explícitosy poco sistemá-
un autor parti-
cuiar o un aspecroparticular de una u orra ("ra filosofía porírica riccrs,pero la mayoría de las vecesconforme a ios principios que definen la
de Vigny,,
etc.), antes de haber siruado el así constituido r., .l campo ideológico maneralegítima de abordar la obra de arte-, corre siempre ei riesgode dejarse
.corpus
del cual forma parre, y de habei establecidolas ¡elacionesentre la impóner, al menos en sus /agunas,la representación"dominante" de la "crea'
posición de
esecarpasen ese campo y la posición en el campc intelecrual ción" arrísrica:es, sin duda, la misma fe en la irreductibilidad de la creacióny
del grupo de
agentesque Io ha producido, o, Io que viene a ser lo mismo, en ia autonomía absolutade las eleccionesestéticaslo que ileva a las monografías
antes de haber
determinado las fi'lncionesque ieviste esecorpusen el sisremadt universitariasa oto-fgar a la primera educación o, mejor, a las primeras expe-
las reiaciones
de concurrencia y de conflicto enrre grupos situados en posiciones riencias-donde se develan, más de lo que allí se forman, las particuiaridades,
diferentes,
en el interior de un campo i'telecrual que ocupa, él mismo, una enteramentedadas desde el origen, de una "invenció¡r creadora"irreducdble a
cierra posi-
ción en el campo dei poder. esasdeterminaciones-, un lugar infinitamente rnás grande que a la formación
No se puede hacer del anáiisisestadísticoun insrrume nto eftcazde escolary universitariay a otorgar mucho menos interésa las tomas de posición
ruprura,
sino a condición de serconscienrede que la aplicacióningenuamente políticas que a las tomas de posición estéticas,al ornitir casi siempre reubicar
empirista
de nxonomías preconsrruidaso formales, a tal o ..r"1 pobl"ción unas y otras en el sisternade tomas de posición concurrentesen relación a las
de escritoreso
de artistasconcebida como simpie colección de enddades separadas, cualesse constituyen y se definen. Y el gusto por las correspondenciasque las
neurraliza
las relacionesmás signíficativasenrre las propiedadesp..tirr..rt., biografíasrnás ingenuamente hagiográficassugieren,con el modo meaforico y
de los indivi-
duos o de los grupos. La mayor parte de los análisis esrad.ísticos sin preocupación de sistematización-basa pensar en las variacionesliterarias
se aplican a
¡'nt¡estraspreconstruidas,en lascuaieslos escritores"menores"o marginales(tan_ sobre ias afinidades electivasentre "el alma" del escritor y las virtudes que l-
to desdeel puhro de visra esréticocomo desdeet punto de visra tradición literaria presta a un paisaje, a un terruño o a una descendencia-,
poií.i.o, .o-o
"la bohemia")seencuenrranparcialo toralmenre puede inspirar arin la investigaciónsemierudita de correlacionesdirectai entre
eliminados;y seprohíbenen el
m is m o ac r ov ol v e ra a s i r l o s p ri n c i p i o sd e s e re cci ón
de l os cual es.r.l produ.to tal característicade la biografia y tal característicade la obra, entre el gusto Pre-
esta población' es decir las leyes que rigen el accesoy el éxiro romántico de la meditación en el cementerio y la primera educación de liijos
en el campo
inrelectualy artísrico,al mismo riempo que comprenderIa significación de pastorescampesinos.Pero hay trampas más sutiles,y el análisissociológico
real de
las regularidadesque ellas establecen;además,se exponen a d.ar rlunca se expone ranco a sucumbir a los errores impecablesde una sociografía
la razón a los
defensoresmás ingenuosde,!esrudio idiográfico, consagrándosea asir hiperempirista,como cuando la preocupaciónpor escapara la acusaciónde
solamenre,
y en el mejor de los ;asossolamenre,las le¡cs rendenciates
mis "rcd"c.i"ni"mo" lo llev¿a ¡iv¡liz¿¡ con la historiograffatradicionalsobrcsu
det
senerates Í
!
'¡¡ t
rerreno y a buscar en la mukiplicacic,n de la.scarácterísticassociológicamente cual la potencia evocadorade una autobiografíapor procuraciónpuede sólo con.
perrinentesque toma en cuenta el sistemaexplicativo -<aPaz de dar razón de lerir una cierta credibiiidad.El anáiisissartreanose inspira, en efecto, en el pro-
cada obra en su singularidad-, en lugar de construir la jerarquía de los sistemas yecto interrninabley desesperado de integrar en la unidad consrruida de un
de factorespertinentes,ya que se trata de dar cuenta de un campo ideológico "proyecto original", suertede inversiónde una esencialeibniziana,toda la verdad
que correspondea un estado dadc, cle la estructura del campo intelectual.5 objetiva de una condición, de una historia y de una olrra singulares,y, en pani-
Un análisisque, como el que Sartreconsagraa Flaubert' se esfilerzaPor resti- cuiai todas las caracterísricas
iigadasa la pertenenciade ciasemediatizadapor la
tuir las mediacionesa rravésde las cuaiesios determinismos socialesforman {a estructurañmiliar y a las experienciasbiográficasque son correlativasde ellas:en
individualidad singular del artista, no fompe sino en aparienciacon la tradición estalógica, no es la condición de clasela que determina el individuo, es el sujero
dominante de la his¡oria del ane y de la literatrrra.Dándose pof Proyectoreto- qu€ se determina a panir de la to:na de conciencia,parcial o total, de la verdad
mar las condicionessocialesde posibilidadde un autof y de ,rna obra tomada en objetiva de su condición de clase.Esta filosofía de las relacionesentre las condi'
su singularidad,Sartrese exPonea irnputara los factoresmás directamentevisi- cionesde existencia,la concienciay las prácticaso las ideologíasno se revelajamás
[:les-a partir del punto de vista particular que adopta-, es decir a los determi- tan bien corno en la insistenciade Sartreen un momento de la historia biográfica
nanres de clase ¡¿l como ellos se actualizan refractándoseen las particularidades -el período de crisis de los años 1837-1840-, una suertede primer comienzo,
de una esrructurafamiliar y de una historia individual, los efectosde sistemasde esenciade todo el desarrolloulterior. Pues¿quées estacrisis largamenteanaliza-
factoresque determinan las prácticasy lasideologíx de mdo escritor, en tantc que da, sino una suertede cogitosociológico,acontecimientoconstirurivo,arrancado
pertenecea un campo intelectual dondo de una estructura determinada, é! mis- de ia historia y c::perzde arrancar a la historia las verdadesque él funda: pienso
mo incluido en un campo del poder dotado de una estructura determinada ¡ burguesmente,luego soy burgues?'A partir de 1837 y en los años '40, Gustave
más precisamente,de todo escritorque ocuPa en tal camPo (presente,pasadoo tiene una experiencidcapial parala orientación de su vida y el senrido de su obra:
futuro) una posición esrrucruralmenteequivalentea la del escritor considerado. etVerimentaen é1,y fuera de é1,la burguesíacomo su clasede origen (...) Nos falta
Además, el esfuer¿opor remonrar el principio generadof y unificador de las ahora volver atr^zaÍ el movimiento de ested.esa¿brimiento
tan rico en consecuen-
experienciasbiográficas sería Perfectamentelegítimo si no se inspirara en una cias.7Uno puede ver cómo se está lejos de la teoría de las relacionesenrre las
filosofía de la conciencia (visible en particular en el lenguaje del análisis),6ala estructurassocialesy las estructurasde ia conciencia,que se expresabaen el ran

rnérito"; "éI tiene difcu/tad para cotnprenderquelos analfabetospued,antener algún derecho oara
1. E l p r o , v e c t o( a c t u a l me n r ee n cu r so d e r e a iiza ció n )d e co nsti tui r progresi vamenteun fi chero
univcrsal de los cscri¡oresy de los artistas, que po<lrfaser somerido a un tratamiento estadístico, salir de su miseria (...); "el hijo Ce un self-madcnian esráinclinado eviden¡emenrea pensar..."; "e|,

es t áp a r r i c u l a r m e n r ee x p u cstoa to d cs lo s p e lig r o sd cscr ir o sa ntc¡i ormente:en efecto,l a necesi dad niÁo (...) sesienteoscuamente rechazado";"contra la segregaciónque lo amenaza,no dejade exigir

d¡: ac u m u i a r b a j o u l r a fo r m a m a n e ja b le ,y sin q u e se a n e cesari ovol ver a i as fucntcs, todas l as l a i ntegraci ón total "; "es táen c ondi c i onesde ¿¡¡r es ta c c muni dad que l o ha produc i c i o,quc l o
p e r r in e n te s( sin p r e ju zg a rlos si stemasexpl i cati vosen l os cual es
inlor m a c i o n e ss o c i o l ó gica n - r e n te nurre y que lo exiiia, como un cuasi-objeto cuyos vicios le aparecenpoco a poco (...). En resumen.

c llasp o d r í a n e n r r a r ) a p r o p ó sitod e a r tista sy d e cscr ito r e sq u c pertenecena camP osproFundrmente uip¿su condición con estrechcz" (p. 1922\ (destacadomío).

diferenres,impone que se acuerdeprouisoriamentevna.defin ición "semi-positivista"de Ios p rincipios 7.J.P .S artre, op.ci t.,p .l 921 (des tac adomío).Lama¡c hami s madel ai nv c s ti gac i ón,ens udobl e

de s e l e c c i ó ny d e c l a s i f ica ció nd e lo s d a r o sd isp o n ib le s,ya q u e se trata antesque naC ade produci r movi mi ento, expi esaes ta fi l os ol ía de l a bi ografíac omo s uc es i ónde ac onrec i mi entc sen úl ti mo

una i n f o r m e c i ó n r a n h om o g é n e ay ta n e xh a u stivaco m o se ap osi bl e,por l o tanto, suscepti bl ede un anál i si saparente,yx que es táenteramentec onteni da en potenc i aen l a c ri s i sque l e.s i n,ede punto

aná!isisconrparativo. Perova de suyo que sólo un análisisde la es¡ructu¡ade cadacampo particular de partida: "Es neccsario,para esciarecernos,recorrer,una.rez más, estavida desdeIa adolescencia
has¡al a muerte. V ol verc mosa c onti nuac i ón a l os años de c ri s i s-1838 a 1844-, que c onti enc n en
^ , . -J ^ ^ ^ - - . - l " 1 , . ; , , ^,1 ^ ls5 9 ¡ ¡ 6 ¡ ¿ 5¡ lo . cu :l.s co n cjr ¡ cirírl a apl i caci ón mecj ni c¿ a campos
dora d o sd e e s ¡ r u c t u r ¿ sm u y d ife r e n te sd e u n sistcm ad c scle c ci óny de cl asi fi ceci ónestandari zado. P otenci atoda-sl asl ín eas dei uer¿adees tc .l c s ti no"{ ¡.1931).A 1 anal i z arl afi l os c fíac ,..,-i al i s trc l c
6. P o r e j e m p l o , a p a r t i r d e la s p r im e r a sp á g in a s:"El e xp e r im ent,t
(...) Ia burgucsíacomo su ci asedc la cual la rnonadología leibniziana le parecíarealizar ia forma ejemplar, Sartre observabz,en El ,er
"l-a 7 k nada, que el l a ani qui l a el orden c ronol ógi c o reduc i éndol oal orden l ógi c o: paradój i c arrente,
origen"; "ningún niño burgués puede tomar concienciapor sí mismo de su clase"(J. P Sartrc,
corrscience de cl¿ssechez Flauben", LesTbnpsmolzrncs,n" 74A, mayo 1966, pp. 192l-1951 y n" 241 , su fi l osofía de l a bi ogral ía produc e un efec to del mi s mo ti po, pero a parti r de un c omi .nz -o

junio 1 9 6 6 , p p . 2 l l 3 - 21 5 il. "Gu sta ve e sttico n u e n cid od e que su padre debe su fortuna a su absol utoque consi sre ,^n es ec as o,en el "des c ubri mi ento"produc i do por un ac to dc c onc i enc i e

2B 29
Pterrc llourdieu Campodelpodetcampointelectualy lubitus declase

célcbre análisisde las relaciones"entre los representantes


polhicosy literariosde venido a ser Io que es, sino lo que debían ser, bajo ia reiación del habirus
una clasey la claseque ellos lepresentan":"Lo que ios hace representanres de socialrnenteconstituido, las diferentescategoríasde artistasy de escritores
la ¡:equeÉa burguesía es que su cerebro no puede superar los líniites que el
de una épocay de una sociedad determinadas,para que ies fuera posible
F
t
pequeño burgués mismo no superae¡r su vida y que, en consecuencia,está'
ocupar las posicionesque les reservabaun estado dete¡minado del carnpo
teóricamenieimpulsadosa los mismos problemasy a las rnismassoiucione.s
i nrel ectualy a dopt ar , al r nism o t iem po, las t om as de posición est ét icaso
a las cualessu inrerés marerial y su situ.aciónsocial impulsan prácticamente 'i
t:
ideológicasobjetivamenteligadasa esasposiciones.
a los peque n o sb u rg u e s c s .8
En ¡e s u me n ,h¿ci endocomo si l e conci c' ri a no y, rodavía,
Quisiera aquí, sin presenraruna exposiciónsisremárica inenos
tuviera otros límires que los que elia se da por la toma de concienciade sus propuesta,edefini¡ a propósito
t, ,na puesta en práctica acabada de la teoría
límites, sa*re contradice el principio de la teoría der conocimienro de lo
Jel ejemplo de la escueladel arte por el arte (por lo tanto, de FlauL.,er-| , los
..il
social, según el cual las condicionesobjerivasdeterminan las prácricasy los
principiosde la inversión merodológica,que pareceser la condición de una

t límites mismos de ia experienciaque el individuo puede tener de sus prácri-


cas y de las condiciones que ias dererminan.
il

cienciarigurosade los hechosintelectualesy artísticos.Tal cienciacomPoria

t
:: rres momentos necesariosque mantienen una relación de orden tan eslf¡stc
Si las rnonografíasde escritoreso de artistas más exhaustivasen apariencia f
t: ccmo los tres niveles de la realidad social que aprehenden: en primer lugar
no entregan sino informaciones lagunosasy a vecesincoherentes-ran pron¡o
un análisisde la posición de los intelectualesy de los artistas en la estructura
como uno ies demanda los docunentc¡snecesariospara la construcciónde la
i estructurade un estadodel campo intelecrualo polírico-, es porque, siruán-
*, rje la ciasedirigente (o con relación a estaestructura'cuando ellos no pertc-
nccena esraclaseni por su origen ni por su condición); en segundolugar, un
i:'
f:
dos e de e¡ r t ra d ae ' u n l u g a r' p ri v i l e g i a d o,no perci benj a' rás si no una por- l;
análiiisde la estrucrurade las relacionesobietivasent¡e ias posicionesque los
ciór'r restringida del horizonte social y no pueden pues aprehender en su
sfupos ubicadosen situación de concurrenciapor la legitiinidad inteiectual
verdad el punto de vista desdedonde son romadas todas las visiones perspec- i::
lr o artísticaocupan, en un momento dado del tiempo, en la estructura del
tivas del campo inrelectual o político que ellas enrregan o a¡¡alizan,es deci¡ s
crmpo intelectualiásí, metódicamenre,la consrrucción de la lógica propia
como una posición en un sisremade relacionesenrre posicionesque confiere u
Je cada uno de los sistemasde relacionesrelativamenteautónomos (el cam-
su particularidad a cadaposícióny a las tomasde posición que demandan. En ft
po dei ooder y ei campo intelecmal)es la condición previa de la construcción
efecto,es a cc¡:dición de constirrrirel campo inreiect.al (que, por grande que
* <ie ia trayectoria social como sistema áe rasgosPertinentesde una biograffa
pueda ser su autonomía, esráde¡er¡ninadoen su estructuray su función por
individual o de una clasede biografras;y, en rercerlugar y último momento,
Ia posición que ocupa en el interior del campo del poder) como sisremade
É
F Ce ia consrrucción del habitus como. sistema de las disposicionessocialmente
posicionespredeterminadasque exigen, corrlo puestosde un mercad.ode tra- s co¡lsfituidasque, como estructurasestructuradasy estructurantes'constiEu-
bajo, clasesde agentesprovisros de propiedades(socialmenteconsriruidas) de
q
ven el principio generadory unificador dcl conjunto de las prácticasy de las
un t ipo der e rm i n a d o ,q u e s e p u e d e ro m p er con l e prob,l emári ca €
tradi ci onal ideologíascaracterísticasde un grupo de agenres,y a las que una posición y
(en la cual sartre queda prisionero) y pregu*rarse,no cómo tal escritor
ha -n rrne trayectoriadeterminadaen el interior dei campo intelectual-que ocuPa
a él rnismo una posicién determinada en la estrucrura cre la clase dominante-,
:::.
a
g proporcionan una ocasión más o menos favorable de actualizarse'
originaria: "Entre estasdiferentes concepciones,no hay orden cronológico: desde
su aparición en
€ En ot¡as palabras,la información más ii'nportante,al tratar de explicarlas
é1,la noción de "burgués" enrra cn desagregaciénpe¡manentr y rodos los avarares<ie[ 'Oropiedades
burgués
de una clasede obras,residcen la forma particularde
f1

flaubertiano son dados alavez; las circunstanciasdestacanuno u otro de entre ellcs,


específicas
pero cs po¡
u n i n s t a n t ey s o br e e l ft¡ n d o o scu r o d e e stain d istin ció n contradi cro¡i ¿.. A l os di eci si ereaíroscomo
: : l o s c i n c u e n t a ' estáco n tr a la h u m a n id a d e n te r a( ...) .A l os vei nri cu¡¡ro añ{l scomo a il. F.stashipótesis teóricas orienran un conjunto de investigacionessobre el campo intclectual en
l os ci ncuenta
y c i n c o , r e p r o c h a a i b u r g u é s n o co n sr itu ir see n o r d e n pri vi regi ado"(pp. l g49-195{t1. I Iranci a enrre I 830 y l 9 l 4 que han s i do di ri gi das ,en c ol aborac i ónc on J . C . C hamboredon,en el
B. K. Marx, Le I8 brumaire de [.ouit-Napoleón l]onapa.te, parís, Ed. lociales, 194f3,
p. l9r) iii
i na¡co de un semi nari o de [a E s c uel aN ormal s uperi or y que s erán obj eto dc una publ i c ac i ón
(destacado mío). LEl dieciochobnttnnrio dt Luis f]onaparl¿, Iluenos
Aires, Polémica, i972, p. 531. ;t' pr)\tcf¡()f.
:!,

30
tes de la L rrguesía-es deci¡, a medida que se desa¡roila un mercado de
la rclación que se estal:leceobjetivarnenteentre la fracción de los intelectua-
bienes simLtólicos-,las caracterís¡icas
propiamente inteiec¡ualeso a¡rísricas
ies y de los artistas,en su conjunto, y ias diferentesfraccionesde las clases
de los productores de bienes simbólicos-es decir, el sisremade los facrores
dominantes.A medida que el campo intelectualy artístico gana en autono-
asociadosa la posición que ocupan en el campo inrelecrual-, ganan en fuerza
mla y que, correlativamente,el status social de los productores de bienes
explicativa,queda que la acción de esosfacroresno hace sino especificarla
simbólicosse eleva,los intelectuaiesy los artistastienden a enttar progresiva-
acción dei factor fundamenrai que constituyela posición de la fracción de los
mente por su propia cuenta, y ya no solamentepor Procuracióno por dele-
inteiectuaiesy de ios arrisrasen la esr¡ucrurade las clasesdominanres.Así,
gación, en el juego de los conflictos entre las fraccionesde la clasedominan-
las tres posicionesen rorno a las cualesse organiza el campo inrelectual y
te.r0Ubicados en situación de dependenciamateriai y de impotencia políti-
arrísti coentre 1830 y lB50 ( ¡ . on alguna t r anslación,t odoa lo lar go del
ca cen relación a las fraccionesdomiaantes de la burguesía,de la cual provie-
sigio XIX), a saber "el arte social", "el arre por el arte" y "el arre burgués",
nen en su mayoría y en la cual participan,si uo por sus relacionesde fámilia
entregalrcompletamenresu significación,que es siempre indisociablc¡lente
y por sus compañías,al rnenospor su es¡ilode vida, infinitamente más próxi-
estéticay política (aunque la autonornía de las tomas de posición estéticas
mo al de la burguesíaque al de ias clasesmedias -inciuso en las categorías
por relación a las romas de posición políticasseamás o menos grande según
más desposeídasde b intel{igentszaprcleraroide, condenada a las fo¡mas me-
las épocas,es decir, según el estado de las ¡elacionesenrre la fracción de los
nos elec¡ivasde la vida bohemia-, los escritoresy ios artistas constituyen, al
artistasy el poder, según la posición en el campo y según la función en la
menos desde la época romántica, unafaeción d.orninadade la clasedominan'
división del trabajo intelectual); sólo si allí seven otras tanrasespecificaciones
,¿, necesariamenteinclinada, en razón de la ambigüedad estruc¡ural de.su de
la posició. genéricade la relaciónfundamenral de pertenenciay de exclusiónque
p o si ción en la es c r u c tu rad e l a c l a s ed o mi n a n te , a mantener una rel aci ón
caracterizaa la fracción dominante-dominada de los inrelectualesy de los arris-
ambivaien¡e,tanto con las fraccionesdominantesde la clasedominante ("los
tas: a cada una de las posiciones típicas en el campo corresponde una forma
b u rg u es es " )c om o c o n l a s c l a s e sd o m i n a d a s (" e l puebl o" ), y a fbrmar una
típica de la relaciónenrre la f¡acción dominante-dominada y lasfraccionesdomi-
imagen ambigua de su posición en la sociedady de su frrnción social. Más
nantes;más precisamente,es a travésde la relación que ias categoríasde agentes
precisamente,la relación que mantienen con el mercado literario y artístico,
ligadasa cadauna de esasposicior-res
manrienen con el mercado,y a travésde los
cu ya s s anc ionesanó n i m a s , i m p re v i s i b l e sy c a m b i anrespueden crear entre
diferentestipos de grarificaciones
económicas¡, simbólicasque correspondena
ellos disparidadessin precedentes,constituye el principio de la representa-
lasdiferentesformasde esrarelación,que seencuentrandefinidosel grado en el
ción amt,ivalenteque los escritoresy los artistas-forzados a percibirse,más o
cuai esrápuesroobjetivamenreel acentoen ia pertenenciao en la exclusión
menos claramente,en su verdad objetiva, es decir como productoresde mer- ¡
correlativamente, la forma de la experienciaque cadacategoríade agentepuede
cancías-se hacen de ese"gran público", alavez fascinantey despreciado,en
tener de la relación objetiva entre la lracción de los arristasy ias fracciones
e l crral c onf unden, l a m a y o ría d e l a s v e c e s ,e l " burgués" someti do a l as
dominanres(¡ secunda.riarnenre, lasciasesdominadas).Mienrrasque ios arrisras
preocupacionesvulgaresdei negocic y el "pueblo" entregado al embruteci-
y losescritores"burgueses"(DOMINANTES-dominados) .n..r"nrr".,, en ei
¡niento d.e las activicladesproductivas. re-
conocimientoque les concedeel público "burgués" y que les aseguraa veces
Si, a medida que el campo intelectualy artístico gana en autonomía con
condicionesde existenciacuasi-burguesas, todas las razonesde asumirsecomo
rclación a las coaccionesv a las demandasdirectasde ias fraccionesdominan-
l os portavocesde s u clase,a la cual su obr a se dir ige dir ect am ent e, r ,
los
sos¡enedores del "arte social" (dominantes-DolllNADos) encuenrran,en
10. l. o s a n á l i s i sd e F r é dé r ick An ta l m u cstr a n q u e cu a n d o los arri s¡asesrán ubi cados en una su condi ci ón econó m icay en su exclusiónsocial,los f undam ent os
de una
relac i, j nd e d e p e n d e n c i ae str e ch aco n r e sp e ctoa su p ú b licc, como cn Fl o¡enci adurante l os si gl os
){ I V y X V , l e s d i f c r e n c i a sd e e s¡ iloq u e scp a r a nsu so b ¡ a s so n casicompl etamentereducri bl esa l ,rs
dif eren c i a sq u c s c p a r ? nl a s visio n e sd e l m u n d o , p r o p ie s d e los C i fcrcntesconsumi doresde sus
l 1' S i n duda, no hay me j or i ndi c a,l or c l e Ia rel ac i ón que l as
obras, es dccir, e las difc¡enter fraccionesde la clescdominante (L'.Antal, nlorentine Painting and di Ferentesc aregc ríasde es c ri rores
mantienen con laslraccionesclominantesque su actirud con respecto
itsSocial Bac|grornd,Londrcs, Kegan Paul, 1947, p. 4' . al teatro, f¿,rmapor excelencia

33
Píerre Bourdieu Campo d.elpode4 tt t inteleüual y habitus tle clase

solidaridadcon ias clasesdominadasque tiene siempre por primer principio


irrmLrre,estuvicraen el poder de ios mandarines,estaríamosdonde esra,nos?
la hostiiidad respectoa las fraccionesdominantes de las clasesdominantes y 5i , e' i ugar dc haber quer ido ilusr r ara las clasesbajas,se hubiesenccupado
a sLlsrepresentantesen el campo intelectual. Los sostenedoresdel "arte por el .i., i.struir a las altas."li obligados a acercarsea los "burgueses"cuandr¡ se
ambigua
arte" ocupan en el campo intelectual una posición estnncturú.lmenrc ,ii¡,icn arnenazados -como artlsraso como burguescs*por lcrs"desclasaclos"
que les condena a sentir de manera ¡edobiadalas contradiccionesinherenres ,i .' l e l rohenri a,gr it ar - ' solidar idadcon t odos aqueilosa quienesla br ur ali-
a la posición ambigua de la f¡acción intelectualy artísticaen ia estructurade .i.rJ de los interesesy de los prejuiciosburgr-ieses rechazao excluye:el bohe-
ias fraccionesde las clasesdominantes. Porque su posición en el campo Ios :,i r,r,ci pi ntorcillo,cl s'i. im banqui, el noble ar r uinado,"la sir vienr acie gr an
coaccionaa pensarsu identidad estéticay política simultáneao sucesivamen- ;.;ra;rón"r' especiaimenre,quizás, ia prosrirura,si..ierre
de re'¿líz,acién
simbó-
t e ( s egún la co y u n tu ra p o l íti c a ) p o r o p o s i ci ón a l os " arti stasburgueses" ir¡-'rde la reiación del arrisra con ei mercado. Y su odio al "burgués" *ese
-homólogos de los "burgueses"en la légica relativamenteauténoma del cam- .l:.ir¡e inhaliable, alavez ilamado y despreciado,que les rechazaranro cor¡o
pr, o por oposición a los artistas"socialistas"o a la bohemia -homóiogos ,:iloslo rechazan,a quien no rechazansino por tanro que él les rechaza*se
del "pueblo"-, están condenados a formar irr,ágenesco¡rtradictorias,tanto de a; rJiir¡iva,en el interior mismo del campo inteiectual-horizonre primero de
su propio grupo como de los grupos a los cuales se oponen. Al dividir al i ,tdo-sl os conflicr os esr ér ; cos'/ polí r icos- , en y por el odio a los "ar t isr as
;r-
nundo social según c¡iterios estrictamenteestéticos,lo que los conduce a lrurfueses",concurrenresdeslealesque no obtienen el éxito inmediato y las
arrojar en la misma ciase despreciadaal "burgués" ce¡¡ado al arte y al "pue- bur guesassino r enegandocom o escr it or es:"Hay una cosa
!r)i l segfaci on es
;
blo" encer¡adoen las preocupacionesmaterialistasde la existenciacotidiana rr.il veccsmás peligrosaque los burgueses,dice Baudelaireen las Curiosités
( " llam o bur gu é s ,d i c e F l a u b e rt,a ro d o a q u ei que pi ensade manera baj a" ), tsrltétiques,es el artista burgués, que ha sido creado para interponerseentre el
ellos pueden simultánea o alternativamenteidentificarsecon el "pueblo" o .i ri i sray ei gen io, que los ocult a a uno y a or r o ( . . . ) Si se lo supr ir nier a,el
con una nueva aristocracia:"Comprendo, con el término burgués,tanto a ios .,1¡r¡acenero aclamaríatriunñlmente a E,ugéneDelacroix". Incluso, es el des-
burguesesen mangasde camisacomo a los burguesescon levita. Somos no- de "profesioiál.s" del rrabajo arrísricopor el proletariadolirerario ce-
¡.,:-'.,.io
sotros,y sólo nosotros,es decir los letrados,quienessomos ei pueblo o, para i¡rsi.,ciesus éxitos y de su arte 1o qLte,elt otrosmoment^i, inspira la imagen que
hablar mejor, la tiadición de la humanidad".r2"Uno debe inclinarseante los lcs sostenedores del arre por el arte se hacen del "populacho":"He comp¡en-
mandarines;la Academia de la.sCienciasdebe reemplazarai Papa'. "¿Llsted dido que nuesrro prefacio a Henrierre L4aréchalhabla masdo la obra. Y
cree que si Francia,en lugar Ce estargobernada,en definitiva, por la muche- bren ;qué irlporta! Tengo concienciade haber dicho Ia verdad,de haber seña-
lado la tiranía de las cerveceríasy de la bohemia con respecroa todos ios
t'abajadorespuicros, a roda la genre de ralento que no se ha arrasrrado
;or
i,rsbodcgones,de habe¡ señaladoal socialismonucvo que en las lerras¡eron)a
dei "arre burgués'".Así, las empresasteatralesde los sostenedoresdei arte For cl ane fueron cn
"Só lo Bo u ilh e t v fh . d e Ba n vill e obtuvi eron al gunoséxi tos.U nos ccmo
g e n e r a ld c s a F o r r un a d a s:
cn voz alra la maniFesracióndel 20 de -marzo y lanza su grito de guerra:
',Aba.¡olos guanresi"'.'0 "E. quizás un
Flaubert o los ( l o n cc¡ u r t fr a ca sa r o nr u id o sa m e n te ;o r ros como Gauti er o B audcl ai rc, casi sc prejuicio, peio yo creo que es necesa-
abstuvieron, aunque déjar'on, en s,*scajas dc libretos, aigumentos que testirnonian el deseerque iio ser un hombre honesro y un burgués honorable para ser un hombre cie
ellos.habían ténido de triunfar sobre el escenario;o, cornc Lecontc de Lisle, compusieron en el r.rlento.Esrimo esro por Flaubcrr y par nosorrosy por la comparación
ocaso de su vida obras honorables; pe¡o quc agrcgaron poco a su reputación; <l quienes, como j ' s grandeshombr es de la bohem ia, su novelist a M ür gier , su "on
hist or iador
Itenan, hicieron dramas dc alte alcance,pero imposibles de representar" {A. (iassagne,La rhéaric
dt I'ar;por l'arten France, París,Hachcttc, 1906, p. 140).
12. G. Flaubcn, "l.cttre I George San.i ', rn:yo l8(:7, cirado por P Lidskv, Les érriuains co¡ttrsll¿
C o m m u n e , l i a r í s ,Ila sp é r o , l) 7 0 ,p .2 l.Oin clu so : "L osburgueseserancasitodoel mundo, l os
1.J. G. Flauberr, Corrcspondance,passitn, citado por A. Cassagne, op" cit., p. I B l. Scgún Maximc
banqueros, los agentesclecam[:io, los norarios, Ios comcrciantes, los tenderos y otros, cualquiera l)rrcamp (Souuenirlittéraires" cirado en A. Cassagne,ibid.),Flaubcrr "hubiera qucridr: una sucrre
que no lormara parre del misterioso cenáculo y ganaraprosaicamentesu vi'l¡." ('Ihéophile Gautie¡, ,ic ma¡rdarinato que hubiera llamado ala cabtza dcl país a los lronrbres rnás inrcligenrcs',
Histoire du romantismt, citado por Il l.idskv, op. cit,, p. 20. t 'i. F..y J. Concourt, Jout'nd/, 5 de marzo de i 865, cirado por P Lidsky, op. cit., p. 27 .
t'ialrc-Eúlm¡eü

entienden asumi¡ explícitamenreuna función social, ya se rrare de glorificar


d e s us bal anceos1' de sus pal i -
l \fo n s t lc r , s u P oc ( r lB a n v i l l e " ' rsL ' l p ri n c i p i o los valoresburgueseso de instruir a las masasen los principios republicanos
o la simpatía revolucionariaen
nodi¿s,de sri traslaciónhacia el compromiso o soci al i stas.i T
l s4 B, hac iaelindif er e n ti s m o o e l c o n s e rv a d u ri s m opol íti cosbaj oel S egun- El ane por el arte, es decir el arte para el ariisra, el arte en el qr-reel arre del
no es otro que la transforma-
d.o Imperio ¡ sobre todo, duranre la Comuna' artista consti¡uye la única materia y en el cual la comunidad artística es ei
entre la fracción intelectualy ias frac-
ción de la estrucrurade las relaciones único destinarafio,es un arte para nada, un arte sobre nada, corrro lo dice
ci o n es dom inant es,q u e e s c o rre l a ti v a d e l a tra n sformaci óndel aesrructura expresarnenteun texco frecuentemenre.citadode Flauberr: "Lo que rne pare-
y que su naturaleza es a deterrninar'
de las relacionesde fuerza entre las clases ce bello, lo que quisiera hace¡ es un libro sobrenada, un /ibro sin lazo exterior,
caracterizadapor su equilibrio
en una caregoríadc dominantes-dominados, que se mantuviera a sí rnismo por la fuerza inrema de su esrilo, ccmo la tier¡a
i n e stableent r elapo s i c i ó n d e D o MIN AN T E.d o n l i nadovl aposi ci ónde si n ser sosteni dase m ant icne cn el air e, un libr o que no t uvier acasi r em a,o
h a ci a una u o¡ra de esasposi -
d o minant e- DO M iN A D O, e l d e s l i z a m i e n to ..revolucionarias,,, al menos donde el tema fuera casi invisible, si esto se puede. Las obras más
o que
ciones y hacialas tomas de 'posición,conservadoras bellasson aquellasen las que hay menos materia (...), siendo el estilo por sí
so n s olider iasde ell a s ' solo una manera absoluta de ver las cosas".rsComo lo revelala metáfoia, la
A r t is t as ques eo Po r-re n a l ..a rte b u rg u é s ' ,d e P aul deK ock,octaveFeui l l et, utopía de "la intelligentsiasin aradurasni raíces"supone ia ignorancia del
como a la "'pataneríasocialis-
Scribe o casimir Delavigne ran resueltamente campo de las fuerzasde graviración que comandan rambién las prácricasv las
de los escritosde Proudhon
ta" (según el término de Flaubert, a pfopósito ideologíasde los intelectuaies,y que no se develan jamás tan manifiestamen-
en el arre por el arre y en la escrirura
,obo i arte) no pueden enccrnrrafsino, te ccmo en el esfuerzo desesperadopor negarlas produciendo un discurso
la contradiccióninherenteai proyec-
por ia escritura,una manera de resolver socialmenteutópico. ¿Cuál es, en efecro, el principio de la escrirura reducida a
to d e es c r ibir r ec ba z a n d o to d a fu n c i ó n s o c i a l ,e sdeci r,todoconteni dosoci al _ 1in pirÍo ejercicio de estilo sino la voluntad encarnizadapor desrerrardel
nlanera de realizarsobre el terre-
rnente marcado,al mismo tiempo que una discurso todas las mltrcassociales,comenzando por las "ideas recibidas", luga-
to exc/usití (en el doble sentido
no simbólico, por la afirmaciórrde su domin res comunes donde todo un gnrpo se reúne para reafirmar su unidad reafir,
d e l tér m ino) s obr es u a rte y p o ri a re i v i n d i c a c i ó n del rl onopol i oabsoi utode mando sus valo¡esy creenciaspropias y donde se reveian infaliblemenrela
de la relación objetir,aen-
la competenciaproptament" "rtí.tic", la inversión posición social y- la identificación satisGchaa esta posición de ios que las
de los artistasv de los intélectua-
rre las fiaccionesdominantes'¡ la fraccién proFesan? El artc "puro" es el resultadoine"irable del esfuerzopor vaciar el
l e s, f or z ados apag a rl a a u to rro mía q u e l e s e s c o ncedi daporsurel egaci óna discursode todo lo social no-pensado,tanto de los aurornarismos
fueran simbólicamenterevo- del lcnsuaie
prá.ri.", .o.,r"grJ", a Permanecersim-bólicas'
El cultc del estrio por el estilo'
lucionariaso revolucion".i"*.rrr" simbólicas.16
q u e es elequiv alen te e n e l d o mi n i o d e l a e s té ti c adel i ndi ferenti smopoi íti coy
"compromiso"' se co.nstituyeorigi-
i"l ,..h"ro desligadoy distante de todo I7. "Yo me metu en mi agujero y, aunque el mundo se desplome, no me rnuevo <ieahí. La acción
los escritores;r d6 ios artistasque
nariamenteconffa lastomas de posición de
(cuando no es ñ.rriosa)se me torna cadavez más antipática" (G. Fiauben, carta del 4 de setiembre
C e I 850, ci reda pcr P Li ds k l ' , p. 34). "Los c i udadanosque s e enardec enpor o c c nrra el Imperi o
o la Rcpública me parecen tan útiles como los que discutían sobre la gracia elrcazo la grecia
eficientc. ila pclítica está rnuerra, como la reologíal" (G. FlauberL, carra a George .Sand,fines de
15. E. y J. Goncoutt, Jottrtu' 17 dc novicnbre áe 1868' ibid'
iunio de 1869, ci¡ada por P. Lidsky, ibid.).
l6. A r r o j a n d o a l a s | r a c cio n e sn o .in te lcctu a lcsd e la b u r g u e síaal fi i i steísmo1'conderrándol asal a lB. G. Flauben, Correspondance,cl.fia a.Louise Coler, 16 de enero de 1852. Se lee lo mismo en
indi g n i d a c l c u l t u r a l - l oq u e ir m á sh a b ía h e ch o ' a e se g r a d o a l menos'el artedel asépocas una cartadel l 5 de j ul io de I 839: "¡P ens abaque me i ban a v eni r pens arni enrosy, no me ha v eni dc
ant e r i o ¡ c s _ ' e I a r t c p u ro "fi..,' ,l"p r e te tr si< in ccla r tista a u n r ci nrdoexcl usi vosobreel a¡tc,ai nada, ya ya, sí síl Estoy lrancamen¡e moiesto pero no es mi culpa, no rengo el espíritu filosófico
ce
sim b ó l;ca :"¡ N o sési exi s¡een francésuna pági na
m ism o t r c r n p oq u c u n a r n te n ció nd " ,.u a n .h ^ -l i nto como C ousi n, o P i er rc Leroux , B ri l l at-S ev ari no Lac enai re".O aún: "La ronrería c ons i s i cc n
se g tr r od e tlu e cl burgues no comprcnde nada'
pros a m : - i sb e l l a ! ¡ L ^ se sp iÉn d id a !¡ Y e sr o v querer concl ui r.;C uál es el es píri tu un poc o fuerrc que hay a c onc l ui do? C ontenrémonos del
sobre laAcrópo|is, Correspc,ndattce,
mejori-, (G. Flaubert, carta a Renan, a llropósito de la oración cuadro, cs tambi én bu eno" (c i rado por A . C as s agn
e, op. c i t., p.263).
iV, citadr: por A. Cassagne, op' cit'' P' 394)'

37
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Pierre BoL¿rcLieu É
g
Campo del poden campo intelecataly habitus de clase

ffi
s
cuanto de las significacionesreificadasque él vehiculiza;el rechazode io que arre,forzadosa producir de alguna manerasu propio mercado,a una remu-
#:
FlauL'ertllama la "tontería" (y, Sartre, en la época de E! sery la nac/a,"el neracióndiferida, a diferenciade los "artistasburgueses",aseguradospor un
espÍrituserio")-es decir, la adhesiónindiscutiday asegurada a las banalidades, F¡
E mercado inmediato.
católicaso 'volterianas,materialistaso espiritualistas,en las cualesy por las .: Así como los sostenedoresdei arte por el arte esrabanpredispuestos,por
1.
cuale. i:rs diferentesfraccionesdominantes se reconocen-, conduce necesa- su posición en la est¡uctura del campo intelectual,a sentir v a expresarde
i
riamentea un discursoque, al exclui¡ todo objeto, no puede tener otro obje- manera Parricularmenteaguda las contradiccionesinherentesa la posición
to que .! discursomisrno: pretenderhablar rechazandodecir algo, es conde- t- de ia fracc;jn de los artistasen ia estructu¡ade las clasesdominantes, igual-
narse a hablar para no deci¡ nac{a,a hablar para decir nada, a hablar por i
mente Flaubert -cuvas tomas de posición políticas y estéticasson literal-
habiar , en r es u me n , a l c u l to .p u ro d e l a fo¡ma.re.D esdeese momento, i a i ¡ente i ntercam biables con las de los escr it or es sit uados en la m ism a
carrera está abierta a una investigaciónprcpiamente estéiica,estimulada o 1-.osición2.yque tiene en común, con ellos,todas o parte de las caracte¡ísticas
dere¡minadapor ia concurrenciaent¡e ios artistaspor ei reconocimientode fundamentaiesde origen y de formación-,2restabade alguna manera predis-
la originaiidad y, de ese modo, de ia ra¡ezay del valor propiamente estéticcs puesto a entrar en el campo del arte por el arte, en ruzón Ce la homoiogía
del producto y del productor; y la lógica de la disrmilación que cartcrerizael evidente que se estableceentre la estructura de la relación entre la fracción de
campo inteiectualy artísticocondenaa ios escritoresy a los artistasa romper los artistasy las fraccionesdominantes de la clasedominante y la estructura
continuamente con las normas estéticasen vigor, las únicas que son efectiva- de la relación que éi mantiene desdela infancia con su familia ¡ más tarde,
m ent e dom ina d a sp o r l o s c o n s u mi d o re sp otenci al es,si uno exceptúaa l os con su clasede origen y con el porvenir objerivo que deriva de ella, bajo la
otros artistas,predispuestosa comprender,si no ias nuevasobras así produ- i¡rma de la reiacién vivida con su padre y con su hermano mayor. De ese
cidas,al menos la intención de la ruptura con las norrnasestablecidas.
Cuan- modo se explica que las inf or m acicnes m ás per t inent esscciológicam ent e,
to más obedecela producción artística sóio a las exigenciasinternas de la que Sartre desprende de la biografía de FlaubefL ap^rezcande alguna mane-
comunidad de los a¡tistas,más las obras ofrecidas-que, en .€uanto bienes ra como redundan?és,hasta en los detalles, con relación a ias que consrruye
simbólicos tienen por característica
específicano poder ser consumidassino un análisisde la posición y de las tomas de posición de la Escueiadel arte por
por los detentadores del código necesario para descifrarlas (es decir, ios el arte en nt conjun¡o. Redundante, la relación que Flaubert mantiene con su
detentadoresde las categoríasde percepción y de apreciación adquiridas en y medio familiar, con su clase de origen y, en general, con sus educadores,y
por la frecuentación a obras producidas conforme a esascategorías)y que han
sido producidas al precio de la negación de las normas de producció¡'r ante-
riores y de las categoríasde percepción correspondientes-, exceden las capa- 20. Porei únicoefectodel agrupamiento
Jrnrr,.u, la admirable (ya
obrade AlbertCassagne
cidadesde recepciónde ios consumidorespotenciales(es deci¡ de los "bur- eirada) da una prueba aplasrante de ello (ci., por ejemplo, los juicios sobre el sufragio universa!
c sob¡e l a i nstrucc i ón del puc bl o, en pp. 195-198).
gueses")y más posibiiidaciesde ser mayor tiene el desfasajetemporal entre
2 l . S ól o l a hi pótes i sde "l a a¡monía prees tabl ec i da"enrre l a pos i c i ón y el que l a oc upa, entrc el
l¿ oferta y la demanda. La mísrica de la salvación en el más allá y el tema
proi:csionaly su prolesión" permiie comprender las muy numcrosas"coincidencias"que se
^bscrven
del " ar t is t a m a l d i to " p o d ría n n o s e r s i n o l a ¡etraducci ón i deol ógi cade l a cn¡re las caracterísricassocialesy escolaresdc los micn¡bros de le Escueladel arte por el arte: casi
contradicción'quc habita en este nu,evomodo de producción y de circula- todos provenicntes de familias de granCesmédicos de provincia (Bouilhet, Flauben, Fromentiri)
ción de los bienel artísticos,y que condena a los sostenedores
del arte por ei o t1epequeños nobles provincianos (Théodore dc Banville, llarbey d'Aure*ill¡ les Goncourr). casi
todos han seguido o emprendido estudics cle derecho (Banville, Barbey d'Aureviily, Baudclaire,
i ri aubcn, Fromcnr i n, l .ec on¡e de Li s l e) y l os bi ógrafbsobs en' an para tel c c ual de el l os quc s u
1 9 . É l su n a l ó g i c aa ná lo g aia q u c co n ciu cca la p in r u r a m o derna a i nscri bi r cn cl l enguaj emi smo de padre "quería para él una al ta pos i c i ón s c c i al " o "quería tl ue él fues c médi c o". E s i as ¡:nc as
la obra una interrogación sobrc el lcnguajc de la obra, sea por la destrucción sistemáricade las indicaciones deberán, evidentcmente, ser precisadaspor análisis más profundos. Pero se puede
fornras convencionales dcl lenguaje, sea por un uso ecléctico y cuasi-p*ródico de formas de obscrvar también que los "artistas burgueses" parecen provenir ¡nás bien de la brrrguesfa "de
c x p r e s i ó nt r a d i c i o na lm e n tee xclu siva s,sca sim p lcm e n r epor el desencantami cnroque producc l a negocios" que de la burguesía "intelectual", ¡nientras que los sostcnedoresdel 'arte social", sobre
a t c n c i ó n d i r i t i d a a la fo r m a e n si m r :n r ¡ . t<¡dodcsde I 850, prov i c nen en buena parte de l as c l as esmedi as e i nc l us o popul ares .
hijo o del colegial
que tiene por Principio, según Sartre,ei resentimientodel ttbsolumntenteindispensable para qttien quiere hacer arte".27Si, como los escri-
se le mani- tores, los pintores más innovadores del siglo XIX provienen en su mayoría de
J.r.onocido: "El está fuera y dentro (...). Mientras estaburguesía
tiempo' que ella io las clasesprivilegiadas,es quizásporque sus familias y ellos mismos eran más
fiestacomo medio familiar, él no deja de exigir, al mismo
reconozcl¿ y 1o integre".22"Excluido y comPrometido, víc¡ima y cómplice, ap¡os y estabanmás dispuestosa iealizar esrasuerre de inversión muy azarosa
la relación de
sufre a lavez clesu exclusióny de su complicidad".2lHe aquí y a muy largo plazo qlle represenrael hecho de entrar en una carrera de
del arte Por
la fracción de los artisrasy, particularmenie,de ios sostenedores aitista. En efecro,¿no es significarivoque Manet y Degas,provenientesde la
relación que Gustave
el arte, con las fracciones dorninanres. Reetrundante,la bulguesíaparisina,no hayan renido que sufrir de sus padreslas amonestacio-
la probabilidad
rÍlanriene con su hermano Achille, realización objetiva de nes y las amenazasapenasveladascon las cuales lc¡spadres de cézanne y
"Es el hermano mayor Achille, cubier- sot,re todo de Moner, que perrenecenrespecrivamentea lá mediana y a la
objetiva de carreraacorde a su categoría:
herencia que
to de honores, es el jov-enherederoirnbécil que se felicira de una pequeña burguesíade provincia, acompañabansus entregasde fondos? En
moribundo que
no merece,es el médico serio que razonaen la cabecerade un efecto, era necesariotambién ser burgués "descarriado", es deci¡ en ruprura
con ia iegión ion las normasy los valoresde su clase¡ sobre rodo, con las posibilidadesde
no sabesalvar,es el ambicioso que cluiereel poder y se contentará
(...): 'El Porve- carrera objetivamenre ligadas a su posición, p^r^, a la vez, esrar poco dispues-
de honor (...) Pasaráa ser Henry al fin de la primera Education
".t4 H" aquí la relación de los to a responder a las expecrativasdel público burgués y quizás, en rodo caso,
nir es suyo, esaes la genre que devienepoderosa'
"a los cualesenvi-
sostenedoresdel arte por el arte con los "artistasburgueses", ser poco capazde satisfacerlas-como lo testimonian por ejemplo, los fracasos
dian a vecesios éxitos, la fama ruidosa y mmbién las ganancias"'2t de los sostenedoresdel arte por el arte en teatro.
específicas
si uno se pregunra más bien cuáleseran las condiciones más Para dar razón de esra suerre de armonía preesrablecidaenrre ias posicio-
dei arte por el arte Para nes ofrecidas por el campo y los que las han romado, no hay necesidadde
que debían cumplir los miembros de la Escuela
las caracte-
o.up", la posición que ies reservabael campo, se ve que' de todas invocar el trabajo de la concienciao la iluminación de la intuición qu€ uno
ellos eran burgueses, pone comúnmenrebajo el término de "vocación",simple transfiguraciónideo,
,írti... biográficas,la más imporrante es, sin duda, que
y burgueses"descarriados",más que desclasados. Era necesarioser burgués' Iógica de la relación que se estableceobjerivamenreenrre una caregoríad.e
resistira ia solici- agentesy un esrado de la demanda objetiva o, si se quiere, del mercado de
po, lo tanio disponer de los recursosnecesariospara poder
y"sim-
tud dir..t" de la demanda26yesperarlas remuneracionesmate¡iales trabajo, y que se realizaen una carÍer^ por la inrermediación del sisrema de
diferidas (a veceshasta los últimos años de la vida v aún disposicionesproducidas por la interiorización de un tipo determinado de
bólicas necesttriumente
a los artistas
más allá) que el mercado de los bienessimbólicospuede ofrecer condicionesobjetivas,que encierranun ripo determinadode posibilidadesobje-
del púbiico burgués: "Flaubert, tivas. Las prácricasmás deliberadaso las más inspiradassiempre roman en
que rechazanplegarsea lasexigenciasinmediaus
nosotros' ha
dice 'fhéophile Gautier a Feydeau,ha tenido más ingenio que cuenta objerivamenteel sistemade las posibilidadesy de las imposibilidades
cosaque es objetivas que define el porvenir objetivo y colectivo de una clase,y que vie-
¡enido la inteligenciade venir al mundo con un cierrc patrimonio,
nen a especificarlos facroressecundarios. que determinan un tipo parricular
de desuiaciónpor, relación al haz de trayectoriascaracterísncasde la clase,
por ejemplc, en el caso de Flauberr, "buigués descarriado",la relacióncon
22.J. P.Sutre,oP.cit.,p. 1933.
23.Ibid.,p. 1949'
24.Ibid., pp. t943'1944.
2i. A. Cassagn e,oP.cit-,P. 139'
y de l as seguri dadesde l as cual es 27 ' cindo por A. cassagne, op. cit., p. 218. "Flaube¡¡, Th. cautier, Th. De Banvilie
26. T od o p a r e c ei n d i c a r q ue p o r n o d isp o n e i d e la s p r o te ccio n es son genre de
c s c r i to r e d
s cl a r te p o r e l a n e , m u ch o s e scr i to¡esde l ¿ ttohemi a,proveni entes l ami l i asde buenaposi c i ón,c on un ni v el de v i c l ac ómodo, y c uanc l ono s on, c omc
es t aband o t a c l o sl o s B agdel ai ¡e;u
l ' h.
o p o p u la r e s y p r o visto s < - u
le n a fo r m a ci ón escol ar menos compl era, hal t Gautier, mediocreso malos administradores de su buena posición, casi ¡icos. 5in duda, Lcconte
c le las c l a s e sm c d i a s
solicitaciones del mcrcado y por sacrificarse a formas a¡cesmenos de Lisle, Louis Ménard, Bouilhet, ruvieron muchos días m-y clurosy una juvenrud difícil,
rcrminado por ceder a las 'le pero su
si¡uación se mejoró" (A. Cassagne,op. cit.,p. 333).
, e r o m á s r e m un e r a d o r a s'
ex iget tt e s p

40 41
PierreBourdieu

el padrg en la cual se sintetizan todas las caracte¡ísticasespecíficasde sus


condiciones primarias de formación (su pbsición de hijo menor, su éxito
Lna interpretacidn
de la teoríade la religión
escolar jtzgado mediocre con relación al de su herrnano, etc.), y a través de
la cual se constituye el principio inconscientede su relación práctica con
segúnMaxWeber*
sus posibilidr4rs individuales, con sus posibilidadesobjetivarnenteligadas
a su clasesocial y con el desfasajealavez recltazadoy asumido, escandaloso
y reivindicado enrre unas y orras. El principio unificador y generador de
todas las prácticasy, en particular, de esasorientacionesque se describen
comúnmente como "elecciones" de la "vocación'], cuando. no como efectos
de la "roma de conciencia", no es otra cosa que el habitus, sistema de dispo-
siciones inconscientes,que es el producto de la interiorización de las es-
tructuras objetivas I gue, en tanto que lugar geométrico de los determinismos
objetivos y de una dercrminación del porvenir objetivo y de las esPeranzas
subjerivas, ¡iende a producir prácticasy, por ello, carrerasobjetivamente
ajusradasa las estructurasobjetivas.z8

r.rn, paradoja,ente¡amenteconforme a ia teoría weberianade ia relación


f),it
t entre las intencionesde los agentesy el sentido hisrórico de sus acciones,
l:¡ contribución rnás importanre que Max W'eberhaya aportado a la sociolo-
eía de la religión #'sitúa, sin duda,.sobre un rerreno muy diferente que el
que el i gi ó pa r a su enf r enr am ient o de r oda una vida con M ar x. Si, en su
r:sft¡e¡zoobstinado por establecerla eficacia histórica de las creenciasreligio-
sascontra las expresionesrnás reductoras de la teoría marxista, Max tffeber es
conducido a vecesa una exaltación del ca¡isma que, como se ha observado,
evLlcauna filosofía "heroica" de la ñjsrori" i" ,n"n.ra de Carlyle, por ejem-
"
pIo, cuando designa el jef e car isnr ár ico com o "la iuer za r evolucionar ia
específicamente 'creadora de la historia",rno es menos cierro que él mismo
¡rroporcionael medio para escaparde la.alternativa simplista de la cuai son el
producto sus anáiisis más inseguros;es decir, de la oposición entre la iir¡sión
de la autononría absoluta que lleva a concebir el mensaje religioso como
surgimiento inspirado, y ia teoría reducrora que hace de él el reflejo diiecto
de la.scc¡ndicioneseconómicasy socialcs:pone en evidencia,en efccto, Io que

' "Une inrérpretation de la théorie de ia religion selon Max Weber", Archiues anropéennesde
sociologie,
XII, I , 1971 , pp. 3-21 .
28. Es aquí donde un análisisestadístico
rigurosamentesubordinadod andisisestructuraltoma
dificultadesparamoscra:de qué
sólola posición,senospresentan L Max 1ü7ebe¡\X/iruchafund Gesallschaf,
CnlognelBerlín,Kiepenhcuerund Wirch , 1964,Tómoll,
todo su valor:si consideramos
p. 837. fEconaníaI Sociedad,México, FCE, 1944].
manerao, másexactamente, siguiendocuál manerade marcha¡.
igual, a saber,el del c,¿ln ¡in ser sacerdotes;los 'laicos'.Anrcs de exa tinttr cómo, bajo la
las dos posicionesopuesrasy cotnplementariasolvidan por
especializados' influencia de estosfactores extrasacerdoules, las re/igiones han (egado a
trabajo religiosoque realizan los a3entes y los portavoces
con un iipo determi- superar, en su desarrollo, los diferentes grados de magia que se obseruan en
ir,u.rrido, d.l pod.t, institucional o no, de responde¡
necesidades to¿as Partet bajo formas comPletl.mentesernejantes,debemos consi¿erar al-
nado de prácticas o de discurso, a una categoríaParticulal de
gunas tun¿enciasde euolución típicas, Eue ettán determinadas por la Presen'
propias de grupos socialesdeterminados'
- (quedando deli- cia de sacerdotesitzteresadosen un cu/to" (pp. 336-337).4
P.ro, para ir hasta el fin de Ia vía que indica Max 'ü7eber
beradamente en los límires de una interPr€t^c;ón, tan libre como sea), en
en su tentati- Asimismo, ai final del parágrafo3:
primer lugar es necesarioallanar las dificultades que encuentra
*,n pol. definir los "protagonisras"de la acción religiosa, profeta, mago y sacer-
"Profetas y sacerdotesson los dos agentes de Ia sisremitización 7 de la
dor.. Errffi dificukades, de las cuales resrirnoniansus iargasenumeraciones
"tipo ideal", racionalización de la érica religiosa. Pero iln ícrcer fdctur mu! importante
de excepciones,rienen rodas por principio su concepción dei
intentiene también en esteProceso;se trata de la influencia d'e aquellos sobre
que lo 1i.u" y" a conrenrarsecon definicionesuniversaies pero dc una extrema
como signo distintivo quienes los profetas y el clero buscan actuar éticamente, es decir los laicos.
pobr.t* (por ejemplo, "el ejercicio regular del culto"
. Debernosexaminar, de modo general, las accionespara/elas1t aPuestasd¿ estos
d.el sacerdocio),ya a acumular las carac-terísticas discriminantesreconocien-
j arnásse encuenrranuni - tresfactores" (p. S+O.
d o q ue " eilasno s on c l a ra m e n ted e fi n i b l e s 'y q u e
transiciones
versalmenre(incluso en estado separado)y a admitir todas las lü7eberinsiste todavía
de rasgos distinti- Al final del parágrafo 4, consagrad.oal profeta, Max
realesentre tipos conceptualesreducidos a simples sumas
sobre la necesidadde captar las diferentes instancias en su interacción: "Es
vos.2Sin basta con ver otra cosaqire simplestransicionesretóricas,
"-b"rgo, el capítulo por esta razón que debemos examinar las relacionesrecíprocasentre los sacer-
en las últimas líneas de cada uno de los parágrafosque dividen
.,Tipos asir la dotes, los profetasy los no-sacerdotes"(P. 355).En fin, en el parágrafo 5
de comunidad religiosa' de wirtchafi und, Gesal/scbaf,para
del parágrafo consagradoa la comunidad (Gemeinde),se lee:
intención profunda de la investigaciónweberiana.3Sea,al finai
2, consagrado al mago Y al Profeta: "Las nes
fuerzas que actrian en la esferadc los laicos I con ks cuales el clérigo
,'Este debe conmr soi la profecia, el *adiciona'litmo laico y el inte/eaualisnto laico.
desarrollopresuponemás bien -no sin excepción-que interuienenfterzas
'reuelaciones'metaftsicaso éti' En sentido apuestt a estasfuerzas, se ejercenlas necesidades y las tendenciasde
extrasacerdotalrr po, un lado, el portador de
la profesión sacerdoml, en cuanto tal, en cierto nodo como una fuerza
co-religiosas:e/ profem; por otro, la colaboración de ndos los que Pltrtici?an
codeterminanteesencial"(p. 359.

2. wG ., t . I ' p . 3 5 5 : . . I - a o p osició n e se n la r e ¿ lid a d b a sr a n ¡ e flu ida,comopa.ratodosl os Basta relacionar estos diferentes pasajesy darles su plena significacién
no son claramente definibles
fenémenos sociológicos. L,oscriterios de diferenciación conceptual p¿ra extraerr por una primera ruptura con la metodología explícita de fuIax
(. . . ). E s r a o p o s i c i ó n , c l a r a so b r e e l p la n o co n ce p tu a l, e s' flu ida' en l a real i dad' ('..) La di sti nci ón
Veber, una rep¡esentaciónque se puede llamar interaccionista(en el sentido
ca so ( ' ' ' ) "'
deber á s e r e n c o n t r a d a cu a lita tiva m e n te ,ca so p o r
que esrá en que actuaimente se habla de symbolicinteractionis¡n)de las relacionesen-
de lVirtschaf und CasellschaJt,
3. Esre análisis se apoya principelmente en el capítulo
( wG.,p p .3 I7 - 4 :8 ) ,ye n lasecci ónvl l detasoci oi ogíaci el tre los agentesreligiosos.Si esta representacrundebe ser descubiertaentre
ex pre s a m e n r e . o r , r " g r " do "l"r e lig ió n
(lYG., pp.874-922), textos que han sido líneas,con una lectura que tiende a modificar ei peso reiativo que el autor mismo
poder, tir,rl".l" "Poder político v poder hierocrático"
e n textos posteri ores r 1928, como el
. . . ri, " , . n , r " 1 9 1 1 y 1 9 1 3 ; y ta m b ié n , se cu n d a r ia m e n ¡ e ,
"El concepto cl': lucha" ('V'G'' pp' 27-29) o el parágrafo 17 dei
parágrafo B del capítulo I, titulado
(lVG., pp' 39-43) Se ha renurtciado,
Lirrlo ."pír,rlo, ritulado "Grupo político y grupo hie rocrático" 4, l¡s números de páginas puesrosentre parénresissin otra indicación remiten a lViruchaf und
tl osC es¿¡nmel te
p^r" . u i t " r s o b r e c a r g a r e l a n á lisis,r e m itir ,e n p a r ticu la r p a r a ilustraci oneshi stóri cas' Gesellschafr , edición cirada.
'Aufiitze Madrid' Taurus, 1986)'
(Ttad. esp.Etua\os sobre sociobgía dz k religión,
zur Iktigionssoziologie

r5
44
confierea los cliferente.s
P Baurdieu

aspecrosdc su análisis,es porque, aparenremenre, los


$
. t*ü
g .'
Utn interpretación de Ia teoría de Ia religión según illaxWeber

relaciones,y las estrategiasen ias cualesse realizan,a un análisisque en lo


6
instrumentos de pensamienrode los que disponía Max Vebe¡ obsractliza, E sucesivono está más amenazadopor la abstracciónpsicológica.
ban l:otoma de concienciacompletay sisternática de los ¡rrincipiosque ponía E:
g:

cn j. . : go ( al r ne n o sc o n i n re rrn i re n c i ae)n s u i nvesri gaci én,


y que, por el l o, no g 1. Las i nter accionessim bólicasque se inst aur an en el cam po r eligioso
É
podían ser objeto de una utilizaciónmeródicay sisremática. La refonnulación deben su forma específicaa la naturalezaparticular de los interesesque allí se
t
de los anális isrv e b e ri a n o se n e l l e n g u a j ed el i nteracci oni smosi mból i co es encuentran en juego o, si se prefiere, a la especificidad de lasfunciones que
É
tanto ¡riásflcii v, prrece, legítirno cuanro que no habría dificultad para des- crrmpl el a acc ión r eligiosa,por una par t e par a ios laicos ( ¡ m ás pr ecisam en-
a,
prendeÍ de los escritosteóricosde Max Weber los principios, explíciramente ti rc, para las diferentes categoríasde iaicos), y, por otra parre, para los diferen-
ii
expresados,de una teoría cie la inreracciónsimbólica. !r ies agentesreiigiosos.
+:
Pero, pare ver desaparece¡
compleramenrelas dificukadesque Max Veber 9l
5
a
ha encontrado,es neccsariooperar una segundaruprura y subordinarel aná- 3. Ei campo religiosotiene por función especÍficala de satisfacerun ripo
lisis de Ia lógica rle itts interai:iot¡es-qu. pucden esrabl.cerseenr!-caqenrcs paiticular de interes: i. e. ei interés religiosoque lieva a los laicos a esperar de
di¡ectametrteen prese¡rcia-r', en pa¡ticulai las esrrategias que ellos se opo- ciertas categoríasde agentesque reaiicen "acciones mágicas o religiosas", accio-
nerr! a la construcción de ia esrructurade las relacionesobjetivasentre las ir:' nes fundamentalmente "mundanas" y prácticas,realizadas'a fin de que todo
posicicr.rcsque elios ocupan cn el cantpore/igioso,estrucrura que determina la 7 va-yabien para ti y que vivas largo tiempo sobre la rie¡ra", como dice tüfeber.6
ior m a que pr r e d e nto n l a r s u s i n re ¡a c c i o n eys i a reprcsentaci ón
que pueci en i: No puede darse de la necesidadreiigiosasino una definición muy pobre
l:
tencr dc cll:s. l'¡r l.l lncdida cn quc apunia t ¿sirtle gol¡x, en las prácticas1, ¿ y mr-ryvaga, mientras no se especifique esa necesidad (y la función corres-
las represenraciones la
rnisrnas,todo lo que esasprácticasy esasrepresenracio- :. ¡ronciientedel campo religioso) en función de los dife¡enres grupos o ciasesy
nes deben a la lógica de las interaccionessimbólica.;y, especialrnente,
a la l;. ile sus interesesreligiosos.Max \Weber no ha elaborado una teoría seme.iante
re¡,.resentación
que los agenrespueden hacerse,por anricipacióqo por expe- de las "constelacionss de inrerés", específicasen materia de religión, y esto
ri,-:lcia, de la acción de ios orros agenresa los cualesesrán direccamentecon- eunque,en el análisisde los casosparticulares,no pueda contentarsecon una
frontados,la '¡isión estrictamenteinteraccionista de las relaciones
socialescons- definición tan reducida de la función de la actividad religiosa y esté obligado
titul'e, sin ninguna duda, el obsráculoepistcmológico¡nás temible, que impi- a precisarlatomando en cuenta los interesespropios de cada grupo profesio'
de el accesoa la construcción de las relacionesobjetivas,en la inedida en que nai o de cada clase.T
rebaja las relaciortesenrre posicionesal plano de las relaciones"intersub.jerivas"
o "interpersonales"entre los agentesque ocupan esasposiciones.5Iror el conrra- 2. 1 Los ínteresesmrígicosse distiñguen de los intereses propiamente reli-
rio, la construccióndel sisremacomplero de las relacionesobjetivascnrre las giosos por su carácter parcial e inmediato, y, cade vez má,sfrecuentes a medi-
posiciones(cf. cl esquema)condrrceal principio de las relacionesdirecrasentre da que se desciendeen la jerarquía social, se encuenrran sobre todo en las
los agenres,sin dispensar,sin embargo, someter la forma que revisten esas clasespopulares especialmente,entre ios campesinos ("cuya suerte está
cstrecharnenteligada
'', a la naruraleza, fu€rreme:-.tedependiente de los proce-
sosorgánicos y poco disponible, desdeel punto de vista económico, para una
5 . F l n t ¡ cl a s o m i s i c n csq u c r csu lr a nd cl h cch o r le r ¡ u c,a l n o hebc¡ construi do el campo rel i gi osoen sistematizaciónracional").
cuanto ral, .lt4a-x \X/eberprcscnta una scrie de punros de vist.r vurrapuestos quc son romados cada
v e z a p a r t i r d c l a p o s ició n d c u n a g cn tcp a r r icu la r .L a m á s si gni fi cati vaes,si n d¡;da,l aausenci ade
t o d a r e f c r e ¡ l c i ac x ¡ :lícita a la r cla cir ' r ncstr ic¡ ¿ m cn r eo b jcri va (va quc sc csrabl cccmás al l á dcl fr. Scgúnlos térreinosciela promcsahechaa ios que honrana susparientes:1ilG., ¡>.3\7.
ri e m p o y d c l e s p a ci< -cn r ) r r c cl sa ccr d o r ey cl p r o fcta d e ori gen ¡ al rni smo ri empo, de roda Ért 7. Esen particularel objetodel parágralo7, titulado "Gruposde sra¡us{StLnd¿),clasesy religión"
di s t i n c i ó n c l a r a y c xp lícita cn tr c lo s d o s tip o s d c ir r o fe cíasccn l as cual esrodorsacerdoci odebe :JF LVG.,pp. 368-404.Se encontrará,rambién,orro análi.sis de las diferenciasencrelos intereses
c o n t a l l a p r o f c c í a d e o r ig cn , d c la cu a l p e r p e r ú ae l m e n saj ey de l a cual ti cne su autori dad, y l a tr rciigiososde los campesinosy de los pequeñosburguesesciudadanos,en c! c*pítulo titulado
pr o f e c í a c o n c u r r e n te ,q u e co m b a r c. #;
gi "Pc¡derhierocráricoy poder polícico".WG., ; lI, pp. 893-895.

S,
F}
Cu¡nr¡: más grancle es el peso de la tradición campesina en una civtliza' am biguas y enigm át icas,de m aner a que se hizo
orácui os a i as respuest as
ción, más se o¡ienta hacia la magia la religiosidadpopular: el campesinado, sentir la necesidad de métodos más racionalespara conocer la voluntad divi-

que esrá cornúnmente encerradoen el ritualismo meteorológicoo animista, na, y de sacerdotescapacesde practicarlos;en estecaso,el conflicto entre esta
tiende a reducir la religiosidadética a una moral estrictamenteformalistadel demanda colectiva -que coincidía de hecho con ei interés objetivo de los
d-out d.es(t¿nto con respecto al dios cotrto con resPectoal sacerdote),salvo Leviras,ya que tendía a excluir todos los cultos concurrentes-y los intereses
cuando esrá de esclavirudo de proletarización(pp. 368-369). 41 particularesde los sacerdotescle los numerosossantuariosprivado.s,encontró
^menazado en la organización centralizada y jerarguizada del sacerdocio una solución,
co n trar io, la c iudad y l a s p ro fe s i o n e su rb a n a sc o nsti tuyen l as condi ci ones
más Favorablespara la "racionalización" y la "moralización" de las necesidades encaminada a preservarlos derechosde todos los sacerdotessin contradecir la
religicsas."La existencia económica de la burguesíadescansa,como lo obser- insrauración de un monopolio del culto de Yahvé en |erusalem.
va W'eber, sobre un trabajo más continua (comparado al carácter estacional
del trabajo agrícola) y más racional (o, al menos, más racionalizaáo sobre el 2.2 Se puede habiar de interesespropiamente religiosos(definidos toda-
p re very ' comprcnder'l a rel a-
mo d o em pí r ic o) . . .Es o p e rm i re e s e n c i a Ime n te vla en términos genéricos)cuando, al lado de las demandas mágicas que
ción enrre fin, medios y éxito o fracaso".A medida que desaparece"la rela- siempre subsisten, al menos en ciertas clases,aparece una demanda propia-
ción inmediara con la realidad plástica.y vital de las potencias naturales", mente ideológica:la expectativa de un mensaje sistemático capaz de dar un
"esraspotencias,al dejar de ser inrnediaiamenteinteligibles,se transforman sentido unitario a la vida, proponiendo a sus destinatarios privilegiados una
en problemas" y "la cuesrión racionalistadel 'sentido' de la Existencia"co- visión coherente del mundo y de la existenciahumana, y dándole los medios
mi e n z a a planr ear s e ,m i e n tra s q u e l a e x p e ri e n c i arel i gi osase depura y l as de realizarla integraciónsistemáticade su conducta cotidiana, así pues, ca-
relacionesdirectas con el cliente introducen valoresmorales en la religiosi- paz de proporcionarlesjustifcacionesde existir como existen: es decir, en unll
dad del artesano(p. 893). posición social determinada.B
,L Si hay funcionessocialesde la religión y si, en consecuencia,
la religión es
que conduce de la susceptibiede análisis sociológico, es porque los laicos no esperan *o no
2.1.1 El procesode moralizacióny de sisremarización
magia a la religión o, si se quiere, del tabú al pecado, depende no solamente solamente-justificacionesde existir adecuadaspara separarlosde la angustia
d e l o s int er es esde l o s " d o s p ro ta g o n i s ta sd e l a si sremari zaci óny de [a existencialde la contingenciay del desamparo,o incluso de la miseria bioló-
racionalizaciónque son el profeta y el ciérigo", sino también de las transfor- gica, de la enfermedad,del sufrimiento o de la muerte, sino también, y sobre
macionesde la condición económica,v social de los laicos. todo, justificacionessocialesde existir en cuanto ocupante de una posición
Así, el progreso hacia el monoteísmo se encuentra frei:ado, segrin Max determinada en la estructura social. Esta definición de la función de la reli-
.üZeber,por dos factores: "poderosos interesesidealesI' gión no es sino la forma más generalde aquella que Max \leber aplica, implí-
Por una Parte, los
m:rrerialesdel clero, interesadoen el cuho de los diosesParticulares",Por eso citamente,en sus análisisde las reiigionesuniversales:Ia transmutaciónsim-
hostiles al proceso de "concentración" que hace desaparecerlas pequeñas b¿lica del ser en debe¡ sef que ia r:eligióncrisrianaopera,segúnNiezsche,ey

empresasde salvación;)', por otra parte, "los interesesreiigiososde los laicos propcniendo la esperanzade un mundo invertido, donde los últimos serán
por un objero religioso próximo, que puede ser inf-luenciadomágicamente" los primeros, transformando al mismo tiempo los estigmasvisibles -tales
(p .3 3 2) . lnv er s am e n re ,e s p o rq u e l a a c c i ó nd e u n conj unro de facrcrescon- como la enfermedad, el sufrimiento, la maiíormación o la debilidad- en

vergenresha podido superarestosobstáculos,que el culto de Yahvéha termi-


nado por rriunfar sobre las tendenciasal sincretisrnoque parecíanprevaleceren
1" *.r,ig,l" Palestina:ias condicionespolíticas que devienen tadavcz más difici- 8' \Y G., p. 385: "Toda demanda de redenc i ónes una ex pres i ónde una' nec es i dad' ,y l a opres i ón
les, los judíos que no podían esPerarmás que su conforrnidad a los mandantes económi cay soci ales l a más i mportante, s i no l a úni c a c aus ade s u c ons ti tuc i ón".

divinos un me.ioramientofuturo de su suerte, vinieron a juzgar Poco satisfac- 9. F. Nie¿sche, Lagénialngíede i¿morale, París,Mercure Ce France, 194S (trad. esp.La geneahgla
tu h moral, Madrid, Alianza, I 989); \febe¡, W G., pp. 386-39 | y II, p. 685.
to ri a s las dif er ent e - fo rm a s ¡ra d i c i o n a l e sd e l c ul to y, P arti cul armente,l (' s

48 49
PierreBourdieu IIna iltterpretación de Ia teoría de Ia religiórt según MaxWeber

signos enunciatorios de ia eiección religiosa,es el principio de rodas las 2.2.2 Las demandasreligiosastie'de^ a organizaisealrededorde dos gran-
teodiceassociaies,que jr.stifican el orden esrablecidode manera directa e des tipos, que correspondena los dos grandestipos de siruacionessociales:
ini-nediata,como la doctrina del harma, justificando la calidad social de cada lx ¿Jcntandas da legitimaci¿jzdcl orden establecrdopropias de las clasesprlvi-
indii'iduo en el sistema de las casraspor su grado de calificación religiosa en lcgiadas,y las dentandasde contpensación propias de las clasesdesfavorecidas
el ciclo de las transmigracioneso, de maneram¿ísindirecta,como lassoteriologías { rcl i gi onesde salvación) .
del más ailá, promeriendo una subversiónpósruma de es¡eorden. 'Weber
Max encuentra el principio de los sistemasde interesesreligiosos
(:r l a rcpresent ación que las clasespr ivileqiadasI 'las clases"negar ivar nenr e
2.2.i En ianto que los inreresesreligiosos(por lo menos en lo que rienen lrrivilegiadas"se hacen de su posición en la estrucrurasocial: mie¡rrrasque
de perdnente para la socioiogía) tienen por principio la necesidadde justifi- cntre unas el sent im ienr ode la dienidad se ar r aigaen ia convicción de su
c ac ionesde exi s ti r e n u n a p o s i c i ó n s o c i a i derermi nada,l os mi smos esrán propl¿ "excelencia",de la perfLcciónde su modo de vida, "expresiónde sr.r
directamenre deterrninadospor la situación social,y ei mensaje religioso más '.t)'' culliitariu, que es por sí
mismo su propio ftrndamentoy no requierecle
capaz de sa¡isfacerla demanda religiosa de un grupo -por jo ranto, de ejercer r:i ngún otro" , ent r e los ot r os no puede r eposarsino sobr e una pr om esade
sobre él su acción propiamenre simbólica de movilización-, es aquel que ie r¡Jención dei sufrimienro, y 5o9." un ilamado dc la providencia capazciedar
aporta un (cuasi) sistema de justificacionesde existir como ocupanre de una rrntido a lo que scn a partir de lo que han de ser (p. 345). No es por azar
posición social determinada. .rrie,en las grandesburocraciaspoliticas,la función de legitimación encuen-
La armonía casi milagrosa que se observasiempre entre el contenido del ¡re su realizaciónal mismo tiempo que su formulación casi explícitay cínica:
mensaje religioso que Ilega a imponerse y ios intereses-másesrricramenre "1., l'urocraciase caracrerizapor un profi-inilo
desprccioa toda religiosidad
temporales -es decir, políticos- de sus destinatariospriviiegiados, se deduce r¡racionaijunto a la concienciade que ella puede ser utilizada como medio
de la definición propiamente sociológicadel mensaje religioso, en la rnedida ,lc donresticación"(p.374). Y Max Weber indica en orra partc, casi en los
en que constituye una condición sine qua non de su éxiro. Así,Bor ejemplo, mlsffrostérminos, eee las grandespotenciashie¡ocráticas(iglesias)esránpre-
Max S7eber observa que "conceptos calescomo 'culpa', 'redencién', 'humil- cl i spuestasa pr opor cionar al r , oder polí r ico una "f uer za de legit im ación"
dad' religiosasson no sólo exrraños sino antinómicos al senrimienro de dig- {lrqitinierendeMacht) compleramente irreemplazable,v que ellas consrir*-
nidad propios de todas las capas políricamenre dominanres y en parricular i ' cn ' un medio inieualable de dom est icación de los áom inados ( . das
de la nobleza guerrera" (p. 37t). ttnt,ergleichlicbeMittel dtr Dontestibation d¿r Beherrschtn)" (p. 891).

"Si se quiere cdracteriz¿r con una palabra a losgrupos sociahs que han sido los 2'2'3 se puede considcrarcomo lna variabie independientcde la prece-
propagadores de las religiones uniuersales, se ?ue¿e indicar: para el clente(con la cual es suficientecombinarla para dar razó¡rde demandasreli-
confucionismo, el burócrata ord¿nadord"elmunclo;para el binduisnzo, el mago qi'sas más cspecificadas,Ias del "intelectual prolemroide", por ejemplo), ia
ord¿nador dzl mundo; para el budismo, el rnonje rnendigoerrante por el mun- ¡trresic/a¿!
de sistematiz-qción
que, casi ar¡senteen el campesino, alcanzasu in-
do; porn el klam, el guenero conquistador d¿l mundo; para e! judaísmo, e/ rcnsidad máxima en las.capasinrelectu:"les.
' comerciante,arnbuhnte; para el cristianismo, el artesano itinerante: todos es-
tosgruPos ttctúan, no como losportauocesde sus 'ínteresnde c/as/ profesionales "En /a mediaa en que estáinspirada en un/1 'rzecesidrz¿/ itzíerior', la búsquetla dr
o materiales,sino en cuanto porradores.ideológicos (ideologische Tiager) '
/a sa/uadónPreseltta,entre losintalcuuales,utt cdráctcrpor un kr/o más exterior
dcl tipo d¿ ética o de doctrina de /a saluación que armonizaba mejor con su ¿le/a uida, ?or oiro mí"s rortical 1, tnás sistemáticoque el esfircrzttpor lib$arse clc
posición social" (pp. 400-40I).1' una necesidaderterna't¿/ conto se eí]cuentfti en /as crtpasno priuilegiadas (.,,).
F con el inteleuwal, )t sólo con á1,/a concepciónd¿l mundo se conuierte en un
probbma de senúdo. cuantu más rechazael inte/ecnulismo las *eencias mági-
10. Destacado mío.
iÁl
casy t/esencantae/ mundo (que, des¡tajadode su senrido nrágico, se contentrt con
i'
fr-
+
\cr, 1, con .lr.¿retff'en lugar c/e'signifcar'), ntásse reJuerzt1t se
b,tccsc]Úir ln Se puede leer el parágrafo10, titulado "l.as víasde la redención v su iniluen-
etigenria de'que e! mrrndo y el modo de uida como nm/id¿d'es estin
orden't¿/osde cia sobre el modo de vida (Lebensfihrung)"como un anáiisisde ios diferentes
tnanern signifrcnte 7 doudos d'e senüdo" (p' 396)' ¡nodos de ejerciciodel poder propiamentereligioso(pp. 413-447). La acción
c¿rismáticadel profeta se ejerce firndamentalmentepor la virtuci de ia palabra
(respccroa la proÍética, ext¡ao¡dinariay discontinua, mientras que la acción del sacerdorese
3. La concurrenciapor el poder religiosodebesu especificidad
competencia que se estableceen el campo político, por ejempio) al hccho
de ejercepor la virtud Ce un "método religiosoc{etipo raciona.l"que debe .suscarac-
hghimo del poder clt nodiJicar en terísti cas más i mpcr t ant es ai hecho de que se ejer ce cont inuam ent e'
q,r. po.r. en juego el monapolio del ejercicio .
, forrna durablc y prafundn la prfutica 7 lz uisión dzl mundo de lps laicos, imponién- cotidianamente.Correlativalretlte)"el aparato"del proGta se oPone a un aParato
doles e inculcándoles un ltabiuts religiosoParticular: es decir una disposición administrarivocie tipo burocrático tal como la lglesia,como cuefgo de firnciona-
durabie, generalizaáay rransferible para actuaf y Para Pensar conforme a los rios del culto dotados de una formación especiaiizada.Recluados según criterios
principios de una visión (cuasi) sistemáticadel mundo y de la exisrencia' los "discípuios"ignoran la"carreri' y las 'promociones", las "norni-
.;arisnráricos,
naciones"y las "distinciones",las jerarquíasy los límites de competencia.
agentes
3"1 La naruralezay la forma de las interaccionesdirectas entre los
qu e e s rá nc o mp ro me ti d o se n e s taconcurrenci a,l os i trstru-
o l a s i ns t it t r c ic r nes 3.2.2La profecíano puede cumplir completamentecon la pretensión(que
tnenros ), !as csrraregiasque ponen en práctica en esta lucha, dcpen,len clel implica necesariamente)de poder de modificar durable y profundamente el
si.sremade intereses y de la autoridad Propiámente religiosa que cada uno modo de vida y la visión del mundo de los laicos, sino en la medida en que
debe: (a) a su posición en la división del trabajo de manipulación simbólica llega a fundar una "comunidad", eila misma c paz ¿e PerPetuarseen una ins-
de los laicos,y (b) a su posición en la estructuraobjetiva de las rclacionesde ri¡r¡ción apta para ejercer una acción de rmposición y de inculcación durable y
autoridad propiamenre religiosasque definen el camp<-,religioso. continua (relación entre la profecía de origen y el cuerpo sacerdotai).
por no haber esrablecidola distinción errtrelas interaccionesdirectasy ia Es necesarioque la proiecía muera en cuanto tal, es decir, como mensaje
*en ausenciade de ruptura con la rurina y de conresracióndel orden ordina¡io, para sobrevi-
esrructurade las relacionesque se establecenobjetivamente
to d a inr er ac c ióndir e c ta - e n tre l a s i n s ta n c i a sre l i gi osas,y que domi nan i a vir en el hábeasdoctrinal del sacerdocio,moneda cotidiana del capital origi-
fo rma que pueden to ma r l a s i n te ra c c i o n e s(y l a s representaci ones Q4e i os nal del carisma {pp.. 355-360)
l v e b e r re duce l a l egi ti mi dad a l as
a g e n r espueden hac e rs ed e e l l a s ), Ma x
represerttaciattes de iegirímidad. 3.3 La luerza materiai o stmbólica que las diferentes instancias (agenteso
instituciones) pueden movilizar en la lucha por el monopolio del ejercicio
3.2 Entre los factoresde diferenciaciónligados a la división del trabajo legítimo del poder religioso es función, en cada esmdo del camPo, áe su posi-
reiigioso,el más pcderosoes el que oPone losproductorrsde los principios dc tión en la estn¿cturaobjetiua de las re/acionesdr autoridad prcpianzentere/igiosa,es
rrna visión (cuasi)sistemáticadel mundo y de la existencia:los profetas,a las deci¡, de la autoridad y de la firerzaque han conquistado en esa lucha.
instanciasde reproducción(iglesia)organizadasen vistasa ejercerdurablemente
la acción durable necesa¡iapara inculcar tal visiór.re investidasde la lcgirinli- 4.La legitimidad religicsaen un momento dado del tiempo no es otra cosa
dacl propiamente religiosaque es la condición del ejerciciode estaacción. que el estado de las relacionesde Fuerzapropiamente religiosasen ese mo-
mento: es deci r, el r esult ado Ce las luchas pasadaspor el m oncr olio dei
3.2.1 El profera se opone al cuerpo sacerdotalcomo lo discontittuot lo ejerciciolegítimo de la violencia religiosa.
contütrío,io exrraordir.r;rio (Ausseraltt¿gi;cb) a lo ordinario, lo extra-cotidiano
e
a l o cc t ic liano,o t r ivi rl , e n P a rti c u l a r i l l o q u e c o nci erneal modo de ej erci - 4.1 Ei tipo de legitimidad religiosaque una instancia religiosa puede invo-
cio clc ia acción leligi"rsa,es decir, la estructura tenlporal de la aóción de car es función de la posición que ocupa en Lrn estado determi¡rado de las
i mp o s ic ión ) , de incu l c a c i ó ny l o s me d i o s q u e p o ne en prácti ca(p. 180). relacionesde fuerza religiosas,en la medida en que esia posicién dornina la

))
PierretrSou.rdieu Una interpretación de la teoría de la religión según MaxWeber

naturalezay la fuercade las armas materialeso simbólicas(como el anatelna La oposición entre los diosesy demonios reproducela oposición entre la
profético y Ia excomunión sacerdotal)que los difcrentesagentesen concu- riraglacomo "coerción mágici', y la religión como "serviciodivino"-
rrencia por ei monopolio del ejerciciolegítimo de la violenciarcligiosapueden
comprome¡eren lasrelacionesde fucrzarcligiosas. "Sepuede designar con el nombre de 'religión' y de 'cultr' á las formas de
,-eiacióncon las potencids sobrenaturalesque se manifestaiz bajo la fornza de
'coercián
4.1.1 Mientras que la autoridad delprofeta,audor cuva otttorictasrcquie- plegarias, sacrifcio, ueneración,por oposición a Ia 'brujeríe' como
C ependeci e l a rel aci ri nque se
r e s er s iem p" e c o n q u i s ta d ao re c o n q u i s ta d a, mágica',y, conelatiuamente, te pueden llamar 'dioseí/os seresque 50n uenera'
estableceen cada rnomenio entre la oÍlrta de .servicioreligiosoy la demanda dns7 conjurados religiosantente,! 'abrnonioí aquellos que ton objeto de una
religiosa-del público, el sacerdotedispone de una autoridad rlefunción que le coacciónit de u,na euocaciónmágica" (p. lS'l)
dispensade conquisrar y de confirmar continuamente,',' ic pone inciuso al
del fracasode su acción religiosa.
abrigo de las consecuencias Asimismo, la histo¡ia de ios dicsessigue las fluctuacionesde ia historia de
:,'.!sservidores:
"En oposiciónnn e/ profeta, el sacerdorcdispensade los bienesde satuaciónen
"E/ desarrollo histórico d¿ esta diuisitin (ente la religión 7 la magia) esCebido
air¡td de su función. Si la Jimción del sacerdoteno excluvetm carismaperso-
na/, inch¿soen esecltto, el sacerdoteqtteda legitimado por sufundón, nx (ttutn' fz'ecuentemente al hecbo de que la supresiónd¿ un culto, bajo la acción de un
to niembro tle una asociació,nde saluacióri'(p. 337) poder mundano o sacerdntal,a fauor de una nueua religión, ha reducido los
ánliguos diosesal estadode 'd¿monios"'(p. 335).
Entre todas las característicasde la práctica y de las ideologíasde los
diferentes agentes religiososque derivan de esta oposición, será suficienre C)tra ilustración: si los sacerdotestienen el poder de hacer recaer ia res-
mencionar lc,s efectos muy diferentes que puede tener el fracqsode una em- ponsabiiidad del fracaso sobre el dios sin devaluarsedevah:ándolo, y lracieu-
presa religiosa (en el sentido amplio) según la posición del agente que lo rio recaerla responsabilidadsobre los laicos, puecieocurrir que "una venera-
sufre en las relaciones de fuerza religiosas. ción renovada y reforzadano sea suficiente y que los dioses del enemigo
prrmanezcan más fuertes" (p. 337).
"El
fracaso del mago puede serpenado con Ia muerte. En relación con é1,ei
sacerd¿teestá en posición uentajosa,y que está en condicionesde anojar la 5. Siendo el poder religioso ellproducto de una transacción entre los
resporuabilidad d^elfacaso sobre el d.ios misnto. Pero, al misztto tiempo que el ¿gentesreligiosos y los iaicos, en lá''cual los sistemasde interesespropios
pratigio d¿l dios, esel suyopropio el que disntinuye; a menosque los sacerdotesno de cada categoríade agentesy de cada categoría de laicos deben encon-
en€uentTenun ¡nedio de explicard¿ modc conuincenteque [a rcsponsabilidaddel trar satisfaccién,todo cl poder que los diferentesagentesreligios<;s detentan
sob¡e i os l ai cos , y t oda la aut or idad que det enr an en las r elacio¡ r esde
f"acaso no incumbe al dios sino al clmport¿t2ien¡o de susfeles. Esto se hace
posibk mediantela stutitucíón ae /a conceVcióndel 'seruiciodiuino'(Cottesd^enst) concurrenci aob jet iva que se est ablecenent r e ellos, encuent r an su pr inci-
par la coi?epción & k 'coircih del dios'(Gomeszwang)" Tp. SSZ) pii-,en la estructura de las relacionesde fuerza simbólica en¡re los agentes
reiigiososy las diferentes categcríasde laicos sobre las cuales se ejerce su
4.2. Las grandes oposicioncsque dividen las potenciassobrenatrirales, y ¡rr.rder.
las relacionesde fuerza que se establecenentlc ellas, expresan,en ir lógica
pr opiam ent e r e l i g i o s a ,l a :. o p o s i c i o n e se n tre l os cl i ferentesti pos de acci ón 5.1 El poder <iel profeta tiene por fundamento la fuer¿a del grupo que
religiosa(que correspondenellasmismasa posicionesdifcrentesen la estruc- r¡rovilizapor su aptitud part simbolizar, en una conducta ejemplar y/o en un
tura del campo religicso) y las relacio¡resde fuerza que se establecenen el discurso (cuasi) siscemático,ios interesespropiamente religiososde laicos
c em po r eligio s o . ilt.rcocupan una posición determinadaen la esfructurasociai.
E,n cuan¡o di.scursode ruptura y de cr,rica -que no puede enconr¡ar sino
Además de llegar caeren la represenracióningenua del carisma co¡¡o
^ en la invocación de su inspiración carismárica la justifcación ideo/ógicade sLL
cu a l idadm is r er ios ad e l a p e rs o n ao d o n n a tu ra l (" el poder cari smáti cosub-
pretensióna irnpugnar la auto¡idad.de las instanciasdetenradorasciei mono-
sisteen virtud de una sumisión afectivaa la personadel amo y a sus dones de
polio del ejercicio legítimo del poder simbólico-, ei discurso proférico riene
gracia -carisma-, cualidadesmágicas,reveiacioneso heroísmo, potencia del
mayoresprobai;ilidadesde apareceren los períodosde crisisabie¡rao larvada,
espírii,.ro del discurso"),Ma'" Weber, incluso en susescritosmis rigut'osos,no
que afectan,ya seaa sociedadesenteras)yaseaa ciertasclases,es decir, en.los
propone sino una reoríapsico-sociológica del carismacomo relaciónvívida del
períodos en que las transformacioneseconómicas o rnorfológicasdetermi-
priSti." con el personajecarismático:"Por'carisma'debe entenderseuna cuali-
nan, en ¡al o cual parte de la sociedad,el hundimiento, el debilitamienroo ia
dadconsi¿/erada co¡noextraordinaria (...) que esatribuidaa una Pefsona'Esta es
obsolescenciade las tradiciones o de los sistemasde valores que proporciona-
coTnodorLáadefuerzay de propiedadesscbrenaturaleso sobrehuma-
consirlerada
ban los principios de la visién del mundo y del modo de vida. Así, como los
(p. 179). La legitimidaCcarismáticano tiene otro
naso al mencs excepcionales"
obsen'abaMarcel N{auss,"hambres, guerras, suscitan profetas, herejías; con-
fundamento, puede verse,que un acto de "reconocimiento".Para romper con
tactos violentos afectan incluso la distribución de la población, la naturaleza
esradefinición,es necesarioconside¡arla relaciónentre el profetay los discípulos
segúnDurkheim, de la población, mestizajesde sociedadesenreras (es el caso de la coloniza-
laicoscomo un casoparricularde la relaciónque seestablece,
ción) hacen surgir fuerte y precisamenrenuevas:deasy nuevas rradiciones
enrre un grupo )¡ sussímbolosreligiosos:el emblemano es un simple signo que
"constituye" ese i...). No es necesarioconfundir estascausascolectivas,orgánicas,con la ac-
expresa"el sentimiento que la sociedad.tiene de sí mismi',
ción de los individuos que son los intérpretesmás que los amos. No hay pues
sentimiento.Como el emblema,la palabray la personaproféticassimbolizanlas
que oponer la invención individual a la costumbre colecriva. Constancia!
representaciones colectivas,Porquehan contribuido a constituirlas'Porquelleva
sentimientosy nrtina puedzn ser cosdde los indiuiduos, innouación y reuoluciónpueden ser obra
al nivel del discursoo de la conductaejemplarrepresentaciones,
d.elos grupo1 de los sub-grupos, de las sectas,de los individuos que acrúan
aspiracionesque le preexistieronPero en estado implícito, semiconscienteo
por y pan los grupos".'' Y, para terminar completamentecon ia rcpresenra-
inconsciente,en resumeq,pcrque realizaen su discursoY en su Personacomo
ción del carisma como propiedad iigada a la naturaleza de un individuo
palabras ejemplares,el reencuentro de un significante y de un significado
singuiar,seríanecesa¡iotodavía determinar,en cada casoparricula¡,las carac-
preexisrentes ("Tú no me buscaríassi no me hubierasencontrado"),el profe-
terísticassociológicamente-pertinentes de una biografia singular que hacen
,", .r. individuo aislado, sin pasado,desprovistode toda or.ra Ftanz¡que él
que tal individuo se encuentre soctalmente predispuestoa experimentary a
mi sm o ( " E s t á es c r i to (...) p e ro y o l e d i g o (...)" ), p" ed. sctuar como fuerza
II expresar con una fuerzay una coherenciaparticularesdisposiciones
éticaso polí-
organizadoraY movilizadora.
ticasya presentes,
en estadoimplíciro, entre rodcs los miembrosde la claseo el
Es, pues, a condición de pensar el profeta en su relación con los laiccs
grupode susdesti nat a. r ios.
(relación evidentementeinseparablede su relación con el sacerdocic'que él
impugna) que se puede resolver el problema de la acumulación inicial de!
5.1.1 Por el hecho de que el discursoprofético es producido en y para una
cdpia-l dc poder simbólicoque Max -Weberresolvíapor ia invocación (paradojal
transaccióndirecra con los laicos, la (cuasi) sistematizaciónque'realizaestá
de su parte) de la naturaleza.Pero, Por otra Parte, no es legítirno reducir ei "dominadano por exigenciasde coherencia\ógicasino por eualuaciones prtícticas'
éxito de la profecía a ia cuestién de la comunicación entre el profeta y ios
{ p.354.
laicosy del efeccoplopio de la toma de concienciay de la explicitaciónproféticas,
Si, agrupándolasen un (cuasi) sisremadorado de senticioy donanre de
sino a condición de interrogarsesobre las condicioneseconómicasy sociales
senti do,[a proFecí alegit im a pr ácr icesy r epr esenr aciones
que no t ienen en
de ia instauracióny de la eficaciade este tipo particular de comunicación.

12. Marccl Ma.uss,Oeuu rts ,P arís ,E d. de Mi nui r, 1969, r.Il I, "C c hes i ón s oc i aly di v i s i onc sde i a
en
I 1. Sobre cl "carisma de la palabra" y sus efbcrosen diferentescontextos socialesy cn particular :ociología', pp. 333-334. (l)estacado mío.)
la dcmr¡cracia eiectoral, ver \YG., t. II' p. 849'

56
PierreBaurd.ieu Utn irtter¡tr ctaciórt dt oria clela religión segúrt ltlaxWebcr

c om ún m ás q u e e i s e r e n g e n d ra d a sp o r el mi smo habi trrs(propi o de un I-lay iglesra,dice más o m€nos Max Weber, cuando existe un cuerpo cle
grupo o una clase)y que, por eilo, pueden ser vividas en la experienciaco- ..r.,f,-,i onal cs( ; ar cr dor cs)dist int t . rclel "m ur r do" y bur ocr át icam enr cor gani-
mún como discontinuasy dispares,es porque ella misma tiene por principio .r.irJoen lo que concieine a ia cai'rera,ia rernune¡ación,los deberesprofesio-
generadory unificaclor un habitus objetivamenie acorde con el habitus de ::.,. ,' ¡ cl moclc,de vida cxt r apr of esional;cuando los dogm as y los culr os
sus destinatarios.La ambigüedad que, como se lo ha observadofrecuente- .:sri l i reci onalizad. ¡ consignados
s, en libr os sagr ados,cor nent adose incuica-
mente, caracterizael mensaje profético se encuentra en rodo discurso que, .i l -- por una e nscñanzasist em át icay no solam ent ebajo la f o¡ m a de una
aunque se dirige más directamente a un público socialmenteespecificado, t.rrperaci óntécnica, en f in, cuando t odas est ast ar easse cum plen en una
apunta a ganaradhesiones,y sus alusionesy eiipsisestán hechasjustamenre ,r,rrunidad institucioi'r.riz-ada. Y él ve el principio de estainstitucionalización
para favorecerel entendimiento en el malentendido y el sobreentenCido,es -, .i 1' rrccso por , l cual cl car isur asc scp: r r rdc le pcr sonadcl pr of ct a par a
decir, ias percepcionesreinterpretadorasque importan en el mensajetodas :;s:i rsca i a i nst it ución, ; . -m ás pr ccisar nent e,a la f unción: "El pr oceso de
las expectativasde los receptores. ir¡nsiirencia de io sagradocarismáticoa ia i¡.istituciónen cuanto tal (...) e:
de t od. o pr ocesode f , nnación dr una I glesiay est o consiit r yc
-.{ :rci eríst;co
5.2F.| desenlacede la lucha entre el cuerpo sacerdotaly ei profeta conclr- 5i.¡csencia específica".
rrente (con sus discípulosiaicos) dependeno solamentede la fuerza propia- L)e eilo se deriva-quela lglesia,€n cuanto depositariay gestionariade un
m ent e s im b ó l i c a d e l m e n s a j e p ro fé ti c o (efecto movi l i zador 1' críri co ,..i ri smade función ( o cje inst it ución) , se opone a la sect aent endidacc¡ m o
-"desbanalizante"- de nueva revelación,etc.) sino también de la fuerza de /os cr.,nrunidadde personascalificadascarismática¡nente
de modo estrictamen-
gluPot mouilizada¡por las dos instanciasconcurrentesen las relacionesde i c personal " .ll
fuerza extra-religiosas, Sc deriva rambién que la enrpresaburocráticade salvaciónes incondicio-
Como lo indica Max Weber, la manera como se resuelvela rensión entre el ¡nlmente hosril al carisma "personal":profético, mírtico o extático que pre-
profeta y sus discípulos,por una parte,y ei cuerpo sacerdotal,porotra, es una rrrrrjc indicar una "qía original hacia Dios: "El que realizamilagros por el
"cuestión de fuerza" (p. 359), y todas las solucionesson posibles,desdela supre- carismático,y no en cl ejerciciode sus funciones,es condenadocomo
:'r,,ci<,,
sión física del profeta hasta la anexión de Ia profecía, pasando por rodas las ilcréticoo mago".
formas de concesionesparciales. En la medida en que la lglesia es el producto de la burocratizaciónpro-
lycsivade ia adrninistraciónreligiosao, mejor, de la "transformacióndel ca-
5.3 La práctica sacerdotaly la sistematizaciónque los sacerdoreshacen nsma en prácrica cotidiana", de la'"banalización" (WraLhaglicbu.ng)|odel ca-
sufrir al mensaje original son la resultante de la acción de lasfuerzat exter- risnra,eila presentatodas las caracté;ísticas
de las instituciones"cotidianas";
nas, que revisten pesos desigualessegún la coyunrura histórica, y con las
cuales el cuerpo sacerdotal debe contar, a saber: (a) las demandas de los
laicos (y, en particular, el tradicionalismo laico y el intelectualismo laico), I.i . i nversamente,la s .c ta "¡ec haz ai a qrac i ai ns ti tuc i onal v ei c ari s made i ns ti tuc i ón". E l l a s e i i ga
(b) la concurrencia del profeta y del mago y (c) tendentias intet nas ligadas :i F¡rnci ni ó Je l a "prc di c ac i ón de l os l ai c os " v del "s ac c rtl oc i ouni v ers al " (que "toda Igl c rs ra
a la posición clel cuerpo sace¡doralen la división del trabajo religiosoy a ia F,
i ,rÍrs(cucntcprohíbc "), dc "l a admi ni s trac i ón denroc ¡ári c adi rc c ta" ej erc i tl zpor l a c omuni darl

es t r uc t ur apr o p i a d e l a i g l e s i ac o m o i n s r i ruci ón permanenreque rei vi ndi - l¡ s on c ons i dc radosc omo i os "s erv i ri r¡rc sC
:rri :,nra(l os funci on ari os c c l es i ás ti c os " e i a c omunrd¿J ),
,i . l r "l i hertad de c onc i enc i a" qrl c una Igl es i a c on pr!tens i ón uni v ers al i s teni ; puerl e ac ordar
ca, con más o me¡ros éxito, el mcnopolio de la administración de los biencs f,l
i:,. 'i t G, 1. Il , pp.92 (\-922).
ciesaluación (exta eccletiamnulla salus),y como bu¡ocracia de fu¡rcionarios ¡:1 ! i . I:l ncol ogi snrode "banal i z .ac i ón"no traduc c fx ac tamc ntr (.n rl j uc gr.,dc pal al rras )l ,rl d,,s
que pr et end e ne l " mo n o p o i i o d e l a c o e rc i ónhi e¡ocráti cal egíti ma" ,y encar- l:
.r'l'(ctos dcl corrccpro wcberiano de lleralhaglichwtg, sino c¡uesc Io errriende en el doblc senrid,:
!r'
gados de organizar,cn lugaresy en momenros derermicados, el culto pú- tr:' (i . 'l )rocesoquc cons i s teen dev c ni r banal , c oti di ano, ordi na¡i o" por opos i c i ón a Io ex rrao¡di na¡i ,r
blico dei dios: la piegaria y el sacrificio (por oposición a la coerción mági- i'iir ,,,, ic cxr¡a-cotidiano (Ausseralltiiglichheit\v cn el scnrido de "efccto ejcrcido por el procero <¡uc
,
c a) , al m is m o ti e mp o q u e l a p re d i c a c i ó ny l a cura de I¿s al mas. !¡.. ',i r,i :rc cn devcni r banal , c o¡i di ano, ordi na¡i o".
'í..
Í,!

t:
"co mpc t enc iasde fu n c i ó n e s rri c ta me n ted e l i mi tadasy j erárcl ui camente or- i ndi ferenci arl oque debe sus car acL; r í sr icas,
y en par r icularsu am bigüedad,
d e n adas ,s er ie de i n s ra n c i a s ,re g l a m e n to s e , mo l umentos, benefi ci os,orden al hecho dr: qr.rees ei producto de la búsquedadel mayor denominador reli-
d i sc iplinar io, r ac io n a l i z a c i ó nd e l a d o c tri n a y de l a ac¡i vi dad de funci ón" gioso entre i¿s diferentescategoríasde receptores.
(p p . 879- 8B i) ' Le ambi güedr d dc le pr of ecí a de or igcn I a hacc disponible ¡ r ar e las
canscienr eso inconscient esque oper an los ut ilizaclor es
rei nterpretaci on es
e i mpone c
5. 3. 1 l. a pr ác t i c as a c e rd o tayl ' a l mi s mo ti e mpo, el n.rensa.ique sucesi vos,l l evadosa leer el m ensajeor iginal "con los ant eojo. sde r oda su
inculca, deben siempre la parte más importante cie sus característicasa las acti tud" , como d ecí a M ax Weber a pr opósit o de Lut e¡ o; v los inr t ar pr et es
ftansLcciones incesantesentre la Iglesia-que' en cuanto dispensadtra Permd- profesionales,que son los sacerdotes,contribuyen en parte mui' imporrante
nentede la gracia (sacramentos), dispone del poder de coerción correlativoa a este trabajo incesantede adaptecióny de asimilación que perrrriteestable-
la posibilidad de concedero cle negar los bienessagracos-,'5y ias demandas cer la comunicación entre el mensaje religioso y receproresrenovados sin
de los laicos, que entiende dirigir religiosamente,y de los cuales esperasu cesar,y profundamente diferenresde los destinatariosoriginales, ranro en
p o d er ( t em por al t a n to c o mo e s p i ri tu a l ). sus interesesreligiososcuanto en su visión del mundo.

de los
5.3.1.1 "cuanro más ei clero se esfuerzaen reglar el rnodo de vida 5.3.2 Prra rcplicar a los ataquesprofeticoso a la crítica intelectualistade los
laicos conforme a la volunmd divina (y:-cn prin-,eriugar, en allmentar por ello laicos,ei sacerdociodebe "fundar y delimitar sistemáticamentela nueva doc¡rina
su fuerzay sus ingresos),más estáobligado a hacer concesionesen sus teoríasy victoriosao defenderla antigua (...), esablecerIo que tiene y lo cue no tiene va.lor
sus acciones"(p. 367), al estilo de vida y a la visión cel mundo de la fracción de sagrado",en resumen,dorarsede instrumenrosde lucha simbólice alavez bomo-
l o s laic osde la c ua l e s p e rap ri m o l d i rl me n res u s i ngresosy su poder. génea("6analizados"), col)erentes
y distintiuos, y ello en el orden del ritual ranro
Max .Weberdice, en realidad,"concesiones, en sus teoríasy sus acciones, como en nateria de dogma (corpus doctrinal). I-as necesidades de la defensa
"Cuanto contra las profecíasconcurrentesy contra el inteiectualismolaico contribuyen a
a la visión rradicionalde los laicos",y comenta,algunaslíneasdespués:
más las vastasmasasdevienenel objeto de la acción de influencia ejercidapor favoreceria producción de instrumentos "banalizados"de la práctica religiosa,
los sacerdotesy el fundamento de su fuerza, más el trabajo de sistemariza- como lo testimonia el hecho de que la producción de los escritoscanónicoses
ción debe romar en cuenta las formas de repiesentacióny de prácticasreli- aceleradacuando el contenido de la tradición se encuenrraarnenazado(p. 36i).

giosastnás tradicionales,es decii mágicas"' E s tambi én l a pr eocupaciónde def inir la or iginalidadde la com unidad
En la forme generalque ie es dada aqr-rí,estaproposición define la forma respectoa las docrrinas conclrrrentes,1o que conduce a va\orizarlos signos,lis-
entre la actividadsacerdotal,y su "púbii-
parricularde la relaciónque se esrablece tintiuosv lasdoctrinasdiscrintinantes,alavez para luchar conrra el indeferenrismo

co-meta", cualquieraque sea,popr-rlaro burgués,'campesinoo ciudadano' y para hacerdi fi c il ei pesr jea I a r eligiónconcur r enr e( p. 362) .

csi á próxi mo a detenta¡


5. 3. I . 2 c uanr o má s e [ c u e ¡p o d e l o s s a c e i dores 5.3.2.1 La com oet cnciadel nr ago, peaueño em pr esar ioindependienr e,
en una sociedaddividida en clases,eI monopoliode hechode la adr¡inistración al qui l adosi l l ega el caso por los par r icular es,ejer ciendosu of icio f uer a de

de los bienes de sa!.¡ación,más son divergentes,incluso contradictorios,los roda institución comúnmenre reconocidar', la mavoría de las veces,de ma-

interesesreligiososa 1o-.cualesdeberespondersu acciónde predicacióny de cura neracl andcsti nacont


, i: r "r ir uliización"
r ib"vc a im poncr al cucipo sacer dor al
de las almas,y más esta acción y los agentesencargadosde ejercerlatienCen de ia prácticareligiosay la anexión de las creenciasmágicas(v.g.culro de ios

a diversificarse(del sacerdotede la corte al cura rural, del iideísmo místico al s¿ntoso morabi t ism o) .

ri tualis nr om ágico ),a l mi s mo ti e n l p o q u e s e e l aboraun mensaj esoci al mente


5.3.3 "La sistematización y la "banaliz;rcién"
casuísrica-racion¿,.1" quc cl cuerpo
sacerdotalhace sufrir a la profecíade origen -(cuasi) sisrematizaciónestablecida
; ' 4 3 5 ( g r a ciain sti tuci onal ,A uxal tagnade)
1t . V C . , p . 3 9 ( c o er ció n h ie r o cr á tica ) p
"sobrela basede valoresunitarios"- respondea exigencias convergenres: (a) la

bt
()na interpretacíón de Ia teoría de Ia religión segtin MaxWeber
Pierre Bourdieu

búsquedatípicamenteburocráticade la economíade carismaque lieva a con-


fiar el ejercicio de la acción sacerdotal-actividad necesariamentebanal y
" banaliz ada' ,p o rq u e c o ti d i a n ay Ic p c ti ti \' ¡, d. prcdi caci óni , de ctrra de l as
almas-, a funcionarios del culto intcrcatnutab/esy áoados cle una cualifica-
cién profesicnal homogénea, adquirida por un aprendizaie,-'specífico,e tns-
ti
trumentos homogéneos,apropiadospara sostene¡una acción honiogéneay Profec0 corcursrle
hornogeneizante(producción de un habitus religioso);(b) la búsquedade la PROFETAS
adaptacióna los inte¡esesde los laicos,directamentedetectadosen la aciivi- ¡ DISCONNNUIDAD.EKíI]AORDi|\¡ARIO
PrúÍeio de c{igren t
t 'O^
dad sacerdotalpor exceiencia,la cu¡a de ias almas, "insirumento de fuerza z:

#¿tl
, 02^
del sacerdot.";'t'y (.) la lucha contra los concurrentes. Á-a a^
qa ,-on
' Q.* -
La "sistematizacióncasuística-¡acional"y la "banaiización" constituyen oñ '.\Y
-e9 q

del funcionarnientode una burocraciade la


las condicionesf,-rndamentales is,t..#
."".."y.s7
fq
-i."*. ?ru
manipulaciónde los bienesde salvaciónen cuanto peimiten a agentescuales-
.0""7 #t -A"t-g'
\,^
-"7i i s i j
F
quier4 (intercambiables)ejercerde manera continlra la actividad sacerdotal, 'i "r: 'o
proporcionándoleslos instrumentosprácticos,escritoscanónicos,br.virrios, / S/ 9/ \'

sermonarios,catequismos,etc., que les son indispensablespara cumplir su t /' / j jj l :-_-_-=


{ ' .V
-^l
-
dint-g-in1ui"91¡'o¡tt"l
-' c¡ossdaminontes:demondo
f unc ión al m e n o r c o s ro e n c a ' ri s m a(p a ra cl l os nri snrós)y al mcnor ri esg.,
l:

iiecesidodsé¡nreresesder
t'- *'x's;*
(para Ia institución), sobre todo cuando les es necesario"tomar posición so- - -' +dn:::**3'ffi'{i''3*';';'
t SACERDOTES . -rr")"Jorono-* clo:es dominodas:demondo
r.: *"-rJ,*,* '
bre problemas que no han sido resueltosen la revelación"(p. 366). El b¡evia- : B r,ocrccl orel i gros o :. -l [ des c turc i on
"
F ccNrrNuiDAD- onb,rulnro_* l-
rne,é,s,¿s¡o-1o
I
t. -.- -'- r- "
rio y el sermonariojuegan, a la vez,,el rol de una ayuda-mennoriay de una .llt
v r {l l ,/
t¡arreraprotectora,destinadosa asegurarla economía de la improvisaciónal ii

mismo tiempo que a prohibirla. 'o" / .'i


8i ,/
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Relocón obietrvo de concutrencb
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1 6 . \ Y / G . ,p . 3 6 5 . M a x \fle b e r o b se r vaq u e h p a r te d e d i cadaa l a predi caci ón (por oposi ci ón a l a t,

c u ¡ a d e l a s a l m a s )va r íae n scn tid o in ve r sod e la in r r o d u cci ó¡rde cl emcntosmági cosen l a prácti ca {;:
¡il

y l a s r e p r e s e n t a c io n e(sco m o lo te stiln o n iacl c.jcn r p lodcl protestanti srnc).


' Sobreel podersinrbólico*

acido del esfirerzopor presenur el balancede un conjunto de invesdgacione


sobre ei simbolismo en una situación escclar de un dpo particuiar, el
de la conferencia en una universidad extranjera (chicago, abril de 1973),
"'-es!q, texto no.debe ser leído como una historia -incluso escolar- de las teorías
'r"
-.-del simbolismo, ni menos aún como una suerte de reconstrucción seudo-
hegelianade los pasosque habrían conducido, por superacionessucesivas,
hacia la "teoría final".

perjuicios, es porque elia separalas producciones culturales del sistemade


referenciasteóricas, en relación a las cuales son definidas, consciente o in-
conscienremenre; es decir, dei campo de producción jalonado por nombres
propios o conceprosen -ismo,para cuya ciefinición ellas conrribuyen menos
de lo que él las define. Por esrarazón, Ias situacionesde "inmigra.ión" i-po-
nen' con una fuerza parricular, la actualizacióndel horizonre de referencia
::.!lue' en las siruacionesordinarias, puede permanecer en
estado implíciro.
ñ.
l'ero va de suyo que el hecho de repatriar ese producro de exporración impli-
ca graves peligros de ingenuidad y de simplifi."cion -y rambién gr"ni.,
rtesgos,puesroque enrregaun insrrumento de objerivación.
É.
Á
+
,1
¡: '::t*"Sur le
pouvoirsimbolique , Annales,3,
mayo-ju¡¡.de 1977,pp.4A5-411.
F

65
ffi
Pierre Bourdiett
$
s
Sobre el.porler sü¡tbólico

sin embargo, en un esradodel carnpo en el que se ve cl poder por todas * Z. l,os "sistemas sirnbólicos" colno estructuras estructuradas
los
partes,conlo en orros riemposse rcchazaba¡econocerloallí donde saltaa llusceplibles de un an¿ílisisestructural)
o;or, no es inritil recordar-sin hacer jamás, como otra manera de c{isolver- f,
lo, una s r r er red e ' ' c írc u l o c u y o c e n rro c s t á por todas partcs1' en ni nguna i.
Ll anál i sisest r uct ur alconst it uyeel inst r um enr o m et odológicoque per -
a ia
parre"-, que es necesa¡iosaber descubririoallí donde menos se ofrece rl i ¡e real i zarla am bicién neokant ianadc asi¡ la lógicaesp- - 'f ica de caciauna
vista, allí donde esrá más perfectamentedesconocido,por tanto reconocl- .lr la.s"formas simbólicas":al proceder,según ci deseode Schelling, a una
do: ei poder si m b ó l i c o e s , e n e fe c to ,e s ep o der i nvi si bl eqLreno pu-de ej er- ,., rura ¡ropi a r neir t ct aur r gór icn( por oposición a alt gór icr t ) 'r e no r cf ier eel
o
c er s es ino c o n l a c o m p l i c i d a d d e l o s q u e no qui eren saberque l o .sufren ;rito a ot¡a cosaque a sí misrno, el anáiisisestructuralapunta a desprendcrla
inc lus o que lo e j e rc e n ' inmanente de cada producción simbólica. Pero, a diferenciatle la
r,-5rluctura
iredición neokantiana,que ponía el acen¡osobre el modusoperandi,sobrela
rctividad productora de la conciencia,la tradición estructuraiistaprivilcgia
l. Los "sistemas sirnbólicos" (arte, religión, lengua) oPer/ttum,las estructurasestructuradas"
:i r.tpus Esto se ve bien en ia represen-
como estructuras estructurafites rrci ón que Saussur e,el f unciador de est a t ¡ adición, se hace de la lengua:
,i sremaestrucr ur ado,la lengua es f undam enr alm ent et r ar ada com o condi-
La rradición neokantiana(Humboidt-cassirero, r'arianteamericana,sapir- ci ón de i nteligibilidad del habla, com o m édium est r uct ur adoque se debe
whorf parael lenguaje)trata a los diferenresuniversossimbólicos,mito, lengue, f
.,;nstruir para dar razórl de la ¡elaciónconstanteentre el sonido,v el sentido.
::
arte,ciencia,como lnstfum.nto, d" conocimientoy de cónstruccióndel mundo il'or ia oposición que estableceentre la ico¡rologíay la iconograÍlay que es el
de los objetos,como "f<¡rmassimbólicas",reconociendo,como lo señalaVlarx ..luivalenteexactode ia oposición entre la fonología y la fonética, Panofsky
t
(TesissobreÍeuerlrach),el "aspectoactivo" del conocimiento. En la misma línea, -t, todo aspectode su obra que apunta,a desprende¡las estructurasprofun-
-
pero con una intención máspropiamenrehistórica,PanofskTtr3tala PersPectiva .i¡s de las obras dÉnrt.- se sitúa en esia tradición.)
comotnaformL hittóricL,sinilegarsin embargohastareconstruirsistemáticamente t.

lascondiciones socialesde producción. ¡!l Pritne ra síntesis


Du¡kheim se inscribeexplícitan'rente en la tradición kat-¡tiana.Sin ember- tl


"positiva'y "en"rpírica'al tu.
go, por el hecho de que él entiendedar una resPuesta Instrumentosde conocimiento-y de comunicación, los "sistemassimbéli-
y dei
p.oú1"*" dcl conocimiento, escapandoa la alternativadel apriorismo cos" no pueden ejercerun poder estiucturantesino porque son estrucrurados.
de las simbólicas e-i
empirirmo, sienta los fundamentos de una sacio/ogía fonttas i.,l poder si¡nbólico es un poder de construcciónde la re¿lidadque tiende a
que él utiliza el concePto de "forrna simbólica"
(Cassirerdirá expresamenre F
l- csrablecer el sentido inmedia¡o del rnundo (¡',
un o¡den gnoseológico: par--
of tbe "n
como un equivalentede forma de clasificación:cf. E. cassi¡er, The MTtb I;
*:l ti cul ar, dei mundo social) supone lo que Dur kheim llam a el conf or m ism o
las *ii

Sr¿¡¿,New Haven, Yale Universitv Press,1946, p' 16)' Con Durkheim' É. /ítgico,es decir "una concepciónhomogéneade! tiempo, del espacio,del nú-
para ii
formas de clasificacióndeian de ser formas universale, (transcendentaies) l-rr nrcro, de i a causa, que hace posible el acuer do ent r e las int eligencias".
<levenir(coriro irnplícitarnenteen Panol¡W) for*at socidles, es decir arbi;rarias
i'
Durlcheim -o, despuésde éi, Radcliffe-Brown, que hace descansarla "solida-
(relarivasa un grupo parricular)v socialmenre determlnaclas.r ridad social"en el hecho de compartir un sistemasimbólico- tiene ei mérito
En esta tradición iclealista,la oblerividaddel sentido del mr¡ndo se tlefine ,l i seri al arex plí cit ar nenr cla f unción social ( en el sent ido dcl est r ucr ur al-
por el acuerdo ce las subjctiVid.rdes esrrucruranrcs(sensus= cottsensu.t). l i rnci onal i smo)del sim bolism o,aut ént icaf unción polí t ica que no sc r eclr ¡ ce
:r l a funci ón de com unicaciónde los est r uct ur alist as. Los sí m bolosson los
Heideggcr: acusar instrumentospor excelenciade la "integración social": en cuanto instrumen-
1. uno pie nsa en el sentido ctiinol<igico ,Jc bttcgoreisthaital como Io recuerda
ticm p o , c¡ r la r cr ¡ lin o lo gía del ei ci :rpl c;por excel cnci ade
parentesco,
públicamente; r,, a l m isr n o tos de conocim ie¡ r t oy de com unicación( cf . el análisisdur kheim iano de la
c a r c g o r í r ss o c i e lcs( tir n lin o r Jc tr :tr n l!clltu ) ' irstividad), hacen posible el consensosobre el sentido del mundo social, que
que depencleil,en sll forma y contenido,del poder materialo simbólicr¡acunru-
co rrtr ibuy ef unc lanre n ta l me n te a l a re p ro d u c c i ó ndel ordensoci al :l ai rrtegra-
"moral"': lado por lo-cagentes(o las instituciones)comprometidosen esasrelacionesy quc.,
ción "lógica" es la condición de la inregración
como ei don o el potiatch, pueden permitir acumular poder simbólico. En cuan-
to instrume¡1iosestructuradosy estructurantes de comunicacióny de conoci-
miento, los "sistemassinrbóiicos"cr-rmplensu función política de irrsrlumen¡os
instrumentos de dorninación
3. I-asproducciones simbólicas como
de imposició¡ro de legidmaciónde la dominación,que contribuyena ascgurarla
dominación de una clasesobre otra (violencia sirnbólica)apcrtando el refi.ler¿o
L at r ac lic iór r m : rrx i s ta p ri v i l e g i a i l a s J u n c i o n e spol íti casdel os.,si sternassl m.-
lógicr y de su fiunción gnoseológica de su propia fueua a las relacionesde fuer¿aque las fundan, y contribuyendoasí,
bólicos" en detrimen'o dt "' t'-"t""t'"
"expresión sistemática"a propósi'o del derecho): según la expresiónde'ü7ebeaa la "domesticaciónde los dominados".
faunque Engels habla tle
l,as diferentes clasesv fraccionesde ciase están compromeridas en una
tAr;'i l ;; ; " " ; ' ; . { ' ¡" " ti e n e n a d a e n c omún ccn el estrttctural -
"o clarazónde lucha propiamente simbólica para in-rponerla definición del mundo social
Vil.t;ilr"" r" *"."ro de Durkheimo de Radcliffe-Brorvn)
" don,i-
de racr:rsc
a losinrereses más conforme a sus intereses,el campo de las tomas de posición ideoiógicas
lli;;';;;;,.r* reracionándoras
,,*rruricas
v col ecti ' ementeapropi a- que reproduce, bajo una f or m a t r ansf igur ada,el cam po de las posiciones
[[;;";.. n; ; . , por ic ió n a l ¡n i to ' p ro d u c ro c o l e c ri vo
que ellastienden a presen- sociales.iPueden plantear esra lucha ya sea direcrarnente,en los conflictos
tr\;;.'i", id"olosí", sirvcn a los inreresesparriculares
grupo. La cultura simbólicosde la vida cotidiana, ya s€a por procuracién,a rravésde la lucha
i\ü..;;;:;;;* universales,comune! al coniunto del
clasedominante (aseguran- de la producción simbólica (productoresde tiem-
que libran los especialistas
u;;;;," contribuye a la integración real de la
todos sus miembros y distinguiéndo- po ccmpleto) y q.r" tienen por apuesrael monopolio de ia vioienciasimbóli-
do una co¡nunicacróninmediata entre
ca legítima (cfl Weber), es decir, del poder de imponer (c-iertamente
de in-
l o sd elas ot r as c las e s );a l a i n te g ra c i ó n fi c ti c i a d e l asoci edadensuconj unro,
conciencia)de las clasesdominadas;a la culcai) instrumentos de conocimiento y de expresión (taxonomías)arbitra-
así pues, a la desmovilización(ialsa
rias (pero ignoradascomo taies) de la realidadsocial. El campo de produc-
l .g i tim ac ióndeior d e n e s ta b l e c i d o p o re l e s ta b l eci n-rrtntodedi sti nci ones
ción simbólica cs un microcosmo de la lucha sirnbólicaentre las clases:sir-
(j e rar quí as ) y laleg i ti m a c i ó n d e e s a s < l i s ti n c i o n es' A esteefectoi deol ógi co' l a
viendo a sus propios interesesen la lucha inrerna del campo de producción
cu l tur ador ninant e l o p ro d u c e d i s i mu l a n .l o l a fu n ci óndedi vi si ónbaj ol a
(y en est. medi d a solam ent e) ,los pr oduct or essir ven a los int er esesde los
q u e u n c ( rnedi o de cot-rtuni caci ci cs
n)
l u n c ión c le c om un i c r.i ó r,, l " c * l ru ra
grupos exrerioresal campo de producción.
ta m biénlac ult ur aq l re s e p a ra (i n s tru m e n to d e d i sti nci ón)yquel egi ti mal as
La ciase<iominantees el lugar de una lucha por ia .jerarquíade los princi-
d i stinc iones . o. , , t.i i ....l o " .o .i " u l a s c u l tu ra s (d esi gnadascomosub.cul tu'
la cultura dominante' pios de jerarquización: las fraccionesdominantes, cuyo poder descansasobre
ras) a definirse Por su distanciacon
el capi ral económ ico,apunian a im poner la legit im idadde su dom inación,
ya sea por su propia producción simbólica, ya sea por la intermediaciónde
Segunda síntesis
las ideologíasconservadoras jamás a los intere-
que no sirvenverdade¡amente
ses de los dominantes stnopor añadidura y que amenazanslempre desviar a
C ont r at odas la s fb rm a s d e l e rro r..i n te ra c c i oni sta,queconsi steenreduci rl as
no es suficienteseñalarque ias beneficio el poder de dei'lniciónciel mundo sccial que derienenpor dele-
relacionesde fuerzaa relacionesde comunicación, ,lsu
"inr eiecr uales"
..elaciones de comunicaciónson siempre,tnseparablemente,
de poder
relaciones I gr' j n; i a Fracc ióndom inad¿ ( clér igoso y "ar r ist as",segúnla
época)tiende siempre a ubicar el capital específico,ai cual debe su posición,
/
l : .:i ma de l a jer ar quí acle los pr incipiosde jer ar quización.
\ en
l, . h r r e c l i c i ó n n c o - f e n om e n o ló g ica ( Sch iltz' Pctcr Be r g e r ) y ci ertasformasdel actnt'nrctod"l o'¿i :
d e omi ti r l a cuesri ón de i rs conti i ci ones
rc c p t e n l o s t r l i s n r o s p ' ""' p u tsá ' ¡ ' o r cl so lo h e ch o
del n-rundo(r'cnparti cul ardei muncl o
, oc i r l e s d c l e p o s i l : i l i d acl ,1 "1 ^ r *p r r - ir r r i,td ó xica ( Hu sse r l)
3- L¿stomas de posición ideológicasde los dominantes son cstrategias<iercproducción quc riendcn
co m o yendodc stvo('nl ¿enJargr¿'l ted'como
roci ¿ 1 ) . e s t l c c i r ' d c l a e xp e r ie n citd cl¡ n u n d o so cia l
arcforzar¿z l a cl ascy l uera dc l a c l as e,l ¿ c reenc i aen l a l egi ti mi dadde l a domi nac i én dc l a c l as e,
d¡c c 5 . - l i i ! t z , ) .

{)ó
piarre Bourdieu Sobre el potler sintbólico

4' lnstrumentos de dominación estructurantes La función propiarnenteideológica del campo de producción ideológica
porque son estructuracros,
los sisremasideológicosque los especiaris;rs
producen po¡ y para ra rucha por sc cumple de manera casi automática,sobre la basede la homología de es-
el m o' opolio d e l a p ro d .u c c i ó ni d e o l ó g i c a
regíri ma,reproducen baj o una rrucruraentre el campo de producción ideológicay el campo de ia lucha de
forma irreconocible,por ia interm.dir.ún i¡s clases.La homología enrre los dos campos hace que las luchaspor lo que
de la homología entre er campo
de producción ideológicay er campo cs¡á en j uego , especí f icam enr e en el cam po aur ónom o, pr oduzcan
de las cr"s", ,ocid.], ra esrructurader
campo de las clasess<;cia.les. riuromáticamenrefor¡ras eufemizadasde las luchas económicasy políticas
.nrre las clases:es en la correspondenciade estructura a estrucruraque se
Los " s is r em a ss i mb ó i i c o s "s e d i s ti n g u e n , i unpi e l a func ión pr opiam enr eideolégicadel discur sodom inant e, m edio
fundamcnrarmcnre, scgun sean
producidosy al mismo riempo ,p.opi"áo, !-siructuradoy esrruclu¡anretendiente a imponer la aprehensióndel orden
por el conjunrc,de un grupo c, ai
cort.ario' sean producidos por un cuerpo .r¡;iblecidocomo na[u¡al (orrodoxia) a rravéscie ia imposición enmascarada
¿,ees?ec;ar^tus ¡ más pr.ecisamenre,
Por un campo de producción y de ci¡cuiación relativamenr"a.rtónurno, i¡;oi tarrto, desconocidacomo tal) de sistemasde clasificaci
6n y de esrrucr,r-
i"
historia de la rransformacióndel miro en rus mentalesolrjerivamenteajusradasa las esrrucru¡associales.El hechu de
religión (ideología)no es separabrede
la hisroria de la consrirución de ,.rn .,..,.rpo ,¡uc Ia correspondenciano se efectúe sino cie sistemaa sistemaenmascara,
d. p.od,r.-.lr.s especiarizadosen
discurso y en ritcs religiosos, es cieci¡ d"i r:iilro a los ojos cle los producroresmismos cuanro a los ojos de los profanos,
progr.ro de Ia diuisión c/e/trabajo
re/igioso-slendo él n-rismouna dimensió,-, L¡uelos sisremasde clasificacióninternos reproducen,bajo una forma irreco-
der p.ogrero de ia división ciertraba_
jo social,por tanto, de la división nociblc,las taxonomíasdirectamentepolíricas,y que la axiomáticaespecífica
en clases=que conduce,entre orras conse_
cuencias,a dtyosetr a los laicos de los insrrumenros Jc cada campo especializadoes la fo¡ma transformada(conforme a las leyes
<ieprbducción simbóiica.,
Las ideologíasdeber-rsu esrructuray sus rspccífi casdel cam po) de los pr incipios f undam ent alesde la división del
f,rn.iorr", más específrcasa las
co ndic iones s oc i a l e s .d ,e
s u p ro d u c c i ó n y d e su ci rc' i aci ón, es deci r, rrribajo(por ejempio, el sisremade clasificaciónuniversitaria,que moviliza $ajo
a l as
funciones que cumplen inicialmenr. titlafcrrmairreconoeibleiasdivisionesobjetivasde la esrrucrurasocial espccial-
p"." los especiarisras en.-concurrencia ¡
por el monopolio de la competenciaconsiderada la ciivisióndel rrabajo-teórico y prácrico*, convierrepropiedadessocia-
(reiigior", etc.) ¡ 'nente,
secundariamenrey por añadidura, para "rrí.ti.", ics en propiedadesde naturaleza).El efccto propiamente ideológicoconsisre
lo.sno-especialistas. Rccordar que las
ideologíasestánsiempre doblernente determinadas-quedeben suscaracrerísricas en la imposición de sistemasde clasificaciónpolíticos bajo las
[rrccisamente
más específicasno solamentea los inte¡eses ;r¡rariencias iegítimasde taxonomíasfilosóficas,religiosas, jurídicas,erc. Los sis,
de las craseso de ras f¡accronesde
claseque exPresan(función de sociodicea), rcmassimbólicosdebensu fuerzapropia al hecho de que lasrelacionesde fuerza
sino también a ios inreresesespecífi-
cos de los que las producen y a ra Iógica tlueallí seexPresanno semanifiestantino bajo la forma irreconociblede relacio-
específicadel campo de producción
(comúnmente rransfiguradaen ideoiogía
de la "creación" y i"l ,,creador',)-es ncsde sentido(desplazamienro).
de escapara la reducciónr-.rur"rd. ro, productos E l p' :der si m bólico com o poder de const it uir lo dado por la enunciación,
3-r:r' -:d:r ideorógicosa los
lntere.ses de las clasesque ellossirven-(efecto .,cortocircuiro,' dc hace¡ ver y de hacer creer, de confirmar o de transformar la visién del
de frecuenteen la
crítica "marxista"),sin sucumbir a la ilusión rnundo y, por ello, ia acción sobre el mundo, por lo tan_o el nrundo; poder
idealisraque consisreen rrarar las
produccionesideológicascomo roraridades casi mágico que permite obrener el equivalentede lo que es obtenido po, i"
autosuficienresy auro-engendra-
das suscepriblesde un análisis y (físicao económica),graciasal efecroespecíficode moviliz.ación,no se
firerz-a
FUro pura¡nenre interno (semiología).,
r'jercesino si éi es reconocido,es decir, desconocido como a¡birraric. Esto
.sir:nifica
que el poder simbólico no resideen los "sisremassimb,ólicos"baio la
4' I ¡ e x i s t c n c i ad e u n ca r n p o cle p r < - r d u cció n
csp ccia liza d ocs l a condi ci ón ,1el a apari ci ón <1cLrna
luc h a e n t r e i a o r t o d o x ia ) ' la h ctcr .clo xia ,.¡ u ",i"n "n e n co m ú n<i i sti ngui rse
del adox,t,csdcci r¿e
io in d i s c u r i d r - ¡ .
5' E s e s c a p a r a ¡ r b i é n al e tn o lo g ism o ( ' .' isib le rnbaj o col ecti vo, y d e s i l enc i ar,as í, todo i o que ei i as deben a l as c a¡ac rerís ¡i c as
e n p a n icu la r en el anál i si sdel pensarni enro dc l c ampo de
arcarco)
que c o n s l s t ec n t ¡ a r a r a la s id e .lo g ía sco m .
m ito s, cs d ccr r ,como producrosi .¿i l ercnci ados ['r'rdrl cci ci n(e.g.cn l a traC i c i óngri c ga,Iasrei nterprerac i onces
s c réri c asde l as rradi c i c nc smíri c as ).
de un
en y Por una t'elactón
fbrma <le una"il/actttionaryforce",sr ro qlle se define INS'fRUMENI-OSSIMBÓLICOS
lo sufren' es decir' en
determinada entre los que ejercen el poder y los que
y se reproduce la creen-
la estructura misma del campo donde se produce /
de orden' poder C-omo C.omo L¡MO
cia.6Loque hace el poder de las palabrasy de las palabras
de
.1". el orden o de subvertirlo, cs la c¡eencia en la iegitimiciad Instrumentos
estrucn[as
no es cofn-
palabrasy de quien las pronuncia, creenciacuya producción
las -"rrr"n.r eStructurantes estructu¡adr" de dominación
perencia de las palabras.
transform: lda _es de-
El poder simbólico' poder subordinado'es una fb¡ma Instrumentos de Medios de comunicación Pode¡
de poder: nc'
.ir, irreconocible, rransfiguraday legitimada-, de las otras formas conocimientoy (lenguao cultura,
describenlas rela- de construcción v's.disc¿rso
s9 puede superarla ai¡ernativade los modelos energéticosque
dci mundo objetivo ocomponamiento) División del traba.io
cibernéticos que
ciones socialescomo relacionesoe fuerza y de los modelos (clasessociales)
de describirlas
hacen,de ellas,relacionesde comunic.ción, sino a condición División del rabajo
diférentesespeciesde
leyesde rransformación que rigen ia rransmutación de ias ideológico(manual/intelectual)
de disimulación y de
."pit"l en capital simbóiico, y, en particular,el rabajo Función de dominación
una verdadera
tr"r,.fig,rr".iá., ("r", una palabra' de eufenización) q*e asegura
ia Formas simbólicas Objetossimbólicos Ideohgtas
,."nr,rbrr"rr.iación de iasrelacion.sde fuerzahaciendo desconocer-reconocerT (vs. mitos, lenguas)
así en poder estructurassubjetivas estructurasobj etivas
violencia que ellas encierranobjetivamente,y transformándolas (modtu operandl (optx operanm) lv{arx
aParente de energía'B
simbólico, c apazde producir efecros realessin gasto Kant - Ca-ssirer Hegel - Saussure Weber

Sapir-\X4rorf Durkheim-Mauss livi-St¡auss Cuerposde especialistas


Culturalismo Formassociabs (semiologra) en concurrenciapor
declasificación - l - ^ ^ ^ ^ ^ t:^ ¡ -
l ^ ^ .^ J,,- - :x^
.ttlrt,rrl leoí¡ima
''b" " "*

Significación:objetiüdad Significación:sentido
como acuerdode objetivo en cuanto
lossujetos(consenso) producto de la
comunicación que esla
condición de la comunicación

6, L o s s í m b o l o s d e l p o d e r ( ve stid r r r ace , tr o , e r c.) n o so n si no capi tal si mból i co obfeti uadoy su sociologíade lasformassimbólicas:
ef ic a c i ae s r ás o m c t i d a a l,¡ sm ism a s co n d icto n e s' con¡ribución del poder simbólico al orden
( N d e l T')' gnoseológico.Sentido = coflS€Frso,
7. " M é c o n n a i t r e - r e c o n n a itr e ",e n e l te xto o r ig in a l i. e. doxa
g. L a d e s r r u c c i ó nd e e sr e p o d e r d e im p o sició n sim b ó lica, fundado sobre el desconoci mi cnro'
)
s up o n e l e t o n a L / . c , n citn ci¿ d e i.,..,b ir r a r io , cs d ccir , e l d c vel emi entode l a Y erdadobj eti va y el
e n la m e d id a cn q u e d e sr r uyel as l al sasevi denci asde l a ortocl oxi a
ani q u i l a m i c n r o d c i a c r e cn cia :e s Poderideológicocomo contribución
y n cu r r a liza a llí cl p o ..,r de desmovi l i zaci ón,quc el di scurso específicade la violenciasimbólica (ortodoxia),
-rc s t a u ¡ a c i ó n f i ¡ t i c i a d e la d .o xa -
hc r c r o d o x o e n c i e r r ¿un p o d e r sir n b ó lico d e m o viliza ció n y de subversi ón,poder de actual i zarel a la violenciapolítica (dominación)
!

podcr porencial dtl las clasesdominadas' i Diuisión del n'abajo de dominación


É
+
L

;
1' ) 71
Iil carnpocientífico*

abiendo intentado describir,en orra pzrte, Ia lógica del funcionamiento


de los campos de producción simbólica (campo intelectual y anístico,
campo religioso, cámpo de la aita cosrura, etc.), quisiera determinar aquí
cómo esasleyes sa4specifican en el caso parricular del campo científico; más
precisamente,.r, qLé condición (es decir, en qué condiciones sociales)meca-
nismos genéricos,como los que rigen en todo campo la aceptacióno la elimi-
nación de lornuevos ingresanteso la concurrencia entre los diferentes pro-
ductores, pueden determinar la aparición de esos productos sociales relati-
id varirerrteindependientes de sus eondiciones socialesde producción' que
son las verdades cieritíficas. Ello en.nombre de la convicción, producto de
una historia, de que es en la historia donde es necesario buscar la nz6n del
progreso paradójico de una r azón en r odo hist ór ica ¡ sin em . bar go,
i rreducti bl e a la hist or ia.
.: la sociología de la ciencia descensasobre el Posulado de que Ia verdad del
* producto -se rrataría de ese producro muy particular que es la verdad ciendfi--
: ca-, resideen una especiepanicular de condiciones socialesde producción;.€s
s
.decir, más precisamente,.r, ,ln estado dererminado de la estructura y del fun-
cionamiento del campo científico. El universo "puro" de Ia ciencia ¡1¿5'pura''
cs un campo social como cualquier otro, con sus relacionesde fuerza y sus

' "Lechampscienrifique", ensciences


dela recherche
.4ctes junio de 1976,pp.tt- t o¿. -
sociales,2-3,
mo n o p oiios ,s us luc l¡a sy s u s e s trx tc q i a ss,u .si n te tc sesy sus bcncÍi ci c,s,1.,ero H abl ando de int er : éscicnt í f lco y de aut or idad ( o de coil¡ r et cnci. r )ct enr r -
1 fica, se pretende descartarde entrada distincionesque frecuentan,en esrado
donde todos estosinuariantesrevistenfbrmas específicas.
sobre la ciencia:así, intentar disocia¡ en ia compe-
implícito, las di,scusiones
tencia (o la autoridad) científica lo que sería pura representaciónsocial, po-
La lucha por el monopolio de la competencia científica der simbólico, marcado por todo un "aparato" (en el sentido de Pascal)de
embl emasy de signos, ; lo que ser í apur a capacidadt écnica,es caer en ia
El campo cienrífico como sistemade las relacionesobjetivasentrc las po- . trampa constitutiva de toda comPetencia,razón social que se legitinra pre-
sicionesadqr,riridas(en las luchas anteriorcs)es el lugar (es deci¡ el espacio sentándosecomo pura razón técnica (como se ve, por ejemplo, en los usos
de juego) de una lucha de concurrencia,que riene por apuesraespectft,tel tecnocráticosde la noción de cornpetencia).2 De hecho, el "aparatoaujusto"
monopolio de Ia autori¿ladcienttfca, inseparablementedefinida como caPa- dei cual están rodeadasaquellasque se llamaban las "capacidades"en el siglo
cidad técnicay cómo poder social,o, si se prefiere,el nionopolio de la cofttpe- pasadoy en la actuaiidadias "competencias",togas rojas y armiños, sotanasy
tencia científca, entendida en el sentido de capacidaclde hablar y de actuar gorros cuadradosde los magistradosy de los doctoresen otro tiempo, títulos
e s deci r, d e n ra n e r¡,rtrto ri z ;r.iya c on autori dad) .n m.rtcri e
l e .-'íri m am entlc escola¡esy distinciones científicas de los investigadoresho¡ toda esta "mues-
d e ci e n c ia,quc es t á s o c i a l me n rere c o n o c i d aa u n agenrederermi nado. tra tan auténtica",como decía Pascal,toda esta ficción social que no tiene
D o s obs er v ac ion c srá p i d a s , p a ra d e s c a rta rIn al ctrtendi dosl to5i bl cs. E n socialmentenada de ficticio, modifica la percepción social de la capacidad
primer lugar, es necesariocuidarsed. r"d.rlir las ¡elacionesobjerivasque son propiarnentetécnica.Así, los juicios sobre las capacidadescientíficasde un
constitutivas dei campo al coniunto áe las interacciones, en el sentido del escudianteo de un investigador están siemPrecontrtminndos,en todos los
inreraccionismo, es deci¡, al coniLrnto de las esnatcgiasque en realidad él niveiesde la carrera,por el conocimiento de la posicién que él ocupa en las
decermina,corno veremosn-lásadelante(cf. P. Bc,urdieu,"Une inrcrprétarion jerarquíasinstituidas(la de las grandesescueiasen Franciao la de las univer-
clela théorie de la réligion selon Max V'eber", ArcltiueseuroP¿ennesde sociologie, sidadesen los Es¡adosUnidos, por ejemplo).
12, 1, 1971, pp. 3-21). Por otra Parte, será necesarioprecisario que quierc Por el hecho de que todas las prácticasestánorientadashaciala adquisición
decir "socialmentereconocido":veremos que el gruPo que otorga este reco- de la autoridad científica(prestigio,reconocimiento,celeb¡idad,etc.), apuesta
n o ci mi ent o t iende s ie mp rea re d u c i rs cmá s a l c o n junto de l os sabi os,es" de- intrínsecamente dob/e,1oque sellama comúnmente"el interés"por una actividad
cir, de los concurrenres,a medida que se incrementanlos recursr¡scientíficos científica(una disciplina,un sectorde estadisciplina,un rnétodo,erc.)essiem-
acumulados )', correlativamente,la autonomía del campo. prc dc dcbl e faz:y lo m isnio ocur r ecor rl¡ s cst r r t cgiasque t iendena asegur ar
la
re;;;:;"J a ."ttot es un lugar de luchas,no es sc¡lamenterortper .-^" r-' .on
.-" " 'l)- sati sfacci ón
de esteint er 'és.
I
i**g.r, pacífica.de
|7/ g ra., . ,. la': '""."' "-: '-,-l-..,:-,
"comunidad científica" tal como - la "-:':;:^;^";^l^^'-:.:
ds56¡iho l' f,..'i^- I
fía cienr í f ic a- y f r c c u c n rc n rc n fcd e s p u é sd e e';"','
l l a l e soci oi ogíadc l e ci cn- I
I \ 2. el confl i cro ,1uc rcl ata S apol s k ventrc l os parti dari os de l a fl uori dac i ón, es dec i r, eni rc l os
\ .ir-, es decir, con [a idea de una suertede "reino de los fines" que no conoce- / deientadores dc la autoridad o|tcial (./tealtoficinls) que se estiman únicos "competentes" en
\.ría o tras ley es que l a d e l a c o n c u rre n c i a p u ra y P erfec¡a de l as i deas, ni ateri ade sal udpúbl i c a, y l os adv ers a¡i osde es ¡ai nnov ¿c i ón,entre l os c ual ess e c uentan muc hos

infaliblementemarcadapor la fuerza intrínsecade la icieaverdadera.Es, tam- ci e¡rtífi cos,pero qui en es ,a l os oj os de l os oi l c i al es ,s obrepas an"i os l í¡ni resdc s u domi ni o propi c
rIe competenci a',permi te pc rc i l -i r c l a¡amc ntcl a v erdad s oc i aldc l a c c ,mpc tei rc i .t.
c omo pal abra
bién, recordar que el funcionamiento misrno del campo científicoproducey
¿u¡c¡i z-aciyapal abrade ¿utori d¡d quc c s i o que es tí c n j uc go en un¿ l uc l l a entre i os grupos (c f. i -I.
sttponertna forma espec(icade interés(las prácticascientíficas no aParecen
tof. Sapolsliy,"Science,Voters and rhe Fluoridation Controvcrsl"', Stience,Vol- I 6f. f5 de octubre
como "desinteresadas" sino por referenciaa interesesdiferentes,prodr-rcidos
y
C e 1968, pp.427-433). E i probl ema C e l a c onrpetenc i ano s e pl anteaj amásc c n tante agrrde-zya
e xi g i dospor ot r os c a mP c s )' cl ari dadcomo en Ia ¡el ac i ónc on l os "profanos "(c I S . B . [J rrnc s ,"On rhc R ec c pti onoi S c i enti fi c
B el i efs,i nB .R arnes(c d.),S oc i ol ogy ofS c ¡rz r,Lonc l on,P engui n,
l )72,pp.269-291:L.B ol tans k i
et S or¡l :és7 (1), y P. Maldidicr, "Carrilre scientiiiqr-rc,mo¡ale scicntifique et vulgarisarian", Information sur le:
1. Fls rcr c r r o l r a e p a r . c i d ,r b :r jo u n a fo r m a lig cr a m cn tc d iic¡ e ntc en S oci ol ogíc
tri ences
5oci abs,(9), 3, 1970,pp. 99-l I 8).
1 e 7 t,pp. 91- 118.
rI Pierre Bourdieu EI cantpo científco

LTn análisisque intentaraaislaruna dimensiónpuramente"polítice"en los de ser


pcrcibidocomo importante e interesante,es lo que tiene posibilidades
conflictos por ia dominación del campo ciendficoseríatan radicalrnentefalso para los otros, Por lo tanto, de hacer
r.corlo.ido con'roimportantee interesante
como el prejuicioinverso,lnás frecuente,de no retenefsino lasdeterminaciones al que lo producecomo importalltee interesante a los ojos de los otros
3parecer
"puras" y puramenteintelectuales de los confl.ictoscientíficos.Por ejernplo,la íseránecesarioexaminar de nuevo estadialécticay las condicionesen ias cuales
por la obtenciónde crédirosy de instrr-r-
lucha que opone ho;' a los especialistas tunciona,en beneficio de la acumulatividad,:ien¡íficay no co¡rlo un simple
mentos de investigación,no se reCuceiamása una sirnpielucl-rapor el poder círculo de legitimación mutua).
propiamente "político": aquellos que se encuentran a la czbezade las grandes Aún a riesgo de volver a la filo.sofíaide¡lisra que ororga a ia ciencia el
sólo pueden imponer su vicroriacottlo una vi.roria de Ia
burocraciascientífrcas segúnsu lógica inmanente (como lo hacetodavíaKuhn
poderde desarrollarse
ciencia,si se muestrancaprcesde impon.-runa definiciónde la cicnciaque im- .uando sugiereque las "revolucionescientíficas"no sob¡evienensino a conti-
plique que la buenamanerade hacercienciasuponela utilizaciónde los sen'icios i,
1' nuación del agotamiento de los "paradigmas"),es necesariostlPonerque las
de una gran burocraciacientífica,pror.istade créCitos,de equipamientostécni- inversionesse organizan por referenciaa una anticiPación-conscienre c itr-
=
cos poderosos,de una mano de obra aL,undante;]¡ ccttsiitu)/enen metodoiogía rl
consciente-de las posibilidadesmediasde beneficio (q*e ." esPecificantam-
universaly eternalos procedimientosde la encuestapor sondeode grandesmues- bién en función del capiral detentado). Así, la tendencia de ios investigado-
tras, las operacionesdel análisisestadísticode los datos y de la formalizacióndc rcs a concentrarsesobre los problemasconsideradoscomo los más importan-
ios i-esultados,instaurandoasí como medida de toda prácticacientíficael patrón tcs (por ejemplo, porque han sido consriruidoscomo lales, por productores
más favorablea sus capacidades Recíprocamente,los
pe¡sonalese institr-rcionales. Jotadosde un alto grado de iegitimidad) se explica por el hecho de que un
conflictos epistemológicos son siémpre,inseparablernente,-conflictos políticos: apoite o un descubrimientoque conciernea estascuestionesestá encamina-
así, una investigaciónsobreel poder en el campo científicopodría perfectarlente ilo a aportar un beneficio simbólico más importante. La compefenciaintensa
incluir sólo cuestionesde índole epistemológica. que se encuenrraasí desencadenada tiene todas las posibilidadesde deterrni-
De una definición rigurosa dcl campo científico como espac(r objetivo de naf una baja de l* rasasmedias de beneficio marerial y/o simbólico y, Por
un juego donde se encuentrancomprometidasapuestascientíficas,se desPren- este medio, la dirección de una fraccién de los investigadoreshacia otros
de que es en vano distinguir entre determinaciot.¡es científicasy
F)ropiamente objetos menos prestigiosospero alrededor de los cuales la competencia es
d et er m inac ion e s p ro p i a m e n te s o c i a l e s de prácti cas csenci al mente rnenos fuerte ¡ por ello, adecuadospara ofrecer beneficios, al menos, iguai-
sobredetenninadas. Es necesariocitar la descripción de Fred Reif, que deja ver, Íncnte i mport ant es. a
casi a pesarsuyo, hastaqué punro es artificial -y hasrairrrposi'ble-la clistinción La distinción que hace Merton- (al hablar de las ciencias sociales)entre
del interésintrínsecoy dei interésextrínseco,de lo que es importanre Paraun corrflictos"sociales"(que tratan sobre "la asignaciónde ios recursosintelec-
investigadordeterminado y de lo que es irnportante para lc,sotrcs investigado- ¡uaiesentre diferentesclasesde trabajo sociológico"o sobre "el roi que con-
res: "Un cientíñco busca realizarias investigacionesque consideraimportantes. vieneal sociólogo")y conflictos "intelectuales",'oposicionesde ideassocioló-
Pero la satisfacciónintrinsecay el in*rés no sonsusúnicasmotiuacioncs.Esro aParece sicasestrictamenteformuladas" (R. K. Me rto n, TheSociologyofScience,Chicago
ciaramente cuando se observa lo que ocL;re cuando un investigadordescubre and London, The Universiry of Chicago Press,1973, P. 55), constituye ella
la publicación por otia personade un resultadoque él estabaa Punto de alcan- misma una esirategia,a la vez social e intelectual, que tiende a irnponer una
intrínsecode su trabajo
zar.-Se sier,tecasi siempre trasrornado,aunqlle el in¡,ery's clelimitacióndel campo de los ob.ietcsde discusión legítimos. En efecto, se
no esté de ningún mc,do afec¡ado.Es que sLl trabajo no debeser lnteresl¿nte habrá reconocido,en estadistinción, una de esasestrategiaspor las cualesla
solamentepara y'|,sino tlue t/rbe tdntbi¿n ser ;ntPortuniepara los otros".1 l-t, que es

4. Es necesariocomprendcr en la misma lógica l¿stranslerenciasde capital de un campo dctcrminado


3 . F . R e i f , " T h e C o m p ctir ive Wb r d o f d c Pu r e Scie n tist",S ci ence,15 dc di ci embre tl e 1961, 134 a un campo socialmente inferior, donde una competencia menos intensa prometc posibilidadesde
G4..o'
4), pp.1957- | 962. beneficios más altas al detentador de un capir¿l científico determinado.
sociologíaamericanaoficial tiende a asegurarsela respetabilidadacadémica1' La acumulación del capital científico
a imponer una delimiración de 1o cienrífico y de lo no-cienrífico adecuada
para prohibit como faka a la convenienciacientífica,toda interrogacióndes- La luclra por ia autoridad científica, especieparticular de capiml social
tinada a poner en cuestión los fundamentos de su respetabilidad.5 que asegLlraun podef sobre los mecanismosconstirurivos del campo y que
Una ciencia au.énricade la cienciano puede constituirsesino a condició¡.i puede ser feconvertido en otras esPeciesCe capital, debe lo esencialde sus
de rechazarradicalmentela oposición abstracta(que se encuentra rambién en al hecho de que los productorestienden (tanto más curnto el
características
orra parte, en his¡oria del arte, por ejemplo) entre url anáiisisin¡nanente o campo es más autónomo) a no tener otros clientes posiblesque sus co¡lctl-
y que restiiuiríala lógi-
interno, que incumbiría propiamentea la epistemología rrentes.Esto significa que en un camPo científico fuertemente autónomo,
ca segúnla cual la ciencia engendrasuspropiosproblemas,y un análisisexterno, un productoi part;cularno puede esPerarei reconocirnientodel valor de sus
que relacionaesosproblemascon sus condicionessocialesde aparición. F.sel productos ("reputación", "prestigio", "autoridad", "competencia", etc') sino
campo científicoel que, en cuanrolugarde una lucha política por la dominación de ios otros productores,quienes,siendo también sus collcllrrentes,son los
científica,asignaa cada investigador,en función de la posición que ocuPa,sus menos propensosa ororgárselosin discusión ni examen.En primer lugar, de
problemas-indisociablementepolíticosy científicos-,y sus métodos -estrate- hecho: sólo los sabioscomprometidos en el mismo juego tienen los medios
giascientíficasque, por el hecho de que sedefinenexPresau obietivamentepor para apropiarsesimbólicamentede la obra científica-yde evaluarsus méritos.
referenciaal sisremade las posicionespolíticasy cienríficasconstitr-rtivasdel Y ambién de derecho: el que apela a una auroridad exterior al campo no
campo cienrífico,son al mismo tiempo estrategias
políticas-. No hay "elección" puede atraersesino el descrédito7(toralmente similar en esto a un camPo
científica-eiección del dominio de investigación,elecciónde los métodosem- artístico fuertemente autónomo, el campo científico debe su especificidad,
pleados,eleccióndel iugar de publicación,elección,que describeHagstrom,o entre otras cosas,á1 hecho de que los concurrentes no Pueden contentarse
enrre la publicación rápida de resultadosparcialmenteverificadoso la publica- con distinguirucde sus antecesoresya reconocidos, sino que están forzados, so
pena de ,1, ,,rp"r"dos y "desclasados", a inregrar sus logros en la construc-
ción tardíad.eresu!tadcsplenamentecontrolados-,que no"sea,en alguno de sus
aspectos, el menos confesadoy el menosccnfesableevidentemente,una estrate- ción distinta y distintiva que los suPera).
gia políticade ubicaciónal menosobjetivamenteorientadahaciala rnaxirnización La luchaen la cualcadauno de los aqentesdebecomprometerseparaimponer
del beneficiopropiamentecientífico,esdecir del reconocimientosusceptiblede el valor de susproclrrciosy su pfoPia autoridad de producror legítirno,riene,de
serobtenido de los pares-concurrenres. hecho,siempreen juego el poder de imponer la definición de la ciencia (i. e.
la delimiración del campo de los problemas,de los métodos y de las teorías
que pueden ser consideradascomo científicas)más conforme a sus intereses

! . . De e n r r e l a s i n n u m e r ab le se xp r e sio n e sd e e stccr e d o n e u tr a l i sta,éstaes parti cul armentetípi ca: 7. Fred R ei f¡ecuerda que aquel l osque, c on l a preoc upac i ónde v er s u trabaj o publ i c ado l o más
i mportantc s en fís i c ¡ h¡n
rápi damcnteposi bl c,rec urren a l a prens ac oti di ana (c i es c ubri rni entos
" E n c u a n t o p r o f e s i o n a l e s- co m o u n ive r sita r io so e n e l e je r ciciodc su profesi ón- l os soci ól ogossc
c ons id e r a nes p e c i a l m e nr eca p a ce sd e se p a r a re, n n o m b r c d e l scnti do ,.Jesu rcs¡ronsabi i i dad
soci al . podido asíseranunciadosen el NewYorh fir¡;rs), seat¡aen la reprobaciónde suspares-conctlrrenies,

s u idc o l o g í a p e r s o n a ld e su r o l p r o fe sio n a le n su s r e la cio n e scon sus cl i entcs,:us públ i cos i 'sus ennornbredel adi sri nc i ón entrepubl i c dc i ónv publ i ti dadquedi ri geta¡nbi énl as ac ti tudes res P ec to
a cicrrasformas de vulgariz-ación,siemprc sos¡rechosas de no ser sino io¡mas eufcmiz-aclas de auto-
pares.F.sclaroQue esro es el resultaciomás cabalde la aplicación del concepto de profesierneliz-ación
en la so c i o l o g í a ,p a r t i c u l a r m e n tee n e l p e lío d o d e a ctivism o u ni vcrsi rari oquc comi enzacn I96Í di vul gaci ón.5crásuf i c i enrcc i rarl os c omc ntari o,,l .l eJ i ror d.l di arr, oi i .i ,l dc l os fi s i c os¡mc r i c rtros :

(Ben-David, 1972). Desde la organizacióninicial de [a sociologíacomo disciplina, muchos sociólogas "Por cortesía respecroa sus colegas,los autores tienen la costum,brede impcdir toda fb¡ma de
queés tos hay anapar,,..' oc nl arc v i s te¡:i entífi c a l .os
di vul gaci ónpúbl i ca c l es us artíc ul os anres de
han t cn i d o i d e o l o g i a sp e rso n tle sta n in te n se sq u e lo s cm p u ja b r n a trararde P cnersusconocl ml cntos
debíanafrontar e[ probl cma C el ;rs que i tl terc s l n:t l os
descubri mi entosci en¡ífi c os no pos een l x s c arac terís ¡i c ass ens ac i onal i s tas
al s en i c i r ¡ d c l c a m b i o s o c ia l,m icn tr a sq u c, co m o u n ive r sita r ios,
normas que se imponen al ..locentey a[ investigador". M. Janorvitz,'l-y'teArnerican Jotnza! of- di ari osy todos l os medi os de c omuni c ac i ónde mas asdeben poder tener:l c c c s os i mul tárr l rri entc

, S (1), juiio de 1972, pp. 105-135.


Soc io l o g t T a l a i nformaci ón. E n adel ante,rec haz a¡emospues l os artíc ul osc uy o c onteni c l ohubi c ra :i do v ¿
('. \(l D. Hegstrom, The Scientifc Communiry, New York, Basic Books, 1965, p. 100. putl i cado en i a prens ac oti di ana' . F. R ei f' 42. rrt

80 8l
EI canrPo científicrt
Pierre BourdieL¿

,,comuni daclcient í f ici, gr upo indif er enciado,im pc, ndr í ae inculcar í aa


específicos,es decir la más adecuadapara permitirle ocupar ccn rotal legiti- l :r
r evolucionar iasólo im put able
niidad la posición dominante, asegurandola posición más alta, en la jerar- tocl ossus mi em br os,consider andola anom ia
cient í f ica. tEst a visión "dur k¡ eim iana'dei cem pt '
.r i :rl l ascl e i a socialización
quía de los valo¡es científicos, a las capacidadescientíficas de las cualeses el
de la representación clel urli-
detentador a título personalo institucional (por ejemplo, como detentador cicnríficopodría ito sei sino la transfiguración
..ersr¡,:i entífi c que o los sosr enedor es del or den cicnt í f lcc,t ienen int er ésen
de uua especiedeterminada de capital cultural, como anriguo alumno de
una institución de enseñanzaparticular, como miembro de una institución ;i i ]l l ol l er,v en p r im er luger , a sus concur r int es'
"funcionalismo",
N,-rncase terminarían de enu¡nerarios e.iempiosde este
científica determinada, etc.).3
en su teoría dc la
Así, los debatessobre la prioridad de los descubrimientosoponen) en más :n.luso en un auror que, conto Kuhn, da lugar al c<-,nflicto
(cie las ciencias)se es-
de un caso, al que ha descubiertoel fenómeno desconocidobajo la forma i.volucióncientífrca:"LIna comtrnidad de especialistas
que ella
frecuente de una simple anomalía,de un fallo de las teo¡íasexistentes,y al t:t¡,ti r(ípor ase gur arla pr ogr esiónde la acum uiaciónde los dat os
(T" I(uhn, The stn'¿ctttreof Scientiiic
que hace de eiio un ltechocientífico nuevo! insenándoü en una const¡ucción ¡,trcdeutilizar con precisión y en detalle"
!!:t'olttrions,Chicago, The Unive¡sity of Chicago Press' 1962' p' 1C'B)l!'a
teórica que es irreduciible al siraple daro bruto: esasdiscusionespolíticas
Porque la "fun-
sobre el derecho de propiedad científica -que son, al mismo tiempo, debates t]lt.ilctrffI¿de las reuolucionescienrífc¿s,lr4éxico, FCE, 1980]
no es otra
ci ent í f ic os s ob re e l s e n ti d o d e l o q u e e s descubi erto y di scusrones .i,,¡", en el sc¡tido del "funcionalismo" Ce la escuelaalnericana,
o del campo
.i,s:r(lirciel interésde los riominantes(de un campo deter¡rinado
epistemológicassobre la natura/ezadel descubrimientocienrífico-, oponen en los domi-
,ic ia lucha cie clases-la clasedominante-), es decir, el interésque
re alidad, a ¡ r avé s d e e s o s p ro ra g o n i s ta sp a rti cul ares,_dos pri nci pi os de (o la
sus interescs
jerarquización de las prácticas ciencíficas,uno que confiere la primacía a la t.ixnrcsticnen en la perpetuaciónde un sistemaconfor¡ne a
agentes),basta
observacióny a la experimentación,x por io tanto, a las disposici<.tncs lit,rlrj, que el sisternacumple para esta ciase parricular cle
¡' a las haciendo de la
capacidadescorrespondie¡rtes;el otro que privilegia la teoría y los "intereses" c¡i r si l enci a¡l o s inr er eses( i. e. las f uncionesdif er enciales) ,
"conrunidaclcientíf¡e¿"ei sujeto de prácricas,P^í^ caeren el "funcionalismo"'
científicos correlativos, debate que jamás ha dejado de ocupar el-:centrode la
es
Y precisamentePorque la definición de io que estáen jtrego en la iucha
ref lex ión epis r e mo l ó g i c a .
,,i.,ictode lucha, inciuso en ciencias-corno las matemáricas-- donde el consen-
Así, la definición de.lo que está en juego en ia lucha científica forma parte
s()ai-rarente sobrc lo que estáen jucgo es muy alro, uno se enfretlta sin cesara
de lo que está en juego en la lucha científica,y los dominantesson aquellos
hs anrinomiasde la legitimidad. (El interésapasionadoque los investigadores
que llegan a imponer la definición de la ciencia según la cual la rcalizactón
*¡, cienciassociaiesmanifiesranpor las cienciasde la ¡raturalezano se compren-
más acabadade la ciencia consisteen rener,ser y hacer,lo que ellos tienen, su
ricría ce orro ,rrodo: es !a definición de los principios de evaluaciónde
son o hacen. Es decir que ia comunisdoctorum opinio, como decía ia escolás-
propia prácticalo que estáen jtrego en su pretensiónde imponer' cn nombre
tica, no es jamás sino unafcción ofciai que no tie¡re nada de ficticio, porque
.i. l" o de la sociologíade la ciencia,la defl¡ricirinlegítimade la
la eficacia simbólica que le confiere su legitimidad le permite cumplir una "pirremología
f,rrma más legírima c{ela cicnci,r,es ciecii,la ciencia de la naturaleza.)Iin el
función semejantea aquella que la ideología liberal hace jugar a la noción de
opinión pública. La ciencia oficial no es lo que en general hace de ella la
sociología de la ciencia, es decir, el sistemade las normas y de los valores que s oc i al en c l
:i . (-omo l a fi l osofía s oc i al de i ns ¡ri rec i éndu¡k hei mi ana qtre dc s c ri bc el c onfl i c to
.l ci i quaj c<l el a marg i nal i darj ,dc l a des v i ac i óno c l e l a anonri :r,es ta fi l os oi ía dc l a c i enc i ari ende a
y domi nados a l rc
a^s l ac i onc sc nfrc un
l r:,-l uci l¡as rcl aci onc stl e c om¡.c renc i aentre.l o¡rri nantes
8. En cada rnomento, hay una jerarquía social de los campos científicos -las disciplinas- que
r..!)tl o' y¡na'i tcri l ^eri a",al reenc ontrarl amc tái orael nanr' i r' .a,c a¡eaH al bw ac i l s ,del atl i s ranc i a
orienta fuertemente las prácticasy particularme¡rre ias "eleccioncs"de "vocación" -y ai inre¡ior de 'fl¡e
Scientist's llole in Societl'
¡l "ti¡cc¡",1e los v:rlorcs ccntrales (cf., por cjcmplo, J. Ben David,
cada uno de cllos, una jcrarquía social de ios objetos y de los mérodos de tratamiento. (Sobre estc
i .ngl cn.oo<i cl i ffs(N .J .), I,renri c c H al l Inc ., 1971,v E .S hi l l s ,"c entc randP eri phc ri a"' en:The
purrto, cf, P Bou¡dieu, "Méthodc scientifique et hiérarchie socialedes objers", Actesdc la Recherche
i.ogii; of Prsonal linoulctlge, Essayslrese nted to Michae I Pol¿ryi on His Sn'erttietb Birthda\' l¡ndon'
en S c i e n r c sS o c i a k s ,| , 1 9 7 5 , p p .4 - 6 .) ( L a s a u to r r cfe r cn ci as,
muy numerosasen esrer(.xto,ri enen
i l ,,url cJgc:nd K cs¿n P eul Lt.l ., l 9ól ' pr' . I l l -l J 0)'
una función estrictamente estenográfica.)
carnpo científico, como en cl campo cic las relacio,nes de clases,no existeins- [a adqui si ci ónde capit alsuplem ent ar ioy donde la car r er acient í f ice"exit ose"
rancia que legirime las insranciasde legitimidad;las reivindicaciones de legiti- se presenta,Por esta razón, como un Procesocontinuo de acumulación, en
midad obtienen su legitimidad de la fuer¿arelativa de los grtlPos cuyos intere- ei cual el capi tal inicial, r epr esent adopor el t í t ulo escolar ,juega un r ol
sesellas expresan:en la medida en que la definición misma de Ios criterios de derermi nante:" D esde la 'high school', el f ut ur o hom br e de ciencia t iene
juicio y de los principios de jerarquizaciónes el objeto de una iucha, nadie es conoci mi ento del r oi de la com pet enciay del pr est r gioen su éxit o f ut ur o.
buen juez, porque no hay juez que no seajuez 1' parte. l)ebe esforzarsepor obtener las mejoresnotas para ser admirido en el 'college'
Pu ede v er s e la i n g e n u i d a d d e l a té c n i c a d e l os " j ueces" , a l a cual l a y tnás tarde en la 'graduate schooi'. Se da cuenta de que el pasaje Por un
rra d i c ión s oc iológi c a h a re c u rri d o mu y c o m ú n mente para defi ni r l as j e- ' col l ege' presti gi osot iene una im por t ancia decisiva par a él ( . . . ) . En f in,
rarquías característicasde un campo determinado (jerarquía de los agen- debe ganai la estima de sus profesorespara asegurarselas.cartasde reco-
tes o de fas instituciones -las universidadesen los Esradcs Unidos-, je- mendación que le ayudarán a entrar al 'college'y a obtener las becasy los
ra rq uí a de los pr ob l e ma s , d e l o s d o rn i n i o s o d e l os métodos, j erarquía de premi os (...). C uando est é en la búsquedade un em Pleo, est ar áen m ejor
los campos mismos, etc.). Es ia ntisma fiiosofía ingenua de la ob.ietividad posi ci ón si vi ene de una inst it ución conocida y si ha t r abajado con un
l a q ue ins pir a el r ecu rs oa " e x p e rto si n te rn a c i o nal es"C
. omo si su posi ci ón investigadorrenombrado. En tc¡do caso, es esencialpara él que en el mun-
d e o bs er v ador esextra n j e ro s p u J i e ra p o n e rl o s al abri go de l as posi ci ones do de l os hombre s de pr im er r ango se acePt eaPor t ar com ent ar ios [ avor a-
to ma das y de las t o ma s d e p a rti d o , .ñ u .t mo mento en que l a economía bles sobre su trabajo (. ) El accesoa niveles universitariossuPerioresestá
d e l os int er c am bio s i d e o l ó g i c o s a d mi te ta n ta s soci edadesmul ti naci ona- sometido a los mismos criterios. La universidadexige nuevamentecartasde
l e s, y c om o s i s us a n á l i s i s " c i e n tífi c o s " d e l e s ta do de l a ci enci a pudi eran recomendación,dadas Por exPertosdel exterior, y puede a vecessuscirarla
ser otra cosa que la justificación científicamente enmascaradadel estado formación de un comité de examen antesde tomar la decisión de promover
p a rti c ular de la c ie n c i a o d e l a s i n s ti tu c i o n e sci entífi casde l as que ei l os a alguien a un puesto de profesor tituiar". Este procesose continúa con el
fo rma n par t e. S e v e rá l u e g o q u e l a s o c i o l o g íade l aqi enci a escapamLl )' accesoa l os puest os adm inist r at ivos, a las com isiones guber nam ent ales;
ra ra m ent e a €s t a es tra te g i ad e l p e ri ta j e c o l rl o ri mposi ci ón de l egi ti mi daC etc. Y el investigador depende, también, de su reputación ent¡e sus cole-
q u e pr epar a una c o n q u i s ta d e m e rc a d o .l u gas, para obtener fondos de investigación,para atraer estudiantesde cali-
L a aut or idad c ie n tífi c a e s , p u e s , u n a e s p e ci eparri cul ar de capi tal qtre dad, para asegur ar se gr ant s y becas,invit acionesy consult as,dist inciones
p u e d e s er ac um ula d o , tra n s m i ti d o e , i n c l u s o , r econverti doen otras espe- (i . e. P remi o f.l obel, Nar ional Acader nf of Science) . El r econocim ient o
ci e s b ajo c ier t as c o n d i c i o n e ' s .S e p u e d e p e d i r p r estadaa l j red Il .ei f l a des- sociaimentemarcado y garantizado(por todo un conjunto de signos espe-
cripción del proceso de acumulacién del capital científico y de las formas ot or ga a
cífi cos de consa gr aciónque el gr upo de los par es- concur r ent es
qne roma su reconvcrsión. Ello en eI casoparticu/ar del campo de ia física cada uno de sus miembros) es función del uelor disúntiuo de sus productos
contemporánea,donde ia posesiónde un capiralcientífico tiende a favorecer y de la originalidad (en el sentido de ia teo¡ía de la información) colectiva-
mente reconocida a la contribución que é1 aporta a ios recursoscientíficos
1'aacumulados.El hecho de que el capital de autoriciadproporcionado por
10. Dc t r á s d e l a s p r o b l c m á r ice sd e e xp e r to sso b r ecl va lo r r e la ti v<¡
de l os regímenesuni versi tl ri os, ti descubrimiento esté monopolizado por el primero en haberlo hecho o,
s e oc ul r a , i n e v i r a b l e m c n ¡ e ,la cu e sr ió nd e la s co n d icio n e só p timas para el dcsarroi l odc l a ci enci a al menos, en haberio hecho conocer y reconocer,explica la imporrancia 1' la
y por c l l o d e l m e j o r r é g i m e n p o lítico , p u e sto q u c lo s so ció lo gosameri canosti cnden a hac.r dc ,.. de prioridad. Si ocurre que muchos nombres
f¡ecuencia de las ct¿estiones
" dem o c r ¿ c i al i b e r a l " ¡ l a m a n e r a a m e r ica n ala co n d icii;n d e la "democraci aci cn¡ífi cJ'. C f-.,por están ligados al primer descubrimiento, el prestigio atribuido a cada uno
ejemplo, R. K. iv'lerton, "Science and Technologv in a Dcmocratic Order",.[ournal of Legal nt::i
de el l os se encue nt r adism inuido ot r o t ant o. Aquel que llega al descubr i-
ttnrl Soti,¿i
Polirical Sociologt,\/ot. I, 1942, publicado nuevamentc en R. K. lvlerton, Social T'l,cor.y
mi ento al gunas sem anaso algunos m esesdespuésde ot r o ha dilapidado
.9trur'rtre lfeería ;t' ?strt4ttufttsociabs,Bucnos Aires-México, FCE, 1964] cdición rcvisada, Frec
Pres s ,1 9 6 7 , p ¡ 1 1 t t - ) i 1; b e jo cl títu lo "Scie n cca n d l) e m o c rati c S oci al S tructure", i J. Il art¡er.
todos sus esfuerzos,sus t r abajos se encuent r an así r educidos al st at us de
Science¿¡t¿ld¿ So¡;¿l Ordzr, Glencoe, The Frcc Press,1952, pp.73 v 83. dupiicación carenrede interés de un trabajo ya reconccido (lo que explica

8/r 85
Piarre Rr¡urdiet.t
E! cantpo científico

la pr ec ipir ac ió nc o n q u e a l g u n o sp u b l i c a r-r p ara evi rer scr eventaj ados).i rE l


nominación entre los autoresde artículos científicos" como el producto de
concepto de uisibi/itL que emplean frecuentementelos autores americanos
( s e t r at a, a m e n u d o , d e u n a n o c i ó n d e u s o cor¡i ente entre l os uni r,' ersi ra- es¡xregiasque apuntan a minitnizar la phdid,z de uabr distintiuo que está im-
puesrapor las necesidadesde la nueva división del trabajo científico. fuí, para
rios) expresabien ei x'sfsv¿,.t',rerencia/, t/istintiua, de esta especieparticr,rlarde más fre-
.rpli.". que los laureadoscon el premio Nobel no sean nombrados
capit al s oc ial:a c u rn u l a rc a p i ta l e s " h a c e rs eu n no,tbre" , un nonrbre prrpi o dado
( 1' ,p" r " algun o s , u n n o mb re d e p i l a ), u n nombre conoci do y reconoci do, ;uetrtementeque los otros en el primer rango -{omo debería esPerarse,
orden del valor relativo de
que los autores son normalmente nombrados en el
marcaque distinguede entradaa su portado¡ ai recortariocomo forrna visible de ia
,,,.orrrib,r.ión-, no hay necesidadde invocar ur¡. moral aristocrática
del fondo indife¡enciado,cesapercibido,cscuro, .n ci cuai sc pieicl.ela mayoría ,.nobleza de un nom-
obliga'; en efecro,es suficienresuponer que la visibilidaci
(de alií, sin duda, la importancia ce las meráforasper.ceptivas, de las cualesla
[)¡e en una seriees función, en primer iugar, de su uisibilidad relúüua,definida
oposición entre brillantu y oscuroes el paradigma)e' ia mayor parte de las
por el rango que ocupa en la serie ¡ en segundo lugar, de su uisibilidad intrín-
taxonomíasescolares).!2 La lógica de !a disrinción F.rncionaa pleno en el caso 'trcú,
qve resultadel hecho cieque, ya conocido, es más Fácilmentereconocidov
cie las firmas múltiples que) en cuanto rales,reciucenel udlor iistitttiuo imparti- vaya
rctenido (uno de los mecanismosque hacen que, aquí también, el capital
do a cada uno de ios signatarios.se puede así comprenderel conju.rro de las
ll capital) para comprender que la tendencia a abandonara otros el primer
o bs er v ac iones
d e H a rri e r A . Z u c k e rma n r3 sobrel o:; " model os de rango de beneficio
rangocrezca a medida que crece el capital poseído, con lo que el
silnbólicoesráauromáticamenteaseguradoa su poseedor,independientemen-
sus
1 l . A s í s e e x p l i c a nla s e str a r e g ir sn r u t.d ife r cn r e r q r r c lo -.;i nyesti gadoresponenen prácri caen l a re del rango de nominación.raEl mercado de los bienes científicostiene
difusión de |aspreimpresíoncsy de las reimpresiones. Sería lácil mosrrur que rodas ias diferencias leyes,que no rienen nada que ver con la ¡noral. Y con el riesgo de hacer entrar

cn la ciencia de la ciencia, bajo diversosnombres "eruditos", lo que los agentes


o b s e r v a d a s e g ú n l a d iscip lin ay la e d a d d e lo s in vcstig a dcresc i a i nsri ruci ón a l a cuai prrrenccerl
puedcn ser comprendidas a partir de las funcic.¡nesmuy diferentes que cumplen esrrs dcs funn¿s "comunidad ciendfica"' e¡
llaman a veces"ios valores" o "las tradiciones" de la
de comunicación científica; la priinera, que consistccn difundir muy rápidamente.,.escapando a las
demcras de la publicación científica (venta.¡aimportanre en los secrores necesariofeconocerZOmo taleslas estrategiasque' en los universosen los cuales
entre un número restringido de lectores que son también, frecuentcmcntc, los concurrentes más
"lt"rn"nrJ-.o-pcririvos), se [iene interés en el desinterés,rienden a disimuiar las estrategias.
c o m P e t e n t e sp, r o d ucto s q u c n o e stá np r o te g id o sp o r la publ i caci i ¡nofi ci ai contra l a ap;-opi aci ón Estas esrrategiasde segundo orden, con las cuales uno sePone en regla,
lr a u d u l e n r a , p e r o q u e so n su sce p tib le sd e scr m e jcr a dos por l a ci rcul aci ón; l a scr¡unda,que rransfigurandola sumisión a las leyes (que es la condición de la satisfacción
de los inrereses)en obedienciaeiectivaa las normas, Permiten acumular las
consiste en divulgar rnás ampliamentc, entre el conjunto dc los colcgas o dc los interesados,
productos marcados y socialmente impurados a un nombre propio (cf. .üfi Hagsrrom, "Factors
sarisfaccionesdel inrerés bien comFrendido y los beneficios casi universal-
Related to de Use of Dilferent Modcs of Publishing Researchin Four Scientific Irields", en: C. E.
Nelson y D. K. Poliok, eds.,ComnzunicationAmong Scientists
inenre prometidos a accionesque no cienenoEradeterminaciónaParenteque
and Engineers,L,exingtori (Mass.),
H e a l t h L e m i n g t o n B o o ks, D. C. l"le e r ha n J Co ., 1 9 7 0 ) . el respeto puro y desinteresadode ia regla.
1 2 . D e a l l í I a s d i f i cu lta d e sq u e sc e n cu e n ¡ r a ne n la s in vcsri gaci onessobre l os i ntel ectual cs,l os
s a l ¡ i o so l o s a r t i s t a s,ta n to e n la in ve stig a ció nm ism ,. co mo en l a publ i caci ón de l os resul rec-l .¡s:

ProPone¡ el ¿nonittiato a Personasque csián totaimente ocupadascn hacerscun nombre, es fiacer Capital cienlfico y propensión a invertir
desaparecerla motivación principal <ic la participación en uria investigacitin (cf. El mode lo c{ela
encuestaliteraria o del interuiew); no proponerlo c.sprohibirse plantear cuesriones"indi.qcretas",
el
esdecir, objerivantesy reductoras.I-a publicación de los resultadospiantea . La estructura del campo científico es definida, err cada momento' por
¡rroblcmasequivalentes,
au n q u e n o f ' . r e ¡ as i no p o r q u e cl a n o h im a to ticn c p cr cl ecro tornar cl di scurso i ni ntcl i gi bl e o estado de la relación de fuer¿asenrre los proragonistasde la lucha, agenteso
t r a n s P a r e n t cs e g ú n e l g r a d o d c in fcr m a ció n d c lo s Je ctorcs(tanro rr,ás cuanto, c!) cstc c:l so,
m u c h a s p o s i c i o n e sno cllcl]la n sin c co n u n cle m cn to , u n nombrc propi o). moral-
I4. El modelo propuesto aquí da cuenta perfectamente -sin apelar a ningún determinante
13 . F I . A . Z u c k e r r r r a n ,"Pa tte r n so f Na m c Or d e r in g a m o n gA urhors of S ci enti fi csP apers:A S rudv de la obtención
,l':l hecho de que los laureados ceden e[ primer rango más frecuentemente luego
of social simbolism and irs Am b'iguit.,:', Aneriran Journal of sociology,74 (3), n<.'viembreclc I 968, marcada que
dcl premio y de .¡ue su contribución a la investigación premiada seamás visiblemente
po . 2 7 6 - 2 9 1 .
i:r parte que ellos han tomado en sus otres invesrigaciones colectiva-"'
son i ndeperl di ente(sent r e ellos)e independient es de k¡ s t í t ulos de, lr igen: de
es dectr, ¡:or la c-structurade Ia distribucióndel c,apitalespecífi-
insritucione.s; hecho, en la medida en que el título -fn taltto que capital escolarreconve¡tible
co, resultado.lc las luchasanterioresquc se encuentraobjetivadoen institucio- cn capi r¿luni versit er ioy cicnt í f ico- cncier r aun3 t r ayect or iapr obable.dir ige'
nes y disposiciones, y que dirige las estrategiasy las posibilidadesobjetivasde
por mediación de las "aspiracionesrazonables"que autoriza, todo lo relativo a la
los diferentesagenteso institucionesen las luchaspresentes. (BastaaqLlí,como
carreracientífica (la elecciónde objerosmás o menos "ambiciosos",una Produc-
en otra parte, con percibil la relaciór'rdialécticaque se estableceentre las es- tivi.lad rnás o urenos grancle,etc.); de sLrerteque el efecto del prcstiqio de las
s o r i n te rm e d i o d e l a s di sposi ci ones--pal ahacc'
rru ct ur asy las es t ra te g i a-p j'contaminando"el juicio
ins¡itucionesno se ejercesolamentede maneradirecta'
desaparecer la antinomia cle la sincronh y h diac¡onía,de la estrucruray lr emiúdo sobre las capacidades científicasnranifestadas por !a candCady la eliclad
hisroria).La estructurade la dist¡ibución del capitalcientíficoes el fundamen- de los trabajos-, ni sólo de manera indirecta -a través de los contactos con los
to de las transformacionesdel campo científico por mediación de las estrat.-gias maestrosmás prestigiososque procuran un alto origen escoia¡(ló m:ís frecuente-
de co¡iservacióno de sul¡versiónde la estructuraque la estructura misma pro- rnenre,3sociadoa un alto oriqen social)-. sino tarnbién por mediación de la
duce: por una parte,la posiciónque cadaagenresingularocuPaen un momen- "causalidedde lo probable",es decir,por la virtud d. las aspiraciones que autori-
, t í em po e n l a e s tru c tu rad e l c a mP o ci entífi co es l a resul tante,
to d a d< .del zán o favorecenlas posibilidadesobjetivas(se podrían hacer observaciones aná.lo-
objetivadaen institucionese incorporadaen disposiciones, del conjunto de las
gas a propósito de ios efectosdel origen social, cuando los títuios escolaresde
esrrategias-antcfiorcs,de es¡eagentey de sus concurrentes, que dependen,ellas
partida son semejantes).
mismas, de la cst¡uctura del campo por rnecliació¡rdc las plopiedades estruc- Es así, por ejemplo, eue la oposicién entre las colccacionessegurasde la
turalesde la posició¡r a paftir de la cual son engendraclas; l', Po¡ otra parte, las de la invesriga-
y las colocacionesriesgosa^s
investigaciónintensivay especializ.ada
rransformaciones de la estructuradel campo son el Producto de estrategias d.
ción extensivaque puede conducir a las vastassíntesisteóricas(revolucionariaso
conservacióno de subversión,que encuenrranel principio de su orientación1' -aquellos que, en el casode la físicaanalizadapor Fred Reif, consisten
eclécticas)
de su eficaciaen las propiedadesciela posiciónque ocupan aquellosquieneslas en informarsesobre los desarrolloscientíficosproducidos fuera de los lírnites
producenen el interior de la estructuradel campo. rL
estfictosde la especialidad,en lugar de descansarsobre los caminos trillados de
Esto significa que en un estado determinado dei ca-mpo, las inversionesde los
una dirección de investigaciónprobada,y que pueden quedarseen Pura pérdida
i n vcs r igadordepen
es (m
d e nta n toe n s u i m Po rta n c i a e di de,
por ej cm¡l o,en ri emP U
o proporcionaranalogíasfecunclas-tiende a reproducir la oposición entre las
consagradoa la investigación),como en su naturaleza(¡ en particular,en el
alas y las t¡ayectoriasbajasen el campo escolary en el camPo cien-
tray'ectorias
grado de riesgoasumido),<iela importancia de su capirallctusl y potencialen cl
rífico.r6Asimismo, para comprender la transformación,frecuentementedescrita,
campo (scgLinun procesodialéctico que se obsen'aen todos los dominios de la
de las prácticascientíÍicasque acompañael progresoen la car¡eracientífica, es
prácrica).Según una lógica muchas vecesobservada,las aspiraciones -es decir, lo
necesariorelacionarlas diferentesestfategiascientíficas-por ejemplo, las inver-
que se llama comúnmente las "ambiciones científicas"-scn lanto más altascuan-
sionesmasivasy extensivasen la única investigación,o las inversionesmoderadas
to el capital de reconocimientoes más elevado:la posesióndel capital que confi,r-
a inversionesen la administracióncientí-
e intensivasen la investigaciónasociadas
re desdeel origen de la carreracientíficael sistemaescolar'bajo la forma de ulr
fica- e.,'iden¡emente,no con clasesetarias--cadacampo ,lefine sus propias le1'es
tíruio raro, implica e impone -por rnediaciones complejas-la prosecuciónde
de envejecimientosocial-'t sino con la importancia del capital poseído que,
objetivos elevados que están sociallnente demandados y garantizadosPor ese
tíru|o.fuí, inrentarmedir la relaciónesmdística que se entreel prestigio
establece
de ori gen (" Granci e
d e un in, ; r igadory e l p re s ti g i od e s u s títu l o s escol ares i C . C n n B ourdi cu. L. B ol rrn.k i v Il Mal J i i i .r. )ut:;i t' ' ;t\
L.r C i f:ns c .l u c ,,rps ", !nfortn.¿:i ut¡
soci abs,10 (4), pp. 45,86.
École" o facultad en Francia, universidaddonde ha sido otorgado el doctorado
17"E l anál i si sestadísc i cmues
o rra,por c j empi o, que, Faraei c oni unto de i as generac i onespas adas ,
para los E.''{os Unidos) t¿n/1uaz conffolados/osej}ctosde ru produciuidad,li es
entre l os 26 y l os 30 años en l os quírni c os ,
l a edad de producti vi da d c i enrífi c amáx i ma s c s i tuab,:r
$umir implíciramentela hipótesiscle que la productividady el presrigioactu.rl ent¡e l os 30 v l os 31i ai ros en l os fís i c os ' ,' l osmatc m:i ¡i c os ,ei l tre l c s y l c s 39 eírosenl re l os
-a5
tncteri ói ogos, l os geói ogo.sy l os fi s i ól ogos . H . C . Lehman. A gt and.l ¡l ti s umenr, P ri nc e¡c n,
15. r- - f . P o r e . j e m p l oL . 1 .. Ha r g e n s ]' \L O. Ha g str o m , "Sponsore,Jancl C on¡est l v{obi l i ty ot i 'nnccton U ni vcrsi ry Prc s :, 195J .
y f Ed u ca tio n ,4 0 ( 1 ), i nvi crno de 1')67, pp.24-38
A mc r i c a n A c a d c m i c S e ie n ti:;t",So cio la g o

¡i.)
xs
Píerre Bourdiet¿
' ffi.-

El cant¡;o cientíJico

definiendo en cada momento las posibilidadesobjetivasde beneficio,define las *


F ,,ariar(conro es también el casoen todo carnPo)entre dos límites teóricos,de
estraregias"razonables"de inversióny de desinversión.Puede verseque nada es *i

ga

l i ccho i arnásalcauzados: por un lado, la sit uaciónde r lonopolio de capit al


más artificial que describir las propiedadesgenéricasde l¿s diferentesfasesde la 6:
s
x' L5pecíficocle autoridad cieiitíficay, por el otro, 13 situación de concurrencia
"carreracientífici',18aungue se tratarade la "carrerapromedio" en un cañrpo
&:. igual de esr ecapit alent r e t odos los con-
particulalre-'enefecto,icda carre¡ase define, fundamenralmenre,por la oosi- *_ ¡.,rfectaque su ponela dist r r bución
* El campo científico es siemPrcel l"r'er de una Luch,a, m,is o rneixos
ción en la estructuradel sistemade Ias carrerasposibles*.2O
Existen ranrasmane-
s !.Lrrrentes.
lo
\ :lrsigttal,enrre agenresdesigualmentepro.;istosde capital esPecífico,por
ras de entrar en la investigacién,de mantenerseen la investigacióny<iesalir de la t r abajo
,.nro, .r cond icionesdesiguaiespar a apr opi"r - sedel pr oducr o dei
ini'estigacióncomo clasesde trayectorias,y toda clescripciónque, trarándosede
;,
i ;ic¡lrífico (y también, en ciertos casos,d€ los beneficiosexternos,talescomo
genéricasde una carrera"cuaiquiera'
tal universo, se atiene a las características *l

'? irs gratificacioneseconómicaso Oropiarrrenre poliricas)que Producen,Por su


hace desaparecerlo esencial,es deci¡ las tíiferencias.la disminución con la edaci i
5 ,.t¡laboración objetiua,el conjunto de los concurrentes,poniendo en Prácrica
Ce la cantidad y de la calidad de las produccionescientíficasque se observaen el ;
,g ti conj unto de ios m edios de pr oducción cient í f ica disponibies.t n t odo
caso de las "carreraspromedio" y que se comprendeaparentementesi se admite
irilpo se opo¡ten' cotfuerzas o tnenosdcsigiabs según la estructu¡a de la
que el incremenro del capital de consagracióntiende a reducir la urgencia de la '¡tás
.i i stri buci ónde l capit al en ei cam po ( gr ado de hom ogeneidad) ,los dom i-
alta productividad que ha sido necesariapara obtenerlo, no deviene inteligible
¡3nres, que ocupan las posicioncsmás al¡as en ia est¡ucturade la distribu-
completarnente si no se comparan las carre¡asniedias con las carreras¡nás alas,
,i,in del capital científico, y los dominados, es decir, los recién liegados'que
que son las únicasque procuran hastael final los beneficiossimbólicosnecesarios
un capital científico tanto más importante (en valor absoluto)cuanto
t)oscer.!
para reactivarcontinuamentela ptopensión a nuevasinv"-rsioncs,retardandoasí
1,,,,récu¡soscientíficosacumuladosen el campo son más importantes.
continuamente la desinversión. 'Ibdo parecein,licar que, a medicla que ios recursoscientíficos acu¡nulados

se incrernentany que, colno consecuenciacie la elevación correlativadel dere-


(quie-
eho de en.¡ada,se eÉva el 3rado de homogeneidadentre los concurrentes
Ei orden (científico) establecido
¡cs, baio el efecto de factoresindependientes,tienden a dcvenir cada vez más
;rumerosos), ia competenciacientíficadende a disringuirsecn su forma y en su
La forma que revistela lucha inseparablernente política y científicapor la
inrensidadde la que se observaen estadosmás antiguosde los mismoscamPos,
legitimidad científica depende de la estructura del campo, es decir, de la
acumuladosson rrienosimporiantes ','el
o en otros cafilpos, donde l<¡srecurs-tts
estructura de la distribución del capitai específicoCe reconocimientocientí-
grado de heterogeneidadm:ís grandg.(cf. más adelante). olvidando tomar en
fico entre los participantesde la lucha. Esta estructura puede teóricamente
cuenra (l o que se hace casi siem Pr e) est as pr opiedades est r uct r r ales y
ntoffológicasde los diferenrescampos,los sociólogosde la ciencia5e exPonena
18. CL F. Reif y A. S¡rauss,"The impact of Rapid Discovery upon the Scientisr'sCtrecr", .gocial universalizarel caso particular,.fuí, la oposición entre las estrategiasde conser-
Pr o b l e m s ,i n v i e r n o d ,e 1 9 6 5 , p p .2 9 7 - 3 1 l. L a co m p a r a c i ón si s¡emáti cade este arrícul o -para el vación y las estrategiasde subversiónque seráanalizadamás adelante,tiende a
cual el físico ha colaborado con el sociólogo- cor, el que escribfa el físico algunos años antes
clcbilitarsea medida que crece la homogeneidad del camPo y que decrececo-
pr o p o r c i o n a r í a e n s e ñ a n za se xce p cio n a le sso b r e e l fu n cionami ento del pensami entosoci ol ógi co
la probabilidad de las grandzs reuo/ucionesperiódicas en bene"ficio
am e r i c a n o . B a s t a i n d ica r q u e la "co n ce p tu a liza ció n "( es deci r l a traducci ri n de l os concepros 'relarivarnente
na t i v o s e n l a j e r g a d c la d iscip iin a ) tie n e p o r p r e cio la d e sapari ci ón¡otai C e l a refere¡'¡cial
.l e l¿L,inrutmerabLesP equeñts reuolucionesPermanerÍtes'
a carnpo
en su conjr-rntc y, en ¡rarticular, al sistemade las tta.yectorias (o de las carreras)que confie re a cada En la lucira que los opone, los dorninanresy los pr€tendientes,es decir los
carrera singulaf sus propiedades más importantes. ,,.ci .1n anr lgóni-
l l cgrdo s,com o <liccnlos econonlist : ls,r cct t r r cna cst r at egias
(en
19 . C f . B . G . C l a . s e r"Va
, r ia tio n s in th e Im p o r ta n ce o ll{ e c ogni ti on i n S ci enti st'sC xeers", S oci al
c¿is,profundatnenreopuesrasen sr-llógica y en su principio: los inrerescs
Pr o b h m ¡ l 0 ( 3 ) i n vie r n o d e 1 9 6 3 , p p .2 6 8 - 2 7 6 .
cl dobie sentido) que los animan y los medios que Pueden Poner en Práclica
20. Para cvitar rehacc¡ aquí toda la demostración, me contentaré con remitir a Il Bourdieu, "Les
dependen,en efccro, rnuy esrrechanientede su posición en
l)afa sarisiacerlos
carégoricsde I'cnrendcmcnr professoral",I ctasde b recherche
en sciences
socia/cs,
3, \97 5, pp. 68-93.
r'l campo, es decir, de su capital científico y del poder que les dtr solrre el
carnpo de ¡rroduccióny de ci¡cr¡laci<jncicntífica y sobre l,rs bcncflcic-rs cluc úi ,1,.i "o..,1r" n en l a est r uct ur aclel cant po ( y sin clt r det am biér t segúr tvalia-
produce. I.,¡s dominantes están destinado.s €strategitsde conscru¡tción,<1ue bl cs sccundari astaiescor no la t r ayect or iasocial,qr "r edir ige la evaluaci<í dc rl
^ los "r ecién llegados" pueden enconr r ar se
or ienr adosha-
a p u n t a¡ t a as egur a rl a p e rp e tu a c i ó nd e l o ¡d e n ci entífi co establ eci doal cual l as posi bi l i dades) ,
cia las colocacionessegurasde las estrategias de sttcesiózl, adcc,ladasPara ase-
pertenecen.IJsteorden no se reduce,conto se cree comúnmentc, a la cienri¿i
oficial, conjunto dc recursoscie¡rtíficosheredadosdel ptrsadoque existelrc¡r gurarl es,en el té r r nino de una caf r er apr evisible,los bcnef iciosPr olnet iclos
esndo objetiuado*btjo forma de instrumentos, cie obras, de institrrcioncs' a l os que real i zan el ideal oñcial de la excelenciacier lt í f ica ai ¡ r r ccio de
innovaciones circunscritas a los ]ímites autorizados, o hacia e-ttrrtt?[irrs ¿e
etc.-, y en estudoincorpcrado-bajo fcr:na de habitus cien¡íficos,sistemasd.
csq u €m asgc ner ad o rc sd c p e rc c p c i ó n .d e rp rc c i a ci óny de acci ón < 1ueson cl st¡buersión,colocacionesi¡rfinitamente más costosasy más riesgosasque no

producto de una forma específicade acción peciagógica 1- qu'- hacen posible pueden asegurarlos beneficios prometidos a ios detentadoresdel rnonopo-
!a elección dc los objetos, la solución de lcs problenas y la evaluactónde la.s i i o de l a l egi ti rn idadcient í f ica,sino al pr ecio de una r edef lnición com ple-
so l u c iones - .E nglo b a , ta m b i é n , e l -c o n j u n to .d e i nsti tuci onesencargadasde ta de l os pri nci pios de legit ir naciónde la dom inación: los r ecién ilegados
a se g ur arla pr oduc c i ó n y l a c i ¡c u l a c i ó n c i e l o s bi enes ci entífi cosal mi smo q,Je fechazani as car r er ast r azadasno pueden "vencer a los dom inant es en
ri e rnpo que la r ep ro d trc c i ó ny l a c i rc u l a c i ó n d e l os P roductores(o de l os su propi o j uego" sino a condición de cc, m pr om et erun aum ent o de inver -
re p r oduc t ol' es )y d e l o s c o n s u mi d o re vd e e s o s bi enes, es deci r, en pl i nrer si ones propi ament e cient í f icas y sin poder esPer arbe, lef icios im por t an-
Irrg arei s is t em ade e n s c ñ a n z aú, n i c o c a p a zd c a seturura l a ci enci aofi ci aj l r tes, al menos en cor t o piazo, puest o que t ienen cont r a ellos t oda la lógica
permanenciay la consagracióninculcándola sistemáticamente(habitus cien- del si stema.
tíficos)'al conjunto de k:s de.s¡inararios legítimos dc la acción pedagógicar'. Por un laCo, la invención según un arte de inventar ya inventado, resol-
en particular, a todos los reciénllesadosal campo de producción propiarncrr- viendo todos lc¡sproblemassuscePtiblesde ser planteadosen los límiies de la

re dicho. Además de las instanciasespecíficarnente encargadasde la cor.rsa- probleraáticaestablecidapor la aplicaciónde métodos comprobados(o tra-
rambiéri-los instrumentt¡sde heréticas-pensa-
bajando para salvarlos principios contra las contestacic¡nes
gración (academias,premios, etc.), comprende
difusión, y en particular las revistascientíficasque, por la selecciónque ope- mos por ejemplo enTlrcho Brahé-), tiende a haceroiviciarquc ella no |esuel-
ra n e n f unc ión de l o s c ri te ri o sd o m i n a n te s ,c o n sagranl as producci ouescon- ve si no l os problem asque puede plant earo que ella no Plant easino ios pr o-
i ¡l emasque puede r esolver por
; ot r o, la iqvenciónher ét icaque, poniendo en
fo rm es a los pr inc i p i o sd e i a c i e n c i ao fi c i a i -o ftreci endoasí conri nuamenteel
e j e m plo dc ! o qr - rem e re c ee l n o m b re d e c i e n c i a- r' cj erccn una censurade cuesti ón l os pri ncipios m ism os del or den cient í f ico ant iguo, inst aur a una

hecho sobre las produccionesl.reréticas, ya sea rechazándolasexpresamenl:e, al ternati varaj ant e,sin com pr om isoposible,ent r e dos sist em asm ut lr ant ent e
ya s eades anim and op u ra m e n tel a i n te n c i ó n d e p ubl i caci ónpor l a defl ni ci órr exclusivos.Los fundadoresde un orden científico heréticoromPen el contra-
ci c l o public ablequ e p ro p o n e n .2 r to de i ntercamb io que acept an,al m enos t ácit am ent e,los car r didat osa la
Es el c ar r r po qu i e n a s i g n a a c a d a a g e n te s us estrategi as,i nci uyendo l a sucesi ón:ai no r econocerot r o pr incipio de legit im aciónque el que elios
de r ccnt t oci-
csperani mpone r , no acepr anelr r lar cn el ciclo del it ¡ t er ca¡ nbio
q u e c ons is t een in v c rti r e l o rd e n c i e n tífi c o e s t abl eci do.S egún l a posi ci ón
mienta que asegurauna rransmisiónregladade la autoridad científica entre
l os poseedores ( esdecir ',m uy f r ccuent en) entent
v I os pr et endienr es e' r e m iem -
21. S o h ¡ e 1 ¿ a c c i r i n . l e "fiitr o " d e lo s co m ité s d e r e cia cciónrl e re't'i stas ci cntífl cas(en ci cnci a:; bros de generaciones diferentes,lo que lleva a muchos observadores a reducir
s c c ia l e s ) ,r ' er f ) . C r ¡ n c , "- l h e Ga r e - Ke e p e r so f Scie n ce :So mc Facto¡sA Ffecti ngthc S el ec¡i onof los conflictos de iegitimidad a confiictos generacionales). A1 rechazaftodas
If, 1 967, pp. 195-201. Todo auto¡i za a
A¡t ic l e s i o r S c i e n r i l l c . |o u r n a ls",Atn e r ic,tnSo cio lo g ist, las caucionesy todas las garantíasque ofreceel orden antiguo y la participa-
, m o e n marcri a dc procl ucci ón l i te¡a¡i a, l os
p¿ ns i ¡ q u e r , n n l : i ' L c r ixd c p r o d u cció n cie n ¡ í1 lca co ci ón (progresi v a)en el capit al colect ivam ent egar ant izadoque se pr oducc
auror c ss e l c c c i o n e n ,c o n scicn teo in co n scie n tcr n e n telo
, s lu g ar.s dc publ i caci ón cn fu¡rci ón d,: Ie
segúnlos procedimientosregladosde un contrato de delegación,realizanla
i. lc : q u e c l l o s s e h a c e n d c su s "n o r m a s".' fo d c¡ in clin e e fcnsrr,i ue i a ruto-cl i mi naci ón.
acumulacióninicial por un golne de fuerzay Por una ruPtura,desYiandoa su
c ridc r ¡ c m c n r c m c n o s pcr tcp tib le , e s a l m cn o s ta n im p o r ta ntc como Ia el i mi naci ón ev,¡r¡sr r<i n
habla ¡ d e l c f i c t o q u e p ro tlu cc la im p o sició n d e u n a n o r m a C c l o ptrbl i cabl e). benefi ci o el cré dit o del cual se l¡ enef iciabanlos ^nt iggos dom inent es,sin

92 93
EI campo cietrtífico
Pierre lJourdiett

.:l accesorápido y fáct| a ias responsabiiidades administrarivasque se ofre-


concederlesla contrapartidade reconocimientoque les otorgan los qr-rcacep-
tall insertarseen la continuidad de una descendencia.2z cíe en Franci a a los alum nos de las gr "ndes escuelascient í f icast endí a a

Y todo lleva a creerque la propensióna las estiategias .l esal en¡arl a revuelt a cont r a el or den ( cient í f ico) est ablec, do,el que en-
de ccnsenación o a
las estrategiasde subversiónes tanto rncnos independientedc ,rs <lis¡rosicio- .üenrra, al cont r a¡ io, un t er r eno f avor able en los gr uPos de int elect uales

nes respectodel orden establecido,cuanto el orden cicntífico es él mismo irrarginales,ubicados en Posicionesinestablesentfe el sistema de enseñan-
"En verdad, se puede afriesgarla hipótesis
menos independiente del orden social en ei cual se encuentra inselro. Po¡ z.t y la bohemia revoluciona¡ia:
'república de profesores"pre-
esta razón, es lícito suponer que la relaciór,que cstableceLewis Feuer entre dr c1ue,precisamenreporque Francia era una
clsementeporque los rnás brillantes sujetos de la Escuela politécnica eran
ias inclinacionesunive¡sitariay políricamenresr:bversivas del joven Einstein : ::l

y su empresacientíficamenterevolucionariavale de alguna manera a fortiori :ápidarnenteabsorbidos por la alra función milirar y la ingeniería, no era
.,,.rorí.,-rilque una ruPtura radical con los p-,rincipiosrecibidos pudiera
para cienciascomo ia biologíao la sociología,que estániejosde habe¡ llegado ",,ri
rcncr lugar. lJna revolución científica encuentra su terfeno más fértil en
al graCo de autonomía de la físicade los tiernposde Einsrein.Y la oposición
.!r:tacontra-comunidad. Cuando el joven científico encuentra muy rápicia-
que es t ablc c ee s te a u [o r e n tre l a s d i s ¡ro s i c i o ncs
¡evoi uci on¿ri as
dc E i nstei n,
iilentr: responsabilidadesadministrarivas,su energía está menos disponible
miembro en su juventud de un grupo de estudiantesjudíos en revueltacon-
p;rrala sublirnación en el radicalismode una investigaciónpura' Al rratarse
tra el orden científico establecicio
y conrra el o¡den establecido,y las dispo-
Jc creatividad revolucionaria,la aPertura misma de la administración f¡an-
sicionesreformistasde las cualesda cuenta Poincaré,pcrfecto representante
.csa a los talentos científicos, constituye quizás un factor explicativo de
de ia "república de los profesores",hombre de orde¡ry de reforma ordenada,
ror)sefvadllrismocientífico más irnportante que todos los o¡ros factoresque
tanto en el orden poiítico cuanto en el orden científico, no puede clefarde
i r;l ri rual mentese pr ior izan.
evoca¡la oposición homóloga entre Marx v Dull<heim. I

En su esfuerzo de reflexión original, Einstein fue sostenido por un ex-



traño y pequeñ o c írc u l o d e j ó v e n e s i n te l e ctual es,pi enos < j e' -senri mi enros
De la revolución inaugural a la revolución perm¿rnente
de revuelta social y científica propios de su generacióny quc formabín una
c ont r a- c om uni d a d c i e n tífi c a fu e ra d e l a i n sti tuci ci n ofi ci al ; un grupo de
cumplidas para que se
b ohem ios c os m o p o l i ta sc o n d u c i d o s ,e n e s o sti empos revol uci onari os,a con- ¿Cuálesson las condicionessocialesque deben ser
instaureun juego social en el cual la idea verdaderaesté dotada de fuer¿a,
sider arel m und o d e u n a n u e v a m a n e ra ' (L . S . Feuer," The S oci al R oots of
porque los <1ueparticipan allí tienen interés en la verdad, en lugar de tener,
Einstein's Theory of Relariviry", Annales of Science,Yo|. 27, N" 3, sep-
con"loen otros .iuegos,Ia verdad de sus intereses?Va de suyo que no se tfata de
ti em br e de 19 7 1 , p p . 2 7 8 -2 9 8 y N " 4 , d i ci embre de 197i , pp. 313-
hacerde esteuniverso social de excepcién una excePcióna las leyesfirndamen-
344). Superando ia oposición ingenua entre los habitus individuales y las
ralcscle todo campo --y, en particular, a la ley del interés que permite conferir
condiciones socialesde su cumplimientr¡, Lervis Feuer sugiere la hipótesis, (hemos
una violencia imputable a las luchas cieniíficas más "desinteresada-s"-
que t odos los t ra b a j o s re c i e n te ss o b re e l si stema de enseñanzaci enrífi ca
visto que el "desinterés"no es jamás sino un sist€made interesesesPecíficos
vienen a corroborar (cf. M. I)e Saint Martin, Lesfonctiotusociales
d¿l'enseigitetncnt
-artísti cos, religiosost ant o com o cient í f icos- que im piica la indif er encia
scienttfque, París, La Haya, Mouton, coll, Cahiers du Centre de sociologie
-rclativa- a los objeros ordinarios del interes, dinero, honores, etc.). El hecho
européenne,N" 8, l97l y P Bourdieu y M.de Saint lv{artin, Le systéme des
de c¡ueei campo científicocomPortesiempreuna Partede arbitrario social,en
grandesécoles
et la reproductiond¿ k classedontinanft, a aparecer),según la cual
l¿ medida en que sirve a los inreresesde quienes,en el campo y/o fuera del
L:rmpo,esránen condicioncsde percibir los beneficios,no excluyeque, bajo
ciertascondiciones,la lógica propia del campo, y en Particularla lucha cntre
22 . S e v e r i m á s a c i cla n tela fo r m a o r ig in a l q u e r e vistee statransmi si ónregi adadcl capi talci cntífi co
Irrsdominanres1rlq, recién llegadosy !a censuracrriz áa que de ello resulta,
en los campos donde, c<.¡moen la física cn la actu;rlidad,la conservación y la subversión son casi
n<ejerzan un desuíosistemático de losfnes que hace girar continuamctlte la
in d i s c e r n i b l e s .
si cnl prc en cl las matemáticas")en nombre de la legitimicl d específicaque les confiere su
p ro sec Llc iónde los i ¡rte re s e cs i e n rífi c o sp ri v a d o s (cntendi cl ..,s
comP etenci a.
doble sentido) al beneficiodel progresode la ciencia't'
Mientras que el método científico y la censuray/o la asistenciaque ella
Las teoríasparcialesde la ciencia y de sus transformacioiresestán predis-
propone o impone no son objetivados en mecanismosy en disposiciones,ias
puestasa cumplir funciones ideológicase¡¡ las luchas en el interior clel cam-
rupturas científicas toman necesariamentela forma de revoluciones cont¡a la
p o ci" nt í f i. o ( o de c a m p o s q u e p re re n d e nl a c i enti fi ci dad,conl o el de l as
par' i nsti tuci ón, y l as r evolucionescont r a el or den cient í f ico est ablecidoson
cicnciassociales),pofque universalizanlas propiedadesliga,last- e;tarlos
que cor.rfiere
a inseparablem€nterevolucionescont¡a el orden establecido.Al contrario, cuan-
ticularesdel campo científico:es el casode la teo¡ía positivista,
do se encuentra excluido -gracias a estasrevoiucionesoriginarias-, todo recur-
la cienciael poder cle resolverrodaslas cuestionesque Plantea,con tal de que
so a armas o a poderes,incluso puramente simbóiicos, dife¡entes a los que
e l l a s es t én c ient í f ic a m e n tep i a n te a d a s y, d e i m p oncr, por l a apl i caci ón de
tienen curso en el campo, es el funcionamienio mismo d.l .ápo el que define
criterios objeriv,rs,el conscnsos<¡brcsus soluciones,inscribiendoasí el pro-
cadavez más completalnenie no solamente el orden ordinario de la "ciencia
gresoen la rutina de la "ciencianormal" y haciendocomo si se pasarade urr
normal", sino también las rupturas extra-ordinarias,esas"revolucionesordena-
si sre m aa ot r o - de N e l v to n a Ei n s re i n , p o r é j c mpl o- por si mpl e acumul a-
das", como dice Bachelard,que esrán inscritasen la lógica de la historia de las
ción de conocimientos,por afinamiento de las rnedidasy pof rectificaciónde
ciencias,es decir, de la polémica científica.25Cuando el método está inscrito en
los principios;vale lo mismo parala reoía de Kuhn, c¡ue,siendoválida para las
los mecanismosdel campo, la revolución contra la ciencia instiruida se produ-
revolucionesinauguralesde Ia cienciainicijLl(de la cual la ¡evolucióncopernican,t
c€ con l a asi sten ciade una inst it ución que pr opor ciona las condiciones
proporcionael paradigma-en el sentidoverdaderodel rérmino-), toma simple-
De hecho, el campo de la astro- institucionalesde la ruptura; ei campo deviene el lugar de una revolución
mente la contracaradel modelo positivista.2a
permanente,pero cada vez más tonlmente desprovistade efectospolíticos. Por
nomía, en el cual sobrevienela revolucióncopernicana,se oPone al canrpo dc
esta razón, este universo de la revolución permanente puede ser también sin
, e l m i s m o mo c l o e n q u e cl mercado " i nmerso en
l a físic a c ont em porá n e a d
contradicción el del "dogmatismo legítimo":t6 el equipanrienro científico que
relacionessociaies"(embe*led in social relationships)de !¿s sociedadesarcaicas
es necesariopara hacer la revolución cienrífica no puede ser adquirido sino en y
se opone, según Polanyi, al "mercado auto-regulado" (self-regu/atingmarhet)
por la ciudad científica. A medida que aumentan los recursoscientíficos acu-
de las sociedadescapitalistas.No es Por azar qLle la revolución copernicena
mulados, el capital científico incorporado que es necesariopara apropiárselosy
implique la reivindicaciónexpresede la autonomía pa|a un camPo científico
t€ner, así, accesoa los problemas y a los' instrurnentos científicos y, por io
todavía"inmerso" en el campo religiosoy en el campo de la filosofíay, Por slr
tanto, a la lucha científica, deviene cada vez más importante (derecho de
mediación,en el campo político, reivindicaciónquc implica la afirmaciónc{el
De ello se deriva que la revolución cieniífica no es asunto de los más
enrrada).27
derecho de los científicos a zaniar las cuestionescientíficas("los matemáticos a

25. Además de Bachclard y R.eif (ya citados), D. Bloor ha percibido que ias transíormaciones en
lj. T ¡ l m c c ¡ n r s n l o c s e l r lu c ticn d c a a ) e g u r Jrcl co n r r o l d c ie s l cl aci oncscon cl uni r'.rso cxtcri or,
(cf. 1-. !a organización social de la ciencia han determinado una transformación de la naturaleza de las
c on to s l a i c c s , e s d e c i r , la "vu ig a r iza ció n cicn tífica ' co m o auto-di vul gaci ón dcl sel -i o
revolucionescientíficas (cf. D. Bloor, "Essay Review; Two Paradigms lor Scientific Knorvledge?",
Bolt a n s k i y p . M a l d i d i c r, OP. cit.) .
S ci ences
S tudi es,l 97l , I, pp. 101-115).
74. E n e f e c r o ,¡ o h a y d ud a q u c la filo so fíad e la h isto r ia d c la ci enci aque P roP oneK uhn, con l a
26. G. Bachelard, Le Matérialisme r¿tionne/, Pa¡ís, PUF, 1953, p 4 I (irad. esp.E/ materiaiismo
a¡ern a n c i a d e c o n c e n t ra ció n m o n o p o lística ( p a r a d ig m a )y dc rcvol uci ón, debe mrrcho al cascr
"típi ca de racionaLBuenos Aires. Paidós, 1972).
part ic u l a r d e l a " r e v o l u ció n co p e r n ica n r " ta i co m o é l la a n al i zay l a consi dera,como
27. La principal censuraestáconstituida por estederecho de ent¡ada, es decir, por las condiciones
roda otra inversión mayor de la ciencií'. T. Kuhn, La ríuoiution copcrnicienne, París, Fayard,
dc accesoal campo científico y al sistema de enseñanzaque le da entrada. Habría lugar para
1g73 , p p . 1 5 3 y 1 6 2 ( tr a d . csp .: L a r e u o lttció nco p e r n ica n a,B uenos A i res, H vspaméri ca,I987):
interrogarsesobre las propiedades que las cienciasde la naturaleza (sin hablar de las ciencias del
s ic nd o r o d a v í am u y d é bil la ¡ u r o n o m ía ¡ cla tivad e la cie n ciacon rel aci ónal pod:r, )'cn P .rrri cul rr
hombre en l as que, por el hec ho de l a debi l i dad de l os mérodos ,l a m' ís grande l i bertad es tádej ada
c . n r c i r c i c i n a l a l g l e sia , la r e vo lu ció n cicn tífica ( cn la a s tronomía matcmáti ca) pas: por I.r
a los habitus), debcn a su reclutamiento social, es decir, grosso modo, a las condicioncs de acceso
rc v o| . r c i ó np o l í r i c a y s u p o n e u n a r cvo lu ció n d e to d a s la s d isci pl i nasci entífi cesc¡uepuede rener
a l a enseñanzasuperi o r (c f. M. D e S ai nt Marti n, op. c i t.).
c f c c to s p o l í t i c o s .

y( ) 97
5C*

PierreBourdieu f;
F
El cantpo científico
IF
desposeídos,sino, al contrario,de los más ricoscientíficamenteenrre los recién &
s:
¡F
.l¿ instrumentosque confierensu plena eficaciaa su intención polérnica,dán-
La antinomia de la ruptura y de la continuidad se de'¡ilita en un
llegados.2o
-+ Jc¡lc.-l alcanceuniversalde una censuranretódica.Y, de hecho, a medida que
campo que, aJ ignorar la distinción entre las fasesrevolucionariasy la "ciencia I*: s* incrementanlos recursosacumuladosy el capital necesariopara apropiárse-
normal", encuentraen la ruptura continua el verdaderoprincipio de su conti- *
IÉ los. el ¡nercadosobre el cual puede ser ubicado el producto científico no deja
nuidad; y correlativamente,la oposición ent¡e las estraregiasde sucesióny las i;, rir restringirsea concurrentescada vez más fue¡ternenrearmaclospara criticarlo
esrrategiasde subversión tiende cada vez más a perder su sentido, ya que la !.r
:.
1 ¡,,cionalmentey desacreditar a su autor: el antagonismoque esú al principio
acurnulación del capital necesariopara el cumplimiento de ias revolucionesy
i. i.r.-structuray -lel car¡bio'de todo campo tiende a de"'enircada vez más
del capitai que procuran las revolucionestiende siempre más a cumplirse se- :
: r¡.,jicaly cada vez más fecundo, porque el anterdoforzadoá.ondese engendrala
gún los procedimientos regladosde una caÍrera.2e ta
;,,:rrindeja cadavez menos lugar a lo impensadode la doxa. El orden colectivo
La transmutacióndel antagonismoanárquico de los interesesParticulares ::
,.iela cie¡rciase elaboraen y por la anarquíaconcurrencialde las accionesinte-
en dialécdcacientífica se to¡na cadavez más total, a mcdida que ei interés que
tiene todo productor de bienessimbólicos en producir productos "que no sean
r r.s:idas,ai encontrarsedominado cadaagente-y con é1,todo el grupe por el
rnrlecrüzarnientoen aparienciaincoherentede las estrategias individuales.Es
solamente interesantespara él mismo, como dice Fred Reif, sino también im- l a oposición ent r e "f uncionales" y los aspect os
t .i cci r que los aspect os
lorrantes para los otros" -por lo tanto, adecuadospara obtener de los otros el "¡iisfi¡ncionales"del funcionamiento de un campo científico dotado de una
reconocimiento de su importancia y la importancia de su autor-, se choca con
qirn autonomía,no tiene casisentido:las tendenciasmás "disfuncionales" (por
concurrentes más capacesde poner los mismos medios al servicio de las mis-
.j,,nrplo,la propensiónal secretoy a la negativade cooperación)estáninscritas
mas intenciones-lo que conduce',cadavez más frecuenterirentecon los Cescu- más "funcionales".
cn lós mecanismosmismos que engendranlas disposiciones
b¡imientos sinultáneos, al sacrificio del interésde uno dc los productoreso de ,-\ medida que el método cien¡ífico se inscribe en ios rnecanismossociale.s
que
ios dos-;30o, en otros términos, a medida que el interés privado que cada r,:'sulanel funcionamiento del campo y que se encuentraasí ciotado de la obje-
agentesingular tiene para combatir y para dominar a sus ccnc$frentes,Para rividad superior dJ''una ley social inrnanente,puede realmenteob.ietivarse en
obtener de ellos el reconocimiento, se encuentra armado de todo un conjunto instrurnentoscapacesde controla¡ y a vecesde dominar, a los que los utilizan,
r. en las disposicionesconstituidasde maneradurable,que produce la institu-
encucnt r anun r ef or zam ient ocont inuo en
.i ón cscol ar.Y est asdisposiciones
28. Se sabe qr:.elas ,euolucionesitzeuguralesrnismas, que dan nacimiento a un nuevo campo los mecanisrnossocialesque, al reencontrarellos mismos un sosténert el rnate-
consriruyendo, por la ruprura, un nuevo dominio de objetividad, incumben casisiempre a detentadores rialismo racionai de la ciencia obje-tivadae incorporada,producen control y
de un gran capirai científico, quienes, en vinud de variablessecundarias(ules como la penenencia
eensura,pero también invención y ruptura.3l
a una clasesocial o a una etnia improbable en esteuniverso)seencuentran ubicadosen una posición
inesrable,adecuadapara favorecerla incli¡ración ¡evolucio¡raria:esel caso,por ejcmplo, de los rccién
llegadosque importan a un campo el capital acumulado en un campo científico socialmentesuperior
(cf J. Ben David, "Roles and Innovation irr Medicine", I mericanJournal of Sociobgy,65' 1960, pp i.a ciencia y los doxésofos
5fl-569; J. Ben David y R. Vollins, "Social factors in rhe Origins of a New Science:the Case ol
i eu', 3 l, 1966, p p. 4 1 1- 46) 1.
P sicholctgt'', A m eri can Soci o/ agi cal re.ts no tiene jamás otro Fundamentoque la creenciacolectivaen sus
l-a cie¡"rcia
29. Se ha visto más arriba la descripción que da F. Reif de la forma que toma, la mayoría de las
.ÍL¡ndamentcque s pr oduce y supone el f uncionam ienr o m ism o del can- r po
veces,la acumulación del capitai en tal esrado del campo.
30. En cfccto, se esraráde acuerdo en observarque la lucha científica dcviene cada vez más intensa
(a pcsardel efccto de la especializaciónque tiende sin cesara reduci¡ e! univcrso dc los concurrentes, 1l . i :i conj unto de l c s proc c s osque ac omparl anl a autono¡¡i z ac i óndel c ampo c i entífi c omanti ene
por la división en sub-campos cada vez más estrechamenteespecificados)a mcdida que la ciencia ri :l eci ones : í,i a e[ev ac i ónc oni i nua dc l dc rec hode entradaquc i mpl i c a l a ac umul ac i ón
di al éct i c asas
avanza,es decir, más precisamente,a medida que los recu¡soscientíficosacumuladosse incrementln Jc rccursos específicoscontrii:uy"e, recíprocanrenre,a la autonomización del ca-mpo cientfÍico,
y que el capital necesariopara realizarla invención devienerr,ásamplia y uniformemenre esparcido i ¡i staurandouna ruprura s oc i al ,tanto más radi c al c uanto no bus c aC c ,c on el ¡nundo profano de
entre los concurrentcs, por cl hecho dc la clevación <lelderecbode entrada cn cl campo' i ,,¡ l ai cos.
prácticosinculcat-t-rspor matemáti casho¡ com o el de la alquinlia o de la ast r onom í am at em át lcaen
científico. La orquestaciónobjeriva de los esqucmas
que constituye el fundamento los tiempos de Copérnico*, puede ser situado en aiguna Parte entre ios dos
ia enseñanzaexplícita y por la familíatizacíón por un iado, por el campo reiigioso (o el campo de la
campo' es decir' límites represenrados,
dcl consensopráctico sobre las aPlrestas ProPuestaspor el
inmediaramenrepercibidas producci ón l i ter ar ia) , en el cual la ver dad of icial no es ot r a cosa que la
sobre los p.oú.*"r, los rnérodosy las soluciones
en el conjunto de ios i mposi ci ón l egír im a ( es decir , ar bit r ar ia y desconocidacom o t al) de un
como científicas,encuentra ella misma su Fundamento
social y escolarde ios arbitrario cultural que exPresael interés específicc de los dominantes -en
mecanismosinstitucionalesque aseguratlla selección
jerarquía establecidade las el campo y fuera del campo-; y' Por otro iado, Por un campo científico
investigadores(en función, por tj"mplo' de la
el del accesoa donde todo elemenro arbitrario (o impensado) social sería descartado,y
disciplin"s), la formación de los agentesseleccionados' ,:<>::rol
etc'32El campo de dis- cuyos mecanismos sociaies realtzaríanla imposición nece,sariade las nor-
los instrumentos ,le investigacióny de publicación'
y la heterodoxiase recorta mas universales de lt razón'
cusión que diseñan, por sr$ luchas, la ortodoxia
que ios antagonistas La cuesdón que se presentaasí planteada es la del grado de arbitrariedad
sobre el campo de la doxa, coniunto de PresuPuestos
discusión:33 la censura que social de la creenciaque produce el funcionamiento del camPo y que es la
admiten como "endo de su;'o, más allá de toda
oculta una censura más condición de su funcionamienro o, lo que viene a ser lo mismo, la cuestión
ejerce la or¡odoxia -y qLle denuncia la heterodoxia-,
del funcionamiento del grado de autonomía del campo (con relación, en primer lugar, a la de-
radical, mmbién más invisible, porque-es constitutiv"
lo que estáadmitidc por manda social de la clasedominante) y de las condiciones sociales,internas y
mismo del campo y Porque se refiereal conjunto de
de lo que está fuera de extefnas,de esta autonomía. El principio de rodas las diferencias entre cam-
el solo hecho d" la pertenencia al campo, el conjunto
de la discusión, es decir, el pos científicos capacesde producir y de satisfacerun interés ProPiamente
discusión por el hecho de aceptar las apuestas
comunes que están al científico y de manrener así un proceso dialécrico interminable, y camposdz
co n s ens os obr e ios o b j e to s d e d i s e n s o ,l o s i n te reses
producción de discursosentditos, donde el trabajo colectivo no tiene otro efecto
p ri n c ipiodelos c onfl i c to s < l e i n te re s e s ,to d o l o i ndi scuti doyl oi mpensado
ni o,r" función que la de perperuar el campo idéntico a sí mismo, producien-
tácitamente mantenidos fi:era de los límites de la lucha*a
a las determina- d.o, tanro hacia adentro como hacia afuera, la creencia en el valor autónomo
Según el grado de autonomía del campo con relación
soci al que se encuentra de los objetivos y de los objetos que pr<rduce,reside en la relación de depen'
ci o n e s ex t er nas , es m a y o f l a p a rte d e l a rb i tra ri o
tlencia por la apariencia de independenc;/l resPecto a las demandas externas:
e n g l o bado en el s i s re rn ad e l o s P re s u P u e s to consti s ruti vos de l a ci eenci a
en el espaci oabstracto los doxósofos,sabiosaparenresy sabiosde la apariencia,no pueden legitimar
p ro p i" en el c am po c o n s i d e ra d o 'E s to s i g n i fi c a que'
que oPeranpor la constitución arbitrariade un saberesoté-
ni la d.esposesién
soci al eso el de i as
d e l a t eor la, ¡ odo ca mp o c i e n tífi c o -e l d e l a s ci enci as
rico inaccesibleal profano, ni la delegaciónque demandan arrogándoseel
monopolio de ciertasprácticas,sino a condición de imponer la creenciade

32- El h a b i r u s p r o d u c i d o p o r la p r im e r a
e d u ca ció ncc cla sey el habi tus secundari oi ncui cedo por que su falsa ciencia es Perfectamenteindependiente de las demandas sociales
que ella no puede satisfacertan bien sino porque afirma vivamente su recha-
de l es
la edu c a c i ó n < :o np e so sd iF e r e n te se tl e l casode l as ci enci associ al esy
" r . o l " . . o n , .ib t,u "n , prerreflcxiva a los presupuestostáciros ciei
cicncias de [a natu¡elez-a,: detcrminar una atlhesión zo de servirlas.
"The
Hagstrom' op' cit ' p' 9 y T S' Kuhn'
campo (sobre el ¡ol de la sccialización, cf W D' Desde Heidegger que habla de ias "masas" y de las "elites" en el len-
c. crombic (ed.), cientiiic Change,l¡ndon'
F.rn.,io' of Dcgma in scie ntific Research",en: A.
guaje alramenre eufemizado de lo "auténtico" y de lo "inauténtico" a los
Hiine m a n , 1 9 6 3 , p P . 3 4 7 - 3 6 9 ) '
( ¿ p cr oe l l aseríatodavíaIa etnonretodol ogía?1 í polirólogos americanosque reproducen la visión oficial del mundo social
33. S ev e e n l o q * e p o d r ía .le ve n irla e tn o m e to d r :lo g ía
objeto, el uhenfor gran¡¿ldc schurz, es ia adhesión prerreflexii'a 't en l as semi -abst r accionesde un discur so descr ipt ivo- nor m at ivo,es sier n-
si ella supiera qu: lo que toma por
al ord e n e s t a b l e c i d o ' t pre la misma estrategia d'efatsa ruPtura la que define la jerga erudita por
( d e l cual parti ci pan tambi én l os di fcrentcs
34. E n e l c a s o d e l c a mp o d e p r o d u cció n id e o ló g ica e oposi ci ón al l e nguaje cient í f ico. Allí donde el lenguaje cient í f ico pone
) e l fu n damen¡o dei consensoen el di senso
comi l l as, como io obser va Bachelar d, par a señalar que las palabr asdel
c amp o s c c p r o d u c c i ó n d e d iscu r s,re r u d ito o le tr a d o
como veremos, en la relación censuradadei campo de producción en su a. est án
qu" i.fi". i" .lox...side, + l enguaj e ordi nar io o del lenguaje cient í f ico ant er ior que conser va
fu n ció n o c ul ta del campo dc l a l ucha de cl ases)
c on ju n c i ó n c o n e l c e m po tie l p o cle r( e sd e cir ,e n la
F
i
101
100 *
E¡!

Pierre Btturdieu
ffi
IB
EI cantpocientífico
ñ.
*'
sinrbólicamenteporque es Particularmenfe irreconocible-de la representación
co m plet am ent cre d e fi n i d x sy n o o b ti c n e n s u senti do si no del nuevo si s- g'
+ dominante del mundo social.37
te¡ na t eó¡ ic o, 35e l l e n g u a j e e ¡u d i to n o u s a comi l l as o neol ogi -smossi no &

p a r a m anif es t ars i m b ó l i c a me n teu n a d i s ta n ci ay una rLrP turafi cti ci as con


i. Acrualizandolos mecanismossocialesque aseguranel mantenimiento del
C,
orden establecidoy cuya eficáciaProPiamentesimbóiica descansasobre el des-
re lac ión al s enti d o c o m ú n : a l n o d i s p o n e r d e ni nguna autonomía real , It
$
? .onocirniento de su \ógicay de sus efectos-frlnda-mento de un reconocirniento
sólo puede, en e fe c to , p ro d u c i r c o mp l e ta m ente su ei ecto i deol ógi co si
sutiimente arrancado-, la ciencia social toma necesariamenteParte en la lucha
rra n s p a re n rec o mo para conti nuar evocandol a
re s ult alo s uf ic ie n te F ,l e n re
política. Es decir que, cuando iiega a insraura¡se(lo que supone el cumpli-
expertenciay la expresión ordinaria que den,.ga.
¡¡rientode cie¡tascondiciones,cor¡elativasa un esado determinado de la rela-
de falsaruptura expresanla verdad objetiva de carnposque
Las cstrategias I
ción de fuerzasentre las clases),la lucha entre la ciencia y la falsaciencia de los
no disponen sino <ie wa falsa autonomílz:en efecto, mientras cue la ciase :!;

i! doxósofos(que pueden reivindicar tradicionesteóricasmás revolucionarias),


dominante oto¡ga a las cienciasde !a naturalezauna autonomía acorde al
i aporra necesariamenteuna contribución a la lucha ent¡e las clasesque, al me-
interésque encueniraen ias aplicacionesa la economíade ias técnicascientí- a
+
nos en este caso, no tienen igual interés en la verdad científica.
ficas,uo tiene nada que esperarde las cienciassociales,sino, en el mejor de
g La cuestión fundamental de la socioiogía de ia ciencia toma, en el caso Ce ias
ios casos,una contribución particularmente preciada a la legitirnación del
¡ cienciassociales,una forma Particuiarmenteparadójica:¿Cuálesson las condi-
orden establecidoy un reforzamientodel arsenalde los instrumentossimbó- ?
cir¡nessocialesde posibilidad del desarroilode una ciencia libre de las coacciones
licos de dominación. El desarrollotardío y siempre amenazadode las cien- g
t, de las demandassociaies,sabiendoque' en estecaso,los progresosen el sentiCo
ciassocialesestáallí para testimoniarque ei progresohaciala autonomía real, ¡.
')¿ de la racionaiidadcientíficano son Progresosen el sentido de la ncutralidad
que condicionay supone alavez ia instauraciónde los rnecanismoscotrstitu- :i:

I
a poiítica?se puede negarla cuesrión.Es lo que hacen,por eiemplo, todos aquellos
tivcs de un campo científico auto-reguladoy autárquico,se choca necesaria-
que impuran rodas ias parricularidadesde las cienciassocialesa su sir.raciónde
ment e c on obs t á c u l o sre c o n c ,c i d o se n o tra p arte: y no puede ser de otro
recienteemergenciai€nnombre de una filosofia ingenuamenteevoiucionistaque
modo, porque lo que estáen juego en la lucha interna por la autttridadcien-
pone a la ciencia oficial en el rérmino de la evolución. De hecho, ia teoría de!
tífica en el campo de ias ciencias sociales-es decir, ei poder de producir, de
rerrasono es verdadera,paradójicamente,sino en el casode la sociologíaoñcial ¡
imponer y de inculcar la representaciónlegítima del mundo social-, es una
más precisamente,de la sociologíaoficial de ia sociologfa.En efecto' basta con
de las apuestasde la lucha entre las clasesen el campo político.36De ello se
rraera la mernoria los anáiisiscelebresde AlexanderGerschenkronsobreel "retra-
deriva que las posiciones en la lucha interna no pueden esperarjamás ei
so económico", para comprendef los rasgosmás ca¡acterísticosde estasfor¡nas
grado de independenciarespectoa las posicionesen la lucha externa que se
particularesde discurso erudito que sóh lasfakas ciencits. Gerschenk¡on obserya,
observa en el campo de las ciencias de la naturaleza.La idea de una ciencia
en efectr.:,que, cuando el proceso de industrializaciín comienza con reffaso,Pre'
neutra es una ficción, y una ficción interesada,que permite dar por científica más desa-
sentadiferenciassistemátic¿s con ei que se.ha producido en ios paíse-s
una forma neutralizaday eufemizada-por lo tanto, particularmente eficaz sino rarn-
rrollados,no solamenteen io que concierne ala rapi&ezdel desarrollo'
i:ién en lo que concierne a ias "estrucruras Productivas y organizacionales",por*
que pone en práctica "instrumen¡os institucionales"originalesy Porqtte se desa-
35.G. Bachela
rd,o).,;t., pp.216-217.
rroila en un clima ideoiógicodiferente.3sl¿ existenciade cienciasmás avanzadas
36. Es así que los sistemasde clasificación (taxonomías) sociales,que son una de las apuestas
esencialesde la lucha iJeológica entre las clases(cf. P Bourdieu y L. Boltanski, "Le titre et le
postc: rapports entre el systümede production et le systémede reproductio" , Actet de Ia recherche j 7. D e el l i , se de¡i v a < ¡uel a s oc i c k .gíede Ia c i enc i a (¡ c n pani c ul ar, de l a rel ac i ónque l a c i enc i a
en sciences
sociales,?.,1975, pp.9r-107), constiruycn también -a través de las tc¡masde posición
roci al manti ene co n l a c l a¡e domi nante) no rs una es pec i al i dadentre otras ,s i no que forma part.
sobre la existencia o la no-existencia de las clasessocia[es- uno de los grandes principios de la
de l as condi ci one sde una s c c i ol ogíac i entífi c a'
división dcl campo sociológicc (cf. P. Bourdieu, "Classeset classement",Minuit,5, 1973, pp.22- jB. A. Gerschcn kron, Economic Backtuardnessin I listarical Perspeairre,Carnbridge, Harvard Universiry
24,yA.P.A.CoxonyC.L.Jones, OccupdtionalCategorizationandlmagesofSocíery,lWbrkingPaper ?ress,1962, p.7.
n" 4 , P r o j e c t o n O c c u p a tio n a l Co g n itio n , Ed in b u r g h , Ed inburgh U ni versi ry P rcss,1974).
jamás sobre los obstácu-
-b .i.ndesproveedorasno solamente de métodos y de técnicas,las más de las veces la competenciaentre investigadores'no se interroga
a la competition, a la vez
.*pl"ud". fuera de las cor-dicionesrécnicasy socialesde validez,sino también de los a la comperencia científica que son imputables
marbet place'
ejemplos- es lo que permite a la sociologíaoficial darsetodas las aparienciasde la económica1'cientifca, cuyo lugar es eI academic
ciencia del esablishmeú esla comPetencia en
cien¡ificidad:el alarde de auronomía puede tonar aquí una forma sin preceden- I-a competitionque reconoce esta
verdadera competencia
tes, de la cual el esorerismode las viejas tradiciones leuadassabiamente manteni- los límites de la convenienciasocial,que obstaculizaala
tanto más fuertemente
do r,o representasino una pobre anticipación' la sociologíaoficiai apunta no a ciencífica,capazd,eponer en cuestión a Ia ortodoxia,
arbitrariedad social' se com-
realizarsecomo ciencia, sino a ralizar la imagen oficiai de la ciencia que la socio- cuanro se Ia sitúa en un universo más cargado de
(e[ "paradigmJ' pueda coincidir con
logía oficial de Ia cicncia -suerte de instancia jurídica que se dala comunidad' prende que la exaltación de la unanimidad del
término se aplica perfectamenreen esrecaso) de los sociólogosoficiales-, dene se pueda, según los autores' rePro-
ia ex.ltación de la competencia -.o incluso que
o defedo de competencia'
por fi-urción proporcionarlesal precio de una reinterpretaciónpositivista de la cha¡ a la sociología euroPeade pecar Por exceso Por
práctica ciendfica de las ciencias de la naruraleza' A demásdel as her r am ient asydelast écnicas- - com put ador asyPr ogf am as
Para convencersecompleramente de la función de ideología justificadora ejemplo- la sociología oficial
de tratamienrc automático de los datos, por
que cumpie la historia social de las cienciassociales,tal como se Practicaen el tomaprestadoun , m odelodelapr áct í cacient í f ica, t alcom olaim aginación
los atributos simbólicos de la
esablishmentamericano,3ebas¡aríacon reseñarel conjunto de trabajos direc- poriti rirt" se la representa;es decir, con todos
'r.spet^bili.l"d cientlficas, máscarasy elementos postizos tales como los acce-
m o indirectamente consagradost Ia com7etition,la palabra clave de toda la
de la organizaciórr de lo
sociología de la ciencia americana que' en su oscuridad de concepto nativo sorios tecnológicos y el kitch retófico, y un modelo
promovido a la dignidad científica, condensarodo lo impensado (la doxa) de tal como su pobre ciencia de las
que ella llam" "1" comunid'ad' científica"'
esta sociolo gía. La tesis según la cual productividad y competencia están sociología oficial no tiene el
o,g",,i,".iones le permite concebirla. Pero la
se inspira en una reoría funcionalista de la compe- de la ciencia: la dificultad
directamenre ligadas,ao *Jrropolio de las lecturas interesadasde la historia
tencia, que es una variante sociológicade la creenciaen las virtudes del
"mer- cienttfcamenrc k ciencia' tierie
panic;lar que la sociología tiene para Pensar
cado libre"; ei término inglés competition designatambién lo que nosotros en lo más bajo de la ierarquía
rela.ión .o., .i hecho de que ella está situada
ciencias más científicas
ilamamos concurrencia:aral reducir toda competencia a la competition entre social de las ciencias.Y" ,." que se eleve para Pensar
desciendaPara registrar la
uniuersidad¿so al hacer dela com\etition ent'reuniversidadesla condicién de mejor de lo que ellas mismas ,. pi...".t, ya seaque
y eila siempre
i.r-r"g"ntriunfante que la hagiografíacientífica ptoduce ProPaga'
ciencia' es decir' Para Pensarsu
ti.nl l, misma dificul¡ad Para Pensarsecomo
la ciencia social encuentra una
39. l-a filosofía de la historia que frecuenta esta historia social de posición en la ierarquíasocial de ias ciencias'
Clark que, en un informe, Paul vogt calacteriza ha suscitado el libro cle
Esto se ve con roda claridad en las reaccictnesque
cxpresión paradigmárica en ia obra de TLrry
long-awaited, much circulated in rnanuscript
,o.iológi.r-"n,e con <losadjetivos: "Terry N. Clarck's que ProPorcionarían un
propben and patroru" (cf.T. Clark, hophets and Pa¡row, The Frnch Uniuersiry and the Emergcnceof the
Thomas Kuhn, The Strucntre of Scienifc Rewlutiot¡s i¡
empírico de las ideoiogías
soriol srirrrr, cambridge, Harua¡d universiry P¡es, 1973, y J. C. Chamboredon,
"sociologie de la marerial experimental de aita calid,adPa¡a un an¿ílisis
de sus autores en el camPo
Sociologic et inré¡és sociaux des sociologues",laes d¿ k recherche ensciences social¿s,2'1975, pp. 2-lT ' É de la ciencia y de sus relacionescon la posición
"É sabejamás exactamenresi
40. Joseph Ben David riene el mériro de dar a esta tesis su forrna más directa: el alto grado de
f científico. Es verdad que esrelibro, del cual no se
(eiemplo de prescripción larvada:
competencia qu e caracr-eríz,aa la universidad americana explica su más alta producti'ridad científica t describeo prescribela ljgic. d.1 cambio científico
"scie n tific Pr o d u ctivi ry and A cademi c Organi zati on i n .:ientífica), invitaba a sus
la existenciad" .rn p"."digma es un signo de madurez
y su mayor f l e x i b i l i d a d (J. Be n Da vid ,
sociological Rnietu,25, D6A, pp.828-843; Fund¿mental ciencia'42
rapÁtrs a las preguntas sobre la buena o la mala
Nineteenth century Medicine" , Anterican
lecroresa buscar
Researchandthe(.hiuersities,París,OCDE,1968;J BenDavidyAvrahamZloczawer,"Universities "11í
45-84).
and Academic systems in Mociern Societies",EuropeanJourna! of sociolog\, 3, 1962, pp.
4 l. F,n francd tnckrrence.Pcr las connoracionesdifcrentesque estevocablo tiene, se ha preferido'
al contenido no ticnen nada de radicalmenre nuevas'
a lo largo del tcxto, traducir concunencepor concurrencia, en un in¡ento de ser fiel 42,Mástodavía que en estelibro -cuyas tesis esenciales
"competenci a'.(N ' D el T.) al mismo tiempo y en or¡a tradición;
es pec í f i c oq u e e l a u r o r d a a l té r m in o , y p a r a n o co n fu n d ir lo con al menos para los lecroresde Bachelard,obieto él mismo, casi

104 105
EI cantpo cietttífico
PierreBourdieu

roclaslas aparienciasde una ruPtura tajante con la ciasc domi¡iante y sus


Dei lado de los que el lenguaje nativo llama "radicales",se ha leído en el libro
,l cmandasi deológicas,m ult iplicando los signosext er ior esde cient if icidad:
de Thomas Kuhn una invitación a ia "revolución" contra el 'paradigma"aio
sc ti ene así, de l lado "em pí r ico", el alar de t ecnolégico,
¡ dei lado de la
una justificación del pluralismo liberal de los utorld-uiews,aa dos tomas de
rcoría.la retóricade /o'\te,, (florecientetambién en el campo artístico) que
posición que correspondensin duda a posicionesdiferentesdentro del cam-
;:ni ta a l a acumulacióncient í f ica,apiicandoa una obr a o a un coniunt o de
po.a5Del iado de los sostenedoresdel orden científico establecido,se ha
obras del pasado (cf. 7'he Structur€ of SocialAction) el procedimiento ríPica-
leído allí una invitación a arrancara la sociologíade la fase"pre-paradigmática",
mente l etrado de la "r elect ur a",oper ación par adigm át icam ent e
escolarde
imponiéndole la constelaciónunificada de creencias,de valoresy de técnicas
si mpl e reproci uccióno de r epr oducciónsim pt e adecuadapar a Pr oducir ,en
que simboliza la tríaCa capitolina de Parsonsy de Lazarsfeldreconciliadasen
l o. l i mi rcs del c am po v de la cr cenciaque il pr oduce,t odxs las apar ieucias
Merton. La exaltaciónde la cuantificación,de la formalizacióny de la neu-
.le la "rcvoiución". Sería nccesarioanalizarsistemáticamenteesta retóricarle
tralidad ética, el desdén por ia "filosofía" y e\ rechazode la ambición sistemá-
lt ctent{iciderl por la cual la "comunidad" domi¡rante P¡oduce ia creencia
tica en beneficio de la minucia de la verificación empírica y de la floja concep-
r:n ei valor científico de sus productos y en la autoridad científica de sus
tuaiización llamada operatoria de las "ieo¡íasde alcancemedio", son otros tan-
iiriembros:\/a sea.,por ejemplo, el conjunto de las estrategiasdestinadasa
tos rasgosobtenidos por una transmutación desesperadamente tlansparente
dar ias aparienciasde Ia acumulatiuidad, tales como las referenciasa las
del ser en deber ser, que encuentra su jusdficación en la necesidadde contri-
fuentescanóni cas,la m a1'or í ade las vecesr educiCas,colno se dice, "a su
buir al reforzamientc de los "valores comunitarios" consideradoscomo la
nrássimple expresión" (bastapensar en el destino Póstumo de El Suicidio),
condición para el "despegue".
.s dccir, a chatos protocolos que simulan el frío rigor del discurso científi-
Faisa ciencia destinada a producir y a mantener la falsa conciencia, la
co, y a l os artículosm ás ¡ ecient esposibles( se conoce la oposiciónent r e las
sociologíaoficial (de la cual la politoiogía es hoy su más bello florón) debe
ci enci as" duras" - har d- y las ciencias "blandas" - sof t - ) sobr e el m ism o
hacer alarde de objetividad y de "neutralidad ética" (es decir, de neutrali-
rcma; o también las*vstategiasde cierre, que Pretenden marcar una sePara-
dad en la lucha entre las clases,cuya existencianiega, po¡ otra pafte) y dar
científica y los debatesProfanosy mun-
ci,in tajante entre la pr<.ilrlemática
danos (siempre presentes,pero bajo el título de "fantastnasen la máqui-
ne"), al precio, la mayorít de las veces,de sirnplesretraduccioneslingüísticas;
de una captación semejante-, la intención normativa se ve en dos artículos donde T. Kuhn o las estrategiasde denegación, que florecen entre los politólogos, hábiles
describe las funciones positivas para el desarrollo cientlfico de un pensamiento "convergente" y
para realizarel ideal dominante de'la objetividad" en un discurso apolíti-
sostieneque la adhesión dogmática a una tradición es favorable a la investigación.T Kuhn, "The
co sobre la poiítica, donde la políticá inhibida no Puede aParece¡sino bajo
Function of Dogma in Scientific Research",en: A. C. Crombie (ed.), op. cit., pp. 347-369; "f'he
Essential Ténsion: tadition and Innovation in Scientific Research", en: L. Hudson (ed.), The l as apari enci asir r econocibles,por lo t ant o ir r ePr ochables,de su denega-
Ecolog of Haman Intelligence,[,ondon, Penguin, 1970, pp.342-359. ción poilticológica.a6 cumPlJn por añadidura una fun-
Pero estasestrategias-
43. Cf., por ejemplo, A.'Wi Gouldne¡ The Coming Crisis af Veaern Sociology,NewYork, London, ci ón esenci al :la cir culación cir cular de los obiet os, de las ideas, de los
Basic Books, l97A y R..lV Friedrichs, A Sociologl ofSocioiogy,New York, F¡ee Press, i970. rnétodos ¡ sobre todo, de los signos de reconc-¡cimiento en el interior de
44. E. Gellner, "Myth, Ideology and revolution", en: B. Crick y W A. Robson (ed.), Protestand
una comunidad (sería necesariodeci¡ un club abierto a los únicos miem-
Distonnnt, London, Penguin, D7A, pp.2A4-220.
[rros nativos o importados del ItJ League)a7produce, corno todo círculode
45. Una revista tal como Tbeory and Societyd,ebela importancia pu¡a¡nente social que le permite
existir y subsistir sin otro contenido positivo que esta suerte de vago humanismo antipositivisra en
el cual se reconocen los "sociólogoscrlticos" (orro concepto nativo), al hecho de que proporcrona
't6.C.l.P.Bourdicu, s ", Minuit, 1, 1973,pp.26-45(enparricular
"I-esdoxosophe cl análisis
del
una unidad c¡tlictamente negatiuaa todas las corrientes que se encuentran o se picnsan fuera del
:ficto I-ipset).
cstab/ilhment americano, desde la etnometodología, heredera de la fenomenología, hasta el neo-
47. l.a sociclogfa oficial de la cicncia olrece una justificación para cada uno de cstos rasgos,fu1,
marxismo, pasando por la psico-historia, (Puede encontrarseun cuadrc sinóprico bastanrefiel de
por cj empl o, ei cvi ta r l os probl emasteóri c osfundamental esenc uentrauna.i us ti fi c ac i ónen l a i dc a
esta constclación ideológica en P Bandyapadhyav, "One Sociology or Many: Sorne Issues in
rl c que, cn l as ci enci asde l a nattrral c z a,l os i nv es ti gadoresno s c i nqui eran por l a fi l os ofl ade l a
I{adical Sociology", SociologicalReuiew,Vol. 19, febrero de 1971, pp. 5-30.)
descansasu Fun cionam ient o. s0En cuant o a los dom inant es, inclinados a
tanto en
lcgitimidZd, un universo de creenciacuyo eq.^ivalentese encuentra -en el cual están ubicadas todas sus lnver-
alta costura'o' admitir que el o¡den científico
*1".n-po religioso cuanto en el campo de la Iiteratura o rle la
siones (en el seno de ia economía y del psicoanálisis)y en el cuai elios están
Pero, aquí tarnbién, es necesariocuidarse de conferir a la falta cíencia
en ccndiciones de apropiarse de ios beneficios- es el deber ser realizado,
afcial la significación que le confiere la crítica "radical". A pesar de su
son lógicamente pro€lives a adheri¡ a la filosofía esPontáneade la ciencia,
op<rsiciónsobre el ua/or qtte confieren al "paradigma" principio de unifica-
que encuenrra su e-xpresiónen la tradición positivista; forma del oPtimis-
.i ó n n " . " r " r io par a e l d e s a rro l l od e l a c i e n c i a e n un círso,fuerza de rcpre-
mo liberal que quiere que la ciencia progresepor ia fuerza intrínseca dc la
si ó n a r bit r ar ia en otro c a s o -o a l te rn a ti v a m e n te'uno u otra en K uhn-,
idea verdaderay que los más "podcrosos"sean rambién por definición los
conservadoresy "radicaies", adversarioscómplices, acuerdafi de hecho en
más "competentes":basta con Pensaren los antiguos estadosdel campo de
l o e senc ial: por el p u n to d e v i s ta u n i l a te ra l q ue toman necesari amente
las cienciasde la naturalezao en el estado actual del canipo de las ciencias
sobre el campo científic<¡,eligiendo, al menos inconscientemente' uno u
sociales,para percibir la función ideológica de sociodiceade esta filosofía
o rro d e ios c ar npos a n ta g o n i s ta s ,n o Pu e d e n p e rci bi r que ei control o l a
de la ciencia que, dando el ideal como realizado,excluye la cuesrión de las
censura no es ejercido por tal o cual rle las instanciassino por la relación
condici<¡nessociales de realizactón del ideal'
ebjetiua er?fteaduersarioscómplirer que, por su anragonismo mismo, deli- pl anteando que la sociologí ade la ciencia m ism a f unciona según las
mi ra n el c am po de i a d i s c u s i ó n l e g íti ma , e x c luyendo como absurdo o
leyesde funcionamiento de todo camPo científico que establecela sociolo-
ecléctico, o simplemenre como impens¿ble, toda tentativa de tomar una
gía cienrífica de la ciencia, la sociología de la ciencia no se condena de
p o si c ión no pr ev is ta (e n e l c a s o Pa rti c u l a r, p o r e,i empl o, para poner al
ningún modo al relativismo. En efecto, una sociologíacientífica de la cien-
s€rvicio de orra axiomárica científica las herramientas técnicas elaborados
ci a (y l a soci o logí a cienr í f ica que cont r ibuye a hacer posible) no puede
p o r l a c ienc ia of ic ia l ).a e
consriruirse sino a condición de percibir claramente que a las diferentes
Expresión apenaseufemizadade los interesesde los rlominados del cam- de
posicionesdentro del campo científico están asociadasrepresentaciones
po científico, la ideología "radical" tiende a tratar toda :evolución contra el de epistemológicas,
la ciencia, estrlttegiasideológicasdisfrazadasde tumas posición
orden científico establecido como revolución científica, haciendo como si
por las cuales los ocupantesde una pcsición determinada aPuntan a justi-
fuera suficiente que una "innovación" seaexcluida de la ciencia oficiai para
ficar su propia posición y las estrategiasque Ponen en Práctica Para mante-
que pueda ser tenida como cienríficamenterevoiucionaria,y omitiendo así
nerla o mejoraria, al mismo tiempo que para desacreditara los ocupantes
p l a n rear la c ues t ión d e l a s c o n d i c i o n e ss o c i a l e spor l as cual es una revol u- cada sociólogo es buen sociólogo
de la posrción opuesray sus esrraregias.
ción conrra el orden científico establecidoes también una revolución cien-
de sus concurrentes,no siendo la sociologíadel conocimiento o de la cien-
úFtcay no una simple herejía que aPunta a revertir la reiación de las fuerzas
cia sino ia forma más irreprochablede las esrrategiasde descalificacióndel
e sta blec idasen el ca mp o , s i n tra n s fo rma r l o s p ri nci pi os sobre l os cual es
adversario,desdeel momento en que toma Por objeto a los adversariosy a
sus esrraregiasy no al sistema comPletode las estategias, es decir el campo de

de la
ciencia (cf. ,07,O. Hagstro m, op. eit., pp.277-279). Se ve sin dificultad lo que tal sociología
d e lcg itim a r u n e sr a d od e hecho y de transformar l os l ími tes
c ienc ia p u e d e d c b e r a l a n e ce sid a d
50. Sería necesario atializarrodos los usr:sestrarégicosque los dominados en un campo puedcn
s uf rido s e n e x c l u s i o n c sclcctiva s.
haccr de ia transfiguración ideológica de su posición objetiva: por eiemplo, el alttrde de exclusión
al ta costura' ver P
48. S o b r e l a p r o d u c c i ó n d e la c¡ e e n ciay d e l le tich ism o e n el campo de l a
que permi re a l os ex c l ui dos rambi én s ac ar parti do de l a i ns ti tuc i ón (que el l os ¡ec onoc en l o
" L ¡ co u ¡ u r ie r e r sa g r iffe : co n tr ib u tio n ) unc théori e de l a rnagi e",A ctesde
B ourd i e u e Y . D c l s a u t , suficiente como para reprocharle que no los reconozca)haciendo de la exclusión una garantía de
(l), enero i' '375' pp'7-36'
l¿ recherchee¡t scienrcssociai¿¡,I
ci enri fi ci j ad; o i nc l us o l a c onres rac i ónde l a "c ompetenc i a' de l os domi nantes que es tá en c l
1r9r.Talcs parejas episremológicas,que son al misnro tiempo parcjas sociológicas, funcionan e¡r
centro de todo movimiento herético (cf. la contes¡ación del monopolio del sacramento) ,' que
roc loca m p o i c f , p o r e j e m p lo , e lPo sitíu ism u sstr e r r q u co p o neaH abc 'na^syaP opperenel casotl e
debe armarse ianro menos de argumentos científicos cuanto el capital científico act¡mulado es
A. lema n i a- m e c a n i s m o d e d e svío q u e h a b ie n d o h e ch o su s p r uebas en E uropa comi enza a hacer
m:ís débil. etc.
esrrasosen ios Fstados Unidos con la imponación de la Escuela de Frankfur¡'

t 09
108
Pierre Bourdieu

Iasposicionesa ?arür del cua/ ellasse engendran.5tLa sociología de la ciencia


no seríatan difícil si no fueseporque el sociólogotiene apuestasen el juego
q u e pr et endedes c ri b i ¡ (e n p ri m e r l u g a ¡ l a c i e nri fi ci dadde l a soci ol ogía
¡ La causade la ciencia.*
en segundo lugar, la cientificidad de la forma de socl logía que él pracrica)
Cómola historiasocialde las cienciassociales
y porque no puede objetivar esrasapuesrasy las estrategiascorrespondien-
te s, s ino a c ondici ó n d e to m a r p o r o b j e to n o sól o a l as estraregi as
de sus
puedeserviral progresode estasciencias**
adversarioscientíficos sino al juego en cuanro ral, que dirige rambién sus
propias estrategias,amenazandocon gobernar secretamentesu sociologray
su sociología de la sociología.

T a historia social de las cienciassocialesno es una especialidadentre otras.


L Er ei instrumento privilegiado de ia refiexividad crítica, condición im-
perariva de la lucidq colectiva, y también individual. sin duda, puede servir
rarnbién al resen¡imiento y a la mala' fe, cuando se esPeransolarnentelas
satisfaccionescarentes del peligro de la indignaci6n y de la denunciación
rerrospectivas,o los beneficios aseguradosde una defensa sin riesgo de las
buenas causasdesaparecidas.Pero no encuentra verdaderamentesu justifica-
ción, sino cuando liega a actualizar--lospresuPuestosque están inscritos en el
principio mismo cle las empresascienríficas del pasado y que p€rPetúa, fre-
cuenrernenreen esndo implícito, la herencia ciendñca colectiva, problemas,
conceptos, métodos o técnicas.
Sólo ia anamnesisque permite ei tiabajo histórico puede liberar de la
amnesia de la génesisque imPlica, casi inevitablemente, la relaciónrutinaria

r "La causede la scicnce.Comment I'hisroire socialedessciencessociaiespeur servir le progresde


ccssciences",Actesde !¿ recherche social¿s,
ensciences fi6-ft7 , marzo de 1995, pp. 3-L0'
5 I ' Sobre la necesidadde construir como tal el campo inrelecrualpara hacer posible una sociología
" Estetexto reromaalgunosde los temasde una comunicaciónpresentada en 1989 en el
de los i n t c l e c t u a l e s , q u e se a o r r a co sa q u e u n r n te r ca m b io de i nj uri as y de anaremas
enrre in a changing socier.v"y publicada
"intelcctuaies de dcrecha" e "intelectuales de izquierda", ver p coloquiodeChicagosobre"socialTheoryand EmergingIssues
Bourdieu, "Les íiactions de la en: P Bourdieu yJ'
oFa Fieldof \7orld Sociolagy"'
bajo el título: "Epiloghe:On the Possibiliqy
classedominante er les modes d'appropiation de I'oeuvrc d'arr", Information sur /essdences
sociales, lveswiew
coleman (ed.), social Theoryfor a changin; socicry,Boulder-san Francisco-oxford,
1 3(3 ),1974,pp. 7- 32 .
Press,New York, RussellSageFoundarion,1991.
con la herencia,convertida, en lo esenciaI, en doxa disciplinaria;soiamente i nstanci ade censur ay pr incipio de sublim ación- asignasus objet os legí t i-
ella estáen condicionesde proporcionar a cadainvestigadorlos medios para mos y las vías legítimas para alcanz:t¡los.Las pulsiones subiimadas que defi-
comprender sus posruras reóricasmás fundarnentales,como la adhesión, la nen esta libido específicase aplican a objetos en sí mismos altamente depura-
mayorla de las veces tácita, a las tesis antropológicas faramente enunciadas dos y, por muy vioientasque pudieran ser, son inseparables,
en su existencia

que fundan sus grandes eleccionesteóricasy merodológicas(en materia de misma y en ia forma de su satisfacción,del reconocimiento práctico de las
fi l o so fía de la ac c ión e s p e c i a l me n re ), o s u s s i m patías y sus anti patías exigenciasque están inscritas en el funcionamiento social del campo en el
epistemológicaspor autores, modos de pensamientoy fo¡mas de expresión. cual pueden encontrar satisfacción.
Es el instrumenro más indispensable,y el más despiadado,para una crítica De eilo se deriva que el rigor de ios productos científicos depende funda-
de las pasionesy de los interesesque Pueden ocultarsebajo las apariencias mentalmente del rigor de las coaccionessocialesespecíficasqrre rigen su pro-
irreprochablesde la metodología más rigurosa' ducción; o, más precisamente,del grado en el cuai las reglaso las regularida-
La ciencia social tiene el privilegio de poder tomar por objeto su propio des que gobiernan el microcosmo científico y que determinan las condicio-
funcionamienro y de esrar en condicionesde llevar, así, a la conciencia,las nes en ias cuales las construccionescientíficas son producidas, comunicadas,
coaccionesque pesan sobre la práctica cienrífica; pues puede servirsede ia discutidas o criticadas, son inclependientescon relación al mundo social, a
concienciay del conocimiento que poseede sus funcionesy de su funciona- sus demandas,a sus expectativaso a sus cxigencias.
miento para intentar superar algunos deJos obstáculos al progreso de la El campo de las cienciassocialesestá en una situación muy diferente a la
concienciay del conocirniento.Así, lejos de invalidar sus propios fundamen- de los otros campos científicos: por el hecho de que tiene por objeto al mun-
tos, como se ha dicho muchas veces,condenando al relativismo,tal ciencia do social y porque pretende producir de él una representacióncientífica,
re{lexiva puede, al conrrario, proporcionar los principios de uia Realpolitilz cada uno de los especialistasestá allí en concurrencia no solamente con los
científica, que apirnte a asegurarel progreso de la nzón científica- otros científicos,sino también con los profesionalesde la producción simbó-
lica (escritores,hombres políticos, periodistas)¡ más ampliamente, con to-
dos los agentessociaiesque, con fuerzassimbólicas y éxitos muy desiguales,
La situación ambigua de la ciencia social trabajan para imponer su visión del mundo social (usando medios que van
del argot, del insu-lto,de la maledicenciao de la calumnia hasta los libelos,
El campo científico es un microcosmo social parcialmenteautónomo con los panfletos o las tribunas libres, sin hablar de las formas de expresión colec-
relación a las necesidadesdel macrocosmoen el cual está englobado.Es, en tivas e institucionalizadasde ia opinión, como el voto). Escaes una de las
un sentido, un mundo social como los otrosy, como el campo económico, razonesque hacen que no pueda obtenel tan Fácilmentecomo los otros cien-
conoce relacionesde fuerza y luchas de intereses,coalicionesy monopolios, tfficos, el reconocimiento del monopolio del discurso.iegítimo sobre su obje-
i n cl u so im per ialis m o sy n a c i o n a l i s m o s .Pe ro , a p esar de l o que di gan l os to, que reivindica por definición pretendiendo la cientificidad. Sus concu-
deiensoresdel "programa fuerte" en sociologíade la ciencia, es también un rtentesdel exterior,pero también, a veces,del interior, pueden apelar siem-
mundo aparte, dotado de sus leves propias de funcionarniento. Todas las pro- pre al sentido común, cont¡a el cual se construye la representacióncientífica
piedadesque tiene en común con los otros campos revisten, allí,formas espe' del mundo. Pueden incluso apelar ai modo Ce valiciaciónde las opiniones
cl i ca r ¡ or ejem plo, p o r mu y d e s c a rn a d iq u e p u e daser al l í Ia compei enci a' que es utilizado en política (especiaimentecuando la autonomía del campo
ella queda sometida,sino a reglasexplícitas,al menos a regulacionesautomá- político tiende a anularse,con la demagogiapopulisra, que finge otorgar a
ticas, como las que resultan del control crutul¿o entre los clncurrentes, Y que todos el poder y el derecho de juzgar todo).
tienen por efecto conveÍtir los interesessocialestalescomo el apetito de reco- fuí, desde ei punto de -¡istadel grado de autonomía con respectoa los
nocimiento en "interesesde conocimiento", la libido dominandi -que está poderesexternos,públicos o privados,la ciencia social se sitúa a mitad de
comp,endida siempre por una parte en la libido sciendi- en libidn scientifca, camino entre dos límites: por un lado, los campos científicos más "puros",
amor puro cle Ia verdad, al cuai la lógica del campo -que funciona como como la matemática,donde los productoresno tienen otros clientesposibles

112 I I-l
'# I-4 caysa de la cíencia. Cómo la hístoria social cle las ciencías sociales pucde servir...
PierreBourd.ieu
F
¿gil
8.

que sus concurrentes(quienes,ai tener la misma apritud y el rnismo interés Sr Los dos principios de jerarquización
s
que ellos para prcducir, están poco inclinadosa aceptarsin examen sus pro- g
ductos); por el otro, los campos político o religioso,o incluso periodístico, ;1, De ello resultaque, en el campo de las cienciassocialescomo en el cam-
donde se enf r cnt anlo "pur o" y io "com er cial",los pr oduct or es
donde el .!uicio de lcs especialisrasesrá cada vez más frecueniemenre some- i .¡ l i terari o,
de jer ar quizacióny de
tido al veredicto del número bajo todas sus formas, plebiscito,sondeo, cif¡a nu.d" n referi rsea uno u ot r o de los dos pr incipios
que allí
de ventas o audiencia, y que ororgan a los profanos el poder de elegir entre i.sirimación opuestos,el principio científico y ei principio político,
exclusiva. Así , por ejem pl. ,
productos que no esrán necesaiiamente en condicionesde evaluar (y menos ,Jnpon.n si n l l egara im poner una dom inación
(don-
todavía de producir). :r diférenciade io que ocurre en los camposcientíficosrnásautónomos
proposiciones lógica-
Se estáen relación pues, con dos lógicas compleramenre opuesras,la del iic nadie soñaríacon sosrenerhoy que la tierra no gira),
o
campo político donde Ia fitena de las ideas dependesiempre, por una pafte, t ¡llc¡rteinconsistenteso incompatiblescon los hechos pueden PerPetuafse
con Ia rinica condición de
de la fuerza de los grupos que las aceptan como verdaderas-, y ia del campo i*cir¡s<¡pfosperar,así como los que las defienden,
científico -aue, en sus estadosmás puros, no ccnoce y no reconocesino ia (tüe esréndoradas,en el interior mismo del campo, y también en el exterioi',
"fuerza in¡rínsecade la idea verdadera",de la que hablabaspinoza: no se zanja .i. *n" aurtoridacl social adecuadapara comPensarla insuficienciao la insig-
Ios con-
un debate científico con un enfrenramiento físico, con una decisión política o
;: niflcancia;y ocur¡e lo mismo en lo que conciernea los problemas,
s pueden, por ejem plo' con-
con un voio, y laF¿erzade una argumentacióndependeen gran meciida,sobre * .Jptos o l as tax onor ní as:algunosinvest igador es
..rrtil- prolrl" mas socialesen problemas sociológicos, tolnar prcstado para el
todo cuando el campo está fue¡remenreinrernacionalizado,de la conformidad t
,irscurs.o científico concepios (profession,rol, etc.) o taxonomías (individual/
de las proposicioneso de los procedimieniosa las reglasde coherencialógicz y
..rrlcctivo,arkieuentent/ascription,etc.) direcramentesacadosdcl uso orclina-
de compadbilidad con los hechos.Al contrario, en el campo político, lo que
triunfa son las preposiciones que fuistóteles (en Zes Topique) llamaba endóxicas, \,tomat co¡no inst r um ent osde análisisnocionese¡ l sí m ism assuscePt l-
r1{ .),
es decir, aquellasa las cualesse está obligado a rener en cuenra, porque genre birs cle an¿ílisis. =
L,snecesariopues,interrogarsesobrelos obstáculossociales,jarnáscompleta-
que cuenta quisiera que eilas fueran verdaderas;y también porque, participan-
do de la doxa, del sentido común, de la visión ordinaria -que es también la más t¡)enreausentes,inclusoen los camposcientíficosmás autónon1os,que se oPo-
extendida y la m:ís ampiiamente compartida- tienen lá mayoría consigo. Por nin a la instauracióndelnontoscientíficocomo criterio exclusivode evaluación
esta razón, incluso cuando son rotalmente contrarias a la lógica o la experien- .le lasprácticasy de los productos.La raízcomún de todos estosobstáculosa la
cia, estas"ideas-fuerza'pueden imponerseporque tienen para ellasla fuerza de ,,,.,r,r^o*í" científica y a la dominación exclusiva del principio científico ele
un grupo, y porque no son ni verdaderas ni incluso probables, sino plausib/ts cvaluacióno de jerarqui zaciónes el conjunr<¡de los factorescapacesde impedir
-en el sentido etimológico del término-, es decir adecuadaspaia recibir la ,:l jueg<.rdela libre concurrencií.cienttfca entrePures'esdecir, entre detentadores
dcl clominio rrríninrode los logroscolectiv<ls de la cienciasociai,que esla condi-
aprobación y el aplauso de la mayoría.r
ción de entradaen los del'ratespropiamentecientíficos;o, dicho de otro nrodo,
c:lpaces la enrradaen el juego, seacomo jugadores,seacorno árbi-
de ia,¿o¡ecer
rros (a través,por ejemplo, de cier¡acrírica periodística)de intrusosdesprovis-
:us de esracompetenciae inclinadosa inrroducir norffrasde producción y de
l. La ambigüedad de cienx discusionescon pretensión científica, sosrenidasen público, aparecc rialuación extrínsecas,como lasdel senticlocomún o del "[':ue¡rsentido"'
súbitamenre cuando el público saledel rol pasivo que le esasignadohabirualmenre, para manifestar I-os conflicrosque rienen lugar en las cienciassocialcs(y qt. se invoc¡tl a
su aprobación a !.¡nou otro de los oradores con aplausosmás o menos sosrenidos;y la violencia de yrcespara rechazarles el statusde ciencias)pueden así pertenecera dcs cate-
!a inrusión tiránica -en el sentido de Pasca!-de los profanos esrallacuando uno de los parricipanres
g,rríasrotalmente diferentes.En ia primera, la de los conflictos propiamente
recurre al procedimiento retó¡ico que Schopenhauer considerabacomo típicamenre deslealy que
consiste en dirigir a su adversario un argumento al cual este último no podría responder sino
rienríficos,aquellosque se han apropiado de los logros colectivosde su cien-
empleando argumenlos incomprensib!es para los espectadores. cia se oponen entie sí según la lógica constitutiva de la problemáticay de la

t15
'Ihl
metodologíadirectamentesurgidasde esta herencianqt. '":t une hastaen sus cunsensusde una ortodoxia académica. ortodoxia es la que han rtentado
luchas por conservarlao superarla (sin duda, no so-,i:lti)ás tan fieles a la establecerlos sociólogosamericanosen los años sesentay' en cierta medida, los
herencia,sino en las rupturas acumulativas con la herelcia cuya posibilidad y defensoresfrancesesde la "Nueva Hisrorii" apoyándoseen Poderes ProPia-
necesidadestán inscritas en la herencia misma); se enfrcl;ilv en una discusión rnente sociales-y, en primer luga¡ en las instituciones de enseñanza-,en los
reglada poniendo en práctica, a propósito de probler: it-::as rigurosamenrc lugaresde publicación oficiales,en las asociacionesprofesionaiese incluso en el
explicitadar, conceptos claramente recortados y ménári:' de verificación sin accesoa los recursosnecesariosPara la investigaciónemPírica'
equlvocos. En la segunda categoría, la de los conflictos írt iíticos con dimen- Si hay que cuidarsede ver allí el principio determinantede constr¡-tccio-
de
sión científica, coltflictos que son sin duda socialmen¡e ¡nevitabies y científi- nes seme¡antes,rlo es menos cierto que el indifrrenrismo ético y político
camente analizables,estos Productores científicamenle armados están indu- un conserv.adurismode buena sociedad -que puede vivirse. como desaPego
,.objetivo" del "observador imparcial" o como "neutralidad axiológica"-, no
cidos a enffentarse a Productores que, Por razones diversas como los efectos
de la edad, las insuficienciasde la formación o la ignorancia de las exigencias puede sino reconocerseo cumPlirse en construccionesteóricaso metodológicas
mfnimas del oficio de investigador,están desprovisto: de los instrumentos q,r. la respetabilidad de una evocación blandamente consensualdel
"..g,rr"n
de producción, y se encuentran,al mismo tienrpo' más próxtmos
esr,ecíficos rnundo social, ¡ más generalmente, en roda forma de discurso que, Por su
a las expectativas de los profanos y más capaces de saris{acerles(tal es ei formalismo, pt:eda habiar del mundo social, en la lógica de la denegación,
fu n d a m ent ode la c o m p l i c i d a d q u e s e e i ta b l e c ee sP ontáncarnenteentre ci er- como si no hablara,o que, por su posirivismo,tienda a ionformarse con un
tos investigadores declinantes, desclasados o desposeídr.ts y ciertos periodis- registro sin problemas del dato tal como se ofrece'3
tas que, ignorantes de las problemáticas específicas,reducen las diferencias fuí, los sociólogosamericanoshan creído encontrar' en las teoríasde Parsons
de competencia a diferencias de opinión -política, religiosa, etc.-' adecua- o de Merton y en la metodología de Lazarsfeld,el cuerpo de doctrina unificada
das para relativizarse mutuamente.2 adecuadapara fundar la cotnmunisdoctr¡nnnopinio de un cuerPo bien ordenado
i! de "profesionales"que imitan lo que se creía ia característicamás importante de
una ciencia digna de este nombre: el consensode la "comunidad científica''a
Consenso político y conllicto científico

Dentro del confiicro propiamente científico no hay nada -ningún objeto' más imponantes
3. Sepodría mostrar que la economía neo-clásicapresentaalgunasde lascaracterísdcas
ninguna teoría,ningún hecho- que una prohibición socialpueda excluir de la de una ortodoxia que imita la cienrificidad (con la eficacia totalmente especialque le confiere la
indiscu¡idos
discusión,pero no hay arma exclusivamentesocial, ni argumento de autori- formalización matemárica), como, por ejemplo, la aceptación tácita de P¡esuPuestos
sobre puntos rotalmenre Fundamentales(en materia de teoría de la acción, por ejemplo).
dad, ni incluso poder simplemente universitario, que estéexcluido, de derecho
este
4. La teo¡ía deLx 2rofessionsral como se expresa,por ejemplo, en el artículo redactado bajo
y de hecho, del universo de los medios susceptiblesde ser Puestosen práctica sciences (ed' de 1968, 536-146)
tirulo por Parsonspara The International Enrycloped\ofsocial Pp.
en la discusión. De ello se deriva que nada esrá más alejado -a pesar de las 'profesionales"que pretenden ser los
puede ser leída como una profesión de fe profesional de estos
apariencias-de esta suerte de guerra de todos contra todos, pero rigurosamen- soci ól ogosdel establi s hment:c z rac teri z ados ,s egúnP ars ons ,pors uforrnac i óni ntel ec tual y poruna
te reglada,en ia elección de las armas y de los golpes legítinros, que el tuorbittg autoridad que descansamás sobre la competencia del experto que sobre ei poder político,
los

profesionalesesránlibres de toda de¡:,endenciaresPectoal Estado y a la burocracia gubernamental


a' esre
y están guiados por la única preocupación del common gool. A eStaco.l) tittirT-orienration,
2. Los d o s p r i n c i p i o s d e difcr e n cia ció nn o so n co m p le ta m e n tei ndependi entes:l as di sposi ci ones "d"si.rr".és" y a este "altruismo" adecuadospara ascgurarleslas más altas recomPensasmateriales
vuelve a
conlormisras que inclinan a aceptar al mundo tal cual es, o las disposicion¿sreaciaso rebcldesque ysimbólicas, que mencionan la rnavor parte de las definiciones de las profesiones,se los
llev an a r e s i s t i r a l a s c o a ccio n e sso cia le s,in te r n a s y so b r e todo exte¡n.l s,Y a romper con l l i encontrar también en la representaciónmertoníana dcl universo científico' En resumen, ia noción

ev iden c i a sm á s a m p l i a m e n te co m p a r tid a s e n e l ca m p o y fu era del camP o, no están si n duda ha dado lugar a inni¡merables come ntarios
preconstruiciad eprofession,ready made cooccptualque
prícrica a le
arribui d a sa l ¡ z a r e n r r el o s o cu p a n te sd e la s.lifcr e n te sp o sicio n esen cl campov cntre l ¡.straycctori :. y críticas, es menos una descripción de una realiciad social que una contribución

que han tomado par" acceder rllí.. construcción como ?/rfestion y profession científica'

116 tt7
Píerre Bour¡lieu
La causa de la ciencia. Cómo Ia historia social de las ciencias sociales puede serutr..

De hecho, la adhesiónráciraai conjunro de los presupuesros i'discutidos so-


especialmenrebajo el efecto del incremento considerabledel núme¡o de los
bre los cualesdescansala auroridad de los cuerpos de doctores, teólogos
o que no están total-
juristas,pero también -por una pa¡re- historiadores(especialmenre que las practicany las estudian,han tenido consecuencias
cie la li¡e_ desprovistas de ambigüedad:ó ios efecros liberadoresque han podido
raru¡a'del arre y de la filosofíaque casi no estánpredispuesros menre
a historizarsu visión concurrentesy
corpus,es decir, su fabricación),se opone diametraimenreal acue¡do ejercerla aparición de una pluralidad de principios de
expiícrto
sc-,brelas aDuesrasy ios objetos de desacuerdoy sobre los procederes ia intensificacióncorrelativade la concurrenciapropiamente científica' han
y los
procedirnientossusceptibiesde ser puesrosen práctica parazanjarlos reni do como cont r apar t ida, en los dif er ent es cam pos nacionales, ei
diferendos,
que esráen el principio dei funcionamienrode ros camposcienríficos. reforzamiento de los factores de heteronomía ligados al incremento de la
dispersiónde los "especialistas",poco favorablea ia discusión regladaentre
En efecto, el worhing c,ntentur de una crrodoxia fundada en
la complici-
dad social de ios doctores ¡iende a ejercer una censurítsociaí (disfrazad,a pares,y, correiativamente,de la vulnerabilidada las presicnes,a las solicita-
de cionesy a las exhortacionesexrernasque, como en todos los campos,es Par-
control científico),ya seade manera totalmentedirecra,a través
de las prohi-
biciones,a vecesexplícitas,en mareria de publicación y de ricularmentefuerre enrre los más desposeídosde capital específico.7
ciracrón, ya sea
En iesumen, si el sistema artificialmente unificado .,' jerarquizado de los
más secreramente,a través de los procedimientosde reciutamiento
que, al añoscincuena ha cedido el iugar a un sistema"policéntrico"' como dice Becker,
privilegiar-por el funcionamienro en red y ei robbying-los
c¡iteriossociales y más difícil de controiar, por fragmenndo y diversificado,no es menos cierto
más o menos maquiiiadoscomo criterios científicoso académicos, !
ticnden a :
5 que' ran.o en los Esudos Unidos como en Francia,el frrncionamientodel camPo
reservarel no¡nb¡amiento en posicionesfavorablespara la
producción, ¡ por {
ello, para la competenciacientífica,a cierrascaregorías
de agentesdefinídos
en términos puramenre sociales,titulares de ciertos dipiomas
presrigiosos,
ocupantesde ciertasposicionessociaiesen la enseñanzao la 6. Howard S. Bccker, en un capítulo titulado "Vhat's Happening to Sociology?" de su libro
invesrigación,o,
DoingThings Tbgether,Evanston, Northwesrern universiry Press, 1986, p. 209, observa que el
a la inversa, a excluir a Driori cierras categorías,mujeres, jóvenes
o errranle- número de sociólogosempadronados por la American Sociologicalfusociation ha pasadode 2361r
ros, por ejemplo.s
en 1910 e 15567 en 1978. También en Francia, habría pasado, en el mismo período, de 200 a
Pero, aunque sin duda han conrribuido al hundimienro ! 000 aproximadamente (La fuociación de los sociólogos,que adopta una definición muy amplia,
de la ortodoxia.
Ia s tra ns f or m ac ione s p ro fu n d a s q u e h a n c o n o c ido l as recuenta 1678, públicos o privados). Para ser más preciso, en1949, el CNRS no contaba sino
ci enci as soci al es.
dieciocbosociólogos;en 1967 hal>ía 112 en el CNRS, i35 en la Ecole pratique des hautes études
y 290 en los centros de investigación privados, por lo tanto, en total, mfu de 500; en 1980' se
contaban 261 soci ól o gosmi c mbros s ól o del C Ñ R S .
5. Por no poder dar ejemplos romados del campo francésde hoy (los
quc en nombre del liberalismo
se entregan a prácricas dignas de los regímerresmás autorita¡ios, 7. Los cambios morfológicos que resulran de la-aboiición del numcrut chu*s de hecho o de
serían sin duda los p'meros en
dc nunc ia r c o m o ' t o t a l i t a r i a" to d a d e n u n cia d e e s¡ a sp r á ctica s) , derecho, que protege un cuerpo garantiz andola rdrezd de sus miembros, están muy lrecuentemente
seríanecesari <¡ ci tar aq,í todo el
pasajedel famoso discurso sobre "la vocación el oficio en el origen <iirecto de las rransformaci<¡nesde los campos de producción cultural; ello.sson, en
v de sabio" donde Max .J/eber planrea la
cuesrión, habitualmente reservadaa las conversaciones todo caso, la mediación especlfica a través de la cual se ejercen los efectos de los cambios
priva<ias,de saberpor <¡uélas rrniversidades
y las instituciones de investigación no seleccio¡an cconómicos y sociales.Además, la form¿ y la intensidad que rwisten y los efectos que producen
siempre a ios mejores: ,p".r' la tentación de
imputai a Personas'en es¡e,casoa los "pequeños personajes "l dependcn, en sl mismos, del esrado de la estructura del campo en el cual sobrevienen. Por esta
de las facuhadesy de los ministerios-,
la respcnsabilidac del hecho de que "tan gran número razón, es necesario rechazar,como un ejemplo tlpico del error del cortocircuito, la explicación
de mediocres;u"gu.n inconrestat¡iemenre
un rol en las rrniversidades"'invita a buscar las ¡az-.nes que.pone los cambios ocurridos en un carnpo especializadocomo el de la sociologfa directamente
dc es¡adod. .or.l "en las leycs mismas de 'The
la ac c ión c o n c c r i a d a d c l o s h o m b r e s", r a s q u e , e n cn relación con cambios globales,como la prosperidad que ha seguido a la guerra (N' \7iley'
r a e le cció nd e l os papas o de ros presi denres
am eric an o s ,c o n d u c e r ¡c a s isie m p r ea se le ccio n a r"e r Currenr Inrerregnun-rin American Sociology", Socia! Re¡earch,Yol' 52, l, invierno de 1985, pp'
ca n d id a ¡ on ú mero cro.s o tres,,y concl uyc, nc:
s in irorf a : " E s t o r i c l o c u a l e s n cce sa r io a .so m b r a r se ür-2a7, en particuiar p. t83); o, incluso, los cambios cons¡atadosen sociología y en historia,
n c co n st i tuven ri oo humor
frec uenre m e n t ce n e s r a sc o n d icio n cs,p e r o a n r e sb ie n ( ...) "rror",
que i l egan j ranto cn Francia c6mo en Alemania, cn los años setent¿, con las transformaciones del
se co n s¡ara,a pesarde todo, un númcro
también considerable dc nombramientos justificad.s". f político en rorno al '68, rransfo¡maciones que esrán ligadasellas mismas a cambios merrfológicol
M. vebe¡ Le sauant et b politique, parís, a
o autori'¡¡d¡¡
4
.n 1o...*po, de producción especiaiizadosy a innovacioncs intelectua.lcsfavorccidas
P ion' 195 9 ' p p ' 6 6 - 6 7 ( r r a d. e sp a ñ o la :E/ p o r ítico t
I e r cír :ttfco , Madri d, A i i anza, IgB g). por los efectos de esos cambios'
I

d alidad de los principios de jerarquizaciónque, como se ha podido demos-
pcrmanecetodavía más próximo al de un campo artístico en vías de emancipa-
rrar en el caso de Francia, mantiene a los investigadoresmás reconocidos
ción con relación a las tutelas académicas,en el cual los adversariospuederr
científicamente -€n el país mismo ¡ sobre todo, en el extranjero- aPartados
llegar hasa a rechazarsemutuamente el de¡echode existir, que al de un campo
de las posicionesde poder sobre la reproducción del cuerPo de los docentes
científico avanzado.sEllo toda vez que, al menos en Francia, siguen imponién-
y de los investigadoresy, al mismo tiempo, sobre el porvenir del campo
dose a los especialistas de las cienciassociales(a travésespecialmentede la
científico y de su autonomía?' ¿Cuálesson las fuerzasy los mecanismos.so-
demanda de "maestros de pensamiento") el modelo litera¡io del "creador" sin-
ciales sobre los cuales podrían apoyarseestrategiascientíficas, individuales y
gular y original, liberado de toda atadura de grupo o de escuela,como a5í
sobre todo colectivas,que apunten a instaurar realmenreentre los investiga-
también las normas de lo chic y de la renovación permanente en la continui-
dores mejor prov'istosde los instrumentos más universalesdel momento' la
dad, que son las del campo de la alta costuray de la moda.
coitfrontaciónt¿niuersal,que es la condición del progreso de'lo universal?
Por la debilidad de los mecanismoscapacesde irnponer a los participantet
Sin duda, es de una verdadera internacionalización del campo de las cien-
un mínimo de reconocimientornutuo o, lo que viene a ser io mismo, la obe-
cias socialesque uno podría esperarla contribución más eñcaz al progreso de
diencia a suertes de leyes de la guerra, la confrontación entre las cliferentes
ia autonomía científica. En efecto, las presionesde la demanda o de la coac-
tradiciones toma todavía muy frecuentemente la forma de una guerra total
ción socialesse ejercensobre todo a la escalade la nación, a través de todas las
(Randall Collins habla de "uarc of meratbeories')donde todos los golpes están
solicitacionesy de todas las incitaciones materiales y simbólicas que se udli-
permitidos, ya se trate del golpe de desprecioque permite hacer la econornía
zan en ei seno del espacio nacionai: por el hecho de que muchos de los
de la discusión y de la refutación, o de los golpes de fuerza fundados sobre el
poderessociales(periodísticos,universitarios,políticos, etc.), que vienen a
recuÍso a poderessociales(como la supresiónde créditos o de puestos,la cen-
alterar o a contaminar la lucha cienrífica, no existen sino a escalade una
sura, la difamación, o el recurso a los poderesperiodísticos,etc.).
nación (la oposición principal que se observa en todos los campos acadérr'i'
co-científicos se estabieceentre los "nacionales", detentadoresdel poder so-
'':-.
bre la reproducción,y los "internacionales"),la mayor parte de las oposicio-
Los efectos ambiguos de la internacionalización
nes ficticias que dividen a los investigadoresse enraízan en divisiones locales
o en formas locales de las divisiones más generales.
¿Cuálesson, pues, los mecanismosque podrían contribuir a hacer que las E l campo de - las cienciassocialesha'sido siem pr e iut er nacional,per o,
relacionesde Fuerzacientíficaspuedan esrablecerse
sin ninguna intrusión de
sobre todo, para lo peor, y rararnentepara lo mejor. En primer luga¡ por-
las relacionesde fuerza sociales?¿Cómo rra.ba)arpara abolir o debilitar la
que, incluso en las cienciasmás puras, que conocen por ejemplo una con-
centración casi rnonopolística de las instanciasde publicación y de consa-
8. f.os sociólogoscuantitativistasevocaRcon orgullo su "revolución matemática" y su alto nivel de gración, el campo internacional puede ser el lugar de fenómenos de domi-
reiliz.aciónen mate ria de técnicasestadísticas,y engloban, a veces,en el desdén mismo, a todos los nación, hasta de formas específicasde imperialismo. Luego, Porque los in-
orros especialistas,simple minorfa no cuantirarivista tan irrisoria como absurda. Los sociólogos tercarnbios-y especialmentelos préstamos- se oPeran con Preferenciaso-
marxistas, con la seguridad que les confiere el hecho de no ser más dejados de lado, rechezana| bre la basede homoloqías estructuralesentre las posicionesocupadasen los
"positivismo" como el reflejo de una época histórica superada. los sociólogos his-tóricos(que
diferentescampos .".ion"l.r, es decir, ."ri .t.i,rri,ramente entre los domi-
pueden ser también marxistas) abogan por la unicidad de las configuraciones históricas y la
necesidadde ar¡aigartodo objeto a su verdaderolugar en secuencias
históricasto¡almente específicas.
nanteso entre los dominadcs (con efectosanálogosde distorsión y de mal-
Los etnomecodólogos rechazanla sociologíadel "macrocosrno" como una habladuría desprovista entendi do en e l int er ior de est os dos sub- espacios)Todo
. lleva a Pensar
de toda justificación; una especie pariicular de estructuralismo fenomenológico, humanista y incluso, que los obstáculos socialesal libre intercambiogenerrtlizadoestán
parisiense,y otras'posiciones" demuestran, con ñrerza, refinamientos filosóficos (y un" buen"
dosis de desprecio por sus adversariosfilosóficamente iletrados) que sólo su método permite una a
T
apreh c n s i ó n a d e c u ,d a d e l m u n d o so cia l. R. Co llin s, "ls l9 B0s S oci ol ogy i n the D ol drums?",
t 9. P.Bourdieu,
HomoAcademicus, Ed.De Minuit, 1988.
París,
Am eri c a n J o u r n a l o f S o c io lo g l,r ' o l.9 I,6 ,m a ,cd e I9 8 6 , p p . 1336-|355,enparti cr.rl ar,p. 134l . E

121
120
JE
E
PierreBourriieu *
T
La causa rle la cie¡tcia. Cótno la ltistoria so' rle las cie¡tciassocialespuede seruir...
*
'*
si¡r duda reforzadosbajo el efbcto de una sueite de institucionalizaciónde { con rclación a un espaciocle tomas cic ¡rosicióndeterminadoserán reciSidos
las divisiones de base política.
F
con rcferclrciaa catcgoríisrle percepciónconsrruidascon relacióna un espacio
E n los años c i n c u e n ta , c i e rto s s o c i ó i o gostemporal mente domi nantes nlu)' difer¡:nte,estructuradopor otros nombrespropios,otros concePtosesco-
podían consriruir una inrernacional invisible, fundada sobre afinidadesque laresen -ir,,,o, o los mismos,pero invcstidosde significaciones diferentes,etc.).
deben más aIa razónsocial que ala razóninteiectual )/ que sirven de basea De el l o s e de¡ iva que, leios de cont r i'buir aut om át icam ent eal pr ogr eso
r¡na ortodoxia; hoy, bajo el efecro del contragoiPede ios movimienios estu- h¡ci a un grado de univer salización super ior ,la evolucióndel cr r npo int er na-
diantiles de fines de los años sesentay del traumatismo colectivo que han cional de las ciencias socialcshacia una unidad mayor -a travésespecialn-ren-
infligido, de Berkeley a Berlín, a toda una generación de profesores,las de las luchesque hay en él- puede cont r ibuir
rc de l a i nte r nacioualización
clnex;onethasta allí informaies se han transformado en redes organizadas solamentea la difusión a escalauniversal(para evitar el término Particuiar-
alrededor de fundaciones, de ievistas,de asociaciones,y el conservaduris- mente vicioso de "rnundialización")de parejasde oposición ficticias'profun-
mo de buena sociedadde ios guardianesde ia ortodoxia ha cedido lugar a .Jamentefunestaspara el piogresode Ia cie¡rcia:entre los métodos cuantlia-
las profesionesde fe exPlícitasy a los manifiestos ulva de una verdadera rivos y los métodos euaii¡ativos,enr¡e lo macro y lo micro, entre las aproxi-
int er nac ional r e a c c i o n a ri a .' u maci onesesir ucf ur alesy las apr oxim acioneshist ór icas,ent r e ias visiones
Lo que esnuevo,esque también existe,pero en estadovirtual y desorganiza- iiermenéuticaso internalistas-el "texto"- y las visionesexiernalistas -el "con-
do, una internacional de ios outsiders,formada Por todos los que tienen en icxto"-, en¡re la visión objetivista,frecuentementeasocia'laal uso de la esra-
común su marginalidad con relación a la corriente dominante, como ios miem- dísri ca,y l a visión subjet ivist a,int er accionist ao et nom et odológica;o m ás
Estos "marginaies",
bros de los movimientos de las ¡niiroríasétnicaso sexuales. prccisamente,entre un estructu¡aiismoobjetivista-sujetado a asir estructu-
que son frecuentementerecién llegados,introducen en el campo disposiciones r3s obietivas,a través de las técnicascuantitativasmás o rnenossofisticadas
subversivasy críticas que, aunque no cstén siempre suficientemente criticadas ',pttlt aru!¡tsis,netuork altabJsis,crc.)- 1' todrs las f.rrmas dc construc¡ivisrr,o
científicamenre,los inclinan a romper con ias rutinas del establishme-nt démi' que, desdeBloomeña Garfinkel pasandopor Cioffman" han intentado asir nuc-
^c
co; en su lucha conrra la ortodoxia, o lo que la ha reernplazado, aquí o allá, vamente ia representaciónque los agentesse hacen del mundo social y la c<¡n-
toman prestadofrecuen¡emen[earmasa movimientos extranjeros,contribuyen- tribución que eilos aportan a su construcción;sin hablar de la oposición, que
do así a la internacionalizacióndel campo de las cienciassociales;rrPerolos toma una forma especialmentedramática en los Esados Unidos, enfre una
inreresesligadosa la posición en el camPo de recepciónconstituyen el origen de "empiria" frecuenrernentemicrofrénicay recortadade las interrogacionesteóri-
distorsionesen la seleccióny la percepcióndel Préstamo,él mismo estructurado cas fundamentales,y una "teoría" éoncebida como una especialidadaPe'fiei
según caregoríasde percepción y cie apreciación asociadasa una tradición reducida, la mayoría de las veces, r'rn .o,r,.ntario comi;ilatorio de aut(;res
"
nacional ¡ por ello, con frecuencia totalmente inadecuadas(por el hecho de canónicoso a trend re?ortsescolaresde trabajos mal leídos y mal digeridos.
que las obras <-irculanindependientemente de su contexto; trabajos concebidos Si las instancias internacio¡ralesfueran verdaderamcnteel instrumento de
racionalizacióncientífica que podrían y deberían ser, deberían favorecerla
conducción de una investigacióninternacional(al menos en su objetb) solrre
(i nvi taci ones, i nformes,
1 0 . E s r a s r e d e s co n stir u ye n la b a se d e in te r ca m b ios de servi ci os las determinacionessociales(sexo,edad, origen sociai,carreraescolai'status
subvenciones) que hacen, por ejemplo, que el recurso ajueces inrernacionaies, especialmenteen
universitario,competencia técnica específica,etc.) de las "elecciones"entre
los procedimienros de cooptación, no sea siempre una garantía de universalidad.
lc,sdos términos de las diferentesoposiciones"teóricas"y "metodo!ógicas",
I l . D e m a n e r a g e n e r a l, la s im p o r ta cio n e s p r o p o r cio nan i as rnej ores arm¿s en l os confl i ctos
que introduceti en la población de los investigadoresdivisionestotalmentc
internos de los campos nacionalcs, especialmente cuando se trata de desacreditaruna ¡:osición
establecidao de acrediraruna nueva posición y de acelerarel procesosicmpre difícil de acumulación
ficticias,desdeun punto de vis¡a científico.[,lla mostraría,sin ninguna duda
inicial, es decir, de subvertir la jcrarquía social en vigor y de imponer nuevas levcs de formación de (no arriesgonada fcrrmulandoesta hipótesisaParentcn.lentc arriesgada),qu"
ios precios (se sabe, por ejemplo, el uso que los 'iosmopolitas" realeso suPuestospueden hace¡ ntuchasde estasoposicionesno tienen otro ft¡ndamentoque <iivisioncssocia-
e n l a s p o l é m i c a s ,de la id e a d e l "r e tr a so "n a cio n a l) . que expresanellas nlismas,
lcs cn el seno del campo de las cienciassclciales,
, p o s i ci onesexternas.P ero tcngo
b ri o u na f or m ¿ m á s o me n o s re fra c ta ri a o capaz,sobre rodo, de dar los medios para comprender,entre orras cosas,los

co n cienc ia de no r o m a r ta m p o c o u n g ra n ri e sgo vati ci nando que


tengo límites que los determinantessocialesde las disposicionesmiiitantes imponen
muy pocas posibilidadesde ser comprendido por los responsablesde estas a la crítica y a la acción militantes (frecuentementereducidas a simples inver-
instancias:¿Por qué se inquietarían en dar funciones realesa instanciasque sionesde las tomas de posición dominantes y, por este hecho, muy f;íciimente
les parecen suficientemenrejusrificadaspor el hecho de justificarlos en su como lo atestiguanrantastrayectoriasbiográficas).12
reversibles,
pero, sobre ro do, no hay que ocukar se que las disposicionesr eaciaso
e xi stenc ia?No obs ta n te , s e p u e d e e s F e ra rra z o nabl ementeque un j oven
investigador encolerizadose apoderaraun día del proyecto que hiciera re- rebeldes,incluso revolucionarias,que ciertos investigadoresimportan en el
gresara la tierra, en la Iógica de las pasionesy de los interesesasociadosa campo, y de las cuales se podría creer que acarrean inevitablemente ruPtirras
l a s d i f er ent es pos ic i o n e se n e l c a mP o , a l a s to m as de posi ci ón l l amadas críticas con la ttnxa y la ortodoxia, pueden también favorecer la sumisión a
"teóricas" o "episte¡nológicas"sobre las grandesalternati';asdel momento, o<hortacioneso a coaccionesextefnas,entre ias cualeslas consignaspolíticas
en las cualeslos investigadoresproyectan,bajo una forma directa o inverti- no son sino las más visibles.No pueden engendrarlas rupturas verdaderasde
da -c<¡mo los hombres en su Dios, según Feuerbach- las carenciasligadas una reuoluciónespecífcasino cuando se asocian al dominio de los logros his-
tóricos del campo (en un camPo científico múy los revolucionarios
a su finitud científica. ^vanzado,
Pero lo que hace.difícil (y realmente;rriesgada) la crítica de estasparejas son necesariamente capiralistasespecíficos):la concienciay el conocimiento
sociales,maquilladas como parejasepistemológicas,es el hecho de que, con- de las posibilidadesy de las imposibilidades inscritas en el espacio de los
sideradasdesde el punto de vista del principio de diferenciación social, los posibles,hacen que esteespacioactúe,a lavez, como sistemade coaccionesy
dos rérminos (macro/micro, por ejemplo) están lejos de ubicarse siempre de censurasque obliga a sublimar la pulsión subversivaen nrPtura científica,
sobre el mismo plano, y cieque uno de ellosse sitúa siempre más cercade la y como matriz de todas las soluciones suscePtiblesde ser consideradascomo
causa de los dominados (socialmentey también, basrante frecuentemente, cienríficas en un momento dado del tiempo, y de aquellas solamente.
, en e l c a mp o (a tra v é se s p e c i el menre
ci e n tí f ic am ent e) de l as característi cas
socialesde sus defensores),y también, aunque ello sea mucho más difícil de
juzgar,fuera del campo. De suerreque la opción propiamente científica de Por una "Realpoliük" científica
recusar,en su principio mismo, la alternarivaque los opone, puede parecer
inspirarseen una suerte de indiferentismo conservador.Queda que nada es Así, la puesraen cuesrión de las orrodoxiasy de todos los principios de
más ccntrario al progreso de una ciencia social autónoma que la tentaciórl visión y de división centralestiene el mérito indiscutible de destruir el con-
del populismo: los que creen "servir la causa"de los dominados -es decir, en sensoficticio que aniquila la discusión,pero puede conducir a una división
la acrualidad, más bien en los EsradosUnidos, las causasde las minorías de campos antagonistas,cerradossobre la convicción metateórica de la supe-
selj.ualeso étnicas, o en Francia, en los años setenta, la "causa del pueblo"-, ricridad absoiurade su visión, a la cual uno no puede resignarse.Es necesa-
abdicando las exigenciascientíficasen nom'orea vecesde su carácterelitista, rio, pues, trabajarpara la consirucciónde instanciascaPacesde ccntrariar las
o , m ás ingenuam e n te ,d e s u l a z o c o n l o s c o m p romi sosconservadores, no
sirven verdaderamentea las causasque ellos creen defender y están de acuer-
12. Es notable que Foucauh que, al menos en los Estados Uniros, ha devenido el Santo Patrono,
do, al menos pcr u,-. Darre-€n todo casola única que incumbe a un inves-
¡i¡ualmente invocado (más que el maestro de pensamiento), de todos los movimicntos subversivos,
tigador-, con ia causd¿e la ciencia.
seasometido a ral reducción por parte de los predicadoresde la restauración(cf' James Mlllet, The
La reduación a lo "noiítico", que arrasrrala ignoranciade la lógica específica Passionof Michel Foucault, New York, Simon and Schuster, 1993;y ia crítica que hace Didier
de los camposcien¡íficos,implica un renunciamiento,por no decir una dimi- Ertl¿on,Michel Foucaultet sescontemporains,París,Favard. 1994, pp. 22-30) . Pero reducicndo todo
sión: reducir el investigadoral rol de sim,.lemilitante,sin otros fines ni medios el pensami enrode F ouc aul t a s u homos ex ual i dad,és tosno hac en s i no i nv eni r l a pos i c i ón de l os

que los de un político ordinario, es anularlo como científico c::Pazde poner las tj
que pretenden canonizarlo porque era homosexual (cf, David Halperin , S¿int Fouuult- 7it¡oF^¡sevs
in Gay Hagiographl, Oxford, Oxford Universiry Press, 1995).
armas irreemplaz-ables de la ciencia al servicio de los objetivos perseguidos;
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Pierre Bourdieu ff Lacausadela ciencia.Cónroln historiasocialdelascíencias puedeseruir..,
sociales
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te n d enc iasa la f is i ó n a n ó m i c a i n s c ¡i ta se n l a pl ural i dad de l os modos de t fundado sobre el reconocimiento crf-


racional, al menos un tuorking dissensus
&:
pensamiento,favoreciendouna confrontaciónde los puntos de vista coloca- rico de las ccnpatibilidades y de las incompatibilidadescientíficamenre(y
4,
no socialmente)establecidas. Este espaciode juego es el iugar de la libenad
da bajo el signo de la reflexividad. Un punto de visra que se percibe como tal,
e s d ec ir c om o v is t a to m a d a a p a rri r d e u n p u nto, de una posi ci ón en un €-
É que la ciencia social puede darse aplicándoseresueltamentea conocer las
campo, está en condicionesde superarsu parricularidad:especiaimenreen-
á determinacionessocialesque pesansobre su funcionamiento, y esforzándose
t¡ando en una confrontación de las dife¡enciasde visión funciadassobre la i en instituir los procederestécnicosy los procedimientossocialesque permi-
a ten trabajar eficazmente, es decir, coleüiuamenteP^re dominarlos'
concienciade los determinantessocialesde estasdiferencias. +
¡
Pero, más que de una predicaciónepistemológica,incluso armada de una
í*
sociologíareflexi.¡ade los campos de producción, es de una transformación
de la organizaciónsocialde la producción y de Ia circulacióncientíficasy, en fi
particular, de las formas de inte¡cambio en y por las cuales se cumple el
g,
con¡rol lógico, que se puede esperarun progreso real de la razón científica en :
las ciencias sociales.Aquí, puede intervenir una Realpolitih de Ia razón, arma-
da del conocimiento racional de los mecanismossocialesque esrán en mar-
cha en el campo de ias ciencias sociales,tanro a escalanacional cuanto a
escalainternacional.
Semejantepolítica puede darse.specialmenrepor objerivo reforzar rodos
los mecanismos que contribuyen a unificar ei campo científico mundial, fa-
vo re c iendo la c ir c u i a c i ó n c i e n rífi c a , c o n rra rresrar el i mperi o de l os
imperialismos teóricrs o metodológicos (o simplemenre lingüísticos), y com-
batir, por un recurso sistemáticoal método compararivo (¡ en particular,
por una historia comparadade las historias nacionalesde las disciplinas)la
influencia de las tradiciones nacionaleso nacionalistas,retraducidas,mu)r'
frecuentemente, en las divisiones en especialidadesy en tradiciones teóricas
o metodológicas, o en las problemáricas impuestas por las particularidadeso
Ios particularismosde un mundo social necesariamente provincial.
No existen, sin duda, por más que piense en ello Habermas, universales
transhistóricos de la comunicación; pero exisren cierramenre formas social-
mente constituidas de comunicación que favorecen la producción de lo uni-
versal. La lógica está inscrita en una relación sociai cie discusión reglada,
fundada sobre un''tópico y una dialéctica.Los lugares (topoi) son una mani-
festación visible de la comunidad de problernática, como acuerdo sobre los
terrenosde desacuerdoque es indispensablepara discurir (en lugar de man-
tener monólogos paralelos).Tál espaciode juego es el que se rrara de consri-
tuir, no sobre la base de prescripcioneso de proscripcionesrnorales, sino
creando las condiciones socialesde una confronración racional que apunra a
instaurara escalainternaciona!,no el utorhingconsensus
de una ortodoxia sosteni-
da por la complicidad en interesesde pode¡ sino una común axiomárica
.::
A Losdoxósofos*
'iW"
,=i:i

.I9",

J::

':é..:i_-.

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i "Dígo que opinar (doxazein)eshablar (legein),y la opinión (doxa) un dis-


cursoexplicitamentehabladn(logon eirémenon)". Platón, Teerero,190 a.

..i€i 'Algunos dicen, hablando de los asuntos del F.stado,que esasson cosasmuy
'1:"complicadas y que es necesario ser un especialistapara comprenderlas. Usred,
t
': ¿o*i totalmenre de acuerdo,más bien de acuerdo,más bien en desacuerdoo en
::.,,,. desacuerdocon estemodo de ver?Totalmente de acuerdo:37o/o;mzísbien
"tiot,rro
..' de acuerdo 35o/o;mds bien en desacuerdo:160/o;en absolutode acuerdo:l0%o;no
responde: 2o/o". Este cono diá1ogorno lleva ninguna de las marcaspor donde se
--.'-designan los objaosdz r(lexión, socialmentereconocidoscomo dignos de entrar en el
".
,..r juego de espejosque reflejan indefinidamenie objetos ya reflejados,que evocaroda
--= ;-.¿t.tótt letrada.Sin embargo,no deberíaescapar,a quienesestín familiarizadoscon
,,.'- loerístico, que las implicaciones de la pregunu aparecencompletamenre sólo si se
- : despejantodas las implicacionesde una respuestaque supone la ignorancia de esas
:
implicaciones:'obtener una respuesapoco menos que universal(98o/o),a una pre-
"'t gunta sobre la universalidadde Ia competenciapolítica, es establecerque no hav
- nadieque s€apolíticamenteincompetenteal punto de declararse incompetentepara
'':..:responder a una Pregunta sobre su competencia o su incompetencia para juzgar

.,.

_;;-', -Les doxosophes",


tu ,
Minuit, l, noviernbrede 1972, pp. 26-45.
:r-- '
-Extracto de una encuesta de la S.O.F.R.E.S. realizada con la cooperación del Institr¡to de
--T*l:
é esrudios políticos.

:$':-

',.-r: 129
.,. : ¡ J ,
s.
E
+
Pierre Bourdict¿ f
Lostloxósofos
*
la comperenciao la incompetencia política. Pero esto no es todo: uno puede
a
La "cienciapolítica" tal como se ha enseñadoy se enseñaen el instiruto de

preguntarsesi los que se declaranpara siempreincompetentes,para resPondefa estudiospolíticos no habría debido sobrevivir a la aparición de las récnicas
cualquierorra pregunrapclírica que no fueseia pregunta (¿política?)
de su com- mo,ler¡lasde ia investigaciónsociclógica.Pero eso seríano rener en cuenra la
petenciao de su incompetenciapolítica (72o/o),tienen la competenc;anecesaria subordinaciónal encargoque, combinada con la sumisión pr:sitivistaal dato
p.'" aprehenderlo que implica su confesiónde incompetencia.En efecto, una rai como,.e br inda, debí a exciuir r odas las cuesr iones y t oclos los
de dos: o eilos dicen la verdad y toda interrogaciónpolítica, incluso los sondeos cuestionamientoscontfarios a la convenienciapolítica, ai reducir a Lrn puro
de .oinión, no tienen objeto, por falta de quienesresPondany de respuestas; o rc-istro anticipado de votos, intenciones de voros o explicacior:esde voros,
que producen su resPuesta
bien ellos no dicen la verdad, y los especialistas Pro- una ci enci ad e la opinión pública así per f ecr am enr e
conf or m e a la opinión
duciendo la pregunta que ia produce debe¡íaninterrogarsesobre la naturalezay l .úbl i ca dc Ia ciencia.
la función de una comperenciapolítica, lógicay polírico-lógica,que les da poder De todos los cuesrionamicnrosde la "ciencia política", el más decisivoes
para producir una interrogacióntan bien hecha corno para constreñira los que aquel que las preguntasmisrnassuscirany que riene rodas las posibilidaces
ellos interrogan a negarseuna competenciaque pos€eily a dimitir en su benefi- <lcpasardcsapercibidoporque ¡oma la fc¡ma ce la atrsenci¿r de respuesca:ien
c:o. fuí, pidiendo expresamenreuna confesión de incompetenciaque sus pre- cfecto,ia parte de las personasinterrogadasque omiten responde¡ porque se

g,untasordinarias obtienen infaliblemenre,bajo la forma del silencio o del dis- estiman incomperenteso indiferenres,se acrecienta-y cadavez ¡nás fuerre-
de ia'tiencia política'muestran' por rrna inver-
curso arrancado,los especialistas mente a medida que se Cesciendeen la jerarquíade las condicio¡iessociales
¡,
sión típicamente socrática,que ellos,ignoranel principio de la eficaciade esas rle los niveles escolares-cuando se va de las cuestionesfbrmuladas de tal

preguntas:a saber,la inconciencia feliz de la incompetenciacientífica política- manera que los menos corrrperenres en el senrido más completo del rérmino
*es decir, los más desposeídos
menre comperenreque hace el doxósofo,como habría dicho Platón, especialism de sabery de poder políticos, por !o tanro, de
áela doxa, opinión y apariencia,sabioaparentey sabiode la apariencia,destina- di scurs. pol í t ico- , pueden allí r econocer se,con sus inr er esescor idianos
-que ellos no apféhenden, las más de las veces,como políticos-, hascala-s
do a dar las aparienciasde la cienciasobre un terreno donde las aParifnclasson
siemprepara la apariencia. preguntasformuladas en el lenguaje ofcial de la política, que hacen los buenos
Toda la "cienciapolítica" no ha consistidojamás sino en un cierto arte de temasdel concursode la E. N. A., los grandescursosde "Cienciaspolíticas",

devolvera Ia clasedirigente y a su personalpolítico su cienciaesPontáneade


la política, adornada de ias aparienciasde la ciencia. Las referenciasa los
aurores canónicos, Montesquieu, Pareto o Tocqueville, el uso casi jurídico de rcsultados dei sondeo de opinión, presentaqión de los adversarios,sorteo, prnyección del f;ln:,
prcguntas sobre el fi l m, erc .), l a os tentac i ón de l a equi dad l s onc o, i dc nri dad de l as pregunras
la historia más inmediata -la que enseñala lectura menos extracotidianade
¡l anteadas,i gual dad de l os ti empos i mparc i dos ,c tc .). P ri nc i pal res pons abl cc l c c s rac x hi bi c i ón rj e
los periódicosy que no sirve sino para pensarel acontecimientoen la lógica
i a cbi eti "'i dadpoli ri c ol ógi c a,el "ani mador" (anti guo al umno de "C i enc i aspol íti c as ",profes or dc
del precedente-, la neutralidad ostentatoria del tcno, del estilo y de las paia- crrnfcrenci ascn "C i enc i as pol íti c as ",c roni s r¿ de' i c i c nc i as po!íti c as " en el pc ri ódi c o La Monde,
bras, la símil-tecnicidaddel vocabulario,son otros tantos signosdestinadosa pei i odi sta po!íri co de di ferenresLi i ari osy res pons abl edc Ios s ondeos pol íti c .rs en el Ins ¡i ¡uro
llevar a la pclítica al orden de los objetosde conversacióndecente,y a sugerir lrancésde opinión pública) sc debe manifestarde todaslas manerás-aunque luera por h imp;rciencia

el desapegoala iez universitarioy mundano del comentaristailustrado, o a q!.l eoP onc a l os d es propós i tosde s us "i nv i tados "-, s r¡ v o!unrad de hac e¡ res perarl as regl x dc l a
cortcsíarroi íti cav, s obretodo, s u preoc upac i ónobs es i ' ' apor l a neurral i C ad("S c ñor C hi rac ,
manifesrar, en una suerte de alard¿ dc objetiuidad,el esfuerzodel observador v a que
has¡a ahora es us ¡c d qui en ha c omenz ado, c n l a s egunda partr, s c rá c i s eñor Marc hai s qui en
imparcial para mantenersea igual distanciade todos los ex¡remosy de todos
conriencc,para guc tca imparcíd". "I¡s ser'ialo,a unol ir orro gúe hcmos pasadc ya la miracl dcl
los extremismos,tan indecentescomo insensatos.l trcmpo'r' crrrnr-'us rc desti enen, uno y otro, c i erto número de c c s asquc dec i r..."J .
3. La cxi stcnci ad e "s i n-res pues ta",
c uy a frec uenc i a no s e rc par{ e por az x r s egún l as pregunaas
pianreadasy scgún las categoríasde individuos interrogados, pasa toralmcnrc dcsapcrcibida a
Z . I -n s " c a r a a c a r d ' r e le visa d o sco n stitu ycn e l id e a l r e a lizadode l a represenraci ónofi ci al del
menos que sea apreher:di da,a l a manc ra c l ec roral , c omo "apatía", de l a < ¡uc l a c i c nc i a dc [e
combare político como jucgo reglado: rodo cs pucsto cn práctica para manif-estarla sitnefila entre
cncontrar el pri nc i pi o y c l rc medi o dentro de l as propi edadesparri c ul arc sdc l os "apáti c os ".
las d o s p a r r e s , l a o r g an iza ci< inclcl csp a cio ,Ia ¡ itu e lize ció n'l cl i ntcrcembi o (ex¡rosi ci ónde l os
y las catcsorías l enguaj e pol íti co, sino t am bién par a sit uar seal nivel . cuasi- abst r acción
los rítulc¡sde los "artícr"rlosde foncio" de Le tVlondeo'I'e ligaro
ordina- donde se sitúa comúnmente el discursopolítico, tanto por la sintaxis de sus
del enrendimiento político de los prcluctores y de los co¡rsumidores
perfectamentc enunciadoscomo por las referenciasimplícitas que encierra;apto, más preci-
ri o s d e es asdif er enr e se s p e c i e sd e d i s c u rs o .E.s raci rcul aci ón
legítimo -dis- en el doble sentido, la pregunta "política" para fefe-
samenre,pefa reconocer,
circular de los esquemasy de ios temas del discurso político
de evi denci a rirla como tal y para sentirseen la obligaciónde respondera ella y de respon-
cu rso dom inanr e que s e d i s i m u l a c o mo ta l - y e i senti mi etrto
obietivascoinci- derle "políticamente", es decir, conforme a las normas de la cortesíapa/itica,
inrnediata que se observatodas las vecesque las estructuras
a poner el con palabras-y no con golpes, por ejemplo- y con palabraspolíticamenre
den perfectamentecon las estrucrufasinteriorizadas,contribuyen
como discurso ai puiidas y nc con paiabrotaspoiíticas,con esaspalabraspolíticamencegrose-
di..,.rrro "político"ay la definición implícita de la política
a un mund<., ras, que están admitidas, si acaso,en los mitines y las reurfones públicas,
abrigo de la inrerrogación,disponiendo a la adhesióninmediara
"actitud natural" o, si pero que esián excluidas, bajo pena de vulgaridad, de todos esos lugares
,o.iii .pr"h.ndido como mundo narural que define la
políticas más neutros -propiamente poiíticos porque son políticaniente neutros-, que los
se quiere, Ia d.oxa,y que frecuenrasecretamentelas opiniones
Institutos de ciencias políticas enseñana frecuentar.
para-dójicas.t
' sr' Toda preguntaencierrala demandaimplícita de que el que respondesepalo que
Esradefiniciónde la poiírica como discurso(y de una especieparticularJ
de opinión, dtr se le demanda. El interrogador y ei interrogado no confieren necesariamentela
encuentraencerradaen la intención, consLitutivade la encuesta
sobre opiniones ya enunciadas1" misma significación y la misma función a la pregunta; la interpreración de la
hacerenunciaropinionesy cleob,teneriuicios
de suyo- excluve. respuestano tiene ninguna posibilidad de seradecuadamientras no esténexplicitadas
no siendo jamás explíciramente fi:rmulado -Porque Pafeceir
<ielenguaje,ct la demanda inherente a la preguntay la representaciónque el interrogado se hace
de hecho,a los que no clerenranlos medios de tener esraespecie
él expresal'; de la preguntay de la respuestaque ella merece.En el casoparticula¡,estademanda
decir, más precisamente'de manrener con el lenguajey lo que
<iela recepcióndci tácita es una demanda de discu¡so,de explicitación,que excluyela posibilidad de
relacióncasiteóricaque es la condición de ia producción y
"interésgetreral"'6Al identi- una respuestapráctica.La demandapoliticológicaexigeimplícitamentesei tratada
discursode "interésgeneral"sobreiascuestionesde
neutralidadétic¡ como un objeto autónomo, un poco como se haría con un test lógico o con un
ficar ia neurralidadepistemológicade una interrogacióncon la
mejor de los casos'nO tema de diserración,al que sele concedela seriedadlúdica que no pertenecesino a
de su formulación, se olvida que preguntasque, en el
los e.jerciciosescolareso a los juegos de sociedady en los que uno aceptajugar
exigenotra cosaaparentemente que un "sí" o un "no" sedirigen de hecfio,Por urr
unr catcqorí'r seriamenteel juego de la seriedad,es decir, de tomar bastanteen serio una situa-
privilegio tácito, a individuos y a gruPos definidos menos Por
"políticarneiite ción evidentementeirreale imaginaria(si ustedtu'u'ieraun millón...) parahablarai
p".ti.uln, de opinión políricaque por la aptitud pararesponder
demanda un encuestacl'-' respectoin abstracto,es <Jecir,de un cierto modo, sin motivo. Este arte de la
unu pr.g,rrrra"pclítica':la interrogaciónpoliticológica
" "especiales" dei finaiidad sin fin, de hablar para no decir nada,de hablar para decir algo antesque
no soiamentepara desciFrary manipular los términos
"p,o nada, no esdesconocidopara lasclasespopulares;pero se adquierey s€empieaen
situacionesdonde conservauna filnción socialde primera importancia, a saber,de
afirmar y de reafirmar la exisrenciay ia unidad dei grupo en y por la comunicación;
ve cesque sca empl eadoconforme :' su
4. Sc s e ñ a l ¿ r áe l r é r m i n o po lítico e n tr e co m iila s to d a s la s
al contrario, es en las si¡uacionesneutras y neutraiizantesdel universo escolar
dc f inic i ó n d o m i n a n t e , e s d e cir , p o litico ló g ico '
'l donde los miembros de lasclasesprivilegiadasadquierenla disposicióndiser¡ativa
5. " Pdru-doxales',en el texto original (N del )'
6. Bas¡ ap e n s ¿ re n l a d e f l nició n q u e e l a n im a d o r d e la em ,sió n "Faceá l ace" da cl clci eba¡ep<.i l íi rco' directaa ningunasituaciónpráctica,de
que permirehablarsin ningunareferencia
c onf or m e a s u s d c s e o s : " No e s d e l r o d o ú til d e cir q u e e s u n < i cbatepol íti co' creo <1uesi ustcdc¡ haL:lara pesard¿ todocuando ei ienguajeestádespojadode toCaslasÍi-rncionesque
es t ánd c a c u c r < l ov, o y a c o r n e n za r p o r so licita r le s'a u n o I 4 o trL' y en pri mer l ugrr al scñ'r \1 cumpie en su uso práctico. Así, como lo observal'rerre Greco, ia pregunta "¿los
:t

Habib Declonclc, ya quc a él le toca comcnzar, que dcfinan st posiciórtgeneral,su interprer'ttit";


t amigosde sus amigos son sus amigos?"requiererespuestas que, aún idénticas,
y a continuación presentarán ejemp/osque scránclegidosen dos dominlc':'
leneral sol>reelproblcma puedendiferir radicalmenteen su principio, dependiendode que ellasseanel
.n prirr]., lugar la cducaci ,'tn en sentido amp/io y luego la inforrnación igualmcnte en s?\lti'!on'?]!¡1::l
!
producro de un simpie cálculo lógico fundado sobre la sola reescriturasinláctica
y t les p u é s !, r a t u r a l m c n t e ,u ste d e sp o d r á n co n ciu ir "'
+
It

i.
I la
l'ierre BoLtrrlieu
#
É Losdoxósofos
H
rtl

del enunciado mismo o de la referenciamental al universo concreto de los la ocultación de las "sin-respuesta"(por ia presenraciónde los porcentajes
+
a migos ; del nlis mo m o d o , l a re s p u e s i aa l a s p reguntas más típi canl ente recalculados)produce de por sí un efecto político: una clase(o una fracción de
r
p o l it ológr c as*que s e te c o n o c e ne n tre o tro s ín di cesP or su l ongi tud, P or su clase)está,en efecto, caracterizada,en primer lugar, por la probabilicladqus le
compiejidadsintáctica,por la abstracciónde losté¡minosemPleados-puedeen el i esú ligada de tener ltnd "opin;ón política" sobre un problema 'po!ítico" (y qu.
:
limire no expresarsino el resultadode u¡'ranálisisde la sintaxisdel enu¡rciadode ia puede, para ciertas categoríasy ciertascuestiones,ser inferio¡ al 40a/o'),la opi-
:
preguntaque, al modo de un tema de disertación,collstituyeel soportede la nión de tener una u otra de las opinionesprevisraspor el cuestionariono es
reflexiónque conducea la respuestañrerade toda refe¡enciaa la situaciónpráctica. t.
]amássino una probabilidad condíciona!desprovistade toda significación en
Peio, como se 10 ve evidentementeen el casoextremo en ei que se pregunta si cuanto deja de ser tratadacomo tal. La probabiiidadde tener una opinión se
existeuna relaciónentre el confiicro del Medio Oriente y el conflictc de Vietnam, encuentra,ade m ás,sist em át icam enrsobr
e eest im ada:
en ef ect o,pr oponien-
toda cuestiónpropiamentepoiiticoiógicaexigeque lastomasde posiciónParticu- do como se hace más a menudo para facilitarla recoleccióny el anáiisisde ias
laresseanderivadasa parrir de un pequeñonúmero de principios "políticos"explí- informaciones,una opción de varios enunciados,por lc tanto, demandand,¡
citarnentefbrmulados, ú¡ricoscapacesde fundar las "opciones"coherentesy rozo- 'iomar posicién sobre Io ya enunciadoy haciendo así ciesaparecer
el trabajo de
nabiesdel ciudadanoconforme, que ignoratrasPasiones y laspulsionesir¡azonables tnunciación, se presupone tácitamente que el encuestado sería capazde pro-
o de la incompetencia
e imposiblesdel interésinconsecuenre irresponsable. Así, ia clucir (o incluso de reproducir) la proposición que constituye el enunciado
inrerrogaciónpolitrcológicamide no por la opinión política,sino por la aptituci ci c l a pregunt a, cuando el sim ple s/ ( o incluso el no) que puede siem pr e
paraproducir Io que seentiendepor opinión política.Es decir,másprecisamente, producir, no puede ser consideradocomo un índice de esta aptitud sino en
la aptitud para referir lo "políttco" cónto tal (o, incluso, en ciertos casos'Para una fliacción muy reducida de los casos.Se hace así desaparecer,por una
consr¡uirloo para"de-construirlo")y paraadoptarcon resPecto y
a la experiencia pcti ci ón de principio inconscient e"
la posibilidadde r ecogerla inf or m ación
al lenguajela relaciónneutralizanteque esIa condición sineqtu non de ia adquisi- que comanda ia significaciónsusceptiblede ser otorgadaa todas las infor¡na-
ción y de la utilización apropiadade la cultura "política"cono comPeterl-cia
esPecí- ciones directamentJ'recogidas.
fica,eliamisma condición de la producción de un ciiscursopropiamente "político",
A demás, el logocent r ism o- f or m a que el et nocent r ism ode ciase t or na
al mismo tiempo que de Ia recepciónde tal discurso.TNada sorPrendentesi esta l1;gicamenteentre los intelectuales-lleva a aprehendery a enumerar, como
disposición,que no essino la especificaciónde una disposiciónmás general,esel opi ni onespol ít icaspr oducidassegúnun m odo de pr oducción pr opiam ent e
producto de un ripo particuiar de condicionessociales,aquellasmismasque son la "político", los productos simbólicosde otro modo de producción. Toda inre-
condición del accesoa ios otros aspectosde la cultura dominante. Resulta que rrogación científica -es verdad, in.luro la investigaciénetnológica, aunque
radicalmenteopuestaen los métodos a la encuestade opinión-, se expone ¿
ci ercerun efe ct o de t r ansm ut aciónlógica y polí t ica por cl solo hccho de
ilevar lo implícito al estadoexplícito sin saberloy sin saber todo lo que está
7. En u n s en t i d o m á s r e sr r in g id o*e l m á s co m ú n m e n te ¡ e te ni do-, l a competenci a pol íti ca pucde
s erde f i n i d a c o i n o l a a p titu d p a r a o r d e n a r u n ca m p o p o lítico homogéneopor l a puestaen prácti ca
irnplicadoen esta operación.Por el hecho de que considerasiempre las opi-
dc un sis¡ema de ciasificaci¡in (y de un sistema de discursos cn torno a esasclasificaciones)que ¡lionestomadasen su valor superficial,al omitir interrogarsesobre los modo.s
pcrmiran memorizar y'restiruir Ias denominaciones dc los agruparnientospolíticos (inclusive bajo cle producción diferentesde los cualesellas pueden ser el producto, es decir,
la lo¡ m a c i f r a d a d e l s i g lo ) y lo s n o m b r e s d e lo s h o m b r e s p ol íri cos,¡euni ¡ unos u otros en cl ases st'irrelos diferentesprincipios generadoresde discursos<; de prácticasindis-
; alif i c a d a sa b s t r a c r a m cn tey situ a d a se n u n e sp a ciop o lítico que el l asrecubrenen total i dad. S i tal
ti ntamente tra t adascom o polí t icas,la int er r ogaciónpolit icológica pone a
c om ¡ r c r c r . r c ic: rs l o r n r a l m e n r e id é n tica a la co m p ctcn ci¿a r tís ti ca(con i a cxcepci órrde qr-rcoucde
f ucnta de la persona interrogadala opcración de constiiución*es ciecir,de
ex is t i r t n c s t a t l op r á c t i c o sin a co m p a ñ a r sed e u n d o m in io e ¡ udi ¡o, l o ri ue no es casinunc:r el c:rso
c n c l i i o m i n i o e s ¡ é r i c o,ya q u c cl d o m in io p r á ctico - q u e su ponc l a fami l i ari d¿dcon l as obras dc
trrna de concienciay dc toma de palabraque es, en más de un caso,el hecho
arrc - , e s e l m o n r : p o l i o d c la s cia scsq u c tie n e n ta m b ié n e l m o nopol i o del accesoa l a cul tura cul ra), tlc la interrogación-. Al mismo tiempo, rrara corno opinién constiiuida, sc-
s in cm b a r g o , l a r c n t a b ilid a d e sco la rd c la co m p e ten cia p o líti ca (que estáexcl ui rl ade i a defi ni ci ón ¡lún los principios específicosde la disp.rsiciónpropiamente "pc-rlítica",res-
prop i a m e n t e e s c o l a rd e la cu ltu r a ) e s m r r n *in flr io ¡ a la d e la comP etenci aartísti ca pucst:lsque pueden ser el prodr,rctode la puestaen práctica cle los esquemas

.;
121 *,
en rcsP uestaa explícita, y puestosen práctica en el modo prerreflexivo*. Sin eslar mecá-
n o e spec í f ic osdel e¡ h o s d e c l a s e ,a u n q u e s e a n p roduci dos
si empre con el ni vel nicamente atadas a la situación de clase, estas dos formas de disposicirín
p r"g ,.rn, " u" polí t ic as " .uEn re s u me n ' P o I n o ro mP er
tomada en su política le estánestrecharnenteligadas,principalmente por la intermediación
i.rro*".r"I del-oPusoPeratum'es decir, .1ela opinión formuiada
"ciencia política" está de las condiciones materialesde existencia-cuyas urgenciasvitales se im-
valor superfi.i"l, p*." consrruir el modus operandi,la
ponen con un rigor desigual, pues están desigualmentedotadas para "neu-
co n d enada a ignor a r q u e e l c o n j u n to d e l o s e nunci acos-tratados-c< ¡mo-
producen a ualizar" sirnbóiicamente-, y de la fbr¡nación escolar -c^Paz d. procurar ios
opiniones que los miembros de una sociedaddividida en ciases
tipo de com- i nstrumentos del dom inio sim bólico de la pr áct ica, es decir , de la
propósito de un .o.,junto cle problemas,resultasiempre de un
dotados de pes.rs verbalización y de la conceptualización de la experienciapolítica, este domi-
tin".i¿n determinada entrt dnsprincipios cleproducció2, 3
de los
l
* ni o prácti co que es adquir ido a t r avés de una er ist encia objet ivam ent e
diferenressegún la modalidad de la inter¡ogacióny según la posición *
sino ignorar todos los estructurada por las relaciones objetivas coiistitutivas de ia estructura d.e
producrore,sen le estrucrura social. No puede pues
que Pfo- las relacionesde clase-. La inclinación populista a prestar a las clasesPoPu-
.f..ro, "reóricos"y políticos (análogosa los de la consultaelectoral)
fun.{ados so- I lares una "política" (como, en otra parte, una "estética")esPontáneamente
ducen el regisrroy el análisishomogéneosy homogeneizantes é
¡ y como naturalmente dotada de las propiedadesincluidas en la definición
bre la ignorancia de estr dualidad'
el di scursc' * dominante de la política, ignora que el dominio práctico que se exP¡esaen
El dom inio s im b ó l i c o d e l a e x p e ri e n c i aq u e se exP resaen 5

entre P a-
1 eleccionescotidianas (susceptibleso no de ser constituidas como políticas
so ci a lr nent er ec ono c i d oc o mo " p o i íti c o " Yy q u e suP onel a puesta t
por referenciaa la definición dominante de la política), encuentra sus fun-
réntesisde tocla referenciadirecta y exclusivaa la situación
d a d , s e c pone diam e tra l me n tea l d o mi n i o p rá cti co que puede
en su singulari-
ori entar l a
t
r
damenrosno en los pr incipios explí cit osde una concienciacont inuam ent e
vi gi l ante y uni v er salm ent ecom Pet ent e, sino en los esquem asde pensa-
práctica cotidiana, en todo lo que ella tiene de política sin acceder iamás a i
+ mienro y de acción implícitos del habitus de clase.Es decir -si fuera nece-
i a e xp lic it " c ión y a l a me n o s to d avía a l a conceptual i zaci ó' .
' e rb a l i z a c i ó n , f¡ sario atenersea las fórmulas simplificadoras o simplistas de la discusión
'fodo npon", ai mismo tiempo, Ia.coherenciaintencional de las prácticasy
política-, en el inconscientede las clasesmás que en la concienciade ciase.
d e l o s < lis c ur s oseng e n c l ra d o a s p a rri r d e u n p ri n ci pi o expl íci to y expl íci ta- ;
y dc saberes El habitus de claseno es el instinto del herbívoro que algunos quieren ver
me n te " polí t ic o" - e s d e c i r, a Pa rti r d e u n c u e rp o de normas 4
en éi. Y si es frecuenteque los miembros de las clasespopularestengan un
p ro p i ar nent e polí t ic o s , e x p l íc i ta )¡ e x Pre s a m e n tcsi stemati zadosP or" esP e-
clc discursoen contradicción con él mismo, con ei sentido de su prácticay con
.i.lirrrr*, y la sistematicidariobjetiuade las prácticasproducidas a Partir
" pol íti cc" sr.rcondición objetiva, es porque, al no disponer de los medios de produc-
u n p rinc ipio im plí ci ro , p o r l o ra n to , d e e s te l ado del di scurso
ción de su discurso, ellos hablan de política sin tener discurso político' o
-es d.ecir,a pafrir de esquemasde pensamiento y ce acción objetivamente
inculcación sólo un discursoprestado-en el Ccble sentido-, y están entoncesa merced
sistemáticos,adquirrdospor simple famtliarización,fuera de toda
de los portavocespolíticos que se dan o que ies son imPuestos-como, en
otros dominios, de sus abogadoso de sus méciicos.
g. Es s u f i c i c n t e c o n s i t l er a r r :n d o m in io co m o e l d e la e n scñanza,que se exri ende desdc l o'
rl c'
La ausencia,en el dominio de la estética,de ias instanciasque tienen por
prr: blcr n a sm u y e x p l í c i t am cn r eco n stir u ic.loco s ffr o p o lítico s p or cl ccnj unto cl c l as cl asesstci
h:'s¡¡ misión llevar ai nivel manifiesrolos principios implícitos de ia prácticade las
(. o-. , d c l a r ef o r m a u nive r sita r iao e l d c le in tr o d u cció n d e l a pol íti ca en l tr uni versi dad),
"l
por rn" ri c ciasespopulares,es suficiente como para prohibir plantear demasiadoiejos ia
c s os p r o b i c n t a s q . d c n c scn p e r cib id o s i.r i p cn se d csco m o pol íti cos si no -i ¡¡¡r'i
v angu a r d i a( c o m o i a e i c cció r ,d e lo s m ú to d o s p ccla g ó g ico s, c la eci uc¿ci ónscrual ), con toi 'r' o'; l identificaciónde los dos dominios. Sin embargo,tanto en el dominio Políti-
de Ias vari aci oncscl c I'i co como en el dominio estético,ias prácticase, incluso, los juicios pueden
es t adi o si n r e r m e c i r o sp, a r a ve r p la n tca r scd c m a n cr a in sistcnre,a través
dc i os di i c¡''
t es a t l e s i n - r c s p u e s l as eg ú n cl ¡ cm a a b o r d a d o y la cla se so ci al , el probi enl a organizarsede manera sistemáticasin que estén jamás explícitamente fbrmu-
d c p r o d u c c i ó n d e ia s o p in io n cs p o lítica Es
s. a sí co m o las preguntas rel eti vasa i a educaci "rr !adoslos principios de su producción, con excepciónquizásdel principio de
moc lo s
más gcnerai esdcl si stemet1l
quc t ie n , m l t \ . a m c n u d o , sin r e sp u csr acu a n d o tc¡ ca na la s fu n ci ones conformidad que, al pedir prestadomás bien el lenguajede la édca que el de ia
mtl 1'
c ns c ñ- n z . : or a : u s r c l a cio r - leco s n la s in sr a n ci¿ sp e ilítica s,m icntr¿s quc susci tanrcspucstas
pcdagógi cahabi tual ' política, tiende a prohibir la idenrificación sin reservasa individuos o grupos
f rc c u c n r c sc u a n t l o c o n cicr n cn , !o q u c sc p o d r ía lle m a r la n roral

LJi
136
PterreBourdieu r
*+
Ins doxósrt',

cuyos discursoso prácticascontradicen demasiadoabiertamentelas expectati- 1


instauran, la mayoría dc ias veces, entre Personas de opiniones idénrices: csi.t
vas inconscientesdei ethos de clase:esi esto es así, es porque los principios de a: .rcinstataci¿)nplanrea la cuestión dc los nredios por los cuales se establece la
las estrategiasque orientan las relacionescotidianasentre los miembros de 5
s c l c c c i ó n d e 1 os i n tcr l o cu i o r e s p o si b l e s. N o h a y d u d a q u e l a se r n i o l o g ía e s-
clasesdiferentesy, en particuiar, el punto de referenciade los marcadores ,,r()niáneaa , l i , e r m i r i r se ñ a l a ;'a q u e l l o s co n q u i e n e s "se Pu e d e h a b l a r d e p o l í-
sociaiesde las posicionesde clase,talescomo los acentoso los estilosde ropa r i c a " , p 9 r l o r a nto , h u i r ci e i o s co n f- l i c¡ o sa b i e r to s, e s ta n to m á s i n d i si r e l 'r sa b l c
y la hexis corporal, tienen más posibilidades de acceder,parcialmente al me- .uanro la info¡mación prer.,iaes más ciébil y el costo de la confesión torpe es
nos, a la explicitación-en ei lenguajede la éticao de ia psicologíaespontánea 1"
: r á s q r a n d e . A to d c,s l o s o b stá ctr l c,si n m e d i a ta m e n te vi si b l e s d e 1 a co n ve r sa -
más que en el ienguajede Ia política-, con motivo del intercambio entre los d e cl a se s ci i i e r e n te s se a g r e g a l a h e te r o g e n e i -
. i ó n " n e u t r a " e n tr e n - r i e m b r <- ,s
miembros del in group que precedeny preparan o siguen y explotan ias ense- c 1 , i dp o c o m e n o s q u e to ta l d e l o s tr o p o s y d e l o s tó p i co s u ti l i za d o s e n i a s
ianzas procuradas por los contactos con el oú grouP. Sin obedeceral gusto en q u e "e s n e ce sa r i o d e ci r b i e n a l g o " ( l a i m p e r a ti vi d a d d e i a
-ircun.stancias
de las analogíasinciertascon la relación de incertidumbre,se puede suponer c . r n t u n i c a c i ó n e s, p o r o r r a p a r r e , m ü y d e si su a l se g ú n l a s cl a se s ,y si n d u d a
que, en tanto que ella se estableceentre miembros de clasesdiferentes,la n r u c i r , m á s i n te n sa e n l a s ci a se sp o p u l a r e s) . L a cn cu e s¡ a d e o p i n i ó n cr e a u i l a
relación entre el encuestado¡y el encuestadono puede dejar de afectar la ,iirraciiin en la cual eI ¡,rimero que liega viene a plancear cuesfiones políticas,
naturalezay la modalidad de ias informaciones recogidaspor toda encuesta . i n c l u s o s i n s o ña r co n i ¡ r vo ca r l a g a r a n tía d e u n te r ce r o co n o ci d o ,V fa m i l i a r
que se asientasobre ias reiacionesent¡e las clases-que es el caso,se sePao no' , r r i d c u r n p l i e r a l a fttn ci ó n i m p a r ti d a a i r n si ste m a d e m a r ca d o r cs p o si ti vcs e n
se quiera o no, de toda encuestade sociología política-. No se entra en una ! ¡ s i n t c r a c c i o n es e n tfe m i e r ¡ b r o s d e i a m i sm a cl a se , o d e u n a r e l a ci ó r .rm u y
dis,.rrsiónpolítica con el primero que'llega,y la semiologíaespontánea,como c s r r e c h a y m u ) , a n r i g u a , fu n cl a d a so b r e e l ve ci n a zg o o e l p a r e n te sco , e n tr e
dominio práctico de la simbólica de las posicionesde ciase(del que se postu- r r i c n l l ¡ r o s d c cl a se s d i fé r e n i e s.r r
la espontáneamenteque está iigado a ias tomas de posición políticas),tiene N o c o l t o c i en d o si n o e l i n .r p e r a ti vo e l e cto r a l d e l a i g u a l d a d fo r m a l a n te ci
por función hacer posible una evitación metódica de todos los "tetpas can- crrestionario, que sd'conjuga con el impterativo téc¡rico de la nornlalización
dentes", es decir, en primer lugar, de los temas políticos, y de establecerel
consensoprovisorio que, en los contactosfoituitos de la vida cotidiana, no
puede instaurarsesino graciasa los lugarescomunes y al precio de una vigilan-
i (). E n csral ógi ca,s c puc dc s uponer que l a i nterdependc nc i aex tr€r]l aquc une l os mi embros dc l a
cia continua. Está establecidoempíricamente que las discusionespolíticas se c l c l a aus enc i ac i e
i :cnnrni cl a<jal dca na trac l i c i onal c s ul to c l e l c s pri nc i pi os , ¡rarad/rj i c an"rc nte,
,l rsr:usi ó¡pol íri ca- por l o tanto, dc mov i l i z ac i ón pol íti c a-, en l a c l as cc arnpes i na:l a pol íti c a es tá
c:i :i cr;nsci entcme nre ex c l ui daporquc es p.tc i bi d" c orno c aFazde des trui r l a uni dad, v i tal ' de un
y de losjuicios"estéticos"
de lasprácticas
9. IJnicoprincipioexplícitoo cuasi-explícito de las qrupo cconómi ca y s oc i al menrehc rerogéneov , s i n c mbargo, rnuv fuertemc ntc i nregrac l opor l a
clases , elprincipiocieconformidadimpone
populares "simples"
gustos (poroposicióna "presumidos", ,:rri i l addc resi dcnc i a.
a "afectados", "pretenciosos",etc.) a la gente "simple" (a la "gente como nosottos"); censurando I l .'i bcl as l asvecesque, al i r al enc uentro de l os pl ec c ptosi ngenuamenteabj eti ui ttasquc , i l c v an a
o lan z a n d o a l o i m p e n sa b le la s a sp ir a cio n e se sté tica sin compari bl es con l a representaci ón ,..r.r cn l a di si anci acnrre c l c nc uc s radc ry el c nc ues tadouna garanrl ade obi c ti v i datl (no perc i bi c ndo
interiorizada del estado de cosas esuolecido ("esto no es para nosotros" y "esto no se hace" i ;i rni s l e tl i stanci as i no fr:rj o l a forma geográfi c e,muc hos i ns ti tutos de s ondc o prohíben a s rrs
-sobreentendido, para gente como nosotros-), él contribuye a producir (en la medida, al menos, ,.rrcucsracl ores i nterrogara l a gc nrede s tr l oc al i < j ¡d),s e i ns tl ura l a i nterrogac i ón c on i nterl oc utc rc s
en que las alienca y las legitima) elecciones estéticasa la vez directamente deduc¡ibles de las e manc ra c as i "naturai ", y a s er di rec tr.mente'y a s c a
,,nrcqqi cnesel l a h abría podi do c s tal ;l ec ersde
condiciones objetivas (ya que aseguran una economía de dinero, de tiempo y de esfuerzo) y i trterrogadasobs erv an
l ',,r l a mcdi aci ón dc un garante pers onal o i ns ti tuc i onal , l as pc rs on:r-s
perfectamente conform"s a la norma que prohfbe distinguirse de la norma del grupo, es deci¡, i :l )(i ntáneamentet l uc el l as¡l o habríen habl edo.!amásel mi s ni o l enguaj cc n l e rc l ac i ón k rrmal c on
"como es neccsario, sin más" (por e.jcrnplo, cuando sc pide que un corte de p*lo sea o haga i r¡ cncucsradoranór¡i n-¡o(i ' , dc hc c ho, Ia "c i c nc i a pol íti c a" l ra obs e* ' ado des dc hac e muc ho
"adecuado"). (Sobre los principios implícitos de las prácticas y de los juicios estéticos de las ti cnrpo que l as opi ni r;nc s c x t¡emx s c s tán s i emprc s ub-rc pres c ntadas en l as opi ni ones rec ogi das )'
clases populares, ver Pierre Bourdieu et al., Un drt mojen, essai sur les usagessociaux de la \rrponi entl o, i ¡cl us o, < ¡uc l a rei ac i ón hu$i ere podi do es tabl ec c l s e:s e s abe quc l es nc gati v asa
photographia París,Ed. De Minuit, D7A, p. I16-132.) [Lafongrafa, un arte interwcdío, México, rer¡roncl er son par ti c ul arrnc ntcnumeros asen l as enc ues l aspol íti c as(es asno s on l as rc s pons abl es
Nueva Imagen, 1979.J ,l r l a "corrccci ón"de Ias muc s rrasen l os i ns ri ¡urostl c s ondc o quc del menti rc mos ).
yendo de suyo -lo que no es sino la universalizaciónde los intcreses(cn cl
d e l o s ins r r ur neñr o¡d e re c o l c c c i ó n* c o n d i c i ó n d e Ia comparabi l i dadformal
doble sentido) de las clasessuperiores-, las prácticasy las ideologíasde las
del material recogido-, ¡ sobre todo, de la auroma¡izaciónmaterial y men-
clasespopulares se encuentran lanzadasal lado de la naturaleza,ya que acu-
ral del análisis,Ia "cienciapolítica" no puede sino anexaral orden del discur-
mulan todos los rasgosantitéticos a la cultura política tal como ella se ad-
so político los producrosde los principios implícitos del habitus de clase.Por
quiere en "Ciencias-Políricas"
o en Harvard. Producto sincréticode [a amal-
eso, ei efecto político de rransmuracirinde lo implícito en explícito que pro-
gama de las propiedades prestadasPor las necesidadesde la causa -de la
duce la encuesrecle opinién, con roral i¡tocenciarnetodológicay política, s',
están más L,uenacausa- al sub-proletariado-como la impacienciamilenarista-, ai pro-
ejercetanto más fuc¡temenfecuanto los productoresde respuestas
letariado -como el rigorismo jacobino-, o a la pequeñaburguesía-como el
completamentedesprovistosde los insrrumentos necesariospara aprehender
resentimiento represivo que, en cierras coyullturas, pue{e servir de base a
com,r "política"s"las Preguntasplanrcadasy para-darles una respuestay una
jerarquía so- regímenes fascistas-, las clasespopulares según L,ipset son naturalmente au-
re.rpuesra"pclítici' (es decir, a medida que se desciendeen ia
toritarias:es porque tienen el autoritarismo por naturaiezaque ellas pueden
cia!) y más lcjos de sarisfacera las condicionesde producción de un cuerpo
adherir con conocimiento de causa a ideologíasautoritarias; es Porque su
cle cpinlones colrcrentesy homogéneaslporque son engendradasa Partif de
intoleranciaies inclina a una visión simplista y maniquea de la poiítica que
u n p r inc ipio ex plíc i ra me rl te c o n s ti tu i d o . G raci as a este efecto de
dc !o hererogéneo,la "ciencia política' puede producir a ellas no esperanel cambio de su condición sino de transformacionesrápidas
homogeneizaci<'rn
voluntad, e: deci¡ a pctición, la apariencia.dela coherenciao de la incoheren- y brutales. E1 "milenarismo evolucionista",que es el coronamiento natural
de esrateoiogía política, hace de la elevación del nivel de vida y de educación
e\a: ya sea que ilumine las contradiccionesentre los valores de ciase y las
rrpinioncs !ógicamenrederi'¿ablesc{elos principios políticos explícitamente de las clasespopularesel motor de un movimiento universalhacia la demo-
al oponer, por ejemplo, las disposiciones"auroritariSs"de las cla- cracia americana,es decir, hacia la abolición del autoritarismoy de las clases
ileclaracl,:s,
ya seaque, al contrario, vea la que son sus portadoras) en resumen hacia la burguesía sin proletariado'ri
ses popularesa sus opiniones ,.evolucionarias;
"auto¡itaris- Pero la verdad de esta ideología está enteramente contenida en el argumento
verdad de sus opiniones políticas declaradaso delegadas-enel
según ei cual, "más a la izquierdi' (liberal and lefiist) en materia de econo-
mo" de sus prácticaspedagógicas.
mía, los miembros de las clasespopularesse muestranmás "autoritarios"quc
Así, I-ipserno rompe con la irrealidadde la "cienciapolítica" tradicionalque
las clasessuperiores"cuando el liberalismo es definido en términos no-eco-
no conoccy no puedeconocersino la univelsalidadvacíadel bomopoliticus;part
nómicos" (es decir, cuando es cuestión de libertadescívicas,etc.) e, incapaz
iomar presrado,a ia psicologíadel aprendizajey",sobreroco, a la sociologíade la
rransmisióncultu¡al, los elementosde una clescripciónde las clasespopulares,
sino con la segundaintención de encontraren el "autoritarismo"de esasclascs
(concepto ausenteen todos los autorescitados)el principio de sus elecciones tan¡o la competencia política en estado prdctico -io .1ue supondría el recurso a técnicas tales
poiiricas,revelandoasí, por querer probar demasiado,ios ef'ectosy ios presu- cornc l a hi sto¡i a d e [a v i da pol íti c a o l a obs erv ac i ónen s i tuac i ones"normai es "o en períodosde
puestosocultosde la encuestade cpinión: armadode una suertede hegelianismo cri si s pol íti ca- como es e s us ti tuto de l a c ompetenc i a pol íti c a teóri c a que es l a c ompetenc i a
"no
del pobre,que le llevaa postularimplícitamente[a unidad de las conductas mínima necesariapara operar (confcrme a las reglasdel f uego político en vigor) la delegación de

abier¡amentela reducción al or- i as el ecci onespol íti c as -l o que s upondría l a u¡i l i z ac i ón de un c ues ti onari o que, al s i tuars e
políticas" y de las conductas"políticas", rea.liza
explícitamenrecn ei nivel político restituiría el camDo completo de las tomas de posición poiÍticas
den de "1o políti.o" que la "ciencia política' efectúade manera n-rásdiscreta
reiacionándolas ceda vez a las instancias encargadasde producirlx y de legitimarlas (panidos,
-porque es más inconscienre-con sus cuesrionariosy sus problemáticasho- i gl esi as,etc.).
s o rq u e e s tá n e s t ri ctamentcacantonadosen
* o g é , . , " . , . r , hom og e n e i z a n te-p 13. E sta i 'Jeol ogíaenc uenrras u i ns trumen¡ode prueba en el c omparati s mode gran admi ni s trador
el orden "político"-.,2 Medidas con la vara de reglastácitas,planteadascomo de la investigación, atenro a recoger a cada una de sus escalasla colección de los peririclicr:ssemi-
ofi ci al es(con-rodi c e I. de S ol a P ool ) y l as opi ni onesv l as enc ues tasde opi ni ón más rec i entesde l os
domi nantc doxósofos nati vos , más que l as i nformac i ones detal l adasy s i s temáti c asquc , < l efi ni en.i ol as
12.Aq u í , a d e m á s c, l e t n o ce n r r ism oq u c llcvaa a su m ir ,co m o ye ndo de suyo,l a defi ni ci ón
excl ui r l a posi bi l i dad de aprcher.rci cr condiciones teóricas y técnicas de la comparrbilidad, prohibirfan las comparaciones formales.
rie [ a p o l í t i c a y e l p o s i t i v ism o m cto d o ló g ico ,se co n ju g a n p a r a

l,'t0 1.41,
ffi Losdoxósofos
Pierre llourdiett s
G
&
* de
de accederal "desinte¡és"(interesado)quc define toda verdaderacultura, en represivasde las clasespopulares (o de sus mandatarios),o en la condena
5

política como en otra parte, ignoran el "liberalismo"que la nueva burguesía, .l su sumisión excesivaa los intereseseconómicos.
La "cienciapolítica' no pueoe percibir que la cont¡adicciónaparenteen-
tan ¡esueltamenteno-represiva,al meilos para ella misma y para sus hijos, *t
pone al principio de su arte de vivir.
É
1 rre lasopinionesproducidasa Partir de principiosexplícitamentepolíticosy las
* disposiciones y los juicios o las prácticasque ellasengendrandesaparece, la ma-
De hecho,la proposiciónsegúnla cual lasclasesoopularessol.iautoritariasno ll

puededarselasapariencias de la constatacióncienrífica-io contrariode la cegue- : voríade lasveces,tan Pronto como, al dejarde tomarsede la letra de los discur-
el
ra populista-, sino en la medidaen que seignoren el eiectod" rrolitizaciónde ias sos,uno se liga a su ntodalidad,donde se revelael modo de producción según
cualeliasson producidas:la sonrisao el cabeceoescéPtico, irónico o impotente,
opinior,esque producesin saberloia apiicaciénuniformede la grrilapoliticoiógica,
delantede tal preguntairrealo des-realizante, el silencio'que Puedesertambién
y lasdiferenciasque separan,bajo 1areiaciónde la modalidaddóxica,lascertezas
prácticasde la moral pedagégicao sexualy ias opiniones profesadassoL'relas un discu¡so negado, la forma más accesiblede la negariva de discurso, o el
cuestiones"poiíticas".Si los nicmb¡os de lasclasesprivilegiadasson en su con- discursomismo que, por no dejarseencerraren lasclasesprevistascon anceriori-
.iac1al comentariopolítico, no PuedeaParecer sino como el enunciadotorpe de
junto rnás"innovadores"en el ciorniniocieia moral dcmésticamientrasson más
"conservadores" en el dominio más ampliamefte reconocidocomo "poiítico", es las"nociones"de la politología, manifestacionessimbólicasque la politología no

decir,para todo lo que toca al mantenimientodel orden económicoy político y puedesino arrojaren lo inadvertidoc lo insignificante.La intuición común que
a las relacionesenr¡elascjases(como lo testimoniansusrespuestas a laspiegun- refierea imponderablesde la posturay de lasmaneras,los maticesde la argumen-
e tc .), e s e vi denteque -su oropensi ón a
ta s s ob¡ e ia huelg a , e l s i n d i c a l i s m o ,, ración y de Ia hexis,las diferentes manerasde ser "de derecha" o "de izquier'

tomar posiciones"innovadoras"o "revolucionarias"varía en razón inversaai <1a";"revolucionario" o "conseryador", principio de rodos los dobles entendi-
consideradas¡ocan al principio de su rnienros y de todos los dobles juegos, recuef,j.aque el mismo habitus puede
grado en el cual las tra¡rsformaciones
privilegio.'aPodría ser posible incluso que la revuelta contra las alienaciones conducir a adherir a opiniones fenomenalmentediferentes(aunque no fuese
endas qtle se sino por el efecto.de atlodoxia) mienrras que habitus diferentes pueden ex-
-las únicas.¡ue afectantambién a la ciasedominante,
gevy'ricas
expresanlos interesesparticuiaresde cicrtasfracciones(en ascenso)o de cier- presarseen opiniones superficiaimente(es deci¡ electoralrnente)semejantes

tas categorías(las rnujereso ios jóvenes,por ejemplo) de la clasedominante- ¡', sin embargo, separadasPor su modalidad.
Dado que el discurso "político" roma presrado por definición el lenguaje
sirve a los interesesde esta clase,por esedesplazamientode ia problemárica
absrracto, neutralizante y universalizartede las clasessuPerioresy de sus
hacia ios objetos de discusión sin consecuenciade la contestacióninterna y
mandatarios políticos o administrativos, toda tentativa para medir la compe-
por la expuisión fuera del campo de los conflictos políticos legítimosde todo
rencia polírica o el interés por la política no puede sef otra cosa que üfl test
lo que toca a los fundarnentosde su Cominación." Y cuando se sabeque ellas
de conocimienro y de reconocimiento de la cultura política legítima. I-a an-
e n c uenr r ans u pr i n c i p i o e n l a u n i v e rs a l i z a c i ónde l a cxperi enci aparti cul ar
tinomia que habita en la "democracia tecnocrática"no es jamás tan visible
que ciertasfraccionesde la clasedirigente hacen de las alienacionesgenéricas,
como en la ambivalenciade Ia inrención interrogativavuelta hacia el saber
se comprende que ciertas denuncias generalizadasde ia alienación, qLle pue-
ciesigualy desigualmente rePaffido del experto, al mismo tiempo que hacia
den coincidir con la exaltaciónmística de las virtudes políticasdel proietaria-
la "espontaneidad creadora" de la "persona", suPuestasiemPre como CLPaz
d o , s e enc uent r é .t c o n e l p e s i m i s rn o c o n s e rvador, que ti ene el ¡ni smo
d" prod,rcir una "opinién" allá donde el especialistaProduce una "consr3-
e tn oc enr r is m o de c l a s ep o r p ri n c i p i o , e n i a condena de l as di sposi ci oncs
r..ión" o un "juicio". Aunque esro se vea menos, en nombre de la ideologfa
que quiere que la aptitud para iuzgar políticamenteseala cÓsamejor rePar-
14. L a s r e s p u e s t a sa csto s d o s tip o s d c p r e g u n ta ssc o r g a ni zan según estructttrascst¡i ct¡mcnrc tida, ies encuestasde opinión pública no difieren de ningún modo, en su
inv e r s a sc n l a s c l a s e ssu p e r io r e sy e n la s cla scsp o p u la r cs.
principio, de las encuestassobre la "información económica", suerte de
15. L a d e l i m i t a c i ó n d e l ca m p o d e la d iscu sió ny d c la co n te staci ónl egíti may dc Iasarrnasl egíti mas
exámenesque apunran a medir el conocimiento y el reconocimiento guc los
de la lucl-rapolítica es, se lo verá, una de las apuestasy una de las armas firndan:cntales de la lucha
encuestadost ienen de la econom í a t eór ica, sin inquiet ar se Por asir la
poií t i c a ( c f . p o r e j e m plo , e l < ie b a tcso b r c la p o litiza ció n d c l os si ndi catos).
pfe]'pirnrcnrc€conómicaque orienta sirseleccioneseconómicas
(-{.)ry:pftfrt{re de discursopoliricológico,la "ciencia política" le hace sufrir una "neutraliza-
y i*r confiere al mismo tiempo, la "racionalidad" que los econo-
r-r:gidi.¡lr¡* ción" que la pone fuera de asideroy a la cual se agrega, frecuentemente, la
rnirte* puctlen postular en sus teorías. Sería ingenuo imaginarse que una tecnificación tecnocrática que la pone fuera de alcance. Las variaciones de
€ñsü€s{¡lde sociología política pueda ser más relarivisraque una encuesrade "sin-respuesta"según el sexo, el nivel de instrucción o la ciasesociai -es decir,
Éconorníay que fuera suficiente, para escapara rodas las dificultades, formu- en líneasgeneraies,según Ia probabilidad de tener poder, en aigún nivei de
lar las pregunta.$,como io sugiere Riesman, en ei lenguaje propio de los la jerarquíasocial y en cualquier campo que sea-, están alií para testimoniar
encuesradosde cada clase.La polírica es lo que se dice en ei lenguaje de la que ia competencia,en el sentido precisode capacidadsocialmentereconoci-
'ciencia política" y en ese lenguaje solamente: el principio de ia desposesión da, es de esasaptirudesque no se detentan sino en la medida en que se está
política reside,aquí, en la imposició' de una definición parricular de la po- en derecho y en deber de detentarlas;como las variaciones según la satura-
lítica legítima y de los medios legkimos de acción política, es decir, en la ción de la pregunta en índices de conformidad a las normas del discurso
imposición del lenguajey de un cierto lenguajecomo único modo de acción politicológico están allí para atestiguarque la "ciencia-poliúzacióí' es una de
y de expresión política legírima. si el dominio del lenguaje político dor.ri- las armas del combate entre las fuerzas de despolitización -representadas,
nante que hace toda la competencia politicológica está comúnmenre idenri- aquí, por los doxósofos- y las fuerzas de politización, fuerzas de subversión
ficada a la comperenciapolírica, es porque parricipa de ia auroridad que le del orden ordinario y de la adhesión a este orden, ya seaque se trate de la
confiere la pertenenciaal universo del discursolegítimo, el de la ciencia y el adhesión prerreflexivae inconscientede ella misma que define la doxa, o de la
de la cultura erudira, y porque los que lo utilizan están frecuenremenre adhesión electiva, en tanto que negación de la posibilidad de la herejía, gue
investidos de la auroridad que confieren las garantíasuniversitarias.pero, caracterizalaortodpxia,opinión o creenciaderecha ¡ si se quiere, de derecha.
más profundamenre, la imposición de los límites del campo de la acción
política que, en la encuesta de opinión, roma la forma de la imposición de
problemáricaes, además,un efecro,y sin duda d.elos más sutiles-porq,r..,
de los más ocuhos-, de la dominación política: la definición dei límite entre
lo legítimo y lo ilegítimo -que, a la manera de la delimiración sacerdoal de
lo sagrado y de lo profano, produce los profanos en política-, es en efecto"io
primero que estáen juego en el conflicro por.el poder político. Los ideólogos
no pueden aporrar su conrribución al rrabajo de dominación imponiendo su
problemárica política sino porque el estado de las reiacionesde fuerzas per-
mite la imposición de la definición de la política más favorable a los intereses
ce la clase dominante, la que hace dei combate político un debate de ideas y
un enfrentamiento de discursos, en rcsumen, un ccmbate donde só/oson
admitidas las armas simbólicas'.sobre esre rerreno, la clase dominante es im-
I
batible, porque el discurso fuerre no se impone jamás por la sola fuer¿a del á
r*
e
discurso, la porencia de las palabrasy la potencia sobre las palabras suponen
-
i

siempre otras especiesde poder.


No es por azar qve la neutralid¿l estilística, éricay política es la propie-
dad más rigurosamente exigida de todo discurso político despolitizado y
despolitizante, políticamente neurralizanreporque está políricamenre neu-
rralizado: la "ciencia-politización" es una de las técnicas más eficacesde
despolitización. Consriruyendo una pregunra como política cn el u'iverso

r44 l 4)
l{étodocientíficoy jerarquíasocialde losobietos*

uando Parménidespregunta a Sócrates,para inquietarlo, si él admite


C que hay "formas" de cosas'que podrían Parecerun tanto ridículas'un
pelo, lodo, mugre, o todo otro objeto sin imponancia ni valor", $ócrates
confiesa que no puede decidirse a hacerlo, Por miedo de caer en un "abismo

"1.'
de necedad". Eso ñ, le dice Parménides, Porque él es joven y noveto en
filosofía, y porque él se preocupa rodavía por la opinión de los hombres, la
filosofía se apoderará un día de él y le hará ver la vanidad de esosdesdenesen
ios cualesla lógica no ParticiPa(Partnénides,130d).
;
-.:-. La filosofía de los profesoresde filosofía no ha retenido casi la lección de
,*,mi.' Parménides,y hay pocas tradiciones donde esté tan marcada la distinción
]#.
:*¡s¡-
@ enrre los objetos nobles y los objetos innobles o entre las manerasinnobies y
¡&.
,ik
las maneras nobles -es decir, altamente "teóricas", por lo tanto des-realiza-
das, neutralizadas, eufemizadas- de tratarlas. Pero las disciplinas científicas
mismas no ignoran ios efectos de estasdisposicionesjerárquicas que aPartan
a;
1g
géneros,ob.ietos,métodos o teorlas menos presrigiososen un momento dado
del riempo: y se ha podido demostrar que ciertas revoluciones cientlficas
eran el producto de la importación en dominios sociaimente desvalorizados
de las disposicionesque se utilizan en los dominios más consagrados.r

Llñ nciabs, l,
' "Mérhode scientifiqueer hiérarchiesocialedes objets", Actesdz la rcthercheensciences

''*ll
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;.,: AmericanSociological
I'sychoiogy", Rcvictt,3l (4), agosrode 1966"pp' 451-465'
l - a jer er quí adr : l o s ,:b j c to s Ie g íri r--rolse,g i ¡i ni abl cso i nci i gnos,c.suna.l . ,,futilid¿d"o su "indignidad", como cl periodisnro,la n' ,.1a,o la histo-
por su
las mediacionesa rravésde las cualesse impone la censuraespecíficade rrn ri era,frecuentementesPcre ande or r o cam Po' aquel m isr no qu* eliosest udian'
lo que no
campo determinado que, en el caso de un campo cuya inclependencia¡es- las gratificacionesque el campo científrcoles niega Por anticipado'
p e ct o a las dem an d a sd e i a c l a s ed o mi n a n re e srá nral afi rmada, puede ser contribuye a inclinarlosa una aproximacióncientífica'
como
q u i z ás la r nás c ar ad e u n ¿ c e n s u rap u ra me n rep o l íri ca. La < i efi ni ci óndo¡,i - Sería necesarioanalizar ia forma que tcma la división, adrnitida
interesanteso
nanre de las cosasbuenaspara decir y de los asunrosdignos de interéses un() yendo de suyo, en dominios ¡robleso vulgares,serioso fütiles,
Se descutiriiía, sin
d c l os m ec anis m o si d e o l ó g i c o sq u e h a c e n q u e cosasi gual mentebuenas nr¡ triui"ler, en diferentescampos y en diferentesmomentos.
tiende siempre a
seandichasy que remasno menos dignos de inrerésno inreresena nadie o no duda, que el campo de los objetos posiblesde investigación
es decir, según el grado
puedan ser tratadossino de manera vergonzosao vici<,sa.[,s la que hace quc org"nirrrr" según dos dimensionesindependientes,
los límites de la
se havan escrito 1.472 libros -obre Alejandro el Grande, de los quc sólo dos de legitimidad y según el grado de prestigio al interior'dá
y lo oscuro qrre puede
seríannecesarios,si uno le cree al autor del 1.473,')quien, a pesarde su furor definición legítima. La oposición entre io Prestigioso
las maneras(más
iconoclasta,está mal ubicado para pregunrarsesi un libro sobre Alejandro es concernir a los dominios de los géneros,de los objetos,de
es el pro-
o no necesarioy si la redundanciaque se observaen los dominios más consa- o menos "reóricas"o "empírices"según las taxonomíasreinantes),
derermina grados de
grados no es la conrrapartidadel silencio que rodea a or¡os objeros.L.a jerar- ducto de la aplicación de los criterios dominantes que
legítimas; la oposición
quía de los dominios y de los objetos orienta las inuersionesintelectualespor excelenciaen el interior dei universo de las prácticas
que pretenden
mediación de la estrucrurade las posibilidades(medias) de beneficio nra¡e- entre ios obletos (o los dominios, etc') ortodoxos y los objetos
vanguardia o heréticos -según
rial y simbólico que ella contribuye a definir: el investigadorparticipa siem- la consagración, que pueden ser llamados de
iado de los que
pre de la importancia y del valor que es comúnmenre atribuido a su objero, q,r" uno se sitúe del lado de la jerarquía establecidao del
los objetos legítimos-, manifiesta
y hay muy pocas posibilidadesde que él no tome en cuenra, conscienre., inrentan imponer una nueva definición de
o agentes
inconscienremenre,en la ubicación de sus inreresesirueiecruales,ei hecho la polarizaciónquc se estabiececn todo camPo entre instituciones
del capi-
de que los trabajos más importanres (cienríficaménte)sobre los objetos más qrr. o.,rp"n posicionesopuestasen la estructurade la distribución
oposiciones
"insignificantes"rienen pocas posibilidadesde rener, a los ojos de todos los ál erp..ífico. E, d".ir, evidenremente,qlle los térrninos-deestas
aún cuando el funcicna-
que han interiorizadoel sisremade clasificaciónen vigor, tanro valor corno los son relativas a Ia estructuradel campo consicerado,
ser percibidos
trabajos más insignificantes (científicamenre)sobre los objetos más importan- mienro de cada campo riende a hacer que ellos no puedan
a todos los que han interiorizado sistemas
tes' que son, rambién la mayoría de ias veces,los más insignificantes,es decir. como ralesy que apafezcan-frente
campo- como in-
ios más anodinos.l Por esra razón, los que abordan los objetos desvaloriz:dos de clasificaciónque reproducen ias estructurasobjecivasdel
sust anciallTr entr ealm
e, ent eim por r ant es,int er esant es, vulgar es,
trínsecrmente,
con marcar en él
2lt . I- . F c x , A l e * - ¿ q d e r th e Gr e a t,L a n d o n ,Alle n L a n e , lg T 3 .Nohaycasi necesi daddedeci rquc
chics, osctroso prestigiosos.Paraabalizaresteespacio,bastará
un lado, la
esla¿cumul¿cién esa.ltamen¡eluncional -evidenremenre,desdeel punto de.¡istadel Íincionamie nro algunospLlnroscon ejemplosromadosde las cienciassociales:pof
la referencia
y de la p e r p e t u a c i ó nd e l sis¡ e m a - ,p u csr o q u e e lla co n sr itu vepor sí mi sma una verdaderamural l : gon ,írrt.ri, teórica,sin otro punto de aPoyo en la reaiidadque
contra la cririca externa, quc, para ejercerse,debc apoyarseen la alianzaob.jcriva-rnuy ¡mporrenre- a los textoscanónicos,o,en ei mejor de los,casos, a ios objetosmás
sacralizante
"planetarios"y
dc un c s p e c i a l i s t a .
importantesy más noblesde laTierra, esdecir,Prefr:rentemente
3. El le n g u a j ec i e n t í f i c o p o n e ia s p a la b r a sCe l lcn g u a jeo r d in a ri .'entrc co¡ni l l as(cf. G. B achei ard, de aldea'
constituidos Por una tradición antigua; por el i;' :' la monografía
Le t\laúriaiisnrrationne!, París, PU.F., 1953,p.216.Trad.esp. ElMaterialismoracional, Buenc: *minúsculc inferior- y por ei
doblementeínfima, por el objeto y socialmente
airc s , P a r d ó s ,1 9 7 6 ) , p a r am f,r cxr u n a n tp filr /tco n e l u so co m únque puede scri adcl adi stanci :
'^n uno y otroi el análisis
obic t iv a n t c ( o b j e r c s" i n s ig n ifica n r cs"o "im p cr ta n te s" so n o b jetossoci al menrereconoci doscom6 método -vulgarmente empírico-; y, en oposiciór:
historietaso de
import a n t c s o i n s i g n i f i ca n te se n u n m o m e n r o d a d o d cl tie mpo) o l a de l a redefni ci ón ráci tt o semiológicode la fotonoveia,de los semanariosilustrados,de las
curflo pafa
ex plí c i t a q u e d e t e r m i n a Ia in se ició n e n u n siste m a d e co ncepros de pai abras ordi na¡i as l sí la moda, aplicaciónde un mérodo precisamentelo bastanteherético
constituidas .omo "enrerxmente relarivasa la ciencia tcórica". por los guardianes
arraerselos prestigiosdel vanguardir*o " objetoscondenados

r48
Métodocientlficoy jerarquíasocialde losobjetos
Pierrc Bourdieu

de la ortodoxia, pere predispuetospor ia atención que ellos reciben de las valor a un juicio de valor sino que huanta actrr áel hecho de que la referencia
fronteras del carnpo intelectuai y del campo arrísriao-a los que fascinan a una jerarquía de los valoresestáobjetivarleilre inscrira en las prácticas,y,
todas ias formas lzitsc/t-a aposrara esrraregiasde rehal¡iliracióntanto más en parti cular , en la lucha en la cual est a jer ar quí acsr á cn. luego y que se
rentablescuanto más arriesgadasson.aAsí, el conflicto rirual, entre Ia gran expresaen juicios de valor antagónicos.
or t odox ia dei s a c e rd o c i o a c a d é rn i c o y i a herej ía di sti ngui da de l os Campos siruadosen un rango inferior en la jerarquíade la¡ !.glrirnici:dcs
francotiradoressin balas,fonna parte de los mecanisr,osque contribuven a ofrecen a ia polémica de la razón científica una ocasión prrvilegi:cl: p;rr.r
maltener la jerarquía de los objetos )', ai mismo riempo, la ierarcluíade los ejercerse,con total libe¡tad, y para alcanzzrPar procuracidn,sobre la t¡¿s* ¡Js
grupos que sacan de elia sus beneficiosmaterialesy simbóiicos. ia homología que se estableceentre camPosde legitimidad desrgual,le:srne-
La experienciamuestra que los objetos que la representacióndominante canismos socialesfetichizadosque funcionan también bajo las cen¡uras v l:s
trata coffro inferioreso menoresatraenfrecuenrementea los que e.stánmenos máscarasde auroridad en el universoprotegido de la alta legitimidad. fu¡, ei
preparadospara tratarios. El reconocimienrode la indignidad domina toda- cariz de parodia que revistentodcs los actosdei culto de celebracióncuando,
vía a los que se avenÍuransobre el rerreno prohibido cuando se creen obiiga- al abandonar susobjetos titulados, filósofosPresocráricoso poesíamallarmiana,
dos a pregonar una indignación de mirón puritano que debe condenar para se dirigen a un objeto ran mal ubicado en la jerarquía en vigor como la
poder consumar,o una preocupaciónde rehabilitaciónque supone ia sumi- historieta, revela la verdad de todas las acumulaciones letradas. Y el mismo
sión íntima a la .ierarquíade ias iegirimidades.o incluso una combinación efbcto de desacralizaciónque la ciencia debe producir para constituirse y
hábil de distanciay de participación,,dedesdény devalorizaciónque peimi- repfoducif para comunicarse,es más fácilmenteobtenido desdeque se obii-
re jugar con fuego, a la maneradel arisrócraraque se encanalla.La cienciadel ga a"pensaf el universo demasiado presrigiosoy demasiado familiar de la
objeto tiene por condición absolura,aquí como en oira parte, la ciencia de pintura o de la literaruraa rravésde un análisisde la alquimia simbólica, por
las diferentesformas de la relación ingenua con el objeto (entre las cuales,ia la cual el universo de la alta cósrura produce ia fe en el valor irreemplazable
que el investigador puede manrene¡ con él en la práctica ordinaria); es deci¡ de sus productos.^.
la ciencia de la posición del objero estudiadoen la jerarquíaobjetiva ie los
gradosde legitimidad que comanda todas las formas de experienciringenua.
La única manera de escapara la relación ingenua de absolutizacióno de
contra-absoluúzación consiste, en efecto, en aprehender cotllo tal la estruc-
tura objetiva que comanda estasdisposiciones.La cienciano roma paíre en la
lucha por el mantenimiento o la subversióndel sisremade clasificacióndo-
.minante, Io toma por objero. No dice que la jerarquíadominanre rrate a ia
pintura conceptual como un arte y a la historietacomo un modo de expre-
sión inferior y necesario(salvosociológicamente);
no dice más que es arbirra-
ria; como los que se arman dei relativismo para reverrirla o moJif-icarlay que,
al final, no harán s?noagregar un grado, el riltimo, a la escalade ias prácricas
cult ur alesc ons id e ra d a cs o m o l c g íti m a s .En re sunren,no opone un.¡t' i ci o de

J . D c l m i s l n o m o c i o q u c lr je r a r g u í" Je lo s clo m ilr i..:sm.rnl i cl rc Lrna rcl :ci ón csr.r(cha(fcru


c o m p l e j a , p o r q u c e s tá m e d ia tiza d ap o r e l é xito e sco la r )con el ori gen soci al (cL l l IJourdi eu,L.
Bo l t ¿ n s k iy P M a l d i d i e r ,"l,a d ¿ ( fcn scd u c< ;r p s", ln Jo r m a ti onsurl essci encessoci al es,l 0(4),1971),
es p r o b a b l c q u e I a o r i e n ta cié n h a cia n n o L ro tr ó p r r r r tod e l espaci ode Ios obj etosdc i nvesti qaci ón'
exp r e s el a p o s r c i ó n e n e l ca r n p o v la r Ía ) ,e cr o r iaq u c a llí conducc.

l5l
de lo universal*
Dosimperialismos

na buena parte de 1o que observamos en las relaciones entre Franciay


Estados Unidos es el producto de una €structura de relaci-onesque uno
debe pensar como la confrontación entre dos imperialismos,,de.lo-universal.
Lo que ha sido descrito como una de las propiedades más emi¡entes de
estas dos naciones, a saber, su pretensión a u$a ciéitá unive¡salidad :€n el
dominio polírico en particular, por ejemplo, son una forma particular de
constitución y de tradición democrática-, forma parte de los recursospolíd-
cos, de los capitaies simbólicos que estas naciones.pueden-poner al servicio
de formas muy particulares (y muy diferentes) de imperialismo' Evidente-
mente, tengo conciencia de que, como siempre, el sociólogo tiene el- rol de
"malo": desencantae impide danzar enrronda; no celebra la democtaciasino
que se interroga por sus usos sociales,no siempre.muyi democráticos, que
pueden estar formados con la idéade democracia. Peio tal es la inte¡Ción'de '
mi declaración.
En un primer momento, quisiera mostrar en qué Francia,tiene.por parti-
cularidad el ejercere¡ta forma. de,irnperialismo que llamo imperialismo.de lo,
universal. Entiendo..por eilc un,,imperialismo que se ejerce-particularmente
sobre el pl ano oo lí t ico, per o que se ejer ce t am bién en el dom inio de los
: t: -'

* ,,Eeux impérialismes
de l'universel",en c. Fauré1T. Bishop{eds.J,LAmériqucdn Fransais, -
París,Ed. FrangoisBc¡urin,1992,pp. 149-155.
,s
*a í.) ;¡terialisttutsde lo u¡tiuersal
PierreBourdi¿u !6.

E.
loi.n lo denruestr,rla historia comparadade las csrra-
d. colonización:ccmo
estilos de vida, de la vida cotidiana, en nombre de una legitimidad que le
': i.gias de colonizaciónde los franccsesv de los ingleses'la colonilrción fi'a¡-
viene de su pretensión,más o menos ampliamentereconocida,a la universa-
c.sr, { treci ¡ent er neltc, cor . nom isión civilizador ay em ancipador a'
ic- , ncebir {a
lidad. En la lucha por el monopolio de lo universal,en la cual las grandes
:, :c C :trxctenZa por Llna ext r : r or dinar iecc- lt id. um br ede sí , f undada sobr e la
nacionesse enfrentan,desdesiempre,invocando lo que hay de más universal (se
icrridurnbre de tener por prtrticuldridari i¿ u¡tit,ersa/idad olvida frecuente-
en el momento conside¡ado,comenzandopor las religiones(como el cristia-
i¡L-nre,ho1,,que tra habido un colonialismo de izquierda,inclinado a conce-
nismo) o las morales llamadas universales,Francia tiene -al menos para la
por ia asimilacióncomo pror.rlociónliberadorade 1o r.rniversal)'
i;ir ia anexiór-r
época moderna- una cierta ventaja, con su Revolución (cuya prioridad ha
E l i ntperi alisir ude lo univer salse per cibecom o un im per ialism oliber a-
sido discutida, y no por azat>con rnotivo de la celebración de la Revolución "¿Qué puedo hacer
ior: no ha}, naclamejor que ser colol.rizadopor Francia:
francesa).En su patrirnonio, Francia tiene la Revolución universalpor exce-
r]tcjor por el colonizadoque hacerde él un alter ego, que darle accesoa lo que
lencia. La Revolución francesa,mito fundador de Ia Repúblicafrancesa,es la
Y por
r..)soy,a estacultura que es mía pero queJpcr aíiadidura,es universal?"
Revolución universaly el modelo universalde toda revolución.Así, la tradi- en el
csra razón la pretensión a lo universal no es .iamástan fuerte como
ción marxista ha proporcionado ia más ext¡aordinarialegitimación a la pre- de Francia,
dominio de la cuitura. Pues una de ias particularidadeshistóricas
tensión francesade detentar el monopolio de la Revolución universai.Y uno por
que se afirmó sobre rodo a fines del siglo XIX, es la de haberseasegurado,
no se sorprendepoco al observarque los marxistasde ¡odos los grandespaíses o, par a ser
razol l eshi sróricas,or f o m onopoiio, el de la legit im idad cult ur al
modernos,Inglaterra,EstadosUnidos, Japón, etc., no han dejado de inter¡o-
rnás preciso, de esre orro capital universal que es lo chic. Yaléry ha escrito
garsepara saber si ellos han tenido una verdade¡arevolución, es decir, una
:,obre.Parísdos textos magníficosen su inconscienterriunfante.
revolución francesao a la francesa...Así, lvlarx y el marxismo han contribui-
U¡ro 'se pregunra cómo ha sido posible senrirseuniversala este grado, al
do mucho a cons¡ituir la Revolución francesaen modeio universal de la revo- defini-
punro cle poder decir con toral simplicidad que Paríses la capital, por
lución. Y cada uno sabeque el pensadorpor excelenciade lo universal,el que
.ión ,rni,r..ral, del *r;undo culturai. Franciaes, pues, una suertede ideología
todo discurso sobre lo universal debe invocar, a saber Kant, ha consagrado
reaiizada:ser francéses sentirseen derecho de universaliz-ar su interés parti-
también a la Revolución francesacomo la Revolución universal. Pero uno Y de
cular, ese interés nacional que riene por parricularidadel ser universal.
podría multiplicar sin fin los testimonios, puramente sociológicos,de este el modelo
alguna manera doblemente: universalen mareria de política, con
reconocimientocasi universalde la universaiidadde la revolución particular
universaien materia de cultura, con el mo-
que fue la revolución francesa¡ al mismo tiempo, de la nación surgida de ¡ruro d" la revolución universal;
cle lo
,ropolio delo chic (de París).Se comprendeque' aunque su monoPolio
esta revolución, que se encuentra investida, por este hecho, de una suerte de
universalesté fuertemente discutidó, en parricular por los Estaciosunidos,
status aparte. Y pienso que si la Revolución francesaes lo que está en juego
l,'ranciapermanece como el árL,itro de las eleganciase¡r materia de radical
en tales debates,de los dos lados del Atlántico, y no solamentecon motivo
,/¡ic. cotno se clicedel otro lado dei Arlántico; clla continua dando a lo u¡¡i-
de los aniversarios,es porque, precisamente,a tratés de la Revolución france-
vcrsalel especrácuiode los juegosde lo universal,y, en particular,de estearte
sa y la idea que uno se hace de ella, lo que estáen juego es quizásel monopo-
,Je la tansgresión que hacen las vanguardiaspoiíiicas y/o artísticas,de esta
lio de la universalidad,el rnonopolio de los Derechosdel Hombre, el mono-
lnarlera(q*e se siente inimirable) de manrenersesiernpremás allá, y rnásallá
polio de la Humánidad... del
clcl más allá, de jugar con virtuosismo en ios registrosdifícilesde acordar,
En esta perspectiva,la Revolución francesaaparececomo el mito funda-
vansuardi smopolí t ico y del vanguar dism ocult ur al: y se com Pr endeque el
dor y legitimador de la pretensiónde Francia a la universaiidad,y', al mismo lo
.r..ir,_rr,cuyo nc-rmbrees el más directa¡nenteasociadoa esta cumbre de
de su cultura nacional.Al tener Francia
tiempo, al derechoa la univcrsalízación 'lll
rttdical chic que ha sido la revisra Quel, se haya rcvelado recientemenre
por cultura nacional una cultura que se pretende universal,los irancesesse se
comcruno de los defensoresmás encarnecidcsde la ortografíafrancesa.No
sienten autorizados(al merroshasta la SegundaGuerra Mundial) a una for-
afecta a una lengua que, según ! a opinión de la Academ ia de Ber lí n que
ma de im per iaiis m o c u l tu ra l q u e rc v i s te l a a p ari enci ade un prosel i ti smo
s:¡lardonaa Rivarol, es bien universal...
iegítimo de io universal.Jamásse observaesto tan bien corno en sus empresas
a$re-
Ilrc¡rrca )tc itnperiaiismo francés,que Peflnanececomo el paradigmacl.i la forrna suprema de la ideologíajustificadora.A lo que sería.n€ecsárlo
Estados
imperialisnro'de lo universal, ios [,stados Unidos erigen otro que encuentr¡ gar esra orra arma que es la moral, punro fuefre rradicional de los
americanas, desde 1917, se han cubierto de
su fundamento o su garantía eft eI m;to de la dentocraciaen América, elaLtora- Ú.,ido, (todas las inter.¿enciones
moral; y
do por Tocqueville, doblemente designado Para cumplir esta función' Por la reivindicaciónde lo universal,de ia defensade los valoresy de la
aristócramy /rancés(para que yo sea legitimado, es necesarioqrie otro -trtr sería necesarioanaiizar las estrategiasde universalizactónPuestas práctica en
eigunos
e xtra n j er o- m e f ec on o z c a ; s i y o l n e c o ro n o a mí mi smo -como l o hi z,, con rnori vo < l e l a g uer r a del G olf o) . El r et of no de la r nor ai, qt r e
cel ebranen Fr,rnciaho¡ t iene quc ver con cl avance del im per ialism ocult r r -
Napoleón- en lugar de solicitar a un PaPaque lo hiciera, eso no marcha).l:n
la lucha por el monopolio de la universalidad,el reconocimiento otorg:Irj() ral americano.Uno de los dominios donde mejor se ve estenuevo imperi"lis-
analizadopor serge
mo cultural es el de la pintura, y ha sido magníf-icamente
por los otros, especialmentelos otros países,es determinante. Y no es por
azar,por ejemplo, si los írancesesson siempre (y todavía hoy) ccnvocarlos1i Guilba"t, en un libro titulado IJo¿ul{ew Yorh Stole the ld'ea of hlodern Art,
el proce-
a vecesvoluntarios) Para coronar a la universalidadamericana' publicado por universiry chicago Pressen 1983, donde se describe
El punto fuerre del imperialisrnode lo universal,en su forma americane, ,o complejo según el cual poco a poco la dominación simbólica legíri-
-uy
es evidenrementeia Constitución, el Congreso, la unidad en el pluralisrno, ma en materia de pintura ha pasado de París a New York'
erc. Y cuando los EstadosUnidos reivindican el universalismopolítico, un<; Es decir que muchas cosasque se escribeno se dicen, a propósito de Francia
se lo otorga con gusro. Pero reivindican también, y desdehace cierro ricmpo, o de Estados Unidos o de sus relaciones,son el Producto del enfrentamiento
con cierto éxito, la universalidadcultural. Y ailí, evidenremente,tropiczarr enrre dos imperialismos,enrre un imperialismoen ascensoy un imperialismo
o de
; este pretensi ón ha si cl o
p a rti cular m ent e c on l a s p re te n s i o n e sfra n c e s a s si en decadencia,y deben mucho, sin duda, a sentimientosde revancha
que se
mermada en el orden político, a pesarde los vestigiosde gaullismo que tenc- resenrimiento,sin que esté excluido que una parte de las reacciones
mos todavía bajo los ojr;s, la pretensiónal universalismoculturai permanccc podrían clasificaren el antiamericanismodel resentimientopuedan y deban
todavía muy ftlerre,y se podría mostrar que sobre muchotpuntos, e inciuso ,., .o*pr"ndidas como estrategiasde resistencialegítimas a formas nuevasde
o
hasta en el terreno de la ciencia -donde lo universalse mide con el Premi¡r imperialismo...¿Cómo disringuir entre las formas regresivas,nacionalistas
y
Nobei-, los francesesse esfuerzan,mal que bien, en rivalizat. Las estrategias nacionalitarias,que apunran a salvaguardarmercados cuiturales protegidos,
de universalizaciénque todas las nacionesambiciosasemplean para justificer las formas legítimas_ de defensacontra la destrucción de rnodelos amenazados
a
su d o m inac ión t om an h o y fo rma s i n e s p e ra d a sp:o r ej empl o, l a ci enci a rni s- por l3 concenrraciónmonopolística?Los inrélectu.les,que son los primeros
ma -h e inv oc ado a s a b i e n d a sl o s P re m i o s N o b e i * ha deveni do una de l ar q,ri.r]", les concierne el imperialismo de lo universa!,encuentran en una reali'
grandesapuesrasde la lucha por la legirilnidad en el interior de aquello q'.rt rlad.arubigua innumerables ocasionesde nutrir sus estrategiasde mala fe' Por
yo llamaría el campo polírico mundial; la ciencia es, también, una forma dc: estarazón,creo que es necesariodcsprenderdel análisis,muy sumario,que )'o
filosrrfía apoyadaen la ciencia.En la iucha por el monopolio de la domina- he propuesto, una inciración a la vigilancia o, mejor, a Ia reflexiuidal. lluchas
ción legítima dei mundo, la capital, en el sentido de Valéry',es hol' Harvarti declaracionessobre las diferenciaso ias similitudes entre las naciones(sus regí-
o chicago, que reúnen y combinan, ademásde un fuerte capital cier-riífico, menes poiíticos, sus sistemasde enseñanza,etc.) no son sino estrategiasde
si mb oliz adopor los P re m i o sN o b e l , u n a c o n s te l a ci ónde productoscul tura- universalizacióndestinadasa defender nuestro capitai simbólico nacional con-
ie-.con pretensiónuniversal,una filosofía de la acción que representala ac- rra una agresiónreal o imaginaria. Pero las cosasno son tan simples, y las
de l a mda f e son innum er ables.
asruci as ligadosa lr 'uclr a p. t r la
Los inr er eses
ci ó n hum ana c om o p ro d u c to d e l c á l c u l o ra c i o n al -y que, por tanto, i i ga
muv fuerrementela intención humana a la racionalidadcientifica-, una teo- hegemoníaculturai en el espacionacionalpueden inducir a ciertosnacionales
ría económica fuertemente[ormalizaday legitimada en nornbre de las mate- a hacerselos cómplicesdel imperialismocultural del extranjelo-como otros se
rn á ti cis , una t eor í a F ro tó fi c a d e l a d e c i s i ó n ra c i onal ,etc.; )¡ este compl el o enclerranen un naclonallsmoregieslvo.
de legrtr-
cp i stcm oc r át ic ot iene , me p a re c e ,ftrn c i o n e sd e l egi ri maci óntotal mente cx- La universalizaciónde los interesesParticuiareses ia estrategia
'k

traorclina,rias, la ciencia, que es el discursouniversalpor excelencia,quc dcvienc


6
'x maci ón por excelencia,que se im pone con una r , r r genciaPar t icular a los

¡s
t56 157
Pierre Bourdieu

productores culturales,siempre incitados por toda su tradición a pensarse


como portadoresy portavocesde lo universal,como "funcionariosde la hu-
manidad". Pero si siemprees necesarioconsiderarcon la vigilanciamás extre- Lascondiciones de la circulación
sociales
ma todas las estrategias
,rientadas hacia la unificación del campo cultural, es delasideas*
también necesariodisringuir las que apuntan a la unificación por la anexión
o, si se prefiere,por la imposición de un modelo nacional dominante (es así
como se ha operado,la mayoría de las veces,la unificación cuitural correlari-
va de Ia construcciónde ios Estadosmodernos)y las que apuntan a ia unifi-
cación en el pluralismo culturai. La cuirura universal no puede surgir de la
universalizaciónde una cultura. es decir. de \a abso/uüzaciónde una cultu¡a
histórica, asociadaa la pérdida de una parte de io unive¡sai(lo mismo vaie
para la lengua). El internacionalismo,hoy desacreditadocon razón por ha-
ber sido puesto al servicio de una forma particularmente perversa de impe-
rialismo de lo universal,el imperiaiismo soviético, debe ser rehabilitado y
restauradoen su verdad.Se trata de inventar una cultura universalque no sea
el simple producto de la imposición universalde una cultura particular (cul-
L_f oy deseoproponerlesalgunas¡eflexionesque quisieran escaparai ¡itual
tura que no seríamás universal,siho que seríaunive¡salel Estado que se nos
I I ¿. la ceiebraciónde la amistad franco-alemanay de ias consideraciones
anlrncia cuindo se nos dice que E,stadosUnidos es el "gendarme del mun-
obligadassobre la identidad y la alteridad. Pienso que en materia de amis-
do"). De hecho, no se puede esperarun progresohacia una cultura realmen-
te universal -es decir, una cultura formada por múhiples tradiciotryl cuburales tad, como en cualguier mareria, la lucidez no es dei todo antinómica del
afecro,sino todo lo"contrario. Quisiera, pues, inrenrar proponer algunasre-
unifcadas por el recoltocimiento que ell¿s se otlrgan mutuamente- sino de las
flexiones sobre las condiciones socialesde la circulación internacional de las
luchas entre los imperialismos de lo universal. Estos imperialismos, a través
ideas,o, para emplea¡ un vocabulario económico que produce siempre un
de los homenajes más o menos hipócritas que deben rendir a lo universal
efecto de fuptura, sobre lo que se podría llamar la import-export intelectual.
para imponerse, tienden a hacerlo avanzar¡ por lo menos, a constituirlo en
suficiente-
recurso suscepdble de ser invocacio contra los imperialismos mismos que se Quisiera intentar describir si no lasleyes -Porque no he trabajado
nlente como para poder utilizar un-lenguaje tan Pretencioso- al menos las
valen de é1.
tendenciasde estos intercambios internacionalesque describimoshabitual-
en un lengua.ieque debe más a la mística que a la razón. En resum€n'
rr.ienre
voy a intentar hoy presentarun progrania Para una ciencia de las reiaciones
internacionalesen materia de cultura.
En un primer momenro, habría podido evocar la hisroria de las relaciones
cnrre Francia y Alernania desde la Segunda Guerra Mundial, ¡ más precisa-
fnenre, todo el trabajo que, al nivei del camPo político especialmente,ha
podido hacersepara favorecerla comunicación y la comprensión enrre los
dos países.Habría que conducir un análisishistórico sin complacenciadel

' "f .esconditions socialesde la ci¡culation internationale des idécs", Romanitkche Zeitschrif fir
l.itrraturgescbichte/cahiersd'histoiredeslittéranr¿s ronlane|, l4oan¡rce, l-2,1990, pp' l-10.
al menos en una ci crt' t E sra convi cci ón c ienr ist a m e inclina a Pensarque f s im por r ant e hacer un
Pa rae x o rci sar,
rra b et os i¡ nbólic oque h a s i d o n e c e s a ri o
programa de investigacióncienrífica europea sobre las relacionescientíficas
fracción de las poblacionesde los dos Países,todos los fantasmasdel pasado.
europeas.Y pienso que ésreera el lugar y el momenro para decirlo, Porque
Sería necesarioanalizar,ademásdei traba.iode las instanciasoficiales en su
sé, a rravésde JosephJurt y los rexros que él me ha dado para leer, que uno de
dimensión simbóiica y práctica,las accionesdiversasque han podido favore-
Y de los alemanes, los objetivos del Centro que hoy se inaugura es, precisamente'el de trabajar
cer la transformacién de las actitudes de los Franceses
para un conocimiento mutuo de los dos países,cie las dos tradiciones. Y
consiCeradcsen su di./ersidadsocial.Se podría, por ejemplo, situándonosen
quisiera aportar mi contribución, diciendo, muy modestamente,cólno vería
el nivel dei campo intelectual,describirlas etapasde este trabajo de conver-
la empresay lo que haría si tuviera que conducirla'
sión colectiva;en ei caso de los intelectualesfranceses,con la reconciliación,
Los intercambiosinternacionalesestán sometidos a un cierto número de
luego la fascinación respectoal milagro alemán y la fase actual que sería la de
factoresestructuralesque son generadoresde malentendidos.Primer factor:
l a a d m ir ac ión am b i v a l e n te , s u b l i m a d a e n u na suerte de europeísmo
el hecho de que los textos circulan sin su contexto. Es una proposición que
voluntarista a travésdel cual muchos obreros de la undécima hora intentan
Marx enuncia de paso en El Manifesto Comunista, donde no es obligatorio ir
encontfar un sustituto a su nacionalismodift¡nto. Pero ustedescomprendc-
a buscar una teofía de la recepción.,. Marx hace notar que los pensadores
rán que no pueda satisfacermecon semejantesconsideraciones,tan superfi-
alemanessiempre han comprendido muy mal a los pensadoresfranceses'
cialescomo sumarias.
real de favorecer porque recibían textos, que eran Portadores de una coyuntura política, como
¿Qué se puede hacer hoy si uno tiene..unapreocupación
frecuentemente que la rexros puros, y porque transformaban el agente político que estaba al princi-
la internacionalizaciónde la vida intelectual?Se cree
pio de esos textos en sujeto trascendental.Así, muchos malentendidos en la
vida intelectual es espontáneamenteinternacional. Nada es más falso. Ll
comunicación internacionalvienen del hecho de que los textos no ilnPortan
vida intelecttrales el lugar, como todos los otros espaciossociales,de nacio-
su contexto con ellos. Por ejemplo, a riesgode sorprenderlosy de contrariarlos,
nalismosy de imperialismos,y los intelectualesvehiculizan,casi tanto como
pienso que sólo \a lógica del maienrendido esrructural permite comPfender
los oiros, prejuicios, €ster€otiPos,ideas recibidas,repre*ntaciones muy su-
ese hecho sorprendenrede que un Presidenresocialisrade ia República haya
marias, muy elementales,que se nutren de los accidentesde la vida cotidia-
podido venir a imponer una condecoraciónfrancesaa Ernst Jünger.Otro ejem-
na, de las incomprensiones,de los malentendidos,de ias heridas (aquellas'
plo: Heidegge¡consagradopor cierrosmarxistasfrancesesen los añoscincuenta.
por ejemplo, que pueden infligir al narcisismo,como el hecho de ser desco-
Podríatambién romar eiempio.scontemporán.os,Pero como la mayoría de las
nocido en un país extranjero).Todo esto me hace Pensarque la instauración
vecesesroy implicado en esosejempios, no lo haría Porque ustedespodrían
de un verdaderointernacionalismocientífico -que a mis ojos es ei comienz-o
pensafque abusodel podersimbóiicoque me esimparrido Provisoriamente para
de un internacionalismoa secas-no Puede hacersesola. En materia de cul-
ausent es.
aj ustarcuentascon adver sar ios
rura, como err otro lugar, no creo en el laisser-fairey la intención de mi
El hecho de que los textos circuien sin su conrexro,que no importen con
deciaraciónes mosrrar cómo, en los intercambios internacionales,la lógica
ellos el campo de producción -para emplear mi jerga- del cual son el pro-
conduce frecuentementea hacer circular lo peor y a impedir
,Lel laisser-Jizire
csr andoellosm ism os inser t osen un cam po de
ducto,;, de que l o s r ecept or es,
ci rcu larlo m ejor .M e i n s p i ro ,e n e s i a sm a te ri a sc o m o en otras,en una convl c-
producción diierente, los reinte¡pretenen función de la estructuradel cam-
ci ó n c ienc is t aque n o e s tá h o y d e mo d a , Po rq u e se es P ost-moderno...E sta
po de recepción,es generadorde fcrmidables malentenclidos.Evidentemen-
convicción cientista me lleva a pensarque aunque se conozcan ios mecanis-
-que creo objeriva- se pueden sacarconclusionesopti-
te, de mi d.escripción
mo s s oc iales s, in em b a rg o n o s o m o s d u e ñ o s d e el l os, D ero aumentan' P or
mistas o pesimisias:por ejemplo, por el hecho de que aiguien que es una
poco que sea,las posibilidadesde dominarlos, sobre todo si los mecantsmos
autoridad en su país no lleve consigo su autoridad, la lectura extranjerapue-
so ci alesdes c r ns ane n e l d e s c o n o c i m i e n toH. a y u na fucrzaautónoma cl cl co-
a
de a vecestener una libertad que no tiene la lectura nacionai, sornctide
n o ci m ient o que pue d e d e s tru i r,e n c i e rta me d i d a , el desconoci mi ento.D i go
efectosde imposición sirnbólica,de dominación o, incluso, de coaccién.Esto
bien, cn cierta medida, porque "la fuerzaintrínsecade las ideasverdaderas" se
es un Poco como ei juicio de
es lo que hacepensarque el juicio del extran.¡ero
debidasa los intereses,a los prejuicios,a las pasiones.
choca con rcsistencias
g
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160 *-:
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PierreBourdieu Lns totzdiciottes socialcs de la circuk¿cióttde lctsidc¿r:s

* quiera o no, lo sepao no, y au!"rsi esreefecto no cabe en el prol,cctt¡clc nri


la posteridad.Si en generalia posteridadjuzga meior, es pofque los contem-
poráneosson concurrentesy Porque tienen interesesocultos para no com- acción. No hay ¡ada malo en esto, peio es necesariosaberlo.Las ciecci<.¡ncs

prendere, incluso,para impedir comPrender.Los extranjeros,como la posteri- rnutuasy purassehacenfrecue¡rter,rentesobrela basede homologíasde posición
dad, tienen, en ciertoscasos,Llnadistancia,una autonomía respectoa las coac- erl campos difcrentes,a los cualescorrespondenhornol,;gíasde inreresesy
cionessocialesdel campo. En realidad,esteefectoes mucho rnásaParenteque I-rornologías
de estilo,de bandosinrelectuales,
de proyecrosinrelcctuales.
Sepue-
real,y, muy frecuentemente, lasautoridadesde institución-lo que Pascalllama ciencomprenderestosintercambioscomc alianzas,por lo ranro)en la lógrcade
,'grandezas ias r-elaciones
de F.rerza,
como, por ejemplo, manerasde <iorarde fuerzaa una
las de instirución"- pasanbasrantebien lasfronteras,porque ha-'una
posicióndominada,amenazada.
internacionalde los mandarinesque funcionamuy bien.
junto a estasafinicladeselecrivasentre "creadores",para las cualcs,ustedes
Así, el senrido y la función de una obra extranjeraesrándeterminados,al
menos, ranro pof el campo de recepcióncomo por el campo de origen. En 1o perci ben bi en, t engo una cier t a indulgencia,hay clubes cle adm ir ación

primer lugar, porque el senridoy ia función en el campo originario son, con mutua, que me parecen rnenos legítimos poique ejercen un pocier cie tipo
frecuencia,completamenteignorados.X mrr,bién,porque la transferencia de un ten-rporalen el orden cultural o, si se quiere, espirirual-lo que e-.la defi¡ii-
campo nacionala otro se hacea travésde una seriede operacionessociales:una cióii rnisma de la tiranía, scgún Pascai-.Pienso,pcr ejemplo, en la interna-
operaciónde selección(¿quées lo que se rraduce?¿Qué es Io que se publica? cionai del establishtnent,
es decir, en rodos ios intercambiosque se insr,ruran
(de un producto enr¡e detentador esde posicioncsacadém icasdom i¡ r ant es,int er car nir iosde
¿Quién traduce?¿Quiénpublica?);una operaciónde marcado
previamente"dégrtffe) a rfavésde la edirorial,la colección,el_traductory el invitaciones,de títulos de docror bonorisc/t/.tst,efc. E,snecesario,pues, pre-

prologuista(quien presentala obra apropiándoselay anexándolesu propiavisión suntarsecuál es la lógica de las eleccionesquc hacenquc ral cdiror o tal auror
y --en tc,docasG-una problemáticainscritaen el campo de recepción,y que no sc-adesignadopara devenir el imporrador de ral o cual pensamiento.;l)or qui

hacesino muy raramenteel trabajode reconst¡uccióndel calnPo de origcn, en I:ulano ha publicado a Mengano? Hay evidentementebencficio.sdc aprt''¡'ia-

primer iugar porque esmucho másdifícil); una operaciónde lecturapor;últin'ro, ción. Las importacioTtesheréticassorr fre,;uenrementehechaspor firárginales
de percepcióny problemáticas
en la que los lectoresaplicana la obra categorías cr.rel campo, qu e im por t an un nr ensajc,una posición que t iene f ucr za er ¡

que son el producto de un campo de produccióndiferente. otro campo, con el efecrode reforzarsu posición de do¡ninadosen el ca¡rpo.
Voy a retomar cadauno de estospuntos rápidamente.La entradaen el camPo Lr¡s autores ext r anjer os son f ¡ ecuent em ent e objer o de usos r nuy

de recepciónes un objeto de investigacióncompletamentecapital y completa- instrumentalistas;son frecuentementeutilizados para causasque quiz:isellos

mente urgente, aLavezpor fazonescientíflcasy prácticas,es decir, Paraintensi- reprobaríano recusaríanen su propio país. Uno podrá, por ejemplo, servirse
EsperoPoderorga- .le un extranjero para abatir a nacionalc-s.
Tomo cl ejemplo dc l-leidegger.
ficar y mejorar la comunicaciónentre iasnacioneseuroPeas.
'lbdo
nizar un coloquio. que tendrápor fin analízarlos procesosde selección:¿quiénes el mundo se pregunta aquí cómo los franceseshan podido interesarse

son los seleccionadores,aquellosa quienesun sociólogode la cienciaamericana Je tal modo por Heidegger .De hecho hay m uchas, m uchas r : r zones,casi
rieneti .lcrnasiadas...
Pero hai' una explicaciónquc salraa la visra,es el hecho de que,
llama los "gate-heepers"?¿Quiénessc,nlos descubridoresy qué intere.se.s
paradescubrir?sé bien que el término "inrerés"choca. Pero piensoque el que se co¡no lo l-ramost¡ado Anna Boscherti e., su libro sobreS¿rtreet leslentpsl,ñodernts,

apropia,con roda búena fe, de un auror y que se hacede él el introductor, tiene el campo intelectualde los añoscincuentaestabadominadc¡de l:lalreraabrurna-

beneficiossubjetivoscomplerame¡rre sublimadosy sublimes,pero que, sin !m- dora por Sartre.Y una de las funcionci meyoresde Fieicleggerera la de servir

bargo,son determinanresparacomprenderque él fiagaio que hace.(Piensoque p,rraCescalificara Sartre(los prolcsoresdecíanl"Todo Sarrrcestáen l-leideggery
,-'nél mejor"). Ustedestendrán así de un laejo,a ltrcar-rfret,
quc dcl'tió scr un
un poquito de marerialismono haría mal, no quitaría nada, al contrario, a!
eontemporáneode Sarrreen la ]lscuelaNormal, en una posiciónde rivalidadcon
encanramiento.)Lo que yo llamo "interés",puedeserel efectode las afinidades
Jl y que, profesoren una hbágnede Enrique I\', se ha formado una estaturadc
ligadasa la identidad (o la homología)de lasposicionesen camPosdiferentes:no
casi-fi1ósofb importando a Heideggeren Francia,y del orro, de! lado del campo
es por azat que Benet, el gran novelista español, aParezcaen las E,dicionescie
i i tcrari o, a B l anchot . Usr edes t ienen una r er cer a cat egor í a: la gent e de
Minuir. Hacer publicar lo que amo, es reforzarmi posición en el campo, 1o
si mból i ca.Tomo u n ejer nplom v [ : , ueno,el de Chom ski, que ha sido publi-
tc ' T: el marxi smo remi tír
Arg ttm ent s ,es pc c iede h e re j l a ma rx i s ram e n o r' cado en seuii en una colección de filosofia. Para mí, seuil es "carólico de
realizadouna combinación
dÁasi"do visiblementehacia lo vulgar, ellos han i zqui erda" ¡ en ií neasgener ales,per sonalist a.Chom ski se ha encont r ado
chic del marxismo Y de Heidegger' r instantáneamentemarcado,a travésde una estrategiatípica de anexión. Pu-
Mu y f r ec uent em en te ' c o n l o s o tro s a u to re s e x tra nJeros' l oqueval cnoes
Por esta raz-ón'cieitos blicar a Chomski en Seuil, en un entorno marcado por Ricoeur,era oponer al
lo que ellos dicen, sino lo que se puede hacerlesdecir.
estructuraiismo"sin sujeto", como se decía en ia época, un stljeto generador,
.l á s ti c o ' c i rc u l a n mu y b i e n' Las grl ndes profecías
P ar t ic ular m e n t. creador,etc. Así, con [a inserciónen una colección,la añadidura de un prefa-
"tro .., atraviesanlos luga-
,on poliré-icas. E,suna de sus virtudes,y es Por ello que
lo tanto' los Pensa- cio, por e! contenido del prefacio,pero también por la posición del prologuista
,.., lo, momentos, las edacles,las generaciones'etc' Por
decirio' Para una en el espacio,se encuentranoperadasuna serie de transformaciones'incluso
dores con gran eiasticidads<¡ncomo Pan bendito' si puedo
de deforrnacionesdel mensajeoriginario.
interpretación anexionist:-y ?ara los usos estratégicos'
manera acabael E,n realidad, los efectoslstructurales que, a fbvor de ia ignorancia, hacen
L.r.go de la selecciónestá la marcación' que de alguna y las deformacionesligadasa usos estraté-
con el prcfacio de X. posible todas las transfbrmaciones
tr"b,rjo.-No se ofrece solanente simmel; se ofrece simmel
son actos tíPi- gicos de los textos y de los autores, pueden ejercersefuera de toda intención
Sería necesariohacer una sociologíacomparadade los prefacios:
el caso más frecuentt' manipuladora. Las diferenciasentre ias tradiciones históricasson tan gran-
cos de transferenciade capital simbólico,.,almenos en
de Sollers:el prirnogé- des, tanto en el campo inrelectual propiamenre dicho como en el campo
por ejemplo Mauriac que escribeun prefacio a un libro
social tomado en su conjunto, que la aplicación a un producto cultural ex-
nito célebreescribeun prefacio y transmite capital científico, 1" al mismo tiem-
de protector de la tranjero de las categoríasde percepción y de apreciación adquiridas a través
p*, manifies." ,r., ."p".idad de descubridory su generosidad
un montón de inter- de la experienciaen un camPo nacional, puede ctear oposicionesficticias
j,ru"rrrrrd que él reconoce y que se reconoce en él' Hay
Lrn entre cosassemejantesy falsassemejanzasentre cosasdiferentes.Para mos-
canrbios,donde la mala fe juega un rol enornle' y que la.sociología Poco
el capital simbó- trarlo, sería necesarioanalizaren detalle ei ejemplo de lo que han sido las
objetivante hace más difícil. Pero el sentido en el cual circilta
que quierc relacionesentre ios filósolosfrancesesy los filósofosalemanesdesdelos años
lica no es siempreel mismo' Así, apoyándoseen la regladel género
escribe un prefacioa sesenta,y mostrar cómo intencionescompletamentesemejantesson exPresa-
que el prologuir," ,. identifiquecon el autor, Lévi-strauss
autor áel Ensayo das, por ieferenciaa contextosintelectuales)' socialesmuy diferentes'dentro
la obra de Mausspor el cual se apropiadel capitalsimbólicodel
(La getrtetiene F|ecuenteme¡l- de tomas de posición filosóficasen aparienciacompietamente opuestas.Y,
sobreel don.Yoy adeiarreflexionarsobretodo esto.
aPro\'€char situ¡- para decir las cosasde manera más contundente,Pero rambién más evidente-
re una lecruradrarná¡icade esregénerode análisis:quisiera Pues,
en todo cesc' lnente extravagante,seríanecesariopreguntarsesi Habermas no hubiera es-
cionesoralespara mosrrarque de hecho esto es muy divertido, v que
rado mucho menos aleiadode lo que ha dicho Foucauk si se hubiera forma-
yo me divierto rnucho...)
marca. Está do y ¿6¡*rdc comc filósofo en la Francia de los años '50-'60, y Foucaulr
Al término de todo esto, el texto importado recibeuna nueva
cubieitasde lc's rnucho menos diferenrede lo que ha sido Habermas si se hubiera formado y
marcado por la cubierra:ustedestienen una intuición de las
cada editor, ]' afirmado como filósofo en la Alemania de los mismos años. (Es decir, entre
diferentes ecitores e incluso de las diferentes coleccionesde
de los edito- paréntesi s,que u n pensadory el ot r o, bajo las apar ienciasde la liber t ad
sabenlo que cada una de ellassignificapor referenciaal espacio
reemplazanla respectoai context c, t ienen en com ún haber est ado m uy pr of undam ent e
res alemanesque tienen en la cabeza'Si, por ejemplo' ustedes
irnpuestaerr marcados pof ese coilt ext o, en¡ r e ot r as r azones Por que, en su int ención
cut¡ierraSurkhamp por la cubierta seuil, el sentido dela marcr¿
hegemónica,se han enfrentadoa las tradicionesintelectualespropias de cada
. h a y h o m o l o g íaestructural ,l a ¡ransferen-
l a o br a c am bia c om p l e ta me n te Si
gente uno de los países,y profundamentediferenres.)Por ejemplo, antes cle indig-
cia puede hacersebastantebien, pero hay frecuentementefallas; hay
o de la ignoran- narsevi rtuosam ent e,con cier t osalem a- es,por el uso que cier t os f ilósof os
que c"e "al lado de le cuestión". Puedeser por efectodel azar
anexión,dc franceses(Deleuzey Foucauli, especialmente)han hecho de Nietzsche,sería
.i", p.ro frecuenrementerambién porque son objeto de actos de
necesariocornprenderla función que Nietzsche--¿ycuál Nietzsche?El de la
apropiación.En estecaso,el simple efecrode la cubiertaes ya una imposición

165
164
'€
Pierre Bourdiett
*#
q
Ias condiciones sociales dc Ia circulación de las icleas

s
s
filosó- nffiin Heidegger,sustituyen la lógica de la discusión crítica, ligad,aa com-
ha podido cumplir' en un campo */
Genealogíade la moralen Foucault- *
F. prender las razcnes-o las causas- del pensamiento adverso, por ia lógica del
!.
fi codom inado' de i l a d o d e l a u n i r,e rs i d a d ,p o ru nexi stenci al i srrosubj eti vi sta-
*¡¡
apro- procesoi urídico.
. La Gertealogía de la moral,Áab^ una garantíafiiosófica'
espirituaiista
cientistas' * La Realpolitik de la razón, que no dejo de defender,debe pues darse el
aceptablesa esasviejasdiligencias
piaclapara hacer filosófiti-t"tt que '{ proyecto de rrabajar para crear las condicionessocialesde un diá/ogo,,...o-
la imagen avejentadade Durl<heiIn'
incluso positivistas,encarnadaspor en su na/. Es decir, uabajar para elevarla concienciay el conocimienro de las leyes
y la historia socialde las ideas'Así'
,on l" ,o.iología del corrocimiento de funci o:ram ient ode los dif er ent escam pos nacionales,siendo r anr . r , s
€ sf ir er z oP or oPo n e ra u n ra c i o n a i i s mo a h i s róri counaci enci ahi stóri cadel as
"genealogíi'y una noción como la de probablesias deformacionesdel rexro, cuanro la ignorancia del conrexro de
razones históricas (con la idea de
ft^ fJia" tont'ib"t-'i' puede aparecer'visto desde origen es más grande. Proyecto que puede parecerbanai mienrras que uno
epistente),Foucault ".1o!t"
rnuy diferente' como vna res- no entre en los detaliesde su realización.En efecto, se rrara de prodrrcir un
Á.*"rrir, donde |Jietzschetiene un sentido
conoci mi en t o cient í f ico de los cam pos de pr oducción nacionalesy dc ias
tallr ac ióndelir ra c i o tl a l i s mo c o n tra e l c u a !H abermas' entreotros(pi ensopor categoríasnacionalesde pensamienroque allí se engendran, y de difundir
su proyecto filosófico' Y si puedo
ejemplo en Otto Apel), ha constituido oposi- ampliamente esre conocimiento, a través,especialmente,de los profesores
debate' no estoy seguro de que la
introducirme como tercero en este encargadosde enseñarlas lenguasy las civiiizacionesexrranjeras.para dar
c ións eat anr adi c a l c o mo p u e d e P a re c e f' a p rimeravi sta,entreel raci onai i smo una idea de la dificultad de la emp¡esa,bastarácon indicar que ella enconrra-
lazón c de
que yo d"fi"td'o -con la idea de historia social de la
historicista rá sin duda su primer obstáculoen las socioiogíasesponráneas de las diferen-
cam poc ient í f ic o .o .,,o | .,," .d e 1 4 g é n e s i s h i stóri cadel as.condi ci onessoci a- cias"entrelas rradicionesnacionales,que ios "especialisras" de los intercam-
l e s delapr oduc c i ó n d e l a ra z ó n _ y e l ra c i o n a l i smoneokanri ano,< ¡uei ntenta bi os i nte¡nacionales- gcr m anist asy r om a'isr as, por ejem plo- , pr oducen y
en los iogros de la lingüística,como
fundarseen razón cien¡íficaapoyándose reproducensobre la basede una familiaridad mai ar¡naday mal refleiada,y
e nHaber m as ' E l re l a ti v i s m o .ra c i o n a l i s ta y e l absol uti smoi l ustradopueden que tiene frecuenñmenre por principio la condescenclencia
expresan
Porque ellos entretenida,ran
i.eenconrrarseen la defensa del Aufbtarung... Quizás próxima a un racismosuavede aquel que "los conocebien", "a los que uno no
mi esfuerzo
h,*"g.á, evidenremente,en
casi la misma intención al sistema. hace", y que "enconrrándolos horrorosos, los ama a pesar de todo" (acritud
?ero pienso' en todo caso' que las
por "torcer .t U"r,¿n "n .t o"o ""tido'i' muy frecuenteenrre los especialismsde civilizacionesextranjeras,"japonólogos"
de prisma
cfee mlentras se ignora el efecto
diferencias no son todo io que uno u "orientalistas").
ia producción como sobre la recepción'
dzforrnanteque eiercén' t"t"o 'ob" La libertad respecroa categoríaslracionalesde pensamienro-a rravésde las
los c am pos int e l e c tu a l e s n a c i o n a l e s y l a s c ategoríasdepercepci ónydepensa. cualespensamoslas diferenciasenrre los productos de esascategorías-no puede
rniento que ellos imponen e inculcan' ¡. . ,- (io que llegar sino a travésde un esfuerzopara pensary hacer explícitas,esascategoiías;
.por que se instiruyenhoy directaniente
esra."rórr, rn, discusio¡res
los por tanto, a travésde una sociologíay de una historia socialreflexivasy críricas
con el período anterior' en el que
constituye ya un Progreso en relacién -en el sentidode Kant- que sedaríapor objero actualizar,para dominarias,por
intermedia-
científicos euroPeos tt to*""icaban sino con Amé¡ica como
'io un socio-análisiscientífico, las estructurasdel inconscienrecuirural nacional,
r ia) pe. r m anec e n ta n fre c u e n te me n te a rti fici al esei rreai es:l osefecrosde develar-gracias a la anamnesishistdrica de las dos l-isroriasnacionalesy, más
estruitural entre los contextos' ProPor-
ortíu)o*;o que resulran del desfasaie especialmente,de la hiscoriade las institucioneseducativasy de los camposde
c ionanr €c ur s o s i ri a g o ta b l e s a l a s p o l é m i c a sdemal afeyal ascondenasmu- producción cultural- losfundamentos/tistóricosde lascarcgo¡íasde pensamientr.r
los ensayistasmediocrese irrcs-
tuas de f.ariseísmo,""n1", cualessobresalen y de lasproblemáricasque los agenressocialesponen en práctica,sin saberlo("el
pons ables , t al e s c o rn o l o s i n v e n to re s d e | m i todel ..pensami entodel ' 68,' ol os inconscientees ia hisroria",decíaDurlcheirn),en sus acrosde producción o de
denunc iador e s v trtu o s o s d e l .,c i n i s m o ' ' .BastacontenerunP ocodecul tura recepciónculrurales.
his t ór ic aP ar a c o n o c e ri a p ro p e n s i ó n d e l o spequeñosi ntel ectual esai nstaurarse Nada es más urgente que emprender una hisroria comparada de las difercn-
comoFouquier-Tinvilley como Zdanov'
como justicteroso' rnásexac¡amente' clel tes Cisciplinassobre el modelo de lo que se hizo, bajo la dirccción cle Isaac
ha visro recienremenre,a propósito
de derechao de izquierda, como se
chiva y utz Jeggle,para la etnología.En eibcto,sólo una historiasocialcompa- francesa);el l as com por t an t am bién var iacionesnacionales.O , m ás exact a-
rada de las cienciassocialespuede liberar modos de pensamienroheredadosde mente, las tradiciones dominantesen cada una de las naciones pueden ciar
la historia, dando los medios Para asegu¡a¡u¡r dominio conscientede las for- valoresinversosa los términos de las mismas oposiciones.Pienso, por :jem-
y plo, en todas las oposicionessecundariasque gravitan alrededorde la oposi-
mas escolaresde clasificación,de las categoríasde pensamiento imPensadas
de las problemáticasobligadas.como se lo ve bien en el caso de la antropolo- ción central, tan imporrantes en el pensamiento acadén-licoalemán, al me-
gía, la comparación hace aparecercomo arbitrario, o como iigacloal contexto de nos hasta la Segunda Guerra Mundial, entre la Kulrur y la Ziuilisation y que
una tradición contingente,todo lo que era tenido como necesario: los rérminos sirven para distinguir ia tradición germánica,noble y auténtica, de la t¡adi-
mismos,como ernolo gíao vobhundt, quedesignanla disciplina,estáncargaclas de ción francesa,adulteiada y superficial: la oposición, precisamente,ent¡e lo
todo un pasadode tradiciones que hace que estosdos términos, teó¡ieamente profundo (o lo serio) y lo brillante (o lo superficial),o la oposición ent¡e el
equivalentes,esténseparadospor toda la historiade los dos calnPos'Comprender fondo y la forma, entre el pensamiento (o el sentimiento) y el estiio (o el
adecuadamente los objctos y los programas.le investrgacióncomPrometidosen espíritu), entre la filosofía (o la filología) yla literatura, etc. Oposicionesque
estasdos disciplinas,se¡íacomPrendertoda la historia de la relaciónque ellashan la rradición dominante de Francia (que reconciliabala hypobhagnede Enri-
mantenido con el campo político, y que condetrsala diferencia entre el francés que IV, corazón del sistema escolar,y la NRF, AJain y Valéry) retomaba por
"popular' (Museode lasartesy tradicionespopulares) y el alemán"Volk' o "vólkisch', su cuenta, pero invirtiendo los signos: la profundidad que deviene pesadez,
enrre una tradición de izquierda-ligada al Fs¡adoy defendiclacontra una tradición lo serio del pedantismo escolar y lo superficial de la claridad Francesa.Es
de derecha,destinadaal folldore y al pueblo a ia manerade Le Play-, y Ltnatradi- necesariotener todo esto en la mente luiero decir en la conciencia,y no en
cién conservadora-que identifica el pueblo a Ia nación y a la Íleimat o a la el inconsciente- para comprender que Heidegger es casi un Alain al sistema
Gemeinschafcampesina-. Seríacomprender también la posición de la disciplina --e inversamente-.Cuando el primero ha podido ser percibido y utilizado en
en el espaciojerarquizadode las disciplinas:del lado de las cienciaspositivas,un Francia como la antítesisperfectadel segundo...
en ei casode Francia,del lado de la "germanística",en el casode
poco despreciadas Y de hecho, por una de esasastuciasde la razón histórica que hacen tan difícil
Alemania. Y exeminar todas las diferenciasque se derivan cle estasoposiciones el accesoa la libertad inteiectual,la oposición mítica entre las dos tradiciones,
ñ¡ndamentales. aiemanay francesa,se ha impuesto tanto a los que se rebelabancontra ella, en
El sisremade enseñanzaes uno de los lugaresdonde, en las sociedades como a los que la ¡etomabaningenuamentepor su cuerr-
cadauno de los-países,
diferenciadas,se producen y se reproducenlos sistemasde pensamiento;cl ta, a los que entendíanencontraruna forma de libertad respectoa las formasde
equivaiente,con aparienciamás refinada,de los que son las "formes prinliti- pensamientoimpuestasinvirtiendo simplementeel signo de la oposicióndomi-
vas de clasificación",de las cualesDurkheim y Mauss' como kanttanoscotl- nan[e, aceptadatal cual por ios nacionalistassatisfechos.
Así, en Alemania, du-
secuentes,hacían el inventario Para el casode las sociedadessin escriturav rante todo el siglo XiX, y todavía hoy (¿cómo explicar de otro modo los éxitos
sin institución de enseñanza.Alas oposicionesestfucturantesentre lo secol' numerososjóvenesintelectualesprogresistashan
de ciertos posmodernos...?),
io húmedo, el estey el oeste,lo cocido )' lo crudo' qLIerecuentala tabla de las buscadoen ei pensamientofrancés,el antídoro a todo lo que detestabanen el
categoríasdel entendilniento arcaico,corresPondenlas oposicionesentre ex- pensamientoalemán.lr4ientrasque losjóvenesfranceses hacíanotro
progresistas
plicar y comprender o entre cantidad y calidadque la historia colectivade un tanto en el orr o senr ido.Lo que nc dejabaa los unos ; ' a los ot r os sino m u) ,
sistemade enseñanzaV la historia individu"l de una trayectcriaescolarhan pocasposibilidadesde reencontrarse en ei camino.
cleposiedoen el entendimiento cultivado de cada uno de los productos aca- De hecho, si no hay que negar la existenciade profundos nacionaiismos
b a d os del s is t em ad e e n s e ñ a n z a ' intelectuales,fundados sobre verdaderos interesesintelectualesnacionales,
E s t oss is r em asd e o p o s i c i ó nc o mp o rt¿ ni n v a r i anres(tal escomo l rs op,,si - no es menos cierto que las luchas inrernacionalespor la dominación en ma-
ci o nes que ac abo d e c i ta r, p o r e j e mp l o , y q u e -a rrar' ésde u .r enseñanza teri a cul tural y por la im posición del pr incipio de dom inación dor ninant e
filosófica profundamente dominada por la tradición alemana' ell la cual, st -quiero decir, por la imposición de una definición particular dei ejercicio
se l c c r ee a Ringer, e l l a s s e h a n c o n s ti tu i d o -, han penetradol a enseñanza legítimo de la actividad intelectual,fundada, por ejemplo, sobre el primado

I (rB 169
PierreBourdieu

de la culrura, de la profundidad, de la filosofía,etc., más que sobre la civili-


zación, la claridad, la literatu¡a, etc.- encuentran su fundamento más seguro
v los¡rocleres*
intelectuales
l,.r¡s
en las luchas en el seno de cada carnPo nacional, luchas en el interior de las
cuales ia definicién nacional (dominante) y la definición extranjera están
e l l a s m is m as pues ta se n j u e g o , e n c u a n to a rmas o en cuanto apuestas'S e
comprend€ que en estascondiciones, los "cambios de paso"ry los quid pro
quo seaocasi la regla. Es necesariomucha independenciaintelectual y lucidez
reórica para vet por ejemplo, que Durkheim, en rebeiión contra el régimen
intelectuai dominante, en el cual se inscribe PerfectamenteBergson' está "en el
mismo campo que Cassirer"(ésterelacionaexplícitamente'en una tora de The
Myth of the State, sus"formas simbólicas" a las "iormas primitivas de clasifica- {
ción'de Durkheim) conrra quien Heidegger desarrollauna varian¡e en la q

Lebensphilosophie bergsoniana...Se podrían multiplicar los ejemplos de estos


efectosde quiasma que, favoreciendoalianzaso negativasiguahnente fundadas
sobreel maienrendido, prohíben o minimizan la acumulaciónde loslogroshistóri-
cosdc /rtsdiferentesftad;cionesylainternacionalización(o la "desnacionalización")
de las categoriasde pensamiento,que es la condición primera de un verdadero 7--r' uando l lam é a M ichel F. r r - r caultel, lunes 14 de diciem br e de 1981,
universalismointelectual. L- p"r^ proponerle que escribiér'amos en conjunto un llamamiento sobre
I'olonia ,v que tomáramos contacto con la CFDT, tenía en la mente, eviden-
rernente,ia ideadeÉ.*mbleceruna conexiónanálogaa la que sehabíainstaurado
en Poloiria entre los intelectuaiesv los obreros de Soiidrtntísc.
Si bien esta conexión ha existido -y con un efecto simbólico muy gran-
de-, no ha sido, en su devenir ult e¡ ior al acont ecim ient o,t odo lo que yo
lrabíaesperado.Por estarazón, me pareceque debo a la verdad,y a la memo-
ria de Michel Foucault, que no hacía tratnpascon ella, decir io que )/o espe-
raba, con la esperanzade que esto podrá servir,comr, se dicc, Paraotra vez...
En mi espíritu, lo que estabaen iuego en esia emprcsa,era la voluntad de
romper con el viejo modeio "seguidista"del inrelecrualde partido con moti-'
vo.l e una ac ción de solidar idad int er nacional,con un m ovim ient o en sí
mi smo carac t er izadopor el hecho de que [ os int elect ualesno esr abanailí
ieducidos al r.'l de comPañerosde ruta que se dejaban asignarde ordinario'
en cuant o gr uPo,ni m ás ni
l .a afi rmaci ónd. la exisr enciadc los i¡ r t clcct ualcs
nienosjustificadosde existirque otros, pero caPaces de imponer sus opinior.es

' 'l -cs i ntcl cctual c sy l os podel c s ",c n lv[icl¡cl Foucanlt, une histoire de la uérité,1'¡rís, Syros' I 985'

en el original (N. del T.).


l. "Chassés-croisés" ,,p.93-94.
usando sus propias armas, me parecíaparticularmentenecesarloen un mo-
mento en que se imponía en Franciaun orden político que' Por tradición' se la tradiciónlibertariade la izquierda*
Reencontrar
cubrla de justificaciones intelecruales.¿No es significativo que no se haye
jamás hablado tanto del silencio de los intelectualescomo en ei momento en
s m arun rcal mentel l pal ehra,
q u e , a pr opós ir ode Po l o n i a , l o s i n rc l e c ru a l e ro
s¡.¡scitandoel furor de los intelecrualesorgánicos?
Los intelecrualesy Ia CFDT. Los inrelectualesde la cFDT.r Todo lo que
hay en juego esrá en esta diferencia. Para que haya conexión, es necesario
que haya dcls. Los intelectualesno tienen <1uejustificar su existenciaa los ' ta ::

ojos de sus compaheros ofreciéndoles servicios -aunque se tratara de los


más nobles, al menos a sus ojos-, .como los serviciosteóricos. Tienen que
:-r: :
se r l o c iue s on, que p ro d u c i r y q u e i m p o n e r s u vi si ón del mundo soci al
-que no es necesariamentemejor ni Peor que las otras-, y que dar a sus
ideas toda la fuerza de la cual son c¿paces.No son los portavoces de lo a .:'.

universal. menos todavía una "clase uni¡¡ersal"'Pero sucedeque, Pot razo-


nes históricas, rienen frecuentemente interés en lo uniuersal.
on otros diEz intelectuales(reunidos con centenaresde otros signata-
No desarrollaréaquí las razonesque me hacen pensar que hoy es urgente - f\
\-- rios), usted ha tomado la iniciativa, desde el lunes pasado' de lanzar
crear una internacional de los artistasy de los científicos,caPazde ProPoner
un llamamiento a favor de Polonia, que criticaba duramente al gobierno
o de imponer reflexionesy recomendaciones a los poderespolíticosy econó-
francés (ver Libération del marres 15: "Les rendez-vousmanqués"). Estas
micos. Diré solamente -y cfeo que Michel Foucault hubiera estado de acuer-
críticas han parecido tanto más vivas cuanto que ellas se dirigían a un go-
do con ello-, que es en la autonomía más completacon resPectoa todos los
bi erno soci alist a. . .
poderes,donde resideel único fundamento posiblede un poder propiamen-
Pie¡re Bourdieu: Ante acontecimienroscomo los de varsovia, no hay que
te inteiectual, intelectualmente legítimo.
tergiversar,es necesariohablar, sería nbcesariopoder actuar. Pero ¿cómo?La
única acción posibie, para un ciudadano francésordinario, pasa por el gobier-
no francés.En este sentido, nuestro téxto trataba de Polonia y solamente de
Poionia. Nos pareció particularmenteintolerable que un gobierno sociaiista
que pretende,a justo tírulo, dar una dimensión moral a su acción, no exPrese
al menos una condena simbólica clara e inmediata al golpe de fuerza' Se hace
como si no hubiera otra alternativaque la guerrao nada. Es cómocio cuando no
se quiere hacer nada o justificarsede no hacer nada. Llay, de hecho, si se quiere
buscarbien, todo un arsenalde armas económicaso simbólicas.Y ei gobierno
ha comenzadoa encontrar algunas.le ellas bajo la presión de la opinión, que
debe todavía presionar sobre él pafa que ias ponga en práctica realmente.

* 'lRerrouver la rradition libenaire de la gauche D, entrevista de René Pierre y Didier Eribon"

Libération, miércoles 23 de diciembre de 1981, PP. B-9.


1. l.a distinción valc para toda otr¡ sigla,a fortiori'

t 73
r'7',

: '!.:l
{
[)ierre IJourdictt
T Reencontrar la tradíción líbertaria de Ia izquierda
t

* que habría debido ser la de rodas las organizaciones sindicalesante el aplas-


Pero vuelvo a este punto: ¿quéhay de anorniai cn el hccho dc clirigirseal
gobierno?Tiarándosede un asunto de pr:líticaextranjera,él es el único con i
ramiento militar de un movimiento sindical. Esta acción normal no Parece
É
poder para hablar y actuar eficazmenteen nuestro nombre. Nosotros le he-
i excepci onalsi n o por la dim isión anor m al de los ór ganosde expr esióndel
:
r.nosdelegado nuestros poderes en la materia. Tenemos derechossobre é1. movi mi enro ob ¡ er o, No som os nosot r os quieneshem os elegido t ener Por
, n e mo se l p ri " ;l e g i o d e p o d er ej erceresederechc de
Co mo int elec t uale ste t interlocuto¡ único la CFDT.
todo ciudadano cor-runa cierta eficacia.(Aunque la publicación de nuestro : - Pero ¿por qué este lazo entre los intelecrualesy los sindicatos les ha

l l a mam ic nt o hay a en c o n tra d oc i e rto srb s tá c u l o s ...);Qui záshubi erasi do ne- parecidonecesario?
ce sa r ioes per arque e i p re s i d e n ted e l a R e p ú b i i cavi ni era a expi i carnos.un PB.: En primer lugar,por su valor simbólico,en la medida €n que ev'ocaio
mes después,en una charlaai calor del fuego, lo que él piensade Polonia1' 16 que ha sido una de las originalidadesdel movimiento solidaridad" Y podía
que ha podido decir en el secretode los encuentros"de alto nivel"! Veinte consriruir,por eso mismo, una contribución a la defensade Solidaridad.Pero
años de Quirrta República han hecho decaerlos reflejos democráticosele- había, también, una cie¡ta convergenciaen el anáiisisde la si¡uación polaca'
mentales.Un gobierno puede y debe se¡ lla¡r,adoal orden. solidaridad es un gran movimiento obrero no militarizado que es aplasta.,io
- Fue su reacción "ética"a la represiónen Polonia, pero la iniciativa de poi la fuerzamilirar; v también un movimiento dirigido contra el socia.lismo
algunosde los primeros signatariosde esetexro, de proponer un llamai-nien- de Estado. El poder de pensar ia sociedad,de cambiar ia sociedad, no se
to común a la CFDT va más lejos. ¿En qué medida la c¡isispoiacajustifica. deiega,y sobre todo no a un Estado que se da el derechode hacer la felicidad
de e.stadode urgencia-paraei movi-
a sus ojos, ia declaraciónde una espec.ie de ios ciudadanossin eiios, incluso a pesar de ellos. Esre poder de transfor-

mientc intelectual? mación, más o menos revolucionario, no se delegaen hombres de aparato


P.B.:El régimen en el cual estamoses tal que los gobernant€sconcentran siempre preparadospara volversehombres de aparato de Estado. Esto es lo
rodos los poderes.Y esto me pareceque es una situación malsana.De todas que el movimiento polaco ha ¡ccordado:la quiebrade un sistemaen el que se
fo.'mas.Sob¡e todo, cuando los detentadoresdel poder se sienreninvestidos, presumeque el movimiento viene de arriba.

llevados, justificados por fuerzas popr-riares,


que uno no ve cómo pr-reden - ¿Esto significa que usred piensa que una alianzapermanente debe esta-
y la CFDT?
blecerseentre los intelectuales
expresarse. EI único contra-podereficazque veo es Ia crítica intelectualy la
PB.: Sobre esre punro, acada uno le correspondedecidirlo. Por mi parte,
acción de los sindicatos.Creo que los intelectualesestán en derecho,como
todos los ciudadanos,de ejerceruna vigilanciacrítica -lo que no quiere decir pienso que el llamamiento que lanzamos en común es un acontecimiento
negativa- de rodos los momentos. No hace mucho tiempo se deploraba el puntual y que habría lugar, si seméjanteiniciariva debiera renovarse,Para
volver a discurir, puntualmente, golpe por golpe. Dicho esro, me Pareceque
silenciode los intelectuales.Ctrando ellos hablan, se pone ei grito en el cielo.
Lo que quiere decir, en buena lógica, que no se conce<leotro derecho a los ia CFDT, en el esrado acrual, algunos dirán ha expresado,otros ha recuPera-

intelectuales,y, por extensión,a todos los ciudadanos,que de hablar a favor do, la corriente anri-institucional,que es.uno de los componentesimportan-
del gobiernc. Sobre este pulrto, nuestro llamamiento lia funcionado como res de la izquierda en Francia. Existió el '68 y la crítica del sistema de ense-

un revelador (Sartre habría dicho: como "un pilge á cons'). Ha suscitaclo ianza; exisrió la ecoiogía y la puesra en cuesrión de rodo un modo de vida;

declaracionescsrúpidaso ridículas,a vecesindecentes-pienso en los ataques exisrió el movimiento feminista; existió, y no es lo menos importante, la
de izquierdaentre comillas-, a
contra Yves h4ontand o cnntra los intelectuaies críricade ios aparatos, del centralismo, !a crítica de las relacionesjerárquicas

ve ce sinquiet anies- p i e n s o e n l o s a c e n to sd i g n o s de K anapa quc ha sabi do y de ias relacionesde autoridad en la ernpresa,la escuela,la familia, etc' A
rod.o esro, a causa de la posición que ocupa en el campo de concurrencia
encontrar nuestro ministro de Cultr-rra,para oPoner la "lealtad perfecta"de
los ministrc;scomunistasa la inconsecuencia¡ípicatnente"estrr-tcturalista" de entre las centrales sindicales, a causa, también, de las característicasParticu-

l o s i n t elec t uales . laresde sus militanres -que son especialmentesensiblesa lo simbólico y a las

Ahora, ¿por qué un iazo con Ia CIjD']'? Hay razonesevidentes:cstaorgani- formas simbólicas de dominación- la CFDT lo ha comprendido y cxpr"esado

zación ha tenido inmediata¡ncnte,antes qtre toda otra instancia,la reacción mejor. Pero aquí sería necesarioun análisis rn.ry largo'
El encuentro entre los intelecrualesy la CFDT se explica rambién quiz:is estaríanescritospor el más comPetentede ellos sobre el asunto considerado,
p o r e so : unos y ot r os s o n s e n s i b l e sa l h e c h o d e que l as ccrri enres anri - y serían leídos por un actor. En este sentido, la emisión Montand-Foucault en
institucionales se sienten mal o poco expresadasdesde el 10 de mayo. Nos Europa I, que ha suscitadotal emoción entre nuestrosdirigentes-y también, y
resaltan programas y promesas,como si rodo lo que no ha pasado por la es lo más importante, en el público- me Pareceejemplar.
picadorade los aparatos,de los congresos,de los programasy de las platafor, - ¿Suacción actual es una máquina de guerracontra el Partido comunista
mas, no exis¡iera.Se olvida, por razonessocioióqicasque no puedo desarro- frances?
llar aquí, que la socicdadfrancesaho sido el lugar, d.esdchace veinte años, tjc P.B.: Responderéal menos que el PCF, que se dice cuidadoso de la paz
una prodigiosa invención política, y que hay lugares,en el mundo intelec- interior en Polonia (y en el seno del gobierno francés),sin duda ha subesti-
rual y también en otra parte, donde este rrabajo conrinúa. En resumen, no se mado el poder que detenta, en cuanto "hija predilectade laJglesia'(comu-
puede decir que la imaginación esréen el poder. nista), de acruar por la paz inrerior de Polonia. Es suficiente ver el eco que
- ¿Los intelectualespueden constituir una expresiónsocial y política que han tenido las declaracionesnotables de Berlinguer para medir la gravedad
lesseapropia?¿Yel lazo con el movimiento socialno esmuy problemárico? de la complicidad del PC francés.
PB.: En efbcto, es difícil dar una verdaderaeficaciaa la crítica intelecrual. Se Si Polonia no es Chile, es que A no es igual a A: el principio de identidad
trara de dar una fuerza social a la crítica intelectual y una fuerza intelectual a se viene abalo y con é1 la ici;ntidad de los intelectuales.
la crítica social; exciuyendo de entrada la posrura del "compañero de rura'
que traga quina en nornbre de la disciplina, y el sueño leninista del inrelec-
tual que disciplina un aparato obrero. Es cierto que la situación de intelec-
tual libre, o, si se quiere, "irresponsable",es la condición de un análisispolí-
tico libre, y en particular, de un análisislibre del mundo político. Por mi
parte, entiendo defender sin complejos esta posición contÉ* todos los "res-
ponsables"que hacen pasar los inreresesde las organizacionesantes que el
inreréspor la verdad, conrra todos los que hablan con un PC en la punra de
Ia lengua. De manera más general,ei principal obstáculoa la instauraciónde
nuevasrelaciones,entre los intelectualesy el movimiento obrero, nace de la
convergenciadel obrerismo de ciertoscuad¡osde origen obrero en las organi-
zacionesde izquierda y del anti-intelecrualismode ciertos intelectualesque
se sirven de los aparatosde izquierda para reforzar su posición de intelectua-
les. Al!í, incluso, seríanecesariodesarrollary precisarlargamenreei análisis.
Para volver a la acción a favor de Polonia, pienso que ia conjunción enrre
los intelectualesy un gran movimiento sindical es, sin duda, la mejor mane-
ra de dar a esta acción toda su eftcacia,y de hacer pesar la presión sobre e!
gobierno, Los intelectualesno han inventado ningún medio de acción nuevo
desdeZolá; sufren de la ineficaciade Ia petición y del divismo al cual los
co n d e n a.A gr ego que la l ó g i c a d e l a p e ti c i ó n -q u e suponesi empreuna i ni -
ciativa, por lo tanto, un lugar inicial- tiende a dividir el medio que, por la
lógica misma de su funcionamiento,estáconsagradoa la concurrenciaperso-
nal. Por esta razón, desde hace mucho tiempo he formulado la uropía de =
g
constituir un grupo de inrelectualescuya firma seríacolectiva,cuyos rexros

t
t
t'7'l
176 É
*
"No hay democraciaefectivasin verdadero
crítico"* i
contra-poder

n número reciente de la reviscaque usted dirige, ha tomado Por tema


- T T
\-/ a quie-
el sufrimienro.¡uno encuentraallí variasentrevistasrealizadas
nes los niedios de comunicación no dan la palabra:jóvenesde barrios margi-
nales,pequenosapicultores, trabajadoressociales'El director de un colegio
en dificulradesexpresa,por ejemplo, su amargura personal:en lugar de velar
por ia transmisiónde los conocimientos,se ha convertido, a pesarsuyo, en el
policía de una suerte de comisaría.¿Ustedpiensa que tales ¡estimoniosindi-
vidualesy anecdóticospueden petmitir comprender un malestarcolectivo?
Pierre Bourdieu: En la investigación que llevamos a cabo sobre el sufri-
rniento social, encontramos mucha genre, como ese director de colegio,que
está como atravesadapor las contradicciones del mundo social, vividas bajo
la forma de dramas personales.Podría <irar también a ese jefe de proyecto,
encargadode coordinar todas las accionessocialesen un "suburbio dificil" de
una pequeña ciudad del norre de Francia. Está conlrontado a contradiccio-
ncs que son el límire exrremo de las que padecen todos aquellos que llama-
mos los "trabajadoressociales":asistentessociales,educadores,magistrados
de basey tambi.:n, cada vez más, profesoresy maestros.

- "ll n'y a pas de démocratie effective sans vrai contre-pouvoir cririque", entrcvista realizadapór
I{oger-Pol Droir y -fhomas Ferenczi, Les grands entletient du mondt, 1993, pp. 87'89'
|. Acte¡ d¿ la rechercheen sciencessociab¡, N" 9tl, diciembre de I 99 I, I 04 pp.
H ebría. hece t icm po, que su t 'evuelt ese t ¡ t -
Iti d o com pr ender se, , lcsde
Eilos constituyen lo que yo denomino la mano izqr-rierdadel Estado, .l
conce-
conjunro de los agentesde los minisre¡iosllamadosdispendiosos'que guar- tiende mucho más allá de las cuestionesde salario,incluso si el salario
a lc;strabajado-
dan la huella, en el seno del Estado, de las iuchas socialesdel pasado. Sc dido es un índice sin equívocodel valor otorgado al trabajo y
y que el desprecioPor Lrna función se revela en primer
oponen al Estado de la mano derecha,a los tecnócratasdel ministerio de res correspondientes,
es acordada'
finanzas,de los bancos públicos o privados y de los gabinetes¡ninisterialcs. lugar por la remuneraciónmás o fflenos irrisoria que le
- ¿Usted crec que el margen de ma¡riobra de los dirigentes políticos sea
Mu chos de los m ov i mi e n to s s o c i a l e sa i o s c u a l esasi sti mos(y asi sti renros)
expresanla revuelrade la pequeñanoblezade Estado contra la gran noblcza tan resrri ngi do:
d e Es t ado. pB.: Hoy no hay nadieque no hayacomprendidoque esteinafgenesmucho
queda ai me-
- ¿Cómo explica usted esta exasperacién,estasformas de desesperación v más reducido que el que los parridos quieren hacer creer.Pero
el de lo
estasrevueltas? nos un domi ni o en el que los gober nant est ienen t oda liber t ad:
a todo el per-
P.B.:Piensoque la mano izquierdadel Estadotieneel sentimientode que la simbólico. La ejemplaridadde la conducta deberíaimponerse
devoción a los
mano derechano sabe más, o peor, no qr-rieresabermás, verdaderamente,lo sonal del Estado, sobre todo cuando invoca una tradición de
se ven no sola-
que hace la mano izquiercla.En todc, caso,no quiere pagar el precio de ello. inreresesde los más desposeídos.¿cómo no dudar cuando
(a vecescasi oficiaies' con las primas de
Una de las mayores razones de ia desesperanzade ioda esta gente se debe al mente los e.iemplosde lorrupción
(el término es' sin
hecho de que el Estado se ha retirado, o está retirándose,de un cierto nútne- ciertos altos funcionarios)o de rraición al serviciopúblico
de desvío
ro de sectores de la vida social que le incumbían y que tenía a cargo: la duda, muy fue¡te: pienso en el pantouflage)' y todas las fotmas
nepo-
vivienda pública, la televisióny la radio públicas,la escuelapública, los hos- -con fines privados- de bienes,de beneficiosy de serviciospúblicos:
"amigospersonales""'),
al
p i ta l e s públic os , et c ., c o n d u c ta ta n to má s s o rp rendenteo escandal osa, tismo, favoritismo (nuestrosdirigentestienen muchos
rnenos para algunos de ellos, cuanto que se trata de un Estado socialista,del cl i entel i smo?
cual se podría esperar*al menos- que actúe como garanrede! serviciopúbli- simbólico.! Sin duda, la televisiónha contribui-
¡Y ni hablar de benerficios
civil' Ha llama-
co como servicio abierto y ofrecido a todos, sin distinción...Allí donde uno do mucho más que los sobornosa la degradaciónde la vi¡tud
"Presu-
cree que existeuna crisis de lo político, un antiParlamentarismo, se descubre do e incitado al frente de la escenapolítica e intelectuala personajes
valer' en contra-
respectoal Estaclocomo resPonsableclel inre-
en realidad una desesperanza midos", atentos--antesque nada- a hacersever y a hacerse
colectivoque
ré s p úblic o. cliccióntotal con los valoresde devoción humilde por el interés
egoísta de ha-
Que los socialistasno havan sido tan socialistascomo ellos lo pretendíar: hacían el funcionario o el miliranre. La misma preocupación
a cosra de rivales)explica que las "declaraciones
no ofuscaríaa nadie: los tiempos son duros y el margen de maniobra no cs cersevaler (Frecuentemente
grande. Pero lo que puede sorprenderes que hayan podido contribuir, a tal efectistas"se hayan vuelto una práctica tan común'
cuando puede
punto, ai abatimiento de ia cosapública: en primer lugar, en los hechos,por Para m,.rchosminrstrospareceque una mediciano vaie sino
ha sido hecha pública'
toda suerte de medidas o de políticas (no nomb¡aré sino los medios de co- se¡ anunciada y se consideracomo realizadadesdeque
-porque re-
municación) que apr..,ntana la liquidación de ias adquisicionesdel Welfare En ¡esumen,la gran corrupción cuyo develamientoescandaliza
y las prácticas
entre las virrudes profesadas reales-,no cs sirlo
stttte,y sobre todo, quizás,en el discursopúblico, con el elogio de la empre.sa vela el desfasaje
e! límite de rodas las peqi-reñas"debilidades"ordinarias,ostentaciénde lujo,
p ri va da ( c om o s i el e s p íri tud c em l ' tre s an o tu v i e raotro terrenoque l a emprc-
sa ), e l es t í m ulo al i n re ré s p ri v a d o . T o d o e s to ti ene al go de sorprendente, aceptaciónapresurariade los privilegics materialeso simbólicos'
la reacción
sobre toCo para aquellosa quienesse envía, en primera línea, a desempeñar - Frentea la situaciónque usted descubre'¿cuáles' a sus ojos'
ias funciones llamadas "sociales"y suplir las insuficienciasmás intolerables de los ciudadanos?
de la lóeica del mercado,sin darleslos medios para cumplir verdaderamenre
paratrabai aren el s ec torpri v ac i o'
su rnisión. ¿Cómo no tenciríanel sentimiento de estarconstantementeinde- 2. Térmi no que se refi ere¿i hec ho de dc j ar el s e¡v i c i odel E s tado

cisos o desautorizados? pagando, si es preciso, una inde mnización (N' Del T')'

r80 1¡ J1
*
Piarre Bounlieu I "Na lny clentocracia efectiua sitt uerdurlero contra'poder crítico"

*
P B . : Leí a r ec ie n re m e n reu n a rríc u l o d e u n a Lrroral emán sobre el A nri - *
g PB.: Estándesacreditados más frecuentementePor aquellosmismosque son
g u o E , gipt o. M ues tra c ó m o , e n u n a é p o c a d e cri si s de confi anza haci a el ¡
I sus guardianes.El congreso de Rennesy la ley de amnistía han hecho más
Estado y el bien público, se veían florecer dos cosas:enrre los dirigentes,la por el descrédirode los socialistas Y
que diez años de campaia antisocialista.
corrupción, correlativa de ia decadenciadel respero por ia cosa pública un miiitante "quebrado"(en todos los se .tidos del término) hacemás <iañoque
¡
e n ¡re los dom inad o s , l a re l i g i o s i d a dp e rs c n a la soci adaa l a drsesperanza
en Pero diez añosde poder socialistahan acabadocon la demoli-
diez adversarios.
l o q ue c onc ier ne a l o s re c u rs o ste mp o ra l e s .D e l mi smo modo, se ri ene el ción de la creenciaen el Estadoy con la destruccióndel tstaCo de providencia
se nt im ient o ho, v d e q u e e l c i u d a d a n o ,s i n ri é n dosel anzado al exteri or del emprendidaen los años'70 en nombre del liberalismo'
Estado (quien, en el fondo, no le prde nada ituerade conrribucionesmare- Pienso en parricula¡ en la política de vivienda. Tenía como fin declarado
riales obligatorias,y sobre todo nada de devoción, de entusiasmo),rechaza arrancar a la pequeña burguesía del hábitat colectivo (y d" .re modo del
a l Es t ado, t r at ánd o l o c o m o u n a p o r€ n c i ae x t¡a ñ aa l a gue uti l i za cl e l a ma- "colectivismo")y ligarla a la propiedad privada de su chalet individual o de
nera rnás ventajosa. su departame nr o en copr opiedad. E, st apolí t ica r iene en eilo un senr ido
- us t ed habla d e l a g ra n l i b e rta d d e l o s gobernantesen el domi ni c muy acertado. Su resukado ilustra 1o que yo decía rápidamente sobre los
simbéiico. Ello no concierne sólo a las conductasdadas c<¡moejemplo. se costossocialesde ciertas economías,Pues ella es, sin duda, la mayor causa
tra ta t am bién de p a l a b ra s ,d e i d e a l e sm o v i i i z a dores. cie segregaciónespaciai¡ desde este punto de vista, de los problemas lla-
¿D e dónde vi ene, en
este punto, ia deficiencia acrual? mados de l os "subur bios".
P B . : s e ha hab l a d o m u c h o d e l s i l e n c i od e l o s i ntel ectual es.Lo sue me - Si se quiere definir un ideal, ese sería,pues, el retorno al sentido del
so rpr endees el s ile n c i o d e l o s p o l íri c o s .Es tá n fi ' ,nni dabl em" nr. d. Estado,de la cosapública. Usted no comPartela opinión de todo el mundo...
" r..rn, PB.: La opinión de todo el mundo ¿esla opinión de quién?De la genteque
idealesmovilizadore.s.Sin duda, porque la profesionalizaciónde la política
y las condiciones exigidas a los que quieren hacer carrera en los partidos cscribeen los periódicos,de los inteiectualesque predican la "reducción del
excluyen cadavez más a las personalidadesinspiradas.Sin ducia,,rambién, Estado" y que endefran un poco rápido lo público y el interés del público
porque la definición de la acrividad polírica ha cambiado con la llegadade por lo público... uno tiene allí un ejemplo típico cie esreefecto de creencia
u n p er s onal que h a a p re n d i d o e n l a s e s c u e l a s(de ci enci aspol íti cas) que, comparrida que lleva a poner de entrada fuera de discusión tesis comPleÉ-
para dar la impresión de serio o simplemenrepara evitar parecer mediocre ¡nente discutibles. Sería necesarioanalizar el trabajo colectivo de los "nuevos
o antiguo, es mejor hablar de gesrión que de autogestión y que es necesa- intelecruales",eue ha creado un clima favorable al reuairniento del Esado ¡
rio, en todo caso, darse las apariencias(es decir, el lengLraje)de la raciona- más ampliamente, a la sumisión a lbs valores de la economía.
l'retorno del individualismo", suerte de
l i d a d ec onóm ic a. Pienso en lo que se ha llamado e'l
E,ncerrados
en el economicismoestrechoy corro de vista de la visión-del- profecía autorrealizanteque tiende a destruir los fundamentos filosóficos del
mundo-FMI, que rambién hace (y hará) estragosen la r-elaciónNorte-sur, WLlfarestate y, en particular, la noción _de responsabilidad colectiva (en el
todos esossemi-hábilesen materia de economíaomiten, evidenrerrrenre5 ro- accidente de rabaio, la e¡fermedad o la miseria), esta conquista ñ¡ndamen-
mar en cuenta los costos reales-a corto y, sobre todo, o largo piazo-, de la rai del pensarnienrosocial (y sociológico). El retorno al individuo es también
miseria material v 'inoral que es la única consecuenciacierra de la realpolitih el rerornc a la responsabilidadindividual (se puede culpar a la víctima) y a la
e co n óm ic am ent ele g i ti m a d a :d e l i n c u e n c i a c, ri m inai i dad, al cohol i smo,acci - acción individual (se puede predicar el self belp), todo esto al abrigo de la
de¡rtesde ruta, etc. Aquí, orra vez, ia mano clerecha,ol¡sesionadapor la cues- n"cesidadincansablementerepedda de disminuir las cargasde la empresa.
ti ó n de los equilib ri o s fi n a n c i e ro s ,i g n o ra l o q u e hace l a mano i zqrri erda, La reacci ón de pánico r er r ospecr ivoque ha det er m inado la cr isis del
confrontada a las consccuehcias .scciales
frecuenremenremuy cosrosasde las '68, revolución simbólica que sacudió a todos los pequeños portadoresde
"e co nom í aspr es up u e s ta ri a s " . capital cukural, ha creado (con el refuerzo del derrumbamiento -¡inespe-
- Los vaioressobre los cualesestabanfundadoslos actos ias contribucio- rado!- de los regímenesde tipo soviético) las condicit¡nes favorabiesa Ia
i,
n e sdel E s t ado; no so n m á s c l eíb l e ,s ? restauracióncultural, según la cual el "pensamiento Ciencias-Polfticas"ha
de la historia.l Dicho esto, para citar a Karl Kraus, "entre dos males, rechazo
reemplazadoal "pensamienro lt4ao". E,i nrundo intelectual es hoy' el luger
el egi r el menor" . Si casi no t engo indulgenciapar a ios int elect uales"ir r es-
d e u n a luc ha que ap u n ta a p ro d u c i r y a i m p o n e r " nuevos i ntel ectuai es" ,
por lo tanto, una nueva definición del intelectual y de su rol político, de la ponsabl es" , rne gust an t odaví a m enos esos r esPonsable."int s elect uales"

filosofía y del filósofo, en adelante comPrometidos en los vagos debates poiígrafos, polimorfos, que Ponen su entrega anual entre dos consejos de
"neo-aronianos"de una filosofla política sin tecnicidad, de una ciencia so- administración, tres cóctelesde prensay algunasaparicionesen la televisión.
- Ahora, ¿qué rol desearíausteclpara los inteleccuales,especialmenreen
ci a l rcduc ida a una p o l i to l o g ía d c v c l a d a e l e c ro raly a un comentari o si n
vi g i l a nc ia de s ondeo s c o m e rc i a l e ss i n m é to d o . P l atón tenía un térmi no la construcciónde Europa?
PB.: Deseo que ios escritores,los artistas,los filósofosy los científicospue-
magnífico para tcida esta gente, el áe doxósofo:ese "técnico-de-opinión-
(traduzco el doble sen¡ido del término) plantea los pro- dan hacerseentender directamerlteen todos los dominios de la vida púbiica
que-se-cree-sabio"
blemas de la política en lo¡i términos en que se los plantean los hombres dc en los que son competentes.Cre.' que todo el mundo tendría mucho que

negocios,los hombres políticos y los periodistaspolíticos (es decir, exacta- ganar si la lógica de la vida intelectual,la de Ia argumentacióny refutación,
mente los que pueden pagarsesondeos...). se extendi era a l a vida pública. Ho¡ es la lógica de ia polí t ica, ia de la
* Usted acaba de mencionar a Platón. ¿La actitud del sociólogo se acerca denunciación y de la difamación, de la "esloganización"y de la falsificación
a la cielfilósofo? del pensamientodel adversario,la que se extiende frecuentementeen Ia vida
PB.: La sociologíase opone al doxósofo,como el filósofo,en que pone en intelectual.Seríabueno que los "creadores"pudieran cumplir su función de

euestión las evidencias y sobre todo las que se presentan bajo la forma de servicio público y, de vez en cuando' de salvaciónpública.
Pasar a la escalade Europa, es solamente elevarsea un grado de univer-
Fregurrzs, las suyas tanto como las de los otros. Es io que choca profunda-
mente al doxósofo, que ve un prejuicio político en el hecho de rechazarla salizaciónsuperior, marcar una etaPa sobre el camino del Estado universal
sumisión profundamente política que implica la acerptación inconscientede que, incluso en las cosas intelectuales,está lejos de ser realizado. No se
los iugares comunes, en el sentido de Aristóteles: noci&neso tesis ssn l.as hab¡ía ganado gran cosa si el europeocentrismoviniera a sustituir los na-
cualesse argumenta, pero sobrelas cualesno se argumen[a. cionalismos heridos de las antiguas nacionesimperiales.En el momento en
- ¿No ¡iende usted, en un sentido, a poner al sociólogoen un iugar de que las grandes utopías del siglo diecinuevehan entregado toda su Perver-
sión, es urgente las condiciones de un trabajo colectivo de recons-
filósofo-re¡ único que sabedonde estánlos verdaderosproblemas? -crear
PB.: Lo que defiendo antesque nada, es la posibilidady la necesidaddel trucción de un universo de idealesrealistas,capacesde movilizar las volun-
i n te l cc iualc r í t ic o, I ' c ríti c o e n p ri m e r l u g a r,d e l a doxl i ntel ecrualque ei er- tedes si n mi sti fi car las conciencias.
cen los doxósofos.No hay democraciaefectiva sin verdadero contra-poder
crítico. El intelectuales uno de ellos,y de primera magnitud. Por estarazón,
conridero que el trabajo de demolición del intelectualcrítico, muerto o vi-
viente -Marx, Nietzsche,Sartre,Foucaulry algunosotros que se clasificanen
b l o q u e bajo la et iqu e ta " p e n s a m i e n tod e l ' 6 8 " - es tan pel i grosocomo l a
demolición de la cosa pública, y qire se inscribeen la misma empresaglobal
d c re st aur ac ión.
Me gustaríarnás, evidentemente,que los intelectuales,todos y siempre,
hubieran estado a la altura de la inrnensaresponsabilidadhistórica que les
i n cu m be y que hubi e ra n c o m p ro m e ti d o s i e m p re en sus acci onesno sol a-
me n te s u aut or idad mo ra l , s i n o ta m b i é n s u c o n - ri etenci ai ntel ectual-a l a
3. V'ei especialmenreLe: ]rif, torno I, Máspcro,i981; tomo lJ' tr-a
k Ménoitc et le Présent,
manera,pare no dar sino un ejemplo, de un PierreVidal-Naquet, que invier-
D écouverte, 1991.
tc todo su dominio del método histórico en una crítica de los usosabusivos

t84 185
de losintelectuales*
Poruna internacional

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1-\" ui si era pr oponer un conjunt o de or ient aciones par a una acclon


.o1..,i.,r" d.^lo. intelectualeseuropeos, apoyándome sobre un análisis,
\!
intelecual'
,"r, Elirr" como sea ¡iosible, de lo gue es y de lo que puede ser el
El intelectual es unkr parad|jico, que no se puede Pensar como tal mientras
el comPro-
se io aprehendaa travésde la ahernativa clásicade la autonomía y
se ha constituido, históri-
*iro, d. la cultura pura y la política. Ello porque
ios
camenre, en y a través de la superación de esta oposición: los escritores'
vez como inteleciuales cuando,
artistasy los científicos seafirmaron por primera
tales,
en el momento del caso Dreyfus, iritervinieron en Ia vida política como
al
es decir con una autoridad específiia fundamentada en la pertenencia
la literatu-
mundo relativamente autónomo del mundo del arte, la ciencia y
ra, y en todos los valores asociadosa esa.autonomía, desinterés,competencia,
como
etc. El intelectual es un personaje bidimensional: sólo existe y subsiste
(es
ral si, por una parre, existe y subsisre un mundo intelectual autón1m9
ct¡''es ' .
decir, indep.rrdi"nr. de los poderes religiosos, políticos, económicos),
otra Parte' la autoridad especfficague.le -',
.l"y.r.rp..íficas respeta,/ si, por
las -
elabora en esre universo a favor de la autonomía está comprome¡ida.en
una
luchas políticas. Así, lejos de existir, como se lo cree habitualmente'
al arrc' a la
antinomia entre la búsqueda de Ia autonomía (que catacteriza

Poütis,1992,N" I' pp' 9-15'


' "Pour une internationaledes'intellectuels",
les había conferi-
ci e n ci a o a la lit er at ur a ,q u e s e l l a ma n p u ro s ) y l a búsqucda dc i a efi ca.t., ideasrevolucionarias-a rravésdel rol áe opiniott mabersque
de la Revolución-,
política, es incrementando su autonomía (y, Po. ello, entre otras cosas,su do la rnultiplicación de los periódicosen la primera fase
desconfianza,incluso
liberrad de crítica respectoa los poderes)que los intelectualespueden incre- sino también de los excesosdel Térror, son mirados con
y muy especiaimen-
mentar la eficaciade una acción política cuyos fines y medios encuentran su con desprecio,Por la joven generaciónde los años l82O'
r ecusany
principio en la lógica espccíficade los campos de producción cultural. re por l os románti c os, que, en la pr im er a f ase del m ovim ient o
la vida política y de
Es necesarioy basta con repudiar la vieja alternativa que todos tencntos rechaza¡la pretensión del "filósofo" de intervenir en
Pero, al encontrarseame-
en la mente y que resurgeperió<licamente en los debateslirerarios,pa¡a estar proponer una visión racionaldel devenir histórico.
reaccionariade la
en condicionescledefinir lo que podrían ser las grandesorientacionesde una nazadalaautonomía del campo intelectualpor la poLtica
conducidos a afirmar
acción colectivade los intelectuales.Pero esta suerte de expulsión de las for- Restauración,los poetas ,o.njnri"o, -que habían sido
y del senti-
mas de pensamientoque nos aplicamosa nosotrosmismos cuando nos toma- su deseode auronomía en una rehabiiitaciónde !a sensibilidad
los dogmas-' no tardan
mos por objeto de pensamientoes Formidablementedifícil. Por csta raz-ón. miento religiosos contra la Razón y de la c¡ítica de
(especiaimente'con
an te s ci c c nunc iar c s t a so ri c n ra c i o n e sy p a rl p o d c r h aceri o,cs neces,rri oi n' en reivindicar la libertad para el escritor y el científico
profetica'que era
tentar explicitar lo más completamenteposible el inconsciente-y en Parti- Michelet y Saint Simon) y en asumir, de hecho' ia f,unción
cular los principios de visión y de divisiór¡ tales cnmo Ia oposición entre ei la del filósofo del siglo XViII'
que Pare-
a rte p u ro y el ar t e c omp ro me ti d o - q u e s c e n c u e ntra deposi tado,en cade Pero, nuevo movimiento pendular, el romanticismo populista
que precede a la
intelectual,por la historia misma de la cual los intelectualesson el producto. ció apoderarsede la casitotalidad de los escritoresen el período,
y a la instauración
Contra la amnesiade la génesis,que estáai principio de rodas las for¡nas de revoluciónde 1848, no sobreviveal fracasodel movimiento
que yo llamaría,a
la ilusión trascendental,no hay antídoto más eficazque la rcconstruccióndc del segundo Imperio: el desmoronamientode las ilusiones,
con las ilusiones
la h i sto ria olv idada o re p ri m i d a q u e c o n ti n ú a i u n ci onando baj o l a forl na propósi to, cuarentayochescas( par a evocar la analogí a
nuestro presente),
p a ra d ó j ic a de es asf orm a s d e p e n s a m i e n toe n a p ari enci rahi stóri cas, que ,"...,r"yo.h.scas, cuyo derrumbamiento todavía frecuenta
por Flaubert
estructuran nuestra percepcióndel mundo y de nosotros mismos- cond.ucea eseextraordinariodesencanto,tan vigorosamenteevocado
sentimenta/,que proporciona un terreno favorabie á una nueva
en La ed.ucación
de los intelectuales'
afirmación de la aur-onomía,radicalmenteelitista esÍ.avez'
dei arte por el arte,como Fl",rÜerto Théophile Gautier' afirman
Un falso problema: compromiso o retirada Los defensores
la autonomíadel artistaoponiéndose tanto al "artesocial"y a la "bohemialitera-
y también de arte de
Historia extraordinariamenterepetitivaporque el cambio constanterevisre, ria,,como ai arte burgués,subordinado,en materiade arte
poder naciente
en ella, la forrna de un movimiento pendular entre las dos actitudes¡rosibles vivir, a lasnormasde la clientelaburguesa.se oponen a esenuevo
de la "literatura indus-
respectoa la política,el compromisoy la retirada(por lo menos,hastala supe- oue es ia industriacultural rechazandolas servidumbres
como en Gautier o
ración de la oposicióncon Zr)ay los defensores de Dreyfus).El "comp',romiso" .ri"l" 1r"luoen calidadde sustirutoalimentariode la renta,
de los "filósofos" que Voltaire, en el artículo d,el Diccionarioflosó/ico titulado N erval ).A i noadmi t ir ot r ojuicioqueeldesuspar es, af ir m anelcier r esobr esí
escritora salir de su
"El lrombre de letras",opone, en 1765, al oscurantismoescolástico de las uni- mismo d.elcampo iiterario, pero también la renuncia dei
(rompiendo en ello con el
versidadesdecadentes y de las Academias,"donde se dicen las cos-. a medias", rorre de marfil paraejercercuaiquierforrrrade poder
se orolonga con ia participaciónde ios "hombres de letras"en la Revolución paeteu/ltes,a lo Hugo, o con el científicoprofeta' a lo Micheiet)'
en el momento en
francesa-aun cuando, como lo ha mostrado Robert Darnton, l,r "bohemia Por una paradoiaaparenre,essolamentea finalesdei siglo,
científico accedena la
literaria" aprovechalos "desórdenes"revolucionariospara tomarseia revancha que el ."-po lit"r"rio, el campo aftístico y el campo
autónomosPue'
contra los más consagrados de los continuadoresde los "fiIósoibs". autonomía,que los agentesmás autónomos de estoscamPos
no como producto-
En el per í odo de ¡ e s ta u ra c i ó n l os " hombres de l etras" ,
p o s re v o l u c i o n a ri a, den intervenir en el ."rn]po poiítico ccmo intelectu:ries-y
res cu¡ural es conv er t id; s en hom br es polí t icos, a la m aner a de Cuizot o
porquc son con-,cleradosresponsables no solamentedel rnovimiento de lrs

189
188
Porunainterr¿dcior.el r Ft
de losintelectualgs
, Ilourdieu
ff
.T
I-amartine-, es clecir,con una au¡o¡idad fundada en la autonomíadcl campo de la autonomía que está inscrita en Ia exister.cia¡nisnrecie un csrlip{, {.tr
obstáculosy poderesrenouatluss;n Lr*
y en todos los vaioresasociadosa é1,purezaética,competenciaespecífica, ctc. prociuccióncultural debe contar con
los de la lglesia'del Es¡adoo rle 1:¡
Cio¡rcretamente. la autoricladpropiamente :rftísticao científica se afirma en ,"r, y^ se trate de poderesexternos,como
poderes internos' ¡ en particular'los qu*
acrospolíticos colno el "Yo acuso"deZola )'las i¡e¡icionesdestinadas a soste- qrandesemPresaseconómicas,o de
de producción y de difusión e's¡:eeí-
n e rl o . E , s t osac t os po l íri c o sd e rrn ti p o n r,re v oti e n dcn a nraxi mi zarl as dos lonfi.r"* el controi de los instrumentos
etc')'
d i me r-r s iones c ons t it u ti v a sd e l a rc i c n ti d a dd e l i n tel ectualque se i nventa a ficos (prensa,editoriales,radio' televisión'
apariencias'los invariantes'qlie son
rra vé s de ellos , ia ' < p u r' :z at'" e l " c o m p ro m i s o " , Canci onaci mi ento a una En todo caso,y contrariamentea las
de los intelectualesde todos los países,
el fundamento de la unidad posible
¡tolítica de la purrza que es la an¡í¡esisperfectacie la Razón de Estado. En que resulcandel estadode lt lr-
e fe cto , im piic an la a fi rm a c i ó n d e l d e re c h o d e transsreci i rl os val oresmás son más lmPortantesque ias variaciones
.sagladoscie la cclectir,idaci-los <lel patriotisrno por eiemplo, con el apoyo ci onesP resentesy p", "d". ent r eelcar nPoint eiect ualylospoder eSpor it lur ''i
para
cada país' los mecanismosadecuados
n-ranifestadoa favor del artículc ciifamatorio de Zola conira ei ejército o, v de las formas que revisten' en
i n .rch o m is t r ¡ - dc .c iu r:n tc l r g u e rr.rd e A rg e l i .r,e i l l tl n¡r¡i eni r) a 3P o)' afxl trabarel i mpul sode iospr odu". o, ", . , , l, u, aieshacialaaut ononr í a. Lani. -
en efecto, expresarseen tomas de posi'
e n e migo- , en nom br e d e v a l o re stra s c e n d e n teas l os de l a ci udad o, si se ma intención c/eatntonomiapuede,
en otro) segúnla estructuray la histt'-
q u rcrc , en nom ' br c de u n a l o rn ra p a rti c u l e rd c u n iversrl i snl oci i co y ci el rrí- opuestas(laicasen Lin caso' religiosas
afirmarse' Los intclectualesde lcs
fi co ci ue puede s er vi r d e fu n d a me n to n o s ó l o a una suerte dc nragi steri o ria de los p,rderescontra los cuales'iebe I
conscient esde €Si€I n€c?t ll5¡ ll
mo ra l , s ino r ar nbién a L rn amo v i l i z a c i ó n c o l e c ti v acon vi stasa un combate di ferentespaísesde ben ser plenam ent e
oposicionescoyunt ur alesy f enom enalt '
destinado a prolnover esosvalores. qui eren evi tar dej ar sediuit lir por
cie E1 la m ism a volu¡ r t adde em ancipa-
Habría bastadocon agregar,a esta evocaciónmuy sumariade les grandes que ti enen por pri ncipio el hecho los
Podría tomar aquí el ejemplo de
crapasde ia génesisde la figura dei intelectual,aigunasindicacionessol¡rela ción se choca con obrtá.,]Io, diferentes.
más en boga que' Porque oPo-
poiírica cultural de la Repúrblicade 1848 o la de ia Comuna, para diseñarel fiiósofosfrancesesy deJos filósofosalemanes
oPltestas'
rren ia mlsma p.rreocupación de auto¡romíaa tradicioneshistóricas
cu¿dro de las ¡elacionesposiblesent¡e los productoresculturaiesy los pode- razón aparente-
se oponen en relacionescon ia verdad y con la
res, tal como uno puede observarlos,seaen la histo¡ia de un único país,sea "n "p"ri.ntia modo podría ambién- tomar el ejemplo
en el espaciopolítico acturalde los Estadoseuropeos,deThatcirera Gorbachov. mente invertidas' Pero, del misrno
de opinión' donde algunos' en Oc-
L a h i st or iaapor t a una c n s e ñ a n z ai mp o rta n te ;e s ta ntosen un j ucgo en el que cle un problema como el de los sondeos
rodas las jugadas que se hacen ho¡ aquí o aIlá,,vahan sido jugadas-desde el ci dente,puedenver uninst r um ent o"lt do- i"nt iónpar t icular m ent esut il' una
allí
del Este 'le Europa' pueden ver
rechazode lo polírico y ei retorno a lo religiosohastala resistcnciaa la acción mientras que otros, en los países
de un poder político hosril a la actrvidadinrelectuaies, pasandopor la rebe- ccnquista de ia libertad'
lión contra la influencia cie Io que alsunos llaman hoy los medios cle comu- P aracomprend er ydom inar lasopcsicionesqueam enaT- ancondividirla los'
en
euroPeosdeben tener.sier:'rpre
nicación o ei abandono desengañadode las utopías re'¿olucionarias. los inrelectualesde los diferentespaíses
Pero, el hechc de encontrarseasí ai "finai de la partida'no conduce nece- mentel aesl ructur avlahist or iad"lo, p. d", escont r aloscualesdebenaf ir .
deben, pcir ejemplo, saber reconocer
sariamenteal desen'éantamiento. Resulta claro, en efecto, que ei intelecrual marse para .*irri, .o*o inrelectuales;
en lo
sus intellocutores _y, en Particular,
nc¡ se ha instituido <ie una vez por todas y para siempre con Zola y que los en ias deciaracionesde tal o cr-ralde
el
tfe desconcertanteo de chocanre-
d e ¡e n t ai{ or esde c api ta l c r:l tu ra l s i e m p l e p u e d e n " retrocedr:r"haci a una u que esascleclaracionespueclen tener
coii experienciasde ilespotismo
otra de las posicionesc{esignadas por el péndulo de la hisroria,es ciecir,hacia cfecto de la distancia l'ti'tó'ic:l y gecgráfica
polí t icosam -
pcl íti co como el n azlsm o<-el' est alinism o'o con m ovim icnt os
el rol del poeta, del artista o dci científico "puros" o hacia el rc¡i del actor
político, peri<ldista,irombre político, etc. Además, contrariamentea lo que hi guoscomoi asre vuelt asest ut liant ilesclcl'63, o, enelclr dendelospoder es
y pasadade ¡nundos intclectua-
hegelianade la historia intelecttlal
podría hacer crecr la visió¡r ingenuamcr.rte internos, el efecto de la experienciapresente
censur. o laryadaejc la poiítica
de rasgosseleccionados,
que se obrendríapor la ac,ur.r'rulació¡l la reir"indicación lcs muy desigualmcntesometido:.a la "bi.,,o

l9r
Los prociucroresvinculados a grandesburocraciascul¡ur*les (periódicos, radio,
o ie ia cconomíir,de la universidado de la academia,etc. (cuand<",hablan'r<,:;
e.sdecir,con la ambiciónde lo universal,es,en cadamomelr- relevisión) es¡án cada vez más obligados ace2tary a adoptar normas Y co^c-
como inrelectuales, ^
ciones (por ejemplo, en mareria de ritmo de trabajo) que ellos tienden, más o
to, el inconscientehistórico inscrito en la experienciade un camPo intelectual
singularel que hablaa iravésde nosotros.)Hubo un tiempo en el cual sehablaba menos inconscientemente,a constituir como medida universalde la realiza-

rnucho de comunicación de las c¡¡nciencias.Crco qLleest¿mosmuy habitiral- ción intelectuai (pienso por ejemplo .Á el fatt uriting y en el fast reading que
Puede Pregunta¡-
clevienenia ley de ia producción y de la crítica peri<ldísticas).
mentedestinadosa la comunicación-evidentemente'desafortunada e imperfcc-
y que no tenenlosninguna posibilidadde aicanz'ar una se si la división en dos rnercados,que es característicade los campos de produc-
ta- de los incr:nscientes
res-
a condición de objetivar y de ción cultural desc,emediados del siglo XIX, con, Por un lado' el camPo
verdaderacomunicación de las concienciassino
rringido de los productores para producrores,,v, por el otro, el camPo de gran
dominar ios inconscientes históricosque nos sePafan,esdecir,lashistoriase'tpe-
proáucción y la "literatura industrial", no está en peiigro dJdesaparicién, va
cíficasclelos unive¡sosintelectualesde lescualesson el Producto nuestrascatego-
vez más a la
ría sde per c epc ióny d e p e n s a mi e n to ' q,r. l" lógica de la producción comercial tiende a imponerse cada
(a través,especialmenteen el caso de !a literatura,
irodu.ción de vanguardia
necesario
de las coaccionesque Pesansobre el mercado de los libros)' Y sería

Una autonomía amenazada trabajar para elevarla concienciay la vigilanciapara con ei regalo envenenado
cue puede representartoda especiede mecenazgo'
de las razones particulares quc
euiero referirme ahora a l" .rpo.ilión
imponen ho¡ con esPecialurgencia,una movilización de los intelectuales1'
La tecnocracia de la comunicación
la creación de una verdadera Internacional de los intelectualesdedicada a dc-
fender la auronomía del campo. No creo estar sometiéndomea una visión
de Ia
apocalíprica,:lelestado del campo de producción cul¡ural en los diFe¡entes La exclusiónfuern del debateptíblico: esta exclusión es el resultado
dependen de la
paíseseurcpeos diciendo que su at¡tonomía está tuerrementeamenazadao, acción conjugada de varios facrores,de los cuales algunos
cada
más prccisamente,que amenazasde una especietotalmente nueva pesanhoy evolución interna de la producción cultural -como la especiaiización
vez másacentuadaque impulsa a los investigadores a prohibirse ia ambición
nto; y qlre los intelectualesestán cadavez más comple-
sr:lrre-ru fune,ionamie
del do-
tanrente cxcluiclosdcl debate público, a Ia vez Porque están menos inclina- rotal del inrelecrual a la anrigua-, mienrias que otros son resultado
a los ciudadanos de
closa inrervcnir y porque la posibilidadde inter-venireficazrnentecn él se lcs minio cada vez mayar de una r€cnocraciaque manda
la formula
oFrececada vez menos. vacaciones,favoreciendola "irresponsabilidadorganizada" -según
inmediata en la tecno-
!-ts amer¿rtztts sobrek Autonlmí/l'.la interpenerraciónes cadavez más gran- de ulrich Beck-, y que encuenr¡auna complicidad
medios de
d¿, c¡r los ciifcrentespaísesoccidentaies,entre el mundo del arte y ei rnuncic' cracia de la comunicación, cada vez más pfesente, a través de los
cult ur al. Sobr e el
clc! diner.t, l)iensoen la nuevasformas de mecenaz-go y en las nuevasalianzas comuni caci ón, e n el univef so m ism o de la pr oducción
de la pro-
q rl f s e ins r aur an e n tre c i e rra s e m p re s a sc c o nómi cas, a menudo l as más primer punto, sería necesariodesarrollar,por ejemplo, ei anáiisis
drrcci ón y de l a r epr oducción dei poder de los que se han llam ado los
trlcdrr¡ri5l:i.1-conrc, en Alemania,Daimler-Benzo los bancos-,y los produc-
..nucleócraras",
es deci¡ esosrniembroscie la noblezade Estado que son ob-
r¿--¡e-,cul{ur;ilei; picnso ¡ambiéir en el recurso cadavez más frecuentede Ia
jero de Lrnadelegacióncuasi-incond.icional (va de suyo que Para cotnprsntier
ini'c.iii;;eirrn rrnivcrsitariaa los patrocinadoreso a la creaciónde enseñanz.as
en Francia,
ri i rce¡ ¡ m enr e s u b o rd i n a d a s a l a e mp re s a (como, eII A l emani a, l os la complicidad tácita de la que se benefician, particularmente
estos nucl eócrar as- que no son sino el lí m it e de t odos los t ecnócr ar as,i'
o, en Francia,las escuelasde comercio). Pero el dominio o el
!i¡i t:tl,;.1ir:-:t,:!i(n
hoy
ircixri,r {l :.i ('r.í}omía sobrela investigaciónartísticao científicatambién se especialmentede todos los que, hasraen el seno del Partido socialista'
es suf icien¡ e
ct{i ii { t } , - l r ¡ lt r ; ri o r¡n i s m o c l c l c a mp o ,a tra .¡é sdel control de l os medi osde ti enden a reducir la polí t ica a un pr oblem a de gest ión- ' no
de un discurso de
lrrtrrjucLi*n1' rlc .iifrrsiónculrurale, incluso,de las instanciasde consagración. invocar, como lo h"." Ulri.h Beck, la virtud dormitiva

192 193
T
s
Por utta inter¡ncional da los intelectuales
PierreBourdieu F

el hecho de que las iistas periodísticasds premiadosmezclan siempre a l.s


"informe de perito" capazde adormecerla responsabilidad:es necesarioto-
productoresmás autónomos y a ios más heteró¡romos,Claudettévi-Strauss;'
rnar en cuenta, como lo hice en La Noblessed'Etat, toda la lógica de un
Bcrnard-Henri Lér1') constituye,sin duda, la peor amenazapara la autono-
sistemaescolar que confiere a sus elegidos una legitimidad sin precedente
de la producción cultu¡al. El productor heterónomo,al que los italianos
n.ría.
h i stó r ic c ) .
l1¡men magníficrrnenretuftologo,sobre todo cuando va sobre el terreno de la
La grantecnocraciaencuentrauna complicidadinrnediataen la nuevatecno-
pol íti capero si n la aut or idad, v1aaur onor ní aque da la com pet enciaespecí f i-
del arte de comunicarque
craciade la comunicación,conjunto de profesionales
ca, es, sin duda, el caballo de Tioy'a a travésdel cual la hereronomíapenetraen
monopoiizan el accesoa los instrumentosde comun,:ación y que, al no tener
cl campo de producción cultural. La condenaque puedeexPresarse cnntra los
sino rnuy pocáscosasque comunicar,insiauranel vacíociela rutina mediáticaen
io:'ósofas,como dccía Piatón, está implicada en la idea de que ia fuerza especí-
eI corazéndel aparatode comunicación.Los inteiectualesorgánicosde la tecno-
sobre ia autonomíaque cou-
fi." .1"1intclectual,incluso en política, .lescansa
cracia¡nonopolizanel debatepúblico en detrimento de los profesionales de la
fiere la capaciiadde rrspondera lasexigencias internasdei campo.Ll zdanovismo,
etc.); en detrimento de los intelectuales
política (parlamentarios,sindicalistas,
que florecesiernpreentre los auto¡esfracasados, no es sino un testimonioentrr-'
que es¡ánsometidos,hastaen su propio universo,a especies de golpesespecífi-
"golpes orros d. que l r l, . t cr ononr i: advicnc sicm pr e en un cr r npo a r r ¡ vés dc los
cos -los que se liaman mediáticos"-, como las encuestasperiodísticas
productoresmenos capacesde t¡iunfar según las normas del campo.
manipuladas,o lasinnumerableslistasde ad-
apun¡ana producir clasificacic¡nes
La naru¡al ezapar adó;ica. ¿par cnt enent econt r adict or ia,del i¡ r t elect ual,
que los periódicospublican con ocasión de ios aniversarios,etc., o
hesiones.
lraceque toda acción política que apun¡e a reforzarla eficaciapolítica de ios
inclusolasverdaderascampañasde prensaque aPuntana acreditaro desac¡edita¡
i ntei cctual esestécondenadaa dot ar sede consignasde apar ienciacont r adic-
autores,obraso escuelas.
reforzandola separa-
tcria: pcr ur-rla.io, reforzarla autonomía, especialmente
Se ha podidc demostrar que, cada vez más, una manifestaciónpolítica
ción con los intelectualesheterónomos.y luchando Para asegurara los pro-
exitosaes una manifestaciénque ha tenido éxito en hacersevisible, manifies-
ductores culturalesias eondicioneseco¡rómicasy socialesde ia autonomía (1',
ta, en los periódicosy sobre todo en la televisión,por lo tantc, en imponer a
cn primer lugar, en materia de publicación y evaluaciónde los productos de
los medios de comunicacién (que puedan conrribuir a su éxito) la idea de
la actividad inteiectual);por otro lado, liberar a los productoresculturalesde
que ha sido un éxito (de ailí el hecho de que las formas más sofisticadasde
la tentación cie la torre de nrarfil, incirándolosa luchar, al menos, Paratomar
manifestación están orientadas, frecuentemente con la ayuda de asesoresen
el poder sobre l o s inst r um ent os de pr oducción y de consagr acióny par a
comunicación, hacia los medios de comunicación, que deben dar cuenta de
€nt¡ar en cl mundo y afirmar, en é1,l-osvaloresasociadosa su aufonomía.
ella). Del mismo modo, una paÍte cadavezmás importante de la producción
Esra lucha no puede ser sino colecúua,porque una Parte de los poderesa
culturai, cuando no es el producto de gente que trabaja en los medios de
los cualeslos inrelecttralesestán solnetidosdeben su eficaciaal hecho de qr"re
comunicación y cuya firma es solicitada Porque están segurosde tener el
l os i ntel ectual esles enf r ent an e¡ r or den disper so,y en la concur r €ncia'Y
apoyo de los medios de comunicación,viene definida en su fecha de publica-
rambién porque las ¡entativasde movilizaiió.t siempre resultaránsosPecho-
ci ó n , s u t f t ulo, s u f o rma to , s u v o l u m e n , s u c o n teni do y su esti l o, con el
sas,y estaráncondenadasal fracas.r,mientras quepa la sospechade que pue-
objeto de colmar las expectativasde los periodistasque la harán existir ha-
dan ser puesrasal senicio de las luchas por el leadershipcie un in¡clectualo
blando de ella.
de un grupo de inrelectuales.Eila sólo es posible si, al s'rcrificarde una vez
No es a partir de hoy que existeuna literaturaccmercialy que las necesi-
dades del comercio se imponen en ei seno del campo culturai' Pero la in- ¡,,rr tod"s el rnito del "intelectual orgánico", los producto¡esculturaiesacep-
tan rrabaj ar col e ct ivam cnt een la def ensadc sus pr o¡ r ios inr er escs:lo que
fluencia de los detentadoresdel poder sobie los instrumentosde circulación
-y, por ello, al menos por una parte, de consagración-no ha sido, sin duda, ¡,uecleconducirlos, cn el marco dc la L,uropanaciente,a aflrmarsecomo un
poder de crítica y de vigilancia, inciuso de propuesra,frente a los tecnócra-
jamás tan extensay profunda; ni la frontera .!amástan confusaent¡e la obra
ias, o -por una ambición a la vez más alta y más realista-' a comPrometerse
de vanguardia y el best-seller. E,staconfusión de las fronteras a ]a cual ios
en una acción racional de defensade las conclicioneseconórnicasy socialesde
i n cl i nados (como atesti gua
p ro d uc t or esm ediát i c o se s tá n e s p o n tá n e a m e n te
la auronomla de esosuniversos socialesprivilegiados, donde se producen y se
reproducen los instrumentos materialese intelectualesde lo que llamamos la " áQuéeshacerhablara un autor?"
Razón. Exa ReaQolitik de ld razón estatá sin ninguna duda expuesta a la
sospcchade corporarivismo. Pero le corresponderádemostral mediante los fines
A propósitodeMichelFoucault*
al servicio.de los cuales pondrá sus medios, duramente conquiitados, de su
autonomfa, que se trata de un corPoratiuismod¿ lo uniuersal'

¡^\ ui si era com ent ar les m uy sim plem ent e algunos pensam ient os
V \_ deshilvanados que me han venido mientras escuchaba hablar de
Foucáult. Creo que es necesario saber que en las reuniones como éstas-se
r:'' trata realmente de lo que se habla-, la cuestión de la cual se habla está plan-
'i_
reada en la situación misma en la que se habla. Así, por ejemplo, a través de
las palabrasque se dicen sobre Michel Foucault, se encuentra planteada la
cuestión, típicamente foucaultiana, de saber lo que ei un autor, y también la
cuesrión de sabei lo que es hacer hablar á un autor. Se han escuchado-muchas
frases que. comienzan con "para Foucault" o "según Foucault", "como dice
Foucault": ¿por qué y para quién se pronuncian tales expresiones?Para res-
, ponder, sería necesariocontar las citas, analizarsu forma y su fiunción, rela-
cionándolas al contexto textual y al contexto social, y especiaimentea la
I posición social del autor de la cita. Q"itÁ así se comprenderíamejor Io que
se hace cuando se cita a un autor. ¿No se sucumbe a una forma de fetichismo,
a lrn for.rcar:ltismono muy foucauitiano?
Se recuerdasiempreque Marx decía:"yo no soy marxista".Creo que Foucault
habría dicho gustosamente:'ryo no soy foucaultiano". Sin duda, 1o ha dicho (lo
que no quiere decir que no desearaque hubiera foucaultianos).Ha hecho

' * " 'Qu'est-ce que faire parler un auteur?'. A propos de Michel Foucault" (Intervención hecha en

" el coloquio de Vaucresson, e! 12 de octubre de I 995), Sociétés/, Représefltatiotlt, noviembre de


1996,pp.l 3-18.

196 197
Pierrc Bourdieu "¿Qué es hacer hablar a un autor?" A propósito de lr .el Foucault

cosasque muestran que quería que hubiera foucauitianos.De modo que se no lector letrado del pensamientode los otros (lo que, creo, no le interesaría
deben someter siempre las citas a las críticas,examinar en ellasel scatus,la mucho), ¿no debe ir más aliá de la lectura de los textos?Se habla de teoría de
función, la veracidad,la valiclez.Se puede oponer una cita de Foucaulta otra, la recepción(a mí no me gustamucho M. Jauss,ni ei hombre ni la obra, una
no solamenteporque Foucault se contradice como toCo el mundo, porque de esasviejashermenéutrcaspoco presentables que hoy se nos recicladel lado
no ha dicho la misma cosa en el mismo momento, porque no ha dicho ia de Esprit). Pero, para comprender una obra, es necesariocomprenderen pri-
rnisma cosaa las mismas personas,segúnlas circunstancias(lo que no quiere mer lugar la producción, el campo de producción y la relaciónentre el cam-
decir que haya mentido aquí o ailá). Recuerdo frecuentemente esta frase de po en el cual ha sido producida y el camDo en el cual es recibida o, más
Schoiem: "No digo la misma cosa a los judíos de New York, de París, de precisamente,la relación entre las posicionesdel autor y del lector en sus
Berlín o de Jerusalemy sin embargo no miento jamás". Esto es importante camposrespectivos. Por ejemplo, la mayor parte de las citas tenían por sujeto
para comprenderlo que es respondera una entrevista,administrar una obra, "se" o "nosotros".Foucault no hablabaen nombre de un grupo como porta-
s u s p ro p i o " c s c ri t os.
i n te rp r et arr et r os pe c ti v a m e n te voz, pero hablaba dentro de un grupo, expresandolos pensamientosde un
grupo en ei cual había tomado cosasy en el cual había enseñadocosas.E!
producto complejo que ha circulado debe, una parte de sus propiedades,a
Lectores y auctores las condicionessocialesde producción, y, entre otras cosas,a este efecto de
grupo. Sería necesario analizarese grupo; había, por una parte, colegas,pero
Las Iecturas retrospectivasque da Foucault de lo que dijo Foucault (a también gente que no era del mismo universoy que pertenecíaa otros cam-
-el
vecesa propósito de Foucauit) pueden estar fundadas sobre olvido, pero pos, que era a vecescompletamenteextrañaal universo universitario,etc.
también sobre estrategiasespontáneas.Lo que hace todo entrevistado, se Además, sería necesariorestituir a Foucault al campo de la producción
puede suponer, a fortiori, que lo hará un profesional de la manipulación académicade la.época:¿quéera hacer filosofíaen aquel momento?¿Qué es lo
simbólica: quiere dar coherencia a su vida y a su obra. Estará tentado de que quería decir piia rrn filósofo interesarsepor ias prisiones,lo que repre-
decir: "desde que escribí sobre Biswanger, sabía que iba a escribir Vigilar 1 sentabauna transgresiónconsiderable,pero socialmenteadmisible?¿Qué es
castigay'',etc. Todo el mundo hace eso. Por lo tanto, es necesariotener una lo que quería decir para un filósofo ocuparsede la historia? En la jerarquía de
relación desFetichizadacon los autores, lo que no quiere decir "no respetuo- las disciplinas,siempre muy potente en la objetividad y en los cerebros,ia
sa". Al contrario. Pienso que no se respetalo suficiente el esfuer¿ode pensa- historia es una disciplina subordinada con relación a los filósofos. Es necesa-
n-riento (que uno siempre está inducido a subestimar, porque está separado rio, pues, tener en la mente todas-esasestructuras en las cuales Foucault se
-especialmente por el pensamiento del autor considerado, por las respuestas encontraba inserto y que se .*p.".-"n también en lo que él ha dicho. Mi
que ha aportado, los nuevos problernasque ha planteado, etc.-, del estado demanda se justifica tanto más cuanto, creo, Foucault mistno, en una res-
del pensamiento en el cual ha comenzado a pensar). puesta a un artículo de Derrida titulado."Cogiro et Histoire de lafolie" recor'
Paraser verdaderamentefiel ai espíritu de Foucault, ¿no seríanecesarioleer a daba, hasta donde me acuerdo, que los textos tienen implicacionesr que €s-
Foucault como él mismo ha dicho que leía,y asísolamente?Se ha recordado,en rán insertos en redes de problemas, a los que es necesarioreconstituir si uno
eíbcto,que Foucault habíadicho que habíaleído tal o cual autor no parasacarde é1 no quiere contentarsecon reproducir v comencarla palabrade los tllaestros.
saberes,sino para sacarreglaspara construii su propio objeto. Es necesariodistin-
guir entre los bctores,loscomentadores-que leenparahablardespuésde lo que han
leído-, y los gue leen para hacer algo, para hacer avanzarel conocimiento, los Radicaiismo intelectual y radicalismo polftico
aucrores.
¿Cómo hace¡una lecturade auctor,que quizáspcdrá serinfiel a la lerra de
Foucaulr,pero fiel al espíritufoucaultiano? Sería necesario,también, interrogar su postura de filésofo, de filósofc dc
Pero esto no es todo. Una lectura de lector que quiere comprender verda- primer rango (Escuelanormal, etc.). Ser filósofo, en esascondiciones,era hete-
deramenrea Foucault en cuanto ductoL en cuanto creadorde pensamientoy dar una inmensa ambición encarnadapor Sartre-de la que era de buen tc¡no
son gentc quc ha ido a dc r c¡ l la calle cc¡ sasque no se decí an hast a ese
mo fa rse,per o c on la qu e e ra n e c e s a ri ori v a l i z a ¡-, L rnasucrtedc radi cal i snl c,
restringidosde los especialistas.
momento, sino en los cenácLtlos El ha lleva-
filosófico-político,que es causade considerablesmalentendidosen la circu-
do fuera del uni ver so er udir o pr oblem as,debat es,concept os, discusiones
lación de los prcductos que emanan de ese tipo de condicionessocialesde
intelec- que estaban has¡a ese momento reservadosal universo de los esPecialistas.
producción. Por radicalismo,enriendo una suertede irresponsabilidad
Lo que ha engendrado un malenrendido estructural. Es un fenómeno muy
tual estatutariaque los filósofosse otorgan como una suertede dcberc{eEstado,
un derecho-cleberde ruPtura, de transgresiónde las normasdel buen sentidoy ;eneral (qr" s. plant ea, por ejem plo, a pr opósit o de los or í genesint elec-
político, pero . cur r e que' en cier t ascir cunst ancias'los
tual esde i a R evolución f r ancesa)O
de la decenciaque, en ciertascondiciones,puecietomar un giro
a Sarrrede Arón, filósofo del mensajesesotéricos-escritos y destinadossolatnentea ser leídos por sabios
que €sesencialmenteintelectual. Es lo que separab,a
o ietrados, abstractosy Cestinadosa ser cun'rprendidosabsrractamente-,se
buen ¡entido burgués,que uno opone tradicionalmentea Sartre,hoy en día, dei
echan a la calle, devienenexotéricos,pasanal acto, a ia acción, alapráctica.
lado de i¿sciencias Políticas(donde Arón ha enseñadolargo tiempo), del Débat
Ha¡ evidentemente, tr:-nsiormacionesque se oPeran en esta oportunidad,
y de la Fundación Saint-Simon.
y según ciertas leyes. Entre paréntesis,sería necesario analizar el rol de
Foucaulr, aun habiéndoseopuesro mucho a Sartre,estabade su lado, sin
(duda radical, Vincennes que, en este aspecto,fue muy importante: Vincennes es la calle
discusión, desde este punto de vista. Esta disposiciónradical
para los filósofos. Podían creer (o hacersecreer) que tenían relacionescon el
cuesrionarnientoradical,etc.) era constitutivade la posturadel filósofo de ese
pueblo, mientras que eso sólo lo hacía Vincennes' Pero Vincennes era otra
iugar y de esetiempo, y el radicalismopolítico no hacíasino continuarel radica-
cosa que París lV.
lismo filosófico por otros medios. Este radicalismoinrelectual-en la manerade
El destino americanode la ob¡a de Foucault no ha hecho sino prolongar
planteariascuestiones,en la naturalezade los objetosabordados,erc'- esel que
y amplificar este proceso,con las relecturasque hacen de él uno de los maes-
separaa Foucauk (y a todos los que salende la misma fábrica)de muchosde los
del lado de ciencias Políticas(donde incluso es tros del "posmodernismo".
qu" lo leen ho¡ especialmente
asombrosoque sealeído). Es lo que lo separatambién de la gran mayoríade los
historiadores.Ese rol de constructor de objetosnuevosirrita mucho a ciertos
por el lado radi- "Rumor intelectual" y lectu-ra canónica
historiadores.Braudel,mientrasestabaun Pocodesconcertado
cal, esdccir, un poco "excesivo","fi|ósofo",de Foucaulr,teníaune gran admira-
Sería necesa.iopr.g,rnrrrse, también, cómo Foucault ha sido leído en el
cién por su capacidadParacrearconcePtos,por lo tanto, objetosque Permane-
interior de los universoserudiros(y lo q,-teél ha leído de sus contemporáneos
cían extrañosal terrirorio del historiador.(Seríanecesarioprecisarque mierrtras
en el seno de esos universos).Tendería a formular la hipótesis de que ios
Foucaultestaba,por su radicalisrnofilosófico,en la misma familiaque Sartre,se
contemporáneosse leen mucho menos de lo que se cree y que una Parte
siruaba,en el campo filosófico,en urr campo completamenteoPuestc,es decir'
importante de lo que saben unos Ce otros se aprende ex auditu, a trar'ésde lo
como yo, del lado de la tradición de la historiade la filosofíade lasciencias,con
que ellos oyen decir, a ios colegas,a los periódicos (rol terrible del Nouuel
Ko yré , B ac helar d, c a n g u i l h e m, v u i l l e m i n , e tc ., y contra l a tradi ci ón
Obseruateur),a los estudiantes;en resumen, a través de una suerte de rumor
.
existencialista)
slogansun Poco reduccionistas
intelectuai en ei que circuian palabras-clave,
Sería necesario también ver 10 que ha sido el efectoFoucault en los ciife-
"encerramiento",
("vigilar y castigar", "panóptico",etc.). Dicho de orro modo,
rentescampos erudiros y fuera de esoscampos.Se ha comparadoa FoUcaulr
la hipótesisde que los contempo¡áneosse leen entre ellos es mlry arriesgada;
con el profera en ia tradición weberiana.Es verdadque había en éi, como en
y que, al leerse,se comprenden, es todavía más arriesgada'..Habría que hacer
Sartre,que creó ei modelo, un costadode "profetaeiemplar".Esta profbcíaes
una revisiónde la hrstoriade las ideasque descansaen la hipótesisde qrre los
l a q u e s e ejer c epor ia p rá c ti c a ,p o r e j e m p l o ,y n o sol amenteP or i a pal abra'
texios son leídos,y que,siendo leído'. son comPrendidos,etc. En general,lo
por el discursoo por la teoría.Paracomprenderel efecrocleprofecíaejcn'rplar
que circula son los títulos: "vigilar y casrigar"(han habido, ciesdeen¡onces,
q u e Fo uc ault ha ejerc i d o ,s e ría n e c e s a ri on ro l o n g aresteanál i si sw eberi ano
muchos tí¡ul os c on inf init ivos, sobr e t odo ent r e los hist or iador es. .En
' el
con orfo, que se encuenrraen el judaísrnoanriguo.\f,/eberdice q|e los proftetas

2Crl) 201
PierreBourdiet' "¿Qtú es hacer lmblar a u¡t autor?" A propósito de Miclwl Foucault

siglo XIX, todo ei mundo se decía "saturnino", sin que se supiera demasiado elguna parte. Sartre, en una nota de La Crítica d¿ la razón dialécrica,dice, a
lo que esto quería decir). Si se parie de la hipótesis de que la gente no se lee, propósito de sus lecturasde juventud de Marx (que no se leía en la Universi-
se comprenclen un cúrnulo de cosasque no se comprenden cuando se cree J" l \. " -,^.^--.o. . . |í . r ocloy no com pr endí anada'. Q uier e decir con esoque
(l.rJ/.

que se leen. El conocimiento por slogans,por palabras-clave, es mu, impor- hrv una compr ensión( escolaren gener al)que es una no- com pr enst ón,un
tante; ios enemigos,que [ienen interés en "reduci¡" y en ciestruir(según la de com pr ender ,una denegaciónde com pr ensiónf undada
hacer-apari en cia
lógica del insulto: tú no eressino un...) colaboran con los amigos (protégeme en ¡esistencias profundas. Foucault, como todos los pensadoresun poco ra-
de mis arnigos, decía Enrique I\'l yo me encargode mis enemigos) que pue- todavíacon formidat'ies
<licale-oi, subversivos,se ha enfrentad..y' se enfrenta
den también reducir (por fetichismo o, simplemente,por tontería...),en la rcsistenciasa la lectu¡a.
construcción de la imagen social de un autor. Un análisisconducido con esta f)elante de todaslasamenazas que encierrala recepción,uno puedePreSun-
perspectiva permitiría comprenCer -pero sería necesario todavía plantear la rxr, llluy se¡ainenle) si gn pensador conscienteno tiene interés,a veces'Cc
problemática- la diferencia entre Ia recepción nacional, en el país -donde ii,rce¡seilegible-no en el senridode la gran oscuridadcarismáticaheidegge ro-
hay enemigos, concurrentes directos, y amigos, donde las connotaciones l.¡di,le¡iiniana-;quiero decir, hacersedifícii de leer para intentar tener algunos
políticas (en el sentido amplio, pero también en ei sentido específicode vcrcladeroslecto¡esmás que esostelribles no-lectoresque Parecenieer.Es una
política intelectual, Iigada a Ia posición en el campo) están entendidas-, y ia (por-
presunramuy foucaultiana,que debería,creo,plantearseen suspalinodias
recepción en ei extranjero. Y también entre la recepción e¡rtre los contemPc- ,1ueha evolucionado,ha canrbiado).Al resPecto,lasentrevistasson rnuy impor-
ráneos y la recepción en la posteridad, próxima (como nosotros hoy para ranres,pues hacenver lo que coexistíacon estasuertede fachadaa la cual se es
(Esro
Foucault) o lejana. rcduiido cuando no se riene accesosino a la parte pública de la obra.
Hay nmbién lecturasdirectaspero encuadradas.Al resPecto,el rol del siste- consriruyeotra diferenciaentrelos contempciáneosy la posteridad:una obra no
ma escolares capital: los profesoresson un filtro o una pantalla entre lo que los es acccsibleen totaiidad sino a título póstumo; los contemporáneosno iienen
in.restigadoresbuscandecir y lo que los alumnos reciben...Se dice, por ejemplo, accesosino a una plte ínfima de ia obra -ignoran la mayor partede lasenrrevis-
que tüTittgensteindemuele los falsosproblemasfilosóficos nacidosd,:i abuso del tas,la correspondencia privada,etc.- y' si puedo decirlo, golpe por golpe' en el
lenguaje. De hecho, se olvida decir que también dice que el gran obstáculo al orden cronológico,y no de un golpe,uno intttito,como en lasobrascompletas')
progresode la filosofía son los filósofosque vehiculizan falsosproblemascanóni- Todo estoconducea conciuir con una exhortacióna la duda sobrela posibi-
cos, frecuentemente dotadcs de una autoridad milenaria y formidablemente difí- lidad de recibir realmenreuna obra, que es la condicién de una recepciónno
cilesde destruir. Ahora bien, sobreFoucault, circula toda una seriede problemas demasiado mala, acriva, práctica, ño fetichista, destinada no a una suerte de
que, por una parEe,esel producto de la lectura escolar.Thmbién estáel rol de los encantamientocuitural alrededordel autor sino a un uso activodel autor' en una
libros sobre Foucault, numerosos,frecuentementesalidosde cursosy destinados prácticaque puedeser científica,que quizástambién puedeserde juicio"'
a volver allí, los fragmentos escogidos...Y sería necesariover' en fin, cómo
Foucault circula por gente que no ha leído jamás una línea de é1.

"{Jna denegación de comprensión"

Finalmente, hay gente que no puede leer a Foucault, Porque es insoporta-


ble. Porque en Foucauit se trata de su ser, de las cosasque ellos no quieren
saber. Esto es lo que se olvida siempre en el análisis de la "recepción": para
comprender la recepción, es necesariocomprender las fuerzas d.e no-recep-
ción, la negativa de saber, el "odio a la verdad", de lo cual Pascal habla e4
PierreBourdieuy LoicWacquant.
Sobrelasastuciasdelarazónimperialista*

Tf I imperialismo cultural descansasobre el poder de universalizarlos


a una tradición históricasingular,haciéndolos
-L p"rti.,.rlarismosligados
desconocercomo rales.rAsí, del mismo modo que en el siglo XIX cierto
'*. nú*ero de cuestionesllamadasfilosóficasque eran debatidascomo universa-
les,en toda Europay más allá, tomabansu origen,como lo ha demosuado
muy bien Fritz Ringer, en las particularidades(y los conflictos) históricas
propiasdel universosingularde los qniversitarios alemanes,2ho¡ muchos
iOpi.o, directamentesurgidosde confrontaciones intelectualeslif;adosa la
particularidadsocialde la sociedady las universidades americanasson im-
puesras,bajo formas en aparienciades-historizadas, aJ conjunto del planeta.
Exos lugarescornuneten el sentido aristotélicode nocioneso de tesiscon las

* "Sur les ruses de la raison impérialiste", Actes d¿ h rechercheen sciencessocidlzs,l2l'I2?- marzo

de 1998, P P ' 109 -1i B .


-,-
acus?ción de
_ l. Es meior decir de entrada, para eviiar todo malentendido -y descartar'ia
,' a
"antiamericanismo"- que nada es más universal que la pretensión lo universal o, más precisamentq
esbozada aqul
a la universalización de una visión del mundo particular, y que la demostración
(especialmente Francia: cf' P Bou¡dieu,
valdría, mutatis mutandipara orros campos y otros pafses
.Deux hangais,Ptts,
impérialismesde l'universel", en: c. FauréyT. Bishop (eds.),L'Amérique d.es
E d. Franqoi sB ou ri n, 1992).
P¡ess' 1969'
2. F. Ringer, The decLineoffu Mandarins, Cambridge, Cambridge Universiry

, 205
t
..-i¡¡. *'*l*
* sobre las astucias de ln razón imperialista
PierreBourditLt s
*4
Pierre Bourdieuy l.oicwacquant.

"s
añles se argurnenta p.-rotobre /asata[csno se argumenta,o, en otros términos, poco en sentido común universal,llegan a hacer olvidar que ellos han tenido su
{
É origen en las realidadescomPiejasy controvertidas de una sociedad histórica
esospresupuestosde ia discusión qlre permanecenindiscuri<1os, deben una
parte de su fu.:¡zade convicción al hccho de que, al circular como libros de i
particular, tácitamente constiruida en modelo y en medida de todas las cosas.
A sí sucede , por ejem plo, con el debat e vago y f lojo alr ededor del
ixito en coloquiosunive¡sitarios'como inforrnesde expertosen ic-visras semi-
"multiculturalismo", término que, en Europa, ha sido sobre todo utiiizado
científicas,como haiancesde ccmisionesen tapasde revistas,estánpresenres
en rodas parres a la vez, de Berlín a Tokio, y de ir4ilán a l!4éxico, i, son para designarel piuralismo cuitural en la esfe¡acívica, mientras que en los
poderosamenterel"r'atlospor esoslugarespretendidameirt€nruiros que EstadosUnidos remite a las secueiasPerennesde la exclusión de ios negros y
'!on
i o s o r s anis m osint e rn a c i o n a l e(ra a la crisis de la mrrología nacional del "sueño americano", correlativa del
s i e sc o m o l a o c D E o i :i comi si ón eurooea)
incremento generalizadode ias desigualdades, en el curso de ias dos últimas
y los centros de esrudiosy de asesoramienro en políticaspública..(como el
ci écadas.a cri sis que el vocablo "m uir icuhur ai" disim uia acant onándola
Ad a m S m it h I ns t itu re y l a F u n d a c i ó nSa i n t S i mon).r
artificialmentesólo en el mic¡ocosmo universiario y exPresándola en un re-
La neutralizacióndel conrexro histórico, que resultade la circulación in-
te¡nacionalde los cextcsy del olvido correlativode las condicio¡reshisróricas gistro ostensiblemente"étnico", rnientrasque ella riene por aPuestaprinci-

de origen, prodr-rceuna universalizaciónaparenrequc pal, no el reconocimiento de las culturas marginalizadasPor los cánones
a redoblar el
trabajo de "teo¡ización".Suertede axiomarizaciónficricia adecuadapara pro-
'iene académicos,sino el accesoa los instrun'ientosde (re)producciónde ias clases
media y superior -en el p,rimerrango de los cualesfigura la universidad- en
ducir la ilusión de una génesispura, el juego de ias defnicion* previas
i'de un contexto de liberalizaciónmasivo y multiforme del Estado't
l a s d educ c ionesque a p u n ra n a s u s i i ru i rl a a p a ri enci ade l a nccesi dadl ógi ca,
A travésde esre ejemplo, puede verse de paso que, entre los productos
por la contingenciade ias ¡recesidacies sociológicasdenegacias, trendc a ocul-
culturalesdifundidos a escalaplanetaria,las más insidiosasno son las teorías
tar las raíceshistó¡icasde todo un conjunto de cuestionesy de nocroncsque
de aparienciasistemática(como el "fin de la historid' a ia "globaiización")y
se dirán fiiosóficas,.sociológicas, hisróricaso políticas, según el canrpo de
lu, n,irion", del mqndo filosóficas (o que se pretenden comrr tales, como el
re cepc ión.A s í plan e ta ri z a d a smu
, n d i a l i z a d a s ,e n el senri do esrrrcramenre
"posmodernismo"),en resumidascuenrasfáciiesde identifrcar.Son más bien
geográfico,por el desarraigo,ai mismo riempo que desparticularizadas por el
térrninos aisladoscon aparienciatécnica, tales corno la "flexibilidad" (o su
efecto de falsa ruptura que produce ia conceptualización,esoslugaresccmlr-
versión lrritánica,la "empieabilidad"),que, por el irecho de que condensany
nes de la gran vulgata planetariaque el machaquemediático rransfo¡¡napoco a

4. D. Masseyy N. Denton,AmericanApartheid,París,Descanesei Cie, 1996' orig' 1993 M'


3. Ent¡ e i o s l i b r o s q u e te stim o n ia n csta M cDcn a ld iza ció n r astre¡:a
dei pensani cnto, sc puedc
v,lxers,EtnicOptions,Berkeley, universiryof california Prcss,1990;D. A. Hollinguer,Postethnic
citar la icremiada clirisia de A. Bloo¡¡r, T'/r closing of cleAmerican Mind, Neu,vrrk, simon &
America.NervYork,BasicBooks, 1995;yJ.Hochschild, f:acinguptotheAmericanDtc¿m:Race,
Shustcr, 1987, inmediatarnente traducidr¡ al francés en
Juilliard ba¡o cl tírulo L'ánte dcs¿rntée ckss,aneithesoulofdrNation,Princeton,PrinceronuniversiryPress, 1996;Paraunanálisisde
(1987) , y c l p a n f l c t o r a b io sod e l in m ig r a d o in d io n e o - co n se r vador
(v bi ógrafo dc R cagan)si to en
conjunrode esta¡cuestiones históricos'
que a justo título sacaa la luz su anclajey su recurrencia
cl llanhatta¡r Lrstirute, D. DiSouza, I/liberal Educatia¡t; The Palitiu af Raceand Scr on Cantptu, Pxís, Ftyerd,
D. L¿corne, La crise¿iel'identité americaine.Du mehing pot du nultitulruralime,
NewYcrk,'flre Frce Press,199i, r¡aducido ai lrancés ba.jocl título J.'Educationconrre/eslibertés,
t9)7.
Parí s ,G a l l i m a r d ( c o l c c ció n le M e ssa g e r ) ,1 9 9 3 . Un o d c lo s mej oresíndi ccs para j C enti fi ca¡ l as the
5. Sobreel impcrarivode reconocimientocukural, c. Tayloa Multiculturalism:&aminittg
olrras que ¡;articipan dc esta nueva c.lov.ainteiectual con pretensión planctarie es ia celrri/d¡! y
Politis af Rrognition, Princeton,Princeton universiqv P¡ess,i994, y los textos compilados
t o¡alm e n t c i n l r c c u e n ¡ c c o r r la cu a l so n tr a d u cid a sy p u b lica d asen el cxrranj ero(sobre ror1o,por
p,"r.n,"dos por T, Col.lberg (ed.), M*tticuhuralism: A Critical Re¿der,Cambtidgc, Blackwel!'
c om ¡ra r a c i r l nc , : n l a s o b r a.scie n tífica s) Pa
. r au n a visió n n a r ivadc conj unro dc Ia suertey desqraci a
lgg4; sobreel entorpecirnienro t{elasesrrategias de perperuación de la clascmcdiaen los Estados
de las u n i v e ¡ s i d a d e sa m cr ica n a sh o y, ve r e l r ccicn ¡ c n ú ¡ n e r o de D aer/dl usconsagra<l oa "Thc
Unidos,L- V/acquant,"La generalisation de I'insecuri¡ésalarialcn Arnérique:rcstrucrurations
A mc ric a n A c a d e m i c l ) r o fcssio n ",n " 1 2 6 , o to íio a e 1 9 9 7 , e sp e c i al rnenre
Il . C l ark, "snral l \{brl d-s, ¡ociabs,I I 5' diciernbre
d'enrreprises enscicnces
ct crisede reproducríon socia]", Actesdel¿ recherchc
Dif f c re n t \ \ b r l d s : T ' h c u niq u cn css a n d - lio u b ie s o f Am e r ica n Academi c profcssi on",pp. 21,42, v dcscritopor K
Je lgg6, pp. 61-79;el malesrarprofundo de la clasemediaamcricenaestábicn
I l A lt b a c h , ' A n I n t c ¡ n a tio n a l Ace d e ¡ n ic Cr isis?T h e Am cr ican P rofcsori rrc i n C omparari ve
Newman,DecliningFornner,New York, BasicBoola, 1993'
P c rs pc c t i v c ' l p
, p. 3i Í-388.

207
vehiculizan roda u¡ra filosofía del individuo y de la organizaciónsocial, son toda vel ei dad d e subver sión,especialm ent ef em inist a u hom osexual- , c- ,cl
adecuadaspara fi.rncionarcomo verdaderascontraseñaspolíticas (es este caso: páni co moral alr ededor de la "ghet ización" de los bar r ios llam ados "dc
el "Estado mínimo", el estrechamientode la coberturasocial y la aceptacién i nmi grantes" ,o incluso ei m or alism o - que se insinúa por t odas par t es, a
de la general,izaciónde la precariedadsalarial como una fatalidad, inclust, rravés de una visión ética de la política, de la familia, etc., que conduce a
como un bcneficio). una suer¡e de despolitización principista cle los problemas socialesy polí-
Se podría analizar,también, en sus pormenores, la noción fueriemenre ticos, así vaciadosde toda refe¡enciaa toda especiede dominación-, o, por
polisémicade "mundializacíón",oue tiene por efecto,si no por función, aho- último, Ia oposición devenida canónica, en las regionesdel caÍnpo intelec-
gar en el ecumcnismocuitural o cl fatalismoeconomistalos efbctosdel impe- tual más próx im as del per iodism o cul¡ ur al, ent ¡ e el "m oder nism o' y el
rialismo, y hacer apareceruna relación de fue¡za transnacionai como una " posmoderni sm o"- que, f undado sobr c una r eleccur aecléct ica,sincr ét ica1'
necesidadnatural. Al término de una inve¡sión simbólica fundada sobre la la mayoría de ias vecesdeshistorizaday muy aproximada de un puñado de
naturaiización de los esquernasdel pensamiento neoliberal, cuya domina- autores france sesy alem anes,est á en t r ance de im poner se, en su For m a
ción se ha impuesto despuésde veinte afios graciasa la labor de zapa de los americana, a los europeos mismos.s
think runbsconservadores y Ce sus aliadosen los campos político y periodís- Seríanecesariohacerun lugar apartey otorgar un desarroilomás importante al
tico,6 el remodelamiento las relacionessocialesy de las prácticascultura-
de debateque opone hoy a los "liberales"y a los "comunitarios"e(otros tantos térmi-
les de las sociedadesavanzaáasconforme al patrón norteamericano, fundado nos directamentetranscriptls,yno traducidos,del inglés),ilustraciónejempiardel
en la pauperizacióndel Estado, la mercantilizaciónde los bienes públicos y efecrodefalsa rupnray defaha uniuersalizaciónque produce el pasajeal orden del
la generalización de la inseguridad social, es aceptado hoy con resignacirin discursocon pretensiónfilosófica:definicionesfundado¡asque marcan una ruptu-
como el desenlaceobligado de las evolucionesnacionales,cuando no es cele- ra apare¡rtecon los particularismoshistóricos que Peirnanecenen un segundo
brado con un entusiasmo borreguil que recuerdaextrañamenteel entusias- plano del pensamientodel pensadorhistóricamentesiruadoy datado (¿cómono
rno por América qu: había suscitado,.hace medio siglo,sl plan Marshall en ver, por ejemplo,como selo ha sugeridovariasveces,que el carácterdogmático de
una Europa devastada.T la argumentación de Rawls a favor de la prioridad de las libertadesse explica
Numerosos temas afines aparecidosrecientementesobre la escenainte- por el hecho de que atribuye tácitamente a los Partenaires,en su Posición
lectual europea,y singularmenteparisiense,han atravesadoasí el Atlánticr:; original, un ideal latente que no es otro que el suyo, el de un universitario
ya seacon toda claridad,ya seade contrabando,con la ayuda del ¡etorno d. americano,atado a una visión ideal db la democraciaarnericana?);r0 presu-
influencia que goz¿n los productos de la invesrigaciónamericana,talescomc puestosantropoiógicosantropológicamenteinjustificables,pero dotados de
lo "políticamente correcto" -paradójicamenteutilizado, en los medios inte- toda la autoridad social de la teoría económica neo-marginalistade la cuai
iectualesfranceses,como instrumento de reprobacióny de represióncontra han sid,¡ tomados; pretensión a la deducción rigurosa,que permite encade-
nar Formal mcnt econsccuencias inf alsif icables sin exponer sea encont r ar ia-
más l a menor r ef ut ación em pí r ica; alt e¡ nat ivasr it uales,e ir r isor ias,ent r e
6. P Grémion, Preuues, une reuue europdennei Paris, París, Julliard, 1989; Inte/ligence rit
!'anricommunisme:bCongréspourl¿libertédeIaculrureiParis,Fayard, 1995:l.A.Smith, Tl¡eLle¿
Brokers:Think Thnhsand thc Riseof the Nau PoliceElite, New York, The FreePress,1991; K. Dixon, 8. Este no es el único caso en que, por una paraciojaquc manifiesra uno de los efectosmás típicos
"Les Evangéiisresdu N'farché",Liber, 32, septiembre de 1997, pp. 5-6. de i a domi naci ón si mból i c a, numeros ostópi c os que l os B tados L,tni dosex ponan e i mponen en
7. S obr el a " m u n d i a l i z a c i ón "co m c¡"p r o ye ctoa m e r ica n c",N. F li gstei n,"P .hérori queset réal i tésde todo el universo, comenzando por Europa, tran siCo tomados prestado a aquellos mismos que Ios
la "mondialisaríon"' , Artes d¿ la rechercheen sciencessocial.cs,I 19, septiemb re áe 1997 , pp. 36-47: reciben corno las lormas más avanzadasde ia ¡coría.
sobre la fascinación ambivaiente por América en el período de posguerra,L. Boitanski, "Amcric:, 9. Parauna bibliografia del inmenso debate,ve¡: Philosopby&ocia! criticism, t/qv. 14, I 988, speci"i
Ar"¡ica, Lc plan Marshall et l'importation du'management"', Actesde la rechercheen sclencet' i ssue,U níversal i s mv s . C ommuni tari ani s m: c ontemP otarydebatesi n ethi c s .
s oc ilbs ,3 8 , 1 9 8 I , p p . l 9 - 4!;y R. Ku ise l,Se d u cin g th eF r e n ch :The D i bmma ofA rneri cani zati on. 10. H. L. A. Harr, "Rawls on Liberry and its Prioriry", en: N. Daniels (cd.)' Re,tdingRa¿sÁ,Nerv
Bcrkele¡ Unive rsity of California Press,1993. Y ork, B asi cB ooks , 1975, pp.238-259.

208 209
PierreBourdieu Pie rre Bau'riieu l, Loilcllucrluant. *iltre lasastucias de la razón int¡seriulista

y tan visibletnenteabsurdas brasileños"blancos" nt:


aromisias-individuaiistas y holistas-colectivistas, europea)no es menos "racista"que ios otfos y que los
"holistas-individualisras",
para colocar a Humboldt, o etl est(rtema. I)e<-¡¡' ei
que obligan a inventar ti"rren ,,"d" que envi<iiara sus Primos norteamericanos
y todo en una extraordinariajerga, una tetrrble lingua
"a¡onristas-colectivistas"; a la brasiieñaseríapor definición más pen'erso' por di-
rricistiloettntascrlrac\o
iarrcar, sin jamás tomarloscn cuenta cons- and Pott'¿r'tiel
fanca incernacionai,que permitc sinrulado y'cienegadc'.Esto es lo que pretende' en Orphetts
cientemente,rodas las particularidadesy los particularismosasociadosa las aplicandolas cat egor í as
pol i tól ogo afro- am er icanoM ichael Hanchar cl,que'
tradicionesftosófcas y po!íticas nacionales (de tal modo que pueden escribir erige la historie particula¡
racialesnorreamerlcanasa la si¡uaciónbrasileíra,
liberty entre paréntesisdespuésde la palabra libertad, pero aceptarsin proble- urriversalce la lucha de
del movimienro por ios derechosciviiescomo patrón
ma barbarismosconceprualescomo la oposición eir.Lrelo "procedual" y lo la const it ución dei
l os qrupos de color opr ir nidos' En lugar de consider ar
"sustancial").Este debate y ias "teorías" que oPone, y en¡re las cualesseríaen b¡ asileñoen su pr opia lógica'est ls invest igaciolles se con-
" rd" n.ano-.acial 'L-rloque
vano rrarar de inrroducir una elección poiítica, debe sin duda una parte de en ei mito nacionalde
renran, la mayoría de las veces,con reemplaz-ar
sll éxito entre los filósofos, conse¡vadoresParticularmente (y especialmente ejemplo obra de Gilberto
la
la "democracia¡acial" (tal como io expresapor
católicos), al hecho de que ellos tienden a reducir la política a la mo¡al: el por el mito segúnel cual tc,daslas sociedades son "racistas'r. incluso
itr.eire),ro
a pr im er a
inmenso discurso sabiamente neutralizado y políticamente des-¡ealizadoque aquei l as.n .i . "no de las cualeslas r elaciones r aciales Par ecen'
el concepto de
suscita, ha venido a relevar a Ia gran iradición alemana de la Antropologia Visra,menos clisrantesy hostiies.De he¡ramienta analítica,
profunda de denegación(Wrneinung) bajo la col-'erturade
filosófca, paiabra noble y falsamenre r,rcisno d.evieneun simple instrumento de acusación;
(al asegurarel éxito de
que ha sido duranre mucho tiempo pantaila y obstácuio,en cualquier parte ciencia,es la lógica del procesojurídico que se afirma
donde la filosofía alemana podía afirnea¡ su dominación, a toclo anáiisiscien- liL-.rería, en lugar del éxito cie prestigio)'rt
aí r os' el ant r opólogo
tífice del mundo social.rr E n un art í cu! o clásico' publicado hace ya t r eint a
"r¿z-a" en las Américas
En un dominio más próximo a las realicadespolíticas,un debatecomo el de Charles \Xhgley demostrabaque la concepción de la
el pcso otorgado a la ascencle¡lcia, a la apa-
la"razi' y de la identidad da lugar a inrrusiones etnocénrricassemejantes.lJna adrnite varias definiciones,segúr.r
representaciónhistórica, nacida del hecho de que la tradición americanapegaIa y al st at ussocir 'cult ur al
ri enci a físi ca ( que no se lim it a al coior de la piel)
en iunción de
dicoromía enrre blancosy negrosde manera arbitraria sobre una realiiiad infini- (profesión,nio.l ,1" ingresos,<liplomas,región de origen' etc')'
gruPos en ias diversas
ramenre más compleja, puede incluso imponerseen paísesdonde los principios la historia d. lff r"l".iones 1,,<le los conflictos entre
de visión y de división, codificados o prácticos, de las diferenciasétnicas son la "raz.i' sob¡e la
z-onas.¡o Los nortearnericanosson los únicos <¡uedefinen
los afro-americanos: se es
totalmente diferentes I 9ue, como Brasil, eran consideradostodavía reciente- úrricabasede la ascendencia i.elio Sólocn el casode
mente como contra-ejemplosdel "modelo americano".l2Conducidas por ameri-
canoso latinoamericanosformados en los EstadosUnidos, la mayor parte de las 'l"heJvlouininto Negro tt-f Rio Jerteiro dnd s'irt l'aul"'
hl. Hancha rd, ()r1'heustzn/ Poutt: 'Le
investigacionesrecienressobre la desigualdadetno-racial en Brasil se esfuerzan
if.
S e enc ontraráun poderos oantídoto al
l 9l r5-1988, P ri n c ero¡r,Ii ri nc eton Ll ni v ers i ryP res s ,1994
por probar que, conrrariamente a la imagen que los brasileñosse hacen de su Maru' h4ahing Rarc and Natíon A
vcncno etnocéntrico sobre este tema cn la ob¡a de An¡hon'¡
nación, el país de las "tres tristes raz¿s"(indígenas,negros descendientesde los Comparisonofthe{Jnii*lSwes,SouthÁiiuandBrazil'Cambridgc;CambridgeUnivcrsiryPrcss'
esclavos,blancos provenienresde la colonización y de lasoleadasde inmigración 1998;quedernues traquel as < l i v i s i ones rac i al c s s ones trec hamentc tri butari as del ahi s tori a
de
c ada Il s tac l ofabri c ade al s una menc ra l a c onc ep' i ón
pol íti ca e i <l ecli rs i c adel paísc orrs i derac l o,
i t"rat.t" que l e c onv i ene.
I l. Desdeestepunto de vista,bajamentescciológico,el diálogoentreRawlsy Habcrmas,de los 14. G. Frei¡e, Maítres et esclaucs' París'Gallimarcl' 1978'
ol ¡r¿ c i errtífi c anrc nl c
cualesno es exageradodecir que son casi equivalentes a la tradición filosófica,es altamente j i . ;i )ara ci l ánd o un l i bro ti rul ado' i .c B rús i l rac i s te",s c brc c l l nodc l o el cl a
throughthe PublicUse of Reason:
"I{.econciliation ,,I-a franc és más arc nro a l as c x pec tati v asdc l < ea:i -o
significarivo(cf., por ejemplo,J. Haberrnas, i ncal i fi cabl c, Frrnc e rac i s tc ",de un s oc i ri l ogo
Remarkson PoliticalLiberzlísr{,Journalof Philosopby, 1995' 3' pp' 109-l3l' pcri odísti coquc a l as c umpl c i i C ' rdc srl c l ' r rc ' rl ?
in ..On I]. Hearh v l1- N- A.damsic'l*.i,
t 2. Segunel esrudioclásicode C. Degler,NeirherBlacb Nor Vhite: Shueryand RaceRcl"ations 16. C. \\lrglcll de (ionccpt oisocial l{acc in Anrérica'',cn: I). ()ó5' pp' 531"5'15'
I ft;u:c' I
Madison,universiry of wisconsinPress,I 995, I " Publ. I 974.
Brazil and the (Jnitedst¿.tcs, (.'antanDotúry (iulnras ,zn¿iSofitics in ILztin ¡lntrrlr¿' Ncw York' llanclonr
.,negro" y renouadassin cesar por las nccesicle-
en Chicago, Los Ángeleso Atlanra, no por el color de su piel sino por conceptualizltdas,
son transfgt¿raciones
el hecho de tener uno o varios antepasadosidentificados como negros' 15 des de acrualización,de estereotiposracialesde us,¡ común que no son ellos
decir, al término de la regresión, como esclavos.Estados unidos no es la mismos sinn justificacionesprimarias de la dominación de los blancos sobre
ú n i ca s oc iedad m o d e rn a q u e a p l i c a l a o n e -d r op rul e y el pri nci pi o de los negrosi20E,l hecho de que la sociodicea racial (o racista) haya podido
"h i p o des c endenc ia " ,s e g ú n e l c u a l l o s h i j o s d e una uni ón mi xta se ven "mundializarse",en el curso de los últimos años, perdiendo al mismo tienrpo
automá¡icamenteasignadosal grupo inferior (aquí, los negros).En Brasil, la de discursojustificador de uso interno o local, es, sin duda'
sus características
idenridad racial se define por referenciaa un continilt¿mde "color", es decir, uno de los testimoniosmás ejemplaresCel imperio y del dominio simL'élicos
por la aplicación de un princrpio Ílexibie o vago que, al romar en cuenra que los EstadosUnidos ejercensobre toda esPeciede produccién científica,y
rasgosfísicos co¡no la rextura del cabello, la forma de los labios y de ie nariz sobre todo semi-científica,especialmentea travésdel po{er de consagración
engendran
y ia posiciin de clase(los ingresosy la educación,especialmente), que detentan y de los beneficiosmaterialesV simbóiicos que procrrra a los
un gran número de categoríasintermedias (más de una decena cataiogadas investigadoresde los paísesdominados, la adhesión más o ¡nenos asumida o
luego del censode 1980);' no ocasibn"nostracismoradical ni estigmatiznción vergonzosaal modelo venido de los EstadosUnidos. Pues,uno puede decir,
sin remedio.Tes¡imonian ello, por ejemplo, los índicesde segregaciénexhi- con Thomas Bendet que los prodirctos de investigaciónhan adquirido una
bidos por las ciudadesbrasileñas,muy.claramenteinferioresa ios de ias me- "esrarurainternacionaly un poder de atracción" comparablea los "del cine,
trópoiis norteamericanas,y la ausenciaviltual de estasdos lo¡mas típicamen- de la música popular, delos logicielsy del basketball americano".2rEn efecto,
re norteamericanasde violencia racial, que son el linchamiento y el motín la violenciasimbólicano se eiercejamássin una forma de complicidad (arran-
urbano.rTTotalmente opuesto, en EstadosUnidos no existecategoríasocial y cada) de los que ia sufren, y la "globalización" de los temas de la doxa socia!
legalmentereconocidade mestizo.roSe está en relacióncon una división que americana o de su transcripción, más o menos sublimada, en el discurso
se emparenra más con las de las castasdeJitzitiudntented.-fnidas 7 delimitadas semi-científicono seríaposible sin la colaboración'conscienteo inconscien-
(como prueba, la tasa de casamientosmix¡os excepcionalmentebaja -menos re, directa o indirectamente interesacia,de todos los "pasadores"e importadores
del 2o/ode los afro-americanoscontraen uniones "rnixtas"-, contra cerca de la de productos cuituralescon marca o sin marca (editores,directoresde insti-
mitad de las mujeres de origen hispánicoo asiático)que se intenta enmasca- tuciones culturales, museos, óperas, galerías,revistas,etc.) que, en el país
ra r diluy éndoia po r l a " g i o b a l i z a c i ó n " e n e l uni verso de l as vi si ones mismo o en lo-spaíses"blancos", proponen y propagan, Frecuenremenre ccn

diferenciantes. total buena fe, los productos culturales americanosque, sin estar explícita-
¿cómo explicar que puedan enconrfarseasí elevadas,
tácitamenre,al ran- i nente concert ados,acom pañan,or quest any a vecesincluso or qanizan el
go de parrón universal -con relación al cual debe ser analízaáay medida toda proceso de conversión colectiva a ia nueva lv{eca simbólica-22
situación de Corninación étnica-,rt "teorías"Ce las "relaciones raciales que
'I"hc
20. James McKee demuesrra a la vcz, en su libro maestro, Sociologt and the Race Problem:
Failure of a Perspeoiue,llrbana and Chicago, Universitl cf lllinois Press,1993, Por Ltna Parter que

17.E.E.'Giies, "Race,Ciass,and spacein Braziliancities",lnternationalJourndlof urban ¿nd esrasreoríascon p retens i ón c i c ntífi c a retoman ei es tereoti .i de l a i nferi o¡i dad c ,tl tural de l os
RtgionalResearch,lg-3, sepriembrede 1995,pp.395-406;y G. A. Rcid,Blachsand\wthts i¡¡ sia negros f por orra parre, que se han revelado singularmente inaptas para producir, luego para
'WisconsinPress,1992. explicar, la movilización ncgra de la pre-guerra y los tumultos racialesde los años
'60.
Peulo,l88B-1988,lr4adison,Universiryof
StatePr.ss,1991,
18. F.J. Davis, Vbo is Black?Ane Nationi ilu/e,UniversiryPark,Pennsylvania 21. T. B endcr, "P ol i ri c s , i n¡el l ec t, and the A meri c an U ni v ers i ry , 1945-1995' ' . D a' ,."¿l tts l,)6,

vJ. \\|lliamsom , TheNew Peop/e: andMul¿noesin the UnitedStates,


ntiscegenation NewYork, Ner.' i nvi erno áe 1997, pp. l -38; s obre l a i mportac i ón de l a temáti c a del ghetto en el dc bate ¡ec i ente
/cr¡kUniversin'Press,1980. en rorno a l a ci udac lv a s us mal c s , L. \fac quant, "P our en fi ni r av ecl e m;' the des ' c i ¡' :"-i ' hc ttos ' :
dc
i9. Esresratusde patrón universal,de "me¡idianode Greenwich", con relaciónal cual son les différencesentre la Fránce et les Etats-Uni s" , Anna/esdc l¿ rechercheurbaine,52, scriemb¡e
cvaluadcs rctrasos,
ios avallccs,,'los los "arcaísmos"
y los"moCernismos" (la vanguardi:1,
esutt: 1992,pp.20-30.
c t' ns a¡¡rac i ón
clelaspropiedadcs universalesde losquedominansimbólicamente un universo(cf.P.Casanova, 22. S e cncontraráuna des c ri pc i ónej empl ardc l P roc es ode ¡rans l erenc i adel poder de
clásico de Serge Guiibaut, Hoz'
Thésede doctorat,París,I 997).
líxértireinrernational,
L'espare de París a NcwY<¡rk en mareria de artc de vanguarciiaen el libro

2t2 2t3
Piene Bourclíeu y LolcWacquant- Sobre las astucias de la razón imperialista
Pierrc Bottrriieu
f
t
medio-comercial, medio-universitaria (lo que ios anglosajonesllaman cnossouer
Pero todos estosmecanismosque tienen por efectofiuoreccr una verdade-
"globalización" pres),Bastl Blackwell no duda en imPoner a sus autores títulos acordesa este
ra de las problemáticasamericanas,'(luedan a.sírazón, sobre
nuevo sentido común planetarioque contribuye a foriar so caPade hacerse
en la "globalización"-crrtendida,
un punto, a la creenciaan.iericano-céntrica
su eco. Tal es el caso de la compilación de textos sobre las nuevas formas de
simpiernente,como americttnizdcióndel mundo occidental !', poco a poco,
pobreza urbana en Europa y en América reunidos en 1996 por el sociólogo
de todo el universo-, no bastan Fraraexplicarla rcndenciadel 1.¡1¡,¡6 de vista
italiano Enzo Mingione, que seha visto aParecercon el título [JrbanPouerryand
arnericano-científico o semi-científico-scb¡e el mundo. a imponersecomc,
contra la opinión de su responsabley de los diversoscontribuyen-
the {Jnderclass,
punto de vista universal,sobre todo cuando se trata de cuestionesconro ia de
res, puesro que toda la obra tiende a demosrrarla vacuidad de la ncción de
l a "raz a" ,en la que l a p a rti c u l a ri d a dd e l a s i tu a c i ónameri canaes parri cul ar-
underc/ass(Blackrvell ha rechazado,incluso, ponerlo enrre comillas).'3 En
mente flagrantey está particularmentelejos de ser ejemplar. Se oodría aún
caso de reticencia muy marcada de los alltores' Basil Blackwell tiene el buen
i n vo c ar , ev ident em e n te ,e l ro l m o to r c l u e i u e g an l as grandesfundaci ones
juego de prerender que un título que arrae es el único medio de evira¡ un
americanasde filantropía y de invesrigaciónen la difusión de la doxa raciai
precio eievado que, de todas formas, mataría al iibro en cuestión' Así, deci-
norteamericana,en ei seno del campo universitariobrasiieño,tanto al nivel
,i"rr.u de pura políiica de mercado editorial orientan la investigacióny la
de las representaciones
como de las prácticas.La Fundación Rockefellerfi-
enseñanzauniversitariasen el sentido de la homogeneizacióny de la sumi-
nancia un programa sobre "Raza y etnicidad", en la LiniversidadFederalde
sión a las modas venidasde América, cuando no hacen decididamenteexistir
afro-asiáticos(v srr revista
Río de Janeiro, así como el Centro de estudi<.¡s
"disciplinas"como los culnral srudies,dominio híbrido, nacido en los años
EstudosAfro-asiático.r)
de le UniversidadC¡ndido Mendes, para lar'.,recerlos
'70 en lnglaterra, que debe su difusión inrernacionala una política de pro-
intercambiosde investigadores
y de estudiantes.Impone co¡ro condición de
paganda editorial exirosa.fuí, el hecho de que esradisciplina esté ausentede
su asistenciaque los equipos de investigaciónobedezcana los criterios de
los campos universitario e intelectual francesesno ha impedido a Routledge
afirntatiue ltction a la americana,lo que planteaprobiemasespinosos,ya que,
publicar un compendio titulado French Cultural Studies,sobre el modelo del
co mo s e ha v is t o, la d i c o to m ía b l a n c o /n e g roe s d e apl i caci ón,por l o menos,
British Cultural Studies (existe también un tomo de German Culrural Studies)'
arriesgadaen la sociedadbrasileña.
Y se puede predecir que, en virtud del principio de partenogénesisétnico-
Además del rol de las fundacionesfilantrópicas,es necesario,por úitimo,
togn ho¡ se verá denrro de poco aparecerun manual de French
contar, entre los factores que contribuyen a la difusi<jn del "pensamiento "ditorial ".
Arab cuhural sndies, que haga pareja con su primo de más ailá de la lr4an-
USA" en cienciassociales.la internacionalizaciónde la edición r¡niversitaria.
cha, Black British Cultural Stadies.
La integración creciente de la edición cle los libros académicosen lengua
Pero todos estos facrores reunidos no pueden dar razón comPleramente
inglesa (desde entoncesvendidc¡s,f¡ecuentemente,por las mism:rseditoria-
de la hegemonía que la produccién americana ejerce sobre el mercado mun-
les,en los EsradosUnidos, en los diferentespaísesdel antiguo Cctmmonrvealth
dial. Por ello, es necesarioromar en cuenta el rol de algunosde los responsa-
británico, pero también en los pequeñospaísespolíglotasde la Unión Euro-
s de import-expolt co^ceptual, mistificadores mistificados
bles de las estraregia
p e a --t ales , c om oS u e c i ay H o l a n d a - y e n l a s .s o ci edades
ni ás di rectamente
que pueden vehiculizar sin saberlo la parte oculta -y frecuentemente maldi-
sometidasa la dominación cultural americana)y la desapariciónde la fronte-
; J. los productos culturales que h¿cen circular. ¿Qué pensa¡ en efecto, de
ra entrc edición universirariay edición comercial han contribuido a alenta¡
l a p ues t a c n c ir c ula c i ó n d e té rn i i n o s , t€ m a s y tropos de fuerte ci rcul aci ón
descontadao constatadaque, recíprocamente, deberrsu poder de atracciónal
1996' No
simpic heciio dc su muy amplia difu.sión.Por ejcrnplo,la importarrteeditorial 23. E. Mingion e, (JrbanPouertTand the {JndercksfA l?eader,oxford, Basil Rlackwell,
en cl mismomomcntoen quc estcanlculo parte a impresión,
setrataaquíde un incidenreaisla<lo:
la mismacasaediroria.lha encabladoun combateñrriosocon losurbanólogos RonatdvanKempen
cit1, pot
y PererMarcuse,a fin de quc ésroscambien el rítulo de su obra colectiva,ThePartitioned
NewYorh Stole the lc/ea ofModzrnÁrt: Abstntct ImVres.¡ionism,Í|eedom, and the CoLlWdr, Chicago,
'f hc Globa/izing Citiet.
Un i v e r s i r y C h i c a q o Pr e ss,1 9 8 i.
esosinvestigadoresamericanosque van a Bra.sila alentar a los líderes del Moui- Rockefbller ,' Ford), no deja suL,sistirningún equívoco cuando resume, con
miento Negro a adoptar las tácticasdei movimiento afro-americanode defensa aprobación, 'lasenseñanzasde un gran coloquio so,brela ztndirc/¿ssmantenido
de los derechosciviles y a denunciar la categoríade pardo (término intermedio en 1990 en Chicago, en estostérminos, que prescindende todo comentario:
ettfe br1nc4 blanco, y preto, negro, que designa a las personasde apariencia "El sufijo 'class'esel componente menos interesantedel término. Aunclue

física mixta), a fin de movilizar a todos los brasileñosde ascendenciaafricana implica una relación entre dos grupos sociaies,Ios términos de esta relación
sobre la basede una oposición dicorómicaentre "afro-brasileños" y "blancos", quedan incieterrninadosmientrasque no se agreguea él el término más fami-
Iiar'under'. '(Jnder'
sugierealgo de bajo, de vil, de pasivo,de rcsignadoy, al
en el momento misrno en que, en los EstadosUnidos, los individuos de origen
mixto se movilizan a fin de obtener del Estado americano (comenzando por la mismo tiempo, algo de vergonzoso,de peligroso,de disruprivo, de sombrío,
Oficina de empadronamiento) el reconocimiento oficial de los ame¡icanos de maiéfico, incluso de demoníaco. Y, además de estos at¡ibutos personaies,
"mestizos",dejando de ordenarlos a la fi:cr¿a bajo la única etiqueta "negro"?24 implica la idea de sumisión, de subordinación,y de rniseria"2T
Semeiantesconstatacionesautcrizan a pensar que el descubrimiento tan re- En ,ada campo intelectual nacional, se encuentran "pasadores"(a veces
ciente como súbito de la "elobalizaciónde la razi'2t resuka, no de una brusca uno solo, a vecesvarios) para retomar este mito sabio y reformular en estos
converg€nciade los modo, d. do*in.ción e¡no-racialen ios diferentes países, términos aiienadosla cuestión de las reiacionesentre pobreza,inmigración y
sino de la cuasi-universalizacióndelfolb conceptnorteamericanocle "raza" bajo segregaciónen sus países.Así, no tienen mayor importancia los artículos y
el efecto de la exportación mundial de las categoríascientíficasamericanas. obras que se proponen probar --o invalidar, lo que viene a ser casi lo mismo-,
Se podría hacer la misma demostracióna ProPósitode la difusión inter- con una bel l a aplicación posit ivist a,la "exist encia'de est e "gr uPo" en t al
nacional del verdadero-falso concepto de underclassque, Por un efecto de sociedad,ciudad o barrio, a partir de indicadores empíricos la mayoría de las
allod¿xia transcontinentai, ha sido importado por los sociólogosdel viejo vecesmal construidos y mal correlacionadosentre ellos.z8Pues, plantear la
co n ti n ent e m ás de s e o s o sd e fo rm a rs e u n a s e g unda .i uventud ci entífi ca cuestión de sabersi existe una underclass(término que ciertos sociólogos fran-
surfeando sobre la oleaCade popularidad de los concePlosmade in USA'26 cesesno han dudado en traducir como "tous'cl4sse", esperando sin duda ín-
Para avanzarrápido, los investigadoreseuropeosentienden "clase"y creen troducir el concepto de sous-l¡ommrs)en Londres, Lyón, Leiden o Lisboa' es
hacer referenciaa una nueva posición en la estructuradel espaciosociaiurba- suponer -{omo mínimo-, Por una Parte,que el término estádotado de cier-
no, mientras sus colegasame¡icanosentienden 'under" y piensanen un rnon- ra consistenciaanalítica y, por otra pafte,,que tal "grupo" existe perfectamente
tón de pobres peligrosose inmorales,en una.óptica resueltamentevictoriana en los EsradosUnidos.2ePues la noción medio-periodísticay medio-científica
y racistoide.Sin embargo, Paul Peterson,Profesorde politología en Harvard de underclassesrátan desprovistade coherenciasemánticacomo de éxistencia
y director del "Comité de investigación sobre la underclassurbana" del Social
Sci e nc e Res ear c hC o u n c i l (fi n a n c i a d o a l l í ta m bi én por l as fundaci ones
27. C. Jenls y P. Peterson (eds.), The [Jrban Undertlass,'ü'ashingron, Brookings Insti¡tttion,
1999,p.3.
28. P ueden consi d era¡s etrer ej empl os entre muc hos otros : T R odant, ' A n E mergi ng E thni c

24.J.M.Spencer, TheNetaYorhCobredPeoplt:ThelvtixedPtzceMouementinAmerica,NewYork, U ndercl assi n the Netherl ands ?S ome E mpi ri c al E v i denc e",N ew C ommuni ry , 19-1, oc tubre de
New Ycrk Universiry1997, y K. DaCosta, Rtmahing "P¿ce": Social BasesanC Implications of de 1gg2, pp. 129-141 tJ . D angs c hat,"C onc enrrari on of P ov erryi n the Lands c apesof' B oomrow n'
Muhiracial Mouement in Americ¿, Thése de doctorat, Unir.ersitéde Calilornie, Berkele¡ 1998. Hamburg; fhe Creation of a Nerv Urban Underclassi", Url¡an Studies,31'77 , agoxo de 1994' pp'
2-. H. W i n a ¡ t , " R a c i a l F o r m a cio n a n d F ie g e m o n y: Glo b a l and L¡cal D cvcl opments", en: A ' Its3-1147; v C .'L V hel m, "l v { argi nai i z ati c n,D epri v ati on, and Fatai i s m i n rhe R epubi i c oi

Rartanski y S. V/esrwood (eds.), Racism, Idtntiqt, Ethniciry, Oxford, Basil Blac¡¡e ll, 1994, e ibidetn, Irelanci: Class and Unde¡class Perspectives",EuropeanSocio/ogica/Reuiew, 12-1, mayo de 1996,

R¿ci,tl Corditior:r, Minneapolis, Llniversiry of Minnesota Press,1995. f,. "3-51.


26. Como lo habla señaladohace va algunos añosJohn lfestergaard en su alocución presidencial 29. Tomándose muciro rrabajo para argüir una evidencia,al hecho de que el concepto dc urder:lcss
anre la British Sociological Association: 'About and Bcyon the Underclass: Some Notes on the no se apliqrrc en las ciu,' des francesas,Cvprien Avenel acepta y re[uerza.la idea preconcebida

Influencc of üe Social Clirnate on British Sociology Today", Sociolcg1,26-4, julio-setiembre de según l a cual éstes eríaoperatori o en l os E s tadosU ni dos ("l -a ques ti on del ' underc l ¿:sdc t deux

r992,pp.575-587. c6tés dc I'Atlantique", Sociclogiedu tr¿t,ttil, 39-2, abrtl de 1997, pP. 2,l-237).

7"16 2r7
l,i¿rrc Br¡Ltrr!ic ¡r 'r'Loic l\'t.icr¡ n! tt. Sol)r¿kts ri stttcit¿stle la rt¿:ótt i ttt¡terialista
PierreBourdieu

LsradosUnidos. Es ei economistaGutina¡ l'{yrdai quien la habíaforjado cn los


social. Las poblacionesheteréclitasque ios investigadoresamericanosinclu- describir
años'60, a partir de1suecocndel¿/ass. Perosu intención era entonce-s
yen habirualmente bajo este término :tributarios de la asistenciasocial y de la claseoble¡a de
el procesocle marginali:¡.actcin de las fracciones inferiorcs
desocupadoscrónicos, madres solteras,familias monoParentales,desechos
para criticar la ideol,¡qí,lclel aburguesami(to generalizadode
los paísesric<.rs,
del sistema escolar,crirninales y gangsters,drogados v desalojados,cuando no
Puede r '3r sccóm o el ¡ odco por Am ér ica puede
capit alist as. ir
i as soci cdades
ro d o s los habit ant esd e l g h e tto a g ra n e l - n o d e ben ser i ncl ui dos en esta
nna idea: de un cc¡nceptoestructuraique apunta a Ponei en cucs-
trarrsforn-iar
categoríafouTr€-tout sino por el hecho de que son percibidascomo otias tan-
trén la represenracióndominanie, ha sa.lldouna categoríabehavioristarecoita-
tas desrnentidas¿ivientesdel "sueño ame¡icano"de éxito individual. El "con- "antisocialcs'
da a medirla para refotzarla,imputand.oa los comportarnienros
cepto" emparentadode "exclusión"es comúnmetlte empleado en Francia y
.1eios más desposeicios la responsabilidad de su desposesión'
en numerososotros paíseseuropeos(bajo la influencia de ia Comisión Eu¡o- "Pasadores"
Estosmalentenclidosse deben,Por una pane, al hecho de que los
p e a e spec ialr nenr e)e,n l a fro n te ra d e l o s c a m p o s pol íti cos, peri odísti coy
rransarlánricos catnposinrelectuaiesimportadoras,que Producen'
de ios di.",ersos
científico, con funciones simiia¡es de des-historizacióny de despoiirización.
reproduceny hacen circular rodos estos(falsos)probiemasdescontandoa1 pa';o
I-o que da una idea de la inanidad de la empresaque consisteen retraducir
.',
\u nearreñe heneficio ¡naterialo simbólico, están exPuestos-Por su
una noción inexistentepor otra más que incierta.30 PtYuLtrd -,.¡".1"
Por
posicióny por sus habius cientíñcosy políticos-, a una doble heteronomía.
La underclassno es) en efecto, sino un grupo ficticio, producido sobre el "modernidad" social
un. p"rr., miran haciaA¡nérica,cenrro supuesrode la (pos)
papel por ias prácticasde clasificaciónde los científicos,periodistasy otros atnericanos
y cicntífica,pero ellos mis¡nosson dependientesde los investigadores
exp€rtosen gestión de los pobres (negrosurbanos), que comulgan en la creen- (f|ecuenrementeaja-
que exporraniracia el extranjeroproductos intelecruales
cia en su existenciaporque es adecuadapara restituir una legitimidad científica y específicode las
dos,),puestoque generalmenteno tienen conocimiento directo
a unos y un tema políticamenterentablea los otros.3rInapto e inepto en el
instirucionesy dc la cultura america¡ras.Por ei orro, se i|rclinan hacia el periodis-
caso americano, el concepto de importación no apo¡ta nada al conocimiento al
mo, hacia las seduccionesque propotle y los éxitos inme<liatosque procura, ¡
de las sociedadeseuropeas.En efecto, los instru¡nenios y las modalidades del
¡nismo tiempo, hacia los remasque f-lorece¡r en la in¡ers:ccióncle los campos
gobierno de la miseria están lejos de ser idénticos en los dos lados del Adánti- el
¡nediáticoy político -por lo ranro, en el punto de rendimiento máx.imosobre
co, sin hablar de las divisionesétnicasy de su statuspolítico.32De ello se deriva compla-
mercadoexterior (como lo demostraríaun invennrio de las recensiones
que las "poblacionescon problemas"no estándefinidas ni tratadasde la misma su prediiecciónpor
cienresque reciben sus trabajosen las rcvistas)-. De donde
manera en EstadosUnidos y en los diferentespaísesdel viejo mundo. Y lo más
problemáticassofT-ftr verdaderamenteperiodísticas(se engalanan de concep-
extraordinario es, sin duda, que, según una paradoiaya encontradacon motivo
ros), ni complealnente científicas(se enorgr-rllecen de estar en simbiosiscon "el
de otros falsosconceptosde la vulgata mundializada, esta noción áe und¿rclass
punto de visra cle los acrores")-,que no son sino la retraducciónsemi-científice
que nos liega de América ha nacido de hecho en Europa, exactamenteigual que
,1elos problemassocialesdel rllomenro en un idioma importado de los Estados
la de ghetto, la que tiene por función ocultar en rczón de la censura política et c. ) y que
t,l ni dos(etni ci da d,idcnt idad,r ninor í a,com unidad,f r agm enr ación,
severaque pesasobre la in.¿estigaciónde la desigualdadurbana y racial en ios
5esucedensegún un orden y un ritmo dictado por los ¡neciiosde comtrnicación:
juventud de los l¡arrios suburbanos,xenofobia de ia ciaseobrera en decidencia,
soció-
d.*ajusre-sdelos licéensyde ios estudiantes,violenciasurbanas,etc' Estos
30. N. Herpin, "iiunderciass dans la sociologie américaine: exclusion sociale et pauvreré",Reuue
"hechos de sociedad", en
.fran¡aisede .rocíologit, 3 4 -3, julio-setiembre de i 993, pp. 421 -439.
logos-periodistas, -sisrnp¡sdispuesrosa cornenterlos
31. 1, .\ f á c q u a n r , " L u n c i e rcla ss' u r b ,.r indea n s I' im a g in a ir eso cialet sci enti fi queaméri cai n",en: S . rrn l engur,i ea l a vez-accesibley "m , r cler nisr a'.Por lo t ant o, f r ect t ent et nent c
Paugam (ed.), L'extlttsion:l'état ¿hssttuo¡¡,r, París,Editions i-a Découvcrte, 1996, pp. 243-262. (por reG¡enciaa los "arcaísmos" del vicjc:
Pcrcibidocomo vagarnenteprogresista
32. Es ra s d i f e r e n c i a s s e e ¡ lr a íza ne n z.ó ca lo sh is¡ ó r ico s p r o fu ndos, como Io i ndi ca l a l cctu¡a
comparada de los trabajos de Giovanna Procacci y N4ichael Ka¿: G. Procacci, Couuerner Ia
mishr: k question socialceti France, I 739- I B4B, París,.Seuil, 1993; y M. Kar¿, In the Shadou, oJ'the
Afiluencc,Nerv Ycrk, Pantlieon'1963'
13. G. lr4yrclal,CL,dllertg'to
Poorhoue. A Hisrory of\W(ire in Antrica, Nev; York, Basic Books, 1997, nueva edición.
"étnicos"' tienen
a <ierasgos"culturales"o
pcnsan)ic¡rtocuropco),contribu)'en. .' ril:.rtrera
prrticularnrcntcparadótic¡,a lx seno de un Esrado-nación,dado Partir
imposiciónde una visión del mundo que está lejosde ser incotnpatible,a pesar el ci eseoyel derec hodeexigir u, , , . . ono. i*ient ocí vicol, polí t ico{7t cuánt ot / I / es.
su existen-
pues, las fo¡mas bajo las .á.' 1o, inciividuosbuscanhacer reconocer
de las apariencias,con las que producen y vehiculizan los grandes thinle tanhs
varían según los lugaresv los momentos en
internacionales,más o menos directamenteconectadoscon las esferasdel pod.r cia y sus Pertenenciaspor el F'stado
y consriruyensiempre una aPuesr¿de lucha's
económicoy político. función de las tradicioneshistóricas generoso
compararivoen aparienciariguroso.1¡
Quienes en los EstadosUnidos es¡áncompiometidos, frecuentementesin er¡ la historia. Así, un análisis
saberlo,en estainmensa empresainrernacionalde iruport-exVorr
cultural, ocupan puede,i ncl usosi n quesusaut or est enganconcienciadeello'cont r il¡ uir ahacer
hecha por y para americanos'
en su mayoría una posición dominada en el campo del poder americano,e inclu- aparecercomo unlversaluna problemática
En la lucha por el monopolio cle la
so muy frecuentementeen el campo intelectual.Del mismo modo que las pro- Se acaba, así, en tt"" ¿oUt" paradoja'
social tecon<icidacorno
duccionesde la gran industria culturai americana,como el jazz o el rap, o las prolr-,..ión de la visión dtl m"do .universalmente
una posición eminente,
modasde ia ropa y de los alimentosrnáscomunes,como el jean, deben una pane universai,en la que ocuPan hoy l1-clu¡o^dominante'
excepcionales;pero su excepcionalismono se
de la seduccióncasi universalque ejeicen sobre la juventud al hecho de que son los Estados unidos, son bastante
de acuerdo
la ciencia social nacionalesestán
producidasy llevadaspor minorías dominadas,3a de igual modo los tópicos de la sitúa allá donde la sociodiceay
de un orden social que oirece posibilida-
nuevavulgata mundial sacan,sin duda, una buena parte de su eficaciasimbóiica en situario, es decir, en la fluidez
(especialment€por comparación con las
del hecho de que, porndos por e.specialistas
de Cisciplinaspercibidascomo rnar- des extraorclinariasa la movilidad
ginales y subversivas-mles como los cuhural studies,los minority studies,los gay
sndies o los women studies-, toman -a los ojos, por ejemplo, de los escritoresde
ias antiguascolonias europeas-eI cariz de los mensajesde libcración. En efecto, moderni ry,dcquel os profes i onal es del as c i enc i as s oc i al es puebl ans ul enguajntinorí1,
ec i entífi c odc tan¡os
profession,
(minoriry,
..falsos el simple calco lexicológico
el imperialismocultural (americanou otro) no se irnpone jam:ísmejor que cuan- amigos,,teóricos fundados sobre

do es favorecido por intelectualesprogresistas(o "de coloÍ", en el caso de la orofesi ónl i beral ,etc .)s l nv erquc es tos térmi nos morfol ógi c amentegemel os es táns eparados por
todal adi stanci aentr eel ,i ,t"-",o.i "l enel c ual hans i doproduc i dos y el nuev os i s temac nel c ual
desigualdadracial),poco sospechosos en aparienciade promover ios intereses a l afattac |del "fal s o ami go' s on
ev i dentementel os i ngl es es
son i ntrocl uci el .r. L", * ;.;;ues ros han aprentiido
hegemónicosde un país cont¡a el cual portan la lanzade la crítica social.fuí, los misma lengua' pero también porque
frecuentemente
porque hablan en aparienciala
diversosartículosque componen ei número de verano de 1996 de la revista soci ol cgíacnmanu4 l es ,redders y l i bros arneri c anos ,noti enengranc os aparaoP oneral ai nv as i ón
Dissent,órgano de la "vieja izquierda' dernocráticaneovorquina,consagradoa las conceptual ,sal vovigi l anc i aepi s temol ógi c a""t' "-"' (E x i s ten' des del uego' pol os deres i s tenc i a
en el c as o de l os es tudi os étni c os '
"Mino¡idades en lucha sobre el planeta:de¡echos,esperanzas, ameri c ana,c omo, por ei empl o,
amenazas",35
pro- dcmosrrada a l a heg emonía grupo de
Martin *"]-::'1'dcl
dn¿! R¡tcial studies, cirigiJa por
yectansobreel conjunto de la humanidad,con la nuevaconcienciahumanisra a_lrededorcle la revista Etbnic
estudi odel raci snro y del as mi grac i ones deR obenMi l es del aU ni v ers i daddeGl as gol v ;Pdel
eroes
ordentos
de ciena izquierdaacadémica,no solamenteel sentido comun libe-
característica de tomar plenamente en cuenta las
especificidades
paradigmas alternativos' tuidáo'o' amc rl c enasy á s us
rál aarteAmericano,sino la noción de minori4r (seríanecesarioconservarsiempre menos por opos i c i ón a l as c onc epc i ones
b¡i ráni co, no ti ene n que defi ni rs e a oficiar
predispuesta
cl término inglés,para recordarque se trata de un conceptonetivo importado en se deriva que Inglaterra estáestructu¡almente
de¡ivadasb¡itánicas.) Lre ello
del sentido común científico americano Penetran en
la teoría,e, incL-rso,originario de Europa) qlle presupone,aun aquello cuya exls- las nociones
de caballo de-Iiova, por lo cual
tencia real o posible se t¡ataría de demostrar:36que categoríasrecortadasen el el campoi ntel ectua l euroP eo(s uc edel omi s mo.tantoc nmateri a.i ntel ec tual cde
onroenpol íti c a
los intclectuales-
l" de.lasfundacionesconsen'adorasy
económica y so.i,r,). E" i;;;;"ro, "..ór.,
¡nercenari osesl amás anti guamentees tabl ec i da,l amás s os teni day l amás intervenciones
rentabl e.Tes ri moni
ult¡a-ode
de
científ-ico áela undercl¿ssa continuación
34. i{. F a n t a s i a ," E v e r . v th in ga n d No r liin g : T h c M e a n in g o f Fast-Foodand Othcr A meri can ello son la difusión.i.l ,rr10 de i¡ ie recira
del Manhattan Instirute y gurú intclecturl
Cult ura i G o o d s i n F r a n c e", T h e i' . ,ct,illcRe u ie u , 1 5 - 7 ,1 .9 9 4,pp. Í7-88. mediarizadasde ch"rl", Mu.r"y -experro
35. " E ¡n b a t t l c d N ' f i n o r i t i e sa r o u n C th c Glo b e : Rig h ts, Ho p e s, - l-hreat",D i ssent,verano dc 199(r. l i beral enl osE stad os U ni dos -,y des uc ompañero,el temac l el a...l epc nc i cdri nc i e' c { el os J c s nos ctiícei c s
rec l uc i r s ti t:amente t fi n
que Tony B l ai r s e P roP one hoy
36. El p r o l - r l e m ad c I a l en g u a , e vo ca d o a q u í d c p a so , r .ic l os más cspi r.rosos.
A l saber l ¿:' resP ectoa l as ayu das s oc i al es '
,.l i berar,,al ospob res tl el a..pi c ota,de[aas i s tenc i a_c o-ol oh"l rec hoC l i ntonpf,r]s us pri nros de
prec auc i o n c sq u c t o m a n lo s cin ó lo g o s cn le in tr o d u ccii¡ n dc térmi nos nrti vos, uno pueri c
as ornb¡ a r s e a, u n q u e t a m bié n se p a to d o s lo s b cn cficio s sim b ól i cos que apofi a este l rarni z-dc A méri ca en e[ verano de 1996'

221
220
PierreBau.rdieu

estructutas socialesrígidas del uiejo continente): los estudio.scompararivosmás


riguroscsestán de acuerdo en concluir que los EsradosUnidns no difieren
profundamentesobreestepunto de las otrasnacionesindustriales,
inclusoque en la edición*
t]na revoluciónconservadora
el abanico de las desigualdadeses allí ciaramenremás abie¡to.37Si los Estados
Unidos son realmenteexcepcionales, según ia vieja temática tocquevilleana,in-
cansablementeretomada y periódicamentereacrualizada, es anres que nada
por el dualismarígido de las divisionesdel orden social.Es más todavía por su
capacidadde imponer como universallo que ellos tienen de más parricular,
mientras hacen pasar por excepcionallo que tienen de más común.
Si es ve¡dad que la des-historizaciónque resulta,casi inevitablemenre,de la
migración de las ideasa travésde ias fronteras nacionaieses uno de los factoresde
des-realizacióny de falsa universalización(por ejemplo, con los "fa.lsosamigos"
teóricos),entoncessólo una.¡erdaderahistoria de Ia génesisde las ideassc,b¡eel
mundo social,asociadoa un análisisde los mecanismossocialesde la circulación
internacionai de estasideas,podría conducir a los ciendficos,en estedominio
como en otra parte, a un mejor dominio de los instrumentoscon ios cuaies
argumentan sin inquietarsepreviamentéen argumentara propóiito de ellos.3o
f, I editor es el que tiene el poder totalmenre ex¡raordinario de asegurar r
l) Oublicación,es decir, de hacer accederun texto y un autor a la existencia
"creación"
púbica (Offintlichheit), conocido y reconocido.r Esta suerte de
37. Cf. especialmente
R. EriclaonyJ. Goldthorpe,TheConst¿nt
Flux:A StudJof Mobiliryin
i-pli." la mayoría té las veces un consagración,wa transferencia d'e capital
Induitial Societies,Oxford, Clarendon Press,1992; Erik Olin Vrigth llcga al mismo resultadocon
una metodología sensiblemente diferente, cn ClassCounts: Comparatiue Studiesin Chss Inequa/it7,
simbólico (análoga a la que opera un prefacio) que es tanto más importante
a través
Cambridge-París, Cambridge Universiry Press-Editionsde la Maison des Sciencesde I'Hcnme, cuanto quien la re^lizaestáél mismo más consagrado,esPecialmente
,,catálogo'-conjunro de los autores más o menos consagrados-,que ha
1997; sobre los determinantes políticos de la escalade las desigualdadesen los EsradosUnidos y del
su crecimiento durante las dos últimas décadas, C. Fischer et aL, Inequaliry by Design: Crahing the publicado en el pasado-
Bell Curue Mytb, Princeton, Princeton Universiry Press,1996.
38. En una obra esencialpara medir plenamente la parre de inconsciente histórico que sobrevive,
bajo una lorma m:ís o menos irreconocible y reformulada, cn las problemáticas científicas de un * "Une rér.olution conservatricc dans l'édition' , Actes de !¿ rechercheen sciencessocidl¿s,126'127 '
país,y el pesohistóricc que da al imperiajismo académicoamericano una parte de su extraordinaria
marzo de 1999, pp' 3-28.
fuer¿a de irnposición, Dorothy Ross revela como las ciencias socialesamericanas (economía, de datos estadfsticos
Esre trabajo se apoya cn una investigación bibliográfica y en una recolección
sociclogfa,politología y psicología)son construidasde cntrada sobre dos dogmas complementarios Dirkx; en 38 entrevistas en
en los archivos y en editoriales, que han sido realizados por Paul
constitutivos de la doxa nacional, el "individualismo me¡afísico" y la idea de una oposición de colección distribuidos en
profundidad (y a vecesrePetidas)realizadasa cditores y a dircctores
diametral en¡re el dinamismo y la flexibilidad del "nuevo" orden social americano, por una parre, l os ' c ríti c os ' de l os res pons abl es
del campo edi tori al , de l os traduc tores , de
y el estancamicnto y la rigidez de las "viejas" lormaciones socialeseuropeas,por el ot¡o. Ver: D. "l .on¡unto de la gesrión de los derechos
administrarivos, de los agregadosdc prensa, de los responsables
Ross, &r Origins ofAmerican Social Science,Cambridge, Cambridge Universiry Press, 199 I . Dos Rosine christin, Paul Dirkx, saliha
que han sido dirigidas por Pierre Bourdieu,
dogmas f u n d a d o r c s d e l o s cu a le s se cn cu e n tr ¡ n r e tr a d u cci ones di ¡ectas en el l enguaj e "",r"n¡"ror, sometidos al análisis estadístico han sido
Fclahi. Clairc Givr1 Isabelle Kallinorvski. l¡s datos
ostenta¡oriamcnte dcpurado dc ia teoría sociológica,para el primero, con la tcntativa canónica de y la rranscripción dc las entrevistas
preparadosy controlados pcrr Rosine christin. L¡ realización
lálcort Parsons de elaborar una "tcoría voluntaris¡a de la acción", ¡ más rccientemcnte, en el
han sido financiadas por el observatorío Frdnce'Loisir¡ de ia lecru¡a'
rcsurgimiento dc la tcoría llamada dc la elección racional, ¡ por el segundo, con la "reoría de la figura casi divina del editor
l. Joachim unseld ha analizado, a propósiro dcl caso de iGfka, la
mqdernización" que reina por complcto sobre el estudio del cambio socia.len las trcs décadasde ,,u.r.di.tos" devolverlo alll, al escritor que sc remite
.,,io, pueden sacarde la nada o, al contrario,
pos guerr a ,y q u c h a c e h o y u n r cg r e soin e sp e r a d oe n lo s e sr u d io spost-sovi éri cos. histoirede ¡cspublications, Pa¡fs,Gallimard' 1984'
a é1,.J. unscld, Franz K,t¡ka, u,e uie d'icriuain:
é publ i caci óndeobras. f r ancesasoext r anjer as, def iniendoelsist em adcl. r s
Conocim!rr io y desccnocimiento :: imponen a ellos y los "rnárgenescle manio-
lo"..io.,". y de los fines que se a
f abandonadosa las confrontacionesy
Para comprender el proceso de selección que, en el interio¡ de la pro- bra", frecuentementemuy estrechos,
del juego editorial' El más importante de
d u cci ó n es c r it " , dis ti n g u e l o " p u b l i c a b l e " d e l o " i mpubl i cabl e" (para un las luchas entre los protagonistas
editorial de las diferenteseditoriales
e d i to r par t ic ulary t am b i é n , v s o b re to d o , p a ra e i conj unro de l os edi tores), los cambios observadosá l" poirtica
en el
t"mbio' de la posición que ellasocuPan
es nece.sario evidentementc ¡rmar en cuenta el dispositiuoirzstitttcional(co- puede, así, estat relacionado" de
las posicionesdominantes se acomPaña
mités de lectura, lectores,directores de colección especializadoso no, etc.) campo, ei desplazamiento'hacia
en
a privilegiar la gestión de los logros
que, en cada editoriai, está encargadode operar ia selecciónentre ios ma- un reforzamiento de la tendencia
innávación y a poner el capitai simbólico
nuscritos propuestos (a través de los intermediarios y de los inrercesoreso derrimento de la búsquec{ade ra
no eran'
mucho más "comerciales"' IÓs que
p o r si rnple env lo posra l ).' ?Má s p re c i s a me n te ,e s necesa.i oaprehenderl as <letentadoal servicio át "t"o"'
los que han contribuido Ia acu-
a
relacio¡resobjetivas entre los diferentes agentesque contribuyen a la deci, en los tiempos heroicosde los comienzos'
si ó n d e public ar , es d e c i r, a d c m á sd e l a s c o mi s i o n esy de l os comi rés,i ns- mulación de ese caPiral'3
taneiasespecialmentehabilitadas para este fin, el editor mismo y sus al!e, C ontral ai i usi óndelaaut onom í adelosiugar esde. . decisión', visibles,

gados, las directores de colección, los lectores, el personal adminisrrativo, quel l evaai gnorarlascoaccionesdelcam po, bast ar áconr ecor dar 'Por ejeln-
leisconsejerosinfluyentes que pueden acluar como directores de colección pl o,queel conj unto delost ext osof r ecidosala. . elección'delos. . r esponsa.
por la
el producto de una selección reglada
oficiosos, y, por último, los tracluctores,que, en más de un caso, orientan bles" editoriales es ya él mismo
la publicación de autores extranjeros. l ógi cadi acríti cade lcam Po: enef ect o, losaut or esseor ient an, eniaubicación
de
de una represenraciónmás o menos 'iusta
Pero toda lalógica del carnpo editorial y de la crqencia lireraria que allí se de sus manuscritos, "n fttnción nom-
de aquellos a quienes están ligados
engendra inclinan a olvidar que las interacciones,más o menos encanradas, los diferentes editores o, al menos,
de ias cuales cada microcosmo editorial es el iugar, están determinadas por Ia bresd.eescuel as(, , lanuevanovela") ogr andesnom br espr opios, delpr esent e
guía la conducta'de todos los
estructuradel campo editorial en su conjunio: es ella, especialmenre,quien o del pasado; es est; representacioni.l*t
determina el tamaño y la esrructurade la unidad responsablede la decisión actores' l osedi tores*i. . , 'o. 'per ot am biénloscr í t icos'Par t icular m ent esen-
(va del "decisor" único, al menos en apariencia,de las pequeñaseditoriales, si -bl esal efectodeet iquet aejer cidopor lascubier t as( . . iaBlanche, , de por
y todos los intermediarios'que'
hasta el verdadero campo de poderes diferenciadosde las grandeseditoria- Gallimard)' los diiectores de colección
les); es ella la que define el peso relativo,en las relacionesenrre los diferenres susi nteryenci onesosusconsejos( deber í asllel, ar r um anuscr it oaFulano'.
entre . ) ,
el ajuste, ftttt"n"rrrtnte exaltado como "descubrimiento"'
agentes,de ios diferentescriterios de evaluaciónque los inclinan, por ejem- favorecen está
a cada posición en el campo editorial
plo, a propender hacia el lado de io "lire¡ario" o hacia el iado de lo "comer- un editor y un autor' En efecto'
ci a l " o , s egún la v iej a o p o s i c i ó n c a ra a F i a u b e rt, a pri vi l egi ar el arte o el l i gacl ounsi stema decoaccionesydef inesalm enosnegat ivam ent edef inidos,
dinero. En efecro,c,adaediro¡ial ocupa, en un momenro dado, vna posic;ón yfrecuentementer edobladospor lasdisposicio, , . id. losagent es( ellasm is-
en el campo editorial, que dependede su posición en ia disrribución de los masaj ustadas,e nlam ayor í adt lot t "'o''alaposición) quet iendeaor ient ar
¡ecu¡sosraros (económicos,simbólicos, récnicos,etc.) y de los poderes que asusocupantesh aciaunaclasem ásom enosam pliadet om asdeposición'
e l l o s co nf ier en s obr e e l c a mp o ; e s e s ra p o s i c i ó n e structurall a que ori enra
las tumas rle posición de sus "responsables",sus estrategiasen materia de
J.P araev¿l uarcl crpitrts i mból i c ol i gadoaunaedi tori al y as unombrc y ,arravde
éscaracterísricas
dec l l a,atodosque
habrá que apoyarse en un con.iuntrt
sus miembrcs y a toclos sus aurores, a ia "noblezi' de la
colectiva .1" ert. ediá.i"[ como pertenecientc
conrribuyen a la representación
2. Cl. A. S i m o n i n y l l F o u ch é , "Co m m cn t o n a r e fu séce r t;r in sd e mes l i vres.C ontri buti on i une profesi ón:l aanti gÚ e dad(q' e,entodos l os uni v ers os s oc i al es "s táas oc i adaal ¿nobl c z a),l a
de escrito¡esconsagraciosy
ron¿o editoriai, medido con el número
hisroire socialedu littéraire " , en: Actesde h rechercbeen sciences sociales,126-127, marzo de i 999, importancia y la calidad a.i
N obel '
número t1el aureadosal prem' c
pp. 103- 115 . cl ási cos,y en parti cu l ar c on el

225
)11
PierreBourdiet Una reuolut.:ión a.¡nseruatlora e¡t l¡t edició¡t

PodernosapoyaÍnos,para hacer sentir mejor la diferenciaentre la visión Descubri¡ que el comité no cumple verdaderarnente su función oficial de
estructuraldel juego y la visión que tienen de él los jugadores,inciuso los más selección(¡',uesto
que la decisiónpertenece,de hecho,al presidentey a su "secrc-
lúcidos, en un testimonio tan valios,r como el de Michel Deguy que evoca la raría"y que, segúnlas deciaraciones de los iniciados,"un libro para ser edita-
experienciaque él ha ,recho Cel santo de los santosdel templo literario, el do debe' no' pasar por el com it é") ono es, sin em bar go,per cibir la ver dader a
"Comité" de Gallima¡d.o Esta experiencia,que es la dei encantamiento segui- utilidad, la de banco de capital social1' de capital simbólicoa travésdei cual la
do del desencantamiento,forma parte integrante de la verdad completa de un edi tori al puede ejer cersu im per io sobr e las academ iasy los pr em ios lit er a-
juego que, como la producción literaria, descansasobre la creencia.La coacción rios, sobre la raciio,la televisióny los peri idicos, siendo conocidosvarios de
de la estructuraque ei análisisobietivista actualtza,armado de la estadística,no los rniembrosdel comité por la ertensión de su red de enlaceslite¡arios (dos
puede imponerse, en efecto, sino a los que esrán dispuestosa reconocertodcs de entre ellos e.stáncitados en un artículo consagradoa las treinta personali-
los soportesvisibles de Ia fe iiteraria, atribu¡cs míticos de la "gran editorial", dadesnrás poderosasde la edición,' y ,"r. de ia mitad son resPcnsables de
como el "salón oval" o el "comité", y sus encarnacionestemporales,personasy emisionesy de tribunas críticasen las radios o en los periódicos).8
nombres familiares, Gastón, Claude o Antoine, y reservadosa los verdaderos Para saiir del ejen'iplode Galli¡nard, se puede tomar el casode Grasset.Ives
familiares,tuteos selectivos,tics y trucos en uso cn las interaccionessiempre Berger,direc¡or literario cs muy influyente cerca de los grandespremios; ]ean-
jutilmenre jerárquicasde aquello que los allegadosmismos llamar, "la corte". Paul Enthoven, direcror editorial, y consejerode redacción en Point; Manuel
Estos "elegidos"son también las víctimas de elección de la violencia simbólica Carcassone, di¡ector literario adjunto, escribeen Pointy en Figaro;BernardHénri-
que sufren con una suertede arrobamiento y que podrá aparecerles súbitamen- Léry, que ciirige la colección "Figures" y la revista I^a Rlgle du jeu y es consejero
te, retrospectivamente,graciasa una' crisis. Habitados por 1á creenciaen la literarió, tiene una crónica en Pointy es omnipresenteen los medios de comuni-
literatura, están inclinados -al menos hasta la desilusión final, que, como en cación; Hector Bianchorti es miernbro de la Academia francesa;Dominique
Ios cuenios, rompe súbitamente el encanto- a d¿sconocer la ve¡dad de las rela- Fernandezy, FrangoisNourissier,consejerosliterarios tirularesde la editorial,
cioncs socialesde dominación a las que ella posibilita: "La decepciónde los escribenen Le Mon¿Iá el primero, y en Le Nouuel Obseruateur,el segundo, y
miembros del comit,é llega cada vez que están extremadamente asombrados pariicipan en nurnerosos,iurados,Fe¡nandezen el Medicis y Nourissier en ei
por sufrir que la reunión efectivano se pareceen nada a la que deberíaParecet Goncourt, esteúltimo también crítico en FigaroMagazine y en Point.
si tuvieran todavía la procedenciay la imposición simbólica en su red"'5 Abis- Y para observarla forma que tonta, en el plano propiamente literario, el
mo que se abre súbitamente entre la aparienciaa distanciay la reaiidad a vista dcble juego consigo mismo que autoriza Ia doble verdad de una experiencia
cercanao, más exactamente,entre la experienciadesencantadade lo real ordi- donde coexistenla visión mítica (o ideai) y todo lo que visiblementela con-
nario y los entusiasmos fetichistas de la illusio, ligada a naderías, como las tradice -como el reemplazopor los Labro, Gisbert, Deniau o Jardin de es¡os
inflexionesinimitables e inolvidablesde lasvocesde JeanPaulhano de Raymond "vcrdadcrosgrandesautoresque precisamenrehan formado el prestigio de Ia
Queneau o los misterios apenasdeciblesde la "copa'-simple "vaso" en cuai- NRF desde hace un siglo y hacen fieles ¡odavía hoy a su conjunto de lecto-
quier otro lugar banal-, que clausuralas sesionesdel "comité" y que se encuen- res"-,e basta leer las cartas,especialmentela primera, que otro miembro del
tra, allá, invesrida de ios prestigios y de los misrerios de una suerre de Cena
literaria. Doble verdad que puede ser vivida por relampagueosen el desdobla-
miento casi esquizofrénicode los que sabeny no quieren sabeilo, y que están 6. Ivíichel Degty, op. cit., p. lIl.
separados sin cesarde la verdad de la instituciény de lo que alií hacen,por la 7. A. l.ielrae¡t, "l-cs Parrains de l'édition", en: L'Euénement du jcudi, l9 de ma'rzade l99fJ'

individual y colectivaconstantementemantenida.
pantalla de una denegación l l . N o ha cscapadoa N ' l i c helI)c guy (op. c i t.,p.26) quc s u ev i c c i ón del "c omi ré" es ,s i n duda, el l a
mi sma un tesri m,¡ni ode l a func i ón v erdadc ¡amentci mparti da a c s ta i ns tanc i a¡c s tan c l aro que,
-por l o tantc , mttv poc o medi ári c o-, Mi c hel D eguy i ro podía aporrar
autor esotéri coy res erv a< 1o
a la institución los bcneficios asociadosa la poscsi<inde un fuerte capira! cspecíficrr.
4. MichelDeguy,k Comité, dirn lzcteur
Confessions dt grandz
eelitoria[ ChanrpVallon,1988.
Seysel, t).Jcanl ahousue,i zJ ean-Mi c hc l L¿c l av e¡i ney J .L.ahougucE
, c ri uerons etl i s erons enui ngtl z ttres ,
5. MichelDeguy, op.
cit.'
p.31.Vertambién p. ó4. S cyssel ,C amp \/rl l o n, l 99fi , p. 28.
co mi r é, J ean, M ar ie L a c l a v e ti n e ,e s c ri to r i n v e s t i do del estaruto de l ector- a qui enes son consider adoslos r e"sponsables, no pueJc ver que son, ha-
selecror, dirige a Jean Lahougue, escritor rechazado(después de haber sido bl ando con pr opiedad, "sin sujet o". Com o es siem pr e el ca. sode la e; <pe-
publicado en otros tiempos), para justifica¡ su rechazo.Ellas enuncian bajo ri enci a ordi na r ia del m undo or dinar io, ocur r e que la ver dad dc la cst r uc-
el modo de la euidencialas expectativastácitas que, devenidasconstitutivas tura es perci bida apenas,por r elam pagueos,sin que la per cepción pr áct i-
del dogma o, peor, áe la cloxa literaria de la "gran edirorial", orientan la.s ca de l as caus asy de las r azonesse encuent r e r adicalm ent et r ansf or m ada:
"la sólida composición de los relatosdel último " Y es posi bl e que sea
acepraciones o los rechazos:r0 f at al la e. st r ar egia,
no de G allim ar d ni de nadie en
siglo", la "consisrenciade los personajesprincipales",la "fluidez y la simplicr- parti cul ar, si no m ás bien de la'época', v que conduzcaa vna edit or ial de
dad de la narración", "el acro de creaciónsoliaria que escaPaa las determinacio- l a grandezaor iginal de su esr ilo a ias m ut aciones de su pr opia f elsif lca-
nes copnrurales" Jesignadas más arriba como "socio-económico-históricas"-, ci ón (...) l uego a las m onot oní as cel t r áf ico at est adode las inf luencias y
"la vida presentadaaccesible,legible, sensibleal lector", etc. Tales evidencias del j uego perioclí st ico( . . . ) del deslizam ienr ode'valo¡ : es'( . . . ) a los valor es
fundamentan el rechazo de la "teoría", asociadaal "terrorismo de los años económi co-c ult ur ales;( . . . ) . r posible que no se ha) / a debido a ninguna
'60", como dicen los interuietu dc editores -y no solamente "c<lmerciales"-o ' gran' deci si ó n de adapt ar la edición a una época que exige los gr andes
las recensionesde las críticas -no siemPre conscientementeconservadoras-y ti raj es (...), l " r enovación de los st ocks ( . . . ) , las puesr asde bolsillo, la
que sirven de jusrificación a una de las más extraordinariasres¡auraciones descalificación,luego la ca)a,ensayoso poemas".ra¿Por qué la explicación
literarias, a un retorno de la ortodoxia, como creencia (doxa) 'Jerecha(ortb)) estructural , qlr e se esbozaallí , no juega en def init iva casi ningún r ol, ni
"y" d. derecha.rrY sería necesariotambién -Pero ese será el objeto de todo para i a conducción de la acción ni par a la com pr ensión de ios com por t a-
e ste ar t í c ulo- des c ri b i r l o s m e c a n i s mo sy , e n Parti cul ar,l os antagoni smot rni entos propios o ajenos?Q uizás por que al no haber sido buscadaver da-
enrre las empresasestablecidasy los pequeñoseditores debutantcs,que de- deramente po r sí m ism a y m et ódicam enr eplanr eadahast a el f in con t o-
ben, para imponerse,volver a las frrentesmismas de la creenciaartísticay a dos l os medi o s de invest igación disLr onibles( la def inición m isr na de la
las observanciasmás estrictasde la reiigión del arte, V que contribuyen así a intención científica esrámuy lógicamenreexcluida de la práctica), no puede
mantener, entre ellos mismos y entre los otros, la ilusión necesariade qtrc proporci onar la visión sist em át icacleljuego concebido y const r uido com o
todo el campo obedecea las leyes no escritasdel arte Puro y perfectamcntc tal , que procu r ael t r abajode invest igaciónv del cual uno puedear m ar separ a
desinreresado, que "!a iógica espectacularmercantil no es todavía tan podc- desbaratarl a a par ienciade f ar alidady super arei f at alism o. ¡ 5
ro sa en la edic ión fra n c e s a ¡2 q y u e s i e mp reh a y , i ncl rrsoen Gal l i mard, qente
.sufrir' (Michel Deguy emplea esrerérmino), por ,rer lo que .seha hechcr
para
d e l o que f ue I a f ; í b ri c a ' n ú m e rou n o ' d e l o l i te ra¡i o" ' 13 La estructura del campo editorial
Y es s ignif ic at iv o q u e e l o b s e rv a d o rmá s l ú c i do pueda dej ar escaparl o'
ca mbios es t r uc t ur a l e sq u e s e e x p re s a ne n e l i n teri or del mi crocosmo fa- si se quiere evirar caer en esraorra forma de faralismo, que consisreen
mi l i ar , alav ez ex a l ta d o e ín ti ma me n te d e te s ta do'y que termi ¡re por i m- imputar todo 1o que sobre'iene en ei mundo de la edición a fuerzaseconé-
apenasconcerrados(espe-
p u tar a per s onaso a a rre g l c s o rg a n i T -a c i o n a l es mi cas fuera de aside¡ o ( "la m undialización")o a la m anif est aciónde esas
ci a l m ent e la s ec r eta ría ),te n d e n c i a sy e v o l u c i o n esque, conoci endode cerca fue¡zasen el seno del mundo de la edición ("los dos grandes grupos'l), es
necesari otcmar por objet o el cam po edit or i'l com o espacicsocial r eiar iva-
rnenre auróno m o - es decir , capez de r et r aducir , según su pr opia lógica,
10. J e a n - \ 4 i c h e l l - a c l a ve tin cy J. i- a h o u g u c,o P.clt., PP. 8 , 3 2 y 56.
, r Je a n - M ich e lL a cla ve tin ey J. Lahougue,op ci t.' p.32 (" Los añ<¡'
I l. J e a n - . l r ' l i c h eLla c l a v e tin e á
1,9i 5-1975) han si do rembi én 1," 14.MiclrelDeguy,
op.cit.,pp.17-lB.
más p r o d u c t i v o s c n c l p la n o d c ia te o r ía Iite r a r ia lg r o so m o d o
más p o b r e s e ¡ r m a t e r i a de cr ca ció n n o ve le sca ' ) . 15. S i n embargo, es nec es ari oc ui dars ede s obrc s ti marl os efec ¡osprác ti c os del c onoc i mi c nto
I 2. J c a n l - a h o u g u e ,l z J ea n - M ich e l f¿ cla vctin ey J. L a h o u g ue,op. ci t.' p. 22. ci cnrífi co quc, cn l os us o. ordi nari os de l ¿ v i d¡. ¡uedc c oc x i s ri r c on una c x pc ri enc i r i ngc nue
13. M i c h c l D e g u v , a ¿ . c it.,p .3 l. i nal terada.

?-28 l{)
Una reuolución conseruad,ora en ta edición
PierreBourdieu

reales(y respecto a los cuales es extremadamentedifícil recoger los datos


to d a s las f ueiz as exte rn a s ,e c o n ó m i c a sy p o l íti cas, especi al rnente-,en el
necesariospara el análisis estadístico).rg
cu a l l as es t r at egiase d i to ri a l e se n c u e n tra n s u p r i nci pi o. P ara anal i zar l os
El grado de autonomía dejado a la decisiónes difícil de medir, en Particu-
d e re r m inant esde esta se s tra C e g i a e s ,ra i m p o rta n te tener en cuenta' entre
iar cuando se trata de filialesde grupos,y puede variar en el cu¡so del tiem-
las empresasdotadasde una exisrencianominal (atesriguada,ai menos, por
po. por esra razón, estasfiliales han sido someridasa un examen detallado,
la presenciade un nombre de mafca sobre r¡na cubierta -Fayard, Laffont'
casopor caso,apoyándoseen todas las info¡macionesProPorcionadas por las
e tc._) , a las que dis p o n e n d e u n a a u ro n o m ía s ufi ci entecomo para tener vistas
fuenresdocumentalesdisponiblesy las con
entrevistas informantes,en
una política editorial p¡oPia. Seleccióndifícil, por ei hecho de que, ccmo
a determinar las que tienen una independenciaeditoriai real. Desde el año
o cu rre t am bién en e l c a mp o d e l a s e m Pfe s a si n dustri al esy comerci al es
de referencia(1996), ope¡acionesfinancierasimportanteshan conmovido el
to madas en s u c on j u n to ,l 6 l a s e d i to ri a l e se s tá n uni das P or toda una red
mundo de la edición (la más imporrante de las cualesha sido ia absorción,en
de relacionescomplejas, financieras (a través de las participacionesmás o
1998, de Havas por ia compagnie Généraldes Eaux) y un cieito número de
menos importanres en el capitai), comerciales(a través de la difusión), y (por
modificaciones han podldo aparecerpara cierras unidades editoriales
familiares. Otra dificultad, pero de ot¡o orden, es el cierre extremo de un
ejenrplo, con ia creación en 1997, de Hachene Lirréra¡ures,la absorción de
me d i o pr of es ional m u y p re o c u p a d o p o r p ro re gersede l as i ntrusi ones y
LOlivier por Le seuil y muchas tomas de parricipaciónminoritariasy mayo'
d e l a s int er r ogac io n e s ,y p o c o i n c l i n a d o a p ro porci ona¡ i nformaci ones
sob¡e las ventas o .sobre las característicasso- ritarias,etc.). La dificulnd está duplicada por el hecho de que mientras más
estratégicás,especialmen¡e.
importante y compartimentada es una editorial, más tiende el dispositivo
ci a l e s de ios dir ige n te s .rT (al menos
insritucional de decisión a ganaf en exrensióny en complejidad
L a poblac ión es tu d i a d a e s rá c o m p u e s ra p o r 6l edi tores de l i teratura del cual
aparente),hasta llegar a funcionar como un sub-campo, en el seno
fra n c es ao t r aduc id a , q u e h a n p u b l i c a d o e n tre j ul i o de 1995 y l ul i o de
diferentes agentes(financieros, comerciales,literarios) se enfrentan con Pesos
1 g g 6 , y de los c ua l e s 5 6 h a n s i d o tra ta d o s c o m o el ementosacri vos y 5
múl- diferentes, que dependen -ellos mismos- de la posición de la unidad de
como elemenrossuplementariosen el análisisde las corresPondencias
decisión consideradaen el campo edirorial global (y que pueden variar en ei
riples. Como no se trataba de hacer un recuento exhaustivode los editores
curso del tiempo, en función de los cambios de esta posición y también en
fra n c es eso, inc lus o , d e l o s e d i to re s d e l i te ra tura, ni un anál i si s de una
Función del tipo de obra Puestaen discusión).
muestra representativade esta población, sino de desprenderla estructura
Las unidades comp¡endidas son, la mayoría de las veces,sociedadesinde-
del campo de los editoresde lireratura, se ha descartadoel estudio, por una
pendienteso filiales que disponen de un capital propio, que pueden estarcons-
parre, de los editores de ciencias sociales-sin ignorar el hecho de que la
iituid", bajo la forma de sociedadesaiiónimas (sA) o de sociedadesanónimas
mayor parre de los editores de literatura tiene en su carálogo una propor-
de responsabilidactlimitada (SAX.L) (para las unidades Pequeñaso medianas)
ción más o menos importante de obras consagradasa este dominio-, las (de
o, in.l.rro, tener el estarurode sociedaden nombre colectivo, como Lanés
unidades especializadas en las ediciones de bolsillo (reediciones),las obras (Complexe
como Corti
sociedadcomanditaria),como Lr Seuil (de atelier-librería),
de arre, los libros prácticos,los diccionarios o enciclopedias,los libros es-
o zoé son soci€dadesextranieras francófonas que difunden amPliamente
colares, así como los clubes (France-Loisirs,Le Grand Livre du mois), ¡
por orra parte, los pequeñoseditores que no han alcanzadouna talia suficien-
re como para afirmar su existenciaen este camPo ejerciendo aquí efectos , c onj unto dc !a
v ari abl es al
l 'g. l .a pobl aci ón c omprendi da es muy s emej antc ,para l as pri nc i pal es
a trav és de l os i ndi c adores dados por el IN S E E . A pc s arde l a domi nac i ón de l os
profesi óntomada
el s ec ror de l a erl i c i ón, que c uenta c úi i numc ¡os os medi os y s ob¡e todo
<l osgrandes grupos ,
I-aNoblessed'Etat.GrandesEcolzsetespritdercrps,París,Minuit,p.428
l6.VerPierreBourdieu, un fucRe
p.q*n". .*f ."r"., frecuenremente f^miliares y con frágil indepcndencia, ha conocido
y subsiguientes. afi os 1960 (l a tas a dc c reac i ón
,6' 30/o partel año i 996' es s uperi or a l a medi a
creci mi ento en l os
17. S o b r e e s r ep u n r o , c o mo so b r c e l co n ju n to d e lo s o b stá cu l ospara un anál i si sde l as estrategi as dc londos en esrc
de los sectores industriales, siendo, cn cfecto, bastante débil ta colocación
editoriales, ci Paul Dirkx, "Lcs obstaclcsi la rcchcrche sur les stratégieséditoriales", Ates de la
sector) y la cifra de negocios está cn ligero aumento'
rechercheen sciences socía/es,126-127, marz,>dc 1999, pp. 7A-74
Estatuto jurídícoyfinanciero (enroio, en los cliagramas 1 y 3)
en Francia, como Noir sur Blanc, sociedadsuiza reiresentadapor una librería
y una pequeñaS,A'RLen Francia).Se ha hecho un tratamiento aParte,en ACM,
e cinco unidades (puestascomo elemen¡ossuPlementarios),Hariequin (litera- La variable estatuto jurídico se presenta en tres categorías:sociedad anó-
tura popular rraducida);J'ai lu, que en 1995-1996 publicaba esencialmente nima (SA fn = 24]); sociedad de responsabilidad limitada (SARL [23]); otras
(sociedadcomanditaria, sociedaden nombre colectivo, sociedadextrxnjera,
libros de bolsiiio y que juega cierro roi en Ia actualidadcon algunasnovelasde
primera edición; Pressede la ciré, marca del Groupe de la cité que, después etc. [n = 9]).

de haber ciesaparecidotemporariamence,ha reaparecidoal año siguienre en el El tamaño de la empresa-un índice impottante, cons¡ruido combinando

seno del depanamenro Preses-Solar-Belfond, Payot y Fixot. el capital social, la cifra de negocios ,v,en menor medida, el número de diri-
- Fixot-Laffont (Nouvelles Editions Rober l"aífonr de la cual Bernard Fixot gentes-, divide la población en 5 categorías,que son,"yendo de mayor a

deviene el director general en 1993) apareceen el análisis,Por u¡la Parte' menor: n = 14; n = 12; n = 12;n = 8; n = 6; para4 empresasel lndice no ha

como grupo jurídico y financiero surgido de la fusión de Fixot y Laf{ont, y, podido ser construido por falta de información.
por orra, bajo la f,:rrna de la marca Laffont que ha sido aislada y tratada A estasdos variables se agrega el número de asalariados(5 categorías):de
1 a3 asal ariados( 15) ; de4a9 ( 14) ; de 10 a40 ( 11) ; de40a 100 ( 6) ; de
igualmente como elemento activo; la marca Fixot, que no publica sino ensa-
Asimismo, el grupo 100 a 400 (5); par" 5 empresasestosdatos no han podido ser obtenidos.
.yos, ha sido consen'ada como elemento suplementario.
Rivages-Payor,surgido de la compra de Rivages por Payot-France, ha sido
mezcladas Lazos de dependenciafinancieros o camercía¡es con otros editores
rrarado en cuanro grupo, al escarlas dos sociedadesestrechamente
(en negro)
en el nivel de Ia distribución de las tareasediroriales,del capital y de la cifra
de negocios,y la marca Rivagesha sido Pue.stacomo eiemen¡o activo y Payor
como elemento suplementario'Las colecciones("LArpenteur", por ejemplo) Una variable que toma en cuenta la participación de otros editores en el
no han sido aisladasde la unidad editora.¡e ":- capital del editor ha sido construida con dos modalidades: hay un editor
entre los accionistas(20); no hay editor entre los accionistas(36).
Una variable que distribuye las unidades según los difusores (que a veces
La construcción de las características pertinentes2o controlan una parte de su capital), ,ha sido construida en 7 categorías:
H armoni a Mund ( 11) ; CDE ( 5) ; L. Seuil ( 11) ; Hachet t e ( 9) ; I nt er f o¡ um -
Para construir el espaciode los editores,han sido comprendidasdieciséis Dil (7); Otros: Ulysse + Belles Lettres (11); Flammaricn-Gallirnard (2).
variables,repartidasen cinco gruPos.
Peso sobre el mercado (en gris)

19. En Anexo, se enconrrará [a exposición detallada de las eleccionesefectuadaspara cada uno dc


Por no poder medir el éxito comercial a Partir de los tirajes medios, cifras
ios grupos.
que no son comunicadas,se ha intentado construir un índice aproximado del
20. El s u p l e m e n t o d e l n ú m e r o 2 1 6 ( 3 0 d e se p tie m b r ed e 1 996) de Li ures-H ebC oP resentaun
t ot al de 1 . 0 0 2 e d i r o r c sf r a n có fo n o s,co n su fe ch a cie cr e a ció n,l os nombres de sus responsabl es, éxiro comerciala partir de las listasde Best-sellers(la de L'Expressy la de Liures-
s us ef e c t i v o sr o r a l e s ,s u d i fu so r , su s e sp e cia lid a d eys e l n ú m cr o de títul os publ i cadospor año. S c Hebdn), tomando en cuenta el rango ocupado por ei editor en cada una de las
j 9-6]6. r-...
enc uen r r a n d a t o s a n á l o go se n e l ca tá lo g od e l sa lo n d u L ivr e , tomo 1, 1997, pp. iistas publicadasdurante el año de referencia.El editor citado en primer iugar
informacioncs proporcionadas por estosdos documentos han sido completadasy a vecescorregidas recibe 15 puntos; en el segundo lugar, i4 puntos; y así sucesivamente. Para
-
s n la r e d d e In te rnet, por ej empl o, o a l a encuc
por el r e c u r s o a l a s b a s e sd c d a r o s a cce sib le e
consrruir ei índice se ha tomado el promedio de las dos listas. Así, se han
anualesdel SNE han sido consultad:s'
directa a los cditores mismos. I-aspublicacioncsy estadísticas
distinguidocinco modalidades:0 citación (28); I a 1l (8); 14 a 100 (8); 100
v la c¿imerade comercio nos ha proporcionado datos estructuralesy biográficos.La Documentation i

s u b lica cio n e sg cn e r a le s,e sp e cia lmente,Jani ne C ardona y C hanral


f ranga i s ep r o l ) o n e a l g r . r n a p : a 300 (6); más de 400 (6). La ñrerza comefcial de las empresaspuede asirse
¿
l_acroix,liatistique:de la Chifres cüs,París,La Documentarion frangaise,1996, pp. 59-70. g también a travésde su aptitud Paraobtener, a travésde sus autores' un Premio
-lture.
{*
:
z3z I

lj*
Una reuol¡Lción conseruad.ora en la edició¡¡
PierreBourdieu

iiterario nacional: la variable "ha edindo un premio" ha sido consr¡uida a par- caciaeditor por texro pubiicado.Así, la variable"fndice Jurt" fue resgrtjl).i¿
ti r d e s eis pr em ios co mú n me n te c o n s i d e ra d o sc o mo l os más i mporranres 3 ( 44) ' i00 a 350 ( 7) I 'm ás de 350 ( 5) '
en tres categorí as:
a del número de
(Goncourt, Femina, Médicis, Interailié, grand prix du Roman de lAcadémie La variable "Nobel francés" ha sido construida Partir
franpise y Renaudot), siguiendo dos modalidades:sí (13); no (43); esravaria- obrasdel edi torpr oducidaspor laur eadosf r ancesesconelPr em ioir ] obcl
( 10) ' no ( 46) '
ble ha sido completada por una variablecomplementaria:"ha editado a un desde 1930, con dos m odalidades:sí
el 5"' 6" o 7" :nondissement
miembro de jurado de un premio" con dos modalidades:sí (12); no (44). La sedede la empresapuede ser situada:en
riue droit (9); en
I a capacidad del editor para obtener ayudas ministeriales puede también de Pa¡ís (29); otros nrro,r,li,"*'m de la riue gauchel4);
contribuir a reforzarla fuerzacomercial de la empresa;por ranro, se ha cons- provincia (9) o en el e;ttraniero(5)'
truido un índice a parrir de la iista de los editores francesesque, desde 1993
(en azul)
a 1996, en el dominio literario, han sido beneficiariosde la ayuda a la tra- Importancia de Laliteratura extraniera
ducción de la dirección del libro y de la lectura del Ministerio de la culrura,
y a partir de la lisra de los edirores f¡ancesesque, de 1990 a 1997, en el S ehaconst r uidounavar iableqLler ePr esent aelpor cent ajedet í t uiost r a-
de 1 a 5o7o(11)' de 5
dominio literario, han sido beneficiariosde la ayuda a la traducción de la ducidos con relaciónal conjunto de titulos pub'licados:
( 19) ; par a dos edit or eslas
Dirección General de Asuntos Culturales, Cienríficos y Técnicos del Minis- a 70o/o(12), de lO a 25o/ c( 16) y m ás de 25o/ o
terio de Asuntos Extranjeros; siendo establecidaslas dos listas según ei nú- inforrnacionesno han podido ser obtenidas'
que relevarnáscapitai
mero de títulos subvencionados.A partir de estasdos cifras se ha creado una La variable"h" .dir"io un premio Nobel extran.iero"'
sí (14); no (42)'
variable "ayuda de los ministerios" con cinco caregorías:0 KF (25); de 0,5 a financieroque capiral simbólilo, tiene dos mocialidades:
es reveladorade la ubica-
4 KF (16); de 4 a 8 KF (6); de 8 a 20 KF (5); más de 30 KF (4). La lengua dominante tradt¡cida Por un editor
se ha construido una variable
ción cle este editor en el sector de !a edición.
Capital simbólico (en uerde) quepermi tesi tuar 'I aubicacióndelasdif ¡ : r ent eslenguasenlat nuest r adelos
de G I a G 10' a partir dc los
editores.Se han creado diez grupos de lenguas
de información' Sobre la basede una
Puede evaluarsecon la ayuda de diferentes índices: la antigüedad, la loca- 50 editorespara los .,,"1"' 'J dkponít
se ha podido consrituir
lización, el prestigio del fondo editorial (capital simbólico acumulado) y el estadísticade ias afinidadeslingüísticasy geográficas'
langue?")'en el cual nos hemos
premio Nobel de Literatura. un cuadro (titulado: "Est-ce qJil publit une
Se han distinguido cuatro períodos para construir la rariable "fecha de crea- apoyadoP aracr ea¡ , , , , t t '"'i"blt "iengua'conseism odalidades: inglésyr ar as
(16)' inglés y euioPeo (7)' no-
ción": de 1708-1945 (19);1946-1975 (Il);1976-1989 (17); 1990-1995 (9). (5), sólo ingiés (9), inglés y euroPeo + otras
(2)'
El capital simbólico acumulado puede ser medido a partir de un índice inglés + otá, (9), alguna lengua (8), sin respuesta
análisisde
Los datos pr...dln"' han sido anaiizadoscon la ayuda del
construido partiendo de la lista de los aurores francesescontemporáneos pro-
úariante del ACM' que permite po-
porcionada por J. Jurt,2r en la cual ios aurores están clasificadossegún el correspondenciasmúitiples dspecífico'
cucstionesactivas'22Los diagramas
número de veces que son citados en un corpus de 28 ma¡:ualcs de historia ner como suplementariasmodalidadesde
lireraria, diccionariós o panoramas publicados desde la Seg'.rndaGuerra
Mundial. En un primer momenro, se han relevado los 80 primeros autores a lo esencial' dc un
'22. No se presentará aquí sino una primera lectura' provisoria y reducida
(los que son citados más frecuenremente),luego se ha arribuido un punro a
anál i si sdcl ascor res pondenc i "s múIti pl e,' quc has i doc onduc i doenunpri r,rertrl omc ntoc on
y una
luego dc una rccolección más sistemática
Salah Bouhedja y cn tln segundo rno*""'o'
y Hcnry ll.ouanet, v cuyos resultados
Brigirre Lr Roux
codificación más precisa d. io, d"¡or, con
ncccsaric,.
serán publicados posteriormente, con todo el instrumen¡al mctodológico
21.J. Jun,M. Ebely U. Erzgrábe¡Franzósicbsprachige
Gegenwarxliteratur
IgIB-1986/87"Eine completos
en liancc, une misc cn oeureraisonnéc
L'Edition littérdite
bilttiographische Bestansaufnahme del Originabexte und der deuucbcn Übersenurgeo, Ttibingen, Ver p Bourclieu, n. u no"* y u. Rouanet,
Max Nicmeyer Yerlag, 1989. de I'ana/7segéométrique dts données'en preparación'

?.35
a
siguientespresent i cl espaciode las 59 moclalidadesactivasen el piano de y Mi nui t), su tasa Ce t í t r - r losr r aducidosinf er ior a 10, el lr lont o super ior
(salvo para Albin lvlichel
los dos primeros ejes (diagrama 1) y en el plano de los ejes I y 3 (diagrama 30 KF d.elas ayudaspara la traducción que reciben
y Laf f onr KF] ) , su capit al sim bólico
3), y el espaciode los 56 editoresactivosen estosmismos planos (diagramas [17 K F], Fl amm ar ion t 26 I ( FI [ 15
2y 4), para la codificación de los datos,se ha utilizado el programa SPSS8.0 (superior a 350 para 5 de ellos, nulo para Albin Michel e igual a 727 para
lF y el progra¡naADDAD 97L821 para la exploraciónposfacrorial,el pro- Laffonr), el hecho de que han publicado al menos un premio Nobel Francés
grama EyeLID 2.0.24F.n los diagrarrras1 y 3, están en caracterespequeños (con excepción de Laffonr y de Le seuii), al menos un prernio Nobel ex-
(Femina, Goncourt,
las moclalidadesque tienen una débil con¡ribución á uno y otro eje del diagra- tranjero y un laureadocon uno de los premios nacionales
ma; en ios diagramas2 y 4, están en caracterespequeñosios editores cuya erc.), así como un miembro de jurado de uno de estos premios, un índice
cali<l¡d c{e representaciónen el piano del diagrama es mu,r' débii. de éxito comercial (presenciaen la lisra de los b,est-sellers) eievado (supe-
de
Ccmo se ve en el diagrama 2, las diferentes editoriales se distribuyen, ri or a 400, salvo Flam m anon [ 200] y M inuit [ 60] , f or que' e Par t e
a
sobre .'l prin.re- eje, dcsde ias más grandes y las más antiguas, que, por ei Grassety cl e Laf f onr , no t ienen edir or es ent r e sus accionist as,Por que'
occiden-
hecho de que acumulan un fuerte capital financiero y un fuerre capital parte de Minuit, traducen del inglés y de las lenguas de Europa
6"
sinrbólico, es¡án en condiciones, como lo arestigua-entre otras variables- i.l y porqr-r.,por último, esránsituadasen París,5 de las cualesen el 5",
su ubicación en las listas de best-sellers,de dominar el mercado (a través o 7" arrondissement).
d e d i fer ent es m ediac i o n e s ,ra l e s c o m o l a i n fl u e n ci a que ej ercen sobre l os En el interior de la clasecomplementaria, mayoritariamente comPuesta
asala-
p re mi os iit er ar ios y s o b re l a p re n s a ), h i ta
l a s más pequeñas y l as más por pequeñas SARL, creadasdespuésde 1946, que cuentan pocos
tocadas
rccientes, Chambon, Climats o Zoé, quienes, poco provistos de recursos ,i"do. (menos de l0), poco dotadas de capital simbólico y Poco
(en negro) de las más pe-
e co n ó mic os y c as i c o m p l e ta me n te d e s p o s e ídos de capi tal si mból i co por el éxito comercial, se puede aislar la clase
institttcio¡zalnlentereconocido,no acceden prácticamente nunca a las listas q,r.n" , edi tor iales ( n = 19) : Age d'hom m e, Cham bon' Cham pvailon'
Ombre'
de best-sellers(las posicionesinter¡nediasson ocupadasg9r editorialesque óli-"rr, Complexe, Des Femmes' Ham¡ Nadeau, Noir sur Blanc'
fait'
posee¡runa u o.ra de las propiedadesque condicionan el accesoa las posi- Picquier, Jean-Michel Place, Présenceafricaine, Sahy, Le Temps qu'il
ci o n e sdom inant es ,co m o i a p a rti c i p a c i ó ¡re n l o s j uradosde l os premi os o l a V.rái.r, Virag, Zoé y Ztlma. Son sociedadesanónimas de responsabili-
y no
cb te n c ión de pr em io s n a c i o n a l e s ). cl ad l i mi tada, m ás bien sit uadas en pr ovincia o en el ext r anjer o,
Se puede, con la ayuda de la clasificaciónjerárquica ascendenter5 (CJA), no obt ienen pr em ios y
fi guran en l as- list asde best - seller s, sus est r at egias
una
d i sti n g uir una pr im er a c l a s ed e 7 e d i to re s ,L e S e u i l ,Gal l i mard, Fl ammarron, edi tori al es se dist inguen Par t icular m ent een m at er ia de t r aducción:
traduce sólo del
Grasset, lr4inuit, Albin Michel y Laffont (en rojo sobre los diagramas2 v mirad de eilas (n = !) no rraducen del inglés y ninguna
com o
1l), que se oponen a rodos ios otros por su estatuto de sociedad anónima i ngl és. (E sra clase de las pequeñas edit or iales t iené en sí m ism a
.oLpl .-..,tari a a una clase com Puest asobr e t odo Por casas par isienses
íco n e xc epc iénde Lc Sc u i [), s u i c c h a d e c rc a c i ó nanteri ora 1946,1amagni -
verde], fundadas después de 1946, que cuentan más de
tucl .le su personal-superior a 100 asalariados(salvopara Grassetín = 701v [.,', grir, azr,l y
Mi n rri t ln = 11] ) - , s u ín < j .i c e
d e i m p o rra n c i a (i g ual a 5, sai vo para Grasser 10 asal ari ados,de m ediana im por t ancia' la m it ad SARL y que publican
casi todas tra duccionesdel inglés')
con'un-
Estos pequeñoseditores novatos' aunque Pesanmuy paco en el
sus iustifica-
23. A DD ; ' . i . A . s o c i r c i ó np a r a cl d e sa r r o llov la d ifu sió n d e l a n ál i si sde l os datos), 151 l ¡oul eva¡d
to del juego, le proporcionan, sin embargo, su razón de ser'
de I 'FI óp i r a i , 7 5 0 1 3 P a r i s. *y son, eilo, unc, de ios
ci ones de exist i¡ y su "pundonor espir it ual" Por
24. Y er J . h f . B c ¡ n a r c i ,R . B¡ ld - vv Ile n r y fto u a n e t ( 1 9 8 8 ) , "T h c Lanquagefor i nrerrogati ngdata
est án de alguna
I -if )" , en : F - .i l i t l : ; ' t b a j o l a d ir ccció n d c) , Da ta An a /lsisa n d In forntati a V , pp. 461-468, E l sevi cr
pri nci pi os de su t r ansf or m ación- . Pobr esy desposeí dos,
que profesa y prcciama
(Nort h H o l ! : r n d ) . manera condenadosal resperoa las normas oficiales
editorial del
)1. Sobrc Ia clasificacirjn euclirliana, i,er. por c.jcr-npio,Henry Rouanct y Brigitte Leroux, Anali,se todo el universo. como dice la responsablede una pequeña
medios' ljno es
rlts donéesni:tltitlincn,ir,,tnelles, Pzrís,Dunod, 1993, p. 120. sur de Francia: "uno no nuede dar un golpe, no tiene los

LJ() 237
,' llottr Llit' tt Una reuolución canseruadora en Ia ediciótt

vi rtu o s o por obliga c i ó n " " 2Yt' c x p re s ad e u n a m a n eraparri cul arnl cnreej em- cficaz, con la ¡ed de rePresentantes,a ia potencia comercial y a los rriunfos
p i a r i a v is ión < iei r n u n d o y l a s e s tra te g i a d
s e todos l os pequeñosecl i .ores publicitarios de las grandes editoriales')
co n denadosa la v ir tu d l i te ra ri a :p a ra s o b re v i v i re n un medi o edi tori al que Con rodo rigor, r.lnanálisisdel campo editorial deberíatomar en cuentx a
"d e i s ia" , int ent a de s c u b ri ra u to re sq u e c o n v e n gan" con l o que
[e11a] espera agentesque, aunque no tengan estatutooficial, intervieneneficazmenteen el
lde la] iireratura", desconfía de los informes <ie lectura, iee ella ,]rsma un funcionamienrode esrecampo a travésde su poder de consagraciónI' de la
"máxirno de manuscriios", "rechaz-a sienrpre a los autoresantesde cono- influencia que ejercen sobre la ci¡culación de los libros, en tanto qve taste
'cer sus texros", se dice "muy maniática de las 'e¡
traducciones",erc. por refe- mabersison los críticos influ;,'entesque están frecuenremente "atados" a edi-
¡e n ci a a lo que le p a re e ec o m o l a d e fi n i c i ó n d o mi nanre del ofi ci o, defi ne toriales(una de ias tradicionesrecientesdel medio, que consisteen confiar a
e ste tr abajo de m an e ¡a n e g a ti v a :" N o m e s i e n to un verci aderoedi ¡or" . y
toda crítica de cuaiquier autoridad, la dirección de una colección o una res-
e xp l i c a es pec iaim e n te": [Mi s re i a c i o n e s jn o e s genr€ que rl ene poder. N o
ponsabilidaden las institucioneseditoriales,como los comités de lectura) o,
p u b l ic o per iodis t asq u e d e s p u é sv a n a h a c e r a rtícul os" .
por último, las "personaiidades",doracos de un gran peso en el "medio",
Más f¡ecuentemenreprovincianos,más frecuentem€nredir-igidospoi mu-
como las que derallaba un arrículo recienre áel Magazine linéraire, que, slen-
jeres -y dorados de una fuerte cultura li¡e¡aria*, desprovistosde todas las
do una propiedad de Grasset,esrá particularmente en una buena posición
instanciasde evaiuacióny de selección(comitésde lectura),que son rambién
para describir las ¡edes de poder, de las cuales Grassetes una pieza maestra'
lugaresde acumulació¡rde un capiral socialde c,rnexionesí:rilespaia la pro- Ai lado de editorescomo YvesBerger,Claude cherki, claude Durand, clivier
moción de los autoresy de los libros, estospequeñosediroresesránausenres cohen, Jean-claudeFasquelle,FrancisEsménard,charles-Henri Flammarion,
(o excl'idos) de todos ios juegosdei
$r'ancomercio ecirorial-tomo la ca¡¡era Bernard Fixor, Anroine Gallimard, Jeróme Lindon, olivier orban o Jean-
a l o s pr em ios lit er a ri o s , e i re c u rs o a !a p u b l i c i d ad, el arre de cul ti var l os Marc Roberts, se registranallí personajesdotados dei poder de promoción
contactos mundanos y las complicidadesperiodísticas(en su nrayoría están
que da una tribuna en la teievisión,talescomo Guillaume Durand o Bernard
desprovistosde agregadosde prensa),la concurrenciapor la compra cle ios
Pivot; un esraruroTeriodístico-editorial, como Jean-Paul Enthoven, direc¡or
grandesbest-sellersinternacionales-.Publican, mucho mcnos que los orros, edirorial de Grasset, consejero de la <iirección de la redacción de Point y
a autores de lengua inglesa,y ello aunque hagan frecuenrementcun lugar
director de la coiección "Biblio-Essais" en el Livre de Poche; o Franz-Olivier
particularmentegrande (más de un cuarto) a la traducción; también como ..direcror
1,, Gisbert, de dos redacciones,Le Figaro y Le Figaro Mdgazine, bió'
una manera -pero indiscuriblemente vi¡ruosa- cie hacer de necesidadvir- grafo de FranqoisMitrerrand y de JacquesChirac, novelista¡ desdehaceun año,
tu d , ejer c en s us r ale n to sy s u s a u d a c i a sd e d e s cubri doressobre pequeños animador de una emisión literaria"; o Bernard-Henri Llv¡', "fiel cntre todos de
a u to res de pequeña sl e n g u a s (c a ta l á n ,b ra s i i e íro,coreano, húngaro, etc.), director de diversasrevistas,entrc
Jean,Claude Fasquelle",PDG27 de Grassety
menos caros para la compra, no obstante má.s"interesantes"literariamente. ellasde Le Magazine Litrcraire; o incluso Pierre Nora, responsablede una colec-
(Es necesarioobservar,entre parénresis,que elios pueden apoyarseen los
ción en Gallimard y director de Débat,Angelo Rinaidi y, last!'ut not lzast,Phúippe
pequeños librerosque ocupan una posición homóloga l" d".llo, la esrruc- Sollers,"cúspidedel mundo de la edición".28
" "n
tura dei campo de la librería -"Uno cuenra más con los librerosque con los
En resumen, se ve así como se oponen, bajo la relación de]-uolumengloba{
críti co s " , dic e un r es p o n s a b l ed e c o rti - y q u e s e compromeren, con una
del capital poseído,las graades emPresasantiguas que acumulan todas las
devoción préxima al sacerdocio,en la defensade los pequeíroseditoresy de
especiesde capinl --económico, comercial y simbólico-' cuyo paradigma es
los autoresde vanguardia,al proporciona¡un contrapesocomercialmenremu)/ ' de
Gallimard, y las pequeñas empresas recientes, o.ue, esfando en la fase
de
acurnulación inicial del capital, esrán casi desposefdos todas las especies

26. Con t r a r i a m e n t c a l a s rcg le sq u c scg tr im c.is


h a b ir u a lm cn r een l a publ i caci ón de exrractosde
ent rev is t a s ,h e m o s d e b i d o r cn u n ci¿ r a ccin tin t¡ a rca d a cn tr e vi sracon l as caracterís¡i cas Generai[N. dclT.].
de su 27.Presidente-Direstor
aut or, lo q u e h a b r í a t e n i d o p o r e fccto p cr m ir ir su id e n tifica ción.
Loc.Cit'
28.A. Liebaert,
de capitai, aun cuando detentan un cierto capital simbólico bajo la fbrma de
la estima o de ia adrniración de algunos "descubridores",críticos y escritores
de vanguardia,libreros ilustradosy lectoresinformados. Este capital simt¡ó-
lico en estado naciente es casi imposible de asir a t¡avés de los indicadores
disponiblcs:en eFecto,no se acumula sino muy lentamente,a la manera de
lo que se llarna cl "fond.r', verdaderariquezadel editor, formado por todo el
! I i p o d e vr ctcd r d l1r i A
conjunro de los eserituresde /arga duración; y los signos de consagración I Ifl p o n a n e r r \l I llrt ', r
I {)1)-'11}0
¡\rlrri.rdt,\
A N r n r cr ,' r l c r sr l ¡riari,''

especificos,camo el prcmio Nobel o el srarusde "clásico', concedido por el I l ) i ti i .o tt:


l l i r v u r ) e ¡ i l r i f cnlrc Jir\r!c (,nr\l¡\

reeoqercimientc.univcrsiário, no pueden llegar sino al té¡mino del *abajo de '¡


-
l,> l:rii .li lt i.: I il ) C
impS t
eenverriénqse r$ rcaiizado por los es^ritores mismos, asistidos por todo su (,)
a Icrlr,,lr lr r, rr;r
€ntolng de'dcceubridores", I9ue, en cuanto tal, toma necesariamente mu- ! 1,,,1,.rr,L,r
A I l¡ trl trLtl,r¡nlJ:crrrir\!,lrtl I r.i¡r!!.
ch c ti e m po. ) |
".rlru.rr';,r
a ". d. tí1u1,)\ Irrdu.rdor
3l *cgunclo eje (diagramas 1 y 2) distingue las editoriales según la estntc- O
V
l-cn¡uastraducttirts
lll €ditilLlo un llttrr. \oh.l ¡:\tr¡n¡crr)
t*78 di ts rc?;ta!, es decir, según el peso.relativo de su capital financiero (así
eomo de su fuerza comercial) y del capital simbólico que deben a su pasado O No inglés
) I'rrri:I{í i
llmpl
r$ifittc a c su actiuidzd presente(por oposición al que han acumulado desde el >lrl!r\ 1llrc a
I llirr¡r. \fur(ii \o ll,lir.r. ,\cr.
origen y que mide el índice).2' Sobre este segundo eje, los editores se distri- 1.., iD
lriglis ¡ f:urop.
. ¿j
. _ A,a
I J J\.rl.rtt.lco5 V Nobel.t:rt
buyen según el grado y la forma de la dependenciaen la cual se encuentran, I rr.Lr,. b
\ \l{LV lOrri,\ l)rl
e:}>
. . r' . t t , .
tanto desde el punto de vista financiero como desde el punto de vista de ia l,¡:r, : ¡r¡Oi
c,
\clll lrllcflófullr & I)il
distribución: las editoriales independientes,grandeso pequeñas,se oponen A raE ......i :l 9l
1 ,,| |,,:¡ra l;;;1
, r:', .bir"'1,-, ,.
lnglú: lt l-utrrp.O - otros \l i)lrttit'',,,

a las filiales de grandes grupos que dependen de otras instancias u organis- .l-t, ¡\¡llrirdo\ \'jncr
\_l
| \!
P l':ir¡' j.r ñ :fr)ri. A \L'l.ej I
9
,
mos (Centre de diffusion de l'édition, Hachette) para la difusión de sus a
Sirlo rnqlú:
v s.\ & s.\l)\l
publicaciones.Así las viejas editoriaies medianas, la mayoría de ias vecesde- \incu¡rr Irngu¡
-a
pendientes,disponen de un capital económico que pred.ominaampliamente a F l',Lrr. iil)
. A .10-100
asalariados
l0 ll

sobre su capital simbóiico actual (aun cuando pueden tener vestigiosde un Irnpl | (lil()f .\.c.
IO
T
gran pasado).Resueltamenteinclinados hacia fines más o menos exclusiva- I I ¡chcll. I
lx(l..ll¡il : i llll- l::()
:a)
mente comerciales,se oponen a todos los otros, es decir, por un lad"o,a ios lnrp+
f t.>
grandes edirores consagradossegún toda,slas relaciones,y, por el ctro, a los
A
pequeños editores desposeídos,entre los cuales el ojo sagazde los "descubri- ! 0-J0 ¿rs¿l¿riados
rt)il
dores" es el único capaz de discernir entre aquellos que, al final, se orientarán
hacia el polo de la literatura de fuerte capitai simbólico -asociado más o t J. l I{) Li

en el plano de ios ejes 1-2 (.59modali.ladesactivasJ.


Diagrama l: espaciode las propiedacles
29. Se ha podido verificar que, para estaseditoriales,[o esencialde los índicesdel capiral económico
c ens ado s( e s p e c i a l m e n t ee n la s lista sq u e h a n se r vid o d e b a sea l a construcci óndel l ndi ce Jurr y
;
que s e d e t i e n e ne n l 9 B 7 ) f ue a cu m u la d o a n te sd e la Se g u n d aGu erra Mundi al , y que, .sise rcmaba
f
en cuenta solamentc a los autores reconocidos publicados desde1945, se situa¡ían al lado de los é
¡
pequc ño se d i t o r e sr e c i e n t essin te n e r- - co m o e llo s- la e stim ay e l respetodel pequeño medi o dc l os
ent c ndid o s . t
$

240 ü
t
"¡*,.
F;,' 1
Y Ti p o d c so c iedad
I Impoñanci¡ X2-{, ll9{8""i
N ú m e r o d e asalariados
^I D i l u so r cs
o L i a y u n cd i tor enfe su\ ¡ccionislds
€,....;,,..... r
r i .- >i : t., . , r. :l
aNinguna Iengua
€.', r .' ,
,l '
Fcchrdc c¡c¡¡iri¡
Seuil O iI
lnd¡ceJLNl
Galli¡¡ard O tdilado un I'rcrilio\ubcl fr¡trccs CDET
. > 'la
l-oc¡lizeción
a % dc lilulos tr¡ducijdos a 0-59;
-
1.0 -a Lcngu6 lraducid¿s
V lla edilado un Prcmio Nobcl E\rranjcro l
1mp3 Ind.Jun.;>350

I
L e
Irxtra¡rlcril> I 0-40 asalariados

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L a fl b n l I Otros Dif.
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No Editor. Acc
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I rg l ó s y f : u ro p . g_.
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-0.5 _-l tmp¿
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I Fayard :
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A 40-l ()0as¡lariedos

U¡¡r¡.L É!cl-¡l)1.{TEX-ETgarS
i > I'ans R(; ¡

-t,.5 1.5 2.O

en el plano de los e,ies1-3 (59 modalidaderactivas).


Diagrama3: espaciode laspropiedades
menos rápidamenteal capital comercialc, re el caPitalsimbólico termina Por
procurar, especialmentecuando el sistemá de enseñanzatoma el relevo- y
aquellos que se contentarán con crecer económicamente' Por estrategiasmás
o menos abiertamentecomerciales.
Así, siendo en su mayo ría fliales de grandes grupos (cuentan frecuente-
mente con un editor entre sus accionistas),estasemPresas-que están tam-
I:ic 2
bién bien ubicadasdesdeel punto de vista del capital económico- tienen, por la
C lases dc la ( A{ |
:i: o:ir ¡ 1",r
i <¡u"""-I
(a
i O cl¿s!,n": debilidad de su capital simbólico, una estructura de capital disimétrica
I<-i
L | ( l¡'c,i I
diferencia de las empresassituadasen los dos extremos d-elprimer eje, que
ai
A Clrrc n" 5 son homogéneas desde el punto de vista de las dos especiesde capitai). La
división en cuatro clasespermite aisl¡r una clase comPuesta por Actes Sud,
I

Belfond, Calmann-Léry, De Fallois, DenoéI, Fayard, Lattés, Plon, POL,


'"i

11lnull

:¡ii/ Lll :A
irlurcurc
'ic
I r'rrtce
' Rivages,Stock -en vefde: que incluyen en lo esencialfiliales con el estatuto
I
lJcller Lettics
A
de sociedadanónima, fundadasantes de 1990, que cuentan entre 10 y 100
asalariados,de mediana importancia y que han obtenido muchos éxitos de
Ll
l{rrhcr i
pn.rr\L \t¡..i,rn( f¡hll Ronrlc
.a
tl)(\l!rr)o'i best-sellers,esra clase corresPondede manera muy cercana al gruPo de em-
: Jurt,"r,r a
ia
presassituadas en lo bajo del diagrama-. como encumbradasPor un Pasado r
Ir l a i l l i l ) ¡ r i 0 o
ll¡liarrrl aa
('ha¡nprrllof a A . , i :¡ l l r m ¡ r L l

prertigioso, ellas son, según la exPresión de un entendido' "el Punto débil"


:
i*r ¡ ilu,,,,n.tr ""
' a
a,¡ f\, alr,l
d. l" prodrrcción editorial ¡ si tienen, como dice otro, "bellos restos" -Por
(
"r l
Noir lJlun!
t , , , p, i: ", i rl i , r o ./:'t cl:!::r:
l::r lty t
ejemplo para Plon, las colecciones"Terre humaine"y
"Feux croisés",coiec-
','i . _¡]:;:1i,., \1 r ) l 8l ( tr " ,r
ción de literatura extraniera anrigua y presrigiosa-:,Producen ya sea una
\e¡Jrcra r,1..,
I t,.,,'rh,'r,t¡n 1 I I' r,,,
,, a .ziltlr., ll ,rrr- ¡irj,.
(.,9
ilntir\ 'f literatura sin originalidad, ya seauna lirerarura comercial que no puede vivirse
:'. \l !!K
O
| .rci<. s,,.1
( ¡f ! \ \ c l
y brindarse corlro una forma de innovación sino graciasa la allodnxia.
-05- .]ii: I R rr r3c. a
En cuanro al tercer eje, él pareceoponer, principalmenrc; los editoresque no
¡\ibin I'lichcl
I t)clrii,,r.
a
L a l !i ) n l
publican traducción o publican poco -y sobretodo de pequeñaslenguasraras-,
y
g | ,''r,,,r y los que -más someridos a las coaccionesdel mercado-, tfaducen mucho,
I tlci ri,n(t
sobre todo del inglés;es decir, de la lireraturacomercial con éxito más o menos
garailtizado(diagramas3Y 4).

i
)
¡
-t ( ) .( i 0.5 L0 ii
Posiciones Y tomas de Posición

a las
Diagrama 1+:espaciode los Í6 editoresen el plano de los ejes l-3, distinguidossegúnsu La autonom í adel disposit ivoinst it ucionalde decisión,con r elación
rc- ¡
pertenenciaa las clasesde la CJA. coaccionesestructuralesejercidaspor el campo, pareceextremadamenre ,!
ias tomas de
ducida. Al punto tal que uno Podría tener el sentimientode que 1
I
editoriales,se ded'rcende las posicionesocu-
posición, ., d..i, las estrategias I
las coaccionesquc
p"d", .n el espacioedirorial. En efecto,es indiscuribleque
ocuPan posiciones
están inscritasen la posición orienran a las editorialesque

{
24t {
{
,I
Utm rcuolttciti¡t cottselurtcluraen la eil: I
Pierre Bo¿trdiet¿

comercialesy la indiferenciaheroicae insensataa ias necesidades de ia econo-


vecinas hacia poiíticas editoriales bastante semejanres(en mareria de traduc-
mía-. La coritpetenciadel editor -y de todos los que tlenen astlntos con ci
ción, por ejempio) e, incluso, al menos en el polo dominado dei campo,
hacia soiidaridadescompletamente reales.Sin embargo, el efecto de esras l i brc, en cu" rl quierf unción que scí r -csr , if or m adapor dos par t esant í r got lisixs
coaccionesestámediatizadopor las disposicionesde los agentesque onenran las xpr ir udespr o¡ r iem ent e
1' por l a apti ru d pa13; 1., ciar lasar m oniosam ent e,
lirerariasdcl que sabe"ieer", y ias aptituclestécnico-comerciales del que sabe
la percepciónque ellos pueden tener de ias posibllidadesinscritasen cl cam-
po en su conjunto y en su posicién parricular,la representación "conrar". El ediroLen su definición iclcalde¡:eríaser,a la vez, un especulador
que pueden
hacersedel espaciode los posiblesque les es ofrecidoy del ma¡gen de manio- i nspi raci o,di spuest oa las apuest asm ás ar r iesgadas,y un cont ador r igur osc,

bra que la est¡uctura cle las posibilidades ob.ierivasdeja a sus iniciarivas. i ncl uso,rn poc o paisim onioso.De hechc, sugúnsu posiciónen la est r uct ur a
Por estarazón,se habría querido poder incluir en el sisremade los factores del campo *es decir,grossontodo,en la esrrucrurade ia distribución del crpi-
explicativos las propiedadesdistinrivas de los editores, es decii a Ia vez de las rai económico y del capital simbólico-, y segírnias disposicionesligadasa su
características oLrjetivas-rales como ei origen social, el capital escolary la po:;i ci ón v a i a t r ayect or iaque alií la ha concucido, cl edir or , hom br e de
trayectoriasocial-, y de rasgos,sin duda más diFícilesde definir, como las neqociossumido -como el venCedorde cuadros- en la economíaanti-econó-
disposicioneséticas,la competenciaespecífica,ranro literaria como récnicay mica del arre puro, propenderáhecia uno u otro poio, y realizaráuna combi-
comercial, tantas informaciones que, como muchos observadoreshan podido naci ó¡ más o m enos exit osade esosdos sent im ient ost an ir r econciliables,
convencerse,están protegidas por una barre¡a de secreto pa¡ricularmente c, o el agua y e, lf uego,el am or pur , : del ar t e; 'cl : m or
soci oi ógi can- ienrcon]
temible. Sin embargo, se puede establecer,sobre la base de un análisisdocu- rnercenari oci ei cliner o. r '
mental y de una encuesraernográfica,que exisreuna correspondcnciafuerre Todas las fomas de doble concie¡rciay <1eclobleiucgo serán Puestaserl
entre las característicasdel editor y las característicasde su editorial, y com- práctica por uno u otro o por el t'nismo en diferentes¡notnentos,desde las
prender ia lógica según la cual se esrablece:las pequeñasedirorialesrienen " l ocuras" económ icasdcst inadasa ser vir de coar t adaa ia polí t ica cdit r 'r iai
más posibilidades de ser dirigidas por editores un ranro más jóvenes y muje- más mercantil del editor comercial, hasta la sumisién a las nccesidadesdcl
res, de origen social relativamenteelevado, dorados de una fuerte cultura mercado y a las costumbresme¡cenariasdel editor "Puro" siempredispuesto
literaria ¡ sobre todo, muy investidos -inrelectual y afectivamenre-en su a legitimar sus compromctimientos por la invocación dc las audaciasiitera-
oficio; las grandes editoriales tienen más posibilidaciesde ser concedidas,ya ri as que sou consiJcr edascom o posiblcs.
En u¡ se¡tido, es en el debut, en los comienzosi¡eccsariamente hcroicos,
sea a herederos,ya sea a técnicos, formados en el trabajo, o legitimados por
que la elecciónes más fácil, porque;finalmente, no se tiene una clcrciii¡r así.
títulos escolaresraros. Mientras que, del lado de los recién llegados,la posi-
Según la frase de un editor de vanguardiaI'a cindo, "uno es virtu¡lst.rPor otlli-
ción tiene mrís posibilidades de haber sido hecha por el que la ocupa, y a su
gación". Esto se ve bien en materia de rradr.rccionesde libros extranjeros.Según
imagen, del lado de los editores más antiguamenre esrablecidos,la mayoría
de las veces ella habrá producido a su ocupanre, por las vías de la herencia un agenreliterario, "los libros un poco'cheap"ur1poco baratos,un poco diri-
(hay muchos herederos,hijos, hijas, sobrinos o sobrinas,en la profesión) o gidos al gran público, o incluso nluy dirigidos al gran público, son mrry caros'
de la cooptación que tiene ambién por efecro dar a una editorial un"chef dz porqlle ei mur.rdoentcro se los ciispute,Porque son éxitos mundiales' Iin canr-
maison"a su imagen.' buenos autoresque, Potencialmente,
bio, us¡ed tiene buenas novelaso de r-r-ruy
Pero, otro principio de diferenciación,independientedel precedente,es no tienen una venta prevista muy importante' Pero que tienen calidad' Y esos
la competencia específica,que es la condición del éxiro o del fracaso en la libros son tomados frecuentementepor pequeñaseriitorialesPor su calidad'
profesión: por el hecho de que el lib'ro, objeto de doble faz, económica y (...) El cosrado financiero, cconómico, comercisl dc la cosa no es e! primer

simbólica, es a la vez mercancía y significación, el ediror es también sn per-


análisisde
sonajedoble, que debe saber conciliar el arre y el dinero, el amor a la lirerarura 30. Sobre el m¿rch¿nd de ane, del cual cl editor es un caso particular, pr:drán lccrsc los
la figura de Arnoux, el personaje 1'laubcr¡iano, cn: Picrrc Bouri.licu, Les Rig/es dt l',art' P¡rís, L-e
y la búsqueda del beneficio, en estrategiasque se si¡úan de alguna manera
S cui i ,pp.239v10l (' l rad.c s p' : Las regl as ¿l el arte,B arc c l one,A ¡raqraml1991)'
,
entre ios dos extremos -la sumisión realista o cínica a las consideraciones
elementode la elección.(...) Aún cuando quisieran-creo que en prin .r ir,rgar derechosen el extranjeroj' y se comPrometeen la carrel'aa los grandesLrcst-
esteno es su deseo,su dirección-, pero aún cuando quisieran,no seríahcapa, sellersinternacionales.
ces,habida cuenta de las sumas que hav que poner sobre la mesa para adc¡uirir Este ediror de primera generación,formado en ei trabaio, "vendedorsin esta-
los derechosde John Grisham, de Stephen King o de genre como esa, no dos de alma', que domina perfectatnenteel aspectocomercialde la empresa
estaríanen condicionesde enfrentar una competenciasemejanre,porque no edirorial, y plenamentejusdficecloPara Pensarse como un profesional,no puede
tienen el medio para hacerlo.Pues,frccuenremenre'
se abocana los libros de no aparecercomo alnputado en una dimensión imporrante, propiamente iitera-
calidad". Esrádicho, se ve, que, aun cuando quisierann. podrían, y también ria, en una estrategiaespecíficamenteeditorial. Desde el punto de I'ista de un
quc, de todos nlodos,no quieren,porqueno esraríancn la posiciónque ocupan agenreliterario "a la antigua', sin ninguna ducia él for¡na partc de "esagente que
y donde ellos se han puesto, si no ruvician las ctisposiciones
necestriaspara es -€nrre comillas-'/xmAteur''.hay un grupo de edirores,de dueños de casas
ocuparla, las uirtudesnecesariaspara acepraren ellas las necesidades(el mismo editoriales que, diría, sin se¡ atra vez demasiado malvado, sbn casi anallábetos;
observadorseírala,por ejemplo, Que "son frecuenres,por orra par-e, mujeres son los editoresque no sabcn leet lo que es el 'ABC', nle Parece,del editor. En
fnombra a viviane Ham¡ JoélleLosfeld o JacquelinechamL'onJ que tienen cambio, sabenconrar.No sabenleer,pero sabencontar (...). Paramí es un Poqui-
este género de ediroriales,que son ve¡daderaseditoriales". to dificil ver pasarIa edición a las manos de gente qlle (...) no arnan verdadera-
gna empresa
Las cosasson también relativamenresimples en la otra punta del espec- menre los libros, que habrían sido ta¡nbién buenos Patronos de
tro, para los editorespura y simplemente"comerciales",cuyo sírr,boloes hoy farmacéutica'. Y el límite extremo es alcanzado cuando con "ese sistema que
Rerna¡dFixor,PDG de la filial del Groupedi la cit¿, NouvellesÉdi¡ion, Roberr viene de los Esados Unidos, las editoriales están frecuentemente en las manos de
Laffont-Fixor-Seghers,que, al asumir sin compiejos su oficio de pub/isher,como grupos que no tienen nada que ver con la edición, es decir, bancos,sociedades
éi dice,declarasin rodeosla verdadeconómicade la profesiónde editor: origina- petroleras,compañíasgeneralesde electricidad"'
que, por la evolución,por su edirorial y por
rio de un medio muv alejadode la cukura y de la lireraturay ad'enedizo en la ¿y qué decir de esosherederos
cima de un gran grupo, luego de haberrecorridotodos los gradosde la jerarquía conl-
el campo edi r or ial en su conjunt o, pucden encont r ar scen est r at egias
en el sectormás propiamentecomercial(ha sido, sucesivamenre,
reposlroren pletamente vecinas a las de los ilegados tardíamente más desprovistosdc
Ga[imard, vendedo¡en Hachetre,rep¡esenrante i'educación literaria'? De hecho, aunque los riesgoscorridos sean infinita-
en Garnier,direcrorcomercial
cn Gallimard, antesde fundar su propia editorial),mal inregradoen el mundo menre menos importantes para una gran editoriai que para una pequeíla,las
ediroriai (ha dejado el 6" anondissementpor ia riue droit,lugar de ios negocios), consideracioneicomercialesse imponer\ también, en lo sucesivo,a travi'sdc
que lo mi¡a de arribao lo rraracomo un modelo negativo,estáinclinado a una los técnicosfinancieros,los especialistasdel marketing y los cont"dores,a llr
suerrcde popu/ismoliterario cruzad,ocon an¡i-intelecrualismoque lo lleva a diri- mismas editorialesantiguas,como Gallimard, que están obligadasa t'n¡r;ir
"Gailimard clue -;ciltirrr
girseprioritariamente(y con una cier¡asince¡idad)al púbiico más .¡asro,com- en la carreradel dinero, es decir, de los best-sellers:
Ir';ri'
prornetiéndoseen la gesriónde 1oque consideracomo un come¡ciocol¡o cual- decir?- ha aprovechadobien su estatutode reina Victoria de la cdicif l
.lt ti
quiera, con métodosde director de marketing de una empresaordinaria y po- cesa-eilos han sido los primeros, los más grandes,los más conoclJ.,'
niendo al serviciode la búsquedadel máximo beneficic rodas ias récnicasde
gestióny de comercializacióndisponibles-marketing, publicidad,bajo precio,
i':
etc.-. Aunque esréobligadoa haceraigunasconcesiones 31. B ernard Fi xc ¡ v ende s us bes r-s el l ers en el ex trenj ero:Ld r?i N l ttde¡ b¿ndi t¡[2[¡¡¡' ¡ 3i ' ¡¡:r:
a ios valoresdel medio
naf lbl'rabría vendidt¡ i,4 ¡nilloncs dc cj;m¡'l':r*' c:;'""
manifustandosu solicitud a favor deJulliard, anexadoen 199r, y la colección 600.000 ejernplaresenJapón;Jamdissans
c i e:us l ¡i ' :":; i ::'
"Pavillons",v creando,paraenmendarse,dos colecciones, años despuésde su apari c i ón,todas l as edi c i ones s, i n detel l ar.P arahac c rh:l l l ar
"Bleu noir" y "Rideau
ha prtc l ttr ¿ l ' i i :r:j :j e:
críti cos l i te¡ari o s-que l os i gnoran, en todos l os s enti dosdc l térmi no-,
rouge", multiplica los "golpes"come¡cialestalescomo la pubircaciónde "resti- del c api tal s i mból i c o y dtl c api tel ;oc i al J * i qrrc J : ;"' r' -::
estrategi aque de be rr.,pi i ,l "
".,s ".,c i e i \tj !.i :Ii : :r' ,1é
monios chocs"(historiasde rapto, de violación, de incesto, cesrimoniosde ai ".a", gr"nda, edi tori al es ,rec urri endo a medi os de ac c i ón que c i rl i ntrc i )uc J s
transexuales, t¡r' r' * r' r r' ' :
erc.),novelasde kiosco,e historiassensacionalistas
adecuadas
para publ i ci dadbi ena pufl rada(porej empl o,unaprepubl i c ac i ónenunrrc v i s tafc mc ni ng.J
procurar grandesbeneficiospor la ventadirecrao a travésde las cesionesde los masi vae¡rE uropal ,trnai nv i tac i énl s ac réeS oi réec l ' eJ e.rn-l ,i c rr.:l ..,rtc ¿ul t.

244 245
Pierre Rourtliau {Jna reuolución conserttadora en Ia edición

extran.¡ero durante muy mucho tiempo- (...) prr" poder, ho¡ seguir el mo- como Minuit, toman un relieve completamenteexcePcionalcuando se las
vi mi e nt o, es r ar s ie m p re e n l a c a b e z ad e l p e l o tó n (...) ti enen necesi dadde resitúa en ei conjunto del campo editorial: las estrategiasde resistenciafun-
publicar también cosasque se vs¡clsn bie', y ei lado poprrlar rctrasado1o dadasen un aristocratismoascéticole han permttido conservarseen la ausencia
tiene aún cuando iracundo". de éxito de los comienzosy conrra el éxiro posterior;y le otorganvalor por ser
percibidascomo libres de los compromisosy comPrometimientosde la eco-
De hecho, se puede intenrar dar razónde io que se podría llamar el "esri- nomía editorial;33ellas se oponen, a la vez, y casi tanto, Por un lado, a las
l o " d e una edit or ia l , re s u l ta n ted e l h a b i tu s d e l edi ror y de l as coacci ones estrategiasde las pequeñaseditorialesde vanguardia-reciencementeentra-
inscritasen la posición de su editorial, que se revelaen su carálogo,recons- das en el campo-, y, por otro lado, a las estrategiasde las grandes ediroriales
truyendo, como para una personasingular -un escriroro artisra,por eJem- anriguas como Gallimard, que, canonizadasde iarga data, canonizan autofes
plo-, la fiínnula generado¡¿de sus elecciones.Así, Gallimard tiene conductas académicos-al perpetuar las formas literarias más tradicionales-' o jóvenes
d e n o ble en dec ade n c i aq u e q u i e re rc re n e ry rn a n renL.r
sl i rango si rr rebaj arse, autores -espontáneamente ajustados a modelos antiguos o bastante pocc
realizandolas adaptacionesy los ajustesnecesariospor la elecciónde entrar informados de las evoiucionesliterarias, PaÍa ligar todavía a la vieja editorial
en la carrera de los best-sellersinternacionales.Asocia hábiies estrategiasde una idea de vanguardismo-. La consagraciónque es ororgadaa muchos de
modernización atemperada, que le permiterr, como frecuenrementea los los descubridoresde la primera hora (samuei Beckerry claude Simon, espe-
dominantes, tener los beneficiosde una eleccióny de su conrraria,en algu- cialmente) y al grupo de autores constiruidos como "nueva novela", ranto
nas audaciasy algu.nosdescubrimienrosde coartada planreadosen los pe- por el efecto de la cubierta Común como Por la acción de promoción simbó-
queños dominios iingüí.sticos,y en una gesrión c/¡ic del fondo, a rravésde lica conducida por Alain Robbe-Grillet, no puede sino reforzar el capital
todas ias coleccionesde bolsiiio, para adultos y parajóvenes,las reediciones, simbólico de la editorial misma, e incrementar el poder de atracción que ella
acompañadasde un remozamiento reducido, la mayoría de ias veces,a un ejerce sobre la fracción más cukivada dei púbiico (como lo atestiguan las
ca mb io de m aquet a . curvas de ventas), f.también sobre los autores Poten€iaies:estos pueden set'
El me,foríndice de la correspondenciaenrre la esrruciurade las posiciones en parre, conrinuadores que, por el acostumbramiento del público, obtienen
y la estructura de las tomas de posición32es,sin duda, el hecho de que el así un éxito relativo; y, una vez que llega el pleno reconocimien¡o colectivo,
incremen¡o del capital literario de una editorial se acompaia casi inevirabie- algunos de los úkimos llegados pueden beneficiarsede ia indulgencia que Ia
mente de un reforzamiento del peso de los objerivos y de los crirerios comer- editorial les otorga, víctima paradójica de su preocupación por escaParal
ciales, no pudiendo quizás los responsables,en el mejor de los casos,sino envejecimienrosocial, aunque no iean necesariamentepol comPleto rePre-
retardar el destino, aminorando el deslizarnientohacia ei poio comeróial. sentativosde la línea original o aunque, más sutilmente, Produzcan variantes
Así, las estrategiasde una edirorial de vanguardiaen vías de consagración, a¡enuadaso suavizadasde las rupturas de los comienzos (a vecesgalardona-
das, por esta razón, con los más triviales fie los premios nacionales).Se puede
pregunrar si la pequeña editorial llegada a la cu¡nbre de la consagreción,
32. Paraverificar la correspondenciaentre el espaciode las posicionesy el espaciode las romas de podrá perseveraren la combinación de extrema audacia y de extrema conten-
posición, hemos censadó 537 textos de 110 au¡ores publicados por editorcs comprcndidos en .iOrr, q,r. le ha permitido permanecer hasta ese momento en la clase de las
pequeñas empresaspara los índices económicos -un número de a¡alariados
nuestro estudio, quienes han sido traducidos al francésentre julio de I 991 v julio de I 996 y renido
en cuenta, para czda uno de los títulos, las variables siguienres:género (novela, novela corra,
muy restringido, una exclusión ostentatoriadel marketing y de le publici-
relat o. c u c n t o ) , c d i t o r d c o r ig e n y d e lle g a d a ,le n g u a d e o r ig en (para el i ngl és se ha di sri ngui do
re€h¿zoPor
ent re " i n g l é s " y " a m e r i c a no ") ,n o m b r e d e l ¡ r a d u cr o r ,n o m b r e v scxodel auror,año de apari ci ónde dad, un número de títulos publicados relativamente débiies' un
la edic i ó n o r i g i n a l , d e l a t r a d u cció n fr a n ce sa( 1 9 9 1 o 19 9 6 ) , jui ci os de l a c¡íri ca,preci o, n úmero
de páginas, número total de los autores extranjeros por el ediror de referencia,númer<¡de autores
que t ien e n l a m i s m a l e n g u a d e o r ig cn n a cio n a l. L a in m e n sid ¡d de l as i nvesri gaci oncs
neccsari as delasFlicione*deMinuit"fide¡ q su
33.tvfichel Deguy,op.cit.,p. 18:"Con la únicacxcepción
para lle v a r l a a c a b o n o s h a n co n d u cid o a a b a n d o n a re step r o ]'ccro. ori gen cl andesti no".
las .rducciilnri y por la carrera a los bcst-sellersextranjelos-, participando Pauio Coelho, traducido ciel brasileño,o, al contrario, e[ por-
los best-sellers,
en la categoria,lc las más grandes,en todo lo demás,e, inciuso, poco a poco, .¿eniral lnenos provisoriamente difícil de ios descubridores,a una editora
en l<¡séxltos de venta, que el efecrode consagraciénejercido por su euqueta como Ibolya Virag).
aseguraa sus apu€stasmás arriesgadas. La sobrevivencia,como lo atestiguanlas muy numerosasdesapariciones
anuales,es ya una Proezaque no es Prometida sino a aquellosquc, según Ia
ley fundamentai del campo, saben combinar la comPetencia literaria y el
[¿ dinámlca dcl carnpo y las nuevas tendencias realismo económico, Así, se puecie encontrar entre los pequeños editores'
de la praduec!én editt¡rial aparentemen t e a1 ext r em o especializados' est r at egias sut ilnlent e
diversificadas,que Permiten obtener las ventajasasociadasal controi de un
!.* c{in'i!!:ica ri*l eampr: no puede comprendersecomo el conjunto de las ni cho, danáe la concur r encia es débil ( es el caso de t odos los aspect os
r."'r;l¿reioncs *c¡rarac!.as v paralelasque describen las monogiafías históricas de Iingüísticos más o menos abandonadospor los grandes editores), escaPan-
crnprc.ar editorirlec, y qu€ uno deslizaespontáneamenreen el molde cómodo clo tanto como es posible Ce las limitaciones ligadas a la extrema especiali-
*e ie nretáfcra biológica: nacimiento, juventud, grandeza,decadencia.Ella z ción. Así, un editor como Philippe Piquier, especializadoen las lenguas
*r?cuefiÍrasu principio en la es¡ructuradel campo: so¡r los nuevos ingresantes de E xtremo or ient e, cor eano, viet nam it a, chino, japonés, inr ent a r eLlnir
!+r que crean el movimiento; son ellos q.r-i..,.r, por su sola exisrenciay por la las audaciasde una edición de investigacióncon la publicación de ottras y
c*¡:eurrencla que instauran -y en la cual la abnegación(o la autoexplotación) de auroresque le permiten obtener éxito sin salir de su especialidad:clási-
japo-
lcs l:ac* {smpetitivos*, arrancan al orclen literario establecidode la inmovili- cos del erorismo chino o japonés, novelaspoiiciales,clásicoschinos o
&Ét. Y ai voh'er a las fuentes mismas de la creencia,por una denegaciónascéti- nesesy, en fin, Iibros de éxito consagradospor adaptacionesal cine'
<e {por ejcmplo. cr-rnla elección de cubiertasciespojadas, sin ilusrración)de Si el porvenir de las PequeñasemPresas principiantes¡ al mismo tiempo' el
(y
rr'<lo lo que puede evocar Ia dinrensión económica de Ia=producción lireraria sentido presente de sus eleccionesdeia frecuentemente a los observadores
*y;r s€ ¡rate de la publicidad o del marketing-,'empujan a la antigua vanguar- también alacrítica) comPletamenteperplejos,no essólo en razón de las incerti-
ciia, hcy consagradao en vías de consagración,al pasado-idenrificada a lo dumbres inherentesa tcda estrategiaarriesgadade "descubrir",sino también
süJ-rg¡xd6,a lo desclasado,prrvisoria o definitivamenreexcluida del jucgo-, o a porque el libro, objeto ambiguo,económicoy simbólico,sePrestamuy Par¡tcu-
lo clásicr¡-así puesra Fuerade juego y arrancadoal rranscursodel tiempo. l"r*.rrt. ala )l/odoxiacuitural, .." *rié.,r..rdido sobre!a identidad y el estatuto
Por csta razón, en ei espacio-tiempocaracrerísrico del campo, las diferen, simbólicode un objero cultural que condlrcea romar la bijouteriey lo símil por
te: posicionessincrónicascorrespondena momentos diferentesde rrayecro- lo "auténtico"; al/odoxiaa la cual pueden sucumbir no soiamentelos escritores
ri a s d iac r ónic as( qrre l a re p re s e n ta c i ó ne s p a c i a ls i ncroni zaarti fi ci al mente). mismos,que, como seha visto, estána vecesengañadospor una imagenantigua
"Le Chemin",
Los nr¡evosingresantesson también, por Lrnaparte, indeterminados,y no es de un editor (el Gallimard de GeorgesLambrichsy de la colección
dei
llcil de discernir, a parrir sólo de los índices objctivos disponibles,si están por ejemplc), sino también los críticos,frecuenrementevíctimastambién
d*stinados a desaparecermás o menos rápidamenteo si, en el caso de que efectode histé¡esis, y el editor mismo que puede creerreconocer los signos de
ellos liegarana sobrevivir,se orienraránhacia el rri*nfo comercial o hacia la una gran obra d.evanguardiaen lo que no es sino una imitación en símil.
del
co n sa gr ac iónlir er ari a , a s o c i a d ao n o a l é x i ro c o merci al (aunque se pueda ilusión ranro rnásprobableho1,,cuando el conjunto de los proragonistas
prever, sin gran riesgo, que una empresacomo Carriére,que>sostenidapor juego literario,los autoresy los editoresespecialmentr,estánad'¡ertidosde las
una herederade una gran edirorial comercial,3a
ha publicado el besr-sellerde avenrurasde iasvanguardias.Así como los escritoresmás astutosy sin escrúpu-
imitando lastransgresiones de
los puedendarsela ilusiónde desafiarlascensuras,
del pasadoen pequeñossacrilegios eróticos sin conse-
los grandesheresiarcas
editores conocenbastantebien el juegocomo Parasercapaces de
34. An n e C a r r i é r c c s l a h ija ¡ Ro b e r t I- a flo n t y h a d ir ig id o , d uranre ci erto ti enrpo, el servi ci ode cuencia,ciertos
orens ad e L a l f o n t . j ugar el doble ¡ uego,par aellosm ism ost anio conr o par a los ot r os' y pr oducit

243 719
Pierre Botu'd.ieu (lna reuohtció¡t consert'culorae¡t h edicíótt

si¡nulacioneso simulacrosdel vanguardismomás o menos exirosos,con la a trar,ésde la revistaPetpendiculaire):"La oPeracióntiene efectospor lo menos
seguridadde encontrar ia complicidad, por lo tanto, el reconocimiento-de :rmbiguos,puesaunque conjuquen, rreinra añosdespuésde Mayo del '61J,eo¡r
editores,de críticos y de aficionados,que esraránranto más inclinadosa la las mismas coplaslibertalias,los 'jóvencs de nitestro tienrpo se aco-
relreide-s'
"fragilizar
allodoxia cuanto, formados en Ia "tradición de la modernidad", querrán ac- modan bien con la dialécticadci marketing",lo que ticne por efecto
luar a todo precio como descubrido¡escapacesCe evita¡ los erroresde los ios catálogos".16 Al o¡questarlas icieasrecibirlascon la modarT-que' a íuerzade
conservadurismosdel pasado. circular de escritor"a la moda" a periodisramundano o a editor mociernista'
¡anto en
Ciertos editores principiante.spueden, así, intenrar conciliar estrategias terminan por encontrarsetanto en L'Olivier como en Fayardo Fi¡:ot'
a las sanas
que, en un estadomás autónomo del campo literario, seríanir¡econciliables: POL como en Flammarion o Albin Michel-, celebranel retorno
a la tnoda, al storl
la inversión,.necesariamentea largo plazo, en autores de larga duración, y ia rraclicionesdel relato (o, como dice el nuevo ienguaje
lo que
búsqueda del éxito comercial de una producción literaria con rotación rápi- telling)¡ al mismo iiempo, a la verdaderavida ("los noveiistasmiran
"abi'eirrnás an-rpliamenie su's
da, apoyándoseen una forma de marketing modernizada,fundada en una les rodea", dice uno, y el orro s:ñala que ellos
jór'enesnovelis.astiance;es
exploación metódica de Ia allodoxia. En asociación con ciertos periodistas iibros a ia realidaclde hoy'').3'Esreinreréspor los
que, en nombre de la solidaridad "generacional",se ponen de acue¡do con (y muy especialmenre -esro no se inventa- Por "la nueva esctlelade novelis-
con el
ellos para pensar ias luchas literarias según la categoríaaltamente incierta Ce r", ,,rrgido. de la literatura p^ra ia juventud") se asocianaturalmente
("los ameri-
"generación'35-armade iucha que apunra a desciasara los antiguosmás que interés rambién modernista por la "joven literaruia americana"
aPorta' según
instrumento de conocimiento-, ciertos responsablesde edi¡oriales"jóvenes" canos, los ingleses,cuentan historias"),que se considera que
y tiesa' for-
(o de ramas "jóvenes" de las viejas editoriales comerciales)eniienden ofrecer un viejo esrereoripo,todo lo que la literatura francesa,abstracta.
a los iecto¡es "jóvenes", valorizados y valorizantesen ranro que rales, autores "la rebelién' la vio-
malista y cerrada,es incapazd.eofrecer,y, en Particular'
asocian
"jóvenes" y"aIa moda", capacesde romper con las búsquedasesotéricasde la iencia y el sexo". Y si ios promotores de este filoneísmo decisorio
e incluso
generación precedente. Es significativo que los comentarios alrededor de los sincréticamenrela jtventud de los aurores,la juventud dei público
es Porque'
nuevos "movimientos literario-comerciales"que agitan el campo editorial, la juventud (o el rejuvenecimienro)dei personal de la edicién'
publicita-
hagan un lugar importante a una editorial como J'ai lu, filiai de Flammarion, confundiendo la fronrera enrre la creaciónli¡eraria y el marketing
novelaso de los
y a su directora literaria, Marion Mazauric, que se ha esforzadoen reunir, en rio, ven en el éxito inmediaro que obtienen -de las Primcras
honor del "nuevo público de 2O-30 años, lecroresde versionesde bolsillo
ante todo", en obras de bajo precio, "de 19 a 25 francos",auroies desparra-
mados en dlversoseditores (entre los cualesRaphaél Sorin, crítico literario génération",
36.C. Ferrand''l¡ nor-ivclle pp' 6t163'
cn:'Liures-tlebdo'282'
'por más que sc
nuevos periodistas según cl cual
en L'Express,editor en Fiar'.-rmarion,promovía, por orra parre, especialmenre 37. Michel Deguy e'roca"el ine pro cliché de los
qui c re dec i r otro nov c l i s tadi ferentc al que
busque, no se perc i bc ,,n ...ri ,o, c n F¡anc i i -l o quc
de noi'elistas nobelizables' o el asfalto
habla- mientras que, es evidcntc, la hierba británici rebosa
op' c i t' ' p' i 13)' Y ev oc a' más adel a¡rte'
ameri cano,ol apa mpa,i nc l us ol aP atagoni a"' "(l r4' D egu¡
"1. ameri c anapor déc ada'l a
35. La solidaridad "geneiacional" sirve paia fundar una internacional lite¡ario-comercial enraizada a l os.'nucvoscl i chés ,prej ui c i osdel" pc ri o,l i s tal i ¡erari < r: l a dat¿c i ón
l¡te settentiesl;2' ia novela' v cxtranicrr'' cs lo
en la unidad sup'resra d{todas las prácticas de tado¡ los "jóvenes" de ndos los países:"Hay más rrinfornanía de [o nuevo v de lo ur"d<, (ear$ eighties,
relac ion e se n t r e a u t o r e s fr a n ce se sy a u to r e s a n g lo sa jo n e s,ir al i anos o español escl e i a mi sma de l os i ntc l e:tual c s " (p' 87)'
que ha.'más i nre res ante:3. es nec c s ari odes c onfi ar
generación que entre los autores franceses.¡ue publican hoy y los que han comcnzado a escribir i nes pc ra< l os , .s ta dc c l arac i ó¡r dc I]ernard Fi x ot: "c uando
38. un sol o ej eni p l o de ral c ser.¡c uenrros
an¡esde l o s a ñ o s ' 7 0 . P a r o tia p a r te , e llo s m ism o s e s¡ á nn u ¡ r id os dc novcl asextran.j cras (...). E . trri s ,rc i o,é¡amos mi s bi c n reti c entes¿ l a nov el ¿
hefi rosl l egacl oal o fi c i o, c onA n¡oi neÁ r¡douarc l ,
todos estos países,como en f-rancia, ha dcvenido claro que se podía hacer lite¡arura habiando dcl L: úni c o v al c c l c c
ro s ' < :ont¿r una hi s tori ai Ll ntonc C s
l rancesa:¡esrarnani a< 1cl a rntros ¡rc c c i ónc uanc l o
que l l egaban a gente ordi l rri a'
footo del roth (...). Los periotlistas quc hablan dc los libros en los periódicos, en ia relevisión o en hemos publ i cado c l oc umentoss obre Iri s rori as c x treordi nari as
frecuentcmcnfe a la ficción" (B' Fixct' cn:
las radios, forman parte de esta nueva gcneración de los 25-35 aíios, como los lccroresy como los enc<¡nrrandoque en nuestra época la rcalicla<i su¡rerabe
libreros". C)livier Cohen, citado por C. Ferrand, "Olivicr Cohcn au pied du mur", xn: Liures- en la memo¡ia las "evidencias" cleJean-N{arie
hladante l.:íe¿ro,4 de enero de 1993). Y se te¡rclrán
Hebdo, 2 7 9 , 6 d e f e b r e r o d e 1 9 6 8 , p p . 5 6 - 5 7 . al cclnlienzo'
Laciaventinc rccor<i:,da-s
a u tor esdebut anr e s -e l re s ri m o n i omá s i n d i s c u ri bl ede su i nsri nro de " descu- (...): es evidentementeun libro trabajado,Pcro se escril¡een una espccieclc
b¡idorcs"de una nueva especiede lirera¡ura,más moderna,menos docrrinaria, estilo joven, moderno, un lengua.ie(...) q*. Parecesimple y accesibleliteral-
más joven -en una palabra-, pero tamLtién menos "elirisra", porque más mente a tod o lect or ( . . . ) . Par a gent e que lee poco o que no ha t enido la
ampliamenreaccesibleque la literarurade investigaciónde \os sixties,y sobre posibilidad de hacer estudios o de ¡ener :unaeducaciónliteraria, e5ro parecea
todo más conforme a los inreresesinsepara'b,lemente literari.s y, comerciaies pesarde todo un librc, un verdaderolibro, y para los que tienen un poco más
de los jévencs cuadros literarioscon rono liberrario,que pi-etenclenimponer la cosrumbre le leer, no hay nada que sea demasiadoprimitivo y completa-
su nczvdeal en el mercado de la edición mente i nac ept able".
olivier es,sin duda, !a edirorialrnásrípicade este"mode¡nismo"que juegala Esros acontecimientoscomerciaiesconv€rtidos en acontecimientoslitera-
juvenrud conrra los esrablecidos -a la ¡rlaneracleJulliard que, en medio de los rios (cuyo paradigma es el éxito dado a Houellebecq) cogstiruyen, en su emL¡i-
años1950,oponíaya lasrec.3nlleg::,das, mujeresy.!óvenes ellastambién,Frangoise güedad misma, una de las manifesracionesrnás significativasy más sutilrnenre
sa g a n y M inou Dr o u e r, a l o s p o n tífi c e s q u e e nvej ecíande Gai l i mard-.3e enmascaradasde una transformación profunda del campo editorial. Constitu-
Sabejugar en la forma moderna de las relacionespúblicas,que se irnpone en yen la obra de una nueva categoríade agenteseconómico-literariosque, valién-
los oficios de edición (cercade la mitad de sus au¡oresfrancesesson periodis- dose de la familiaridad con ei estadoanterior del campo literario, más autóno-
ta s, a lgunos m uy in fl u y e n re s e n l o s p e ri ó d i c o s o l os semanari osy en l os mo, pueden irnita¡ de manera sincerao cínica, a los modelos de vanguardiaen
j u ra d os de pr er nio s )a 0y c u y o s fru ro s s e v e n e n l a abundanre " coberrura un nuevo estadodel campo, carac¡erizadopor el reforzamientode la presión de
mediática" y también en los numerosos premios (enrre ellos, dos Femina) las coaccioneseconómicasy de la atracción ejercida por el polo comercial.
aseguradosa sus publicaciones.Su carálogoesráconstituido casi exclusiva- si es verdad que, como lo ha mosrrado Jean-YvesMollier, la edición ha
mente por obras que han conocido éxiro en los Estadosunidos, su gusro
)¡ pasado,entre 1BB0 y 1920, de la pequeñaempresafamiliar a la gran emPre-
literario se liga, sobre rodo -para rerornar las palabrasde un pequeño editor d.e sa casi industrial,a2estos cambios no tendrían la amplitud ni la brutalidad
van¡;uardia-,a "una lire¡aruraque habia de la ciudad,
QuFes bastanteviolen- de las conmociones estructuralesque han sido suscitadas,desde hace una
ra, bastanrebrutal, basrantesimplerambién"aryque se supone que hace pal- veinrenade años, por la irrupción de una lógica financierasin concesionesen
pitar a un público joven, ávido de la evocaciónde "placeresprohibidos". el mundo relativamen¡eprotegido (otros dirán arcaico)de la edición france-
Se ¡:uede acordar con url gran agenre lirerario internacional que lo que sa. Desde la-oPA de Jin-.myGoldsmirh, en 1986, en las Pressesde la ciré,
proporciona a esrasobras el ser decretadas"jóvenes",o en ,finida.l .on lo, revendidasalgunos mesesmás tarde como cuaiquier emPresacotizadaen bolsa,
"ióvenes",es, en efccto, quizásuna cierta "simplicidad" los fenómenosde concentraciónsehan sucedido,yendo del rescatePu¡o y stm-
de su fo¡ma iite¡aria,
es decir, dc su esrruc¡urav de su esrilo: "Hay cada vez más libros, ranro
en ple a la toma de participación del capital -sin hablar de todos los lazosde depen-
Inglaterracomo en Francia,que estánescritos,no sé si para un público joven, dencia asociadosa la participaciónen ia fabricacióno en la difusión-, con la
sinr' ¡-on trna especiede lenguajejo'en, una especiede lenguajecasi habiado. consecuencia, casisiempre,del abandonode una políticaeditorial propiamente
l::ccuentemenrees fabricado, por ejernplo Marie Darrieussecqcon Tiuisntes literaria en beneficio de una lógica puramente comercial.Así, Por no tomar
si no al gun os e. iem plcs,Act es sud, apar r e de algunas coleccionescom o
"Sindbad", anrigua pequeñaeditorial especializada en la literatura árabeque
J f ) l" a * p c r : c i r ' r nq u e c o n sistccn "p u b lica rjo ve n " sea so cia b ata mbi én
a una campañadc markeri ng ha rescatado,no tiene más una ve¡dadera política de traducción )' hace co-
c t rt " : *! ¡ ; si i i ' r ¡ ¡ ¡ ¡ r l a p r c ns:; vcr A. sim o n in , "L Éd ir io n litr é r a i re",en: p Fouché
" [baj o i a ci i r.de], existir las inversionesmilitantes de una coleccióncofeanay los compromlsos
! . 'i: r; : : ,, , , ; ¡ * s t ¡ s i t e d e V u it9
s 4 5 ,p a r fs,L e Ce r cle d e
la L ib r a ir ie , l 99g,pp.54_55,
lr] Í )¡' r ¡ " j i : r : i r n r f J q u e n o cscxp a a lo sm á s!t' r cicr o s,ta r
co m o e srepequeñoedi torprovi nci al :..N o
t ri: ¡: r ic r ! d e ! t l d o ( . , . ) , No p u b lico
p e r io d isr a sq u e , lu e g o , va n a hacer artícul os,,.
4 i i': l' ¡ t i r ¡ a r a d o j a d c u n a "l ]hi s toi re dc l ' édi ti on, c l u l i v re et el e l e l c c tu¡e c n
Pr o < lu cció nd e m a sad e vcn id ae l soportcde un snobi smo,ver pi e¡re 42. V er Jean- Y v esMol l i er y P atri c i a S orel ,
ii'¡'¡¡ri:¡'¡ 'r laic $iicquant, "sur en scie¡;ces soii¿k:,
les ruses de la raison impériariste", en:Actesc/e/a rechercheen France aux XiXo 1,XXo siécles.Approche bibliographiq ue", Actesde k recherche
; t : iri. " : : : o i : i i h i , 1 2 1 - 1 2 2 , nle r zo
de 199g. 126-127, marz o de 1999,pp.39-59.

252 213
Una reuolución conseruadora en la ed.ición
Pierre llottrclieu

Otro índice de est a evolución hacia la asim ilaciónde la edición a un


sin salidasuscimdospor un fincnciamientoocas;onal(talescomo los cuttro escri-
sector productivo (de beneficios) como cualquiera, es ei hecho de que el
roresfiniandesespublicadosLino tfas otro en 7()95,graciasa un fondo finiandés más que ei 25o/oaproxima-
sectordel libro propiamentedicho no rePresenra
de ayuda a la craducción).Losféldy s"lty han sido rescatadcsPof Hachetre,qLre
damenre de la cilra de negociosi los grandesgruPos.Los nuevos mecanis-
guarclaia marca pero excluveal f,rndador,y con é1,su política editorial.Se puede
mos de distribución han conrribuido a someter !a fracción más "comercial"
remer que los ,lirigentesde l-a Découverre,a pesarde las promesasque les han
de la profesión a los imperativosdel comercio mutldral ¡ al mismo tiempo,
sido hechasy de susdenegeciones, corlozcanuila sueftescrnciante.
ai modelo que se ha irnpuesto,al otro lado del Ariántico, a la producción de
sin duda, los responsables de grupos se ponen de acuerclo,todos ellos, en
libros: la integración de la mayor parte de los editot"s en Poderososg¡uPos
preienderque concedenun gran margen clellberrada sus filiales:asi Bernand
oiigopóiicosa las fillales dirigidas por empresarios,que, originariosdei nrun-
Fixot afirma que dejaa Julliard o a la cclección"Pavillons"el esmerode publicar
do de las fi,nanzaso de ios medios de comunicación,no son los más compe-
buenoslibros sin ocuparsedemasiadode la rentabilidad(ha rctenidoIa lección
tenresen mareriaIiterariaate imponen a la edición el modelo áel entertainnte:zt'
de quien llama, sin ironía, su "maesrrode pensamienro",Rc,bertLaífont, de
El campo edi¡oriai francésha sufrido, con un cierto retardo con ¡elación a los
quien retoma, veinte años después,la consigna:a'r"Es necesariosaberperder
otros paíseseuropeos,los eiecrosde la imposición de este "modelo america-
dinero"); pero la colección"Pavillons"no publica más de diez títulos por año de la poiítica editorial de
no".46Así, una parre crecienrede los responsables
y Julliard veinticinco. Sin duda' no es falso que a medida que ceden a la
l as di ferent esedit or ialesno pelt cnecenal m edio de la edición, ni Por su
presión comerciai en io esencial,sacrificandola edición de investigacióna la
formación, ni por sus interesesprofesionales.aT
prosecución del best-seller,especialmenreen los mercadosextratrjeros,Ios
a " Así, para no tomar sino algunos ejemploselegidosen los grandesgruPos,
grandeseditorescomercialesy los grandesediroresa la antigua convertidos r epr esent a
lugar al trabajo de "descub'ri- Jean-Luc L agar dér e,PDG de M ar r a, gr upo en el cual el libr o
i", 1.y., del mercado, continúan haciendo un
dor,, (por una suerrede homenaje un poco perversoque ei vicio comercial
rinde a la virrud oficial del oficio) en tal o cual colección clásicao en una
unidad semi-independienteo satélite:"Le Promeneur"en Gallimard, "Fiction 45.Yer, para esrc tema, P CalvocoressiyA. Bristov, Freedom to Pubiish: a Repori on obstaclesto

er compagnie" en Le Seuil, "seghers"en Laffont, "Payot Roman'en Payot, Free¿lomín Publisbingpreparedfor the Congressoftbe Intemational Publishers'4s¡ociation,International
rV i k s c l l Internati onal , S toc k hol m, 1980'
"Bibliotéque americaine" en ei Mercure de France,la Reuuede littératuregénénl P ubl i sgersA ss oc i ati on/ A l mqui s t &
46.Y er J.-M. B ouv ai s r, op. c i t., pp.8-9. P hi i i ppe s c huw er ti enen raz ón, s i n c l uda,al i mputar l a
en POL, etc. Queda que, de modo general,la concentraciónse acompañade
famosa "cri sis " c l e l a edi c i ón a l a i mportac .i ón brutal , des dc 1970, de l as téc ni c as dc
una reducción del número y de la autonomía literaria de los lugares de deci- "Racionalización", ralescoino el conrrol dela gcsrión, con sus cucntas de cxploración previsionales
sión y que ella tiende a enrr€gar a responsablesfinancieros -Poco dispuestos (CEP), la inlormación de los costosde gestión, etc. Il Schuwer, "Nouvclles pratiques et stratigics
a favorecer las inversiones a largo plazo áe una política literaria de vanguar- édi tori al cs",cn : i l Fouc hé, op. c i r., pp' ' i 25' 4i 9.

dia-, la gestión financiera de las obras de largo ciclo tanro como las obras de 47. Un tes¡imonio visible de estoscambic¡slo proporcionan las transformacit-¡ncsdc la estructura
el triunfo misma del espacio de [a Fe¡ia dc F¡ankfurr, que olrece lr , emplazamientos más vasros y nri:
cicio corto. favoreciendo,así,como lo obsen'aJean-Mairie13otlvaist,aa
v que relcgaen los márgencs a rcde la
centralesa ¿le mania y sobre todo a los paísesanglosa.iones,
progresivo cle los productos de débil tenor literarro y de arnplia difusión, (!. s ori r, "Franc k fo¡t: l a foi ¡e
orra l i rerarura , y ' , s obre rodo, l as de l os pequeños país es(v c r
suertede uniuersalcomercialque se opone diametralmente,tanto Por su génesis d'cnrpoigne", en: Liber, 34, 1998, pp. 2-3).como lo observa un pcqucno cditor francés,
"e:sto

social como por su calidad literaria, al uniuersalliterario que se engendra, a lo devi ene cad.a v ezmás , c omerc i al (...). S i enl preponen i nmc ns asl otos que antc seran de l os grandes
i ntc ¡nac i onal c E
largo del tiempo, en los intercambios internacionales' ahc,r",por ej c mpl o, s ei ánl asc l el os mi ¡l i s troso de l os grandc sbc s r-s c l l ers
escri tores,
más caros (...). E n l os c omi enz os , s e es tabac n l a c ferv es c enc i ade fi l a.sentc ras de pc quc ñas
editorialcsde edición más politizadas...Esto ha dcsaparecidocomplctanrente y ha sido reemplaz-ado
, anas c omo es as ,hay fi l as enteras ".Y orro: "c uando
por edi tori al e sde es pi ri rual i dad,s ec ¡as ful
p r o d u ctio n d e la cr o ya n cc: conrri buti on i unc éconorni e dcs bi cns
43 . P i e f - i e B o u r d i c u , "[: más
t)77 uno va al Salón dct libro de lJarcelonac de M:¡drid, es tristc Cu¿nto más es¡ánconcentradas,
symboliques", Actes ¿lela rechercheett scienrc.tsoci¿1¿s'I 3, fcbe ro de I 43
' PP' 'l- son burdas, más v ac ían l a l i teratura".
I pp. 8-9'
44.l.-M. Bouvaist,Crise$ mutation de l'éditionfnnqaise,París,trlinistire de la Culturc, 993 '

)55
solarnen¡rel l3t)/ode la cifra de negocios,y que riene colno filialesa Fayarcr, La di rector a de una pc ir cña edit or ial de vanguar dia,f undada en 1987,
Lattés,Srock, Harlequin, erc., es dipiomado de la escuciasuperior de elecrri- estima que "hacer literaruraextranjeraes escaPara la mar de peligros en la
cidad; Pierref)auzier, PDG del Groupe de la Cité, es diplc'madode la Essec; pequeñaedición". Cuidadosa"de no seguirdernasiadola moda anglosajoni',
Se rg eE y r olles , P DG d e E y ro l l e s ,d i re c ro r d e l as E di ri ons d' Organi sati on, eila ha invertido en una seriede jóvenesautorescatalanes,así como en escri-
p re si dent edel S y nd i c a t n a ri o n a l d e l a é d i ri o n , es di pl omado de l a É col e tores austriacos(como E,lfriedeJelinek),irlandesesy escoceses -como sí, más
spécialedes travaux publics ¡ despuésde numerosasesranciasen los Esrados allá de las razo¡resde costo, hubiera una afinidad entre el pequeño editor
unidos, es completamenteadicro al modelo americano;Jean-Marie Messie¡ subversivoy ios escritoresoriginarios de minorías lingüísticas-. Muy cons-
presidentede la Compagnie Général <lesEaux, que poseeel 30o/ode Havas e ciente de que sus eieccionesmás osadasle son impuestasPor su posición,
impone una estrategiaaudiovisual y rnrrlrimedia,es politécnico. observa que si esrá obligada a tomar mtiy P¡onto los libros que ansía, es
porque "si ya tiene éxito, el libro es ya muy caro Para [ella]". Pero observa
también que ha podido tener autores de calidad, corno Elfriede Jelinek, por-
De las funciones antagonistas de la traducción que ellos habían sido. rechazaciospor todo París. Una de sus vecinas en el
.rp".io editoriai habla casi el mismo lenguaje:"Estoy obiigada a ser astuta:
La política, en mareria de Iireraruraextranjera,ofrece,sin duda, una ima- intento identificar autores en el momento en que emergen en el país cuya
gen ampliada de lo que se observa en 1"., de publicación de los iengua practico bien. Porque de otro modo.'. no me voy a meter con los
"srr"regias
escritoresnacionales.En efecto, ia oposición es muy marcada enrre los pe- americanos. (...). L" regla impuesta: estásobligado a ver las cosasque están
queños edirores-qrre, en su rnayoría,actúan como descubridoresque invier- naciendo, porque uno no puede comprar autoresmuy conocidos".Es lo que
ten su competencia culturai y lingtiísrica en la búsquedade oblas de van- hace que los pequeñoseditores sirvan de rémora a editores más afortunados y
guardia escritasen las lenguasrarasde pequeios países-,y los grandesedito, que estánsiempreamenazados de "perder"susdescubrimientos(como Maurice
res comerciales-que, piloreados por scoutso agentesai {cecho de todas las Nadeauauy hoy JacquelineChambon).
informaciones úriles (comercialmente),publican los best,sellersinternacio- El rechazo a rratar la traducción iomo una simple inversión comerciai
nales,la mayoría de las vecesanglosajones, que han comprado cosrosamenre, ocasionael rechazode las estrategiascomercialesen uso entre los grandes
e n u n a s obr epujade p a g o p a rc i a l a n ti c i p a d o , p or su rcpuraci ón come.rci ai editores.En Corti, por ejempio, se considerael recursoaun tcout como una
(atestiguadapor la cifra de venta obtenidas)más que por su contenido-. La forma de comprometimiento: "Eso nb nos conciernedel todo' (".). Me pare-
literaturaextranjeraque, para unos,esuno de los objetosde inversióneconómi- ce que los mejor ubicados para saberquiénes son ios buenos escriroresque
ca más fructífera,es así,para los otros, y rambién,por razoneseconómicas,una suscitanel deseode uaducir, son los traductores.(...) Uno recurrea las agen-
de lasarmasmássegurasde la resistencia
literariaconrrala invasiónde la literacu- cias en general por las cuestionesde derechos,Pero no mucho". La iniciativa
ra co rner c ial,
pr inc ipa l m e n re
anglosajona. de la elección recaea menudo en el rraductor. Sin embargo, es frecuente que
En el polo lit c r a ri o , s e i mp o rra n re x ro sd e a u r orestod.rvi apoco conoci - el editor mismo mantenga una verdadera complicidad, fundada en la fami-
d o s, a bajos der ec ho s o, ri g i n a ri o sd c p c q u c ñ o sp a í scsl i rerari ^.n" n,.domi na- liaridad, con las obrasy los autoresde una lenguay una tradición nacionales,
dos (o de la Jiacción de /a producción anglosajonamás dirigida hacia la inuesti- caraianespara JacquelineChambon, brasileñospara Anne-Marie Métailié,
gación)y que permiten hacerseun fondo con poco capital económrco:como húngaros para ibolya Virag o extremo-orientaiespara Picquier.
"los cosrosson muv inferioresa los que habría des-
lo señalaun observad'-,r, Es necesariocirar aQuí a JacquelineChambon, que expresabien el com-
e n ca denadola c ons ri ru c i ó nd e u n c a tá l o g oc a s i e qui val enreen notori cdad promiso personalde ciertos editores,más próximos, en su trabajo, al crítico
so b re aur or es f r anc e s e s "y; e l l o c o n ri e s g o sm e n o s grandes(a pesar de l as
i
incertidumbres ligaciasa los desfasajes
enrre las rradicionesnacionales),por
el hecho de que, cuandc un libro enrra en negociaciónpara la traducción,es 1rB.Ver M. Nadeau, Grácesleur saient rendtrc.;.Mémoires lixéraires, París,Albin Michel' i990'

po¡que ya ha conocid<¡cierto éxiro en su país. el c apítul o dedi c ado a J ohn H aw k c s , pp' 438-442.
especi al mente

¡
:
! 257
;
PierreBourdieu LIna reuolució¡t ctntseruadora en Ia ediciótt

"descubridor'que al director comercial: "Me he dado cuenta que había una E,n o¡ros términos, mientras más se acercana este polo, tnás las editoriales
literatura muy interesante(...), una literatura catalanaAntónoma,de lengua producen rraduccioneslucrativasre.urriendo a los procedimientosde selec-
cataiana,en Cataluña. Especialmentecon gente corrro Pla, que ha escriroun ción y de compra de la especuiacióninternacional,int¡oiucidos masivamen-
gran libro que es un poco como su diario, que es una obra mar-tra, que es te por los scoutso los literary ageittsamericanos(lo que hace decir a una infor-
muy bueno... Qu. estafurTi'abal, en los años 1930, y que si había jóvenes mante que, inciuso en Francia,"los americanosson los maestros").Los gran-
autores,se explicabapor ello (...). H"y una suerte de humor catalánque es des edi tores or ient adoshacia la pr oducción de best - seller (sAlbin M ichel,
muy divertido. Y que no es del todo mecánicocomo el humor inglés.(..").Es por ejemplo, que, sólo para el año 1995, sobre un total de 35 aúroresy 36
gente que me gusta mucho, además,en la vida. No son del todo hombresde títuios traducidos,publica 8 best-seilerstípicos-dos de ellosde llary Higgins
ietras. Es una vieja tradición francesa:un escritor es un hombre de letras; Clark, reina indiscutida del género-, frecuentementellevadosal cine)atcon-
pertenecea un cenácuio,apunta más o menos a la Academiao por io rnenos tri buyen en una par t e m uy im por t ant e a la im por t ación de la lit er at ur a
a los premios. Es una personalidad.Pero no se consideracomo un artista. anglosajona(que representacerca áel 650/odel conjunto de las t¡aCucciones
Paraé1,ser escritores casi un oficio. Mientras que en paísescomo Alemania, publicadas por el con.funto de los editores estudiados,36,7o/opara el ameri-
un escriior es como un pintor, es un artista. Y ello, para los cataianes,es cano,26,50/opara el inglés). Ccmo lo explica un director de iite¡atura ex-
parecido. No son del todo hombres de letras. Pamiés, para ganarsela vida, tranj cra de u na gr an edit or ial com er cial,"los aut or esam er icanost ienen un
hace la crítica de fútbol en EI Pais. (...) Y" me siento de esemundo. No hay agente.Cada mañana recibe piias monstruosasde manuscritos,y si éstasno
eso que conciernea redes...Hacen teievisión,raciio.Por ejemplo, tenían una son cosasque él mismo ha comanditado o que van a imponersePoi miiagro
emisión muy graciosa!una suertede G'uignoisen la radio (...).Son personas, como 'extraordinarias',son inmediatamente rechazaclascomo ttnso/licited.
uno tiene el placer de verias;tienen una suertede inteligenciadel mundo". Quiero clecir con ello que para atravesarel estadio de ser aceptadopor un
Esta iarga cita, de la cual uno podría encon¡rar varios equivalentesentre agente,es necesarioya tener extrao¡dinariascualidades".llafuerzafinanciera
otros editores de la misma "familia" -y mmbién entre muchos iibreros-, está con la cual los pro/uctos son lanzados en el mercado es tal que ios agentes
ahí para dar una idea de esta manera muy particular y muy rrxpandidaen francesesse constituyen más de una vez en compradcrescontra su grado'
todos los "oficios del libro", del autor al corrector, de vivir las cosasde la En cuanto a los libros mismos, estánconstruidosalrededorde universales
literatura, suertede inversión total que contiene en sí misma su propia justifica- que dependen de una suertede menor común denominador existencial-sen-
ción y su propia recompensa,fi¡era de toda consideraciónutilitaria. YJacqueiine o a lx soap
rimental, el que proporciona también sus temas a las telenouel¿s
Chambon condensala oposición entre el mundo de la literatura y el universode operas:la mayaría de las veces escritaspor mujeres, tienen por blanco a un
los scouts,de los agentesy del dinerci, de los pagosparcialesanticipadosy de los público femenino y los resortesde su seduccióncomercialestánent€ramente

PreemPtiueffirs, en la simple evocación de lo que debería se¡ una exigencia contenidas en la faja aplicada sobre una novela de Jacquelyn Mitchard, Aussi
eiemental del oficio de editor, la lectura en primera persona:'A mí, los informes profond que I'océan,y publicada por Calmann-Lévy en I99B: en el anverso,
de lectura, eso me deja helada, porque, para ml, en un libro no es ei tema lo un blurb irresistible de Mary Higgins-Clark, orfebre en materia de besr-
que cuenta,sino la maneracomo es tra¡ado¡ por lo tanto, no llego a decidir- sellers inrernacionales: "Una historia soberbia que le desgarrael corazón, yo
me sobre un informe de lecturd'. la he adorado"; en el reverso, el argumento implacable del éxito comercial;
A la inversa, en el polo comercial, donde el traciuctor es frecuentemente " 3.500.000 iect or esen el m undo".
reducido al rol instrumental de simple adaptadorde un proCucto exrranjero
(se habla de "poncr en traducción'...), la traducción es, ante todo, una inver-
sión financiera que apunta todavía más, abiertamenteo no, a la producción
de best-sellers,es decir, según la direcrora de una colección de lirerarura "Grandes
¡ en la colección
Albin Michel publicatambiénclásicos
49. Alladc:de estosbesr-sellers,
extranjera en una gran editorial, la "literatura extranjera más 'alimenraria', 'liaductions",mode¡nos"autónomos",como, a granel,JaneUrquhart, canadiensc lanzadopor

lasgrandesnovelasfemeninas,las novelasde evasión",sobretodo, anglosajonas. Nadeau,É,liasCanetti,Vicror Erofecv,Mia Cc¡uto,John Mc Galrern.

l<o
son siempre rnásclevados,la concurrencia
165 ds¡Eq-hos rrpre más des-
habla inglés" (como dice este mismo director lite¡ario), donde uno se reco-
enfrenadapara las buenascolocacionessupuestas)y el personalespecializado
noce mutuamente y donde se rinden servicioscon la frasecasimágica:"¡Hola!
es más indispensable (uno o varios responsablesde cesic'¡ny de venta de
X, tengo allá un libro y que es absolutamente un libro para ti". LJno se
derechos,tcoutt en varios países,etc.). En las entrevistas,el acento está puesto
remite siste¡náticamentea esasredes de informan¡es confiables (agenteslite-
más en ia venta de los r€xios que en los problemas de traducción o en la
rarios,scouts,editoresextranleros)', a veces,rrrductores),lo que permire re-
evenrua.ldemanda dsl ¡nercadof¡ancés.Aunquc un dirccto¡ literario pueda
ducir los riesgos.P<,,rla "concurre¡rcia espantosaentre ios editores [naciona-
intentar jrrstificarsus eleccion€sforzadaspor' la preocupación'democrárica"
les] por tener primero los tnanuscritos", que evoca una responsablede la
de responder a las expectativassupuestasdel público francés: "mienrras quc
el pequeñoediror (...) no publicarásino lo que le agrada,de una cierta mane- literatu¡a anglosajona,"la precocidad de la información es completamente

ra , a é1, s in pr eoc up a rs ep o r l o q u e l o s o tro s b u scarano desearan,puede determinante", como dice un responsablede orra grfn editorial comercial.
La búsqueda de la información bruta, que tiene poco que ver con el conteni-
ocurrir que me decida a publicar un libro, incluso si yo no estov de acuerdo
con ese libro, en el fondo, en el plano literario, etc., cualquier cosa que, do (¡ sobre todo, con la forma) de las obras referidas-y ello aún cuando se
trata de un autor consagrado-,se relacionamás con una suerte,deespionaje
inclr:so,'no es rni tazade té'. Pero yo digo:'Esta no es mi taza de ré', pero yo
industrial, incluso enrre los importadores "ilustrados" de productos supues-
sé que es la taza de té de Fulano, Mengano, Zutano, en la prensa por ejem-
tamente chicsy modernos, que con una prospección literaria de descubridor:
plo, o en el público. Por lo tanto, pienso que un editor generalisradebe ser
"Todo es establecerlazos tales con los agentesy los editores americanos que
capaz(...) de tener un eclecticismosuficie-ntecomo para superar sr-rspropios
usted esté segr¡ro de tener una información muy en la fase inicial". Para
gustos,sus propiaselecciones.Porquesi us¡edquiere, hay dos tipos de ediro-
res: está el editor milimnte, es deci¡ que defiende una cierra idea de la litera- tomar ciertos mercados, uno hace incluso una Preemtiueoffer, "de modo de

tu ra -¡ B ueno! E s un p o c o m i c a s o , b i e n e n re n di do, porque uno si en.pre que no haya puja" y es cada vez menos raro que los contratos más fructíf?ros
tiene muchas cosasque defender-, pero está también el editor generaiisra estén firmadcs incluso antes de la publicación -por 1o tanto de la leccura-,
del ori gi nal".
que no sueña únicamente con agradarsea sí mismo, sino inrenra agradara
o tro s t am bién" . PierreBelfond ha contado en susmemorias5o cómo ha comprado, en 1988,

Ocurre que aquellasrnismas que repiten que la editorial imporra esencial- los derechos de publicación de Gone taith the Wind 2, continuación de la
obra que él califlca como "best-sellermítico", Aata* en ernPortele uent. La
mente rextos (anglóionos) ya seleccionadospor uno o varios editores exrranje-
ros, hablan de sus compras en el lenguajedei "descub¡imiento",de la "pasión" venra por subastase ha efectuado 'h ciegas",es decir, en la ausenciatotal no

o de la "innovación"."Nos esforzamostambién por descubrirnuevos talentos sólo del texto e incluso de extracros,sino -más todavía- de sinopsis, o inclu-

paia alimentar esta colección (la colección 'SpécialSuspense'de Albin Michel) so de tí¡ulo, ya que "ni una página estabaescrita" fel agente literario sola-
que es una colección que FrancisEsménard(el actual PDG) había creado hace menre podía precisar que "a) la noveia sería publicada en los Estados Unidos
veinte años, ianzando el prirner Mary Higgins Clark, que había sido un suceso por \y'arner Books; b) el escritor encargado de redacar esta continuación se
muy gratrde,y sobretodo innovando,luego reromando,esejuego de manosde llamaba Alexandra Ripley; c) la remisién dei manuscrito definitivo estaba

tene¡ la cubiena ilustada bajc la sobrecubierta blanca,que es lo contrario de prevista para fines de l989]". Luego de haber propuesto 200.000 dólares,
l o q u e s e hac e habi ru a l m e n re " . L o m i s m o p a ra l a col ecci ón " Grandes después650.000 (mientras que, según sus propias palabras,"ningún ediror
Tiaductions",publicadapor la misma edi¡orial:el resp,nsableinrerrogadohabla había comprometido jamás tal surna para adquirir los derechos de una tra-

del "descubrimiento de nuevos ralenrosen los diferentespaíses,etc.". Orro ducción"), toma la subastaa un millón y un dólar. Y Pierre Belfond: "Yo
ejemplo, un director literariode Plon ve en la Feriade f,onlcfurt una ocasióirde contemplabaestoscálcuioscon pavor. ¿Y si el libro era malo? Por más que,
i'racer"descubrimientos"encontrandolos cofrades"que rienen una pasión".
Los responsablesde literatura extranjerade las grandesedito¡ialesde los
diferentespaísesforman redesde inre¡conocimientodonde "todo el mundo
10. PierreBelfond,LesPendusde VictorHugo. Sclntsd¿L¿uied'un éditerr,Pa¡fs,Fayard,1994,,p.19.

2(,0
LOI
,tierre Bourdieu IJtta ret'oluciótt conseruadora en la erliciótt

para tranquilizarme, me repería que la plana mayor de Warner Books rodea- promover los libros de jóvenesescritorespublicadospor las pequeñasedito-
ba a Alexandra Ripley de una bandada de consejerosliterarios unos más riales,críticos para descubrir v defender a unos y otros, todas o casi todas
genialesque otros; que, mientras ia novela no estuvieraa punro, seríapuiida, mujeres,el trabajo sin contraparrida económica,realizado Por amor al arte"
,.para
lima,da,vuelta a comenzar: estasconsideracionesno reemplazabanun ma- y el amor del arre", qued:rá una inuersiónfeal^m, segurade recibir un
nuscritodel cual n, ,.r*"ir.nos conocimientosino en dieciochomeses". míni mo de reconoci¡ nient om at er ial y sim bólico.
Interrogado sobre la especificidadde su colección, "Feux croisés",con Es claro que el bastión central de la resistenciaa las fuerzasdel mercado
relaciéna "Du mor"'-- enrier" en Gallimard o a la "Biblioréque cosmopolite" esrá consti tui do, hol', por esos pequeñosedi¡ or es,que, enr aizadosen uua
en Stock, el responsablede Plon iesponde: "¡Ohl creo que hacemoscasi 1o e er ar io y polí t ico
tradi ci ón nacional de vanguar dism o insepar abiem er , t lit
mismo". Y el direcror literario de Albin Michel confirma esrepunro de visra (mani fi estotam bién en el dcr ninio del cine) , se const it uyenen los deien-
intercambiable:"¡BahlSi ustedme dice: 'Du monde eniier', sí, o la producción soresde los autores ,v de ias litera¡',¡rasde investigaciénde todos los países
extranjerade Le Seuil, etc., quiero decir que no hay una muy gran diferencia de pol íti ca y/o l i t er ar iam enle dor ninados - ello, par adójicam ent e,sin poder
naturaleza,si usted quiere". prácticamenteconta¡ con la a1'udadel Estado, que va a las empresasedito-
,i"1., *á, antiguas y, más docadasde capital económico y simbólico-. sin
duda, se puede ver en esreinternaeionalismoprríctica,completamenteoPuesto
La moral de la historia al ci erre arrogant ede las nacionesasegur adas Por la dom inación com er cial
es com pr an nada. excepr ola pr oducción am er icana,En cuan-
(" I-os" i r-rgl esno
Lo que ha sido esrabiecidoaquí, al precio de un enorme rrabajo de reco- to a l os ameri canos,ellos se int er esanpor ellos,es t odo", dice una dir ect or a
ieccióny de análisis,podrá, segúnuna reróricam*y conocida,ser descalifica- l i rerari ade una gr an edit or iai) , ia super vivenciade una r r adición de im pe-
da a la vez, como falso y como trivial. X .n rodo caso, no se podría esperar ri al i smo de l o univer sal. 5rPer o, conr r a aqueilosque, en est edom inio co¡ no
:que pueda por sísolo
disipar la nube de discursointelecto-mediáricosobre el en orra parre, qur€ren enceirar el debate en la alternativa de la resignación
"retorno al relato" o a la "figuración", sobre la "crisis de la novela francesd' o a l as necesi d acies de la econom í a abandonada a su pr opia ley - la de la
sobre "el fin de la vanguardia" que impide al mundo literario mirarse cara a búsqtredadel máximo beneficio a corro plazo-, o de un cierre regresivoen
cara, sin complacencias.Y, sin embargo, podría ser que la sociología,a la que la defensade tradiciones nacionales sostenidasPor arcaicos,s€ Puede afir-
ios fariseos del culto Cel arte hacen profesión de detestar o de desconfia¡ mar, sin demasiadosescrúpulos égjcos e inquietudes políticas, que defen-
porque destruye las representacionesilusorias, sea la mejor aliada de todos der la tradición f¡ancesa no es, erL.estecaso' ceder al nacionalismo, sino
los que quieren defender los logros más raros de la autonomía de los campos defenderlas conquistas,intrínsecamenteinternacionalese internacionalistas'
li te ra ri o y ar t í s t ic o co n rra l a s u b o rd i n a c i ó n d e l a producci ón y de l a de toda la historia acumulativa de la literatura.
comercializaciónde los libros a fines esrrictamentecomerciales. Apvestapolhica La declaraciónexplícita de.cosasque todo el mundo sosPechay que nadie
y literaria capital para todos los que viven de la literatura (¡ sobre rodo, de sabeverdaderamente¿podría romPer las complicidadesy las complacencias
aquellosque viven "para'la lireratura)y rambién para todos los orros, que de- de buena sociedado ias perezasy ios confirrmismosde la mundanidad o de la
penden de ellos y de la integridad de suselecciones,para accedera ia literarura. mcda, que llevan a los críricos esrablecidoso, incluso, en vías de establecerse,
El proceso de concenrración que afectaal mundo de la edición y ciue . sonletersea ias demandaso a los encargosde los ediioresy a no reconocer
transforma profundamente las prácticas,subo¡dinándolascada vez más es- sino una literarura preformada s€gún s-rscategoríasde conoci¡niento?¿Podrá
trecharnentea las normas comerciaies,¿esirreversiblee irresisrible?¿La resis- ella hacer rnásdifícileslos golpesde bluffiiterario-mercantilesque se autorizan
tcncia al do¡ninio del cornerciosobre el co¡nerciodel arte no es sino el corn-
bate desesperadode una fo¡ma de a¡caísmo nacionalisra?De hecho, mienrras
haya representantes para sostenera los pequeñoseditores,pequeñoseditores "Deuximpérialismes
Bourdieu,
51.Picrre ", en:c. FauréyT'Bishop[bajola dir'
deI'universel
p a ra p u b lic ar a jóv ene s a u to re s d e s c o n o c i d o s ,Ii breros para proponer y del,LAntériqut París,
desfanSais, Bourin,1992,pp' 149'155'
Franqois
Favard,
*'E

a vcccs desde un populismo demagógico para justificar la búsqueda del éxito


comercial? Se puede esperar, al menos, que alentará, a todos aquellos que Anexo
crecn todavía en la posibilidad y en la necesidadde defender la liberad del
arte -con relación al dinero-, a levantar acta de sus solidaridadesy a afirmar-
las conscientementepara organizarmejor la resistencia.

Grupos editoriales y filiales comprendidas

'+i Grupo de la cité (cEP Publicaciones, devenido Havas Public".ióo en tr998)

Han sido cornprendidas:


*Nouvelles É,ditionr Robert Laffont (Fixot-Seghers-Julliard-Berlic). Esta

unidad ha siáo *atada por una parrd, en el nivel de la filial en su conjunto


(cifra de negocios,personal, difusión interforurn), y por otra Parte, eo el nivel
de dos sub-unidades aisladás con fuerte autonomía, la marca La{font y el
departamento ]ulliard (cuyo capital pertenece a Plon, él mismo filial del
(la
Groupe de la Cité), tratadas como unidades editoriales indepen-dientes
Fi*o, absorbida por Laffont en 1993, sin capital propio, ha sido rata-
-"r."
da como elemento suplementario)-
* P l on.
*Les Presses-solar-Belfond,de las cuales Belfond y Les Presseshan sido

aisladasy tratadascomo elementossuplementarios.Es'asfiliales tiéné-nuna real


independenciaeditorial salvoen lo que concierne al administradoi, la difusión y
.r, r'*" cierta medida la cesión de los derechos'
No se han incluido Berli¿ (lenguas extranjeras' rrétodos de aprendizaje lin-
güístico); Seghers,simple departamentode Robert l-affont, para el cual casi no se
Jr,.,r..r,r* datos indiüdu¿les; Librairie académiquePerrin que no hace literatura,

264 265
t*
-84.
Píerre Bcurdiett A¡texo

filosofía, psicología,
sino esencialmenteensayosy documenrosde juventud; Olivier Orban, verdadero No se han considerado:Aubier (literaturasclásicas,
Le Pére Castor y
anexode Plon; Solar,que no hacelireraturasino libros arrísticosy prácticos;Nathan, cienciashumanas),Arthaud (libros artísticosy prácticos)'
Bordas,I arousse,Dalloz, Dunod )' Masson (que no tienen literatura). y pedagógicos) '
D el grave(l i bros escolar es

Grupo Hachette-Matra ' Grupo Albin-ivlichel i:


Han sido comprendidas las filiales siguientes,verdaderaspyME con fuer- Se ha considerado:Albin Michel :
te independenciaedirorial: BD o É'ducation'ni
No se han consideradolos departamentosJeunesse' il
*Fayard (que ha y uni-
t ( libr os par a- cscolar es I
reromado los fondos l\4azarine,pauverr y Sarment). Magnard (i i bros escolar es y ir r veniles)Vuiber
.
*Grassery Fasquelle.
.r"r.ft"rior), Le Grand l"ivre du mois 1' Canal Plus Éditiont'
* L a rrés .
*Calman-Léwy.
Grupo I-e Seuil
*Srock. aunque comprada por
Han sido comprendic{asLe Seuii y LOlivier que'
editorial'
Le Seuil en 1995, ha conservadouna gran autonomía
El capital de cada una de es¡asfiliales perreneceen su casi toralidad a C onsudepar t am ent odedif usión, LeSeuilr eúnevar iosedit or escuyas
Hachetre-Livre. rel aci onesde depenclenciason m uy var iables'yendo de la sim ple dif usión
(no mayoritarias)en el capital'
comercial a las tomas de participación
*Falois filial, con
33o/od,eHacherre-Lñre.
*Harlequin (como se han considerado:
elemento suplementario). E,ntrelos eclitoresdifundidos por Le Seuil'
Han sido descartadas: A urremenr, Nil, cor r i, vivianeHam y, lr 4ét ailié( par t icipacióndeLeseuil
*Librairie Phébus (participación)'
généralefrangaise(Librairie des champs Élysées,Le Masque, en el capital), LOlivür (absorcióna fines de 1995)'
Le Livre de Poche). R i vages,B ourg ois, M inuit '
* H a cher r e
Réf ér en c e (q u e i n c l u y e L e c h é n e y pl Lrri el ), Le S arment,
Ha ch e tte P r at iques , H a c h e tte J e u n e s s e ,M a ra b o u t , Gérard de vi l l i ers v Se han descartado:
(que no han publicado lireratura
Utff;:J; tlir,u."r.rr., Ariéa, Odile Jacob, Milan, Adam. Biró
(creado despuésde la fecha de la encuest tgg|). en I 995- 1996) .
^, "n

Grupo Gallirnard
Han sido comprendidas:Gallimard, Denoél, Mercure de France.
No se han considerado: Gallimard-Electa (libros de arte, simple departa-
mento), Gallimard Jeunessey Folio (reediciones,simple departamento),"Le
Promeneur", "LArpenteur", sirnplescolecciones.

Grupo Flammarion
Ha n sido c om pr end i d a s :F l a mma ri o n y J ' a i l u (como el emento supl e-
mentario), fiiial con 35o/o del grupo, que publica ediciones de bolsillo y
también edicionesoriginalesque rlo prcvienen de otros fondos (por ejemplo,
c n L i b ri o y en J ' ai lu) .
Postfacio

textos-<nn temas'ten. '


. f, ra necesario reagruPar así, para.la publitación'
y.r, t",' al¡iadosd;h a;';afided11étlt ha inspi-
¿ -F-, dispares, "i"ri.r,.i" por lo
rado?De hecho,.r.olq.,. estaspalabras' inclusolasmfu polémicas'
no son jamás completa'
ranto.las más ligadas ü .fi"tt'o de una actualitled'
& " romPer con las prenoibnc
mente separaUt"-,¿. un trabaio cie"dfico que' Pall
gropiosi*:T:311:.--.
de la visióndominante,debeconstruirsr-rs
,-Ot.¡"t.i.t
v PrL,s¡v¡vu
qu€ n(I se puede
me Pflece
de an,ílisisde la realidadsocial.Y, por otra Pafte,
l"s de la po1émi'?ú ,.
quebrar el encanto de la creenciasino poniendo "rmas *' - '
de la razón-eientfEa'
serviciode las verdadesconquTstad*po, la polémica
P uesbi e n, est iem podedesar r ollar nueYasf or qr asdecom bat epaf a. ct r n. - '
de la opresión simbólica que se
rrarresrarcon medios adecuadosIa violencia
u."s
occidentales:
ha instaladopoco a pocoen lasdemocracias ".TlttLawzá*
u s4 e 4 ss
críticay' t" lot'gt4
po, ."a" un *lu rob,el" Prensa ¡"ttólf1TT1 =-=
l^a vida polídca' como la vida in-
oficiales, sobre el p..rr"*itt'to subversivo'
, I' --ez l as ssomeddas
ul rrs l ¡ual a --- los
la inflüencia de medios de co'
tel ectual , es tan c aoa v ez flmás ' " ""' "--* - . r r -
y ellos mismos cada vez más someiidos a lx presiones de lo's --
municación
4!!.!-'::;
anunciantei. Lá internacional neoconservadora-,gue-dene'rcomo.centro
expresiónlibre y repü' .-'
EstadosUnidos, presionasobretodos los espacios,de
de lassub-
de vangua'Ji"to""nl""do J otorgamiento
me lasinvestigaciones
insignificantes denuncian '
,r.rr.iorr.. p,iúi."r. Críticas mediocres y escritóres
y apelan de Ia
el arte contemporáneo como Puro engaño " ":1-:t:"":iliación cilncia¡
novela con las fcrmas narrari;as más tradicionales.
Sin-hablar
{f ,'' '

269
PierreBourdíet-

sociales,sobre las cuales pesa constantementela sospecha.Las corrientes


individualistasy ultra-subjetivistasque dominen la econc.nía y que se es-
fuerzan''porconquistar el conjunto del campo de las cienciassociales,tien-
den a socavarlos fundamentos mismos de estascienciasy han convertido a
las matemáticasen instrumento principal de legitimación del orden estable-
cido. Estamos en una épocade restauración. Otrostítulo, ,1" lo io,i"o¡¿,
Es en la esferainteiectual donde los intelectualesdeben llevar el combate,
no solamenceporque es sobre este terreno donde sus armas son más eficaces,
sino también porque, la mayoría de las veces,es en nombre de una auto¡idad
intelectual -en particular la de la ciencia- como las nuevastecnocraciasllegan a Trinchéro, Hugo
imponerse. Así, por ejemplo, la nueva demagogiapolítica se apoya en los son- Antropología Econémica.
.!

deospara legitimar la puestaen prácticade laspolíticasneo-liberales,lasmedidas Ficcionesy Producciones


represivastomadas en contra de los extranjeroso las políticas culturales hos- clel hombre económico
tiles a la vanguardia. Esta es la razón por la cual los intelectualesdeben
dotarse de medios de expresiónautónomos, independientesde los requeri- Neufeld, M. Rosa
mienros públicos o privados, y organizarsecolectivamentepara poner sus Tisthed, JensAriel (comPs.)
propias armas al servicio de los combates progresistas.
ooDeesono se habla...n'
Los usosde la diversidad
PierreBourdieu socioculturalen la escuela
6 de octubrede 1999
Oliven, Ruben George
Nación y Modernidad.
La reinvención de la identidar
gaúcha én el Brasil -

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