UN DIOS ATENTO DE SUS HIJOS

Tipo de sermón: Expositivo, Marcos 1: 16-20

Tema (asunto): Dios está al tanto de nosotros
Propósito general: Evangelístico
Propósito especifico: La finalidad es que recuerdes que hay un Dios que no se olvida de
nosotros, está atento, nos observa, nos ama. 
Introducción:
En la historia que está basado el tema de hoy surgió allá lejos por el mar de Galilea, esa
zona comúnmente era zona pesquera, casi nadie era gente judía, de hecho eran
menospreciados los de Galilea por los judíos, ya que como no había gente judía habitando
por ahí, eran distinguidos por una mezcla de lenguas que había, esta gente era muy
trabajadora y siempre había movimiento ya que la pesca es un trabajo agotador y de mucho
esfuerzo y era donde la gente se sustentaba de manera económica y era su alimento diario,
en esos lugares llegó Cristo, un lugar no muy querido pero de ahí saco a sus discípulos, y
así mismo en el día de hoy Dios quiere elegirte a ti como su hijo amado
En esta sintonía quiero presentarte tres acciones que Dios por medio de Jesús realiza en
preocupación de sus hijos.
Y como primera acción tenemos la siguiente
I. Jesús nos está observando (1.16)
“Lo que el hombre busca” Jesús no fue a la sinagoga a buscar a los más letrados, los más
capaces, tampoco busca al más guapo, al que tenga mucho dinero, tampoco busca a los que
tengas modales, que tengan una buena educación ya que esto es lo que el mundo enseña, la
apariencia, los logros, las riquezas y si no tienes nada, prácticamente no eres nadie y no
podrás nunca ser nadie.
“Lo que Jesús realmente busca” Jesús pone su mirada en gente ocupada: que este echando
redes, que esté trabajando y esté dispuesta a trabajar para él, que esté dispuesto al servicio y
que se deje guiar.
Jesús está pendiente de tus ocupaciones, él preocupa de uno, no quiere que sus hijos sufran,
que estén pasando por adversidades
Y vio dos barcas (Luc 5.2) Mateo y Marcos: Jesús va caminando, Lucas: y de pie junto al
mar. Mateo y Marcos: y ve a dos hombres echando la red, Lucas: lavaban sus redes. Era
una zona pesquera y que solamente vio dos barcos, así mismo Cristo te está viendo y te dice
que lo sigas.
Ahora avanzaremos a la siguiente acción que Jesus igual hace
II. Jesús nos prepara para un propósito (1.17)
 Andrés y Pedro (hermanos) ya habían escuchado la predicación de Juan… y es por ello que
cuando escucharon el llamado de Jesús no lo pensaron dos veces, y siguieron a Jesús

Jesús nos da una promesa, él nos promete algo mucho mejor, ser pescadores de hombres, la
verdad, esa decisión que tomaron Andrés y Pedro es algo de admirar, porque en ese tiempo
alguien que fuera un pescador y más aún, que tenga una barca propia, para ese tiempo
alguien quien tenía todo eso, era una persona con dinero, no eran pobres ellos, es como si
dijéramos que si en el día de hoy Jesús te dijera, hay amigo, tú que eres contador, maestro,
ganadero hasta incluso pastor, ¿estarías dispuesto a dejarlo todo? Pero claramente ellos
vieron que estar con Jesús era lo mejor que podían elegir y por ello Jesús los prepara y todo
eso llevo un proceso (Mr 1.17)
Una comunicación de Maestro-alumno y por esto debes entender que Jesús quiere tener una
relación personal contigo.
Y por tercer acción que pasaremos en analizar es
III. Jesús nos está llamando (1.20)
Venid en pos de mí (1.17)
Literalmente: (Δεῦτε ὀπίσω μου) ustedes vengan acá detrás de mí. ὀπίσω: hacia atrás,
detrás de, retroceder, proviene de ὄπισθεν (Mat 9:20) atrás, por detrás, por el reverso.
Implica, seguridad. Tal vez es tu último recurso, ven con seguridad que será sano.3.3 De
inmediato dejaron (1.18) Andrés y Pedro dejaron sus redes: la fuente de entrada económica,
Jacobo y Juan dejaron al papá y jornaleros: mejor posición económica. Para seguir tienes
que abandonar (lo que estorba).
Le siguieron (1.18b) Marcos dejó en claro que arrepentirse y creer en el evangelio (Mr.
1:15) es romper con la antigua forma de vida.
Seguir a Cristo = compromiso total. Deja de esconderte de Cristo, el no rechaza a nadie,
así que acércate sin miedo a Jesús, y para ir concluyendo
Conclusión:
Hemos recalcado que Dios, está preocupado por tu vida, te ve, te prepara y te llama. Está
deseoso de que aceptes su llamado, desea que vayas tras de él, que dejes lo que estorba y
que le sigas.
Llamado:
Ahora querido amigo te quisiera hacer una pregunta ¿quieres aceptar ese llamado que
Cristo te hace? ¿dejarías todo por Cristo?... déjame decirte a ti querido amigo, que aceptas
ese reto de dejarlo todo por Cristo, es la mejor decisión que has tomado… oremos